Con estas palabras me ha comunicado Reyes la definitiva marcha de Juan Luis Herrero del Pozo a la casa del Padre, hoy domingo a las 14 horas. Seguramente la columna de pensamiento y vida más fundamental en este ATRIO que aún recoge sus principales escritos como un tesoro. Yo poco añadiría a lo que sobre él dije en el segundo punto de mi Contemplación para alcanzar amor. Y dejo el espacio a un discípulo y amigo de Juan Luis y a vuestros comentarios. AD.
En memoria de Juan Luis Herrero Del Pozo riojano radical por la solidaridad
Por Fernando Almansa
Ha fallecido Juan Luis Herrero Del Pozo, y con él un pedazo de la mejor Rioja y de la mejor Humanidad, un hombre de profundísima espiritualidad; radical en su búsqueda por la verdad y la justicia social; teólogo, político de base y sobre todo hombre de coherencia absoluta.
Sus huellas quedan marcadas en muchos de nosotros de forma imborrable.
Juan Luis fue promotor de las huelgas de hambre a favor de una cooperación solidaria del Estado español. Junto con Pablo Osés y otros compañeros se embarcaron en dos huelgas de hambre que casi le cuestan la vida, y que dejaron secuelas graves, que deterioraron su salud de forma definitiva hasta acabar con él.
La cooperación española, que despegó de forma seria, a partir del movimiento por el 0,7%, le debe mucho a Juan Luis. El movimiento de ONGs en España y la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo, (AECID), así como las múltiples agencias que en diversas comunidades autónomas y municipios actúan hoy en día llevando la solidaridad a todos los rincones del planeta, no serían hoy lo que son, si Juan Luis no hubiera puesto su vida en juego para que la sociedad española y sus instituciones reaccionaran ante la pobreza y la injusticia mundial.
Mil recuerdos de Juan Luis, de sus lacónicas e irrefutables sentencias y de sus profundas preguntas y atenta escucha.
Su sinceridad riojana a bocajarro, su sencillez en el trato, sus preguntas oportunas, precisas e interpelantes, sus mensajes claros e irreverentes; porque él solo reverenciaba la verdad.
Su seguimiento a Jesucristo, sin medias tintas, sin fetichismos, sin magias; religioso social y espiritual. Juan Luis una semilla fértil y fuerte cuyos frutos llegan hoy hasta los últimos rincones del planeta. Juan Luis te echaremos de menos y esperamos poderte seguir en tu coherencia radical.
Hola, por razones azarosas hoy recabe en Atrio -hace mucho tiempo que no lo hago, disiento con muchas de sus posturas, aunque siempre su mentor Antonio Duato me ha tratado con gran aprecio lo cual le retribuyo en un gracias, pero ya el portal no me representa, cosas de la vida. Sin embargo escribo este pequeño saludo a REYES, con un fuerte abrazo y que el buen JESÚS abrace a nuestro querido JUAN LUIS de nuestra parte. Lo conocí hace años, estuvo en nuestra casa, pudimos departir mucho tiempo, no olvidaré sus ponencias, cervezas compartidas y el almuerzo -que se negó a que yo pagara-. Una gran persona, un gran teólogo, y me ha sentido honrado -que por Atrio- lo conociera, gestara su visita y lo tuvieramos un tiempo por Argentina. GRACIAS JUAN LUIS por compartir una parte de tu existencia. REYES nuestro gran cariño, abrazo y afecto.
Gracias Sergio, por revivir nuestro entrañable y agradecido recuerdo. No tuve el placer de verle en persona, pero su vida y pensamiento, alimentaron mi vivir y siempre estoy agradecida por todo cuanto recibí de su sabiduría.
Gracias de corazón.
Un abrazo entrañable.
He estado unos días sin poder entrar y ahora me encuentro con esta triste noticia… ¡Mucho te recordaré, Juan Luis, descansa en Paz!
Sentido pésame a su familia y a sus amigos de atrio.Le conocí,de vista,en la acampada del 0,7 en Madrid.Un buen hombre.
Hola!
Había otro VASCO emblemático en ATRIO;
su escritura era telegráfica.
Vivió y murió en Tornquist (al Sur de la Pcia de Buenos Aires).
Su esposa tal vez siga por esas serranías.
