Ayer por la tarde se conoció la sentencia del Tribunal Constitucional, rechazando las alegaciones que hace siete años había presentado el Partido Popular contra el matrimonio homesual. Hay que reconocer el acierto de Zapatero en esta introducción de la igualdad de género en la legislación matrimonial y familiar que está afianzándose y extendiéndose en el mundo. Y en Estados Unidos se ha rechazado una vuelta de los republicanos con piel de oveja, aprovechando una crisis que está quemando a tantos líderes.
Ha sido una noche tensa. Se decidía mucho, no sólo para Estados Unidos sino para todo el mundo. La muy posible victoria del multimillonario obispo mormón Romney y de su católico ultraconservador vicepresidente Ryan, candidatura por la que se inclinaba la mayoría de la jerarquía católica, era una verdadera pesadilla. La victoria de Obama, aunque sea tan diferente de la de hace 4 años, aleja la pesadilla y abre una rendija a la esperanza.
Y de esperanza ha hablado en su discurso a las siete de la mañana (la uno en la hora de Chicago:
Esta noche, pese a todos los tiempos duros por los que hemos pasado, pese a todas las frustraciones de Washington, nunca he tenido tantas esperanzas sobre nuestro futuro, nunca he tenido tantas esperanzas para América. Y os pido que mantengáis esa esperanza.
(…)
Creo que podemos mantener la promesa de nuestros fundadores, la idea de que si estás dispuesto a trabajar duro, no importa quién eres o de dónde vienes o qué aspecto tengas o a quién amas. No importa si eres negro o blanco, hispano, asiático o nativo americano; joven o viejo; rico o pobre: discapacitados o no; gay o heterosexual, puedes vivir en América si estás dispuesto a intentarlo.
Hay una referencia en el discurso a la igualdad para personas con tendencias y opciones sexuales diferentes. En dos de los estados se ha aprobado la introducción del matrimonio homosexual.
- ¿Qué opinamos sobre la sentencia del Constitucional?
- Sin la exaltación que despertó hace cuatroaños, ¿cómo hemos vivido la reelección de Obama?
Sin embargo, Manuel, como dicen ciertos anuncios en algunas obras y películas actuales “cualquier semejanza con personajes pasados, presentes o futuros es pura coincidencia” puesto que el cristianismo no es un mito al estilo sumerio, egipcio o zoroástricos…Estos se basaban en fantasías con cierta base de realidad pero a diferencia de ellos el cristianismo no constituye en si mismo un mito sino que se basa en una una realidad histórica que es la persona de Cristo atestiguada no solo por los evangelios y las cartas apostólicas del primer siglo sino por autores judíos y paganos de aquella época.
A diferencia de Buda, Confucio etc., Jesus no vino al mundo en una época de nublados históricos. Jesucristo nace en plena historia, bajo Augusto, y muere bajo Tiberio. Los Evangelios que nos hablan de la vida de Jesus se escriben en la lengua internacional de su tiempo, la lengua del pueblo y de los sabios, que era el griego. La humanidad vive entonces uno de los periodos de mas alta cultura filófica y literaria. Alejandro habia conquistado el mundo para unificarlo. La cultura y la civilizacion griega habia corrido a todo el oriente.Palestina, la patria de Jesus no era un rincon aislado del mundo civilizado. Era un conglomerado de culturas. Por eso Pilato escribio el titulo conque justificaba la crucifixión en las tres lenguas principales de Israel: griego, latin y arameo. Cristo vive en plena historia y en plena civilizacion y muerte blanco de las miradas de todos los pueblos y raza. Por eso el mito no puede aplicarse aquí.
