Otros temas

Autores

Archivo de entradas

Temas

Fechas

Calendario

abril 2010
L M X J V S D
 1234
567891011
12131415161718
19202122232425
2627282930  
7446 Artículos. - 113037 Comentarios.

La tumba de Jesús y la fosa de los crucificados

 

En este Triduo Pascual y en una época en que se insta a recuperar la memoria y se fantasea sobre nuevas versiones de la historia de Jesús, he aquí un ejemplo de reflexión teológica cristiana sobre el “Santo Entierro” y la tumba vacía.

Xabier, como siempre, investiga con realismo crítico los textos y los interioriza con corazón. Eso es hacer teología de la buena, la que no confunde sino que alimenta la fe y la esperanza.


Una de las tareas principales de las religiones ha sido responder al misterio de la muerte. Gran parte de los hombres religiosos han sacralizado a los muertos para confesar de esa manera que ellos se integran en la Vida y para impedirles que vuelvan, de forma perturbadora, al mundo que han dejado. Ellos, los muertos, tienen que marcharse para encontrar un lugar distinto y para dejarnos a nosotros el nuestro, para que así podamos vivir tranquilos sobre el mundo. Por eso solemos echar sobre ellos una losa, unas piedras muy grandes o les encerramos bien, en una cueva, para que no salgan, para que así que los supervivientes podamos seguir viviendo, como si nada hubiera pasado, hasta que al final nos entierren también a nosotros, o nos quemen en un horno, de manera que todos muramos y quede sólo la historia de violencia dura. Es una tristeza inmensa que los muertos mueran. Peo es también una alegría que se vayan, que no están como antes, que estén de otra manera mundo. Pero los cristianos afirmamos que Jesús y los que han muerto con él no han terminado así. A Jesús: no pudieron arrojarle y encerrarle para siempre en una fosa, de manera que ya no saliera, sino que él Vive, como indicaré evocando algunos rasgos sorprendentes y gozosos de la tradición cristiana, en un tiempo de Pascua, que es tiempo de Tumba Vacía. Lo que ofrezco es sólo una meditación, no un “dogma de fe”; es una reflexión gozosa, no una imposición teológica. Otros cristianos describirán las cosas de manera diferente. Yo las veo así, así me sirven, con gran parte de la exégesis actual.

No quiero criticar otras posturas, sino sólo presentar aquella que, a mi juicio, resulta más coherente, más acorde a los datos exegéticos y al evangelio de Jesús, que es anuncio de Vida, no resignación de muerte. Al hablar como haré de la tumba vacía no quiero negar la resurrección de Jesús, sino todo lo contrario: quiero situarla en su lugar histórico, desde la fosa común donde son arrojados los crucificados de la historia humana, para afirmar de esa manera la fe del evangelio que proclama la salvación de los que han sido y siguen siendo expulsados de la vida con violencia. La resurrección de Jesús no es un acontecimiento privado, sino el comienzo de una historia de resurrección que comienza en las fosas comunes y en los cementerios sin gloria ni nombre de los expulsados de la historia humana, de los que mueren de hambre injusta o de injusticia del sistema, sin que nadie les entierre dignamente.

(1) Jesús, un Mesías sin tumba. Para sus primeros seguidores, Jesús fue un muerto sin tumba. Su memoria no estuvo vinculada a un monumento donde se guardaron y veneraron por siglos sus huesos, como sucede en tantos monumentos que llenan el duro valle de Josafat (o de la Gehenna), junto a Jerusalén. En ese sentido, los cristianos comienzan su andadura de fe con un «menos»: no tienen ni siquiera el consuelo de la tumba de su ser querido, como no lo tuvieron los familiares de los millones de asesinados judíos de los campos de la muerte, en los años del gran Holocausto, de 1939 a 1945. Tampoco los desaparecidos de mil represiones y los muertos de hambre de gran parte del planeta tierra tienen una tumba honrada donde se venera su memoria.. Pero ese 2

menos se ha trasformado en un gran «más». Los cristianos no tienen una tumba de Jesús porque «le tienen a él todo entero», animándoles a retomar el camino del Reino. Desde ese fondo pueden entenderse algunos textos centrales de los evangelios en los que Jesús había condenado la religión de los sepultureros aprovechados: «Deja que los muertos entierren a los muertos…» (Lc 9, 59-60; cf. Mt 8, 21-22). «Ay de vosotros que edificáis los sepulcros de los profetas…» (Lc 11, 47-48; cf. Mt 23, 29-32). Jesús, que protestaba contra los constructores violentos de tumbas, no ha comprado en Jerusalén una parcela donde pudieran enterrarle, ni ha podido desear que le construyan una tumba. No ha muerto para dejar un monumento glorioso, sino para seguir viviendo en los pobres que mueren y esperan el Reino de Dios.

(2) La religión de los sepulcros blanqueados. Como acabo de indicar, Jesús criticó la religión de los «sepulcros blanqueados» (Mt 23, 27), propia de aquellos que elevan tumbas hermosas a los asesinados (religión de muerte) para seguir siendo asesinos (religión que mata). Los que edifican sepulcros suponen que están honrando la memoria de los muertos, pero hacen algo muy distinto: en el fondo quieren enterrar mejor a los asesinados, aprovechando su memoria para seguir imponiendo su violencia (es decir, para matar a los profetas del presente). El evangelio de Mateo ha insistido en el tema, aplicándolo a los escribas y fariseos (que no son simple judíos, que pueden querer ser cristianos): «Con esto dais testimonio contra vosotros mismos de que sois hijos de aquellos que mataron a los profetas. ¡Vosotros, pues, colmad la medida de vuestros padres!» (Mt 23, 31-32). Al construir los monumentos de los mártires, diciendo que quieren distanciarse de sus padres asesinos (que mataron a los profetas), los hijos de los asesinos siguen aprobando la violencia de los padres y viviendo de ella. Necesitamos matar para así mantenernos y triunfar nosotros sobre la tumba de aquellos a quienes hemos enterrado. En ese sentido, nuestra misma estructura social viene a mostrarse como culto a la muerte. Primero matamos y después (al mismo tiempo) divinizamos o sacralizamos a los muertos, para así justificarnos. Caminamos sobre los cadáveres de los que asesinamos y enterramos. Así dijo Jesús, por eso le mataron.

(3) Pero Jesús no tuvo una sepultura honrada. El «santo» entierro. La tradición más antigua es muy sobria y sólo dice que Jesús «fue enterrado» (1 Cor 15, 4), afirmando así que murió del todo (no puro revivir, como algunos han dicho, para marcharse a cualquier Cachemira de Bronx o de Vallecas). Algunos cristianos posteriores han querido saber dónde se hallaba su tumba, suponiendo que debía ser «honorable», como aquellas que se hacían construir los hombres ricos de Jerusalén. Pero, en contra de esa posibilidad (de que Jesús tuviera una tumba honorable) se viene elevando desde antiguo un argumento muy sólido: los romanos solían dejar que los ajusticiados públicos quedaran sobre el patíbulo, para escarmiento público, o los arrojaban a una fosa común donde se consumían, sin cultos funerarios, también para escarmiento de otros posibles malhechores. Los romanos no dejaban que se levantaran tumbas gloriosas sobre los crucificados. Teniendo eso en cuenta, son muchos los que afirman que Jesús no fue enterrado con honor, sino arrojado por los verdugos romanos a una tumba común, un pudridero para condenados, al que ningún hombre puro se acercaba sin contaminarse. De todas formas, conforme a la tradición de los evangelios, resulta más probable que le enterraran “los judíos”, es decir, las autoridades israelitas de Jerusalén, que pidieron a Pilato los cuerpos de los ajusticiados, pues, si no se enterraban, pasando al raso la noche, esos cuerpos manchaban la tierra santa y corrompían la ciudad de Dios, sobre todo en un tiempo de celebración nacional como Pascua (Jn 19, 31-37; cf. Dt 21, 22-23). Parece que Hech 13, 29 nos sitúa en esa misma línea, cuando afirma que «los 3

judíos bajaron a Jesús de la cruz y lo enterraron». Habrían sido ellos, los judíos, los que enterraron a Jesús, con permiso de Pilatos (o de los romanos), por razones de pureza ritual. Fue de verdad un “santo” entierro: le bajaron de la cruz y le pusieron bajo tierra los mismos verdugos, para que todo pudiera seguir su curso, como si nada hubiera pasado. Fue “santo” como son santos los entierros sin gloria de los desaparecidos; como fueron santos los funerales de los judíos consumidos en los hornos de los campos de concentración, para que no quedara así memoria de ellos en la tierra.

(4) Siguiendo en la línea anterior y analizando con cuidado los textos, se pueden trazar tres posibilidades, y las tres encuentran defensores entre los científicos actuales, cristianos o no cristianos:

(a) Los judíos pidieron a Pilatos que bajara de la cruz a los tres ajusticiados, pero fueron los mismos romanos quienes los enterraron, en alguna fosa común o sumidero para condenados, allá al lado, en algún hueco de la cantera abandonada de la crucifixión (bien analizada por los arqueólogos), llamada Gólgota o Lugar de Calavera (cf. Mc 15, 22; Lc 23, 33). (b) Los judíos pidieron los cadáveres y ellos mismos los enterraron con prisa, antes que llegara el sábado pascual, sin unción ni ceremonia funerarias, en una fosa común de ajusticiados e impuros, no en el Gólgota, sino al otro lado, quizá en el valle de la Gehenna (lugar asociado al infierno). En este caso, lo mismo que en el anterior, los discípulos (las mujeres) podrían haber mirado de lejos el “santo entierro”, pero no les dejaron participar, ni pudieron después separar el cadáver de Jesús de los otros cadáveres, de manera que se quedaron «sin cuerpo». (c) Pero tampoco se puede descartar la posibilidad de que Jesús tuviera una tumba “noble”, propia de José de Arimatea, un “judío bueno”, que le enterró en un sepulcro «puro» (según la pureza de este mundo viejo de asesinos), excavado en la roca, mientras las mujeres amigas miraban de lejos, sin poder acercarse. Los cristianos tuvieron que reconocer siempre que ellos no habían enterrado a Jesús: ¡No tenían autoridad para ello! Pero se han atrevido a decir que le enterró un buen judío y que ellos (las mujeres) pudieron, al menos, mirar desde lejos. Más aún, en este caso, los cristianos podían afirmar que el sepulcro de Jesús fue el sepulcro limpio y puro, de un hombre muy rico (pues sólo los muy ricos tenían un sepulcro así en Jerusalén). Pero, en la línea de todo lo que venimos diciendo, además de la improbabilidad histórica de un sepulcro rico como el de José de Arimatea, se plantean muchas preguntas. ¿Por qué sería «puro» un sepulcro nuevo y limpio, exclusivo para Jesús, mientras que la fosa común o el crematorio de un campo de concentración sería «impuro»?. Desde el evangelio y la cruz de Jesús, es más pura una fosa común (¡el pudridero de los rechazados!) que el sepulcro de los ricos. Personalmente, pienso que una tumba rica para un Jesús pobre, ajusticiado como él fue, resulta al menos muy problemática (por no decir casi contradictoria). Es más coherente pensar, desde el punto de vista histórico y teológico, que Jesús murió y fe enterrado con los expulsados de la historia, en la línea de Is 53, 9: «fue con los impíos su sepultura».

