La El 14 de agosto de 2021 en las páginas de opinión del New York Times apareció un artículo de Ross Douthat titulado A guide to finding faith (una guía para encontrar fe) en el que argumentaba que “el progreso de la ciencia y de la modernidad han reforzado de importantes maneras las razones para considerar la idea de Dios”. Y explicaba: “el gran proyecto de la física moderna, por ejemplo, ha llevado a especular sobre el universo, en parte porque ha confirmado reiteradamente la extraña adecuación de nuestro universo a la vida humana. Y (…) ha hecho que la belleza matemática de las leyes físicas así como su aparente calibración para la aparición de la vida sean mucho más claras para nosotros de lo que lo eran para la gente hace 500 años”.
Por su parte, Stephen Meyer, pionero del movimiento del diseño inteligente, había declarado que “el avance más grande de la ciencia en las últimas cinco décadas ha sido caminar de manera fuerte en dirección al teísmo“
Pues bien, con esta misma tesis se publicó en Francia un libro titulado Dios La Ciencia Las Pruebas, firmado por Michel-Ives Bolloré y Olivier Bonnassies. Editado en 2022, un año después había vendido 200.000 ejemplares y había dado lugar a múltiples controversias y debates. Traducido al español desde hace meses ofrece sus más de 1.300 páginas a los lectores en esta lengua.
Su tesis, minuciosamente documentada, es que durante siglos la ciencia no contaba con la hipótesis Dios. No la necesitaba para sus conclusiones. Y sin embargo estamos ahora en el albor de una revolución –así dicen los autores– en que la biología, la física, las matemáticas conducen hacia Dios. Porque en la enorme complejidad del universo todo está ajustado de una manera tan exacta y tan precisa que no se puede comprender sin la existencia de un Dios creador.
Es a partir de 1900 cuando las diversas teorías toman esa dirección nueva: la termodinámica, la muerte térmica del Universo, la relatividad, la mecánica cuántica, el principio de indeterminación, el big bang, , el teorema de la incompletitud, la complejidad del mundo vivo, el ADN… son pruebas que conducen a Dios.
Los autores utilizan esa palabra –pruebas– pero hacen un análisis de sus diversos tipos. No se trata de demostraciones, como en el ámbito formal de las matemáticas, sino de experimentos, constataciones, teoremas que parecen convergir en esa necesidad de un Dios fuera del Universo, que tienen un valor más probatorio cuantas más son y más convincentes pero que dejan siempre un margen para la decisión personal.
Sin duda estas constataciones no han dado lugar a que todos los científicos hayan pasado al teísmo. Es así en muchos casos –por ejemplo, Francis Collins, director del proyecto del genoma humano– pero es cierto que el clima parece haber cambiado totalmente. Dios no es una hipótesis de la que se puede prescindir (así dijo Laplace a Napoleón) sino alguien en quien se puede creer razonable y hasta científicamente.
Continúo el diálogo con A. Ll. -y ahora también con el amigo Isidoro-, estimulado por vuestros comentarios de ayer, (26-9), que para mí son interesantes y sugerentes. Y lo hago tratando de resumir mucho y casi improvisando. Solo aludo a algunos conceptos expuestos.
1. Con Antonio suelo coincidir bastante -no siempre, pues los seres humanos somos diversos interiormente y además estamos modelados, en parte, por contextos sociales y culturales diferentes. Por eso aludo solo a algunas de tus observaciones, no con ánimo de corregir sino de compartir ideas. Entre todos nos complementamos y enriquecemos… La conquista, la aproximación a/de la verdad humana -y científica- requiere colaboración, requiere escucharnos y compartir y rectificar… Así, pues:
a) que por romper moldes o innovar nos llamen herejes… A Jesús de N. también lo llamaron hereje y disidente… Quien trate de innovar rompe esquemas…
b) ¿Cómo es Dios? La definición que más me convence es que Dios es Amor -que conlleva libertad y valores y como cierta debilidad-, pese a lo cual no deja de ser Misterio, pues nos trasciende.
c) ¿Ofender a Dios? Dios no es vulnerable. No somos capaces de ofenderlo. Lo que sí pienso es que Dios “siente” (siempre en mi opinión, inevitablemente antropomórfica) es el daño que nos hacemos unos a otros y a nosotros mismos cuando desbarramos… Cuando ofendemos o maltratamos no sabemos bien lo que hacemos…, al menos no lo sabemos a fondo. Cuando ofendemos nos hacemos daño a nosotros mismos. Y esto es lo que Dios “siente”.2. Con Isidoro a veces me resulta más difícil coincidir, pero solo a veces. (Como me imagino que a él le ocurre lo mismo conmigo y con otros.) Por mi parte, no valoro tanto a Freud -aún admitiendo genialidades en él-, ni a Jung y su “inconsciente colectivo”, que comparto, aunque haya matices en su interpretación. (Del inconsciente humano ya habló antes Leibniz.) Digo que comparto, porque es muy importante ahondar en ese inconsciente para conocernos mejor. Ese inconsciente nos convencerá de que necesitamos mucha poda para crecer bien… y dar mejor fruto. La espiritualidad evangélica comienza por ahí: conocerse para mejorar… (Recordemos la “metanoia” y la necesidad de “renacer”… para entender el Mensaje del Reino.) La bondad, la verdad-autenticidad, la solidaridad crean armonía que dan paso a una felicidad relativa -cierto bienestar- mientras aquí vivimos. Probablemente a veces me explico mal, pero mi concepto de espiritualidad es un concepto evangélico, no racionalista… Y al decir evangélico quiero decir muy humano y solidario. Ser más humanos es lo que más falta nos hace. (Ver las estructuras sociales y las guerras -las actuales- que tanta barbarie manifiestan. Crean barbarie por falta de humanización, por vivir dominados por mitos…, también religiosos.) Interesa más la práctica -la práctica-humana-humana que las ideas, aunque éstas siempre sean necesarias. El homo se halla todavía a medio madurar como persona, que es más que inteligencia tecnológica… o ideas brillantes…Y lo dejo así. Espero haberme explicado mejor esta vez, aunque necesite matices. Un abrazo
Me alegra mucho la expresión sincera de tantas opiniones complementarias!!! Es estupendo trabajar y pensar en red con tantas personas interesadas..!!!!
Ostras, Llaguno. No entiendo.Crees que Jesús de Nazaret es El Hijo de Dios o no? Hijo, de hijo, como Aquiles de Zeus, creo que era Zeus . No como algunos exegetas dicen que le llamaba hijo de Dios .
Resucitó o no resucitó? Me refiero a salir de entre los muertos en cuerpo glorioso o como se llame.Crees que nos redimió de eso que llaman pecado o no?
Para mí el cristianismo Es contestar afirmativamente a estas cuestiones. No cabe ambigüedad.
A lo mejor no sé qué es el cristianismo y por ello no entiendo nada … Es también posible.No sé Y te aseguro que eso que llaman herejías, o sea, me da igual. No voy por ahí. Pasé de pantalla hace decadasss.
Otro abrazo, Llaguno.
Recuerdo que el tema es La Ciencia y Dios.No se puede obviar otro tipo de Dios. Desde luego no lo obvío. Y creo que interesa a mucha gente. Más incluso que si a los profetas les habló dios o no directamente. Algo superado.
Un saludo, señor Barberá. Gracias por el artículo. Ha sido entretenido el diálogo. Me lo imagino a usted incómodo en su sillón pensando, ya están éstos, a lo suyo…
No sé qué es la energía. Ya lo pregunté una vez aquí hace un par de años. Si supiese qué es la Energía, uf, estaría cerca de muchas respuestas. Mira que mis críos, acostumbrados a preguntar de todo me lo pregunron mil veces. Pero qué es la energía? Pues ni idea. La capacidad de realizar un trabajo, dicen. Pero no lo entiendo. Y ya nos metíamos con clases de energía, mucho más fácil de entender. Algo parecido a lo que pasa con Dios. No sabemos qué es, pero clases, a montones. En cuanto a Hawking, no lo entiendo. Su historia del tiempo me defraudó más allá del infinito. Cierto que descubrió las radiaciones de los célebres agujeros negros. Estupendo. Pero no llego a entender lo que piensa. Y hay otros que escriben libros de ese tipo y sí entiendo lo que quieren decir. Ahora estoy detrás de entender por qué una particular se puede comportar como una onda. Ergo cada vez estoy más perdida.Y con esto acabo mi participación en este hilo, porque parece que estamos hablando del sexo de los ángeles.Que cada cual crea o piense como pueda. Pero, un consejo de maestra de escuela. No se fíen mucho de nadie en estos temas, salvo de ustedes mismos.
Escúchense . Me temo que no hay otra. Un saludo
Vale.Pero la masa existe. Al menos yo existo. No sé el origen. Leí todo lo que encontré hace unos años acerca de Gibbs. Incluso hace poco leí que había dicho que el nombre de su bosón le había arruinado la vida. Algo de eso sé, porque como me encanta Einstein y ya sabes la lucha que hay a día de hoy con la física teórica y este bosón estaba vaticinado por gibss hace cincuenta años, siguiendo a Einstein, pues me gustó.No. No existe el azar. Y vuelvo a mi físico preferido, dios no juega a los dados. Lo que existe es una teoría matemática del caos que dice que vale, pero cuando intervienen, no recuerdo cuántas variables, eso es impredecible. Por desconocimiento, claro. A ver si la inteligencia artificial… En cuanto al cero y el infinito, algo estudié de matemáticas. Efectivamente, son conceptos que, en fin, no hay quién los entienda, porque, yo que sé, a lo mejor ni existen…
Y el número uno también costó su trabajo definirlo. Una vez definido, no hay problema, se usa la palabra mágica : siguiente.
Me gusta la matemática, pero hasta cierto punto. Mi cabeza no pudo entender cuando algún profesor dijo que las paralelas se cortaban en el infinito. Y alguna cosa más. Pero creo que me estoy saliendo del tema. Entre otras cosas porque dentro de cincuenta años, muchas habrán quedado obsoletas, dependiendo de la línea teórica que predominante. Porque si algo cambia, gracias a Dios, son las conclusiones a las que se llega según los nuevos conocimientos. Y, ya digo, según muuuuuchas cosas.No sé cómo surgió el universo. Tampoco me importa. Pero sé que existe la masa y no veo la necesidad de que exista un dios creador. Que no digo que no exista. Digo que no veo la necesidad. Porque como desconozco el origen de todo, pues no sé qué sería o no necesario.Un saludo.Y prometo no salirme más del tema, pero a veces…es superior a mí.Sorry
Uso el responder, Gracias.
Perdonad que sea un aguafiestas, pero a mí, la cuestión de si existe el Dios creador del Universo, o este se ha autocreado, me parece una cuestión abstracta, pura logomaquia, sin ninguna utilidad personal para nadie.
Otro tema muy distinto, es el tema de la existencia del Dios teísta, un Dios que interaccionaría directamente con cada uno se los seres humanos.
Y luego un tercer tema derivado del anterior:
-¿Cómo interaccionaría con nosotros?
– ¿Con inspiraciones mentales o vocales?
– ¿Comunicándoles su mensaje solo a unas personas determinadas, (sus profetas y sacerdotes), para que estas, nos lo transmitan en su nombre?
– Y en este caso, ¿cómo se lo trasmitió a ellos, mentalmente, vocalmente o por apariciones divinas, o grabándolo por escrito en piedra?
Ese sí que es el tema importante y trascendental. Porque si creemos que sí interacciona con nosotros, y lo hace con inspiraciones mentales, estamos muy perdidos, porque ¿quién sabe el origen real de cada pensamiento que nos viene a la cabeza?.
¿Tenemos que creer a todos los que afirman muy seriamente que Dios les ha hablado?. Porque entonces los manicomios sería los sitios con mas profetas por metro cuadrado, del mundo.
Por eso toda la discusión sobre la mera existencia o no del Dios del Universo, sería tinta de calamar, y ya tenemos la cabeza lo bastante confusa, como para añadir más paletadas de confusión al tema.
Llamadme malpensado si queréis, ¿y si esta tinta de calamar la lanzan los que no quieren entrar en el verdadero tema importante, porque eso les afecta a su chiringuito ideológico?. Solo ahí lo dejo.
