Esto es lo que le dijo un niño de menos de 8 años, acurrucado junto a su madre, al joven periodista palestino M. Mushtaha a los pocos meses de empezar el exterminio de los habitantes de Gaza; petición a la que añadió “mi hermana pequeña llora durante toda la noche porque quiere leche” Esta desgarradora escena está tomada del librito “Sobrevivir al genocidio de Gaza” (Ed. Escritos Contestatarios, 2024) escrito por Mahmoud Mustaha.
La periodista Olga Rodríguez escribe en el prólogo “Conocemos lo que ocurre en Gaza gracias a periodistas como M. Mushtaha. Su narración es un mensaje dentro de una botella lanzada al océano de la impunidad ¿Cuántas personas de Gaza podrán contar al mundo su historia? ¿Cuántas, fuera de la franja quieren saber y escuchar?
He aquí algunas afirmaciones de este periodista palestino de 23 años, citadas cronológicamente: el 9 de octubre del 23 el ministro de Defensa israelí nos declara la guerra y nos define como animales humanos.” “Ni agua, ni comida, ni electricidad, ni combustible, si pudieran privarnos del aire que respiramos lo harían”. “En un ataque aéreo perdí a 41 miembros de mi familia, enterramos a 9 y el resto permanece bajo los escombros”. “La guerra pudo haber atacado nuestras casas, nuestras familias y nuestra tierra, pero el hambre apuntó directamente a nuestra dignidad y a nuestra voluntad de vivir”.
Dice Mushtaha “¿Cómo puede el mundo permanecer en silencio, cuando se está derramando tanta sangre inocente?” “Nos sentimos abandonados por el mundo, abandonados a nuestra suerte en un conflicto que no tiene visos de resolverse” “Somos los olvidados, los desamparados, los traicionados por todos. Los horrores que soportamos desafían la comprensión humana. La verdad de Gaza se escapa a la cámara, la pluma o la palabra”
Estos son los hechos, narrados no para dar pena sino para revelar la verdad, según su autor. Y aquí estamos los lectores sin saber qué hacer. Es evidente que la diplomacia, las sanciones a Israel, y las presiones políticas potentes han de actuar para acabar con este horror y esta crueldad, pero algo debíamos pensar los ciudadanos de a pie para demostrar a los palestinos nuestra compasión y solidaridad: asistir a manifestaciones, a momentos de silencio o de denuncia al pie de una bandera palestina, a conferencias de historiadores o periodistas buenos conocedores … Un amigo proponía que estudiáramos el mapa de Oriente Medio, porque seguramente tenemos muchas lagunas, y que usáramos nuestros conocimientos de geografía para sacar la conversación en los ambientes en que fuera posible … Y terminaba diciendo “si cuando nos enteramos de la realidad de Gaza y de los países próximos agredidos, no se nos saltan las lágrimas, es que no nos hemos enterado de nada”
Ayer escuchándo la radio me detuve un rato a pensar.
El periodista relataba los planes del ejército israelí para dejar a Hezbolá sin financiación y con una naturalidad que da miedo afirmó: “No obstante, es muy difícil que se pueda eliminar la financiación de Hezbolá porque sus reservas económicas están ocultas bajo el Hospital General de Beirut”.
Nadie se estremece por ello. El culpable será el ejercito israelí si se atreve a atacar dichas reservas para cortar la financiación de un grupo terrorista.
Media hora después, una entrevista al fiscal jefe del Tribunal Penal Internacional, ponñia las cosas en su sitio (A mi juicio):
El problema, para acabar con las guerras de Oriente Medio y Ucrania (Y no nos olvidemos de otras que como no salen en la prensa no importan a nadie, como Sudán del Sur, Eritrea, Somalia, Yemen, etc…) es que existen colectivos organizados que usan la guerra como “arma política”. Y no me refiero solo a grupos terroristas, también a estados constituidos formalmente, ya sean democráticos, como Israel, o dictaduras como Rusia o Irán.
El fiscal jefe del Tribunal Penal Internacional ponia como ejemplo a España y su lucha contra ETA. Curiosamente ETA se definió a si misma como una organización militar, es decir que estaba dispuesta a usar la guerra como herramienta para obtener sus objetivos polítocos.España y sus sucesivos gobiernos, de cualquier signo político, lucharon contra la barabarie etarra con la calma, resignación, y por qué no decirlo, contundencia civil y policial necesaria, pero dentro de unas reglas; e incluso las tentaciones, que todos los gobiernos tuvieron, no sólo el de González, de usar guerra sucia, han sido combatidas con la misma contundencia judicial y policial.Pero a los que lo vivimos (Mi padre estuvo amenazado por ETA muchos años y lo más “político” que había hecho en su vida era ser del Atleti) nos resulat triste ver como hoy en día incluso los compañeros de partido de quienes dieron su vida por “hacer las cosas bien” olvidan su sacrificio.