Josemaría Sarrionandia
Eso. Gracias. Esta memoria…
Un abrazo, caminante.
Con los oídos llenos del Alleluya de Händel siento que la vida de Juan Luis ha sido un potente y lúcido Alleluya. Un everest de humanidad en un cuerpo pequeño.
Entro en ATRIO, porque me acabo de enterar del paso de Juan Luis.
Se me ocurre que podríamos hacer una pequeña compilación de mensajes de ATRIO para Reyes, empezando por lo que ya se han expresado en este hilo. Nada elaborado; más bien, algo íntimo, familiar, para que se sienta abrazada. Una especie de álbum de comentarios, anécdotas, valoraciones del caminar de Juan Luis a nuestro lado. Con un poco de edición, podríamos imprimirlo y encuadernarlo, para que sea un abrazo colectivo vuelto libro con el cual acoger a Reyes en este momento.
¿Qué opinan?
Buena idea. Juan Luis ha sido, sigue siendo, alguien especial y creo que podría decir que Atrio también era algo especial para él. Me uno al trabajo que hagáis, caso de ser posible. Saludos
Permítanme unas divagaciones sobre el tema de la muerte y su destino.
Esa parte de nosotros que no vemos, los pensamientos sensaciones, sentimientos y la memoria del transcurrir, son energía. Y la energía no se pierde, se transforma.
Así en la muerte los componentes físicos vuelven a su naturaleza primigenia mineral, pero la energía que compone lo que llamamos Alma, donde se cobija el extracto de la persona, su memoria, sus sentimientos y emociones, sus ideas, y la elaborción que haya hecho en este mundo esa individualidad,sigue existiendo en el campo de la energía, según las leyes de la Termodinámica.
Y por otro lado el Espíritu que nos anima, sigue siendo parte de esa fuente que nos dió la vida, que permea todo nuestro universo y que habitualmente llamamos Dios, del cual yo creo nunca ha estado separado.
Y es el Alma la que evocamos, porque resonó en nuestra Alma. Es la sensación del timbre de su voz, de su mirada, de su bonhomía , o de su mal genio, de su risa y de su hablar, la que quedan en nuestra memoria formando parte de nuestra alma.
Es la resonancia de sus sentimientos, de sus ideas, de su percepción del mundo, la que lo hace vivir en nuestra memoria.
Es su tonalidad y su perfume.
Porque así es como habitamos los unos en los otros y nos conocemos, resonando con la vibración de su presencia su o de su recuerdo en nuestra memoria.
Así leeremos lo que escribió, y sus ideas nos habitarán, como muchas de las ideas que tenemos y que son legados que otros nos han hecho anónimamente, y que nunca sabremos de donde vienen, y que viven en nosotros y sus sentimientos escritos resonarán con nuestra alma, provocándonos emociones.
Y mientras dura la memoria, dura la sensación de individualidad que es darle nombre y apellido a estas resonancias.
Pero, las energías de las almas siguen existiendo, en el plano de la energía, y quizás a esto se referirán cuando hablan del alma colectiva de nuestra especie, que yo pienso debe abarcar a todos los seres vivientes.
Y nuestros muertos seguirán viviendo entre nosotros, mientras resonamos con su vibración a la cual nosotros individualizamos con un nombre.
¿Existe cielo e infierno donde van las almas junto con la individualidada recibir premios y castigos o a purificarse?
Nuestro amigo ya está más allá de la duda.
¡¡¡Genial y cierto querida Olga!!!
Un abrazo entrañable.
pili
He tenido una gran cercanía con Juan Luis. Estuvimos en muchas luchas extremas él y yo juntos espoleándonos. Codo con codo. Cada uno ayudado por los ímpetus del otro. Eso nos creó una inmensa complicidad. Siento que que yo también he fallecido algo con él. Ya me veo con medio yo en la tumba y contento.
En los últimos años , dentro de la mayor confianza, le preguntaba como andaba de fé. Si le venían dudas sobre la vida postmortem. Nunca me dijo que dudara . Al revés. Vivía a fondo y con muchísima ilusión que la muerte es la puerta abierta hacia la Plenitud de Dios.
Me sumo a todo el cariño que rezuma Atrio.
Para recordarle llevo dos horas releyendo “ Religión sin magia”. Ahí está vivo Juan Luis. Con su admirable lucidez y humanidad.
