El Chapucero USA es un youtuber con más de 400 millones de suscriptores. Todo en español y con uentes de información parece que fiables siempre. Traemos por primera vez lo que ayer informaba sobre interesantes movimientos que hacen suponer que no está consolidado el golpe de Yeanine Añez por ser muchos los militares que se unen a los indígenas. Veremos. AD
EPÍLOGO SOBRE EL ALMA DESILUSIONADA
(OC3,228-30) (agregado al Artículo “El ocaso de las revoluciones”)- 1923.
El tema de este ensayo se reducía a intentar una definición del espíritu revolucionario y anunciar su fenecimiento en Europa. Pero he dicho al comienzo que ese espíritu es tan sólo un estadio de la órbita que recorre todo gran ciclo histórico. Le precede un alma tradicionalista, le sigue un alma mística, más exactamente, supersticiosa. Tal vez el lector sienta alguna curiosidad por conocer qué sea ese alma supersticiosa en que desemboca el período de las revoluciones.
El alma tradicionalista es un mecanismo de confianza, porque toda su actividad consiste en apoyarse sobre la sabiduría indubitada del pretérito. El alma racionalista rompe esos cimientos de confianza con el imperio de otra nueva: la fe en la energía individual, de que es la razón momento sumo. Pero el racionalismo es un ensayo excesivo, aspira a lo imposible. El propósito de suplantar la realidad con la idea es bello por lo que tiene de eléctrica ilusión, pero está condenado siempre al fracaso. Empresa tan desmedida deja tras de sí transformada la historia en un área de desilusión.
Después de la derrota que sufre en su audaz intento idealista, el hombre queda completamente desmoralizado. Pierde toda fe espontánea, no cree en nada que sea una fuerza clara y disciplinada. Ni en la tradición ni en la razón, ni en la colectividad ni en el individuo. Sus resortes vitales se aflojan, porque, en definitiva, son las creencias que abriguemos quienes los mantienen tensos. No conserva esfuerzo suficiente para sostener una actitud digna ante el misterio de la vida y el universo. Física y mentalmente degenera. En estas épocas queda agostada la cosecha humana, la nación se despuebla. No tanto por hambre, peste u otros reveses, cuanto porque disminuye el poder genesíaco del hombre. Con él mengua el coraje viril. Comienza el reinado de la cobardía —un fenómeno extraño que se produce lo mismo en Grecia que en Roma, y aún no ha sido justamente subrayado. En tiempos de salud goza el hombre medio de la dosis de valor personal que basta para afrontar honestamente los casos de la vida. En estas edades de consunción, el valor se convierte en una cualidad insólita que sólo algunos poseen. La valentía se torna profesión, y sus profesionales componen la soldadesca que se alza contra todo el poder público y oprime estúpidamente el resto del cuerpo social. Esta general cobardía germina en los más delicados e íntimos intersticios del alma. Se es cobarde para todo. El rayo y el trueno vuelven a espantar como en los tiempos más primitivos. Nadie confía en triunfar de las dificultades por medio del propio vigor. Se siente la vida como un terrible azar en que el hombre depende de voluntades misteriosas, latentes, que operan según los más pueriles caprichos. El alma envilecida no es capaz de ofrecer resistencia al destino, y busca en las prácticas supersticiosas los medios para sobornar esas voluntades ocultas. Los ritos más absurdos atraen la adhesión de las masas. En Roma se instalan pujantes todas las monstruosas divinidades del Asia que dos siglos antes hubieran sido dignamente desdeñadas.
En suma: incapaz el espíritu de mantenerse por sí mismo en pie, busca una tabla donde salvarse del naufragio y escruta en torno, con humilde mirada de can, alguien que le ampare. El alma supersticiosa es, en efecto, el can que busca un amo. Ya nadie recuerda siquiera los gestos nobles del orgullo, y el imperativo de libertad, que resonó durante centurias, no hallaría la menor comprensión. Al contrario, el hombre siente un increíble afán de servidumbre. Quiere servir ante todo: a otro hombre, a un emperador, a un brujo, a un ídolo. Cualquier cosa. antes que sentir el terror de afrontar solitario, con el propio pecho, los embates de la existencia.