Por otro lado, no se puede idealizar ni mitificar a un personaje mientras viven los que conocieron sus facciones y lineas vivas. Los milagros de Jesus fueron públicos, se concretan en la narracion muchas circunstancias como las ciudades de Corozain, Betsaida, Cafarnaún, Betania, Nain Jericó. etc. Hasta la casa misma de Simon Pedro se designa como lugar de una curacion instantanea. No se pueden inventar tantas circunstancias MIENTRAS VIVEN LOS TESTIGOS. Los que conocieron a Jesus, a su madre y a sus amigos viven en el siglo I y algunos llegan hasta el siglo II. Los evangelios se escriben en vida de los que conocieron a Jesus y a su familia y por supuesto no iban a permitir la conversion de un personaje historico en un burdo mito rodeado de mentiras. Es mas, todos los apostoles murieron defendiendo la misma verdad que se nos ha transmitido por la Iglesia hasta el siglo XXI. Cuando leemos sobre Cristo en el evangelio la impresion de veracidad salta a la vista. Ni la critica externa, ni la interna han podido destruir la fuerza que tiene la tradicion oral y escrita de la Iglesia de Cristo. Esto prevalece muy actual hasta en el presente siglo
un saludo cordial de Santiago Hernández
la historia parece que se va entendiendo a medida que se estudia. la sabiduria comparada nos habla que ya en la antiguedad los nacimientos de hijos de los dioses engendrados en humanas eran frecuentes en egipto (ISIS) en grecia (DANAE), no fueron cubiertas por la sombra de Shaday como Maria, sino por algo mas poetico como la lluvia de oro.
en la edad dorada los dioses vivian con los humanos, se engendraron semidioses, heroes y un sinfin de poderes energeticos de luz y de sombras que han formado la mitologia teologica que nos llega muy adaptada hasta hoy
ahora bien el segundo nacimiento en la luz solo se podria dar en ese nolugar-notiempo, donde lo divino vive en lo humano es decir el alma, este nacimiento en la luz de la verdad encarna en un alma pura ,virgen ,inmaculada, carente de toda contradiccion y sombra de mentira. torre de marfil. torre de david. domus aurea. arca de la alianza. rosa de jerico. estrella de la mañana (venus)….
les invito a que lean los clasicos griegos y los mitos sumerios, egipcios, zoroastricos… seguro que les sorprendera
Contra lo que comunmente se podría creer hay casos, documentados, en la literatura medica mundial, de partos de vírgenes que llegaron al salón con su himen intacto. Y porque esta membrana es usualmente frágil no impide el parto, ya que se desgarra facilmente. Por tanto, no hay necesidad de ninguna intervención quirugica mayor.
Por tanto, no es imposible el relato de Lucas del “nacimiento virginal”. Esta virginidad, segun Tomas de Aquino empieza por la tendencia y el deseo de Maria hacia una total entrega de ella a Dios. Por eso se afirma -mas que por su integridad fisica- que siempre fue virgen. Por otro lado, en el caso de ciertos animales hay division del ovulo sin intervencion del espermatozoide como en el caso de la partenogénesis que implica solamente la division de las células. Este no es propiamete el caso que nos ocupa al hablar del caso excepcional de Jesus. Pero al aceptar un milagro esto no implica en ningun momento que Dios viole ex-profeso las leyes naturales. En el teísmo esto no constituye un sistema absolutamente cerrado. Puesto que al añadir o sustituir o cambiar el “modo” de como se realiza la fecundacion, EL que es tambien el autor de la ley, puede modificar sus condiciones, sin cambiar esencialmente su estructura y su proceso natural. En este caso particular a esta intervencion extraordinaria de Dios, siguio el embarazo natural de María con el consecuente nacimiento del bebé Jesus nueve meses despues. Una cosa es el que Dios no pueda hacer un círculo y un cuadrado al mismo tiempo lo que supone una clara contradiccion, y otra cosa que no pueda intervenir extraordinariamente en el mundo sin cambiar basicamente su obra. No existe el monismo de la sustancia pues ella no tiene propiedad alguna para crear la informacion. Esta provino “de fuera” puesto que Dios posee esta capacidad en “si mismo”. Es absurdo negar la intevencion del Creador en el mundo. Lo que es absurdo es que no actue nunca, ni en en manera alguna, pues si El es Creador tambien es El quien mantiene todo este “tinglado” andando y lo sostiene permanentemente. Por eso, no se puede negar completamente la existencia de algo que esta por encima de lo que ordinariamnete vemos y experimentamos.
saludos cordiales de Santiago Hernández
Nota:
La “centena” no, en todo caso ” la centena por la centena” (los cien).
