¡Que alegría cuando recibí este mensaje del querido George R. Porta! Cubano y estadounidense, con largas estancias en Italia y España, ha servido como psicoterapeuta a presos en cárceles de Florida. Uno de los primeros adictos a ATRIO, nos ha dejado en comentarios y artículos pruebas de su gran sabiduría y bondad. Pero hace algo más de un año tuvo un ictus grave que le impidió continuar activo. Con gran coraje y fuerza de voluntad se ha ido recuperando. Y hoy, por primera vez, reaparece aquí. ¡Un entrañable abrazo, hermano Jorge! AD.
Amigo Antonio: Un abrazo fuerte y mi gratitud por tu recuerdo y tus buenos deseos. Me he recuperado lo suficiente para cumplir obligaciones, pero me cuesta muchísimo todo. He sentido y siento muchísimo la catástrofe de la DANA en Valencia y en tantas partes. Pedí a mi hermano q. hiciese una pequeña donación a la Cáritas valenciana q. ya le aboné porque, si puedo administrarme, pienso pedirle q. haga otra el próximo mes.
Mary Morzauski creía q. hubiese una forma de oración q. llamaba «de intención» (fue con el grupo de Thomas Keating, O.C.S.O. cofundadora de Contemplative Outreach, q. divulgaba la “Oración Centrante” para prolongar la contemplación constante. Ya sabes q. mi certidumbre siempre incluye margen de error, pero si pudiese esperar del Dios de Jesús q. impidiese tanta desgracia, q. sepas q. trato de perseverar en la esperanza. Una cosa buena es q. (genio y figura…) aunque palabrero (confío en q. me lo perdonen), escribiendo con la voz, he descubierto muchas palabras cortas. Los largos períodos en silencio + el daño orgánico, agravan mi tartamudeo. Eso no es bueno para los demás. Agradezco mucho «tanto bien recibido» de ti y de Atrio. Te abrazo lleno de los mejores deseos hacia ti, tu familia, los Atrieros, las personas víctimas de la DANA.» (¡Qué sería de mí sin mi hermana y mi hermano, mis amistades! y desde luego el ordenador.) Tibi ipsi!
Un saludo afectuoso a George R. Porta con la alegría de saber que ha superado un duro trance y la esperanza de que siga mejorando.
Mis saludos desde la Entrañable. Rus dile cuos y mis silencios son paralelos Si recuerdas bien nuestro breve encuentro en Madrid, te informo que sigo repitiendo cada día la misma oración de la mañana, pero con Feli Ella tiene mejor voz que yo. Un fuerte abrazo
Mañana se prevén lluvias fuertes en Sevilla, pero no tanto en la capital, donde estoy invitado a almorzar en la casa de comidas en la que preveía hace unos años invitarte a la mesa con mantel de hilo y cubertería adecuada. La Providencia, el destino, o los mengues, , lo impidieron. Mañana pues, con otros comensales te tendré presente cuál los dos de Emaus a Nuestro Señor, sin reconocerlo hasta el partir el pan. No obstante una copa de Rueda oscuro acompañará la eucaristía laica in voto vel desiderio. Un abrazo bienhumorado
Aunque no interactúe mucho contigo,te deseo lo mejor.
Amigo George: Me uno a las y los compañeros que se alegran y te desean lo mejor. Tengo un amigo aquí donde vivo, -también ha sufrido un ictus-, que lucha con mucha fortaleza y constancia por recuperarse, y ha conseguido mejorar. Pero es muy duro. Su constancia y la aceptación serena de esa cruz son una lección. Un abrazo.
Qué enorme alegría verte de nuevo, querido George. lamento mucho tu estado de salud, te mando mucho ánimo y todo mi cariño. Me acuerdo mucho de ti, pero no me atrevía a escribirte para no forzarte a que me contestases por tus dificultades. Pero te llevo en mi corazón. Te mando un fuerte abrazo
Amigo George, yo también me alegro mucho de saberte luchando, y haciendo mucho más de lo que puedes.
Tú sabes mucho más del tema, pero solo quiero recordarte y recordar a los demás, que cuando la razón empieza a flaquear, tenemos mucho más fácil, conectarnos con el “Espíritu”, mediante nuestro “espíritu”, que solo precisa que le dejemos hablar, sin poner obstáculos racionales y creencias culturales, en medio, que lo entorpecen.
Por eso la última vejez, puede ser la mejor época de nuestra vida, y la mejor “conectada”.
Me alegro un montonazo de leerte.
Eres un luchador.
Un abrazo fuerte.