No soy amante de las corridas de toros, pero si lo fuera nunca las vería desde la barrera. El divino marqués de Bradomín, “aquel admirable Don Juan feo, católico y sentimental”, no está de moda. La gran frase largamente premeditada estalló envuelta en estrepitosa salva de aplausos entre los de la alfombra roja, aplausívoros resignados dioses menores si el Óscar es de reparto. La biografía de Javier Krahe intitulada Ni feo, ni católico, ni sentimental. Lo primero que hizo el director español de cine Trueba al recoger la estatuilla de su Óscar en Hollywood fue: “Yo no creo en Dios, sólo creo en Willy Wilder”.
Yo, mientras tanto, audeo dicere:
- La inteligencia y la fe viven en tensión. Hay creyentes y agnósticos, los primeros en retroceso, especialmente acentuado entre los católicos.
- Las religiones son muchas y sus perspectivas demasiado diferentes, pese a las crecientes tendencias ecuménicas caracterizadas por su concordismo higiénico, donde todos los dioses son buenos. Areópagos posmodernos.
- La perspectiva cristiana estaurológica, profética y pauperónoma de Jesucristo no conmueve, no ilusiona, no interesa, no es el centro absoluto de la vida.
- En cada Iglesia hay posiciones filosóficas y teológicas diferentes entre sí. Suelen ser consideradas más católicas las más cercanas al magisterio pontificio y, a partir de él, a las conferencias episcopales, que no suelen ser las joyas de la corona. Demasiados alzacuellos.
- También la Iglesia católica se encuentra sujeta a cambios de rumbo, antagonismo con o sin sordina casi cismático con permanentes rencillas y acusaciones recíprocas, despiadadas o falsas.
- Entre tanto, la mayoría de los católicos no resistiría un examen teológico mínimo del Credo, la fe que profesamos los católicos, de ahí la creciente degradación de su fe y la confusión embolismática entre fe, creencias y costumbres. Privilegiado un tipo de piedad subrogatoria, la Iglesia ha vivido de espaldas a la formación teológica, incluyendo la de numerosos clérigos de misa y olla.
- La formación católica dada en los colegios cristianos, incluidos los postineros, semillero de muchos intelectuales agnósticos rebotados y beligerantes, ha constituido un rotundo fracaso. Ha sido una enseñanza barata y para andar por casa en zapatillas, un barniz. Muchas veces más un negocio y un “servicio de mantenimiento” de las buenas costumbres burguesas. Los católicos que estudian la fe y la hacen vida son escasos.
- Los “filósofos jóvenes” (Savater, Sádaba, etc) de allí salidos se han burlado de todo aquello, pero sin tener la menor formación teológica.
- Existen intelectuales inquietos y sedicentemente católicos hasta hace poco, a los que podría calificarse de gnósticos, para los cuales la identidad cristiana es una cosmovisión, más o menos posmoderna, pero sin seguimiento de Jesús.
- Asimismo han desaparecido del mapa los intelectuales católicos que amalgamaron lo sociopolítico y lo religioso, ya sean cristianos por el socialismo, o socialdemocracias católicas (Ruiz Jiménez, Cavero, maritainianos).
- Nada de esto impide que algunos católicos ultraconservadores afirmen, por su propio narcisismo proyectivo, que la Iglesia nunca ha estado tan fuerte ni tan pura como ahora. Hay que ir al oculista.
- ¿Y yo qué? Soy un intelectual católico, pero antes y al mismo tiempo un pobre pecador amado por Dios, creo haber sido mejor intelectual católico que persona; como intelectual católico he procurado hacer mis deberes aferrado a la mano de Jesús, incluso en mis peores momentos de derrumbamiento. Que se me pegue la lengua al paladar si así no fue.
Después, he puesto el personalismo comunitario al pie de su cruz con las Bienaventuranzas en mi pecho. No soy hombre de reuniones ni de sacristías, las reuniones en la calle, hay muchas barricadas.
Me he matado estudiando mañana tarde y noche, no habiendo sabido hacer otra cosa y gozando de la posibilidad de estudiar para pensar con libertad y rigor. Afortunadamente el cansancio no me persigue, soy un cayo endurecido y resisto lo que no está escrito.