Tal vez el nombre que mejor cuadra al espíritu que se inicia tras el ocaso de las revoluciones sea el de espíritu servil.
Acabo de escuchar toda la entrevista de E. Dussel, magnífico, y me he quedado noqueada ante la complejidad y el peligro que corren los países hispanoamericanos en manos de las iglesias evangélicas-norteamericanas. Nos quejamos del conservadurismo de la Iglesia católica pero, al lado de este otro tipo de cristianismo, nos parecería que la Iglesia católica no lo es. Como dice el refrán, “éramos pocos y…” La ministra brasileña para la Igualdad, evangélica ella, fue la que dijo que las niñas eran violadas porque no llevaban bragas. Los de VOX, tan católicos ellos, no han firmado el manifiesto contra la violencia de género en la Comunidad de Madrid, ni el manifiesto sobre los derechos de los niños en el ayuntamiento. En la Junta de Andalucía ya no se habla de violencia de género por los componentes del gobierno ni en documentos oficiales, subyugados a las órdenes de VOX; creo que ayer en Murcia pasó algo con Vox.
Parece que todos los ultraconservadores apoyados en el cristianismo o, como Dusel dice, también el judaísmo, han olvidado eso de “no usarás el nombre de Dios en vano.”
No olvidemos a los testigos de Jehová, que también son votantes, y son absolutamente inamovibles. Y son miles y miles.
Y a continuación me pregunto ¿por qué aumentan los evangélicos o los testigos de Jehová, mientras la Iglesia católica va perdiendo feligresía.
Como dice Hans Kung, si no existiesen las religiones, no habría tantas guerras.
Malos tiempos…
Nota personal: me ha impresionado cómo han pasado los años por Dussel desde que yo lo conocí hace unos veinte años. Me da pena que una generación de tantos teólogos brillantes, se nos vaya haciendo mayores, porque no acabo de ver otra generación joven de esté a su altura, salvo la teología feminista, que está surgiendo con la fuerza y la frescura de lo nuevo, aunque no se le haga caso oficialmente.
Parece que los golpistas de Bolivia funcionan con Biblia en mano. Esto ha inspirado a Enrique Dussel la tesis que las vueltas de tuerca a la derecha actuales, son inspiración del inefable Dpto de Estado usando como punta de lanza la penetración de las sectas evangélicas militaristas, con mucha vocación capitalista ya que Dios premia a sus bendecidos con billete verde.
Si querida Olga, cuántas veces hemos escuchado aquello de que:
¡Es voluntad de “dios”!
Vosotros…( los pobres) … gozareis en el cielo.
Y así lo llevan enseñando desde hace ya… Ni sé.
Pero siempre hay personas, que viven de otra manera, y ahí está la lucha por que levanten la cabeza y luchen por sus derechos duramente arrebatados.
Abrazo entrañable.
Volverá EVO, volverá. Cuando un pueblo tiene a un político que lo respeta le hace volver. Y recuerdo el otro GOLPE DE ESTADO contra Hugo Chávez y unos jóvenes tenientes fueron al lugar donde lo habían encerrado y lo liberaron, y el pueblo cuando lo vio, se acabo el Golpe. Y hay un vídeo en que Chávez se lo dice en la cara a AZNAR. Y este le responde: Si estoy yo, tu no te llibras” A veces los medios audiovisuales son un reflejo exacto de quienes son los que nos dicen las mentiras, y quienes dicen la verdad. Aquí con Evo habían intentado acabar con él en un helicóptero, y les falló. No se fue porque lo hiciera voluntariamente. ¿Cuantas casas de sus ministros y familiares fueron quemadas?. ¿Donde estaban las fuerzas policiales’-Desaparecieron para que la EXTREMA DERECHA hiciera su labor destructiva, amenazante. Y eso no es un GOLPE DE ESTADO para esa prensa de millonarios…….que ocultan la verdad¡¡¡¡.Gracias Andres Manuel López Obrador, fiel reflejo de la doctrina ESTRADA, como hizo con los españoles el Presidente CÁRDENAS.Gracias México, lindo y querido.¡¡¡¡
Hola!
Nada está ASEGURADO.
La VIDA es un Territorio EN DISPUTA.