LA SIROFENICIA
Esta lectura de reposada de Marcos tiene como objetivo enseñarnos a captar, escudriñando, lo qua hay dentro de ese texto. A veces las ideas preconcebidas de tantas veces como nos han contado lo mismo nos impiden ver el relato como si fuese la primera noticia que tenemos de los hechos que describe Marcos.
EL TEXTO
“24. Se marchó desde allí a la comarca de Tiro. Entró en una casa, no queriendo que nadie se enterase, pero no pudo pasar inadvertido. 25. Una mujer que había oído hablar de él, y cuya hijita tenía un espíritu inmundo, llegó en seguida y se echó a sus pies. 26. La mujer era griega, una fenicia de Siria, y le rogaba que echase al demonio de su hija. 27. Él le dijo:
-Deja que primero se sacien los hijos, porque no está bien tomar el pan de los hijos y echárselo a los perros.
28. Le contestó ella:
-Señor, también los perros debajo de la mesa comen las migajas que dejan caer los chiquillos.
29. Él le dijo:
-Por eso que has dicho, puedes marcharte: el demonio ha salido de tu hija.
30. Al llegar a su casa encontró a la chiquilla echada en la cama; el demonio se había marchado.
31. Dejó Jesús la comarca de Tiro, pasó por Sidón y llegó de nuevo al mar de Galilea por mitad del territorio de la Decápolis” (Mc 7, 24-31).
- DE IMPROVISO, UNA MUJER
“24. Se marchó desde allí a la comarca de Tiro. Entró en una casa, no queriendo que nadie se enterase, pero no pudo pasar inadvertido.
La quiebra existente entre Jesús y la institución se había agigantado tras el fuerte encontronazo entre ellos. La praxis del hombre de Galilea ponía en grave peligro la estabilidad institucional. Todas las luces rojas estaban encendidas.
El comienzo del relato encierra mayor contenido de lo que parece a simple vista: “Se marchó de allí a la comarca de Tiro”. No hay localización precisa sobre su salida, aunque Marcos señala intencionadamente: “de allí”. No le importaba tanto el sitio cuanto los hechos y la tensa atmósfera que allí se respiraba: Los líderes están al acecho y los discípulos retraídos en un distante silencio. La salida resulta obligada.
El destino se dibuja con términos más concretos: “se marchó hacia la comarca de Tiro”. Se trata de un territorio ajeno al estrecho mundo religioso judío. La ciudad de Tiro, situada a orillas del Mediterráneo oriental, fue puerto fenicio de gran dinamismo comercial. En esa zona se asentaban en aquella época numerosos núcleos judíos (Mc 3,7-8).
Jesús encontró buena acogida en ese nuevo escenario: “Entró en una casa, no queriendo que nadie se enterase”. Marcos no precisa el lugar, subraya la hospitalidad que éste le presta (“una casa”) como contraste al entorno crispado de donde proviene. Jesús desea el anonimato, aunque no se cumplió su aspiración: “no pudo pasar inadvertido”.
25 Una mujer que había oído hablar de él, y cuya hijita tenía un espíritu inmundo, llegó en seguida y se echó a sus pies.
Un personaje aparece al instante: “Una mujer que había oído hablar de él”. Es definida de forma indeterminada (“una mujer”). Se trata de una figura representativa. Ella ocupa todo el espacio. Es la segunda mujer que interviene activamente en este evangelio. Como la primera, la que padecía el problema crónico de derrames de sangre, la razón que la motiva a dar el paso es que “había oído” (5,27). Marcos deja entrever que ella identifica a Jesús por sus acciones inmediatamente anteriores: la anulación de las fronteras religiosas y su iniciativa de establecer la práctica de la igualdad como el principal objetivo humano. Frente a la sordera de los discípulos, Marcos destaca en la mujer su capacidad para escuchar.
Nuestro narrador añade otra nota significativa sobre el personaje: “cuya hijita tenía un espíritu inmundo”. El diminutivo empleado para referirse a su hija: “hijita” coincide con el que Jairo utilizó para hablar de la suya (5,23). Su situación recuerda también el caso del hombre esclavo de la Decápolis (“un hombre poseído por un espíritu inmundo”; 5,2)
Marcos ha trazado un primer perfil de la mujer con tres pinceladas que rememoran a los tres personajes aparecidos tras el episodio del temporal sobre la barca: el hombre esclavo invadido por la violencia, la mujer desahuciada que supo escuchar el mensaje y la hijita de Jairo. Sus tres relatos sirvieron de aleccionamiento a los discípulos. La triple alusión de Marcos induce a pensar ahora que se trata de un nuevo avance en la explicación de su proyecto.
El primer movimiento de la mujer: “llegó y se echó a sus pies” sugiere que, aún siendo extraña al núcleo familiar de la casa, se adentra en ella reconociendo en Jesús al hombre cuyo proyecto podría colmar de satisfacción todos sus anhelos.
26. La mujer era griega, una fenicia de Siria, y le rogaba que echase al demonio de su hija.
La mujer pertenece a la cultura predominante fuera de los límites de la nación judía (“era griega”). Desde dentro de los angostos límites judíos, se juzgaba a los extranjeros como seres de rango inferior. Los llamaban perros como forma de expresar su total desprecio hacia ellos. A pesar de su condición de indeseada, la mujer no tiene inconveniente en entrar. Jesús ha sido capaz de demostrar la invalidez de los principios religiosos y ha roto sus barreras intransigentes. El mensaje de aquel hombre que parece dar cabida a todas las culturas ha llamado poderosamente la atención de la mujer.
Marcos añade sobre ella que “era sirofenicia de nacimiento”. Alude a una existencia que desconoce la libertad, pues toda su vida se había desarrollado en un marco falto de independencia política. Al igual que el pueblo judío, su país se encontraba también bajo el yugo de la dominación romana. El imperio anexionó la Fenicia a su provincia de Siria en el año 68 a. C.
La mujer encarna los valores de una sociedad educada en la cultura que se había universalizado y de la que los judíos recelaban. Pero representa también a un colectivo humano que sobrevive lastrado bajo la presión política y económica del imperio. El fruto más valioso de una existencia marcada por el vasallaje, “su hijita”, simboliza al pueblo inmerso en un callejón sin salida. En el vano intento por superar su penosa servidumbre, el pueblo al que la mujer pertenece se halla invadido de una violencia estéril y autodestructiva contra el poder del imperio. Y al igual que ocurría con los judíos y los esclavos de la Decápolis, esa rabia contenida tenía postrados en el desaliento a los habitantes de Fenicia.
Ahí radicaba precisamente la preocupación de la mujer, que ha visto en Jesús la salida de ese círculo vicioso de la violencia: “y le suplicaba que echase el demonio de su hija”. Ella actúa convencida de que el proyecto del Galileo inutiliza el factor ideológico que impulsa a los humillados a querer utilizar la violencia como remedio a su situación. Ha comprendido que la violencia se neutraliza con la igualdad.
- EL DEBATE
27. Él le dijo: Deja que primero se sacien los hijos, porque no está bien tomar el pan de los hijos y echárselo a los perros.
Frente al reconocimiento y petición de la mujer, sorprenden las primeras palabras de Jesús: “Deja primero que se hayan saciado los hijos”. Su respuesta parece inadecuada. Ella solicita liberación…, y ¿él le habla de hartura? Además, choca negativamente una contestación tan brusca a una solicitud caracterizada por su derroche de confianza. La entrada de Jesús peca de cortante y, aunque no quiebra las esperanzas de la mujer (“deja primero”), si frena la energía con que ella cargó su iniciativa. Jesús le manifiesta la prioridad (“se hayan saciado”) del colectivo judío (“hijos”). El pueblo al que la mujer representa queda relegado a un segundo lugar.