He gozado de la amistad y de la enseñanza de los mejores teólogos del mundo, y con ellos trabajado durante décadas. Como profesor de teología no soy tan malo, aunque tampoco tan bueno, me falta mucho. No puedo entender a los profesionales tan buenos en lo suyo y tan reacios al estudio del Dios al que invocan. No les interesa conocer al amor de sus amores.
Me alegra enormemente poder leer en lenguas clásicas los textos del Nuevo Testamento, en cuyas etimologías encuentro ríos de agua viva que ilustran mucho a los rudos catequizandos. No sé cómo pueden los clérigos rezar sin hacerlo en esas lenguas, ni pensar sin hacerlo en esas lenguas, lo digo más en serio que en broma.
Desafortunadamente, siendo hombre de Iglesia, me cuesta mucho confesar la fe en esa Iglesia católica española, aunque no sólo en ella. Cada vez me siento más protestante, aunque en ello a la vez más católico. No me iré de la Iglesia católica, donde vivo y quiero morir.
En este último tramo de mi vida, camino de los 77 años, como dicen en México, “nadie me pela”, nadie me llama, nadie me pide escritos, nadie me solicita para dar conferencias, no tengo dónde editar (les regalo diecisiete libros totalmente concluidos inéditos a quienes se apiaden y los saquen a la luz). Afortunadamente, estoy editando la obra teológica más hermosa que he conocido, el Padre Nuestro de Marcelino Legido.
Lo comprendo sin aspavientos: el mundo ha cambiado más que yo. No tengo coche, no tengo teléfono móvil, este coronel ya no tiene quien le escriba. Me paso la vida cual Sitting Bull (espero no ser asesinado como él) estudiando y escribiendo, aunque estoy demasiado gordo. Y acepto alegre el humor de Dios.
Yo en este tema de Jesús/Dios estoy bastante de acuerdo con lo que escribió Jose María del Castillo en Teología sin censura el 17 de mayo La idea de Dios nos rebasa.Lo que a mí màs me sorprendió fue la frase de Kant “que la praxis sea tal que no quepa pensar que no quepa pensar que no hay más allá”. Yo que no he leido a Kant se la leí a Castillo y me dejó impactado(también me dejó impactado lo que Carlos escribía sobre la razón utópica profética y como el profeta hablaba desde la atalaya ,el otero,mirando lejos….).Pero volviendo a la frase de Kant ciertamente hay gente que tiene tal codicia,tal frenesí en esta vida….que parece que ,pese a que se dicen creyentes,parece que….Claro la frase de Kant para mí tiene un inconveniente práctico la práctica cristiana radical te lleva a pensar qué ,coño,los codiciosos serán castigados,digo yo… y claro eso nos lleva a una moral no autónoma…Premio ,castigo… porque yo por lo que no pasó es por aquello de que los codiciosos son en el fondo unos pobres desgraciados….Quién dice los codiciosos,dice,por ejemplo,esa multinacional del odio que se dedica a envevenar las relaciones sociales que en diversos países padecemos…Tampoco vamos a poner nombres porque están en la mente de todos…Es cierto que no ser un cabrón produce algunas satisfacciones morales,por ejemplo,lo que te ríes de la estupidez moral de alguna gente(estaba leyendo a Terry Eagleton y una de las teorías filosóficas del humor o la burla es la superioridad moral,yo no me considero superior moralmente a nadie,ahora reconozco que yo me descojono de algunos imbéciles morales que padecemos),tb que la sencillez te trae muchos pronlemas,pero te quita otros…En fin,que esa frase de Kant ciertamente es demoledora,pero a mí no me resulta muy práctica…Tendré que leer a Kant….Primero a ver si leo el libro el libro este de Carlos de Rezar filosofando…Ya veis aquí perorando…
Muchas gracias, Carlos, por tu reflexión, que en buena medida comparto. Gracias también por lo que significa de testimonio personal de fe. Aprovecho para exponer estas otras reflexiones, surgidas al hilo de las tuyas. Cuando veo o leo que las iglesias se vacían y que los creyentes -el número de creyentes tradicionales conservadores- están en retroceso no me alarmo. Recuerdo la genial parábola de la Evaluación final (una previsión de futuro?), cuyo tema único es la solidaridad-ayuda al necesitado. Aún sin conocer a Jesús, él lo considera como hecho a él, sencillamente porque se identifica con el necesitado. En esta enseñanza Jesús no entra en doctrinas, ni siquiera en creencias. Le basta que vayamos por la vida “haciendo el bien” para que, al final, nos encontremos con él. Quizá aquí sea aplicable esa idea de los cristianos anónimos… Yo prefiero estar con éstos más, mucho más que con los meramente teóricos doctrinales tradicionalistas… Jesús valora la praxis mucho más que las creencias. Por las obras…
Pero también me pregunto: ¿No estará el Espíritu de Dios moviendo mentes y corazones en la dirección del espíritu evangélico, que quiere y valora por las obras? Se vacían las iglesias, y en cambio cada día aumenta la gente que se dedica a hacer el bien… ¿Muchas ONGs no responden al espíritu de la parábola citada? ¿No estarán estos “buenos hacedores” más cerca del Reino que muchos teóricos cumplidores de cultos tradicionales, que dejan mucho que desear?
