DADA CUENTA del domingo 14/11/2021

UNO.- Un periodista preguntó a Bernard Shaw si creía que Marte estaría habitado por homo sapiens. “No. Los hombres son una enfermedad del planeta Tierra: los planetas sanos no los tienen”. 200 empresas están trabajando en Silicon Valley en desarrollar una nueva fuente de energía: las microcentrales nucleares, denominada como microcentrales modulares. Una microcentral reforzada con uranio podría suministrar energía eléctrica que satisfaciera las necesidades de consumo de una ciudad de 100.000 habitantes. En su intervención del lunes pasado, el presidente Macron anunció la construcción en Francia de 60 de esas centrales modulares.

China está construyendo al menos doscientas centrales de carbón, especialmente en su propio territorio nacional y en África. De momento las centrales de carbón, contaminantes desde luego, son las únicas que permiten a los pueblos pobres producir electricidad y acceder a un estilo de vida más tolerable. Estos días en Glasgow se debaten de nuevo medidas correctoras del calentamiento global, que está plenamente demostrado y ante el cual no podemos alegar escepticismo. No obstante, no olvido que la historia y la prehistoria avalan que han existido cambios climáticos terribles, no debidos a los hombres, o no debidos preferentemente a sus industrias. Me asombra, viviendo como vivo hace un milenio en el sur español oír discursear a las personas encargadas de la meteorología en los telediarios sobre las catástrofes de cada dos semanas, cuando aquí hemos tenido 47 grados a la sombra todos los veranos que en mi larga vida en Córdoba, en Sevilla, en los campos de Tarifa he tenido el gozo de sobrevivirlos. El calentamiento que se produjo en el siglo XVIII, como ha recordado un historiador estos días, permitió un aumento nunca visto de las cosechas y la prosperidad derivada de ellas. El salmo 81 avisa de lo urgente: proteged al desvalido y al huérfano, haced justicia al humilde y al necesitado, defended al pobre y al indigente sacándolos de las manos del culpable. Creo que si hiciéramos esa política, bajarían los grados del calentamiento global. Problema: me temo que los culpables, por personas interpuestas, ocupan las tribunas de oradores. Proverbio africano: El amigo imprudente con una piedra te mata el mosquito en la frente.