La comprensión del sentido figurado aporta luz a la escena y descubre la estrecha relación entre la tenaz petición de la mujer y la desilusionante respuesta de Jesús. Al pedirle la liberación para su hija, la mujer que ha sabido oír le propone para su pueblo el mismo proyecto de sociedad alternativa que él ha presentado al suyo, el que se visualiza con la práctica de la igualdad. La petición refleja su ansia porque su pueblo abandone la ideología violenta que los destruye y dé con la salida definitiva, la que sacia. Así comprendió Jesús su solicitud. Por eso responde con el mismo verbo empleado para definir el efecto general producido tras la división de los panes: “Comieron todos hasta saciarse” (Mc 5, 42). La mujer había entendido que la violencia se extirpa definitivamente cuando la justicia alcanza su cenit.
Jesús pospone la solución del problema presentado por la mujer. Su proyecto daba prioridad al pueblo judío. Habría bastado decirlo así. Sin embargo, para justificar esa estrategia añadió una metáfora cruel en el fondo y la forma: “porque no está bien tomar el pan de los hijos para echarlo a los perros”.
El pan representa el mensaje, su proyecto. Es lo que anhela la mujer, por eso no le resultará extraño que Jesús le hable de panes cuando ella había solicitado liberar a su hija de la ideología violenta que la dominaba. Según la teoría expuesta con el ejemplo, el pan-proyecto pertenece en primera instancia al pueblo judío: “de los hijos”. A ellos corresponde por derecho el Reinado de Dios. La lógica del ejemplo comienza hablando de no arrebatarles ese derecho, pero al avanzar en el razonamiento deja atrás la cortesía y llega a la desconsideración y el insulto: “y echarlo a los perros”.
Es cierto que se percibe en la frase una dosis de ironía en consonancia con su suave comienzo: “No está bien…”. La ironía quita hierro a la ofensa. Incluso podría ser considerada no como insulto, sino como un simple recurso literario que daba entrada a la contestación de la mujer. Cabe pensar, en ese caso, en la finalidad pedagógica hacia los discípulos y aquellos lectores de la época más apegados a los valores del nacionalismo judío. Resulta posible, igualmente, aceptar como válido el argumento de que no se trata de un insulto puesto que Jesús había llamado hijo con anterioridad al representante de la humanidad universal: el paralítico (2,5). Pero por encima de todos esos intentos de justificación sobresale el insulto perro dirigido al colectivo humano al que la mujer representa.
Para observar la cuestión con objetividad conviene recordar que el relato de Marcos no responde a una crónica. La mujer es un personaje representativo, protagonista de una escena que hay que leer en sentido figurado. El término perro usado por Jesús en su contestación a la súplica de la mujer no supone un insulto hacia quien no posee personalidad física, pero si refleja el conflicto interior de aquel hombre de Galilea. Él necesitó saltar, ¡no, sin esfuerzo!, desde el dogmatismo nacionalista judío a una concepción de la existencia humana basada en la igualdad. Se puede admitir la ironía del vocablo. De igual modo, debe entenderse que Marcos lo incluyó en su relato con fines pedagógicos. Pero no hay razón para negar que dicha expresión sea signo de una deformación ideológica corregida gracias a la influencia de una cultura más abierta y a la opción personal del Galileo.
28. Le contestó ella: Señor, también los perros debajo de la mesa comen las migajas que dejan caer los chiquillos.
La mujer no se cohibió ante la respuesta desagradable de nuestro protagonista. Es más, Marcos apunta a que le dio nuevos bríos. Ella no entró al trapo de la ofensa. Comienza por dirigirse a él reconociendo su superioridad: “Señor”. Acepta implícitamente el derecho prioritario del pueblo judío, pero impugna la tesis de Jesús con el razonamiento típico de una cultura abierta: “también los perros comen debajo de la mesa las migajas de los chiquillos”. La mujer deja a un lado los principios teóricos y se centra en la realidad de los hechos. Su argumentación se desplaza hacia lo concreto: “debajo de la mesa”. Se sitúa un escalón por debajo del espacio propio de la comida y vuelve del revés el razonamiento de Jesús demostrando que la prioridad de los hijos resulta compatible con el alimento de los perros. La mujer se acoge a la realidad incontrovertible del aprovechamiento de la insignificancia. Basta con la nimiedad de las sobras. Lo que se tira o se desprecia evita posponer una solución que los pueblos requieren con urgencia extrema. El argumento usado por la mujer no tenía desperdicio. Y Jesús no tardó en convencerse de su innegable verdad.
29. Él le dijo: Por eso que has dicho, puedes marcharte: el demonio ha salido de tu hija.
La invitación a marcharse: “puedes marcharte” no es una orden, sino el reconocimiento de una conquista lograda por la mujer. Su razonamiento: “por eso que has dicho” le ha abierto la puerta a lo que ella deseaba. Ha acertado de pleno. Ella llegó a la conclusión de que la práctica de la igualdad como alternativa no pertenece en exclusiva al pueblo judío, sino que el universo de los pueblos sometidos la demanda como propia. El final de la respuesta de Jesús: “el demonio ha salido de tu hija” confirma que la solicitud de la mujer ha quedado satisfecha. Él le apunta lo que ella aún ignora, que cuando una sociedad opta por la igualdad inaugura la liberación del pueblo. Ella no ha necesitado que alguien le concediera lo que solicitaba. Nadie puede conceder la libertad. Uno mismo opta por ella. La mujer lo ha logrado al decantarse sin desánimo por la igualdad.
- DESENLACE
30. Al llegar a su casa encontró a la chiquilla echada en la cama; el demonio se había marchado.
Marcos describe el final de la escena dando cuenta de los efectos logrados por la apuesta decidida de la mujer: “Al llegar a su casa encontró a la chiquilla echada en la cama; el demonio se había marchado”.
La mujer se reintegra en la colectividad humana a la que pertenece por cultura, por nacimiento y por historia: “a su casa”. Regresa renovada, aportando a la sociedad que representa el valor de un mensaje vital. Ella puede constatar el cambio producido en el seno de su pueblo. En efecto, no hay restos de la ideología inútil que lo atenazaba. Sobresale el sosiego que invita al descanso: “a la chiquilla echada sobre la cama”. Los ojos de la mujer se van directos hacia lo que mira con ternura: la chiquilla. Marcos regresa al diminutivo para subrayar la relación afectuosa que une a la mujer con el pueblo por el que vela. Su condición es otra. La ideología violenta ya no lο domina. Lo ha logrado la alternativa a la que se ha adherido la mujer. Ese es el horizonte que ha elegido de inmediato para los suyos. Con él como perspectiva, se han evaporado de su pueblo las ideologías que lo machacaban. Su intervención lo ha colocado en una nueva atmósfera de tranquilidad.
Marcos termina la descripción de la nueva realidad captada por la mujer confirmando lo que Jesús le había asegurado: “y el demonio se había marchado”. La nueva condición del pueblo ha desposeído de ciudadanía al ideario basado en el poder y la desigualdad.
31. Dejó Jesús la comarca de Tiro, pasó por Sidón y llegó de nuevo al mar de Galilea por mitad del territorio de la Decápolis.
Marcos pone broche a la escena con unos apuntes geográficos relativos a los movimientos ulteriores de Jesús: “Dejó Jesús la comarca de Tiro y se dirigió a través de Sidón hacia el mar de Galilea por mitad del territorio de la Decápolis”.
En una mirada superficial, el texto no parece tener otro propósito que el de marcar el camino seguido por nuestro protagonista con indicativos geográficos fácilmente identificables por el lector. Pero ellos encierran la pedagogía de Marcos.
La lógica del relato indica que Jesús no volvió sobre sus pasos; eligió una ruta inapropiada. Marcos elude hablar de retorno. Nuestro redactor perfila la línea divisoria por donde circula Jesús. Se halla fuera de las fronteras judías. Regresar suponía emprender camino hacia el sureste. Se dirige, en cambio, hacia el norte: “se dirigió a través de Sidón”. Esta ciudad, mencionada con frecuencia junto a Tiro en el AT (Ez 26, 27 y 28), estaba situada en la costa a unos treinta kilómetros al norte de Tiro.