(Ya sabéis que esto, lo digo no desde el ateísmo materialista puro y duro, porque yo creo que el Universo nos habla a todos y cada uno, a través del software cognitivo y comportamental genético que dirige nuestras vidas, desde el Inconsciente colectivo.
Y en este sentido, si nos habla el Universo, se puede decir que nos habla “Dios”).
Sí Carmen.
Tu existes. Yo existo. Mi cuñada de Cuenca existe.
Pero no tenemos ni puñetera idea de lo que nos compone.
En otro comentario puse una cita de un físico argentino muy descriptiva y que va mucho más allá: “La realidad objetiva, a nivel microscópico, no existe. y estar hechos de algo que no existe es muy extraño” (José Edelstéin)
Lo cierto es que no son más que especulaciones, pero yo solo lo traigo a colación para desmistificar el alcance de la ciencia.
En cuanto al asunto de las paralelas, recuerda uno de los 2 teoremas fundamentales del dibujo en ingeniería, el de la recta astuta (El otro es el del punto gordo): “Dos rectas paralelas se cortan en un punto delgadito, siempre que una de ellas ea lo suficientemente astuta como para torcerse”
Un abrazo
He dudado algo en si participar con un comentario en torno al tema que nos ofrece Carlos, por ser bastante recurrente. Pero como se trata de algo tan fundamental que puede determinar el sentido de la vida, participo con esta reflexión-aportación de datos:
1. Comienzo con una cita de Hans Küng, que puede servir como introducción al tema: “Una obra tan inmensa, tan grandiosa e impresionante, como es el Universo, tiene que tener un sentido como corresponde a su magnitud. No puede definirse, limitarse o resolverse con un sentido superficial o ligero… Sería una contradicción”. Estas palabras de H. K. tienen su valor y a mí me parecen más razonables que algunas afirmaciones -en mi opinión demasiado radicales y sesgadas- de Monod o de Dawkins.
2. ¿Por qué el ser y no la nada? Ésta es otra gran pregunta. Me decanto por el SER en sus diversas formas de ser, conocidas y por conocer (el ser es más que materia…), y me decanto porque la Nada absoluta, lo que se dice NADA, la considero un ABSURDO. En mi opinión, no es posible la Nada. Y en el Ser -insisto- hay más que materia.
3. Hay un libro reciente de J. C. González Hurtado que va en la línea de algún autor citado en los comentarios, Se titula: “Nuevas evidencias científicas sobre la existencia de Dios”. No lo valoro, solo aporto el dato, y añado: Dios no ha muerto.
4. Por último una breve alusión a un estudio reciente sobre el pensamiento de Parménides. Según ese estudio no hay oposición entre Parménides y Heráclito. La esencia, que no cambia, que siempre es igual a sí misma, de Parménides, se centra en algo más concreto: la esencia que no cambia es el yo personal, no las ideas que van madurando -o caducando- con el tiempo. En esta perspectiva, Parménides y Heráclito estarían de acuerdo. De modo que el Parménides que nos ha transmitido la filosofía griega clásica dominante, más tradicional y fija, parece que está más cerca de Heráclito, más dinámico y realista…
Esta interpretación de Parménides nos acerca a Heidegger y a Vattimo.(Disculpas que no pueda concretar en este momento la fuente, no encuentro la nota que tomé.)
En suma, Dios no ha muerto, aunque nosotros, empezando por muchos creyentes acreditados como tales, nos empeñemos en enterrarlo, deformándolo, antropomorfizándolo o reduciéndolo a una variable que la inteligencia humana puede controlar. Esto es el hombre, pero Dios que, si existe como creo, tiene que ser trascendente… no lo sabe explicar bien nuestra inteligencia. Y lo trascendente, racional y científicamente, es posible.
Si Juan Antonio, es recurrente. Pero estarás conmigo en que es apasionante.
Al menos a mi me apasiona… y se me nota.
Por supuesto que el ser es mucho más que materia. Eso es lo que el materialista no entiende, que hay mucho más que materia en el ser. Lo que ocurre es que muchas veces la ciencia no te da herramientas para conocer o interactuar con ese algo más que existe en el ser y que no es materia. Y eso al científico puro le pone muy nervioso.
Incluso, cuando los físicos afirman que la materia o la realidad no existen, no estan afirmando lo que parece que afirman. Lo que pasa es que tienen que decirlo de manera que lo entendamos los más torpes y puedan vender libros, pues de eso viven.
Lo que quieren decir es que la idea intuitiva que tenemos de la materia no es verdad. Que esa realidad sólida, líquida o gaseosa que sentimos no es tal y lo que sentimos son las fuerzas gravitatorias, nucleares (fuerte y débil) y electromagnéticas que se ejercen entre las partículas que nos componen y componen al resto de la realidad.
Y cuanto más profundizan en lo que somos y nos compone, mas difícil es de comprender aquello de lo que estamos hechos.
Y totalmente de acuerdo contigo en que la afirmación de Küng es mucho más razonable que algunas de las de Dawkins y otros materialistas ateos y no solo más razonable; más intuitiva, más comprensible y más aprehensible.
Y yo insisto en que de alguna manera, Dios, debe ser entendible por cualquier ser humano, no sólo por los físicos y matemáticos de alto nivel.
Sí, amigo A. Llaguno. El tema es apasionante, tan apasionante que nos va la vida, la vida…, en ello. El gran tema del Dios de Jesús de Nazaret da sentido a la vida y a nuestra vida. Sin él la visión del ser humano (y del universo) quedaría muy empobrecida. Sin él tendría una buena coartada el darwinismo social… Sin él el “homo deus” del gran poder tendría la última palabra, inapelable. Sin él nuestros sueños serían solo sueños, ilusiones… En este caso tendría más sentido el “carpe diem” ( y tal vez muchas depresiones por falta de sentido…) Sin él tendrían cierto sentido las guerras y el comportamiento caníbal del animal humano… Y digo más, sin él el “homo deus” tendría que organizarse mejor para no caer en la tentación de autodestruirse, porque sin él solo sería UNO -y nadie más-el “homo deus”. Sin él, a mi juicio, sería más difícil entender y practicar lo que es amor solidario, que se da… Sin él sería más difícil que surgiesen los héroes, verdaderamente humanos, con sentido ético. Sin él no cabría la Esperanza… Sin él este Universo sería un misterioso absurdo… Para ser más positivo, termino con un abrazo, y confieso que admiro la ciencia -la ciencia de verdad- y que creo en la Esperanza. En mi opinión, la ciencia en el fondo va en busca de explicar el proceso de desarrollo que da sentido a la Esperanza.
Llevas razón, Juan Antonio.
Y aprovecho tu razonamiento para plantear una cosa.
Ultimamente, proliferan los libros, videos, blogs que pretenden demostrar que Dios existe. Es, además, una aspiración lógica y legítima del ser humano.
Yo hecho de menos, la reflexión de… Una vez que hemos llegado a la conclusión de que Dios existe… ¿Cómo es Dios?
Es decir, los creyentes en religiones establecidas, no nos lo planteamos porque acudimos a la Revelación. Concretamente los cristianos afirmamos: “Dios se ha revelado en Jesucristo”
Pero es que yo creo que se puede reflexionar sobre el Cómo de Dios sin tener que recurrir a un argumento tan poco aceptabe para un ateo como la Revelación.
Tu lo dejas entrever en tu comentario. Sin un Dios así, como el crisiano, el mundo sería un infierno. Y no es necesario acudir a argumentos negativos, se puede partir de la dignnidad del ser humano como criatura y a partir de ese concepto construir “Cómo debería ser Dios para ser aceptable por un ser humano con dignidad”
Porque de esta reflexión se deriva algo que yo cada día tengo más claro.
Imaginemos (Porque esa es una condición, “imaginar”, que tenemos. Usémosla pues) que existiera Dios. E imaginemos que es un Dios vengativo, castigador, arbitrario, rígido, voluble, etc…
Yo no querría ser salvado por él. Parafraseando a los Rolings Stones, acabría teniendo simpatía por ese demonio que se alza contra él (Sí en minúscula) y que se revela contra ese Dios indigno de sus criaturas.
Me gustaría que personas más ilustradas que yo iluminaran mi mente en este sentido.
Dios no es libre de ser como le de la gana, porque un Dios que no es digno de sus criaturas es un Dios que, lejos de no existir, no se merece existir y por lo tanto no se merece ser Dios. Y un Dios que no se merece ser Dios no se merece que yo lo adore, ame o cualquier otro verbo similar.
Cada vez que verbalizo esta reflexión delante de un cristiano tradicional ocurre lo mismo. Se rasgan las vestiduras, me amenazan con el fuego del infierno, me llaman hereje (Aunque a mi esto último me gusta. ¿Que le voy a hacer?), me desprecian como si fuera la hez de la Humanidad y me desean lo peor porque aseguran que ofendo a Dios (Como si Dios se pudiera ofender) y me dicen que deberían meterme en la cárcel, o algo peor como condenarme a comer brócoli el resto de mi vida o a vivir con mi ex cuñada.
Créeme que llevo un monton de tiempo dándole vueltas a esto.
Todo el argumentario de tu comentario, amigo Juan Antonio, es válido, dentro de una concepción racionalista-materialista, (que es la reinante y habitual en la Modernidad actual), en la cual el ser humano, está inmerso en una fuerte lucha interna, entre sus instintos personales, y su racionalidad, que es la que debería dirigir su vida, con la sujección y hasta la anulación de todos los instintos, mediante su voluntad, de seguimiento a un esquema moral pre-adoptado, (superego freudiano).
Y con este panorama, la aparición en la vida humana de la figura de Dios, serviría de guía, y estímulo y apoyo para que el ser humano venza en esa batalla moralista interna.
Pero eso es una perspectiva de la naturaleza humana. Poque hay otra perspectiva muy distinta.
Y es la hipótesis de que al igual que todo el resto de seres vivos integrantes del Universo, no venimos a la vida, con una mente como una pizarra vacía que la cultura tiene que escribir.
Sino que el Universo nos ha dotado genéticamente de unas instrucciones de comportamiento de la especie, que es lo que hace a cada ser, pertenecer a su propia especie.
Esto hace que el ser humano, (al igual que el resto de seres vivos), para ser, para existir, no tiene que “inventar” nada de su comportamiento, sino simplemente debe seguir fielmente su naturaleza, que para cada uno de nosotros, es el mandato y la “palabra” de Dios, a través de su gran obra y revelación, el Universo.
La gran diferencia entre ambas perspectivas radica en el tratamiento de los instintos. La perspectiva racionalista- moderna-moralista, religiosa o laica, al ignorar prácticamente a los instintos superiores de que hemos sido dotados en nuestro Inconsciente Colectivo humano, solo contempla los instintos inferiores, los mas primitivos y animales, a través de sus emociones asociadas.
Pero hemos recibido, (posiblemente en el último o penúltimo salto evolutivo), unos patrones conductuales instintivos superiores,
– hacia la Verdad, (que nos impulsa la creatividad y el uso de la Inteligencia),
– hacia la Bondad, (que nos impulsa hacia la empatía y el respeto hacia todo lo existente en el Universo),
– y hacia la felicidad personal, la alegría, la belleza y en suma hacia la armonía con las Leyes del Universo.
Todos esos instintos superiores, que todos llevamos en potencia, en la inmensa mayoría son frustrados por la perspectiva cultural racionalista-moderna-moralista, que hace bandera del control radical de todos los instintos, y su subordinación a la conciencia moral cultural.
(Aquí habría que explicar, la diferencia entre “el Ideal del Yo”, y “el yo ideal”, conceptos expresados por Freud, pero que cien años después, y que con la perspectiva del posterior Inconsciente colectivo junguiano, (también afinado con el tiempo), se pueden entender de forma algo distinta a la visión freudiana.
El “ideal del yo”, sería la conciencia moral cultural, que nos aporta la sociedad y las religiones tradicionales, y que adoptamos cada individuo, y que se ejecuta mediante la voluntad racional. Es un componente más del racionalismo.
Mientras que “el yo ideal”, sería el esquema moral intuitivo, que nos proviene directamente del instinto de Bondad, a que nos impulsa el Inconsciente colectivo, o “espíritu”.