(5) No le encontraron en la tumba. Sea como fuere, a Jesús no le encontraron en la tumba, sea porque no se podía abrir una fosa común separar su cuerpo de los otros cuerpos amontonados (hipótesis de la fosa común donde él había sido arrojado con los otros dos crucificados) o porque el sepulcro donde presumiblemente le había colocado 4

el rico José de Arimatea se encontró vacío, por la causa que fuere. En un caso o en otro, las mujeres amigas, los amigos verdaderos (los discípulos) no pudieron encontrar el cadáver de Jesús, no pudieron embalsamarle y enterrarle con honores, para volver al lugar de su memoria (a su Monumento) cada semana, cada año a celebrar su aniversario de muerte. Pues bien, Jesús acabó sin tumba propia, pero murió con amigos, quizá escondidos al principio, muy visibles luego. Los primeros cristianos fueron un grupo de amigos sin cadáver, de enterradores sin entierro, de lamentadores sin cuerpo presente ante quien lamentarse. Pero volvamos al tema de la tumba. La exégesis de los textos evangélicos no nos ofrece más datos, de manera que cada uno puede interpretarlos según su sentimiento. Personalmente, me siento mucho más cerca de la tradición de un entierro de judíos o romanos: pienso que unos u otros (¿unos y otros?) echaron el cadáver de Jesús en una fosa común, con los otros dos ajusticiados, una fosa donde estaba ya pudriéndose otros muchos expulsados de la vida, muertos sin honra, cuerpos sin bendiciones funerarias, sin monumentos gloriosos, como aquellos que Jesús condenó cuando entraba en Jerusalén y que aún hoy pueden verse en la parte baja del valle de Josafat, esperando orgullosamente la resurrección final.

(6) Jesús bajó al infierno… por su misma muerte. No le enterraron con gloria, al toque de trompeta, elevando sobre su cadáver una pirámide de honores o excavando para él un hipogeo de grandeza. No tuvo un funeral con jefes de estado y sacerdotes, con filas inmensas de de seguidores. Al contrario, los seguidores estaban en gran parte escondidos, las mujeres amigas sólo podían mirar de lejos… Le enterraron rápido, muy rápido, por puro oficio, los sepultureros oficiales, judíos o romanos, con ganas de acabar muy pronto, antes que les alcanzara la noche, casi a escondidas, por puro oficio, unos soldados romanos o los criados de los sacerdotes. La vida histórica de Jesús acabó donde tenía que acabar: en la tumba común de los asesinados de la historia humana, al lado de los miles de expulsados, en pudridero, de los que mueren y son expulsados, arrojados, aplastados, sin honor, en cualquier cuneta o basurero de la humanidad triunfante. Allí quisieron echarlo, allí lo echaron con los otros dos crucificados (quizá con la ayuda de un hombre bueno, llamado José de Arimatea), para que los otros (¡los judíos y romanos triunfadores, nosotros!) pudiéramos seguir celebrando la vida orgullosa de una Pascua dedicada al Dios de la victoria de los «buenos». Pues bien, de esa manera, Jesús bajó al infierno de la historia humana, a través de la fosa común, para dar vida a los muertos, según confiesa estremecida la tradición cristiana (el credo romano).

(7) Lógicamente, no pudieron encontrar su cuerpo. ¿Cómo separar el cuerpo de Jesús de los otros cuerpos de los ajusticiados? ¿Cómo distinguir su carne rota de carne rota y de los huesos quebrados de los miles y miles de hombres y mujeres ,arrojados a la fosa común de una historia que expulsa a los muertos incómodos? Por eso, las mujeres de Mc 16, 1-8 pudieron mirar hacia su sepultura (hacia la fosa donde estaba su cadáver), pero no pudieron encontrar su cuerpo: no pudieron abrir la tumba, ni separar el cadáver de Jesús, ni embalsamarlo con honor, ni llevarlo a casa, como quiso en locura de amor María Magdalena (Jn 20). No pudiera hacerlo simplemente porque era imposible: no se puede volver atrás la historia de un crucificado a quien entierran sin tumba propia. Pero pronto descubrieron que la razón por la que no pudieron encontrar y embalsamar su cuerpo era mucho más profunda, una razón de Dios, razón de Vida y Pascua: No podían encontrarle porque “no estaba allí”, porque se encontraba vivo, en la Vida del mensaje que había proclamado, en la más intensa travesía del camino del Reino que había iniciado y sembrado en la tierra: ¡Si el grano de trigo no muere…! (Jn 12, 24). De esa

forma, lo que podía ser suprema maldición (¡la maldición de morir sin tener un buen entierro, de pudrirse sin tener una honrada sepultura!) se les manifestó como bendición suprema, revelación del Dios de Jesucristo, en la línea de todo el evangelio ¿Cómo vas a encontrar el grano de trigo y guardarlo en una especie de vitrina, para que todos lo vean, si es que ya no existe separado, si se ha vuelto espiga inmensa que se abre como pan para todos los pobres de la tierra? Jesús había penetrado ya en el abismo de la muerte, pero no para quedar allí. Por eso, no se le pudo enterrar en un glorioso sepulcro de mártir (como el de Mahoma en Medina, como el de los apóstoles en Roma, como el de Lenin en Moscú), pues su muerte se había trasformado en Vida para todos y en ellos (en nosotros) vivía y sigue viviendo. Por eso el ángel de la pascua les dijo a las mujeres, en palabra de fe que nosotros seguimos escuchando: «No está aquí, id a Galilea, es decir, al camino de su vida….Allí le encontraréis, con aquellos y en aquellos que aceptan su historia» (cf. Mt 16, 7-8).

(8) Dios trasforma la muerte del justo en victoria de Vida. Desde ese fondo puede leerse el relato simbólico de Mt 28, 1-4 que evoca la acción definitiva de Dios, que ha empezado a romper las tumbas de la vieja historia de muerte, para ofrecer de esa manera una esperanza a los crucificados y muertos de la historia (cf. Mt 27, 51-53). Es muy difícil asegurar lo qué pasó físicamente con su cadáver, pero, según la tradición que hemos evocado, Jesús «bajó a los infiernos», entró hasta el fin en el reino de la podredumbre y muerte, para iniciar desde allí un camino de pascua (cf. 1 Pedro 3, 18-22). Histórica y teológicamente, lo que importa no es una desaparición físico-biológica de su cadáver, sino la experiencia de vida y presencia de Jesús entre sus seguidores. Por eso, cuando los textos evangélicos (a partir de Marcos 15, 42-16, hablan de una tumba honorable del Mesías, no están hablando de un hecho físico, sino de un misterio de fe: Dios mismo ha recogido a Jesús desde el abismo de la muerte, en la que ha penetrado, siendo enterrado con los crucificados y expulsados de la historia. El santo entierro de Jesús es el entierro de los muertos sin nombre, arrojados día a día al pudridero de las cunetas de la historia. La santa tumba de Jesús es “la muerte que se convierte en principio de vida”. Jesús está allí donde quisieron enterrarle rápidamente, para que su cuerpo no contaminara la tierra en un tiempo de Pascua. Por eso, los cristianos no somos guardianes de un sepulcro, sino mensajeros de la tumba vacía, que es semillero de Vida. Somos testigos de la Vida de Dios que resucita a los crucificados de la historia humana. Desde ese fondo, aunque tuviéramos la certeza de que a Jesús le enterraron en una tumba honorable, que apareció después vacía (sin que se pueda saber la causa de ello), deberíamos añadir que ese dato físico resulta secundario e incluso molesto para el evangelio de la Cruz cristiana. El recuerdo de Jesús no está vinculado a una tumba venerable, como la del Rey David, sepultado con honor y gloria en Jerusalén (cf. Hech 2, 29), ni a un espíritu-fantasma, que actúa a través de otros personajes, que reciben su poder y pueden realizar así prodigios (como piensa Herodes, refiriéndose al Bautista; cf. Mc 6, 14-16). El recuerdo de Jesús se identifica con la vida de sus discípulos que expanden su evangelio, y con la vida de los pobres de la tierra, que siguen siendo arrojados y expulsados a sepulcros sin honor ni gloria, asesinados por el mismo sistema de poder que asesinó y arrojó a Jesús a una tumba infame.

(9) Conclusiones. Sentido histórico y teológico. Desde ese fondo se entienden, a mi juicio, los bellísimos relatos de los evangelios sobre la tumba vacía, que la Iglesia ha transmitido no como prueba histórica de la resurrección, sino como signo de la fe pascual, que ella confiesa, porque los cristianos “han visto a Jesús resucitado”. Lógicamente, esos textos poseen más valor simbólico que puramente físico. Por eso, en 5 6

un plano de historia física (saber lo que pasó) y de biología (saber cómo se descompuso o desmaterializó el cadáver de Jesús) debemos tener mucha sobriedad, pues resulta difícil alcanzar conclusiones «científicas». Con los medios de la exégesis, parece difícil afirmar que Jesús tuvo un entierro honorable y que su tumba (propiedad de un rico y famoso judío) se encontró después vacía, sin que humanamente se pudiera saber lo que pasó. Ciertamente, pudo haber una tumba rica, que después se halló vacía. Pero, a mi juicio, es más probable que fuera enterrado como un ajusticiado político peligroso y que ninguno de los suyos pudiera llegar hasta su tumba (que era maldita, quizá protegida por una prohibición), distinguiendo su cadáver, para separarlo y honrarlo, dejando allí a su suerte a los demás crucificados o ajusticiados, que se iban consumiendo sin honor. ¡No, Jesús nunca abandonaría a los demás ajusticiados, pues quiso compartir con ellos su suerte para siempre! De todas formas, en uno u otro caso, tuviera tumba propia o no la tuviera, Jesús ha sido y sigue siendo para la iglesia un muerto sin tumba, un muerto que funda con su Vida la Vida de la Historia. Por eso, hubiera tumba noble o no la hubiera, los cristianos tienen que abandonarla: Jesús no está allí, no es un cuerpo para monumentos, no es una momia santa, incorrupta o corrompida, sobre la que se pueden edificar grandes pirámides o basílicas, para enterrar así la llama de su vida. Jesús es un muerto que está Vivo, un muerto que ha empezado a resucitar en la fe de sus discípulos, en la vida de los hombres y mujeres que le aceptan, con todos los que han muerto y han sido sepultados como él en la fosa común de la historia. Pero no está vivo sólo en la fe de sus seguidores: está vivo en Dios, en el Dios que resucita a los muertos (cf. Rom 4, 23), en el Dios que ha revelado por él y en él la nueva historia de la Vida.