Sin embargo, como el mismo Marcos informa, el destino de Jesús se ubicaba extrañamente en sentido opuesto al de su marcha: “hacia el mar de Galilea”. En la imprecisión, sobresale el mar como concepto simbólico representando el espacio propio de las fuerzas contrarias al ser humano. El mar de Galilea es, además, lugar de paso por el que se comunican judíos y paganos. Marcos insinúa que nuestro hombre no se encamina a su tierra. Se acerca a ella, evitándola. Como se puede apreciar, las fronteras tienen especial relevancia en el relato. Todos los movimientos se refieren en exclusiva a Jesús. Los discípulos no han aparecido.
La permanencia de Jesús en un mundo de pensamiento más abierto se prolongó lo suficiente para darse cuenta de que los problemas padecidos por aquellos pueblos extranjeros coincidían con los de su propio entorno. La cultura griega, le permitió comprobar que los considerados por él de inferior rango (perros) acogieron favorablemente el mensaje que los líderes de su pueblo despreciaban. En Jesús se consolidó la idea de que su programa no podía postergar a ningún pueblo ni cultura. La única prioridad la tienen los desheredados del mundo. La práctica de la igualdad adquiría, así, máxima coherencia.
Nuestro protagonista se dirigió desde allí hacia un espacio del que participan todos los pueblos a los que sirve de frontera: el mar de Galilea. Su recorrido por el universo de pueblos que lo circundaban reclama ser entendido como la experiencia histórica que le ayudó a ratificarse en la urgencia y el valor universal de su propuesta. El relato figurado de la mujer sirofenicia representa el exponente del que se valió Marcos para presentar a sus lectores esa enseñanza. La mujer aparece para discípulos y lectores como un prototipo a imitar. La que supo oír reconoció el carácter universal de un proyecto con cabida para todos, sin exclusión alguna (“también los perros comen debajo de la mesa…”).
Salvador, me admira usted con tanto conocimiento sobre Marcos, de quién ningún experto puede afirmar que existió, sus conocimientos sobre Jesús me admiran y maravillan, sabe cómo pensaba, cómo actuaba, el mensaje y el proyecto que quería trasmitir, genial amigo, tantos años de investigación científica, teológica, filosófica, y usted interpreta todo esto en un trocito de papel, que “dios” sabe de donde a salido, y además lo interpreta de forma contraria a la de las mayoría de los especialistas, genial.
Hola a todos.
A tus preguntas, Oscar:
1ª) Al exponer Jesús su proyecto en la secuencia de las parábolas utilizó para representarlo la imagen de una semilla (4,3-8; 26-29; 30-32), un cuerpo orgánico de minúsculas proporciones, aunque de enorme potencial. Así pues,
Semilla = Proyecto.
El genitivo de la igualdad expresa la esencia de ese proyecto.
Jesús no fundó una religión, plantó un proyecto. Se trata de una praxis, no de una espiritualidad. Podemos estar toda la vida deambulando alrededor de la mata haciendo oración, teniendo visiones, elucubrando sobre Dios o los ángeles, entrando en trance, acumulando indulgencias, revistiéndonos de moral, asistiendo a todo tipo de celebraciones e incluso manifestándonos en contra de las injusticias, defendiendo una posición favorable a los pobres o haciendo algún gesto caritativo…, pero ninguna de esas actividades confirmará nuestra adhesión a ese proyecto que tiene a los insignificantes como principales destinatarios.
Lo urgente es dar solución al hambre, no hablar de ella. Resulta estéril reclamar la solución a los ricos, al poder o a la religión. Para Jesús la solución está en manos de los adheridos a su proyecto. Pero los que dicen que le creen se significan por hacer oídos sordos a este mensaje práctico. La entrega que aparece mañana en ATRIO se titula: Sordo y con dificultad en el habla.
2ª) Jesús pudo enseñar porque aprendió de su entorno. Las mujeres fueron maestras para él, por eso desempeñaron en su vida un protagonismo al máximo nivel que quedó reflejado en su mensaje. Marcos lo recogió con su sobriedad característica.
Marcos no amañó ese mensaje. Ni siquiera trató de recomponer la imagen de Pedro, como hicieron los otros tres evangelios al final de sus escritos. Seguramente el mismo Pedro, amigo entrañable de Marcos, consideró que transmitir la verdad desnuda de su traición era la mejor manera de restaurar su imagen.
El amigo Marcos debió ser un personaje de carácter. Pablo no hizo buenas migas con él. Como consecuencia de que Marcos dejó plantado a Pablo en uno de sus viajes (Hech 13,13), éste se negó a que le acompañara en el siguiente, lo que supuso que también Bernabé se distanciara de Pablo (Hehc 15,37-39).
Un abrazo
Hola!
Algunas preguntas:
1ª) ¿Por qué los Post llevan el encabezado “SEMILLAS DE LA IGUALDAD”?
* ¿Por qué SEMILLAS?
* ¿Por qué el genitivo (declinación riquísima y bastante complicada de determinar) DE LA?
* ¿Por qué IGUALDAD?
En la Presentación (13/7/10) sólo encuentro no una explicación sino una tajante afirmación:
– “Ha llegado la hora de denunciar las fantasías con que se ha ocultado un proyecto de libertad e igualdad para los insignificantes.”
2ª) ¿APRENDIZAJE del Maestro Jesús y “FEMINISMO” de marcos en este Post?
¿Cuánto derecho le asiste a ana rodrigo – 20-Octubre-2010 – 0:31 am
a “interpretar” el Relato de la Sirofenicia haciendo hincapié en los dos aspectos mencionados?
NOTA: coincido en ambos. En cada caso (aprendizaje y feminismo) por diferentes motivos.
···········
* APRENDIZAJE: ¿Es una intención deliberada de Marcos?
* FEMINISMO: ¿Marcos “armó” el Escenario incluyendo deliberadamente el protagonismo de una Mujer con fines “feministas”?
NOTA: Aunque Marcos no lo haya “intencionado” el tal “feminismo” (lo cual parecería improbable) ¿no hay un auténtico” derecho a esa interpretación, sin tener que tacharla de “secundaria”, “individual” o “caprichosa” (o eis-égesis)?
Mi pensamiento sostiene esta hipótesis ya que profeso una Filología (que no voy a probar acá) en los que una de sus Premisas principales dice:
* -“Todo decir es exuberante – da a entender más de lo que se propone”.
Acá se trataría de que la “circunstancia actual” (el afamado “signo de los tiempos”) funciona como “ácido revelador” de ogaño sobre un Texto de antaño.
···········
¿Merecerán alguna consideración estas preguntas?
¡Vamos todavía! – Oscar.
Hola Oscar,
Estoy contigo en que estar como no entendidos nos da la libertad para aprender, yo diría para informarnos, y después para interpretar lo que hemos aprendido. La respuestas a nuestras preguntas no siempre llega de fuera, claro que la tenemos dentro, rumiada a base de información, de vivencias intimas. El exterior sirve como un espejo y nuestro mundo interior tiene una fuerza magnética que atrae a nosotros lo que necesitamos para evolucionar. Si ponemos atención podremos escuchar nuestra voz interior llena de conocimiento.
Por cierto vos sois argentino, yo llegue a España de pibito, mi padre español y mi madre de abuelos italianos. Suena lindo ¡Vamos todavía!, como dice en tango:
Vamos todavía, que en la vida
quiero un poco de alegría
para ser feliz.
Un saludo, nos vemos…. ¡Vamos todavía!
Hola Josemi!
Excelente comentario!
Por otra parte, nuestra consideración del Asunto como “no-entendidos” es un “privilegio”.
La única condición fértil para que funcionemos como “privilegiados” es que nos interese vitalmente.
