Amigo Pablo: Te escribe alguien admirador de un papa que dijo que nuestro sistema económico “mata” y que él “nunca ha sido de derechas”: puedes suponer que coincidimos bastante en ideales de ética sociopolítica. Pero sospecho que disentimos en nuestro análisis de la realidad a la que aplicar esa ética. Y aplicar un remedio a un diagnóstico equivocado sería como poner una transfusión de un grupo sanguíneo no compatible.
Las sociedades suelen ser conservadoras, y la nuestra de hoy más: desean mejorar, claro está; pero no esperan mesías y temen sobre todo perder lo que ya tienen. Sospecho que una de las razones del millón de votos que perdisteis fue que la gente no se fiaba de tantas promesas, no que éstas no fueran buenas.
Raíz de nuestros muchos males no es sólo la maldad de tantos corruptos, sino un sistema de inequidad establecida o de “injusticia estructurada” (expresión de Juan Pablo II que no creo que fuera populista, ni comunista, ni venezolano…). La injusticia establecida impide de momento infinidad de cosas que muchos desearíamos cambiar: porque además es una injusticia no reconocida por los medios de comunicación. Decir: “vamos a conseguir que los corruptos tengan miedo” me parece, desgraciadamente una ingenuidad: porque a lo que nos exponemos es a que los corruptos nos asusten a nosotros. Deberíais pues explicar cómo pensáis afrontar este obstáculo estructural que, por otro lado, no es exclusivo de un solo país sino mundial: cómo vais a lidiar con Europa, con las multinacionales, la fuga de capitales, los impuestos a los millonarios, los paraísos fiscales y con casi todos los media.
Por otro lado, es muy normal que, ante tamaña complicación, surjan diferencias entre vosotros: esas diferencias sólo desaparecen allí donde “el que se mueva no sale en la foto”. Pero habéis de contar con que esas diferencias, por normales que sean, serán desfiguradas y jaleadas por los medios porque a éstos no les interesa la verdad, sino la carnaza: pues la verdad duele y la carnaza engorda. Y no digamos nada si esas diferencias se convierten en rivalidades personales y luchas de poder, como parece que os está pasando..
¡Qué tarea tan supercompleja!. Y qué ingenuo resulta venir en plan de “Tejero democrático” diciendo convencidos: “esto lo arreglamos nosotros enseguida”. Esa es la impresión dais a muchos, magnificada por todos los que os temen: que queréis operar a un enfermo sin saber ni si es diabético ni cómo le funciona el corazón. De ahí vuestra crisis.
¿Quiero decir con esto que no hay nada qué hacer y hay que resignarse al doloroso poder de los millones privados? ¡Dios me libre! Como cristiano, eso sería para mí un pecado grave. Pero déjame hacer ahora un pequeño paréntesis.
Si no lo conoces, te recomiendo un libro de Svetlana Alexievich, último Nobel de literatura, titulado El fin del homo soviéticus. Ese reportaje inacabable sobre la caída del comunismo gira todo en torno a este dilema: en tiempos de la URSS nos quejábamos de falta de libertad, criticábamos, maldecíamos… pero nuestra vida tenía un sentido: creíamos en el proyecto de sociedad que había que construir, aunque nuestros dirigentes lo hicieran tan mal. Con la caída del comunismo tenemos la libertad pero hemos perdido el sentido de nuestras vidas. Y sin sentido de la vida, la libertad se convierte en una cosa bastante imbécil. Tener un coche más grande, lencería más sofisticada o unos vaqueros rotos (que además resulta que son más caros), no da sentido a la vida. Antes importaba poco llevar toda la vida el mismo traje y no tener dos abrigos, pero había que leer íntegros a Pushkin o a M. Gorki. Ahora sólo importa leer prensa deportiva.
El drama que transpiran todas esas páginas es impresionante. Y es un testimonio de gentes de todas clases: militares, civiles, técnicos, escritores, varones, mujeres, viejos, jóvenes… No han pasado de lo malo a lo bueno como reza la propaganda oficial, sino de lo malo a lo absurdo. ¡Qué dolor!
Pues bien: te comento esta obra (que todo occidental debería leer sin pensar por el título que es un canto a la caída del comunismo) porque, para mí, vuestro discurso no debería consistir en prometer paraísos en los que hoy nadie puede creer, sino en mostrar que tiene un gran sentido luchar aunque sólo sea por pasar de lo malo a lo menos malo. Ese sentido es una fuente de satisfacción mucho mayor que todas las drogas o las pastillas azules de Matrix que suministra nuestro sistema asesino.