Ciertamente, las circunstancias y los tonos pueden ser diferentes. Algunas palabras reciben aquí otro sentido. Pero las Consignas de las Madres de los Desaparecidos de la Plaza de Mayo de Buenos Aires, en Argentina, se sitúa en la línea de lo que hemos dicho sobre la tumba de Jesús, sobre el sentido de su vida:

«Rechazamos las exhumaciones. Las Madres de Plaza de Mayo rechazamos las exhumaciones porque nuestros hijos no son cadáveres. Nuestros hijos están físicamente desaparecidos pero viven en la lucha, los ideales y el compromiso de todos los que luchan por la justicia y la libertad de sus pueblos. Los restos de nuestros hijos deben quedar allí dónde cayeron. No hay tumba que encierre a un revolucionario. Un puñado de huesos no los identifica porque ellos son sueños, esperanzas y un ejemplo para las generaciones que vendrán. No aceptamos que se le ponga precio a la vida. Nuestros hijos nos enseñaron el valor que tiene la vida. Ellos la pusieron al servicio de todos los oprimidos, de los que sufren injusticias. Las Madres de Plaza de Mayo rechazamos la reparación económica y decimos que la vida sólo vale vida. Que la vida sólo vale algo cuando la ponemos al servicio del otro. La vida de un ser humano no puede valer dinero, y mucho menos la vida de un revolucionario. Lo que hay que reparar con justicia no se puede reparar con dinero…Rechazamos los homenajes póstumos Rechazamos las placas y los monumentos porque eso significa enterrar a los muertos. El único homenaje posible es levantar sus banderas de lucha y continuar su camino. El único monumento que podemos levantar es un inquebrantable compromiso con sus ideales» (cf. www.madres.org).

53 comentarios

  • pepe sala

    ¡¡Por la salud de un burro cojo!!, Santiago, no te disculpes conmigo que las disculpas me ponen muy nervioso y me quitan el sueño ( la siesta y la nocturna)
     
    Aquí estamos para opinar, cada cual lo que crea conveniente. Y quien opine de una manera debe aceptar formas diferentes de opinión.
    Entiendo que a algunos les cueste más entender tal evidencia, puesto que la ICAR, por ejemplo, no suele admitir opiniones diferentes. Pero entre nosotros, y a tí te veo convencido de lo que escribes y nunca he percibido mala intención en tus opiniones, ” vale todo”… menos patadas en las partes nobles.
     
    El gran problema radica en que yo también estoy totalmente convencido de mis opiniones, y no creo necesario pedir disculpas por ponerlas en ATRIO ( o donde cuadre)
     
    Así pues, como también soy de la opinión de que ” no quieras para otro lo que no quieras para tí mismo”, haz el pueñetero favor de no volver a pedirme disculpas . Es una simple cuestión de egoísmo; puesto que así no me veré obligado a hacer lo mismo.
     
    Saludos, pues.

  • Carmen (Almendralejo)

    ¡MARIA, MARÍA…!
     
    Tú que no duermes, y a solas vigilas, para conquistar
    De mis sueños las promesas robadas,
    Hacer del gólgota una verde campiña,
     
    ¡Tú, mujer, que no duermes y mi leño mortal
    Vigilas!
    Para atraer junto a mí los atardeceres carmesíes,
    Y de Betania el crisol de los eternos poemas, tú…
     
    Mujer que naciste del sábado, y amando aún
    Permaneces en vigilias, solo tú eres la
    Frágil esencia, la voz femenina que solo ella espera,
     
    ¡OH! fanales ojos que bebisteis de los orígenes
    de las palabras que nunca serán ciertas,
    ¿Por qué juzgasteis matar,
    Al invendible corazón, y apostasteis  
    Dentro de la tumba aquella voz,
    Ella que nunca se hizo ciega?
     
    Tú mujer que aún permaneces  delante
    De la piedra, eres signo y de él la viva
    Presencia, de la humanidad posibilidad,
    Solo tú posibilitas que el sepulcro
    Sea amor y entrega, porque la ley
    Fue crucificada por quienes
    mataron a la Nueva Promesa.

  • Héctor Rodríquez Fariña

    Hola Oscar, Mesi acaba de meterle al Arsenal 3 goles en cuarenta minutos.¡Qué garra tenéis los argetinos! Otro día hablamos de la Creación, que no son las limitaciones con las que va creciendo. La creación será el impulso del Creador. Las palabras son tambien limitadas, poco a poco iremos acercándonos, ¡Vamos todavía! amigo. Hasta pronto Héctor

  • Santiago

    Rodrigo, por supuesto,  porque lo contrario resultaria menos probable….saludos   de Santiago Hernandez

  • Santiago

    Pepe Sala,  siempre tengo que disculparme por disturbar, o tu siesta, o tu sueno, pero me alegro que duermas bien esta vez…y asi no me quedo con complejo de culpa…y en tono de amistad no me creo que tu neurona se agote por pensar un poquito mas en la posibilidad de que exista algo o alguien fuera de nuestra existencia que de mas sentido a la nuestra…a veces no queremos -o nos asusta- enfrentar el problema…porque al hacerlo nos parece que nuestra vida se complicaria aun mas…sin embargo, pueda ser que sea todo lo contrario…que nuestra vida mejore un poco mas, en cuanto a la calidad, si no puede ser a la cantidad…de todas maneras, tambien me disculpo si me meti donde no debia hacerlo…un saludo    de Santiago Hernandez

  • Rodrigo Olvera

    Santiago
    Das por supuesto que hay una causa última.
    Saludos

  • Santiago

    Rodrigo,  lo que nosotros entendemos con nuestra logica son las causas proximas pero no las ultimas..podemos entender el mecnismo fisiologico del tubulo renal pero no quien informo, -porque yo no lo hice, ni mi medico- al tubulo para que perfectamente realice un intercambio de metales tan preciso como para lograr una constante de electrolitos en la sangre adecuada para que no acabe conmigo…Esta autoregulacion de la vida y del universo es lo que se nos escapa..por eso la vida misma y nuestra existencia como ultima causa es un misterio porque no podemos explicar del todo su origen ni su intimo mecanismo…saludos    de Santiago Hernandez

  • Rodrigo Olvera

    Santiago
    Mi comentario no va respecto a si es verdad o falsedad el dogma; sino al mensaje de Pablo VI a los participantes del Seminario. Y el mensaje es claro: la libertad de investigación científica tiene como límite el dogma teológico. 

    Posición que ha sido muy consecuente en la Iglesia Católica desde que los científicos reivindicaron libertad de investigación. La investigación astronómica debía respetar el límite impuesto por la idea teológica (sé que nunca se definió formalmente como dogma, pero en la práctica se le trataba como si lo fuera) de que la Tierra era el centro del universo; la investigación médica debía respetar el límite de las ideas teológicas sobre la sacralidad del cuerpo (prohibición de vacunas) y sobre la resurrección de la carne (prohibición de transplantes); la investigación socioeconómica debe respetar la idea teológica de que el marxismo es nefasto (porque niega a Dios), etc.

    Saludos

  • Santiago

    Rodrigo,  el magisterio propuso esta verdad porque fue transmitida por los incredulos apostoles que al estar en contacto intimo con Cristo resucitado tuvieron que aceptar esa realidad a pesar de las dificultades de la logica humana…y a pesar de las repetidas falta de fe entre los discipulos que se resistieron, al principio, a creer…porque si Cristo no resucit0 entonces la promesa hecha por EL sobre la inmortalidad y la resurreccion y la vida eterna hubiera sido una mentira -el mismo Cristo hubiera sido un impostor- y su mensaje no hubiera sido trascendente…sino simplemente, entonces, meramente existencialista..por eso Pablo dijo que nuestra fe seria vana, sin la resurreccion…una fe sin trascendencia alguna….un mensaje puramente natural que acabaria con la muerte…pero como vemos la iglesia primitiva mantuvo el KERYGMA de la resurreccion de Cristo hasta el siglo XXI….saludos de Santiago Hernandez 

  • Rodrigo Olvera

    Santiago
    No el funcionamiento del internet, ni el funcionamiento coronario ni el funcionamiento renal están fuera la comprensión de la lógica humana.
    Saludos cordiales

  • h.cadarso

      He vivido mi semana santa en un pueblín de Asturias; las liturgias a las que he asistido me han parecido penosas…los ritos y las plegarias cultuales nos alejaban del significado de la muerte de Jesús, de esa continuación de la Pasión de Jesús en todos los pobres del mundo, en todo el Tercer Mundo que vive cerca de nosotros o en los otros continentes.
      He protestado al cura porque en el sermón hizo una alusión al proyecto de ley del aborto en la más pura línea de Rouco…y me contestó airadamente que “más protesto yo por los asesinatos de seres inocentes que cometen los partidarios de esa ley”.
      Así que, Xabier Pikaza, gracias por devolvernos a la interpretación cristiana de la Pasión y de la Resurrección. Esa idea de la resurrección que proclaman las Madres de la Plaza de Mayo y que tú aplicas a una visión cristiana de este misterio me parece muy justa y verdadera. hemos hecho quizá del Resucitado un ídolo, cuando su mensaje lo que pretende es enfrentarnos con el drama del dolor de los pobres y con la esperanza de su salvación, la salvación de los pobres que nosotros mismos hemos de llevar a cabo. Que yo así veo el mensaje del evangelio. Jesús enseña a Tomás a venerar las llagas de su cuerpo torturado; su cuerpo torturado no es ya el que yace en una tumba, es el cuerpo de todos los que sufren, que nosotros estamos llamados a curar y salvar.
      Por lo demás, cada uno veneramos a nuestros muertos de maneras diferentes, y la propuesta de las Madres de la Plaza de Mayo no es la única posible. Pero sí lo es el homenaje que ellas desean se haga a sus muertos, el de luchar por lo que ellos lucharon.
      Ahí andamos todos nosotros, creo yo. Estos días he leído cómo el cultivo transgénico de la soja ha arrasado el 64% de la superficie cultivable de Argentina, y sigue avanzando hacia el norte por Paraguay, Uruguay y Brasil, invadiendo y arrasando la selva amazónica. Soja para los chinos, soja para el gran capital de USA y de los pocos argentinos y sudamericanos que se benefician de ese espolio del suelo de Sudamérica… Lástima de los patriotas que se perdieron con los Videlas y compañía. Aquellas muertes trajeron estos mares de soja…

  • Sergio Zalba

    Gracias Pepe! Recién acabo de ver tu enlace con imágenes del Día de la Memoria (ahí descubrí mi sombra detrás de una bandera, ja!)
    Y hablando de memoria, creo que ese es el nudo de la resurrección. Ya Jesús lo había dicho: ‘hagan esto -entregar sus vidas- en memoria mía’ y es allí donde está plenamente resucitado, es decir, res-urrecto, vuelto a poner de pie. Cuando los pueblos se ponen de pie, resucitan. Y van resuicitando en la medida que que logran ir poniéndose de pie.

  • pepe sala

    Ahhh, ahora ya lo entiendo, Santiago.
     
    Dormiré mejor esta noche.
     