Definirnos como “no-entendidos” es declarar que “no-sabemos”.
Habrá fertilidad de fruto cuando al “no-sé” lo em-puja un “necesito-saber”.
·············
Si sientes que el hombre viviente que hay a la base de tu “ser-sociólogo”
empuja los conocimientos adquiridos -que tu “interés cordio-vital” selecciona-,
tal vez notes que las circunstancias situacionales del tiempo histórico del Relato de Marcos
tienen una longitud de onda semejante a la de n/tiempo
y, por eso, nos sentimos vibrar al uní-sono.
Con esto quiero decirte que es nuestra experiencia o “situación vital”
la que selecciona (interesadamente) los datos del pasado, en cuanto nos haya pasado,
en la medida que necesitemos “saber a qué atenernos”
para vivir dignamente (de pie) nuestra propia y única vida humana.
·············
El afán de “diálogo para aprender” –dices- es lo que te ha movido.
Todo saber empezó no-sabiendo; e.d. preguntando.
Hay algo anterior y a la base de toda Ciencia y Saber: PREGUNTAR.
Pero PREGUNTAR EN SERIO no lo hace nada ni nadie,
Sino MI VIDA: Yo viviendo en el Mundo.
¿Has notado qué encierra ese “yo” en doblete que aparece
cuando ante una DUDA VITAL decimos “Yo me pregunto …”?
¿Un “yo” que se pregunta a “otro-mi-yo”?
¿Extraño, no?
··········
Un abrazo y ¡Vamos todavía! – Oscar.
Me cuesta entrar a opinar en este post, que por lo que veo es un comentario comunitario sobre el evangelio de San Marcos, porque no soy un entendido en el tema, que por otro lado está muy alejado de mis planteamientos existenciales. Sí quiero opinar al hilo de algunos comentarios.
Si ya resulta difícil asimilar el concepto religioso que nos trasmite la tradición cristiana, y la historicidad de Jesús o Yeshúa, como humano deificado, (una leyenda que mejoró a medida que pasaba el tiempo después de su muerte, es un hecho que dividió la historia en “antes y después de Cristo”), el comentario exegético a unos evangelios pseudoepigrafícos: que se basan en tradiciones, en teorías, sin base histórica, ni fundamentación documental, que recogen información de segunda o tercera mano, después de haberse incorporado mucha mitología y con fines proselitistas, que son escritos en épocas muy posteriores y seleccionados con criterios muy definidos en el siglo IV; me parece esperpéntico, desde mi particularísimo punto de vista. En cuanto al evangelio a debate, San Marcos, o quién fuera, es un extranjero fuera del tiempo y del espacio de los acontecimientos que él relata, y que para animar a sus lectores, posiblemente cristianos romanos perseguidos, utiliza conceptos tradicionalmente romanos sobre la libertad y la igualdad, aunque por otro lado es quién utiliza las supersticiones, los demonios, las posesiones y los milagros para definir la figura de Yeshúa.
Fue y es el movimiento cristiano un fenómeno de masas y tuvo y tiene repercusiones en los eventos sociales, sin duda. Básicamente es un movimiento social que utiliza una base religiosa, que puede servir para afianzar y dar un aparente barniz a casi todas las ideologías, casi todas totalitarias, a sabiendas que hay que edificar sobre cimientos, y el cristianismo, bien o mal, los tiene tradicionalmente enraizados en la cultura y en el pensamiento humano. La teología de la liberación es uno más, el indigenismo, el populismo en latinoamérica lo mismo, como en España lo fue el franquismo. La utilización que se hace de los pobres, de los necesitados, de los oprimidos es cuanto menos ofensiva, el tradicionalismo busca la diferencia y fomenta la dependencia, pero lo mismo hace el seudoprogresismo que con una falsa igualdad mantiene más férreamente la opresora dependencia. Es mi opinión como sociólogo y de forma particularísima.
Cada persona tiene el derecho a profesar una religión, o una ideología política o social. Aquí, en España, a pesar de todo, vivimos en un estado democrático y podemos debatir libremente. Bien es cierto, que cada uno somos víctimas de nuestro pasado, en plural y en singular, todos tenemos experiencias que nos han marcado en nuestra vida, y esto nos lleva a enrocarnos en planteamientos, muchas veces, no razonados suficientemente. Lo bueno de dialogar es aprender, todos podemos aportar algo novedoso al interlocutor que nos escucha, o como en este caso, no lee.
Un saludo.
A diferencia de Aurelio, al leer el relato de Marcos sobre la sirio-fenicia, me ha pasado algo parecido a lo que me sucedió al leer el relato de Jairo en el libro de Salvador Santos, “Un paso, un mundo”. La exégesis de este pasaje, Jairo, (que es un personaje que existió puesto que tiene nombre), me conmovió tanto al descubrir su valentía y su capacidad de aceptación de la realidad, que incluso se me saltaron las lágrimas.
Una persona que, al aceptar al Maestro, se juega su puesto en la sociedad y su futuro, representó para mí un modelo de actuación. Marcos describe así un personaje real y maravilloso, que a la luz de la exégesis, adquiere todo su valor…El valor que nunca tuvo desde una visión cerrada y una deforme interpretación de la vida.
Vamos “palante”!
¡¡¡Que triste!!!
Siempre el mismo cantar, o tocas con sus notas, o las otras partituras, no tienen ningún valor.
Me gustaría saber… aunque sinceramente, prefiero no me conteste ninguna persona, de las que piensan igualito igualito todas ellas.
¿Es que no saben pensar por si mismas?
¿Quien les ha explicado la teología de la Liberación?
¿Como la van a comprender, si les pincha allí donde de verdad les duele?
La teología, como cualquier saber en esta tierra, nunca puede ser “fija e inamovible” porque va pasando de época en época, de pensares distintos, por las situaciones diferentes de cada tiempo, necesario y natural; pues todos los avances, tienen que ser acogidos, estudiados, discutidos, y… puestos en marcha.
Es, la pregunta de siempre, ¿acaso Jesús, dejó toda la doctrina de la iglesia (iglesias) impuesta?
Jesús, claramente dejó un estilo de ¡Vida! vivió como ningún otro, su Humanidad, desde la Palabra que revolotea desde el principio de los tiempos.
La voceaban los profetas, que por cierto, fueron muertos, perseguidos, castigados…
¿Les suena esta música? ¡¡Claro que no!!
Dichosa… obediencia a las leyes escritas por los hombres de cada época, desde hace 2.000… años.
¿Es que nada ha cambiado desde entonces, en la historia humana?
El Evangelio sigue fresco, novedoso como el primer día; unos lo perciben con claridad, otros, envueltos en sus “reinos, ritos, reformas, dogmas. etc.” siguen anclados en la edad de piedra.
Seguro, que ya existían entonces personas con capacidades bien despiertas, para comprender, que cada ser, es único, debería ser libre, y caminando sin descanso hacia una humanidad renovada, viva, fraterna y armoniosa con todo y todas las personas que la rodean.
¡¡¡Que cansancio Señor, ante tanta dureza de corazón!!!
mª pilar
No quiero usar a la comunidad del portal que es ATRIO, como un foro de discusiòn sobre la teólogia de la liberación y tendría que ponerme a contestar con cada afirmación, que el hermano Aurelio, da…lo que me pareceria descortes… Voy simplemente a comentar algo que es un prejuicio muy triste de quienes justamente proyectan esos prejuicios, llegando a ver una realidad que no es…
Se dice; …En primer lugar hay todo un planteamiento de la Teología de la gracia: para la Teología de la liberación la realidad sobrenatural de la gracia creada no tiene entidad propia, real, sino que no es otra cosa que los impulsos humanos hacia una mayor autonomía.