Este no solo nos impulsa a la bondad y al respeto a los demás, de forma genérica, sino que también, utiliza las intuiciones del inconsciente, para guiarnos con patrones organizacionales conductuales, (arquetipos) específicos.
En una mente, dominada por el racionalismo-moderno, las ocasiones en que se producen intuiciones morales, distintas de las normas morales culturales, estas silencian las intuiciones espirituales, muchas veces acusándolas de egoístas, solipsistas e individualistas.
Son un capítulo más de la sempiterna lucha de la razón consciente, conducida por el ego, contra el “espíritu” inconsciente, al que curiosa y perversamente se le tilda de “egoísta”.
Una lucha, que como decía Jung, no se resuelve con la aniquilación de ninguno de los dos, sino con una negociación y solución de contradicciones, que siempre se resuelven, modificando algo la perspectiva con la que contemplamos las cuestiones concretas.
Estas dos perspectivas, dan lugar a dos espiritualidades diferentes. La perspectiva racionalista, da lugar a la espiritualidad tradicional de caída-redención, que es fundamentalmente moralista.
Y la perspectiva del inconsciente colectivo, da lugar a la espiritualidad centrada en la Creación, que no es algo moderno, y nuevo, pues muchas figuras espiritualidades antiguas, como el maestro Eckhart, Thomas Merton, San Juan de la Cruz, y muchos otros la siguieron y explicaron, encabezados por el mismo Jesús.
Son dos perspectivas de cosmovisión, que cada uno puede adoptar la que mejor le cuadre a su personalidad, ya tradicional o ya creativa, pero siempre es bueno saber lo que hay, y que no hay único camino, ni siquiera en aquello que nos parece mas elemental.
(El que esté interesado puede echar un vistazo a “La bendición original”, de Matthew Fox, antiguo dominico, muy ilustrador sobre el tema).
Acabo con una cita de Whitehead, (del libro de Fox): “La religión está tendiendo a degenerar hacia una fórmula decente, para adornar una vida decente… La religión no recuperará su antiguo poder, hasta que sea capaz de enfrentarse al cambio, con el mismo espíritu que la ciencia”.
Y si sencillamente aparecieron las primeras partículas con masa, como resultado de que ‘ se arrugase’ la energía?Y si lo que llamamos leyes.de la física fueron formándose a partir de ese momento? Puro azar o no había otra? Porque leyes , haberlas, estoy convencida de que las hay. Otra cosa es que se hayan descubierto.
Demasiado han descubierto.No tendría la vida sentido sin un Dios creador? Sería imposible? Por qué? No lo entiendo.La vida es un milagro de esas leyes. No merece la pena estar vivo porque vamos a morir y no vamos a vivir para siempre? Han oído la canción de Freddy Mercury, quién quiere vivir para siempre? Cuando pase la experiencia de la muerte, que me la imagino tal cual la caída que se siente cuando te ponen una anestesia general y te dicen, cuenta hacia atrás. Y caes, caes… Que me dejen descansar para siempre, en paz. Lo vivido, vivido está.
No necesito que me juzguen y me den un premio o un castigo. Seguro que tendríamos un problema y acababa en el infierno de todas , todas. Y, francamente, pues no.Y hasta aquí voy a llegar, porque las cosas que me están pasando por la cabeza, no sé, o se leen con sentido del humor o sale una mano por el móvil y me estrangula. Después de lo que ha pasado con los móviles y los busca, les estoy cogiendo un miedo…Buen día a todos.
El azar no existe en la naturaleza, Carmen.
Eso es una verdad conocida.
Hay conceptos que trabajan los físicos teóricos que no se dan en la naturaleza.
Fundamentalmente hay 3 que usamos comúnmente y que no se producen en la naturaleza: la nada, el azar y el infinito.
El azar no es más que el reconocimiento de que no somos capaces de calcular con éxito un resultado. pero no se produce por azar, hay unos datos de partida y unos datos de llegada, pero el proceso de cálculo es tan enórmemente complejo que no somos capaces de reproducirlo.
A la nada y al infinito les pasa lo mismo.
Llamamos infinito a algo tan enormemente grande que no podemos procesar su tamaño y nada a un vacío tan absoluto que no podemos interactuar con las cosas que sí existen en él.
Pero no son ni el azar, ni el infinito ni la nada. Esos son conceptos puramente matemáticos.
De ahí la trampa materialista de lo que yo llamo la “Falacia de Hawking”
Stephen Hawking afirmó que el Universo podría haber surgido por azar de una fluctuación infinita de la nada.O lo que es lo mismo (Y Hawkins lo sabía, por eso es una falacia y no un error), que podría haber surgido por una causa inexistente de un entorno inexsitente producida por una fluctuación imposible.
Por algo nunca le dieron el Nobel, a pesar de sus muchos méritos.
Lo que debía haber dicho es que el universo podría haber surgido por una fluctuación enorme del vacío cuántico a causa de algo tremendamente improbable.
Lo que pasa es que si lo hubiera formulado así, que es la forma correcta de hacerlo, no estaría cuestionando el principio de causalidad, ni el segundo principio de la termodinámica y por lo tanto, no estaría excluyendo a Dios, que fue su conclusión.
Antonio Llaguno.Por qué dices que no existe la masa? Entiendo lo que dice este señor que citas, en realidad la masa es una concentración de energía, pero la masa existe, aunque en último extremo sea energía. Es como si dijéramos que los seres humanos somos un 70 por ciento agua y un treinta por ciento sales minerales, luego el ser humano no existe.
Pues no sé yo eso.Entonces de qué estamos hablando? De que todo son partículas y ese jaleo de atracciones fuerte y débil y demás?Pues la masa se formó, según Gibs, ya sabes cómo. La célebre partícula de Dios . Hace unos años se habló mucho de eso, cuando lograron comprobar su existencia.No sé
Es que la precisión en las palabras es muy importante, Carmen.
Yo afirmo (Bueno, yo no. Lo afirman los físicos de prestigio), que la materia podría no existir; pero eso no quiere decir que no exista la masa.
La masa es una fuerza (Por usar una palabra asequible), una interacción entre dos cuerpos o dos partículas pero esos cuerpos pueden no estar constituidos por la materia.
Lo más reciente es que la masa es la reacción de los bosones de Higss cuando se incluyen en un campo de fuerzas (Aunque aquí fuerza no es la palabra adecuada) que impregna todo el universo llamado Campo de Higss.
Los bosones de Higss son cuantos de un tipo específico (Un cuanto es la excirtación más pequeña que existe de un campo) y aunque no tienen masa, es esa excitación la que produce un fenómeno llamado masa.
Planck afirmaba que la materia, de existir, era simplemente el resultado de vibraciones de pequeñas partículas que pueden o no tener masa. Y en nuestro fondo más íntimo, todos nosotros y todo lo que existe está hecho de partículas.
Incluso hay una teoría muy divertida que se basa en la interrelación de partículas elementales que afirma que realmente (Si es que existe la realidad) solo somos información, es decir algo así como el código fuente de un programa muy complejo (¿Y quién programo el programa?) que “rula” (Como dirían en mi pueblo) en una máquina llamada universo.
Esto, que recuerda mucho a Matrix, ha sido comprobado, con cierto éxito, a nivel elemental con electrones entrelazados cuánticamente en la búsqueda de mecanismos que permitan la teletransportación, aunque no hay que asutarse, Star Trek sigue siendo ciencia ficción, estamos muy muy muy muy muy lejos de que esos experimentos sean fiables y mucho más lejos aún de que nos permitan conclusiones aplicables desde un punto de vista técnico. Si es que llegamos algun día a esas conclusiones.
Lo que quiero decir con mi reflexión, es que la ciencia, está muy lejos de conocer con certeza aquello que es de su exclusiva competencia (Mucho más lejos si lo que estudia no es científico, como es el caso de la naturaleza y/o existencia de Dios). Incluso si tenemos en cuenta 4 teoremas o conclusiones matemático/físicas (Principio de incertidumbre de Heisemberg, Teoremas de Incompletitud de Gödel, Desigualdades de Bell y las consecuencias de la Paradoja de Hilbert que concluye en que no pueden darse infinitos reales en la naturaleza física), todos ellos demostrados con certeza matemática, LA CIENCIA SABE QUE NO PUEDE SABERLO TODO.
Por eso me llama tanto la atención la seguridad que tienen muchos dizque científicos en que tal o cual asunto “No se sabe ahora pero se sabrá algún día”.
Otra cosa es que la ciencia en ocasiones haga trampas al solitario y para poder seguir su camino, decida reconocer que no entiende algo pero que “parece que existe” y le pone un nombre raro y sigue su camino.
Es lo que pasa fundamentalmente con la materia oscura, la energía oscura y las singularidades. No sabemos lo que son pero le ponemos un nombre “oscuro” y seguimos especulando. Porque a partir de ahi, todo es especulación.
Otro asunto que me hace mucha gracia es que los físicos teóricos y matemáticos, usan conceptos como “belleza” o “elegancia” para calificar sus conclusiones y obviamente, eligen las más “elegantes”; pero ¿Quién decide lo que es elegante o no lo es? Esto hace que descarten conclusiones teóricas sólo porque no son “elegantes” y se centren en investigaciones más “elegantes” sin ninguna otra razón aparente.
Lo que pasa es que Adolfo Dominguez ya demostró que “la arruga es bella” y a mi eso de la elegancia no me aporta ninguna tranqulidad argumental.
En fin que podría seguir con la multitud de cosas que no sabe la ciencia y que los materialistas ateos (Que no son científicos o no son matemátio/fisicos teóricos, como es el caso de Dawkins, y así le va, que no para de hacer el ridículo) creen firmemente que sí sabe.
Y es que como dije en un comentario anterior, la sabiduría (Que no el conocimiento, que es de lo que se hablaba en el otro comentario) se encuentra en el diálogo y no en la conclusión.
Muy bien, Carmen.
Pero, entonces… ¿Qué es la energía? Es la pescadilla que se muerde la cola.
Es que soy muy confusa hablando. Y me encanta hablar. Y, claro, vuelvo loco al personal. Lo único que trato de decir es que las cosas que me rompen la cabeza no puedo aceptarlas. Y que no soy la única persona a la que le sucede. Mi tiempo me ha costado darme cuenta. Y no vea lo bien que sienta no sentirse un perrico verde.Antonio me deja últimamente decir todo lo que pienso y … aprovecho la única ventanita que tengo. Tienen la mala suerte de que les considero que están dentro de mi metro cuadrado.Usted también se las trae. Así que estamos en paz.Y
que cada cual, resuelva.
Buen día.
Le acabo de echar un vistazo al artículo. Lo primero que he leído me ha desconcertado totalmente. Los evangelios están escritos en Griego. Es cierto? Pues no entiendo ya nada. No sé. Lo veo como muy complicado . Seguramente porque mi tipo de cabeza tiende a la sencillez. Así que, teólogos tiene la iglesia. Nunca mejor dicho.
Hace tiempo, cuando me enteré que Freddy Mercury venía de una familia zoroastrista, leí algo sobre esa religión. Y sobre Zoroastro.Y entendí porqué Kurbick la seleccionó para su película 2001, casi toda la música es de Strauss, no sé si del padre o el hijo. Así habló zaratrusta. Menuda fuerza tiene la música.
Y entendí el título del libro de Nietzsche.Me gusta. A lo mejor porque se parece a la idea que ronda por mí cabeza acerca de estas cosas.No creo que Jesús tuviese contacto con alguien que perteneciese a esa religión. Todo es posible , pero no creo.
Lo que, a mí juicio tiene de novedoso Jesús es eso de mira a tu alrededor y ayuda. No tienes porqué soportar la injusticia. Tiene un precio alto. Elige.Para mí esa es la novedad de Jesús.La regla de Oro también está por ahí, la relaciono con los egipcios, a lo mejor ellos están a su vez influenciados por otros, los etruscos quizás. No lo sé. Pero la novedad es poner la mirada en el otro. No únicamente no tratarlo mal. No sé si me explico.Pero que el cristianismo tiene influencias de otras religiones orientales, de lo que ahora llamamos oriente próximo o medio, lo tengo clarísimo.