    Mi pobre neurona echaría humo por las orejas si intentase descifrar lo que a tí te parece tan claro, Santiago. Y yo quiero mucho a mi neurona; no tengo más que una y debo cuidarla mucho.
     
    Aleluya, aleluya !!!… cada uno con la suya.

  • ana rodrigo

    Estoy completamente de acuerdo con Rodrigo. De hecho los teólogos/as que han investigado hacia una exégesis más adecuada y creíble para nuestra sociedad actual sobre la resurrección (y sobre otras cuestiones) han sido fulminados en plan exterminador. De hecho ahí están un sin fin de personas que a lo largo de la historia no se les ha dejado investigar si no era para decir lo mismo que ya estaba dicho. La Teología oficial hace siglos que no avanza un ápice.
     
    Como acabo de escribir en otro post, la Iglesia perdió una magnífica oportunidad con haber abandonado (ni lo tienen como referencia para nada) con el Concilio Vaticano II.
     
     
    Por otra parte, cuando se repite insistentemente en aquello de Pablo de Tarso “si Jesús no ha resucitado vana es nuestra fe” (lo digo de memoria), yo me pregunto ¿qué querrán decir con esto? ¿Es que si no resucitó, su vida no valió la pena? Porque yo, que creo en Jesús e intento seguir su mensaje, la resurrección de su cuerpo no me añade nada a mi fe, porque lo que realmente me vale es que Jesús tuvo un estilo de vida que a mí me vale la pena imitarle. Y lo que sí veo VIVO es su mensaje y su ejemplo, y eso sí me vale.

  • Santiago

    PEPE SALA,   el misterio mayor es que podamos tu y yo comunicarnos casi instantaneamente por medio de la internet, una cosa que ni vemos, ni palpamos,ni oimos…y que estemos vivos en este momento y que nuestras dificiles “”constantes vitales” se mantengan todavia entre ciertos estrechisimos limites para que no caigamos muertos de repente, que nuestras coronarias todavia esten abiertas para que el corazon no se necrose, que el tubulo renal siga activa y pasivamente, y vivamente, intercambiando aniones y cationes de manera que no nos envenenemos, que el equilibrio inestable de este universo sea tan exactamente perfecto que no pueda ocurrir un cataclismo mundial que lo destruya todo…y el misterio de por que existo, de por que estoy precisamente aqui ahora en este instante y que esto no es un sueno, sino “mi realidad” actual..y la vida misma que es misterio…ademas que este sistema de vida -o nuestra realidad- basicamente no la pudimos controlar, ni cambiar, que nos “fue dada” de una vez, sin nosotros intervenir…y que muy poco de lo que nos pasa diariamente cae baja nuestro control o prevencion… si es verdad que estamos rodeados de misterios incomprensibles para nuestra “logica” humana….porque nos hemos de extranar que no tengamos esas “apariciones” que nos quiten las dudas y nos reafirmen en la verdad que intuimos, en una explicacion que venga mejor a nuestra mente humana??? Hemos de aceptar que tenemos ya bastante con estar aqui, con existirm, con nuestra inteligencia y voluntad, con nuestra capacidad de amar y sobre todo con nuestra libertad…capaz de escoger  

  • Kaláa

    Feliz Pascua a todos !
    Oscar el ensayo es prometedor…
    Pero…. en nuestro drama el protagonista siempre acaba encontrándose  con la muerte, por eso es trágico.
    O no?
    Claro que ese encuentro… necesita de alguien que lo cuente para que nos conmueva.  Bueno Oscar, ya sabes que te sigo en tus andanzas… aunque parezca cómico que lo diga yo.
    Antonio,  feliz regreso a casa.
     
    Saludos.

  • Rodrigo Olvera

    Santiago

    Lo que hizo Pablo Vi fue decirles a los investigadores que tienen libertad de investigación, SIEMPRE Y CUANDO sus investigaciones lleguen a la única conclusión prestablecida y aceptable: confirmar la posición de la tradición tal como la define el magisterio.

    Es como decir, tienes libertad de votar, siempre y cuando votes por el Movimiento.

    Saludos

  • Santiago

    Manuel V.,   gracias por el link que pones en tu comentario…Pablo VI, hablandole a los especialistas, toca magnificamente el misterio CENTRAL del cristianismo como es la RESURRECCION que siempre ha despertado la pregunta acuciantes sobre la realidad de este  hecho de la transformacion de la vida, porque “para tus fieles, Senor, la vida no se acaba, sino que se transforma”, asi se lee, aun hoy, estas palabras, en el prefacio de las misas de difuntos….Por eso dice el Papa, que ya Juan, el discipulo testigo de las apariciones de Cristo resucitado, en su evangelio, cita la invitacion de Cristo para que el incredulo  TOMAS tocara las huellas de crucifixion presentes en Sus manos y en Su costado como prueba delante de todos los discipulos que no era un fantasma etereo sino un verdadero cuerpo pero en otra realidad que implicaba la glorificacion 

  • pepe sala

    Vamos a ver, Oscar:
     
    Para hacer ” vida viviendo” ( pensamiento que comparto) no es necesario devanarse la sesera. Creo que intentar descubrir el sentido de nuestra vida-existencia, lo único que puede acarrear es un montón de problemas sin solución posible. ( y montones de visitas al piscólogo-psiquiatra)
     
    He leído, en diagonal, el enlace que manda Manuel V. Entre otras incongruencias  sin fundamento VERAZ posible, encuentro éste párrafo que me sirve de ejemplo:
     
    “”Toda la historia evangélica está centrada en la Resurrección: ¿Qué serían sin ella los mismos Evangelios, que anuncian «la buena nueva del Señor Jesús»? ¿No encontramos en ella la fuente de toda la predicación cristiana, desde el «kerygma» primitivo, que nació precisamente del testimonio de la Resurrección? (cf. Hch 2, 32).””
     
    Pues menudo fundamento que han puesto en la obra. ¿ Podría alguien decirme dónde está EL CUERPO del ” resucitado”? Ya lo he preguntado otras veces y nadie me ha podido DEMOSTRAR lo que tanto afirman. Yo quiero hacer lo mismo que cuentan del tal Tomás. Me bastaría con ver a Jesucristo por la tele, o simplemente oirle a través de la radio… en su defecto, que nos escriba un mensaje en ATRIO, coño, que tampoco le costará tanto. ( Si no le han enseñado éstas artes modernas que haga un curso acelerado a través de INEM y, para el año que viene, me cerrará la boca durante la Semana Santa. No vale dar gato por liebre, que conozco el estilo de los participantes de ATRIO.)
     
    Esto me recuerda al aldeano bruto que veía pasar una procesión de viernes santo.
     
    — Que se joda- voceaba mientras apuntaba con su tosco dedo a la cruz con la imagen del crucificado.
     
    Una beata le recriminaba:
     
    — Por Dios, señor, no diga usted semejantes barbaridades.
    — Ni barbaridades ni leches, señora, que el año pasado le hicieron lo mismo y nadie le ha mandado volver.
     
    Pues éso, quien afirme que Jesucristo ha vuelto a resucitar éste año también ( y van…..) que lo demuestre, ” o que calle para siempre”.
     
    PD: Mi perro Conan existía sin preocuparse del sentido de su existencia. Puede que no supiese leer, pero a mí me enseñó un montón de cosas sobre el sentido NATURAL de la vida. Si mi perro Conan hubiese sabido leer y escribir, dudo mucho de que hubiese perdido el tiempo en semejantes ” artes” intentado explicar lo que se SABE CIERTO que es inexplicable. Pero alguien ya dijo aquello de
    ” cuanto más conozco al hombre, más amo a mi perro”

  • Santiago

    Verdaderamente ha resucitado el Senor!!!!!…hay que dar gracias a EL por todos los buenos sentimientos que nos trae, anualmente, este acontecimiento..aqui se ve tambien ese efecto, entre los colaboradores de ATRIO, con estos magnificos comentarios y poesias que hablan de esta renovacion espiritual que todos necesitamos para seguir viviendo la lucha diaria de la vida…y alegrandonos en ella
    OSCAR,  coincido en mucho contigo, y por supuesto respondo a tu pregunta de que no solo se permite la busqueda del camino, sino que es UNIVERSAL -y hasta obligatorio- el proposito de encontrar la verdad…y por ende la verdadera felicidad, pero debido a nuestra innata INCAPACIDAD para asimilarla completamente en esta vida…vamos viviendo, aprendiendo, “dando tumbos” a diario…y curiosamente, en nosotros, esa busqueda ya es un encuentro, ….pero el hallazgo definitivo, que nos trascendera completamente ,ES otra experiencia de vida…Por lo tanto, es muy cierto que las explicaciones filosoficas y teologicas no son suficientes para colmar nuestros deseos infinitos de la verdad y de la felicidad…por eso a muchos, incluyendo a Teresa de Avila, no les  basta, porque como ella decia “todo se pasa, la paciencia todo lo alcanza”: “”solo Dios basta”… y su REVELACION  externa e interna, cosmica e intima al mismo tiempo, es lenta y gradual, Y, por tanto, constituye esa develacion que todos tratamos de producir mientras vivimos en el tiempo…sigamos en el camino, PERO NO en un sendero meramente existencial, sino mas bien en el trascendental…un saludo   de Santiago Hernandez  

  • oscar varela

    Hola Santiago!

    Creo que tienes razón:
    -“mi existencia no se explica en sí misma”-
     
    Los seres humanos vamos haciendo
    * vía, viando, e.d.
    * camino, caminando; y
    * vida, viviendo
     
    pretendiendo lograr esa “explicación” que nos haga felices.
    ·········
    Existimos en una cuenca de vida multípara.
     
    Si miramos hacia atrás vemos una variedad de hijos paridos.
     
    Culturas y Civilizaciones son ensayos de diferentes “explicaciones”
    (recordarás los esfuerzos de A. Toynbee clasificando 21 Civilizaciones)
     
    El “re-curso” a un Dios Creador ha sido y es “una” explicación.
     
    A mí no me basta.
     
    Porque es más lo que me “complica” que lo que me explica;
     
    mientras asisto a una complicada y odiosa lucha de filosofías y teologías “explicadoras”.
     
    Busco una nueva de-velación que explique algo más satisfactoriamente.
     
    ¿Se me permite el ensayo?
     
    Gracias, que ¡voy todavía! – Oscar.

  • Manuel V.

    SIMPOSIO INTERNACIONAL
    SOBRE LA RESURRECCIÓN DE CRISTO


    http://www.vatican.va/holy_father/paul_vi/speeches/1970/documents/hf_p-vi_spe_19700404_symposium-resurrezione_sp.html

    Cristo ha Resucitado!! ¡Aleluya, Aleluya!!
    ¡¡Verdadermanete ha resucitado!! ¡Aleluya. Aleluya!