La entidad propia de la gracias, la concreción real y palpitante se llama Jesús de Nazareth…Ese hombre, que es Dios se concreta, el advenimiento del Señor de la historia, fuerza liberadora, que nos IMPULSA POR LA FUERZA DEL ESPIRITU… A IR CONSAGRANDO EL MUNDO ADIOS…O EXPRESADO DE OTRA MANERA DE SER EN EL OBREROS DEL REINO Y ESTO COMO BIEN LO DICE EL PAPA, PASA POR LA ACCIÒN POLITICA…
Una cosa más estimado hermano Aurelio, es bueno que en nuestras oraciones y a cada momento recordemos aquello de muestrame tu fe sin obras…No porque nuestras obras sean lo más importante, sino porque el IMPULSO DEL ESPIRITU QUE JESUS SOPLA SOBRE LOS APOSTOLES NO ES PARA CREAR UNA SOCIEDAD PERFECTA DENTRO DE LA COMUNIDAD ECLESIAL, SINO PARA SER FERMENTO EN LA MASA, SAL EN LA SOPA…ES DECIR PARA SERVIR AL MUNDO, EL VINO A SALVAR AL MUNDO…Y ELLOS INCLUYE A CREYENTE Y NO CREYENTES, O A CREYENTES EN OTRAS TRADICIONES RELIGIOSAS… Me voy a permitir, citar con la paciencia de todos mis hermanos, lo que para mi es un magisterio fundamental, al citar el mensaje Final de la V Conferencia del Episcopado Latinoamericano en Aparecida…
-“Jesús comenzó su misión formando una comunidad de discípulos
misioneros, la Iglesia, que es el inicio del Reino. Su comunidad tam-
bién fue parte de su anuncio. Insertos en la sociedad, hagamos visible
nuestro amor y solidaridad fraterna (cf. Jn 13,35) y promovamos el diálogo con los diferentes actores sociales y religiosos. En una sociedad cada vez más plural, seamos integradores de fuerzas en la construcción de un mundo más justo, reconciliado y solidario”
(El destacado es de este servidor inutil)…
Un abrazo Gabriel
Vamos a dejar las cosas claras, Aurelio, y dejemos que los demás hagan los comentarios que crean convenientes referidos al tema en cuestió:
EVANGELIO DE MARCOS ( desde la perspectiva exégeta”)
Y para que las cosas queden claras no vale seguir negando la mayor ni echar balones fuera porque las ” flatulencias” sean más o menos apestosas. ( yo no niego un pedo a nadie, pero no utilizo pedos ajenos para apestar al personal)
Mientras no demuestres lo contrario, y no podrás hacerlo, has utilizado un artículo de otra persona y has tratado de colarlo como propio. Tu comentario es un corta-pega de un artículo cuyo autor tiene su nombre y apellido en el enlace que yo he mandado. Y lo peor: has entresacado partes del artículo y has obviado otras.
Dejemos las cosas en que ésa forma de actuar no es muy correcta y puedo asegurar que entre mis “flatulencias” no están semejantes actuaciones : ” venta de gato por liebre”…
Vale, me pongo los calzoncillos para no mostrar mis ” nobles sean las partes” y no contestaré a lo que creas conveniente decir al respecto. Es un hilo donde se trata exégesis bíblica y no me parece correcto ( por mi parte) apestar al personal con mis -¿ tus?- flatulencias ( a las que yo llamo PEDOS porque me parece un término mucho más claro y castellano.
Agur, pues….
Señor Sala respondo, utilizando su argot, a su dedo mental, uno más en su triste haber. Usted ni sabe ni conoce la utilización de las referencias al articulo, ni la vinculación que pueda tener con el mismo. Ni vendo gato por liebre, ni estoy con el culo al aire, no como usted que acostumbra a exhibir sus partes pudendas sin ningún recato, desde el punto de vista internaútico claro. No tengo colegas católicos, pero antes que a usted preferiría al mismísimo diablo. Su flatulencia mental es crónica y de difícil solución.
Otro ” que dios guarde”…
¿ No crees, Aurelio, que sería mejor poner el artículo completo o, en su caso, poner el enlace de la información que tratas de colarnos?
http://www.nodulo.org/ec/2002/n006p13.htm
Luego te sentirás ” víctima” tú también, como tus colegas católicos que entran por aquí a pretender vendernos gato por liebre y se sienten muy ofendidos cuando son descubiertos y dejados con el culo al aire.
Si ya digo yo que los comesantos ( no he puesto ” mepilas”, que conste)
” no tiran pedo que bien huela”…
Cuando tenemos que tratar de la teología de la liberación, como de la teología política, habitualmente comenzamos hablando de lo que es un mero revestimiento de la misma, y una mera consecuencia de sus principios más internos: tanto el encarnacionismo, el indigenismo o la práxis marxista no son de suyo los fundamentos inspiradores de la teología de la liberación sino más bien su manifestación en la práxis y su instrumento de análisis. Sus raíces son otras; definir la teología de la liberación como el «cristianismo socialista» o el «cristianismo político-populista», sin dejar de ser un poco cierto, no deja de ser una mera valoración descriptiva, que no da cuenta completa de todo lo que la ha inspirado, y por lo tanto, la ha llevado a tal análisis de la realidad.
En primer lugar, la pregunta básica que se hacen los teólogos de la liberación, ¿Cuál es la relación entre liberación humana y salvación cristiana? Esta es la pregunta básica y fundamental de la teología de la liberación, sin la cual nunca se podrá entender ni analizar integralmente tal fenómeno. La pregunta es lícita de por sí, porque conocemos todos lo enraizada que está la liberación humana en la salvación cristiana. La cuestión está en la respuesta que se va a dar. En primer lugar hay todo un planteamiento de la Teología de la gracia: para la Teología de la liberación la realidad sobrenatural de la gracia creada no tiene entidad propia, real, sino que no es otra cosa que los impulsos humanos hacia una mayor autonomía. Por tal razón, la construcción del Reino de Dios, no puede estar sólo en la mirada a lo trascendente, ni siquiera en la edificación de la ciudad terrena como reflejo de lo trascendente, sino que más bien, la gracia estaría presente en todo impulso, en todo fenómeno, todo movimiento de liberación humana (por tal razón no pocos teólogos han visto en la teología de la liberación una manifestación del viejo pelagianismo: la gracia no es más que el esfuerzo humano hacia su plena autonomía personal y social). Al pelagianismo extremo se contrapone la doctrina de la gracia protestante, que acentúa a San Agustín, de tal modo que nada valdría el esfuerzo y el mérito humanos, y todo estaría predestinado desde la omnisciencia divina. Las implicaciones de esta otra doctrina las estudia Max Weber para la ética del capitalismo. A nosotros nos basta saber que el catolicismo ortodoxo vendría a ocupar una posición intermedia.
Para la teología de la liberación el hecho clave hermenéutico es el éxodo israelita: a través de un hecho liberador de la esclavitud, de la pobreza y del imperialismo, los israelitas descubren en tales impulsos liberadores la presencia de Dios. Tal análisis después lo aplicarán a las modernas circunstancias históricas, con nombres y apellidos: El Salvador, Nicaragua, Méjico. Esto es lo que lleva a aplicar el análisis marxista: La cuestión de por qué los grandes teólogos de la liberación han renunciado ya al estricto análisis marxista es harina de otro costal. Por ultimo, esto tiene serias implicaciones eclesiológicas: frente al intento de una organización sacramental y jerárquica, que es lo que ha sido –según estos– la Iglesia, el proyecto originario de Dios es el de la fraternidad universal que se proyecta hacia su liberación social y política. Pero esta fraternidad universal es una «plataforma fantasma, a saber, la idea de un proletariado mundial, como contrafigura actual del capitalismo universal; una plataforma que no existe en ninguna parte y que sólo sirve para llenar la boca de algunos revolucionarios utópicos» como afirma Gustavo Bueno en «Dialéctica de clases y dialéctica de estados». Esta utopía troskista, dotada al menos de cierta grandeza de miras contrasta con el regreso a la microtribu, de un ideal infantil tipo Asterix, que sólo puede hacer sonreír al imperio globalizador yanqui, que financia, particularmente en su «patio trasero», la idea del «divide et impera».