Porque, en el fondo, todos buscamos cosas parecidas. Por ello las guerras de Religiones las veo absurdas y una manipulación indecente. Pero bueno, es mi opinión.
Vuelvo a enviar un comentario que mandé ayer y parece que se ha extraviado. No porque vaya a “descubrir el Mediterráneo”, sino por el esfuerzo y el interés que pongo en cada uno de mis comentarios.
El que yo insista constantemente en la marginación de la mujer en todas las religiones, tiene dos vertientes, una, la propia marginación en sí misma, que no es cualquier cosa, y dos, el que solamente los hombres hayan creado su único concepto de Dios, el que tiene todo en sus manos y nos tiene a to@s según interese, o que sea el dueño y señor o el que sea el Padre (no la madre), y el que ellos, los hombres, se asemejan al Dios que ellos mismos han creado, y actúen como Dios, sólo el clero de cada religión, lo sabe. No es un juego de palabras, ni es un revuelto de ideas, quisiera transmitirlo como la realidad que se vive en todas las sociedades y en todos los tiempos desde hace unos miles de años, en clave masculina que afecta a toda la sociedad: el poder, el gobierno, la legislación, las costumbres, la moral, la religión, todo lo han hecho a su medida. Vuelvo a citar a Simone de Beauvoir: “El hombre disfruta de la ventaja de tener un Dios que respalde el código que escribe…. El hombre es el amo del derecho divino” “El segundo sexo” 1949. Afortunadamente las mujeres vamos rompiendo el cable umbilical de los hombres con Dios, sin esperar ni a su permiso ni al de Dios, que parece muy calladito en este tema mientras les inspira en tantas otras cosas “sublimes”¿¿??. El Papa, los obispos, sus sínodos y sus concilios, primera y última palabra, la suya.
Si los evangelios ponen en boca de Jesús “yo soy el Camino, la Verdad y la Vida”, y alguien lo toma como verdad, y a Jesús como referente vital, eso es fe, y la fe es una opción personal, respetable e incuestionable desde fuera de la persona que tenga fe. Pero la fe no es ciencia. Todo es actividad cerebral condicionada por las circunstancias en las que has nacido o vivido.
Antes de Cristo habían existido cientos o miles de pueblos, con sus culturas respectivas y sus diosas o dioses respectivos; a mí me enseñaron que todas esta gente se habían ido al Limbo…..¡¡¡¡??!!?? Y después de Cristo, ¿por dónde andan? Como dice Carmen, es que yo no necesito leer a grandes científicos, sino que mi limitada mente es capaz de hacer estos razonamientos tan elementales. Que nadie sabe el Misterio del origen del universo, cierto, y la ciencia puede seguir investigando. Pero qué y cómo es Dios, es otra cosa.
Si hubiésemos vivido en Babilonia, o en Sumeria, o en Mesopotamia, en Egipto, en Irán en la época de Zoroastro 600 años aC, o en la civilización hurrita mencionado en el AT como los huritas, o la época de los hititas, sin olvidarnos de los pueblos indígenas de otros continentes y otros tiempos, como el continente americano, el africano o el australiano, antes de llegar el cristianismo, y un sinfín de civilizaciones con sus diosas y sus dioses respectivos; también ocurre en el momento actual y las diferentes religiones, si hubiésemos nacido en la India, en Irán, en Israel, en Palestina, (un día escuché en la televisión a un palestino decir, “todo el mundo nos abandona, pero Dios no ¡¡¡!!!)”. ¿Cuál de los dioses es el único Dios verdadero? Respeto absoluto a cada opción personal, por supuesto no universalizable.
La verdad es que tardé en entrar a comentar este tema, pero, una vez que he empezado, se me hincha la cabeza. Para tod@s y para mí, paz y bien.
Después de escribir mi comentario, he leído en RD un artículo de un teólogo católico cuyo enlace pongo a continuación sobre la influencia de Zoroastro en el AT y en el mismo Jesús. Os lo recomiendo, es muy interesante para entender ciertas cosas del evangelio.“Dar a Platón lo que es de Platón, a Zaratustra lo que es de Zaratustra y a Jesús lo que es de Jesús” (religiondigital.org)
Hay un dicho popular que afirma que un grupo de científicos, en busca del conocimiento,se pusieron a escalar una montaña, en cuya cima se podía aprender todo el conocimiento del universo.
Después de una difícil escalada y de que algunos se quedaran en el camino, al llegar, se encontraron con un grupo de filósofos y teólogos que estaban allí discutiendo.
Les preguntaron ¿Cómo habían llegado hasta aquí? y la respuesta fue: “¿Llegar? ¿De dónde? Nosotros siempre hemos estado aquí.”
Después uno de los científicos les preguntó que ¿Dónde estaban las fuentes de las que beber para obtener el conocimiento?
La respuesta fue: ¿Fuentes? Aquí nos suben el agua con una cuerda. Si quieres encontrar el conocimiento, dejate de fuentes y ponte a discutir.
Y ahí siguen y siguen y siguen… como el conejito de Duracell.
Yo lo tengo claro. La mejor manera de cnocer a Dios es hablar con sus hijos, con todos sus hijos. Incluso con los que no lo conocen. Incluso con los que lo rechazan.
Puede que algunos no tengan (No tengamos) las respuestas, pero seguro que entre todos obtendremos las preguntas.
Hola Santiago.Es que no aspiro a entender a Dios. Solamente, a veces, me maravillo profundamente ante una serie de cosas. Y no tienen por qué ser grandes. La belleza de un jazmín es espectacular. Y dura muy poquito. O un atardecer, o una tormenta gorda, las estrellas en una noche de verano, o mis hijos cuando nacieron…No. No trato de entender. No me interesa. Con maravillarme tengo suficiente.
Buen día.
Pues a veces parece como si quisiera hacerlo estableciendo comparaciones, afirmaciones y negaciones sin llegar a una conclusión definitiva…
Tambien yo respeto las opiniones puesto me parece que todos estamos en “búsqueda” mientras escribimos aquí y mientras tenemos un hálito de vida.
Y creo que “maravillarse” ante la belleza de la Creación es una forma muy válida de culto en la fe..
Un saludo cordial
Santiago Hernández
Y vaya por delante mi más profundo respeto y hasta mi envidia a los que están verdaderamente convencidos de una serie de cosas que no puedo aceptar porque mi cabeza las rechaza.Y no porque lo diga ningún científico, teólogo, filósofo… porque mi, mi, mi cabeza no lo permite.
No me considero por ello ni más ni menos lista que nadie . No es cuestión de inteligencia, ni de lecturas, ni de nada de esas cosas. Es algo mucho más profundo que sale del fondo de tu alma, entendiendo alma como las personas del pueblo la entendemos.He oído reflexiones absolutamente profundas en persona sin estudios.. Porque de lo que estoy hablando, no va de estudios.No sé si entienden lo que estoy diciendo. A lo mejor, es posible que los árboles les impidan ver el bosque que formamos el pueblo. Con nuestros pájaros, nuestro sotobosque, lombrices de tierra, Dios las bendiga, hongos, inflorescencias de todo tipo, setas buenísimas y otras venenosas…Porque un bosque es mucho más que una serie de árboles. Mucho, muchísimo más. Y formo parte de un bosque. No soy un árbol.Pues eso.
Un poco de “sensatez” no viene mal
al menos de vez en cuando suele venir bien
Gracias!
Un poco de SENSATEZ – la Chanfaina
en “Nazarín” de Benito Pérez Galdós
(novela publicada en mayo de 1895)
“Buscando nuevas fuentes de información entramos en la cocina, donde campaba la Chanfaina frente a una batería de pucheros y sartenes, friendo aquí, atizando allá, sudorosa, con los ricitos blancos tocados de hollín, las manos infatigables, trajinando con la derecha, y con la izquierda quitándose la moquita que se le caía. Al punto comprendió lo que queríamos decirle, pues era mujer de no común agudeza, y se adelantó a nuestras preguntas diciéndonos:
– Es un santo, créanme, caballeros; es un santo. Pero como a mí me cargan los santos…, ¡ay, no les puedo ver!…, yo le daría de morradas al padre Nazarín si no fuera por el aquel de que es clérigo, con perdón… ¿Para qué sirve un santo? Para nada de Dios. Porque en otros tiempos paíce que hacían milagros, y con el milagro daban de comer, convirtiendo las piedras en peces, o resucitaban los cadáveres difuntos, y sacaban los demonios humanos del cuerpo. Pero ahora, en estos tiempos de tanta sabiduría, con eso del teleforo o teléforo, y los ferros-carriles y tanto infundio de cosas que van y vienen por el mundo, ¿para qué sirve un santo más que para divertir a los chiquillos de las calles?… Este cuitado que ustedes han visto tiene el corazón de paloma, la conciencia limpia y blanca como la nieve, la boca de ángel, pues jamás se le oyó expresión fea, y todo él está como cuando nació, quiere decirse que le enterrarán con palma…, eso ténganlo por cierto… Por más que le escarben no encontrarán en él ningún pecado mayor ni menor, como no sea el pecado de dar todo lo que tiene… Yo le trato como a una criatura, y le riño todo do que me da la gana. ¿Enfadarse él? Nunca. Si ustedes le dan un palo, es un suponer, lo agradece… Es así… Y si ustedes le dicen perro judío, se sonríe como si le echaran flores… Y mis noticias son que el cleriguicio de San Cayetano le trae entre ojos, por ser así, tan dejado, y no le dan misas sino cuando las hay de sobra… De forma y manera que lo que él gane con el sacerdocio me lo claven a mí en la frente. Yo, como tengo este genio, le digo: «Padrito Nazarín, métase en otro oficio, aunque sea para traer y llevar muertos en la funebridad…», y él se ríe… También le digo que para maestro de escuela está cortado, por aquello de la paciencia y el no comer…, y él se ríe… Porque, eso sí…, hombre de mejor boca no se hallaría ni buscándolo con un candil. Lo mismo le come a usted un pedazo de pan tierno que medio cuarterón de bofes. Si le da usted cordilla, se la come, y a un troncho de berza no le hace ascos. ¡Ay, si en vez de santo fuera hombre, la mujer que tuviera que mantenerle ya podría dar gracias a Dios…!”
El escritor y crítico alemán Lessing fue muy perspicaz, cuando vió que la teología ilustrada de su época, “bajo el pretexto de convertirnos en cristianos racionales, nos convierte en filósofos extremadamente irracionales”.
Su preocupación fue la libertad, que corría mas peligro, entre los que quieren “imponer la fe, por medio de pruebas”, que con los que consideran la fe como un don de la gracia divina.
Pues sí, Ana. Eso y mil cosas más.Mucho me temo que es tarde. Todo esto se tenía que haber dicho en los años setenta, con Pablo VI había una puertecica sin cerrar del todo. Luego se cerró de un portazo.Y no estuvieron a la altura. Volvieron a las catacumbas. Salvo excepciones maravillosas.Es que me vida laboral se ha desarrollado en un colegio religioso. He hablado con mucha gente, porque era mi medio natural. He oído opiniones como está desde hace muchos, muchos años.Y, ahora, cuando un montón de personas nos hemos salido de toda esta locura, ahora, con el papá Francisco, jesuita, empiezan a hablar. Porque se sienten seguros.
Mucho me temo que es tarde.El tiempo dirá. El tiempo siempre dice.
Contestando a Ana e insistiendo en la invisibilización histórica de la mujer. Yo he estado en Egipto y mucho me hablaron de la faraona Hatshepsut. Acabo de ver un reportaje que sugiere que su sucesor Tutmosis(si lo pongo mal me disculpáis xq no lo puedo ver en Google y no soy egiptólogo) que por cierto lo había formado su tía o tiastra Hatshepsut ,ordenó destruir bastantes de sus esculturas avanzado su reinado. Hapshepsut aparecía mucho en los relieves con su hija y algunos avanzan la hipótesis,no verificada,que aquella idea de un matriarcado le calentaba la cabeza a Tutmosis y a aquella sociedad. Esto no es asunto menor xq la faraona era una diosa. En cuanto el último libro de Picaza lo leí y no me ha gustado mucho xq insiste en una idea del Jesús terapeuta o sanador que a mí no me gusta mucho. Me gusta más la sobriedad con que Hans Kung hablaba de los milagros.