Lamento la pérdida de Juan Luis, compañero desde los diez años en el seminario de Logroño, luchando a su lado él desde el PSOE y yo desde el PCE en la Transición, educador de sus hijas en la guardería infantil, y muchas cosas más, entre las que hubo discrepancias y por supuesto una admiración de su trayectoria espiritual.
Me dolió que el hoy Cardenal de Barcelona y antes Obispo de la Rioja y más antes alumno de Juan Luis Herrero no se dignase visitarlo cuando vivió a apenas un kilómetro de su casa en Logroño…Una pena, hoy deberíamos reivindicar para su memoria el reconocimiento que la Iglesia, yo diría mejor la Jerarquía de la Iglesia, le negó.
De paso, saludo a Mar, nuestra compañera de Lardero que le acompañó en sus últimos años con sus lecturas y conversaciones, y a su compañera sentimental Reyes que convivió con él
Me uno de verdad a su esposa. Su nueva forma de interpretar la fe cristiana me ha iluminado y ayudado a relativizar otras muchas de las aprendididas en la teología. He tratado de compartirlas con otras personas. Yo estoy cada vez más convencido que no solo hace falta una conversion pastoral, que predica el papa Francisco, sino una conversión teológica más radical,sin la cual todo puede quedar en un gatopardismo. Es lo que ha hecho Juan Luis. Descanse en paz.
En mi opinión, Juan Luis escribió algunos de los mejores textos que se han publicado en Atrio y, en los debates en los que solía participar, algunos de los más sagaces comentarios.
Su propuesta sobre la “corporeidad espiritual”, aunque me parece que nunca llegó a definirla con precisión, pienso que es una de las ideas más sugerentes que he leído en mi vida.
Un fuerte abrazo a su familia y a quienes tuvisteis la fortuna de conocerlo personalmente y tratarlo con asiduidad.
Juan Luis fue un pionero que nos abrió camino en la superación de todo el andamiaje religioso y en la vuelta al Jesús de los evangelios y su mensaje de solidaridad fraterna. Mi solidaridad también con su mujer que tanto le ha ayudado, sobre todo durante estos últimos años
Conocí a Juan Luis por Atrio. Cuando estábais, Antonio, publicando el curso sobre su libro “RELIGIÓN SIN MAGIA, Testimonio y reflexión de un cristiano libre” ¡¡¡Que gran descubrimiento, Dios mio,!!! Llevaba yo entonces tratando de escribir un libro, que iba por unos caminos muy parecidos a los que expresaba Juan Luis. Entonces fue tal mi sorpresa que me dije: ¡¡¡Pero si este libro está ya escrito!!!Pero indudablemente su bagaje biográfico era mucho más rico en experiencias que el mio, si bien doctrinariamente coindíamos en todo. Pedí entonces a la editorial que me mandara tres ejemplares, a través de mi librero, y así fue . Yo me quedé con uno y los otros dos se los dí a dos hermanos mios…¡¡¡que no los han leído!!!, dicen ellos,por temor “a perder su fe”. ¡¡¡Que paradójico esto!!!.
Hablé con él por teléfono y él se quedaba asombrado del entusiasmo que oía en mi, que contrastaba con las pocas noticias que le llegaban sobre el recorrido de la publicación de su libro. Y Reyes, su mujer, me decía que no le diera malas noticias sobre eso, porque le deprimían. Esperaba, sin duda, una mejor acogida. Estuvimos hace dos años en pasarnos por Logroño, mi mujer y yo, para hablar directamente, pero coincidió con la muerte de mi cuñada, tras larguísimo padecimiento, y no pudo ser. Juan Luis me decía: Aquí no busquéis nada, tenéis en nuestra casa hotel completo……
Querido Juan Luis, ya sabes que los proyectos humanos son a veces, estelas en el mar….Ahora, lo que más deseo es que tu mujer Reyes, de la que solo conozco su voz, le sea leve tu falta, y que su corazón herido responda a las emociones de tu pérdida extensible a toda vuestra familia. Con toda mi alma de hermano.
En primer lugar un abrazo grande a Reyes y a su familia.