DOS.- Xavi Hernández jugó 17 temporadas en el Barça y se fue a la Arabia de Lawrence a entrenar a un equipo catarí, Al-Sadd, al que no conoce nadie en ningún sitio más que ahora que Laporta ha ido a traerse a su entrenador para que se encargue del mismo trabajo en el club que es més que un club. Pues nada más llegar, y por eso lo traigo aquí a éste lugar teleológica y paradigmáticamente tan lejos del juego de pelota con el pie, Xavi ha declarado que va a reconducir la disciplina en la plantilla y establecer en ella orden y normas. Aumentará la intensidad de las horas de trabajo de los jugadores –entrenando y estudiando partidos de otros con su visionado–, el control de su rendimiento y el cuidado físico para evitar lesiones imprudentes. “Cuando hemos tenido normas y exigencia hemos ido bien”, ha dicho el nuevo entrenador. Gustavo Martín Garzo, castellano “de Valladolid y pintor”, escritor, ha publicado El árbol de los sueños. Opina que hay seres que son malvados, regímenes que son malvados y acciones que son malvadas. “Está bien recuperar ese término –maldad, malvado– que parece pertenecer al mundo de la religión y del pecado para nombrar ciertos hechos que están sucediendo”. Nada de enfermos como opinan algunos colegas escribidores. Respecto al clima político no se atreve a llamarlo maldad, sino estupidez. “Hay una falta de inteligencia en la política actual que es muy de lamentar… Se ha producido una desconexión muy dolorosa entre lo que podemos llamar el común de los mortales y la gente que ha sido elegida para que nos represente. No sé exactamente dónde están los políticos. Están en un lugar que no es éste”. El jueves día 11, festividad litúrgica de San Martin de Tours que siendo militar y romano partió su capa de masita con un mendigo arrecío de frio, el Congreso de los Diputados eligió a cuatro juristas para otras tantas magistraturas del Tribunal Constitucional tras pactarlas PP y PSOE, nombre por nombre. Uno de los candidatos cuyo nombre prometió Casado, según la prensa de derechas, auparlo al Constitucional, huele a podrido por sus permanencias en los sumarios de Lezo y Palma Arena, por haberse librado de continuar investigado por un juez gracias a que el delito había prescrito, por sus apaños económicos para cobrar a la vez sueldos públicos y privados, por haber llevado a cabo 562 servicios jurídicos entre 2002 y 2009 a varias administraciones públicas, porque en un sumario judicial hay conversaciones con investigados a los que informa de gestiones non sanctas procesalmente hablando. Cuando escribo, noche del viernes 12 en el que el santoral se alegra de recordar a san Margarito Flores, el ciudadano Alberto Pérez de Vargas antiguo director del Centro de Estudios Superiores Cardenal Cisneros, ligado o dependiente de la ACNDP, ha contado c por b que el ahora magistrado del TC le llevó a su despacho a Pablo Casado y allí aprobó 12 asignaturas en cuatro meses, mientras trabajada a jornada completa como asesor político del consejero de Justicia de Esperanza Aguirre, Alfonso Prada, para el cual el 4 de enero de este año del Señor de 2021 la fiscalía anticorrupción pidió 8 años de cárcel por delitos continuados de prevaricación y malversación de caudales públicos. ¿Qué le asesoraría? A los socialdemócratas no les gusta este candidato…. A los marxistas varios que agrupa UP tampoco… Pero le han votado como magistrado en el Tribunal Constitucional que es el lugar cimero de la imparcialidad para dictar fallos judiciales sobre las leyes importantes y menos importantes que nos afectaran durante su estancia allí. ¿Y la ejemplaridad exigible a los magistrados? Bien gracias. ¿Y la imparcialidad objetiva exigible a los magistrados? Ni está ni se la espera. ¿Y el cumplimiento de las normas en su carrera anterior? Sorteadas con habilidad procesal, como se aprende en los grandes bufetes al servicio del poder, de los poderosos y guardan en su haber altos funcionarios de los poderes ejecutivo y judicial en su ir y venir del coro al caño y del caño al coro, de lo público a lo privado cuando encarta, para ganar más y aprovechar los contactos en las Administraciones. Ni el ya magistrado electo, ni su padrino Casado y su PP, ni la coalición gobernante pertenecen a la plantilla del Barça y no tendrán a Xavi Hernandez por entrenador para les ponga normas y orden. Tampoco leen a Gustavo Martín Garzo y no saben lo de las acciones malvadas porque les suena a campanario de aldea. ¿Y los desamparados, los desgraciados, los que no poseen nada a quienes afectan los recursos de amparo? A esos ni el agua, pues hasta el gobierno de coalición (¡con Bildu de apoyo válgame el Señor!), el gobierno de España, como dice campanudamente su presidente y sus ministros, solo ha gastado la mitad de lo destinado al IVM ingreso vital mínimo (la vital le llaman en la 3000) cuando faltan tres meses para que finalice el año fiscal. Alguien ha escrito que anoche murió el 15M y se recuperó la casta. No es cierto. La casta la puso en pie Hammurabi, en 1792 antes de Cristo (o antes de la era común, que dicen los ilustrados del común). Nosotros, ciudadanos del común que dice Martin Garzo, sigamos a Lorca “Las piquetas de los gallos cavan buscando la aurora”.

CODA.- Dos centenares de adeptos a la mitología americana del complot anti blancos, protestantes, rubios y no mezclados se han reunido el 2 de noviembre con paraguas, gorros y pegatinas de Trump y banderas de las barras y estrellas esperando la resurrección del hijo de John F. Kennedy, que murió en accidente de aviación a la edad de 38 años. Su padre fue asesinado el 22 de noviembre de 1963 en Dallas, donde hay un pequeño museo en su memoria que puede visitarse y adquirir recuerdos como en los diez mil sitios que en Roma sirven para lo mismo. El esperado, no se presentó. Alan Bennett, 87 años: “La historia es solo una jodida cosa tras otra”.

Alberto Revuelta.