O cómo insistía J.María Castillo en que una de las preocupaciones de Jesús más importantes era la salud de la gente. Para mí hoy en día la salud de los pobres(a quién Jesús atendía preferencialmente) pasa por la sanidad pública ,la única a la que pueden acceder los pobres a tratamientos más caros(no a todos xq la salud como todo está mediado por el dinero; si pagas te someten a tratamientos de los que no disponemos en la sanidad pública,sean eficaces terapeúticamente o no). Yo traduzco así la preocupación de Jesús por la salud. La idea carismática del Jesús sanador no me gusta nada,la verdad . Dios no cura,eso tenemos que reconcérselo a la ciencia .En la pandemia me decían mucho esto amigos ateos y yo contestaba:Dios no cura cierto;pero el Dios cristiano te cambia la mirada. En cierto sentido muchos estamos ciegos en estos países desarrollados (por el dinero,por nuestro bienestar,etc) y Jesús te abre los ojos a qué mires otras cosas. Esa es mi experiencia personal,aunque no haga mucho,yo desde que soy cristiano miro cosas y veo cosas que están en los márgenes.Antes no las veía,ni las miraba.
Saludos Santiago. Y Carmen.
Utilizo el responder. Gracias.
A ver si me sé explicar sin molestar a nadie, partiendo de la base de que cada persona es sagrada per se y, por tanto, sus opciones de vida, de pensamiento y de creencias, son de cada cual, no mías, coincida o no coincida con ellas.
Quienes escribimos en atrio, hemos nacido, nos han educado y hasta nos han dicho lo (perdón por el lo) que es Dios, lo que quiere y lo que no quiere, lo que le ofende hasta enviar a su único Hijo a morir (según el Credo) para resarcirse de nuestras ofensas, que es todopoderoso y también infinitamente misericordioso, es decir la cuadratura del círculo. Yo pienso que además de estudiar lo que la ciencia ha dicho de Dios, estaría bien, por lo menos, completarla con la historia de las religiones que son las auténticas fuentes de lo que manejamos cuando hablamos de Dios.
Un poquito de historia. El homo sapiens, lo fue porque empezó a hacerse preguntas -en general- y a buscar respuestas. Si partimos desde la arqueología prehistórica, en el Paleolítico Superior, hace no menos de 25 mil años parece que pensaron, a juzgar por los restos de figuras femeninas que la diosa madre era la creadora y dadora de la vida. Las diosas existieron hasta que los griegos y los romanos empezaron a cuestionárselo y, por supuesto el cristianismo hasta unos 500 años dC a liminar todo vestigio, aunque quedaron demasiados como negar su existencia. Los hombres ejercían el poder y, en un momento determinado (en términos históricos) crearon un dios a su imagen y semejanza: todopoderoso, omnipotente y omnisciente, como ellos. que son los que, desde el poder absoluto, han configurado las sociedades y han configurado las religiones, hasta ser capaces de “retratarnos” al mismo Dios. No es un ataque, es la historia, y aquí sí que puede decir algo la Ciencia.
En un momento de la historia, apareció, -nuevamente un hombre-, Jesús, que quiso cambiar la sociedad y la religión de su tiempo, y eso le costó la vida, además de no poder cambiar nada. Alguien recurrirá a la salvación del pecado ¿?, a que dejó un valioso legado -cierto-, etc. A partir de su fracaso, los hombres que lo conocieron, quedaron decepcionados (las mujeres no, dijeron que lo de Jesús no había muerto), Emaús: “nosotros esperábamos……pero….” Y Jesús les explicó todo lo que los profetas habían dicho de él, Lc.24. Lo que sigue, ya lo sabemos.
Dice Simone de Beauvoir, como ni la sexualidad ni la masculinidad de Jesús fue por azar, sino por decisión divina, es lógico (esto lo digo yo) que en la religión judeo-cristiana, los hombres se autoproclamaran el nexo directo con Dios, los portavoces de Dios, y, después de dos mil años, ahí sigue el cristianismo: jerarcas con todo su boato, su mitra y su báculo, el clero y su atuendo anacrónico, dogmas, lecturas como palabra de Dios, incluidas lecturas obscenas del AT (en la Vigilia Pascual un Dios terrorífico ahogando egipcios a cientos); seguimos, el “hijo del hombre” rompiendo la línea matrilineal tradicional (Ezequiel), la marginación de la mujer normalizada y, por tanto, transgresores de los DDHH; riquezas, -la Institución con más y mayores riquezas del mundo. ¿¿¿¡¡¡Credibilidad de la Iglesia cuando en todos los templos del mundo se lee el evangelio de hoy u otro cualquiera!!!??? En vez de explicar-predicar periódica, pero constantemente, el mensaje del Evangelio, (yo desde que nací siempre oigo lo mismo), ¿por qué las religiones no son más coherentes con lo que predican? En una ocasión le escuché a Hans Kung que si no hubiesen existido las religiones, no hubiesen existido la mayoría de las guerras en la historia. Y ahí siguen Netanyahu, y todo lo que rodea o subvenciona a Hezbolá.
¿Por qué a la juventud, sociedad actual y futura, no les interesa ni el Evangelio, ni el cristianismo y sí de religiosidad popular como espectáculo callejero? ¿Por qué se oculta la historia del cristianismo? Mientras el mensaje del evangelio hacia los vulnerables se siga explicando desde “púlpitos” aprisionados en catedrales, boatos y oropeles, y los pobres estén en la puerta de la iglesia pidiendo para comer, algo no funciona bien (soy consciente que los problemas sociales los tiene que solucionar el poder político). Así que vayamos poniendo cada cosa en su sitio, a la Ciencia, a los dioses, a las religiones, a su historia, a su actualidad, a su actualización, y a su mensaje, cada uno en su sitio. Que “una cosa es predicar y otra dar trigo”, y la Ciencia, a lo suyo, porque a Dios ni lo va a ver con un telescopio ni con un microscopio, porque “a Dios nadie lo ha visto”, y esto ya lo dijo San Juan.
Gracias Ana. Siempre te leo con interés, porque siempre dices cosas interesantes. Un saludo
Uso el responder, gracias.
Es que la ciencia ni ha estudiado ni ha dicho nunca nada sobre Dios! Que el título del artículo quiera darlo a entender así es algo personal y legítimo, por supuesto, pero al mismo tiempo un obstáculo para el entendimiento-
-Esta osadía de decir lo que Dios es, muy bien explicada por Ana, nos viene, como tantas veces he recordado aquí, de haber relacionado ser y pensamiento. Es la herencia de Parménides, aquello que no cambia, lo que siempre es y que Occidente se cuidó bien de desarrollarlo-
-Recuérdese que en los orígenes del pensamiento griego, se empezó a llamar filosofía a todo saber que, más allá de la mera constatación, estuviera fundado en estrictas razones. No existía esta división entre ciencia y filosofía, sino que ambas constituían un mismo objeto de estudio obtenido por demostración. Pues bien, a esta forma de saber es lo que se llamó ciencia y el gusto por este saber fue lo que se llamó filosofía. En este sentido, toda ciencia, por ejemplo la matemática, la física, la astronomía, etc., pertenecen a la “ciencia filosófica”. Había, pues, una mixtura entre ciencia y filosofía-
-Con todo, sin embargo, cuando Aristóteles pensando en el Theo, concibe la idea de una metafísica sigue esta misma línea, la de creer que lo que hace no es más que una nueva ciencia, pero especial, eso sí. En cambio lo que con ello ocurre, es visto desde nosotros que su hacer es abrirnos a lo que ahora podemos llamar estrictamente filosofía, filosofía de la “realidad”, en lugar de la del “ser”. Esto es con independencia de la ciencia. Pero ojo! no porque la ciencia no parta de la realidad sino porque partiendo de ella la ha utilizado como objeto. Mas si entendemos que lo relevante del problema no es tanto que se trate de una metafísica de la realidad como sí de un más allá se tratase, sino del “momento” metafísico de las cosas en su modo de ser reales aquí y ahora. Entonces, por tanto, si en la actualidad está admitida la complejidad de lo real por la propia ciencia, ¿cómo esta ahora no va a poder abrirse a la posibilidad relacional que da titulo al artículo? No obstante, su atención lógicamente no está puesta al más allá, sino a la transversalidad del acá.
Quizás por eso hay personas que piensan, sean o no eso que llaman científicos, que la aparición de la vida en la tierra es debida a una serie de condiciones debidas a eso que llaman azar.Quién quiera pensar que todo eso está dirigido por un ser superior, está en su absoluto derecho. Sea o no científico. Pero no hay ciencia que a mí me demuestre algo tan sencillo como que no tengo el factor Rh en mi sangre y por ello estoy aquí. Si lo tuviese, muy posiblemente hubiese tenido mi madre un aborto más.No puedo pensar que existe un Dios tan absolutamente controlador que llega a esos límites. Terror me da.
Quién quiera pensar que sí. Qué Dios dirige absolutamente todo incluso qué embarazo prospera y cuál no, pues adelante. A mí me horroriza.
Prefiero pensar que aquí estamos debido a una serie de factores, tan tan numerosos que es imposible imaginar. Teoría del caos a tope. Y el resultado es maravilloso. Al menos para nosotros, para los dinosaurios, no sé.Me conformo con maravillarme ante , pues ante todo.Y que cada cual sienta como pueda. Ahora, cuidado. No rechazo a Dios, en absoluto. Cuidado con lo que decimos porque llega un momento en que puede molestar.Dejemos que cada cual haga lo que pueda. No queremos que eso que llaman ciencia entre a jugar junto.a la religión? Pues entonces dejadnos pensar tranquilamente. Esto no es una guerra entre los poseedores de La Verdad y el resto del mundo. Si les apetece hablar en esos términos, seguramente que encontrarán en otras religiones buenos interlocutores. Y hablen de verdad a verdad.Aquí, hacemos lo que podemos… Buen día.
No es posible entender los motivos y el pensamiento de lo que nos trasciende completamente…llámese Ser Supremo, Divinidad, Dios, Adonai, YAWE, Alá etc etc…
Y es que nosotros tendemos siempre a atribuir a Dios nuestra manera de pensar y de sentir…Sin embargo existe una “distancia” entre lo “finito” y lo “infinito” a pesar que fuimos creados a “Su imagen y semenjaza” solamente en cuanto a la parte espiritual pero no en cuanto a la plenitud vital que solo es perfecta e inconmensurable en El…
Por tanto, nosotros solo “vemos” con una mirada velada e imperfecta -limitada por nuestra modesta naturaleza corruptible- y solo nos damos cuenta de las “causas próximas” -a corto plazo- desde la brevedad de unos cuantos años de vida humana, pero la Realidad divina es diferente a la nuestra y es la única que puede ver las “últimas causas” con sus “ “ efectos’” desde la eternidad en el panorama completo de todos los siglos y de todas las eras y épocas posibles con los futuribles… por eso no podremos nunca entender nuestra propia realidad que es es solo un fragmento nebuloso aunque cierto y presente de la la Realidad divina. Por eso también no podemos comprender el por qué de las cosas y de los acontecimientos humanos,- de sus motivos, sentido y propósitos, -en su totalidad.
Un saludo cordial
Santiago Hernández
Como no soy científico me planteo preguntas absurdas y encuentro respuestas en Google,jajaja…Parece que sin la extinción de los dinosaurios que produjo el famoso meteorito hace 160 millones de años(creo),la vida de los primeros primates hubiera sido inviable. Claro que en Google se plantean preguntas mucho más audaces(jajaja)si los dinosaurios hubieran evolucionado hacia formas humanoideas si no se hubieran extinguido.Rechazó categórico x el tamaño del cerebro. Ya me dirás que la adaptación del universo a la vida humana suena un poco a cachondeo cuando la aparición de la vida humana(los primates y prehomínidos)depende de un suceso tan azaroso como el choque de un meteorito. A no ser que Dios lanzará el meteorito en dirección la Tierra.que ya son ganas,jajaja… Del diseño inteligente ni hablamos xq hay científicos que mantienen abiertamente que el homo sapiens está mal hecho para ser feliz(ya he hablado del paleoneurobiólogo del Museo de Ciencias Naturales que me ha jodido este verano, jajajaja). No dudo de la belleza del universo,como no dudo de la belleza de una montaña,de un río,del espacio(aunque yo tengo bastante vértigo). No me extraña que algunos adoren diversas partes de la naturaleza.No digamos si vives en la selva…Yo soy creyente,pero mientras no me demostréis que los dinosaurios creían en Dios,yo todos estos argumentos de científicos…. Reflexiones desde mi ignorancia.