Deberíais comunicar esa profunda experiencia de sentido y de humanidad. Porque, a la larga, esa lucha no es nada fácil. El sabio refrán castellano (quien se mete a redentor sale crucificado) no puede ser olvidado hoy. Ya he dicho que intento ser cristiano. Sin esa referencia a Aquel que dio origen a ese refrán y que, efectivamente, es para nosotros un Redentor crucificado, veo inevitable el engaño de creer que podemos lo imposible, en lugar de vivir la satisfacción de luchar por lo poco que se pueda. Que algo siempre se puede.
Podemos poco. Pero vale la pena intentar ese poco, y dejarse la vida en ello: porque luego, los mismos criminales que hace 40 años mataron a Yoyes, acaban defendiendo lo que ella quería… Y así, sólo así, es como avanza la historia.
Mira Dimas una cosa es ladrar y otra morder.Los podemitas “ladran mucho,pero morder muerden poco”.En democracia para “morder” hay que tener los votos porque “morder” sólo se muerde desde el poder y este viene por los votos.Mira si no en Galicia y País Vasco quienes mandan.La verdadera manera de que te tenga miedo es que controles los presupuestos generales del Estado.No te quepa la menor duda.
Me temo que comentar una frase de un meeting con la perspectiva de un analista riguroso es un método equivocado de proceder. Efectivamente pretender encontrar un partido que podamos homologar con el mensaje de Jesús tambien es un método equivocado. Las palabra de Pablo Iglesias hay que interpretarlo en clave política de transformación de la sociedad. En la segunda república se dió la misma dinámica en el cambio deseado y propuesto. Las faciones de la izquierda que contemporizaron con el “cambio posible” ni consiguiron este cambio, ni sedujeron a los que no pensaban igual, ni cambiaron nada, porque “los mandamases” no aguantaron ni el mínimo cambio democrático. Les echaron del poder a tiros. Moraleja no sirve contemporizar con “los mandamases”, solo mediante la indignación defenderemos al pueblo llano, o estamos enfadados la mayoria del pueblo que somos los trabajadores o no habrá cambio. Con cataplasmas solo consguiremos un falso cambio. Si los pobres son lo primero según Jesús hay que poner a los ricoa a la cola, ellos nunca se colocarán alli.
Lo más sorprendente que he oído últimamente sobre Pablo Iglesias fue la defensa que anoche hizo Marhuenda en la Sexta Noche de Pablo Iglesias frente a Errejón.Sospecho que a Marhuenda/PP-al fin y al cabo son la misma cosa-le interesa la polarización que genera Pablo Iglesias.En concreto le interesa eso que el mismo dice:”el miedo que genera”.Miedo que no es substancialmente de los poderosos que,para que nos vamos a engañar,a los poderosos se la pela Pablo Iglesias;sino miedo de los votantes de derechas que en esto son como un ejército.Incomprensible la falta de ética del votante de derechas que,teniendo a Ciudadanos,no le da 70 diputados a Ciudadanos que por cierto ha sido tan condescendiente con el PP que ya no es alternativa en esto de la corrupción.En cuanto al PSOE un partido dispuesto a suicidarse.Absurdo comparar los resultados de Pedrito con los de los anteriores líderes-Felipe o los otros-.Ni Felipe,ni ninguno de los gallardos baroncetes que gobiernan gracias a Podemos sacaría mejores resultados.La división de la izquierda es un fenómeno que ha venido para quedarse.Venga Felipe redivivo o el susumcorda.Felipe al que un núcleo muy importante de votantes de Unidos Podemos detestamos.
Contra Podemos, todo vale:
Oaxaca es parte del territorio venezolano
Creo sinceramente que lo que dice el articulista puede, qué duda cabe, ser mejorado, pero es difícil no tornarse juez de lo que otros dicen, declaran y hacen. Nadie es perfecto, ni queremos, Dios nos libre, que algunos de nuestros políticos aparezcan como seres perfectos, en los medios y hasta en la vida real. ¡Cuánta falsedad esconderían!
También es cierto, que nadie nació sabiendo ser padre ni madre, la tarea más compleja y completa del ser humano hacía otros seres humanos. Y sin embargo, las personas con ninguna experiencia en esta tarea, tan incondicional, son las que más opinan al respecto e influyen en el cómo educar y hacer la vida familiar.
Lo que me lleva a pensar en el fenómeno de creación de opinión muy extendido en lo que llamamos la “tarea periodística”, pues en ella cunde mucho el proselitismo y la dispersión también provocada en la abundancia de chismes. ¿Y a qué y a quién interesa que el río esté revuelto?