Uf, para mí ha sido una noticia muy triste, como ocurre siempre con la muerte de un ser querido. Buena herencia la que nos dejas, querido Juanito, cuantas horas leyendo y comentando tu libro aquí en atrio, qué momentos más buenos cuando te conocí en persona en Madrid o cuando nos tirábamos ratos y ratos hablando por teléfono. Cuánta gente te quiere y lamenta tu pérdida. Pero siempre tendremos tus reflexiones para desperezar nuestra mente y abrirla a nuevos horizontes, y tu ejemplo de compromiso hasta el límite de tus fuerzas y poniendo en riesgo tu salud por causas justas. Gran persona, gran amigo. Te recordaré siempre.
Esta mañana he recibido la noticia de Reyes, con las mismas palabras: Ayer descansó por fin Juan Luis.
He sentido dolor por la pérdida de una persona excepcional de quien tuve el privilegio y la fortuna de contar con su amistad.
Le conocí personalmente cuando nos reunimos unos cuantos atrieros en San Juan de Gaztelugatxe hace unos diez años, y pasamos juntos un magnífico día en un lugar precioso e iluminado por un espléndido sol.
Desde entonces he pasado muchas tardes con él, leyendo cuando él ya no podía a causa de su mermada vista, o paseando por el parque del Ebro, él en silla de ruedas cuando no le sostenían sus deteriorados huesos… todo ello a causa de la huelga de hambre que logró el compromiso de destinar el 0,7 % de los presupuestos del estado a ONGs, que al día de hoy no sé si se cumple y, pese a todo, gracias, Juan Luis, porque al menos queda en la conciencia de todos y de hecho hay organismos que si lo hacen, como el Colegio de Médicos de La Rioja entre otros.
Me gustaba mucho disfrutar de su compañía, de su sabiduría, de su aguda inteligencia, de su lucidez; de esa pareja que componíamos en la que parecía era yo la que ayudaba, leyendo en voz alta en su casa o empujando una silla de ruedas por los parques, le verdadera afortunada y privilegiada era yo. He recibido mucho de él, de su generosidad y sabiduría y tengo que agradecerle todo lo que he aprendido de su inteligencia y lucidez pero, sobre todo, de su desprendimiento y bondad.
Querido Juan Luis, te voy a echar mucho de menos, pero quedas en mi corazón.
Asunción Razquin Medina
P.D.: Quiero compartir con todos los atrieros esta foto de la mano de Juan Luis apretando la mano de Reyes, a quien siempre tuvo a su lado.La tomé en una de las últimas ocasiones que disfruté de su compañía y con ella siento que sigue su amor en mi memoria:
Juan Luis y Reyes
Susi, la última vez que lo vi fue por Skype en tu casa. Gracias por haberme dado esa oportunidad. Un beso
Querida Ana, te echo de menos y creo que también echo de menos los días fecundos en que visitaba Atrio a diario. Algo tendré que hacer. Un abrazo enorme.
¡Gracias Mar… te echamos de menos… vuelve!
Un abrazo entrañable.
mª pilar
Muchas gracias, Mar, por compartirnos tus experiencias junto a Juan Luis. Rompedor, tenaz y profundo. Gran testimonio para todos, creyentes o no creyentes, luchadores por un mundo más justo y coherente.
Que las personas que le han tenido cerca no dejen de sentir su entrega, fuerza y lucidez.
Besos y un abrazo entrañable para ti y Reyes.
En atrio también te echamos de menos, Susi. Anímate, porque, como siempre digo, lo que yo escribo en atrio, más que para los demás, verbalizo reflexiones que yo me hago y que me quedo con ellas. Un beso
Memento: cuando hace muchos años leí los primeros apuntes sobre religión y magia de Juan Luis, me sentaron como un tiro y decidí orillarlos. Pero su honestidad intelectual me hizo rectificar y estudiar lo que escribía. Le debo el tiempo dedicado a pensar, estudiar, leer y orar pasando lentamente de una manera de entender la fe a otra, no tanto en la praxis que para mí ha cambiado poco, como en la luz de la comprensión y la esperanza. Con el tiempo y el testimonio de su experiencia de Dios, se ha ido convirtiendo en una lumbrera del amanecer del tiempo nuevo. Agradecido pues. In paradisum deducant te Ángeli……et cum Lázaro quondam paupere aeternam habeas réquiem. Lo he cantado este amanecer mientras caminaba por los olivares del pueblo donde vivo. Como Oscar y George y Pilar dicen que los muertos se quedan en y con nosotros, lo habrá escuchado.