Es curiosa y significativa la deficiente concepción criptológica que se respira en este foro. Se desdivinizar a Cristo para mostrar que el mensaje evangélico consiste en que Dios tiene su proyecto en la liberación social y nacional de los desheredados:
VEAMOS LA CIENCIA DE LA ESCRITURA, DEJANDO QUE ELLA HABLE…
Lc. 4,18-20,
[20]Dirigiendo la mirada a los discípulos, les decía: Dichosos los pobres, porque el reinado de Dios les pertenece. (Lc. 6,20)
Mt. 11,5
Mt 19, 24 (hay aquí una alegoría interesante, para poder pasar el camello por el ojo de una aguja, debe dejar la carga que lleva, el rico para entrar en el Reino, debe despojarse de la carga… (Sic “vende tus bienes, dáselo a los pobres y tendrás un tesoro en el cielo; después sígueme”- Mt. 19,21 b)
Aquí no hay un ápice de desdivinación, sino una visión de Dios basada en la biblia, la Liberación que es una Liberación total de todo lo que esclaviza al hombre y lo aleja de Dios (pecado) y que obviamente ha elegido al hombre como coprotagoniasta de esa Liberación que obra Dios…y el ha querido que fuera construido juntos y pasa de todo lo que genera el pecado, el hambre, la injusticia, la acumulación, la explotación, la violencia, son cosas de las que nos debemos liberar, de las que Jesús viene a liberarnos…pero no con un chasquido mágico, sino desatando en el hombre, la potencialidad de obrar en comunión con su Espíritu y esto incluye muy especialmente (por aquello de que el Reinado de Dios les pertenece, la liberación de los pobres y oprimidos, toda la vida de Jesús es una predicación de estas vinculaciones con Él, con los hermanos y con la creación, en la que podamos sentir, ver, constatar que Dios Reina… Eso incluye la liberación de los pobres, que se transforman en “aquellos a los que JESÚS VINO A DAR LA BUENA NOTICIA Y SON A QUIENES PERTENECE EL REINO)…
…así, la muerte de Cristo no es un acto redentor, sino el asesinato político de un hombre que lucha por llevar a su pueblo a la liberación social, oponiéndose a un pueblo opresor, tiránico y «capitalista».
Bueno, voy a hacer un reconocimiento público a los Obispos latinoamericanos, que ha marcado con su luminoso magisterio de la Aparecida, un camino claro, sencillo y radical en el seguimiento del camino de Jesús de Nazareth. A ellos me remito…
Por ello, no demoró en
testimoniar que su Dios –a diferencia de los ídolos– es el “Dios
vivo” (Dt 5, 26) que lo libera de los opresores (cf. Ex 3, 7-10), que
perdona incansablemente (cf. Ex 34, 6; Eclo 2, 11) y que restituye
la salvación perdida cuando el pueblo, envuelto “en las redes de
la muerte” (Sal 116, 3), se dirige a Él suplicante (cf. Is 38, 16). De
este Dios –que es su Padre– Jesús afirmará que “no es un Dios de
muertos, sino de vivos” (Mc 12, 27). – (Documento Final de la Aparecida Nº 129)
El seguimiento de Jesús en el Continente pasa también por el
reconocimiento de los afroamericanos como un reto que nos interpela
para vivir el verdadero amor a Dios y al prójimo. Ser discípulos
y misioneros significa asumir la actitud de compasión y
cuidado del Padre, que se manifiestan en la acción liberadora de
Jesús.
La Iglesia defiende los auténticos valores culturales de
todos los pueblos, especialmente de los oprimidos, indefensos
y marginados, ante la fuerza arrolladora de las
estructuras de pecado manifiestas en la sociedad
moderna28 (DFA Nº 532)
Discurso Inaugural del Papa en Aparecida.-
En este esfuerzo por conocer el mensaje de Cristo y hacerlo guía
de la propia vida, hay que recordar que la evangelización ha ido unida
siempre a la promoción humana y a la auténtica liberación cristiana.
“Amor a Dios y amor al prójimo se funden entre sí: en el más humilde
encontramos a Jesús mismo y en Jesús encontramos a Dios” (Deus
caritas est, 15). Por lo mismo, será también necesaria una catequesis
social y una adecuada formación en la doctrina social de la Iglesia, siendo
muy útil para ello el Compendio de la doctrina social de la Iglesia. La
vida cristiana no se expresa solamente en las virtudes personales, sino
también en las virtudes sociales y políticas.
Así, la soteriología que nos presentarán se ve desposeída de todo aliento espiritual, y es únicamente causa ejemplar, no causa eficiente de nuestra liberación. Es lo que nos mueve a luchar por el que muere así, el proletario, el indígena y el desheredado. Por esta razón la teología de la liberación aplica el análisis marxista: la gracia está en todo proceso humano de liberación, y por lo tanto el cristiano debe apoyar todo proceso de liberación humano, tanto personal como social: se niegue a Dios materialmente, formalmente se le afirma, porque se defiende su supuesta causa. Pero el cristianismo no es más que un barniz, una impostura, que oculta un proyecto divisorio del tipo tribal, antihistórico, un «regreso a la tribu». Se desdivinizar a Jesús, cuando el pensamiento cristiano, como tal, es pensamiento que tiene como eje a Cristo, y a la Salvación.
Esto me parece sinceramente y sin menor animo de descalificar gratuitamente o de agresividad alguna, este discurso, se compadece de la verdad, parece sinceramente sectario y conlleva una acusación propia de un inquisidor…no de un hermano en la Fe…
Por eso voy a contestar a esto, con parte del discurso inaugural del Papa en Aparecida…
La fe nos libera del aislamiento del yo,
porque nos lleva a la comunión: el encuentro con Dios es, en sí mismo
y como tal, encuentro con los hermanos, un acto de convocación, de
unificación, de responsabilidad hacia el otro y hacia los demás. En este
sentido, la opción preferencial por los pobres está implícita en la fe
cristológica en aquel Dios que se ha hecho pobre por nosotros, para
enriquecernos con su pobreza (cf. 2 Co 8, 9)
MENSAJE FINAL
Las agudas diferencias entre ricos y pobres nos invitan a trabajar
con mayor empeño en ser discípulos que saben compartir la mesa de
la vida, mesa de todos los hijos e hijas del Padre, mesa abierta, incluyente,
en la que no falte nadie. Por eso reafirmamos nuestra opción
preferencial y evangélica por los pobres.
Nos comprometemos a defender a los más débiles, especialmente
a los niños, enfermos, discapacitados, jóvenes en situaciones de riesgo,
ancianos, presos, migrantes. Velamos por el respeto al derecho que
tienen los pueblos de defender y promover “los valores subyacentes en
todos los estratos sociales, especialmente en los pueblos indígenas”
(Benedicto XVI, Discurso Guarulhos No.4). Queremos contribuir para
garantizar condiciones de vida digna: salud, alimentación, educación,
vivienda y trabajo para todos.