Lo increíble es que a pesar de todo ese aparente “caos” inicial nosotros hemos llegado a existir en el siglo XXI y podamos comunicarnos desde cualquier parte del mundo mediante la red informática llamada internet de manera “cuasi”instantánea…¿Que es más maravilloso el árbol o la semilla que ya lo contenía? ¿O el único espermatozoide que el óvulo permitió entrar para fertilizarlo o el ser humano en plena madurez? ¿O la singularidad que almacenaba todo el Cosmos en el instante del Big Bang o el Universo en la noche estrellada con trillones de galaxias? ¿O la célula que lleva en su interior un coordinado y perfecto programa de software algorítmico o el riñón donde se realizan los precisos y perfectos intercambios entre aniones y cationes con su bomba de Na?
Lo increíble es que existamos ahora en este momento y en este mundo que es y ha sido un acontecimiento de lo más ímprobable entre los improbables…
Un saludo cordial
Santiago Hernández
El asunto Javier, es que el “principio antrópico” no dice lo que tu pareces querer decir.
El principio antrópico afirma que todo parece haber sido ajustado para el surgimiento de la vida… y se queda ahí. Si tu le añades el adjetivo “humana” o “inteligente” al sustantivo “vida” ya estás añadiendo ideología, porque el principio antrópico y la teoría del ajuste fino fuertes (Hay un principio antrópico y una teoría del ajuste fino débiles, pero son más ideológicas) se limita a afirmar que con pequeñas variaciones del orden de varios decimales de algunas constantes físicas, tanto la vida como la estabilidad del Universo no serían posibles.
Y la pregunta viene a continuación sin solución de continuidad: ¿Quién o cómo se han determinado esas constantes físicas?
¿Por que la veolocidad de la luz de de 300.000 km/s y no 450.000 km/s?
¿Por quÉ la constante cosmológica determinada por Einstein vale 1.1055 x 10 elevado a -56 y no por 10 elevado a -44?
¿Es constante la constante cosmológica?
Todo eso no tiene nada que ver con la extinción de los dinosaurios o el meteorito que los mandó a freír espárragos.
Existen teorías bio-geneticas que afirman que de haber persistido los dinosaurios en la tierra y a la vista de la evolución climática del planeta habrían evolucionado a un especimen de sangre caliente, bípedo, con un cerebro funcional como el humano y capaz de hacer trabajos especiales con las manos. Y eso es muy parecido a un humano, aunque fuera verde con escamas y ojos amarillos. Ten en cuenta que han evolucionado hacia las aves y las aves son los animales no mamíferos más parecidos a los humanos.
Pero son eso especulaciones, teorías. Que a fin de cuentas es lo que la ciencia produce. La ciencia produce muy pocas certezas.
La pregunta fundamental, no es la que te haces tú, lamentablemente. La pregunta fundamental es mucho más profunda y fue la que el físico, matemático y filósofo Gottfried Leibnitz se hizo: “¿Por que hay algo en vez de no haber nada?”
Y a eso ni Leibnitz ni nadie ha encontrado aún respuesta.
Y yo dudo que alguna vez alguien la encuentre.
Hola LLaguno!
Te leo:
“La pregunta fundamental es: “¿Por qué hay algo en vez de no haber nada?”
Y a eso ni Leibnitz ni nadie ha encontrado aún respuesta.
Y yo dudo que alguna vez alguien la encuentre.”
NOTA: La preguntita es de M. Heidegger en 1935
“Warum est gibt Sein und nich Nichts”
…………………….
Sin embargo:
Yo la hube respondido varias veces en ATRIO con textos de Ortega y Gasset.
Planteada y contestada en “Unas lecciones de metafísica”
Dadas en la Universidad de Madrid en los años 1932/1933.
Ver Lección V:
“Pero -y aquí viene la tremebunda paradoja- …” (y sig.)
Concluyendo en la Lección VII:
“Antes descansábamos, nos sosteníamos sobre la tierra; pero cuando es lo que ahora no nos sostiene, no sabemos qué hacer con la tierra, a qué atenernos con respecto a ella. Y no sabemos aquello porque no sabemos esto. Por eso nos es cuestión. La cuestión es fundamentalmente nuestro hacer con ella, nuestra conducta, con la tierra. Pero para ello necesitamos asegurar nuestro atenimiento a ella: para ello es menester que ella tenga una conducta: un ser. Estamos desorientados ante la tierra porque eso es precisamente lo que no tiene y, por tanto, lo que hay que buscar. Ella, la tierra, no necesita tener ser; somos nosotros lo que necesitamos que lo tenga. ¿El ser de las cosas resultará que consiste en una necesidad del hombre?
Por eso se dispara la pregunta: ¿qué es la tierra?”
……………………
No eres el único que no se ha enterado de esto;
Que si hubieran enterado no andarían
dando tantas vueltas (en eso tenés toda la razón)
al estar “mal-parados” para ver bien.
¿Qué le vamos a hacer, no?
Chau!
Ciencia y Teología, como Razón y Fe no pueden ser antagonistas sino complementarias ya que proceden de una misma fuente que se encuentra en la naturaleza divina. Es la FE como don la que ilumina la razón natural para que pueda asentir a verdades trascendentes y eternas ya que de otra manera no seria posible. Dios obra no sólo en el acto de creer, sino en el querer creer..sin coacción sino por medio de una invitación en nuestra libertad..ya que podemos rechazar la gracia de la FE..podemos “no querer creer”.
La Ciencia experimental moderna solamente nos ha acercado a la Verdad trascendente ya que se puede descartar “el azar” en el orden de los aminoácidos de la cadena del genoma humano y en la afinación perfecta de todo el Universo y de los procesos vitales. Sin embargo, no compete a la Ciencia demostrar “a Dios” porque El no está sujeto a ninguna demostración humana y escapa toda experimentación un saludo cordialSantiago Hernández
Es verdad que la creencia no tiene por qué someterse a ninguna hipótesis, pero si hablamos aquí de hacer entrar en el tema a la ciencia, a esta sí le será no solo pertinente sino también obligado. Dicho esto me pregunto si lo que nos faculta humanamente son las creencias? Por mi parte he de responder rotundamente que no.
Las creencias en la historia han sido producto del pensamiento, pero el acto de pensar no es lo primario de la intelección humana, que como tal es lo que se da en ella lo que la faculta. Facultad no es poder sino dinamismo interno. Se trata de dinamismo interno no del potencial pensante que ha sido lo propio del racionalismo histórico…
Yo pienso que identificar el término “creencia” con el acto de pensar no siempre es afortunado. Al menos en lengua española.
Porque el término “pensar” incluye una serie de actos que no son necesariamente “intelectuales”, como “imaginar”, “recordar”, “creer” o “elucubrar”
Y es precisamente este último, uno de los que se usan demasiado en religión. Y no me gusta nada.
A fin de cuentas la RAE define “Creer” como “Tener algo por cierto sin conocerlo de manera directa o sin que esté comprobado o demostrado.”
Yo soy muy crítico con el intento de los materialistas ateos de encumbrar a la ciencia como la única foma de adquirir conocimiento; pero para poder ser así de crítico pienso que se debe ser iggual de crítico con el pensamiento antagónico al del materalismo ateo, aunque sea el mío.
Hay demasiada magia, supèrstición, y misterio en la religión. En ocasiones me parece que se lo ponemos demasiado fácil a los apologistas del ateísmo.
Por eso reivindico tanto una teología desvestida, desnuda, sin oropeles y humilde en sus planteamientos, que pueda reconocer en alguna ocasión que no conoce esto o aquello. Que no posee toda la verdad.
Algo parecido a la poesía que reivindicaba Juan Ramón.
Es cierto, Antonio, que el materialismo ha conducido a posicionarse al lado del ateísmo, pero si a la ciencia hay que encumbrarla, es decir, ensalzarla por algo, no es por su investigación de la materia, sino sobre todo y últimamente, de lo que emerge de ella. La materia no se opone al espíritu. Ahora bien, tal nombre se le ha asignado con anterioridad a lo que de por sí le es real a la materia misma, es decir, de aquello que le posibilita al hecho de su propio dinamismo.
Entre otras cosas, Maria Luisa, porque no teemos ni idea de lo que es la materia.
José Edelstein, físico y divulgador argentino, afirma que: “La realidad objetiva, a nivel microscópico, no existe. y estar hechos de algo que no existe es muy extraño”
Y más famoso que Edelstein, Max Planck aseguró: “La materia no existe como tal. Toda materia surge y persiste debido sólo a una fuerza que causa que las partículas atómicas (Que no siempre son materia, esto lo añado yo) vibren en el más diminuto de los sitemas solares: el átomo”.
Yo añado que ser materialista, es decir fundamentar todo conocimeinto en aquello que tiene que ver con la materia, que es algo que no existe, no es sólo muy extraño. Es absurdo.
O quizás hay quién considera que eres más o menos inteligente , o más o menos culto si crees en un tipo de Dios u otro. En unos o en varios o en muchos o en ninguno?Porque esa es otra . Qué es eso que dicen ser o no ser inteligente? Porque de culto o no culto tengo una idea, y a veces la confundo con postureo. No será. Pero se me mezclan los conceptos. Y es que… Ya saben…
Yo creo que no tengo ningún neurótico empeño en apoyar en la ciencia mi religión, personal, como dice Isidoro
Mi artículo solo refleja el hecho constatable de que, durante 400 años, la ciencia no contó con Dios Pero desde comienzos del siglo XX, muchos científicos se han orientado hacia teísmo, Es decir, la creencia en un Dios creador. Eso es un hecho y si El futuro en la ciencia va a ir en esa línea, ya se verá
Carlos comparto lo que dices, pero me gustaría expresar a la luz de tu artículo mi concepción personal al respecto:
Partiendo del principio antropológico de que el ser humano, antes que “homo sapiens es credens homo”, pues la creencia es la facultad humana primordial y por tanto anterior a la de la razón, y por supuesto a la de la razón científica, no se ajusta ni se supedita a que tenga que someterse a hipótesis que posteriormente hayan que ser demostradas por el juez de la razón, al ser la facultad más próxima a su principio de realidad, la libertad, y ésta no admite hipótesis; me atrevo a afirmar lo siguiente, sin menoscabo de que cada uno pueda a partir de sus propias creencias opinar de forma muy diferente, pues la libertad nos faculta a todos a ello, eso sí bajo nuestra responsabilidad, pues no hay una sin la otra. Este es nuestro verdadero drama, a la vez que nuestra verdadera grandeza.
El ser humano que busca en la profundidad del ser “de Dios”, el origen, la razón, la ley, el desarrollo, el significado y el fin del drama de su historia, es quien aprecia y ve en lo “histórico” y no en la ciencia, la manifestación de lo metafísico, a lo que la propia razón científica no deja de apuntarnos constantemente y cada vez con más insistencia, que:
La historia del ser humano comienza en el seno de la divinidad y es por eso que, solo en ese Dios de la Historia se puede comprender el tiempo y la eternidad, el principio y el fin, al ser la propia eternidad la que entra con su presencia en el tiempo, para que éste último desemboque en la deseada eternidad humana. El ser humano concreto en su realidad singular con independencia de su tiempo existencial, participa de dicha singularidad Tiempo-Eternidad. La historia del ser humano es la historia del drama divino-humano.
D. Bonhoeffer así lo afirmaba ente el drama de las ejecuciones en los campos de exterminio nazis ante la pregunta de dónde estaba Dios en ese momento, afirmando que precisamente estaba en ese ser que estaban ejecutando, pues “solo un Dios que se con-sufre en su creatura puede ayudarle. a resistir y dotar de sentido a todo sufrimiento. Esta frase refleja su creencia de que Dios está presente en el sufrimiento humano y que su solidaridad con el dolor de la humanidad es una constante a lo largo de toda la historia como fuente de esperanza consuelo y garantía de eternidad.