Un fuerte abrazo agradecido, Juan Luis
¡Ya descansas de tu agitada y plena Vida!
Nos has regalado tanto y con tanta sabiduría, de la fecunda, de la que nos levanta para ver, optar, y sobre todas las cosas:
¡¡¡Ser…fecundos en nuestro vivir!!!
Has pasado otra barrera en tu vivir entregado, pero para mí… No has muerto, ahora vives en nuestro recuerdo agradecido, por tanto como nos has regalado para ser personas libres de ataduras que nos impiden caminar libremente y con el ánimo firme y resuelto.
Cuánto gozo he podido experimentar cuando profundizaba en tus palabras y obras, me dabas vida y fuerza para seguir descubriendo, esa manera de ser ante la vida que nos rodea.
Vivirás en nuestros corazones, en cada momento que recordemos tu estilo de vida, tu saber estár, tu acogida, y tu gozo cuando nos hacías bibrar, y pedíamos tu apoyo, tu conocimiento.
¡Te quiero, y mi recuerdo, te mantendrá a nuestro lado para seguir bebiendo de tu sabiduría!
¡Descansa en paz en esta nueva andadura… sea la que fuere… y fortalece la nuestra!
¡Gracias por tanto bueno recibido! Mi abrazo entrañable a Reyes por estar siempre a tu lado.
m* pilar
Leo: «Los muertos entran dentro de nosotros, hacen en nosotros morada y agradecidos, como sólo los muertos saben serlo, déjannos en herencia la henchida aljaba de sus virtudes.»
No sé si se trata de una cita de Juan Luis o si es algo original de Óscar Varela. De cualquier modo, la profundidad de la idea me parece enorme. Quizás si esta es la forma de describir la eternidad de la vida, tras de concluir la andadura de la existencia nos vamos quedando unos dentro de los otros y el trasvase lo hace posible y necesario el cariño que otras personas nos profesan, su amistad, y si este y aquel, o esta y aquella no pudieron ser amigos, pues un/a de los/as dos si pudo serlo y cuando quienes no eran amigos/as se adentran en quienes sí lo eran, se va integrando la figura de una única humanidad cuyas células van cementadas de solidaridad, de disponibilidad y de presencia.
Me parece fascinante esta manera de sentir y decir y, desde luego, de moverse a lo largo del hilo de la existencia particular con cuyas fibras se tuerce la jarcia o gruesa de la vida.
No sé qué ocurre cuando se alcanza finalmente le finalidad de ser. Tampoco me preocupa mucho. Pienso como die el párrafo de Óscar que lo importante es quien se habido siendo hasta que al fin ya se es. Me gustaría que, como deduzco del elogio, Juan Luis haya podido terminar su existencia sereno y tranquilo, contento de quien haya venido siendo.
Difiero solo en que no solo las virtudes, sino las carencias, los defectos, los lugares que en el lingo de Teilhard de Chardin quedaron descritos como las retracciones o disminuciones de la gracia ―que traduzco como aquello que nos hace incompletos― se recogen en aquellos personas en quienes encontramos acogida o a quienes nos integramos.
Me parece que estas carencias o incompletitudes son como invitaciones a la solidaridad y a la compasión desinteresadas que solo pueden reforzar la solidaridad y la compasión de quien nos acoja en amistad o cariño, como quizás la tierra acoge a la simiente.
Me gusta pensar que la raza o el género humano sean unitarios, una especie de rompecabezas, puzle, roto en muchas, muchísimas piezas, todas necesarias y que lo ínfimo y efímero de cada una al fin encuentran su lugar en la completitud del puzle.
CANTO A LOS MUERTOS, A LOS DEBERES Y A LOS IDEALES – OCT1,58/62
Para la Sra. Doña Eloísa, Navarro Ledesma de Cubas.
…………………..
Mientras estudiaba en Marburgo,
José Ortega y Gasset se anoticia
del fallecimiento (inesperado) de su “mentor” Navarro Ledesma.
Gracias, agradezco la referencia. Un abrazo cordial.
Hola!