Ana Rodrigo:
No puedo saber por qué Dios intervino en el nacimiento virginal de Jesús (el Cristo, el Señor…). Los estudiosos de estos asuntos podrán suponer o que en efecto Dios ha operado ese milagro, o que el nacimiento virginal de Jesús es un mito que reproduce mitos precedentes en que en efecto aparecen vírgenes de las que nacen personajes extraordinarios. Bueno, podría ser.
Sin embargo, mi credo personal sigue alineándose con el Credo de la Iglesia universal; se entiende que también en ese punto. Lo cual no me resulta “fácil”, ciertamente, porque conozco algunas de las objeciones que modernamente -y no tan modernamente- se barajan contra esa doctrina, tan católica y tan ortodoxa. Quiero suponer que digo amén a esa doctrina, por obra y gracia de la fe. Si bien admito que no faltarán quienes consideren que pronuncio ese amén por razones o imperativos bien distintos: falta de formación, miedo, aborregamiento, falta de autonomía personal…
En todo caso creo que se deberían respetar las creencias de los demás. Aunque ojo: no lo digo suponiendo que tú no las respetas, no, sino más bien pensando -disculpas por si alguien puede estimar que lo que hago es meter fuego yendo de un blog a otro…- en un conocido bloguero que ideológica y eclesialmente está en las antípodas de este portal de cristianos progresistas, y que siempre siempre se refiere a los teólogos disidentes con el apelativo nada cariñoso de dinosaurios o progresaurios. Yo no soy propiamente progresista -porque rechazo el aborto, la eutanasia, el divorcio, la práctica de la homosexualidad…-, pero de verdad que me molesta que de esa manera se trate de ridiculizar lo bueno que han aportado a la sociedad y a la Iglesia universal todos esos dinosaurios y progresaurios. Porque aun discrepando yo mismo de no poco de lo que los citados proponen y defienden, estoy convencido de que no todo lo que han pensado, hecho y propuesto para la sociedad y la Iglesia universal, es malo sin remedio.
Y ya doy por acabada mi participación en este hilo, que ya sobrepasa con creces la centena de colaboraciones. No sin antes precisar que debí referirme, en uno de mis comentarios previos, a la gestación del dogma católico no solo en Nicea y Calcedonia, sino también en Éfeso, etcétera. En todos los Concilios ecuménicos de los siete primeros siglos, que son los comúnmente aceptados, con ciertas reservas no obstante, por la Iglesia católica romana y por las Iglesias ortodoxas.
EN REALIDAD no hubo un cambio sustancial al Credo al introducir el Filioque. No cambió la formula negativamente, ni tampoco en su esencia. Fue una formula mas explicativa sobre la procesiones divinas. Y asi se dice, en el, que el Espiritu Santo procede del Padre “y del Hijo”.Esta adición en el Concilio de Toledo (589) fue objetada por los Padres Griegos. Sin embargo, fue aceptada por ellos despues en el Concilio de Florencia (1438-1445) donde afirmaron AMBAS PARTES que la formula griega, como principio progresivo, que dice que el Espiritu Santo procede del Padre “a traves del Hijo” no difiere esencialmente de la latina que establece que el Espiritu procede del Padre “y del Hijo”. Pero DESPUES de firmar los documentos de aceptacion los griegos, por razones de orden político, se volvieron atras y se opusieron otra vez a la formula latina, tal y como se escribió. Cosa que desafortunadamente persiste hasta el dia de hoy.
En cuanto a los misterios, por supuesto que existen. Pero al querer suprimir al “primer misterio”, al fundamento principal del Universo, a Dios, y a su Revelacion en Jesucristo, todo se convierte aun en mas misterios y nosotros los humanos encontramos por todas partes, ni dentro ni fuera de nosotros mismos, sino insolubles misterios. Y como queremos suprimir a Dios, nos falta la teología y si nos falta, entonces falta la fe y por tanto se pierde por “asi decirlo” el alma de la humanidad. La razon humana autónoma no puede sostenerse por si misma. Esta limitada. No puede llegar a la comprenhensibilidad de esos misterios por si sola. Cae facilmente en una constante contradiccion y hasta en una desesperacion. La racionalidad de la fe no es contradictoria y no puede prescindir de Dios y de su amorosa Revelacion. Y por eso miles hay que han perdido el sentido de la vida y por supuesto el de la muerte. Sin embargo, nuestras esperanzas y nuestros deseos son infinitos. Estan ahi. Buscan el verdadero a sentido a nuestra presencia en este mundo. Y no se quieren acabar aqui. Pues hay algo siempre vivo en nuestro interior que no se sacia. Por eso el gran converso Agustin de Hipona decía la célebre frase: “”Hicístenos, Señor, para ti, y nuestro corazón no descansa mientra no descanse en Ti”
Un saludo cordial de Santiago Hernández
De acuerdo con Eloy, el cristianismo es una religión de la persona, de las personas, no del libro, por mucho que se repita.