  • Carmen (Almendralejo)

    LA Tumba está vacía…
     
    Vacía de recuerdos, de sueños y de caricias,
    De nombre y palabras, de consejos y de abrazos…
    Ella en sí misma, es solo piedra hueca vacante
    De toda estima, de toda presencia y de toda risa
    De toda esperanza y de toda utopia
    La tumba no alcanza, abarca a recoger toda tu vida…
     
    De mañana, escuche al silencio, dejé que la brisa
    Empapara de tu estampa a toda mi retina,
    Aligeré el paso en la plañidera melancolía
    ¡No! Ningún estigma, ninguna certeza y ninguna
    Duda te atrapará detrás de la piedra triste y fría.
     
    Y allí, donde los corazones vestidos
    de luto lloran… Te digo, corazón mío
    ¡Ríe, ríe y canta…!
    Que la tumba está vacía, que tu amor
    No necesita milagros para sentirle vivo
    Cada día.
    ¡Feliz Pascua de Amor y Compromiso!

  • Santiago

    Oscar,  gracias por tu razonamiento…pero para vivir tengo que haber primero recibido la vida de alguien que la tenga ya…como la serie infinita no me explica mi ser…alguien tuvo que tener la vida en EL mismo…sin haberla recibido de nadie para poder darmela…tuvo que haber creacion primero para que yo empezara a existir..por lo tanto el protagonismo implica ya una primera creacion…sin ella es imposible pensar, ni vivir..ya que mi existencia no se explica en si misma…sino en otro….un saludo cordial de Santiago Hernandez

  • oscar varela

    Hola!
     
    Héctor Rodríguez Fariña  y Santiago Hernández están de acuerdo en que
     
    * la CREACIÓN  es lo fundamental.
     
    En tal afirmación queda sobreentendido que “La Creación” es “de DIOS-CREADOR”.
     
    No dudo que ellos están seguros de lo que afirman.
     
    Pero esa “creencia” ¿no está entrando en una “zona de dudas” para el hombre contemporáneo?
    ···········
    En el imaginario habitual decir CREACIÓN es sinónimo de
    MUNDO, UNIVERSO y SERES HUMANOS que lo transitamos.
    ············
    La experiencia de la CREACIÓN que el ser humano tiene es el suelo que pisa, el cielo que contempla, la lluvia, el agua, el frío, el calor, los alimentos, el propio cuerpo enclenque a veces, virus y más virus junto a proteínas y vitaminas.; etc. También euforias o desganos anímicos.
     
    Ese vaivén de estabilidad y des-estabilidad nos inquietan cada vez más. Empezamos a temer.
     
    La Naturaleza no parece tan paradisíaca, más que para los que tienen dólares en cantidad para dis-frutarla.
     
    La Gaia –acabamos de verlo en Boff- de Madrecita adorable se nos trasmuta en monstruosa Madrastra cruel.
    ·········
    Estimo que seguir pensando en un DIOS-CREADOR con esas características de “La tal Creación”
    no es un aconsejable ni convincente “fundamento”.
     
    Hay que cambiar de “Creación” y/o de “Dios-Creador”.
    ···········
    Estimo que el muchacho Jesús (no era más que un muchacho convencido y consecuente) fue lo que hizo:
     
    * El Creador era el ARGUMENTO de Sentido que des-cubría al ir viviendo.
     
    * La Creación era el PROTAGONISMO de sus Ocupaciones.
     
    Protagonistas de un Argumento es lo que cualquier hijo de vecino hace y no puede dejar de hacer: Vivir.
     
    ¡Vamos todavía! – Oscar.

  • Santiago

    muchas gracias Hector por tu acertado comentario..coincido contigo que la fundamental es la CREACION…es la primera cosa que tenemos que CELEBRAR y que lo fundamenta todo…pero lo que llamamos “dogmas” tampoco son inventos…la realidad vino primero…y despues la definicion de la verdad ya que esta se nos ha revelado gradualmente en la estructura y la economia..y es el CARISMA del PUEBLO DE DIOS el que ha descubierto esas verdades y las ha propuesto como creibles…por supuesto, que podemos o no creerlas…eso depende ya de nosotros…o sea, del estudio externo e interno de la base de esa FE..que nos lleva a aceptarlas o no..o sea nuestros ”motivos de credibilidad’…si estudiamos sin prejuicios toda esta teologia veremos que estas verdades estaban siempre presentes ahi    un saludo   de Santiago Hernandez

  • pepe sala

    No será necesario ” resucitar” a nadie, mientras no se les permita morir.
     
    Con mi mayor agradecimiento y recuerdo a quienes no necesitan resurrecciones, sino Justicia. ( especial abrazo para Oscar Varela, Sergio Zalba y quienes hicieron posible este precioso testimonio. Esto sí es un “Dia Santo”. muchísimo mejor que la jodida “semana santa”.)
     
    Permitidme, amigos, sentir una gran dosis de envidia y otra gran dosis de vergüenza por lo que a mí me toca experimentar en España.
     
    Gracias, Argentina, por ésto:
     

  • Héctor Rodríquez Fariña

    Gracias Mª Pilar Z.E. por regalarnos esa  convicción tuya tan sincera.  Has sabido poner al servicio de la razón y de la fe esa ciencia que es igualmete parte del imulso Creador:  ver, sentir, saber, creer… y no al revés.
    Santiago nos dice que la fe tiene que estar “apoyada en hecho verdaderos”.  La Creación ha llevado adelante la evolución hasta llegar a nosotros ¿no es la creación el fundamento de toda realidad y de toda verdad? San Agustín decía que lo grande de la resurreción de Lazaro no fue tanto que había resucitado sino que había sido creado.
    ¿No te parece, Santiago, que es más seguro lo que Dios ha creado que los dogmas que nosotros hemos inventado?
    Abrazos, Héctor
     

  • Santiago

    No existe en realidad ninguna caos mental con respecto a la Resurreccion de Cristo, que celebramos hoy, (despues de mas de 20 siglos) con la misma sorpresa y alegria que invadio a la primera comunidad apostolica de sus intimos seguidores..Sorpresa porque ninguno de esos intimos amigos de Jesus ESPERABA semejante transformacion..Sin embargo, los testigos vivieron bastante tiempo despues para contar lo que vieron y todos los apostoles fueron martires por defender UNANIMAMENTE la FE en la Resurreccion..Claro esta que el cuerpo de Cristo no estaba en la tumba, pues habia RESUCITADO..pero como vemos por los testigos la tumba NO estaba vacia…quedaron 2 importantes huellas…Y asi Pedro y Juan ENCONTRARON  los LIENZOS que envolvieron el cuerpo de Cristo allanados, como “desinflados”…esta seria la traduccion mas correcta, pues la palabra griega KEIMAI que significa precisamente eso: lienzos yacientes, caidos, desplomados, alisados..al DESVANECERSE el soporte del cadaver desde dentro,… y ademas el PANOLON o SUDARIO que estuvo sobre la cabeza de Cristo( y le sostuvo la mandibula) NO SE ENCONTRABA al igual que los LIENZOS(desinflados) sino, AL CONTRARIO, ENROLLADO en su PROPIO LUGAR (en griego OU KEIMENON), no yaciente como los lienzos, sino RIGIDO pues aquel SUDARIO habia estado sobre la CABEZA de Cristo, no sobre su rostro..y por eso  recogio Juan en palabras escritas,  su intuicion REAL de la Resurreccion, de que el cuerpo ya glorificado habia abandonado la tumba dejando la envultura de su cuerpo y el sosten de su cabeza en el MISMO LUGAR donde le habian depositado en la tarde del 14 de Nisan (Viernes), en una tumbar donada por un discipulo, y excavada estrechamente en la roca, sin mucho espacio de mas…y por eso anade el discipulo amado en su evangelio: “ENTONCES, PUES, entro tambien el otro discipulo, QUIEN LLEGARA PRIMERO, Y VIO y CREYO”..CLARO ESTA que la traduccion correcta del GRIEGO ayuda mucho a interpretar la REALIDAD de lo que paso…POR OTRO LADO, aunque la FE se realiza en la voluntad,  como bien dice Xabier y Hector, esta ha de tener como base un hecho verdadero…si no se convierte en pura falsedad, en una mitologia como las mas puras de la antiguedad….porque entonces la FE, sin base real, caeria en un FIDEISMO insostenible…un saludo de Santiago Hernandez 

  • MariPilar Zugarramurdi

    “Si el grano de trigo no muere, queda sòlo, pero si muere, da mucho fruto”. ¿Alguien puede dudar de que esto, a pesar de ser  algo que vemos a diario, sin embargo resulta ser un misterio?
    Para mì, aquì està el secreto de la resurrecciòn de Jesùs
    Jesùs, muriò, como cualquier ser vivo. Me parece muy acertada la hipòtesis de Pikaza, acerca de que Jesùs fue puesto en una fosa comùn, como se hacìa con los ajusticiados y por tanto, no se encontrò su cuerpo. Lo de la tumba vacìa me parece algo sin sentido.
    Entonces, ¿ còmo fue la resurrecciòn de Jesùs?. Lo mismo que pasa con el grando de trigo: Jesùs al morir dio vida a todos aquellos en que  habìa sembrado  la palabra de Jesùs, sus gestos, su opciòn por los ùltimos, su coherencia…Pero sus restos quedaron en el sepulcro, que tambièn darìan vida, pues sus molèculas y àtomos, transformados por la Madre Tierra, que es un verdaero laboratorio o ùtero materno, darìan vida vegetal (hierbas, etc) para repetir el ciclo evolutivo)  Los seguidores y seguidoras antes de morir Jesùs, eran cobardes, no entendìan su doctrina, se peleaban por puestos de honor…Al morir Jesùs, como el grano de trigo, dio vida a aquellos cobardes y tardos de corazòn, convirtièndolos  en otras personas, llenas de coraje, de claridad y decisiòn.  Esto tambièn es una experiencia humana de muchas otras personas. Creo que la naturaleza tiene mensajes que se entienden mejor que las elucubraciones teològicas.
    Como el grano de trigo, Jesùs, multiplicò su vida y no sòlo entrò en la vida de sus seguidores, sino de muchìsimos otros para quienes sigue siendo fuente de vida profundamente humana (que es lo màs divino).
    Todas las discusiones sobre el sepulcro vacìo o las manifestaciones  del Jesùs resucitado, me parecen innecesarias, al lado de este fenòmeno mistèrico del grano que al morir da mucho fruto. Esto es para mi, mucho màs que un simple sìmbolo.
    MariPilar Zugarramurdi E.
     

  • Héctor Rodríquez Fariña

    Gracias Xabier por ayudarnos a remontar el caos mental con que veníamos revistiendo la resurrección de Jesús. A ese caos lo llamábamos fe.  Tú lo has dicho: la fe se hace, no nace hecha.
     
    El credo de Nicea nos  exige creer como si se tratara de una medicina que hay que tragar: es fe en múltiples dosis, de experiencia nada y contradicciones teológicas a montones. “Engendrado no creado y un momento antes habían dicho: creador de TODO, lo visible y lo invisible (menos Jesús, claro, se les escapó)”. Pero dicen que así y todo nos lo impuso Constantino y el Espíritu Santo.  A Eusebio de Nicomedia no le hicieron ni caso.