Obviamente los casos de Palestina y Ucrania (No nos olvidemos de los ucranianos o estaremos haciéndole el caldo gordo a un tirano asesino como Putin) son mucho mayores en escala. Los muertos de ETA apenas llegan a 800 reconocidos y alguno más por reconocer mientras que en Gaza llevan más de 45.000 y en Ucrania más de 100.000.¿Cuál es la solución al problema? ¿De verdad cree alguien, con un cerebro funcional, que las agresiones de Rusia, Hamas. Hezbola, Israel, e Irán, se pueden combatir sin el uso de la fuerza?
Ni siquiera la de Israel, país mucho más condicionado por su dependencia de teóricas democracias liberales como USA es controlable. Mucho menos las de tiranías sin escrúpulos morales como Rusia o Irán. Y no descarten que se unan actores invitados (Ya está el tirano de Corea del Norte amenazando con participar como buena marioneta de China que es)Yo no conozco la solución. No soy tan listo. Pero recuerdo los años en el colegio, en los 70s. donde los conocidos como “macarras” gobernaban los patios a su antojo. Muchos sufrimos de “bulling” de una forma que hoy sería impensable y el hecho es que hoy en día siguen existiendo (E incluso lo graban en el teléfono)Creedme que hay días que no se como podría yo hacer eso de poner la otra mejilla…
Amiga Lola: Ese caso que citas recuerda la parábola, tantas veces mencionada, del “Venid, benditos”… En esa parábola hay rasgos excepcionales de apertura y de superación de identidades étnicas y/o religiosas… En ella el principio más importante no se relaciona con Dios ni con Jesús de Nazaret. Se relaciona solo con los que sufren y con los que hacen el bien aliviando el dolor… Éste es el culto que el Dios de Jesús quiere, no para Sí, sino para los necesitados o atropellados o espoliados…
-Quienes niegan el pan y/o destruyen, por ejemplo, centros de atención médica que, al menos, alivian el sufrimiento humano…, ¿qué defienden en realidad? Ante el dolor humano, contra el dolor humano, no caben ni deben primar las etnias ni los mitos, ni tradiciones religiosas, ni el ojo por ojo, ni muros, que más que separar, matan… El “ojo por ojo” solo engendra odios y más guerras… Los fanáticos, atrincherados tras muros, no son capaces de ver que esa estrategia del “ojo por ojo” es un gran error, y se halla muy lejos de la esencia de esa parábola. No importa repetirlo: Muchos israelitas deberían releer y/o reflexionar más en esta parábola… de un compatriota suyo, excepcional.No el “ojo por ojo” -que vale también para muchos combatientes de Hamás etc.-, sino el encuentro sereno, donde se escuche y busquen soluciones pacíficas, sin odios… Para eso hay que derribar muros de mitos y odios… Hay que renacer… Sin renacer no se posible la PAZ.
Estoy de acuerdo con lo que dice Eloy. No me acostumbro a las noticias ni a las imágenes, y mucho menos a tanto sufrimiento, sin esperanza de que esta maldita guerra y otras, paren de una vez. El camino va en dirección contraria a nuestros deseos y maldiciones: Netanyahu no tiene alma, la ONU no sirve para nada, el Consejo de se Seguridad para menos, el mercado de las armas, pujante. En fin, un desastre. Mucho dolor…. Yo dudo si veremos el fin. Porque los supervivientes palestinos, reactivarán a Hamás por los siglos, e Israel seguirá en su objetivo, que nos es otro que eliminar al pueblo palestina.
Gracias Lola.
Citas: “si cuando nos enteramos de la realidad de Gaza y de los países próximos agredidos, no se nos saltan las lágrimas, es que no nos hemos enterado de nada”. La impotencia ante los desafueros, la violencia guerrera y los crímenes que se suceden en Gaza y en Libano nos abruman. Tú, muy acertadamente, nos invitas a no olvidarlo, a recoger testimonios, a llevarlo a nuestras conversaciones, a sentir cada muerte como si fuera la primera, y a no “normalizar” el crimen y el dolor de las victimas. Gracias.
Sin embargo, Eloy, os encanta olvidar las agresiones de vuestros amiguetes.
las de Rusia a Ucrania, Irán a Israel, Maduro, Ortega y Díaz Canel a todo su pueblo.
Tenéis una doble moral que asusta.
No me convences.
No me engañas.
USO – Gracias!
“Los BRICS se han convertido ya en el epicentro del Nuevo Mundo multipolar.
Los BRICS son el epicentro del mundo, de la nueva geopolítica, de la diplomacia, de la paz y, sobre todo, son la esperanza de que los países del Sur Global que aspiramos al desarrollo que desde hace 200 años”