Jesús no dejó nada escrito, como venimos diciendo reiteradamente, todo lo escrito sobre él, es interpretación. Y el mayor error de la Iglesia ha sido centrar la fe en una gigantesca argamasa de dogmas, en vez de priorizar una sola idea: quienes se diga seguidores de Jesús, que haga lo que él hizo, que siga su modo de vida: amor universal y sin cortapisas a quienes más necesitan de amor, empezando por los desahuciados de la sociedad, quienes sufren, quienes son más débiles. Esa es la fe, las obras.
Qué le importa a un sufriente si María fue virgen antes, durante y después del parto? ¿Para qué sirven tantos absurdos misterios? Para nada. La iglesia ha convertido la fe en una serie de creencias y de ritos, y se ha olvidado de lo más importante: las obras. ¿Y nosotros?
No quiero entrar en el debate ni en debates.
Pero, leyendo lo que aquí se dice, me hago preguntas que invito, a los que lo deseen, a consultarlas con la almohada; es decir a una reflexión callada e íntima de comprensión de una realidad compleja y misteriosa que es la vida humana y su relación con el misterio de lo trascendente.
¿Es el magisterio un ” lugar teológico vinculante”????
¿Qué es un “lugar teológico vinculante”????
¿Ha sido el Magisterio en la historia monolítico y unívoco?
¿No se enseñó durante muchos años la existencia del “limbo” que ahora se enseña que no existe?.
¿No se defendió, o, al menos, no se criticó suficientemente y se permitió, la esclavitud humana y la trata de esclavos hasta hace menos de 200 años por todo un mundo católico y cristiano?.
Si Dios todo lo hizo bueno, si lo que valora es dar de comer al hambriento y dar de beber al sediento, es decir la ayuda y amor entre las personas, cualesquiera que sean sus convicciones o su comportamiento, no va a querer y acoger amorosamente en su seno a todas las personas sean homosexuales o heterosexuales, blancos o negros .. etc. ?
¿Pues que hemos nosotros ( al menos yo) de andar preguntando o inquiriendo a nadie de otra cosa si no de preguntarnos si somos rectos en seguir nuestra propia conciencia y en dar de comer al hambriento, dar de beber al sediento y acoger a todos como hermanos y siendo conscientes de nuestras muchas deficiencias?.
Esta noche ya tengo para pensar…….
Luis . Henríquez, ¿qué te satisface más, creer en absurdos o buscar racionalizar tu fe? Acudir al misterio, para mí, es una autocastración mental, y eso no puede ser bueno en ningún caso. Jesús fue un ser humano, vivió de una manera determinada ajustada a unos valores que los evangelios dicen del reino de Dios, en contraposición a los valores del Imperio. Por eso lo mataron.
Como nos recordó el otro día Asun, todo lo que se escribió sobre él ya supuso una cierta o una total interpretación postpascual.
Por eso es tan importante leer cosas interesantes que ayuden a entender al Jesús histórico.
Si me permites, yo te recomendaría un libro muy fácil de entender que se titula El primer Pablo, de Marcus J. Borg y J. Dominic Crossan, Edt. Verbo Divino.
No es cierto que el credo no haya cambiado desde Nicea. Sí ha cambiado. Lo cambió un “filioque”. Y lo cambió tanto que partió la iglesia en dos: la ortodoxa y la hereje, es decir, la católica.
Ana Rodrigo:
Tú eres mucho más progresista que yo, que acaso puedo pasar por ser un regre, al menos para no pocos. Con todo, tratando de ir en la línea que tú propones va la reflexión que acabo, hace un par de horas, de subir al artículo o post de Atrio en que se comenta una reciente carta de los obispos chilenos.