Si concebimos, como es hoy normal, e interpretamos el Reino de Dios desde la realidad evolutiva del ser humano, ¿no habrá que interpretar la revelación, la comprensión del reino de Dios, la religión fáctica, las fórmulas doctrinales (e incluso dogmáticas) etc. dentro de ese marco evolutivo, en el que el ser humano y sus ideas van madurando poco a poco? El proceso evolutivo del hombre (en el que estamos inmersos) no le permite entender bien, desde un principio las cosas (y menos las de Dios), sencillamente porque su mente no está madura para comprender bien. De ahí tantos errores y tantos antropomorfismos, aplicados al concepto de Dios, que muchas veces lo deforman. Los apóstoles no entendían a Jesús, pese a que él se adaptaba cuanto podía… con una enseñanza muy individualizada, a solas. La novedad de la doctrina del Reino era tanta que ni su madre entendía… Se necesita más tiempo de lo que hemos pensado para entender bien y a fondo (es un decir) para comprender en detalle el gran Mensaje del Reino.
Por eso, no debería sorprendernos cuando algunos, ya muchos, hablan de la necesidad de revisar y expresar de modo más maduro conceptos, fórmulas doctrinales…, (incluso el Credo), expresados con categorías mentales de otros tiempos… lo mejor que entonces pudieron… Hoy, un poco menos inmaduros (aunque todavía…) somos capaces de entender algo mejor y de expresarnos con más claridad, sin olvidar que en el tema de Dios nuestras ideas no siempre aciertan… Esto lo reconoció el mismo concilio IV de Letrán… Y el sabio Agustín de Hipona dijo: Si lo entiendes, no es Dios… Por eso, la necesidad de revisar debe ser una obligación moral -y lúcida- de la Iglesia del Señor. Fijarse en ideas o expresiones definitivas, que -queramos o no- siempre son históricas y humanas, es un riesgo…, que puede convertirnos en estatuas de sal…, por mirar demasiado atrás.
Sabater, Sádaba…, sí; pero también J. A. Marina, Mounier… y otros. En nuestro proceso evolutivo de maduración es bueno escuchar…, a fin de desantropomorfizar y purificar actitudes e ideas-creencias…
Por eso, (y termino) pregunto: ¿Degradación-cuestionamiento de la fe o purificación de la fe? En este caso, purificar es liberar y hacer que estemos más cerca del Reino… Un cordial saludo, Carlos.
Queridas amigas y amigos:
Sólo quiero comentar a vuestros comentarios lo siguiente:
a) Si Jesús fuera para mí sólo un muchacho excelente, no pondría mi vida en él. Si Jesús no es Dios, no me resucitaría. Tampoco me consideraría cristiano. Seguramente buscaría algún Dios más capaz, o me haría modestamente agnóstico.
b) De que haya pluralidad de puntos de vista al respecto no se deduce que todos ellos sean falsos, ni tampoco que sean relativos.
c) Mi pertenencia a la Iglesia no es para hacerla mejor (¡y ya lo intento!), sino porque ella es santa en la medida en que su fundador es Santo. Santo no es el Héroe ético. Los creyentes en el Santo somos santificados por su gracia, no por nuestros méritos.
d) Ruego me disculpéis esta brevedad, pero si alguien quiere profundizar conmigo, le rogaría leyese al menos tres librotes míos: “Preguntarse por Dios es razonable” (Ediciones Encuentro), “Manual de Historia de las religiones” (Ed. Desclée) y “Religiones personalistas y religiones transpersonalistas” (Ed. Desclee), Acabo de terminar una todavía inédita, “Rezar filosofando, filosofar rezando”.