FINALMENTE EN EL DOCUMENTO FINAL DE LA APARECIDA, RECOGEMOS ESTA CRITICA QUE NO ES MARXISTA, SINO MAGISTERIO PURO Y DURO DE LA IGLESIA CATÓLICO…
473. La riqueza natural de América Latina y El Caribe experimenta hoy
una explotación irracional que va dejando una estela de dilapidación,
e incluso de muerte, por toda nuestra región. En todo ese
proceso, tiene una enorme responsabilidad el actual modelo económico
que privilegia el desmedido afán por la riqueza, por encima
de la vida de las personas y los pueblos y del respeto racional
de la naturaleza. DAF 473)
En resumen, muy respetuosamente, digo que el enfoque y la mirada de Aurelio, necesita, un volver a la fuente…Un volver a la revelación que es la vida y las palabras de Jesús de Nazareth…Saludos Gabriel
Es curiosa y significativa la deficiente concepción criptológica que se respira en este foro.Se desdivinizar a Cristo para mostrar que el mensaje evangélico consiste en que Dios tiene su proyecto en la liberación social y nacional de los desheredados: así, la muerte de Cristo no es un acto redentor, sino el asesinato político de un hombre que lucha por llevar a su pueblo a la liberación social, oponiéndose a un pueblo opresor, tiránico y «capitalista». Así, la soteriología que nos presentarán se ve desposeída de todo aliento espiritual, y es únicamente causa ejemplar, no causa eficiente de nuestra liberación. Es lo que nos mueve a luchar por el que muere así, el proletario, el indígena y el desheredado. Por esta razón la teología de la liberación aplica el análisis marxista: la gracia está en todo proceso humano de liberación, y por lo tanto el cristiano debe apoyar todo proceso de liberación humano, tanto personal como social: se niegue a Dios materialmente, formalmente se le afirma, porque se defiende su supuesta causa. Pero el cristianismo no es más que un barniz, una impostura, que oculta un proyecto divisorio del tipo tribal, antihistórico, un «regreso a la tribu». Se desdivinizar a Jesús, cuando el pensamiento cristiano, como tal, es pensamiento que tiene como eje a Cristo, y a la Salvación.
Hola a todos.
A la pregunta de Oscar:
La frase: El encargo de Dios es la justicia recoge en síntesis una idea central del AT a la que Jesús recurre en su enfrentamiento con los altos representantes bajados desde Jerusalén. Jesús acude a ese principio frente a la advertencia moral de los intérpretes oficiales de la Ley (“Por qué no siguen tus discípulos la tradición de los mayores…”; Mc 7,5).
El pueblo de Israel nació de la libertad. La Ley constituyente que conformó su unidad social fue concebida como el encargo de Dios. Su objetivo perseguía garantizar la supervivencia del pueblo en base a la libertad y la justicia.
La historia de Israel muestra que no se tardó en desplazar la justicia e implantar el rito. Los profetas denunciaron la trampa de mil formas reivindicando la justicia como principal encargo de Dios. Afirmarán que la justicia es su voluntad, su deseo, su anhelo, su mandato, su compromiso… y el único método capaz de hacer valer la verdad frente al engaño. Hay multitud de citas conocidas por todos y otras muchas no tan populares, pero no menos elocuentes.
“Usaré la justicia como plomada
Y el derecho como nivel” (Is 28,17)
Los profetas prometerán una etapa donde la justicia saciará los deseos de los desprotegidos. Jesús entendió que esa era la tarea fundamental de la sociedad alternativa. Con la división y el reparto de los panes estableció la praxis de la igualdad como fórmula a seguir por los suyos. Partir y dar recogen la esencia de esa praxis que él defendió hasta muerte.
La afirmación: El encargo de Dios es la justicia supone, entre otras, dos cosas:
1. Que el Antiguo y el Nuevo Testamento desplazan el centro de gravedad de sus mensajes hacia el ser humano, especialmente hacia los insignificantes.
2. Que la propuesta de Jesús es una praxis, una tarea a realizar que no excluye a nadie.
Un abrazo
Hola!
La “ex-égesis” que hace Salvador Santos me con-vence. Adhiero.
Pero recuerdo que Iñigo la llamaba “eis-égesis”; y establecía una clara diferencia:
·············
Semilla … 8: Iñigo 06-Octubre-2010 – 16:10 pm :
* “Ya dije que cada cual (Santos) es libre de realizar una “eiségesis”, es decir,
+ leer en un pasaje algo que no está ahí,
+ dar un significado que fluye de un interés personal.
* Yo (Iñigo) me limito a realizar una “exégesis”, es decir,
+ la realización concreta de la interpretación de un texto mediante los métodos adecuados:
+ análisis de palabras significativas en el texto, en el marco de la traducción;
+ examen del contexto general histórico y cultural,
+ confirmación de los límites de un pasaje,
+ y finalmente, examen del contexto dentro del texto.
··············
Recuerdo también que yo negaba la posibilidad humana de la “objetividad” (sin subjetividad)
* Afirmo que sólo es posible una ex-égesis si es eis-égesis;
* Afirmo que todo significado fluye (aunque no sólo) de un interés personal.
(de lo contrario me sería “in-significante, e.d. insensato).
··············
Yo: con-vencido de la comprensión “santiana” del Texto.
Él: con-vencido de la comprensión “otriana” del Texto.
¿Cuál será la “verdadera”, no?
La que dé frutos de vida mejor.
···········
Más aun:
-Según dónde y cómo viva, será mi “eis-égesis”-
··············
NOTA APLICATIVA:
* la Sirofenicia hizo su “eis-égesis”
* el judío Jesús no la había hecho
* la “eis-égesis” del Galileo tenía elasticidad hasta la de la “extraña”…
… y estiró la mano y el manto.
¡Vamos todavía! – Oscar.
Hola!
Yo atraso una semana. Lo sé. Se me pasó el tiempo.
Antes de ver la 10ª Semilla; sólo 2 breves sobre la 9ª.
·············
Seguimos con la BRONCA. Cada vez más acentuada y, por ello, arriesgada.
Y el tipo Jesús ¡ahí!: provocando – aguantando todo y a todos (sistema, pueblo, discípulos y dirigentes)
············
Pregunta previa a Salvador Santos: ¿podría explicar más detenidamente eso de que “EL ENCARGO DE DIOS ES LA JUSTICIA”? Alcance; fundamento, etc.
·············
1º) SEDE de la fe (o creencias)
* es el Corazón; o sea: la VOLUNTAD originaria de todo quehacer humano.
* no es la Cabeza; o sea: la INTELIGENCIA con sus distingos y dis-cursos.
Esto quiere decir que el “creyente”, en cuanto tal, se encuentra cautivado, e.d. CAUTIVO.
La fe es un estado cataléptico o hipnótico.
Es inútil contraponerle razones;
Sólo entenderá ante la contundencia de los HECHOS conmovedores.
Sólo LOS HECHOS, agudos como alfileres, “pinchan el globo hipnótico”.
2º) CONSTRUCCIÓN de la TRADICIÓN
Lo recibido por “transmisión”:
* emerge de LOS HECHOS en que me encuentro involucrado;
* se veri-fica en el corazón y sus consecuentes actuaciones sobre lo que tengo que hacer ante Los Hechos.
Ergo, LA TRADICIÓN:
* es más “fidelidad a lo que tengo que hacer” (Por-venir);
* que fotocopia de un modelito (Pasado)
·········
Pasaré luego a la 10ª Semilla
Disculpen lxs Cumpxs – ¡Voy todavía! – Oscar.
Desde siempre las y los cristianos hemos visto a Jesús como Dios, perfecto desde siempre y en todo momento y, si algo nos parece fuerte y hasta injusto en él, se le busca simbolismos para hacer decir a los textos lo que nosotros queremos que digan.
En este relato Jesús se pasó unos cuantos pueblos, se comportó como un buen judío, se despistó y metió la pata con esta buena mujer que creía que este hombre no hacía acepción de personas por su origen, religión o condición. Y la mujer le dio una buena lección que él la integró inmediatamente en su mensaje. Había que hacer el bien a quien lo necesitase, fuese quien fuese y viniese de donde viniese.
Me parece que de tanto divinizar a Jesús, a veces lo deshumanizamos. Jesús fue un hombre, de religión judía, buen judío en aquello que liberaba al ser humano de sus sufrimientos, pero en ocasiones “metía la pata”.
En el Congreso de Teología de este año una teóloga, Mariola López, nos expuso en su ponencia todo aquello que Jesús aprendió de las mujeres, y fue fantástico descubrir a un Jesús vulnerable, “aprendiz” de muchas cosas en contacto con las mujeres.