Que el poder, pasado los años, haga suyo lo que impidió y rechazó en otro momento, esconde su estrategia milenaria de cambios de imagen y apariencia para que nada cambie de fondo, ya que le hace conservarse y mantenerse.
Los hechos hablan por sí mismos, lamentable, triste e indignante, pues , de hecho, hay cada vez más diferencias, (quizá sean las mismas, que siempre ha habido) en la distribución de la riqueza, detentada por unos pocos a costa del resto de personas, siendo la mayoría de ellas, pobres y aún más desfavorecidos de entre ellas, las mujeres y los niños.
Me uno al comentario de Iñaki S:S,
Y por tanto, me uno a quienes el menciona… Totalmente de acuerdo.
mª pilar
La personalidad y el mensaje político de D. Pablo Manuel Iglesias, diputado en Cortes y líder nacional de una formación política son ambos enjuiciables y criticables, es más lo exige el guión. Siendo un personaje público y ejerciendo una labor representativa también es susceptible de recibir “cartas públicas” trasmitidas a través de un medio de comunicación, no faltaría más.
Al Sr. Iglesias se le dice que comulgando con los ideales de izquierdas, ideaaleas de ética sociopolítica, sin embargo el autor de la carta no está conforme con el diagnóstico que trasmite sobre los males de nuestra sociedad.Yo añadiría algo más: que tampoco estoy de acuerdo con los otros diagnósticos, sus vertientes y modalidades varias, tanto de las distintas facciones de Podemos “nacionales”, como las aquellas de las que hacen galas sus “periferias y confluencias”, algunos más acertados que otros y otros muchos en las antípodas. La prueba radica en los diferentes programas electorales con que se han presentado y se presentan en las diversas elecciones (Andaluzas y Generales de 2015, Madrileñas,Catalanas, las generales de 2016, y las presentes para pasado mañaana día 25 en Galicia y Euskadi. Todos estos programas electorales habrían de ser analizados a la luz del Programa Político de Vistalegre, y el análisis y diagnóstico que se hacía de la realidad política española.
A tal observación se puede objetar que la realidad de 2016, apenas un puñado de meses después, es muy diferente a los sueños de tomar el cielo por asalto de entonces, que ahora se tienen responsabilidades de gobierno, y de representación y un amplio respaldo popular salido de las urnas.
Pero si queremos ser consecuentes deberíamos reconocer, que lo que ha cambiado es “la visión”de la realidad junto con el acomodo en el poder, que antes no se tenía.Pero el pueblo, la sociedad civil, sigue bajo el sufrimiento de los problemas acuciantes a los cuales no se les dá ninguna solución. Las soluciones que esperamos de la clase política son sus “actos políticos” y sus “actos de gobierno” allí donde tienen la posibilidad y puedan posibilitar que existan tales gobiernos.
Y ahora, dos observaciones más para ilustrar lo que acabo de decir.
Yo creeré en la honestidad de Pablo Iglesias cuando tenga un mismo discurso en Madrid, en Soria y en Cataluña, En Galicia, en Andalucía y en la Comunidad Valenciana, cuando Podemos pida con el mismo énfasis en todas las partes de España un Referendum para que todos/as los/as españoles seamos consultados en el sentido de que si “queremos seguir siendo españoles a nó” (¿Se imaginan un referendum en Cataluña donde se les pida a las gentes de allí que se pronuncien si quieren ser catalanes?)
¿Por qué sería un contrasentido exigir la “catalanidad”, y no lo parece su “españolidad”?) ¿Quiénes y por qué y bajo qué argumentos históricos o políticos han ido estableciendo la confrontación? ¿Por qué Podemos allí donde le interesa alimenta el mito de las comunidades “étnicas” diferenciadas, que es un mito del siglo XIX y no un elemento diferenciador de la nueva época que queremos inaugurar?
“Si dijera el pie:”Puesto que no soy mano, no pertenezco al cuerpo”, ¿dejaría, por eso, de formar parte del cuerpo?”
Y por otra parte, y ésto es lo segundo, la llamada nueva política, lo que se había ofrecido como el principio regenerador para salvar “la democracia”, se parece tanto hasta ser un calco de la mala praxis política, si se pregonaba que llegaban “con una nueva forma de pensar” y durante estos nueve meses que van desde diciembre pasado hasta hoy se abandonan “los más firmes principios” en virtud de “la eficacia política”. Por desgracia hasta esa mal llamada eficacia del acto político se ha sustentado en un tacticismo que manifiesta ser un simple manejo de los resortes de poder, en la más pura “partitocracia” ¿Se me entiende o se me exige ser más claro?