Espero no os parezca esto una actitud prepotente. Yo también estoy muy bien dispuesto a leer lo que hayáis escrito. Muchas gracias.
Un fuerte abrazo
Carlos
Por mi parte, que también me he trabajado con pertinaz insistencia estas cuestiones que se plantean Javier y Ana pienso que la autoconciencia de Jesús no va más allá de esa realidad suya que actualizaba a cada momento (realización) con sus obras y acciones sintiéndose feliz a la vez y que por ello se decía en reciprocidad no yo soy, si no esta realidad soy Yo.
Es si se quiere el reverso del apotegma cartesiano, es decir al ser existencial de Descartes, a ese pequeño yo le falta ese momento de reflexión, de autoconciencia con esa realidad en la que ya se es. No se trata de ese yo que se cree ser, sino de ese Yo sentido como realidad que ha de hacerse presente a sí mismo para realizarse.
…Descartes con todo su arsenal dubitante al final no puede sino hacer intervenir a Dios, pero según estas nociones antes expresadas no es necesario.
Jesús debió hacer un gran esfuerzo para des-logizar nominalmente(de logicismo)la concepción del Dios judío de la cual venía y este es también el gran esfuerzo que hemos de incorporar nosotr@s en su seguimiento.
Estimado Carlos. Hace muchos años, no recuerdo cuantos, viniste a El Puerto de Santa María a una comunidad cristiana para ayudarnos a reflexionar sobre las repercusiones de fe en una sociedad tan compleja. Tus conocimientos y tu riqueza de lenguaje han quedado grabados e inolvidables en mí. Gracias porque algo tienes que ver en mis experiencias vitales desde entonces. Cuando nos asalta la duda sobre la utilidad y las repercusiones de nuestra vida en los demás, solo tenemos que pensar en todas las personas que durante nuestra larga vida, camino, como tu, de los 77, nos han ido modelando con sus dichos y sus hechos hasta llegar a concluir la obra indidual que somos hoy. Un abrazo fuerte.
De todas maneras Carlos te voy a decir que el Sadaba es un tio bastante simpático ,una vez estuve una noche dialogando con él por Twitter y diciéndole que lo conocía de los Congresos de Teología…No te preocupes que no tengan la màs mínima formación teológica….En cuanto a la iglesia católica española,me refiero a su jerarquía,es bastante despreciada con bastante razón…Por lo demás el cristianismo de verdad es de minorías (la semilla,la levadura…cosas minúsculas) y por lo demás en la sociedad en que vivimos hay inmensos valores que no tienen raices cristianas….Hay mucha bondad y mucha belleza moral ajena al cristianismo…eso lo sabía bien Jesús…
Es que Jesús no era cristiano.
Era Jesús seguidor de Jesús,si entendemos por cristiano el seguidor de Jesús? Difícil….Si hablamos de Cristo(Jesús/Dios) yo no tengo ningún tipo de formación teológica o una formación de aficionado o lo que es más grave(y quizá no discupable) no tengo un profundo conocimiento de los evangelios para discurrir sobre la autoconsciencia que Jesús tenía de ser Dios… Parece que si que Jesús habla de su autoconsciencia de qué era Dios…Que esto lo dijera Jesús realmente o sea una lectura teológica de los evangelistas es una cosa que no tengo formación para contestar…De todas maneras,esa autoconsciencia plantea un problema dificilísimo que o se cree en que era verdaderamente Dios y verdaderamente hombre o se escapa completamente a nuestra razón… Porque ,por ejemplo, qué miedo podía tener alguien que se sabía Dios y más allá de la muerte? De todas maneras a mí me interesa mucho más el aspecto “humano” del asunto,parece que Dios le interesamos los hombres,nos manda a su Hijo…y luego me interesa lo que dice Castillo,grosso modo,si queremos saber de Dios,fijémonos en Jesús…
Javier, comparto todas tus preguntas y tus dudas. El problema es que no tenemos respuestas que nuestra razón pueda comprender…A partir de aquí se cierran puertas y ventanas y sólo nos queda lo que nos ha llegado del Jesús humano y…LA FE!!! uf, un poco fuerte.