Me preguntaba:
¿QUÉ y DÓNDE queda o va
lo que toda una vida
nos esforzamos por ser?
………………………………
“El triste adamita pasa en menoscabo al través de la vida llevándose a sí mismo a la rastra: va cargado de afanes y de dolores, más que cargado va rendido so la gravedad de un perenne desencanto. Las ilusiones, las esperanzas se le han caído, como mal prendidos cascabeles, en la primera jornada. Sigue haciendo camino con el ánimo sordo, merced a un impulso oscuro, ciego, impersonal. Un día, entre que el sol sale o no sale, llega sobre el hombre una noche definitiva: se siente hundido en un descanso oscuro, ciego, impersonal.
Los amigos creen por un momento que se han quedado solos: lloran: a la luz de un mezquino sol rojo echan sobre el residuo carnal unos puñados de santa tierra: luego se enjugan las mejillas: por fin, advierten que el fenecido ha traspuesto sus memorias, como una nube el horizonte.
…………………….
Los muertos no mueren por completo cuando mueren: largo tiempo permanecen; largo tiempo flota entre los vivos que les amaron algo incierto de ellos.
Los muertos entran dentro de nosotros, hacen en nosotros morada y agradecidos, como sólo los muertos saben serlo, déjannos en herencia la henchida aljaba de sus virtudes.
En todo ser hay una virtud, cuando menos, que tiene derecho a ser inmortalizada. Es injusto e inmoral preguntar de un muerto solo: ¿Qué ha hecho? Hay que preguntar también: ¿Qué ha sido?
Esta es precisamente la labor religiosa impuesta a los que conocieron y sintieron el ardor espiritual de algunos hombres muertos, cuyos esfuerzos permanecen eternamente proyectados.
Tal vez Juan Luis fuera para muchos una aventura de incansable ideación:
– las dos más altas virtudes modernas:
– el cumplimiento de los deberes oscuros y
– el idealismo inmarcesible.
Conforme va el hombre viviendo múdanse sus pensamientos, quiébranse sus proyectos, entran otros en su lugar, llegan y pasan bramando las pasiones, trastrócanse mil veces las ambiciones, mueren los amigos y los hermanos, sobreviven otros amigos y otros hermanos, todo se estremece y oscila, se trasmuda y huye, se renueva y cambia.
En tanto una sola realidad permanece, una sola cosa está sentada a nuestro lado tácitamente y si caminamos hace vía con nosotros: el Deber, pardo, vulgar personaje sin historia.
El deber anónimo, del deber cambiado en cuartos, el de este instante que está frente a nosotros y el de todos los instantes. Es ese deber sin flores y de frutos invisibles, ese deber hospiciano que forma el más hondo sedimento sobre el que se apoya todo el esplendor de la vida social: el deber del trabajo.
Hay quien espera a entrar en el combate cuando el rey está mirando; hay quien para escribir necesita, como Buffon, unos puños de encaje; hay quien es como Aristo, aquel filósofo galante que disertaba únicamente cuando le llevaban en litera. Hay, en cambio, quien trabaja siempre que es preciso, donde quiera y como quiera.
………………………
No reduzcamos los muertos a las obras que dejaron: esto es impío.
Recojamos lo que aún queda de ellos en el aire y revivamos sus virtudes.
¡Resucitemos a los muertos virtuosos de entre los muertos!
Me gusta.
Y es cierto. Largo tiempo flota entre los vivos que le amaron algo incierto de ellos.
A veces su presencia es casi ‘real’
Me alegro de haberlo leído.
Pero tienes que querer mucho en ese momento de tu vida a la persona que muere. Si no es así, no flota nada a tu alrededor. Sencillamente, se va.
Esto de la muerte es horrible.. últimamente se muere todo el mundo. Menos mal que estrellas no nos van a faltar. Pero uf.
Lo siento . No lo conozco mucho porque soy nueva en este foro, pero lo siento.
Y sí. Seguramente ya tendrá algunas respuestas. Y lo que es cierto es que ya descansa en paz.
Y que las personas que lo quieren muchísimo que busquen entre las estrellas por la noche. Estará en una. Fijo .
De Atrio, mando mi humilde saludo a este santo de fe viva y le pido que siga acompañándonos al servicio de la verdad que libera. Me hubiera gustado conocerlo mas.