Pues hace cincuenta comentarios que me perdí.
De qué dios , Dios, están hablando? Del nuestro, el de los cristianos? No entiendo.Qué tiene que ver la ciencia aquí? Piensen un momento en el credo católico. Qué tiene que ver la Ciencia con esto?Las creencias juegan en otro campo.No entiendo.
Muy interesante tu articulo, Carlos. Me ha hecho recordar a algún otro autor .Antonio FernandeZ Rañada, físico español muy notable, que reunió en un libro a muchos científicos, creyentes y no creyentes, explicando sus resultados científicos y las razones de su fé o no fe. Alguno de sus biografiados indica la belleza de un modelo matemático o de ciertos hallazgos. La ciencia tiene su razón de ser propia y es independiente de creer en Dios o no. La entiendo como la explicación de los fenómenos del mundo, y la demostración de cuáles hipotesis posibles son verdad y cuales no. El científico puede desentrañar cómo es lo que Dios hizo, suponiendo que crea en Dios Creador, pero para lo que nunca va a tener respuesta es para dar a conocer ¿POR QUÉ LO HIZO?
Interesante tu comentario Lola. Mucho me alegra saber de ti.
El por qué, efectivamente, parece superar la razón y la ciencia.
A mi juicio, el libro de Fernández Rañada ( “60 preguntas sobre ciencia y fe respondidas por 26 profesores de universidad”, Estella Maris. Aún se puede encontrar en Amazon de segunda mano, aunque son 30 pavos. En librerías está agotado) es mejor que el de los autores franceses que presenta Carlos.
Es más plural. Abarca más disciplinas. Menos dirigido. Y no tiene una “solución preestablecida”, llámese “Cristianismo” o “Federico”. Todos sus autores son de habla hispana, la mayoría de universidades españolas y alguna hispano americana.
Lo recominedo vehementemente.
Quizás, alguno de sus artículos son menos divulgativos y bastante más difíciles de entender para el general de los lectores, pero es un fielato que hay que pasar cuando en vez de un autor (Dos en el caso de los franceses) manejas 26 que es lo que hace Fernández Rañada.
Hay otro libro de él (Desgraciadamente ya falleció. No va a publicar más): “Los científcos y Dios” (Está en Trotta) que es comlementario al anterior y que es más fácil de leer porque lo hace desde una perspectiva de la historia de los descubrimientos científicos.
Muy recomendable.
USO _ Gracias!
1- EL HOMBRE, a diferencia del animal, no es nunca sólo un SUCESOR,
– sino que es siempre, además, un HEREDERO.
Un supuesto “primer hombre” no es heredero de nada,
– por eso es, en rigor, un ente imaginario que nunca ha existido.
– Ser de verdad el “primer hombre” es cosa indiscernible,
– indiferenciable de ser el “último orangután”
2- Desde hace más de cien años ninguna filosofía ha entrado en colisión con la fe religiosa.
– La filosofía habla de cosas distintas de las que habla la teología.
3- LA TEO-LOGÍA es hablar de Dios y desde Dios, esto es,
– desde la palabra divina que es revelación, apokalypsis,
– sus conceptos son pensados y entendidos en función de esa palabra.
4- A FILOSOFÍA habla de lo que es y de lo que no es,
– conforme a los criterios de la razón humana
– y es lo contrario que la apocalipsis;
– es teoría, por tanto, visión y evidencia.
5- El término «naturaleza del hombre» significa en teología
– cosa muy distinta que en filosofía.
– En teología ese término significa lo que importa a la posibilidad de salvación.
6- La religión cristiana es una DOCTRINA DE SALVACIÓN
– La filosofía una TEORÍA DE PROBLEMAS.
– En la religión propiamente tal no hay PROBLEMAS,
– sino que toda ella quiere ser, y ser sólo, SOLUCIÓN.
– La teoría, en cambio, es ante todo y sobre todo, presencia de problemas,
– choque de la mente con ellos, su manipulación y tratamiento;
– Más aun, cuando la teoría lo es en su sentido máximo como acontece con LA FILOSOFÍA,
– ni siquiera es forzoso para que sea lo que tiene que ser el lograr su solución,
– le basta con ser conciencia aguda de problemas ineludibles.
– La fuerza de la filosofía, a diferencia de los otros conocimientos,
– por ejemplo, las ciencias particulares,
– no está en el acierto de sus soluciones,
– sino en la inevitabilidad de sus problemas.
7- LA TEOLOGÍA en cuanto teología
– no tiene medios para hacerse una idea de cuál es la naturaleza del hombre
– y por eso se limita a definir lo que llama status naturae humanae,
– en el cual lo natural del hombre incluye ya
– los dones sobrenaturales que hacen al hombre posible salvarse,
– y los dones preternaturales que antes de pecar gozó.
8- PARA LA FILOSOFÍA
– la posibilidad más constitutiva del hombre
– es precisamente el que puede morir corporalmente
– y de hecho ha muerto siempre.
– El primer hombre (antes del pecado) que era INMORTAL según el dogma,
– es evidentemente un personaje por completo distinto
– del primer hombre que se parecía tanto a un orangután,
– porque este primer hombre era desde luego MORTAL.
…………………………….
Oscar,
es solo un consejo personal. Síguelo si quieres.
Todos tenemos el mismo problema que tú a la hora de meter comentarios pero no contestamos a otros con cosas que no tienen nada que ver con lo que ellos escribieron.
Y a la hora de mantener diálogos interesantes para otros comentaristas o colaboradores resulta molesto (Al menos para mi) ver entre medias un comentario que no tiene nada que ver con lo anterior sólo para ahorrarte la molestia de esperar un poquito de tiempo a que Antonio pueda autorizar el comentario.
A mi al menos me resulta molesto, sin acritud.
Yo lo que hago es poner tres puntos (Antono ya lo sabe) y cuando los autoriza Antonio me contesto a mi mismo y no incordio a los diálogos de los demás. Así no hago trabajar a Antonio demasiado y dejo bien editadas mis colaboraciones. Se trata de pensar un poco en los demás.
Por supuesto eres libre de aceptar o simplemente pasar de mi consejo. No obstante si decides seguir con tu costumbre te rogaré que en mis comentarios (Que ya se que hago demasiados) respondas siempre que tengas algo que decir sobre ellos y si no, lo hagas con otros compañeros que seguramente serán menos tiquismiquis que yo.
Es lo mismo que cuando aprovechas el artículo que ha escrito otro para meter una parrafada sobre algo que no tiene nada que ver. No se con que objeto porque estoy seguro que el boss no tiene ningún inconveniente en publicarte tus artículos como a los demas y así, quien quiera, puede establecer diálogo contigo de forma coherente.
Me resulta muy extraño haber leído un artículo, no se, sobre Darwing y el origen de las especies que lo mismo me interesa mucho y encontrar ahí un comentario larguísimo sobre la situación de los obreros en Burkina Fasso, que seguro que es muy interesante y merece ser publicado y leído; pero que no tiene nada que ver con lo anterior que otra persona se molestó en estudiar, publicar, pasar por el lógico control de la dirección de la página y ser publicado como es debido, con nombre y apellidos.
Llámame paranóico si quieres pero ¿Por que no publicas tus cosas como todos los demás?
Sin intención de molestarte y te pido disculpas si lo hice..
Hola Llaguno!
1- Sobre el USO del RESPONDER:
Tienes razón.
Pensé que era menos laburo para Duato;
obligando a que ‘autorice’ sabiendo que yo ‘espero’.
2- Sobre el CONTENIDO del Comentario:
¿Dónde “no viene al caso”?
a) el Primero:
Favor de leer el item 6 trata del enfronte se Ciencia (específicamente la FILOSOFÍA) de Dios (TEOLOGÍA):
6- La religión cristiana es una DOCTRINA DE SALVACIÓN
– La filosofía una TEORÍA DE PROBLEMAS.
– En la religión propiamente tal no hay PROBLEMAS,
– sino que toda ella quiere ser, y ser sólo, SOLUCIÓN.
– La teoría, en cambio, es ante todo y sobre todo, presencia de problemas,
– choque de la mente con ellos, su manipulación y tratamiento;
– Más aun, cuando la teoría lo es en su sentido máximo como acontece con LA FILOSOFÍA,
– ni siquiera es forzoso para que sea lo que tiene que ser el lograr su solución,
– le basta con ser conciencia aguda de problemas ineludibles.
– La fuerza de la filosofía, a diferencia de los otros conocimientos,
– por ejemplo, las ciencias particulares,
– no está en el acierto de sus soluciones,
– sino en la inevitabilidad de sus problemas.
……………………….
b) el Segundo:
Trata específicamente del Título de Artículo
respondido por la Inteligencia Artificial (IA)
……………………….
Reitero el 1- Sobre el USO del RESPONDER:
TIENES RAZÓN.
……………………….
Ya ves cómo sufrimos la ARRUGA del ATRIO de A.D.
RESOUESTA de la IA a “LA CIENCIA Y DIOS”:
……………………….
La relación entre ciencia y Dios es un tema complejo y multifacético que ha sido debatido por siglos.
Algunas perspectivas incluyen:
1- Ciencia y fe como complementarias
– Algunos científicos creen que la ciencia y la fe son compatibles y se complementan mutuamente.
– La ciencia explica los mecanismos del universo, mientras que la fe aborda preguntas sobre el propósito y el significado.
2- Ciencia y ateísmo
– Otros argumentan que la ciencia y la fe son incompatibles y que la evidencia científica contradice la existencia de Dios.
– El ateísmo científico sostiene que la ciencia es suficiente para explicar el universo sin necesidad de una deidad.
3- Diseño inteligente vs. evolución
– El debate sobre el diseño inteligente y la evolución es un ejemplo de la tensión entre ciencia y fe.
– Algunos argumentan que la complejidad del universo sugiere un diseñador inteligente, mientras que otros defienden la teoría de la evolución.
4- Perspectivas filosóficas
– El existencialismo y el positivismo lógico cuestionan la idea de un Dios objetivo.
– La filosofía de la ciencia explora la relación entre la ciencia y la verdad.
5- Científicos creyentes
– Algunos científicos prominentes, como Isaac Newton y Galileo Galilei, han sido creyentes.
– Otros, como Albert Einstein y Stephen Hawking, han sido ateos o agnósticos.
La relación entre ciencia y Dios sigue siendo un tema de debate y reflexión. ¿Cuál es tu perspectiva sobre este tema?
…………………………..
RESPUESTA POBRE ¿NO?
Recomiendo releer cosas ya publicadas.. que creo van más allá..https://www.atrio.org/2024/02/para-poder-tender-puentes-entre-ciencia-y-religion/
Corre por ahí, una frase muy inteligente, sobre el tema de las relaciones amorosas entre hombres y mujeres en la actualidad: “Ellos buscan mujeres que ya no existen, y ellas buscan hombres que todavía no existen”.
Y esa lucidez, se puede aplicar de forma similar a las diversas y contrapuestas maneras, o perspectivas, con que los humanos buscan la trascendencia hoy en día: “Unos siguen colocando la trascendencia que “sienten”, en un mundo de las ideas que ya no existe, mientras otros, la colocan en un mundo que todavía no existe”.
Eso es lo que tienen los momentos históricos de fuerte transición, como el señalado por Flaubert, cuando dijo: “Cuando los dioses ya no existían y Cristo no había aparecido aún, hubo un momento único, desde Cicerón hasta Marco Aurelio, en el que el hombre estuvo solo”.
Ahora, estamos en un momento similar, en el que en medio de un racionalismo moderno, que entroniza la razón, y la voluntad consciente, (pleno libre albedrío), se intenta justificar la creencia religiosa, que es sobre todo fruto de un fuerte instinto profundo involuntario interior, un instinto de trascendencia, justificándola con la razón que se supone está representada por la Ciencia.
Como se considera que la razón es la monopolizadora de la actividad mental humana que nos hace humanos, se intenta que esta de el visto bueno a la fe religiosa.