    Ahora sé que fe  fue la experiencia vivida por los discípulos al darse cuenta de que Dios  había resucitado a Jesús, como a todos,  en el momento de su muerte.
     
    Es la fuerza expansiva de la Creación la que va actuando en cada momento dentro de cada uno.  Fe fue  lo que entendieron las Madres de la Plaza de Mayo cuando nos decían: tal cual fue la vida así será la resurrección,  la vida solo vale tanto cuanto  se use para el bien de los demás. ¿Qué valiosa tuvo que ser a vida de Jesús que supo llegar hasta el final: ajusticiado, golpeado, crucificado y hacinado en una fosa común como uno más, para servir de ejemplo a los demás.
     
    Así fue en la  Argentina, y así fue para los mártires de Zimbabwe refugiados en Mozambique que murieron calcinados por los bombardeos del ejercitos de los blancos. ¡Cómo me hacían sufrir aquellas inmensas fosas con los huesos de personas con las que había convivido tantos años!

    Me costaba entender a Jesús “Vende todo lo que tienes”, “¿qué vale la vida si…?”, “déjalo todo y escoge la mejor parte”. “Vende lo que crees, vende lo que piensas, vende lo que mal aprendiste, quédate sin nada”.  Su muerte y su resurrección lo ilumina todo.

    La gente de África en 45 años a su lado me enseñaron lo que ellos sabían y habían experimentado. No eran creencias.  Su manera de vivir, de ver la realidad, de quererse todo como hermanos, de ver a MLIMU en todo lo creado me fue redimiendo. A mi vuelta me encuentros con vosotros: Pagola, Queiruga, Tamayo, Pikaza. Habéis completado mi camino. Gracias a todos.

    Xavier había sido para mí un desconocido hasta hoy.  Aquí les dejo algo a los que hayáis llegado tarde como yo y quieran seguir sus pasos.

    http://ventanabierta4533.blogspot.com/

  • Pulika

    Muito Obrigado, Xabier Pikaza!
    É  imensa consolação ler esse “Evangelho” das mães da Praça de Maio, que findou em belíssima  apoteose o seu brilhante artigo, justo nesta madrugada de Páscoa!
    Essas “Madres” tem tanta convicção da Vida de seus filhos, que rejeitam reparação financeira pelo seu assassinato. Oxalá nós cristãos tenhamos igual fé na Vida do Crucificado: a fertilizar a luta dos pobres e dos revolucionários, e não encerrar-se de maneira estéril no topo dos altares ou preso nos sacrários de nossas instituições vetustas…

  • Santiago

    Gabriel,  coincido contigo en que las intuiciones, a veces, son buenas pero no siempre coinciden con la realidad historica…En este caso, la hipotesis de Xabier Pikaza sobrepasa la imaginacion pero no corresponde a la realidad..no podemos confiar en “nuestras” intuiciones, porque se me ocurra asi de una vez..y en este caso es mas VEROSIMIL (esta vez escribi correctamente la palabra) la tesis evangelica que relatan los evangelistas que recogen la primera tradicion apostolica…. pues  hubo TESTIGOS que transmitieron DE QUE MANERA fue enterrado Jesus..y como un miembro del Sanhedrin obtuvo facilmente de Pilato la entrega del cuerpo de Cristo..y las mujeres incluyendo a Maria, la madre  de Jesus,  Maria de Cleofas, y Maria Magdalena entre las otras que habian seguido a Jesus desde Galilea, como relata LUCAS y Juan, INSPECCIONARON EL MONUMENTO y COMO habia sido COLOCADO el CUERPO (de Jesus )(Lc 23,55)…No solamente ellas PRESENCIARON y relataron con lujo de detalles el entierro sino que Juan relata que NICODEMO, miembro tambien de la elite judia y discipulo secreto de Cristo, TRAJO una MEZCLA de MIRRA Y ALOE que pesaba 100 libras y TOMANDO el cuerpo de JESUS lo envolvieron con lienzos JUNTO CON LOS PERFUMES como ERA costumbre entre los JUDIOS (al enterrar a los muertos) (Juan 19,39-40)…Seria la “supercheria y la invencion” de los seguidores capaz de “detallar” tan minuciosamente el ENTIERRO DE JESUS??? No es mas probable esta narracion, -no son los evangelistas suficientemente  objetivos que parece, en todo momento,  que estamos viendo una realidad, la realidad de lo que en verdad paso???….PERO hay mas…Juan nos cuenta que Maria Magdalena, el primer dia de la semana, al amanecer, todavia OSCURO, va a la tumba y ve la LOSA quitada..y corre a decirle a Pedro  y a Juan que habian “robado” el cuerpo de Jesus…Y ellos dos, Pedro y Juan, salieron corriendo..Juan se agacho y vio los LIENZOS primero…y despues Pedro que entro primero a la tumba y tambien vio los lienzos por el suelo…los lienzos que fueron amarrados al cuerpo de Jesus y que todavia estaban alli..y entonces el otro discipulo (Juan) que habia llegado primero al sepulcro, vio y CREYO (en la Resurreccion) (pues no conocian lo que decia el Antiguo Testamento que el Mesias “debia resucitar de entre los muertos”) Juan 20, 3-9)
    Es curioso tambien, como dice Pikaza, que Pablo de Tarso hable de la sepultura…Sin embargo, Pablo no cambio para nada la FE, pues  el KERYGMA primitivo de la iglesia  fue APOSTOLICO, la catequesis ORAL, y la mas antigua de todas -segun exegetas como Salguero- fue la narracion de los detalles de la PASION Y RESURRECCION del Senor, que fuera la base de la predicacion de los INTIMOS seguidores del Senor…Por lo tanto, PABLO recibio tambien este KERYGMA antiquisimo, y el primitivo, y como bien dice Pikaza citando a Pablo en 1 Corintios 15-3-8   “PORQUE OS TRANSMITI..lo que a MI VEZ RECIBI (de los apostoles) que CRISTO murio por nuestros pecados…y que fue SEPULTADO”..hasta aqui Xabier Pikaza…pero la narracion de Pablo, la mas interesante, es la que SIGUE: “Y QUE HA RESUCITADO el TERCER DIA…y que fue VISTO por CEFAS, luego por los DOCE. Despues fue visto por mas de 500 hermanos de una vez (o sea no eran alucinaciones individuales) de los CUALES LA MAYORIA VIVE TODAVIA, (pero) algunos (cuando Pablo escribia esta epistola) ya han MUERTO” (los paarentesis son mios)…Por lo tanto, todavia habia muchos TESTIGOS que podia REFUTAR toda mentira y engano con respecto a la realidad de la Resurreccion, que vivian cuando Pablo esribia…muchas gracias a todos por sus colaboraciones….aprovecho esta oportunidad para desearles a TODOS los hermanos de ATRIO un muy feliz domingo de la RESURRECCION del SENOR……saludos cordiales   de Santiago Hernandez 

  • Gabriel Sanchez

    El enfoque catequetico que da Javier, me parece tiene una profundidad muy hermosa…
     
    Incluso, sabiendo que su  intuición, parece querer acércanos al Espíritu de Jesús, aunque no me parece que el intente y de hecho no lo hace con criterio científico acercarse a la historia…
     
    La idea de una fosa común resulta muy en la línea de unión y solidaridad con esa enorme fosa común que tiene la humanidad, en donde los perseguidos y ajusticiados por su lucha por la justicia, por una humanidad más solidaria y fraterna están, en donde están los millones que mueren anualmente de hambre, esta en la línea del mensaje evangélico…Sin lugar a dudas, en esa fosa común, sufre nuestro corazón y el de Jesús y en ellos se reedita el misterio de la Cruz… Pero esta entrañable intuición que entiende marca una presencia de Jesús en tanto su amor por los pequeños, por los masacrados, por los hambreados y oprimidos hasta morir…No es consistente históricamente…ni necesita serlo…Porque  la contemplación de la Cruz del Jesús de Nazareth, nos remite a esa fosa común de la humanidad, en donde sin lugar a dudas estará Jesús, no su cuerpo…sino Él en su totalidad…
     
    Y también acompaño esa otra intuición de que Jesús no tiene tumba…Es decir, no quiso erigirse en esta etapa de la historia, como un poderoso al estilo de los ricos y poderosos de la tierra, esto independientemente de donde fue enterrado…Hay un hermoso relato del Padre Anthony de Mello. En donde una tribu que vivía en un lugar helado, muchos morían de frió, el les enseño a hacer fuego para calentarse y como el pueblo lo quería mucho por eso, los pontífices de la religión de esa tribu, comenzaron a recelar de el, un noche calladamente se fue de esa tribu y continuo enseñando a otras tribus el arte de hacer fuego…En una de ellas las gente lo quiso tanto que antes de que se fuera, los pontífices religiosos de esta tribu lo mataron ….y como era muy querido… enseñaron a adorar los instrumentos con que el hacia fuego y la gente ocupada en adorar los instrumentos, olvido el arte de hacer el Fuego…
     
    Bueno, yo siento que Jesús de Nazareth, nos incendia con su fuego, y no quiere que veneremos una Tumba…Sino la vida que el representa venciendo a la muerte…Esta bellísimas intuiciones son muy compartibles con Xavier, pero repito, con toda humildad, una cosa esta intuiciones hermosas y otras los acontecimientos históricos, que por lo menos en lo de la tumba… parecen ser distintos a la hipótesis de Xavier…por lo menos si se usa la metodología de investigación histórica …sobre fuentes primarias y fuentes secundarias …
     
    Sobre la ciencia, seria bueno recordar, que lo enfoques más modernos, sobre los comportamientos de la realidad, apenas nos dan  muchas incertidumbres y pocas certezas, como para afirmar en forma absoluta nada basándose en la ciencia… (leer temas como la teoría de las cuerdas y la teoría del caos)
     
    En cuanto a la Fe, sin imponerle a nadie y con absoluto respeto por quienes piensen o sientan diferente, me permito en proclamar que yo creo que  se verifica la Resurrección de la Vida, en Jesús de Nazareth…Y ESA RESURRECCIÒN ABARCA TODOS LOS ASPECTOS DE LA REALIDAD, INCLUSO EL FISICO…E HISTORICO…Y QUE ESA LIBERACIÒN DE LA VIDA DE TODA MUERTE…ES TAMBIÈN HOY UN PROCESO HISTORICO DE SALVACIÓN-LIBERACIÓN…EN EL QUE JESUS NOS QUIERE TRABAJANDO A SU LADO…A LA CONSUMACIÒN DE ESE DESTINO EN LA HUMANIDAD, QUE COMIENZA EN LA HISTORIA Y LA TRASCIENDE (según mi modestísima Fe), LE LLAMAMOS MUCHOS EL REINO DE DIOS…

  • mªpilar garcía

    Oscar amigo:
    ¿Como  explicar sus comentarios, cuando todo cuanto dicen una y otra vez, es precisamente “leyendo los textos que les interesan a la letra”? así, solo se hace una “religión” a la carta, no una manera de ¡vivir!