A propósito de esta mujer nos decía: “Ella le descubre a Jesús hasta donde iba a dilatarse la fecundidad de su vida entregada.
Jesús aprendió ese día no sólo el gusto de poder ayudar a una mujer necesitada y a su pequeña, sino la alegría de experimentar hasta el fondo de su vida el don que ellas, en su pobreza, le daban a él. Esta mujer extranjera y pagana- ¡quién lo diría! – había enseñado a Jesús a abrirse a la novedad de Dios, y al misterio los otros.”
Hermoso pasaje, y hermosa explicación.
¡Si comprendiéramos esta actitud!
El mundo cambiaria totalmente; especialmente: “las actuaciones, los fines, el camino del respeto y la integración.
Que siempre viene dese abajo, de los que sí:
¡¡¡Escuchan!!! Y respaldados por Jesús, siguen el camino ¡nuevo! que han descubierto…”
Y para nosotros: !Jesús está a su lado!
mª pilar
La magnifica exegesis que realiza Salvador, muy al estilo del gran Jesús Peláez, parece tener una clave interpretativa, la gracia…la presencia de Jesús, desata dinámicas, de liberación, del Reino…la liberación de la hija…El pan que no se tira a los perros…Pero estas dinámicas no son mágicas, sino que desatan la potencialidad de las personas de liberar-liberarse…de todo aquello que lo aleja de Dios y del Reino, entendido como una vinculación liberadora, con los hermanos, la creación y Dios…
Un apunte-reflexión propio, si se me permite, aquí es necesario para que El Reino esté presente la presencia, la concurrencia y el obrar de ambos, Dios y el ser humano…
Volviendo a la reflexión, parecería ser que los discípulos, los hijos, no han entrado totalmente en la dinámica del Reino, siguen asidos a su ideología nacionalista, tanto como la hijita-pueblo Fenicio…A ellos los hijos el pueblo judío, se le ha dado un don de testigos del Reino, ellos son quienes con su vinculación-testimonio debería ayudar a los demás pueblos a recepcionar el Espíritu de Dios y así desatar las dinámicas del Reino y su liberación…
Me parece humildemente que la dureza, que golpea, podría querer ser por su violencia, un recurso pedagógica, tendiente a que ellos los hijos reconozcan su necesidad de pan y recuerden su misión de testigos…Es entonces que la actitud de aquella mujer …se vuelve una clave de toda la lectura…Es la seguridad absoluta, de que Jesús, es el pan y de que esa dinámicas, pueden ser desatadas para liberar a su pueblo…sin importar la dura comparación de Perros…Es su fe, su apertura, su disposición la que cuasi…obliga a Jesús a actuar…no por la fuerza, sino por la disposición de corazón, que se planta con tanta confianza ante Jesús, que ha conquistado con ella el corazón del Señor…Es el valor y la fe, que la hacen portadora de la semilla del Reino, el Espíritu de Dios la acompañara…pero la liberación de su pueblo (curación de la hija), es también a la vez, un don y un desafío, es obra de Dios y esfuerzo a realizar en su nombre…
La frontera como bien lo dice, Salvador, juega un rol importante, podíamos decir que toda la acción se lleva del otro lado de la frontera de institucionalidad, allí van los discípulos-apóstoles a aprender y en la actitud de aquella mujer, son ellos liberados, al menos acercados a las dinámicas de liberación…
Podríamos perfectamente hablar del ahora: ¿cuánta liberación, vida y dinámicas del Reino, desata Jesús hoy, más allá de las frontera de la institucionalidad? … ¿seremos capaces de aprender de los pequeños, de los pobres, de los sin voz, del pueblo?…
Con cariño, Gabriel
Hay dos mujeres como dice este texto que marca todo y muy mucho la forma de tratar Jesús a las Mujeres.
La hemorroisa pide ser restablecida en la comunidad por ese mal que solo la mujer padece, y por el cual hemos sido y somos castigadas en muchas culturas y religiones aún hoy. El flujo de sangre, que conlleva a estar relegadas por la Impureza que nos imputan es cortada de raíz por ese Jesús hombre, varón no religioso que sí acepta ser parte y arte de la Creación y del plan Salvífico de D*s.
Pero sin embargo, Jesús no solo la restituye curando ese flujo, sino que la empoderar al mimos nivel y relación con D*s ¡Tu Fe te ha Salvado! No he sido yo, sino tú quien ha posibilitado ese bien para ti.
Y aún podemos sacar otra conclusión aún mayor, que lo que Jesús hizo hace miles de años quedó escrito y toda las percepciones de cada mujer, fue hecho para la restauración de cada una de nosotras, Mujeres que sangramos, mujeres desangradas desde nuestro núcleo primigenio.
¡Nuestro útero ultrajados por las viejas moral de los hombres de las religiones!
La mujer madura, que tiene regla y desarreglos queda desnuda ante ese Mesías que habla de aquel que solo conocemos cuando sentimos que somos, y formamos, parte de la humanidad, con los mismos derechos y las mismas obligaciones, sin subyugaciones por ser mujer, y aún menos por unas predestinación de ningún tipo y aún menos expuestas y puestas en un dios representante de ellos, el mismo que muestran sus miserias, raquítico y mísero.
¡Ese es el gran SMS de esta Narración y del Evangelio! que la Mujer es Salvada por ella misma, ella busca la salvación y ella Cree que puede ser salvada de ese mal que no le perteneces y que está en las manos de otro, de un hombre.
Con la Sirofenicia, tenemos casi la misma concepción aunque ahora es una mujer la que busca y pide curar, y aunque no es a ella es parte de ella, parte de su misma carne, es su hija, y con esta hija quedan salvadas cada una de las hijas.
La salvación llega a la niñez, y llega a los confines de la tierra, y una vez más es ella quien hace recapacitar, al hombre, a Jesús que nadie es dueño de la Salvación de otra persona, y sobre todo que D*s no conoce delimitaciones geográficas, casas con manteles de hilos, sabanas de sedas, y aún menos que su pan sea encofrado bajo llave de ningún color o contratos, mercantilistas.
Decir que una mujer oye, es decir que una mujer es apta para la proclamación que es lo que hace la Sirofenicia, proclama que la Palabra no conoce dueños y pasaportes. Porque ella, también habría escuchado hablar de curanderos, de médicos y de exorcistas, pero sin embargo ella busca a Jesús porque TIENE OÍDOS PARA ESCUCHAR…
Jesús reconoce la Verdad en la boca de una Mujer, que para colmo no es judía, pero es una mujer madre que busca la Salvación para su hija, y la de las demás, y que no deja que pase inadvertida ante los ojos de quien trae la Buena Nueva…
Ella desde sus entrañas de mujer reconoce de donde parte esta salvación, y reclama la parte que es suya como mujer y como madre. Ella es una de las Madres que ha puestos los pilares para que la Mujer sepa concebir que somos y tenemos que salir en la busca de nuestra realidad de mujer, que debajo de las mesas el pan es igual o mejor que aquel que se sacrifica en altares y por manos consagradas.
Ella hizo lo que aún no pudieron decir y hacer ninguno de los discípulos de Jesús, Reconocer donde estaba Jesús apartado y sobre todo Proclamar que el pan es para toda la humanidad.
No se dice la casa, no se dice el nombre de la mujer, tan solo vale que aquello ha sido dado para que todos oigamos, y quien tenga oídos que escuche…
¡Gracias Sirofenicias, Hemorroisas…! porque sin teneros en cuenta vosotras mismas os creísteis.
En esta cita encuentro condensada y concretada mi impresión sobre todo este artículo y el relato de Marcos al que se refiere:-En Jesús se consolidó la idea de que su programa no podía postergar a ningún pueblo ni cultura. La única prioridad la tienen los desheredados del mundo. La práctica de la igualdad adquiría, así, máxima coherencia.