Empezaré con una etimología ficticia. A, el alfa griega, significa privación. Y “mors”, del latín, muerte. Por tanto, donde no hay muerte, hay vida: A-MOR. Esta palabra ha movido tierras, ha producido tormentas. Podríamos decir o afirmar que el ser humano además de ser “homo sapiens”, también es “homo demens”. Hay que conjugar las […]
Comentarios recientes