    Estos días, tengo el gozo de escuchar a José I. González Faus; al comenzar su exposición, dice:

    Voy a aclarar algunos conceptos, para “comprender”… y poder sumergirnos en estos relatos, desde el corazón, dejándolos hablar”.

    Muy acertada tú exposición… inútil para los que solo les interesa el texto, y no la ¡¡Vida!!

    Desde Jesús, esa es la gracia más poderosa para toda la humanidad.

    Jesús vivó en plenitud, hasta darse todo el; para abrir una nueva mirada, de lo que el ser humano puede hacer, con su “Vida”
    Llevarla a su plenitud… para el bien de toda la humanidad; o vivir solo para el mismo.

    Jesús abrazó de manera especial, a todos los ninguneados de este mundo.
    Ahí está su fuerza, contra el mal espíritu que reina en este mundo, al que somos responsables de “elegir” como dioses nuestros.
    mª pilar

  • pepe sala

    Pues a mi sí que me apetece comentar el texto de las madres de La Plaza de Mayo. ( sobre el resto, anterior, sólo comentaré que para hablar de fosas comunes, de asesinados inocentes y de holocáustos, no hace falta salir de nuestra propia casa. Nuevamente se trata de barrer el patio de los vecinos dejando el nuestro lleno de basura.)
     
    Básicamente estoy de acuerdo con el texto de las madres, pero hay algún matiz que creo importante resaltar. Dicen las madres:
     
    “”La vida de un ser humano no puede valer dinero, y mucho menos la vida de un revolucionario. Lo que hay que reparar con justicia no se puede reparar con dinero…Rechazamos los homenajes póstumos Rechazamos las placas y los monumentos porque eso significa enterrar a los muertos.””

    De ninguna forma habrá justicia sin la REPARACION que la propia justicia contemple en cada caso.   ( Lo que cada cual haga con la reparación será su propia conciencia quien lo dicte.)

    Y Hay algo más importanta aún, según mi criterio: Los humanos necesitamos algo concreto para animar nuestra memoria. Creo que lo llaman memoria geográfica, que viene a ser algo así como un LUGAR FISICO donde poderse reunir a recordar a los seres queridos. Eso lo saben muy bien los cristianos y vaya si tienen memorias geográficas. También lo saben perfectamente los ” vencedores” y pasadas más de tres décadas siguen manteniendo miles de lugares para sus conmemoraciones.

    ¿ Por qué no han de tener nuestras víctimas un lugar GEOGRAFICO donde podernos reunir en grupos de recuerdo?
    No tiene que ser el lugar exacto donde yacen los restos óseos, sería imposible conocer todos y no se deberían hacer tantos agravios comparativos.  Creo que el mismo derecho tiene la familia de Federico García Lorca ( por ejemplo) que la familia de cualquier republicano-a que sigue tirado en cualquier cuneta de cualquier lugar de España.

    Yo mismo estoy fabricando con mis propias manos ( y mi propio dinero) una PLACA de recuerdo a Juanín. No se la hago a mi padre, pero mientras sueldo las chapas y estaño los adornos, mi recuerdo es constante hacia mi padre. ” Si él estaría aquí me enseñaría cómo hacer esta parte tan difícil”. Y mientras fabrico una placa de recuerdo, las personas que sufrieron tanta represión y tanta muerte están siendo HONRADAS por mí.

    Y la memoria necesita el tiempo: un día del calendario. ( 24 de Marzo para las Madres de Mayo, 14 de Abril para las víctimas republicabas españolas, 25 de Abril para ponerle la placa a Juanín, pues es el día que le asesinaron… Y  la memoria humana necesita fotografías para tocar y acariciar a nuestros seres queridos, y necesita música para elevar nuestro espíritu y nuestras ánsias de Justicia.

    ¿ Por qué Jesucristo sí necesita tantísimos monumentos y lugares físicos para la memoria y nuestras víctimas tan recientes se van a quedar sin ellos? Yo no veo a mis víctimas representadas en la parafernalia cristiana. Se revolverían en sus cunetas y en sus fosas comunes desperdigadas.

    A cada cual lo suyo.

  • oscar varela

    Hola!
     
    Interesante lo del Sr. Pikaza.
    Me refiero a las diversas “interpretaciones”.
     
    Mientras no accedamos a una Antropología más simple y profunda acerca de la Vida humana,
    la diversidad de interpretaciones será una pared blindada.
    ··········
    Si alguno supiera porqué y cuándo empezó la costumbre de que los relatos evangélicos antepongan la pre-posición “según” antes del Autor (Mateo, Marcos, etc) me haría un favor de intelección.
     
    Con ella se nos muestra que no hay cosas “en sí”, sino cosas “según” un punto y modo de ver del ser humano haciendo su vida.
    ··········
    La tal Antroplogía (comprensión del ser humano viviendo su vida “entera”; no en “partes” des-membradas) daría cuenta que no hay que asustarse –ni ponerse a pelear- de que el otro tenga otra opinión; y que la actitud creadora es la de una construcción de cooperación.
     
    El primer ejercicio del amor de aprojimación es otorgar un crédito al otro con quien me encuentro conviviendo.
     
    Sólo luego y sobre esa base firme (el crédito) se podrá establecer un diálogo dis-creto.
    ············
    Excursus: por ejemplo y como didáctica
    * prohibirme hacer un Comentario en Atrio sin antes haber encontrado un valor o verdad en la opinión de aquello que habré de comentar.
    * Siempre empezar por allí y, si fuere necesario, encontrarle el matiz que lo enriquezca:
    * o simplemente acompañar la consideración del compañero.
    ··············
    Referido a la Convocatoria del 24 de marzo en la Plaza de Mayo habría, entonces, que decir (además de que fue de gran masividad):
     
    1º) que hubo dos opiniones diferentes, cuya divergencia se correspondía en el modo de interpretar las actitudes del Gobierno argentino actual (“de los Kirchner”).
     
    * Una Columna de la Marcha ingresó en horario postergado por la Diagonal Norte hacia la Plaza
     
    * Otra Columna ingresó antes por la (españo-madrileña) Av de Mayo.
    Me consta que dentro de este Grupo en el que estaban las “Madres” había también, al menos dos “interpretaciones” diferentes:
    a) La de tipificada en Hebe de Bonafini (mucho más cuantiosa y radicalizada)
    b) La denominada “Línea Fundadora” (muy perfil bajo) presidida ahora por Marta Vázquez.
    ·········
    Lo que pretendo rescatar es el esfuerzo que tenemos que hacer por mejorar los Criterios de interpretación de los Hechos;
     
    porque LOS HECHOS de por sí son HECHOS BRUTOS, no dicen nada
    sino aquello que n/criterios les hacen decir.
     
    Y no hay que tener miedo al diálogo creador de significados.
     
    ¡Vamos todavía! – Oscar.

  • Buen pregón de Pikaza y de las Madres para romper con la teatralidad con que esta Semana se reviste.
    <b>LOS MUERTOS VIVEN</b>

  • Sergio Zalba

    Me resultó excelente la reflexión de Pikaza.

    Sin ser experto, también me inclino por la propabilidad de una fosa común, pero no veo allí lo nuclear de su texto. Sólo quienes no quieran ver ese nucleo fundamental intentarán opacarlo insistiendo en la literalidad del relato evangélico.

    Diría, incluso, que aferrarse a esa literalidad me parece más un actitud temerosa que de  ‘verdadera fe’ como se la pretende tener y demostrar.

    ¿Recuerdan la película ‘El cuerpo’? ¿Qué harían los literalistas si algún arqueólogo encontrase el cuerpo de Jesús? Tal vez, se enterrarían ellos mismos acosados por la frustración de su ‘fe verdadera’.

    Si la resurrección de Jesús se agotara en una mera (y absolutamente improbable) revivificación corporal, ¡qué pobre sería la fe de los cristianos!

    Del texto de las Madres de Plaza de Mayo, no digo nada, se comenta solo. ¡Extraordinario!

  • Julio Rebollo

    Xavier, gracias por este bellísimo relato que nos hace comprender mejor la “ausencia” del cuerpo material.Espero con impaciencia tu próximo ciclo de conferencias en Mallorca.

  • Javier Renobales Scheifler

    Parece que hubo en el evangelista que escribía después de la destrucción de Jerusalén por los romanos en el año 70, una intencionalidad o tendencia a intentar llevarse bien con los romanos, culpando del asesinato de Jesús exclusivamente a los dirigentes religiosos judíos, para que los romanos tan destructores no confundieran a los seguidores de Jesús con los judíos.
     
    De ahí por ejemplo todo eso de lavarse las manos como Pilatos (gesto hipócrita) y lo de que caiga sobre vosotros (los judìos) la sangre de este que me voy a cargar, que escribe el evangelista.
     
    Pilato encontró a Jesús culpable de tener éxito entre el pueblo y de salirse del control de las autoridades religiosas judías, lo que le hacía peligroso para el dominio del Imperio romano sobre los judíos, lo cual justificaba para la ‘justicia’ romana el asesinarlo junto a otros rebeldes que no aceptaban la dominación romana.
     
    Porque el mensaje de salvación de Jesús, la causa del Reino del Amor que predicaba Jesús sobre todo a los pobres y oprimidos por el sistema establecido por las autoridades romanas y judías, ponía patas arriba dicho sistema  y convertía a Jesús en enemigo peligroso de los intereses de dichas autoridades.
     
    Y por eso lo mataron, porque Jesús era culpable de atacar esos intereses de los dominadores del pueblo.
     
    Ya Romanos 13 muestra como Pablo de Tarso, a diferencia de Jesús, quería llevarse bien con las autoridades. Pablo influyó en los evangelistas en este sentido. Es necesario analizar la intencionalidad con la que escriben los autores del NT, para tratar de descubrir lo que hay de verdad en el NT.

  • Santiago

    Hay que recordar que Pilatos jamas creyo en la culpabilidad real de Jesus -nada encontro en ese justo que lo hiciera reo de muerte- sino que accedio mas bien ejecutarlo  por miedo a que las autoridades religiosas judias lo denunciaran a Roma como tolerante de sediciones en un pueblo ocupado, c0mo era entonces Israel..No es inverosimil que Pilato concediera a miembros del Sanhedrin el hacerse cargo del cuerpo de Jesus. Mateo dice espresamente que Pilato “ordeno” que el cuerpo fuese dado a Jose de Arimateo y que Jose “lo envolvio en una sabana limpia y lo coloco en el sepulcro”…y Lucas dice que “las mujeres que habian acompanado a Jesus desde Galilea,SIGUIERON de CERCA y OBSERVARON el sepulcro y COMO ERA COLOCADO su CUERPO (en el)..Cuando regresaron (del entierro) PREPARARON aromas y MIRRA (para embalsamarle) Y el SABADO descansaron SEGUN LA LEY (Lucas 23,55-56) (los parentesis son mios)…Y Mateo en 27, 62 y sig relata como los principes de los sacerdotes y los fariseos pidieron a Pilato “sellar” el sepulcro por miedo a que los discipulos de Cristo robaran el cadaver..y Pilato accedio y “ELLOS fueron, SELLARON la PIEDRA y aseguraron el sepulcro con la GUARDIA” Mt. 27 66)…Yo creo que la construccion de los evangelistas que relatan el testimonio de TESTIGOS que vivieron todavia por bastante tiempo despues de la muerte de Cristo, ES MAS VEROSIL, que la de las reconstrucciones de los que quieren escribir otra vez la historia….Es mejor, que confiesen que los hechos estan ahi, pero que se resisten a creerlos…pero es mejor no deformar, sino informar correctamente…un saludo de Santiago Hernandez  

  • oscar varela

    Hola Manuel V.!
     