Esta visto que ni desde la iglesia de los pobres se quiere dar una oportunidad a Podemos. ¿Será que ella también teme perder su inmenso patrimonio?.
Estaría bien que JIGF publicara una carta a Mariano Rajoy, para hacernos una idea más exacta de su línea de pensamiento.
De momento estoy con los comentarios de OSCAR, HONORIO Y ANTONIO
Amigo, J Ignacio: Soy asíduo lector tuyo. Acabo de leer tu carta a Pablo. Como a Cadarso me dejó un poco ‘inquieto’. Puede dar la impresión de que Pablo y los suyos (UP, Mareas, etc), son demasiado jóvenes y deben dejarse aconsejar ya que su falta de experiencia les puede llevar por caminos erróneos, llevados por su deseo de cambiar esta sociedad corrupta. Eso ya lo saben ellos y su sentido de autocrítica supera infinitamente a los de la estirpe, llamémosle clásica. Los de la estirpe son poseedores de la verdad (la suya, claro, la de la estirpe). No se equivocan. Siempre tienen la razón y el dinero. Los de Pablo, Alberto, o …. ni tienen dinero ni se les permite tener razón, aunque la tengan. En resumen, lo que te falta en tu reflexión pienso yo que es algo así: “A peasr de todo lo dicho, Pablo, los únicos que podeis trnasformar esta sociedad sois tu y los tuyos y asociados. Los de siempre ya sabemos que ni son capaces ni quieren. Sus intereses son otros. No os dejeis enredar en sus críticas y descalificaciones casi siempre infundadas. Las dudas que he vertido sobre vosotros sólo son una manera de dejar en ridículo las seguridades de la estirpe neoliberal. Ánimo muchachos”.
Las citas del papa Francisco, pienso que no dejan lugar a dudas de que estos muchachos están bastante más cerca del Evangelio que la estirpe y que el voto de un cristiano, si quiere ser consecuente, debe ser para ellos y no para los fariseos.
Y por último, Pablo: Tenemos que hablar más con vosotros para convencernos, mutuamente, de que estamos más cerca de vosotros de lo que puede parecer.
Un saludo, cordial.
Amigo Faus: se me está ocurriendo aquella frase de aquel entrenador del Barça: “Siempre negativo, nunca positivo…” Yo creo que es como más cristiano lo que dicen o decimos los que andamos con el Pablo y sus colegas: “Podemos…”. Hemos podido contribuir a reformas sustanciales en Barcelona, Cádiz, Coruña, Zaragoza, etc. etc. Por ejemplo, porque seguro que me pierdo otros mil detalles y resultados positivos del impacto que ha producido en nuestra sociedad Podemos.
Ni Pablo ni los que andan, andamos con él, ignoramos de que alcanzar el cielo en un santiamén es un sueño imposible”. Pero podías ser un poco más positivo y darnos ánimo en vez de hablarnos de los imposibles…
Ya sabemos lo del evangelio, estate tranquilo. Importa analizar lo temporal, lo científicamente comprobable, lo demostrable, y por supuesto hacerlo con unas expresiones esperanzadoras y que nos den ánimo.
Se agradece tu afán de ayudar, pero que sepas que asumimos y afrontamos nuestros errores y nuestras limitaciones.
magnifico,como siempre.Que la izquierda se lo lea.
Sigo:
Los que cómodamente paraditos en el DESPUÉS
Parlan pontificalmente de los siempre difíciles ANTES
Merecen, por lo menos, la adecuada SOSPECHA.
¿Tal vez, no?
¡Voy todavía! – Óscar
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Nota: ¿No pasa algo parecido con la esforzada mujer que fue “Madre Teresa de Calcuta”?
– Periodista (en tono burlón por ver lo que veía luego de viajar miles de Kmts. para hacer la Nota): ¿Y estos diez leprosos son su Obra?
– Teresa: ¡Así es! … Ahora ¡Muéstreme los suyos!
Hola!
Puede que don Faus esté acertado en la crítica a Pablo ¿Cómo voy a saberlo?
Lo que no sé es si don Faus intentó “en privado” decírselo a Pablo.
Ya que hace tanta referencia a su inspiración “cristiana” tendría que haber mencionado (que no lo hace en la Carta) el haber cumplido lo de “PRIMERO charlarlo con el interesado y en secreto” ¿no?
¡Voy todavía! – Óscar.