Se es ciego a la realidad de que tan humana y digna es la razón en el ser humano, como los instintos superiores espirituales, que forman parte del software comportamental y cognitivo, de los que el ser humano dispone en su naturaleza genética, y que le hace ser lo que en realidad es: humano.
Y por ello ese neurótico empeño en apoyar en la Ciencia, la creencia religiosa personal.
Pero eso es un error epistemológico. El otro día en un notario, oía hablar a un oficial, de la prueba demoníaca, imposible, que es demostrar que algo no ha sucedido.
Pues algo similar, sucede con la Ciencia y Dios. Ante lo desconocido, ante el Misterio, la Ciencia no podrá demostrar nunca que Dios no existe, porque la Ciencia solo puede demostrar, (y con dificultad), la realidad conocible.
“Dios” por definición, no es parte del Universo, y por ello, si existe, está fuera del terreno de juego de la razón, con lo que todo intento de justificarlo racionalmente está fuera de juego igualmente.
La única salida “racional” a esta contradicción interna, es reconocer la realidad de que el ser humano además de la razón, y mucho mas determinantemente que ella, dispone de un núcleo mental, inconsciente y profundo, que marca y dirige nuestra vida. Cuando se ignora la realidad, tarde o temprano está aparece vengándose.
Esta idea, aunque parezca mentira, es la idea seminal de la nueva época que se avecina, y que seguimos ignorando.
Como decía el psiquiatra, Enrique Eskenazi: “Cada momento histórico tiene su verdad implícita, y el papel de la filosofía es hacer explícita esa verdad. La filosofía no es sino el espíritu de su tiempo expresado en conceptos”.
Y Heidegger, remata: “Pensar es limitarse a buscar esa única idea que un día permanecerá como una estrella en el cielo del mundo”.
Y en cada era cultural de la humanidad, brilla en el cielo de nuestras mentes, una idea axial. Ignorarla es escupir al cielo.
Isidoro,
Lo que admiro de ti es ese convencimiento que tienes completamente injustificado, a mi juicio, de que ese mundo que no existe, llegará algún día a existir.
Hay que tener mucha fe para creer en ello y yo, lamentablemente para mi con toda probabilidad, en ese sentido soy fuertemente escéptico.
Eso no quiere decir que no sea consciente de que todo cambia y de que al mundo de hoy no es igual, no sólo al de mañana, ni siquiera al del próximo minuto.
Pero si bien tengo claro que ese mundo constantemente cambiante es completamente cierto y real (Que son cosas distintas. Uno partido por cero es infinito, es cierto; pero no es real), tengo la misma certeza de que ni tú ni yo tenemos la más mínima idea de como será ese mundo futuro al que llegaremos gracias a esos cambios. Si es que llegamos.
Amigo Antonio, parece ser que fue Bergson el que dijo que “la filosofía de cada siglo, es el sentido común del siglo siguiente”.
Yo no estoy anunciando nada extraño. Simplificando se puede decir, que la próxima cultura será la cultura que admita e incluya, el mundo subconsciente en la vida humana, destronando a la razón, como único y principal instrumento mental humano, (que es lo característico de la Modernidad racionalista).
Y eso va calando poco a poco, pero imparablemente, (no se pueden ignorar ciento veinticinco años de nueva Psicología).
(El otro día comentaba, que me había encontrado un libro de espiritualidad de una monja carmelita, (Paloma Marchesi Ullastres), donde traducía la espiritualidad teresiana, a la nueva filosofía profunda del inconsciente.
Y ese es el futuro imparable del mundo moderno. A pesar del mucho dinero que la I-C. invierte y se gasta, (¡será por dinero!), por cada iglesia nueva que se abre, abren 10-20 locales de yoga, y de crecimiento personal laico vario, a pesar de que todo cuando se inicia se mezcla inevitablemente con mucha morralla).
No me convence la tesis de Stephen Meyer, los avances científicos se hayan dado en el pasado o los que puedan darse en el futuro, en tanto que científicos estos avances ni han ido ni podrán ir nunca en dirección al teísmo, a menos que se confunda lo científico con lo seudocientífico-
-Lo que en el artículo se lee más abajo donde dice eso de dejar un margen para la decisión personal, me parece correcto, muy correcto, pero esto ha de ser siempre al final de la investigación, no hacer que esta idea la dirija. Lo prudente es reconocer que la realidad es compleja eso sí, pero de ahí a decir que los nuevos aportes de la biología, de la física, de las matemáticas, ect., conducen a Dios es situarnos fuera de la realidad del mundo en el que estamos, de ahí que, precisamente por estar en él la podamos ir “probando” en gerundio. Lo probatorio es lo físico y real de lo señalado por las teorías, si no probaran también ellos, los científicos, la realidad que tienen entre manos, nunca la ciencia hubiera llegado hasta donde ha llegado y así en el futuro.
Lo que no me convence a mi (Sólo de mi puedo hablar) es que tú declares, Maria Luisa, sin ninguna prueba que lo sustente que “estos avances ni han ido ni podrán ir nunca en dirección al teísmo, a menos que se confunda lo científico con lo seudocientífico- ” (Espero que no estes llamando “pseudocientíficos” a genios como Planck, Heisemberg, Lemaitre, Schroedinger, Flew, etc… Verás que no menciono a Einstein. No está nada clara su posición y dio más bandazos que los precios del aceite de oliva)
Yo he leído el libro que reseña Carlos Barberá y aunque no soy un físico teórico o un biólogo molecular, tengo la suficiente formación científico técnica para entender la mayoría de lo que en ese libro se indica. Los autores son muy cuidadosos y aunque se les nota mucho su interés en refendar, no ya una visión teista de Dios sino cristiana, son muy conscientes de los límites de la ciencia a la hora de poder demostrar algo que está fuera del ámbito del método científico.
Lo que pasa es que científicos ateos y creyentes más o menos ilustrados científicamente no jugamos con las mismas reglas. Ellos pretenden exponer como cientificas, teorías de científicos, que no es que no hayan sido demostradas, es que no se van a poder demostrar, no existe manera experimental de hacerlo.
¿Como interactúas con las 16 dimensiones, algunas de ellas infinitesimales ya sea en el tiempo o en el espacio, y en un espacio que no se da en la naturaleza a día de hoy, que necesitan la teoría de cuerdas, la teoría de branas o la pretenciosamente llamada, teoría del Todo?
Y si no se puede falsar una teoría, no cumple la condición de Popper y por lo tanto simlemente no es científica. Además hay que tener mucha fe no ya para creerla, para entenderla. mucha más que para tratr de aceptar el misterio de la Santísima Trinidad.
El materialismo moderno, ha tratado de desacreditar de forma muy vehemente (Violénta incluso. Hay todo un capítulo dedicado a quienes han sido incluso torturados y asesinados por defender teorías científicas coherentes con la idea de Dios, en especial en la antigua Unión Soviética y paises satélites) a cualquier teoría que acercara la ciencia a una inteligencia primordial creadora, sea o no teísta.
El debate sobre teísmo o no teísmo es algo que se ha establecido en ATRIO de forma permanente, pero no es eso sobre lo que reflexionan los autores.
Aunque dedican esfuerzos a reconfortarse a si mismos estableciendo una “coherencia” de la visión cristiana con la ciencia (Es lo más discutible del libro), eso no es lo realmente decisivo que aporta el trabajo.
Lo que aporta es la afirmación, que yo suscribo al 100%, de que la “Hipótesis Dios” es compatible con el estado de la ciencia a día de hoy, que muchas de las teorías que se le oponen, o son falacias (Algunas de ellas lamentables como la de Stepehn Hawking afirmando que el universo puede surgir espontáneamente de una fluctuación de “la nada”; cuando Hawking era perfectamente conocedor de que el vacío cuántico, que es lo que puede fluctuar, son dos cosas muy diferentes y que, en nuestro Universo, de la nada sólo puede salir nada. De ahí que esas posiciones hicieran que nadie en la Comunidad Científica reconociera a Hawking méritos para el premio Nobel; por muchos méritos que tuvieran su enorme voluntad de superación y algunos de sus descubrimientos como la Radiación Hawking en el horizonte se sucesos de un agujero negro); o son conjuntos de creencias indemostrables y por lo tanto no son científicas.
Es decir que para muchas de ellas (la mayoría) hay que tener aún más fe que para creer en Dios.
Ahí es donde entra el discernmiento personal. Una vez que tú puedes analizar la propuesta deísta (Es decir la existencia de Dios creador, no entro yo en si es personal o no) y la atea y discernir de forma intelectual, tomas tu propia decisión. Libre.
Y a ser posible sin postulados previos a cumplir, que no hayan sido justificados.
La mayoría de las personas que opinan sobre esto, tienen pre establecidas algunas de las soluciones “que es imprescindible que resulten de tal discernimiento” y por ello su reflexión está dirigida, y contaminada.
Eso es muy facil de ver en quienes somos creyentes (En especial en quienes no somos versados en Ciencia moderna), pero ocurre exactamente igual en los ateos materialistas.
Lo que si demuestran los autores del libro (Y hay pruebas matemáticas y físicas que lo confirman, es decir es algo “demostrado y/o comprobado”) es que es posible que la religión, la fe, no tenga todas las respuestas; pero es seguro que la ciencia no las tiene, porque ya se ha demostrado que es imposible para la ciencia abarcar todo el conocimiento conocido y mucho menos el por conocer.
Es un debate que me apasiona y que (Aunque me reconozco subjetivo y por tanto no puedo ocultar que tengo mis propios intereses) trato de seguir con la mayor neutralidad posible.
Pero tengo que reconocer, que si desvestimos de algunas exageraciones, ciertas arbitrariedades y esa tendencia a arrimar el ascua a su sardina que se nota muy facilmente en los autores; lo que queda camina hacia esa conclusión: La “Hipotesis DIos” es compatible con el concimiento científico que a día de hoy tenemos y además sabemos que hay ciertas cosas en las que la ciencia no va a poder dar luz y taquígrafos.
A partir de ahí cada quien que piense lo que quiera, aunque hace unos cuantos años, sobre este asunto, Blaise Pascal ya hizo una “apuesta” muy inteligente.
¡Ah!, si hablamos de hipótesis, entonces sí, Antonio, a eso me referí ayer, cuando dije aquello de que si acaso al final de la investigación pueda uno personalmente posicionarse. Es decir, después del largo proceso, pero no partiendo ya de una tesis concebida que lo dirigiera.
El tema de la complejidad nos sitúa frente a ese problema. Fue a partir del principio de indeterminación y sobre todo de la física cuántica que pueda hablarse de causalidad, pero no de causa y ello porque el resultado de una acción causal puede tener más propiedades que las linealmente procedentes de la causa como bien expresó el teorema de la incompletitud de Gödel. Lo revolucionario de este teorema fue que el resultado del mismo evidenció albergar más propiedades que las propias de la postulación, por lo que deja entrever el carácter de realidad, es decir, la anterioridad de lo real por encima de los axiomas. En consecuencia, es esta obertura que ofrece la realidad misma la que al final plantea, posibilita el hecho de optar, no una idea preestablecida…
Estaría bonico que por el hecho de dedicar tu vida a eso que llaman ciencia no pudieses creer en Dios. Menuda locura.Y, es cierto. A estas alturas nos achicamos ante la grandeza del universo. Por lo visto nos creíamos que lo habíamos domesticado. Tremendo.Y recuerdo que la diversidad de vida en la tierra es alucinante. No únicamente existimos nosotros. La vida es un puro milagro del universo.La vida. La nuestra, la de las jirafas, ballenas, monos en general, perros, gatos, horribles cucarachas, pájaros, mosquitos, ratas, dinosaurios, avispas, abejas, corderos, vacas, sardinas, boquerones, hongos, bacterias…a los virus no los voy a incluir porque no tengo claro, según la teoría que conozco de la vida, si son o no seres vivos, no tienen ni siquiera una célula procariota. Así que lo decidan los que hacen las clasificaciones varias.
en qué Dios se cree? Esa es otra buena pregunta.A mí me gusta el de Einstein.
Es una de las más famosas reflexiones de Lebnitz: “Lo realmente increible es que exista algo en vez de nada”