    Te pregunto por tu Comentario.
     
    porque no llego a entenderlo.
     
    ¿Será  la forma de que, aunque hables el español, no llegue yo a entender el “ideoma”?
     
    ¿O será que empleas una forma “irónica”?
    ···········
    Me importa porque te refieres a las Madres de Plaza de Mayo.
     
    Al respecto te cuento que en Argentina todos los 24 de marzo se honra los desaparecid@s.
     
    A las “Madres”, por lógica y concreta extensión.
    ·············
    Ya comenté en Atrio que el 24 de marzo de este año estuve en la Plaza de Mayo
    y que muchas mamás y papá, hermanos y hermanas, parientes, amigos y amigas de “desaparecid@s” portaban un estandarte con la FOTO de la chica o del chico (promedio de 20 años de edad).
     
    Debajo el NOMBRE,
    el cual se remataba en una frase final: “ÉL VIVE
    ·········
    La cosa no es nueva.
     
    Costa Gravas (si mal no recuerdo) filmó en Chile una afamada Película con nombre extraño e “irónico” para el no avisado.
     
    El Argumento era sobre los “desaparecid@s”. La tituló “Z”.
    Porque “zeta” es la fonética que en oídos griegos dice, precisamente, “ÉL VIVE
    ···········
    Te reitero que me importa conocer el “auténtico” significado de tu Comentario.
     
    Gracias – Oscar.

  • Manuel V.

    Lo que nos faltaba
    ¿para que se incluye a José de Arimatea en el relato? ¿Le gustaba el nombre al evagenlista? ¿O acaso le pagó para salir en la peli?
    Yo acabo de deducir de la exégesis de los textos citados lo siguiente: La mujer de Poncio Pilato, que ya le había advertido por sus pesadillas, consiguió que ordenara a la guardia narcotizar al condenado. Dado que solo la guardia podía enterrarlo, se lo llevaron y la esposa de Pilato le curo y lo mandó a Roma, donde vive en el corazón de sus amigos hasta el presente.
    Opino que la exégesis de Picaza está muy bien como novela del corazón. Lo de las madres de mayo, como confirmaciòn de su tesis, nos llega al alma.
    Feliz Pascua de Resurrección de Aquel que murió para ya no vivamos para nosotros mismos.

  • Antonio Vicedo

    Disculpad. Mi  Comentario de referencia,  pertenece al artículo de Hector ¿QUÉ ESTÁ PASANDO EN LA IGLESIA? Gracias.

  • Antonio Vicedo

    Respetando la circunstancialidad científico- exegética , que bella y profundamente expone Pikaza, y porque  sobre la realidad de la RESURRECCION del JESÚS MUERTO hay que recurrir  a la ACTITUD DE FE, en ella me baso y me apoyo,  para aportar aquí, repetido, el COMENTARIO que he añadido a la Entrevista de E. JUAN S. 

    Mira que ocurrírsele al PADRE resucitar a aquel Jesús de Nazaret, condenado como blasfemo y revolucionario  por aquellos que entendían de Religión y de Imperio!
    ¡Con lo bien que hubiera quedado todo, dejándole desacreditado y fracasado ante su Pueblo y sus mismos seguidores!
    ¡Con lo tranquilitos que podrían seguir cuantos religiosa o laicamente asumieron y asumen la representación terrenal del TODOPODEROSO!
    Pero ¡Lastima para ellos! Pues,  empeñándose en seguir  manipulando y expoliando a los humanos, ALGUIEN, desde  entre ellos  muy escoradamente hacía los más pequeños, sigue con lo que empezó  y, ahora, sin que  de ÉL se puedan deshacer.
    Lo intentarán con los que, en su sencillez y necesidad de liberación, intenten seguirLE y poner en ÉL su esperanza, pero van siendo demasiados y además,  son cada día menos manipulables,  porque TÉCNICAS Y CONCIENCIA, como hacen los volcanes, han entrado en erupción.
    Ni destacamentos armados, ni legiones, ni Religiones, van a poder nada  ante la eclosión de vida solidaria de los Pueblos cuando termine de condicionarlos el Sábado y los miedos.
    LA VIDA ya ha vencido a LA MUERTE y puede que pronto, sin que se sepa muy bien por quien, LA PIEDRA que cierra el sepulcro donde se entierra a las gentes de los Pueblos, será removida y resonará, por la aún penumbra del amanecer, en los oídos de las mujeres arriesgadas y enamoradas de la VIDA,  ese ¡HA RESICITADO! No busquéis más entre la muerte a  LA VIDA VUESTRA y de VUESTROS  HERMANOS.  LA encontrareis  con ÉL , en la pobre sencillez de GALILEA, sin necesitar de IMPERIOS,  ni SANEDRINES.
    Porque  es VERDAD  que lo difícil es NO AMARSE, pues  nada  resulta más fácil  y satisfactorio que  AMAR.

  • oscar varela

    Hola!
     
    En consonancia con las Madres de Pza. de Mayo
    que el Autor resalta
     
    Comparto a los compañeros de Atrio
    los deseos de mi amigo belga
     
    ¡Vamos todavía! – Oscar.
    ···········
     
    Pascua bilingue
     
    Chers amis haïtiens,
     
    Je vous souhaite une véritable fête de Pâques.
     
    Les juifs célébrent Pâques pour se souvenir qu’ils s’étaient libérés de l’esclavage de l’Egypte.
    Vous autres aussi, les haïtiens, comme les juifs, vous avez su vous libérer de l’esclavage.
     
    Les chrétiens fêtent Pâques pour se souvenir de la résurrection de Jésus.
    Vous aussi, comme peuple, vous devez ressusciter.  
     
    Un jour, comme Jésus de Nazareth passait près du Temple de Jérusalem, un paralitique qui mendiait près de la porte lui cria pour lui demander de l’aider. Jésus lui ordonna : “Lève -toi, et marche”. Le paralitique fit un grand effort, se leva, et marcha. Pour ce paralitique, ce fut un passage de la mort à la vie, une Pâques.
     
    Après le tremblement de terre, vous devez vous relever, comme le paralitique.
    Et vous le ferez, si vous voulez le faire.
    Ce sera votre nouvelle Pâques.
     
    Haití a été envahi, a plus d’une reprise : et maintenant encore, vous êtes envahis.
    Il y a 35  ans, les nicaraguiens célébraient la Pâques en se souvenant de l’ordre de Jésus : “Lève-toi et marche”.
    Et ils chantaient á Jésus : “Dans chaque bras qui se lève, tu ressuscites”.
    Le peuple haïtien est capable de se lever et de ressusciter.
     
    Bonne fête de Pâques.
    ……………………………………….
    Amigos haitianos :
     
    Les deseo una auténtica fiesta de Pascua.
     
    Los judíos celebran la Pascua para recordarse que se habían liberado de la esclavitud de Egipto.
    Ustedes también, los haitianos, como los judíos, han sido capaces de liberarse de la esclavitud.
     
    Los cristianos celebran la Pascua para recordarse de la resurrección de Jesús.
    Ustedes también, como pueblo, tienen que resucitar.
     
    Un día, como Jesús de Nazareth pasaba cerca del Templo de Jerusalén, un paralítico que pedía limosna cerca de la puerta le gritó para pedirle ayuda. Jesús le ordenó : “Levántate y camina“. El paralítico hizo un gran esfuerzo, se levantó y caminó. Para ese paralítico, eso fue un paso de la muerte a  la vida, una Pascua.
     
    Después del terremoto, ustedes tienen que levantarse, como el paralítico.
    Y ustedes lo harán, si lo quieren hacer.
    Será vuestra nueva Pascua.
     
    Haití ha sido invadida, en más de una ocasión : y hoy todavía ustedes sufren una invasión.
    Hace 35 años, los nicaragüenses celebraban la Pascua recordándose de las palabras de Jesús : “Levántate y camina”.
    Y cantaban a Jesús : “En cada brazo que se alza, estás resucitando“.
    El pueblo haitiano es capaz de levantarse y resucitar.
     
    Les deseo unas felices Pascuas.
     
    Rogelio Ponsard
     

  • Chari

    Solamente he llegado a entender el motivo de la muerte de Jesús cuando he entendido que “Jesús no murió por nuestros pecados”, sino que “Jesús murió para enseñarnos en propia carne cómo teníamos que vivir si queríamos llegar a Dios”.
    Ahora entiendo que su vida revolucionaria no podía llevarle a otra muerte que a una muerte injusta por parte de los poderosos  y también comprendo su resurrección , no como algo físico o biológico, sino como una revolución espiritual de todos aquellos que lo conocieron y vieron que su mensaje tenía que seguir vivo a lo largo de los siglos, para que hubiera otros revolucionarios, discordes, luchadores y gentes capaces de llegar a la muerte por defender la justicia y ponerse en lugar de los indefensos.
    Posiblemente a Él no le hubiera gustado tanto el sepulcro de Arimatea, como una fosa común donde su cuerpo pudiera convertirse en tierra de la tierra como todos los inocentes ajusticiados.
    De todas formas, lo importante no es dónde fue enterrado, ni siquiera si resucitó fisicamente (pues hay teorías forenses bastante fiables sugiriendo que Jesús no murió en la cruz). Aún así, si tanta gente seguimos hablando de Él después de 2000 años, si seguimos intentando seguir sus pasos,  si seguimos creyendo en su mensaje, ¿no será que sigue vivo entre nosotros aunque a veces nos empeñemos en no reconocerlo como los de Emaús?

  • ana rodrigo

    Muy convincente la exposición de Pikaza complementada con la magnífica manifestación de la Madres de la Plaza de Mayo.
     
     A mí también me sirve esta explicación de Pikaza, lo que desconozco a cuántos y a cuántas creyentes cristianas le ocurre lo mismo. La interpretación tradicional de la Iglesia en sentido histórico, así tal cual, con el añadido de los vívidos relatos que han llegado hasta nosotros sobre el Jesús resucitado, nos pone muy difícil cambiar el chip mental y sobre todo de fe.
     
    Aunque parezca una contradicción, a la gente le es más fácil creer en la resurrección física de Jesús, que en la vida de su mensaje y su proyecto. Los mitos y lo mistérico siempre ha tenido muy buena acogida en los humanos.