Siento que mi invitación en ATRIO a entrar personalmente en los textos de Alexander Grothendieck y profundizar en ellos hayan tenido tan poca acogida en estos últimos años. Desde aquel “Qué has visto tú en ese loquito?” de hace cinco años al actual de quien dice, sin dejar constancia de que ha seguido mi invitación a entrar en sus últimos libros, de que lo de AG eran sueños y visiones de carácter psicótico que se hubiera evitando, entrando en razón, si hubiera seguido la ruta de Jung y no la del buscador de humandad en fe y fidelidad a Jesús que fue para él Légaut.
Hoy solo quiero volver a recordar a todos la Invitación a uniros al Acto de homenaje a los diez años de la muerte de A. Grothendieck ´Lo organiza una Fundación e Instituto creados en Italia para recordar y actualizar la obra de Grothendieck. Espero que en ese homenaje no solo atiendan a su obra matemática, que ha tenido mucho que ver con los recientes adelantos de modelos topol´gicos digitales que impulsan la informática de hoy. En Asia está despertando gran atención y uno de los principales patronos de la fundación es el gigante Hauwei. ¡Ojalá no se traicione una vez máslas aportaciones humanistas-espirituales de AG, calificándolas de consecuecia de sus brotes psicóticos.
Yo veré cómo puedo encontrar la manera mejor de dar a conocer sus escritos a todos. Hoy he editado para los lectores de ATRIO esta Carta a González, un documento que estaba hasta ahora inédito en fotocopia de la carta original enviada a ese misterioso “Señor González”. La publico hoy con permiso expreso de su auténtico destinatario.
Consejos prácticos para hoy y después:
- Si no os da tiempo para inscribiros en el enlace que se propone y recibir el enlace (de 2 a las 6 de hoy), probad a emplear este enlace que no sé si será válido para todos: event website.
- En todo caso volveremos a indicar el enlace para poder seguir el evento en diferido.
Hola Antonio. Sigo tus comentarios relativos a Grothendieck y los sigo con interés, admiración y ánimo de aprendizaje. Si no participo en las actividades que propones, no es por falta de interés sino porque, en mis actuales circunstancias, no me veo capacitado para intervenir.
He leído la carta a González y comparto algunas de la inquietudes que, a mi entender, se plantean; especialmente respecto a la posible soledad, del que creyendo tener una verdad, comprueba que otras personas no alcanzan a comprenderla como uno la entiende. Lo cual no quiere decir que esa verdad en el futuro no fructifique de una u otra forma. Por esos pienso que todos debemos de seguir el camino que en cada circunstancia se nos presente como el más deseable, más allá de si son muchos o pocos los que lo entienden o quieran participar en ese camino.
Muchas gracias y un abrazo.