Pero hete aquí que con tu perspicacia habitual pones el dedo en la llaga de una cuestión sobre la que, créetelo, yo he pensado a menudo. Y que incluso una vez intenté comunicarle en confesión al famoso cura déspota al que me he referido en este mismo post, con el resultado de ser ipso facto tratado por el susodicho con una súbita sobredosis de paternalismo despótico. Y la archisabida respuesta: “Para Dios no hay nada imposible. Rézale para que aumente tu fe” Y no hay más tutía.
Pero tú has puesto el dedo en la llaga: ¿Cuánto cuesta creer que en efecto Dios intervino milagrosamente, hace 2.000 años, para llevar la contraria -subvertir- al orden natural creado por Él mismo, y sin embargo no subvierte nunca el orden natural que provoca que haya terremotos ocasionadores de miles de víctimas inocentes.
Quizá mi fe católica es que es endeble, pero confieso también yo que me cuesta sangre, sudor y lágrimas creer que en efecto Dios hace 2.000 años modificó el orden natural con respecto al nacimiento de Jesús, hijo de María de Nazaret por obra y gracia del Espíritu Santo -solo Dios puede modificar algo que es naturalmente imposible, como es el hecho de ser madre y virgen a la vez, antes y durante y después del parto, etcétera-, y no modifica, como ya he dicho, nada del orden natural de la Creación que provoca toda clase de catástrofes naturales.
Tremendo misterio que solo puede iluminar la fe. O la contumacia en creer en lo absurdo, asegurarán otros. Pero para el caso de la Iglesia católica -y para la gran mayoría de las iglesias y confesiones cristianas-, es un asunto que aparece como verdad dogmática en el propio Credo: “Creo en Jesucristo, Nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, y nació de Santa María Virgen” (…).
Así que tus perplejidades las entiendo, al menos un poco, y las hago mías, siquiera un poco también. Pero no van a cambiar, nuestras perplejidades más o menos coincidentes, el curso de la fe, la esencia del Credo. Lleva siendo así, el Credo, desde siempre. O al menos dogmáticamente desde que se proclamó oficialmente el Credo tal y como lo conocemos hoy, luego de los concilios de Nicea y de Calcedonia.
Los problemas que yo veo al inmovilismo cristiano son fundamentalmente dos: poner como argumento de certeza la obediencia ciega a lo que diga la jerarquía eclesiástica, después de haber comprobados una y mil veces la cantidad de equivocaciones que ha tenido a lo largo de la historia.
Y dos, la lectura literal del NT (no digamos del AT). El ejemplo que dice Bruno, lo he escuchado esta mañana en la cadena SER por ser tan evidente. Y es uno de tantos ejemplos absurdos que, interpretados literalmente, nos manifiestan un Dios absurdo, cuando en realidad tendría que ser el culmen de todas las perfecciones.
Es lo mismo que lo que dice el Papa en su libro sobre la infancia de Jesús. Mantener que el embarazo de María fue obra de un espíritu, y un parto físicamente imposible (a no se por cesárea) del nacimiento de Jesús, es querer seguir confundiendo a la gente de buena fe. Es querer, ¡a plena conciencia!, mantener en la ignorancia al pueblo, pasándose por alto todos los estudios exegéticos que se han llevado a cabo. Eso se llama mala fe, abuso de autoridad o como se le quiera llamar.
¿Cómo es posible imaginar a Dios como lo más irracional que se puede concebir, con el argumento de que, como es Dios, puede hacer lo que quiera quebrantando todas las leyes naturales, mientras es incapaz de impedir terremotos o tsunamis u otras cosas semejantes?.
La resurrección de Lázaro me deja atónito.Siempre la he rechazado.Porque si murió y fue resucitado, es decir volvió a la vida entiendo que tuvo que morir OTRA VEZ. Y lo digo como lo siento FUE UNA GRAN PUTADA. O está todavía entre nosotros y nadie lo ha visto, o subió a los cielos y nadie lo ha contado.Morir dos veces.¡¡¡Un milagro?¡¡¡.Por favor, milagros como ese por fuerza son UNA GRAN PATRAÑA. Y lo digo por que no hay ser humano que pueda desear que le hagan un tal. Creo yo.