También nos queda nuestra capacidad de comprender lo que es el mal y lo que es el bien, que no es poco. De Jesús se dijo “pasó haciendo el bien”, pues eso. Vivamos con paz (“la paz os dejo, mi paz os doy”) aquello por lo que cada cual opte.
La teología, hasta ahora, no ha explicado eso que llamamos misterio cuando se llega al límite de la razón, al contrario lo ha ido liando a lo largo de la historia con dogmas de obligado cumplimiento, pero. siempre, a ciegas. Y ahí seguimos, o sigue la Iglesia oficial.
Paz para todos y para todas.
Hombre la teología lo ha complicado porque el asunto es complicado…No más que las leyes, claro…La fe es importante…Es importante creer en cosas que no se ven en otros aspectos de la vida… porque no va a serlo en un aspecto fundamental como es el de la muerte,el sentido,la vida..etc…La fe claro con esperanza…Yo si creo que Jesús era Dios y hombre es porque me provoca esperanza por lo que leemos que hizo…Ahora obviamente tb se puede creer lo que dijo Renan(creo): Jesús no fue Dios,pero mereció serlo…Lo mereció,lo mereció…
Quise decir que la fe es importante porque en otros aspectos de la vida se funciona con fe,con cosas “que no se ven y no se entienden”…No te vayas a creer que,por ejemplo,la filosofía no es un carajal considerable…Estoy leyendo un libro sobre el Humor de Tearry Eagleton y no te puedes imaginar la cantidad de teorías filosóficas de algo tan inexplicable como la risa o la conedia…Y que conste que yo no había pensado nunca en profundidad sobre la risa…Una vez le pregunté a un cura bastante sabio y bueno si Jesús tenía humor…y no me dí por ilustrado…
De todas maneras,más sencillamente,si me quieres decir que los cristianos no estamos a la altura de Jesús…Te diré que habiendo cristianos que han sido verdaderos ejemplos morales(por poner un ejemplo San Pere Casaldáliga),te diré que tienes razón ….Al fin y al cabo el amor a Dios, quizá como todo amor verdadero,tiene un componente de admiración y los cristianos admiramos a Jesús,al Jesús histórico…y por mucho que nos esforcemos,seguiremos admirando…
Me refiero a que el movimiento cristiano fue posterior a la muerte de Jesús.
Hay algún teólogo que otro y algún biblista que dicen que Jesús por supuesto que se sentía unido a. Dios, si lo llamaba Padre, o papá… pero no exactamente hijo suyo como podía ser cualquier semidiós o dios entero de Zeus o de Júpiter. No.
Lo que sucede es que por aquel entonces se llamaba hijo de Dios a aquella persona que con su forma de vivir y de actuar, de alguna manera era un reflejo de Dios
Algo parecido a lo que ahora decimos: este señor es un hombre de Dios. Esta mujer es una mujer de Dios.
Eso dicen algunos y no exactamente pocos. Pero claro, la inmensa mayoría lo aceptan como hijo de Dios. Tal cual.
Y quién tiene la verdad? Pues supongo que cada uno de nosotros y nosotras tiene derecho a tener su respuesta personal. Creo.
Supongo que para llegar a esa respuesta intervendrán muchos factores de todo tipo. Pero claro, no es un cuestión menor. Como diría Shakespeare, esa es la cuestión.
No creo que lo fuese, pero me paré genial quien lo crea.
Opiniones.
Lo que tengo claro es que sea quien fuera su padre, Él es Jesús de Nazaret. El resto es cosa de familia.
Buen día
Yo,aunque no soy católico,estoy más de acuerdo con lo que dice Carlos el 5 de junio a las 16:44…
El apartado a) del comentario de Carlos aunque yo matizaría…No es que me haría agnóstico…Como me dijo una tia monja mía que vive en Ecuador cuando le pregunté que harías si Dios no existiera:-Exactamente lo mismo….Seguir a Jesús para mí es un imperativo categórico…si es lo que me quiso decir mi tia…No pondremos quién es no la vayan a excomulgar o no la tomen por San Manuel Bueno Mártir…
Supongo que la inmensa mayoría de personas educadas en nuestra religión pensará como vosotros. Es la base de , pues de toda las religiónes cristianas.
El pensar que no sea hijo de Dios literalmente, no quiere decir que no creas en Dios, sino que todo un Dios no cabe en un hombre.
Pero ya te digo, opiniones.
Claro
Lo siento, Carlos, se me quedó fuera del seleccionado de donde escribo, mi agradecimiento por su espléndido escrito y su ejemplar sinceridad.
En cuántas cosas me reconozco en lo que dice, don Carlos! desde mi juventud hasta bien entrada la madurez era feliz con lo que había aprendido de mis padres con tan solo el seguimiento a Jesús, no necesitaba más, hasta que un buen día tuve que matarme a estudiar, mañana y noche, para poder sobrevivir en ese entorno del cual dice que algunos se creen privilegiados por una piedad sin formación teológica que te lo arrasan todo.
¡Me encanta este art.!
Como se vacía en el; y me uno a ese vaciamiento totalmente, porque…mi manía de preguntar..:
¿Quién sabe todo de cuanto nos rodea?
Y no digamos del porvenir; la vida es: ¡Un ir haciendo cada día! Y cada cual llevará consigo su propia experiencia.
Gracias de corazón.
Un abrazo entrañable.
Muy buen artículo. Me confirmas lo que yo te decía el otro día, que estoy a años luz de tus conocimientos.
De acuerdo contigo en la primera mitad del artículo (no personal) de la falta en la mayoría de creyentes de formación teológica o exegética y otros conocimientos. Sin embargo hay tanta gente, como nos dice Salvador Santos y nos recuerda Alberto, que, sin estudios teológicos se deja mirar por Jesús y su mensaje, que vale la pena tanta bondad y tanta gente buena. Yo tuve un familiar muy querido por todo el mundo y por mí, en particular, que dentro de su sencillez, sabía que el mensaje de Jesús era una oferta y una guía para vivir el amor y la bondad, y así lo hacía. Porque a la hora de la verdad, es lo único que se juzga y se valora: “tuve hambre y me disteis de comer…..”
Y que nadie se imagine que esto que digo menosprecia la formación y el estudio de “un tal Jesús”, ni mucho menos. La Iglesia católica se está vaciando de una forma de ser creyentes que a la sociedad actual ni le interesa ni entiende, y aquí sí que los dirigentes, todos clérigos, mayores y desconectados de la realidad social actual, debería plantearse en serio. Lo que diga el Pueblo de Dios, como decía el Concilio, no cuenta para nada, ellos siguen empecinados en unos anacronismos inmóviles y que inmovilizan, sólo porque eso es así y punto. Si lo quieres lo tomas y si no lo dejas.
Tampoco quiero decir que el cristianismo tenga la exclusiva de ser la única guía del ser humano para su realización personal desde unos valores universales, solamente que tenemos como referente una persona excepcional como lo es Jesús, el Galileo.
No te desanimes, aquí en atrio, se te lee, por mi parte, con interés. Hay etapas en la vida que nos obligan a adaptarnos a cada momento. Te comprendo.
Me detengo en el 7 y 8 bastante acertados….El cristianismo,aunque se transmite por tradición familiar(quién puede negar eso),es bastante difícil enseñarlo… Aquí o se tienen experiencias vitales religiosas en determinadas épocas relevantes(pongamos la adolescencia o algo así) o la formación teológica del tinglado católico educativo es muy deficiente…Esa es mi experiencia…No es que los curas no fueran malos maestros(que había de todo como en fanesca incluso algunos no curas que eran profesores a los que debo mi gusto por la literatura,por ejemplo) es que la finalidad de la educación católica es una especie de socialización burguesa,exagerando ….De todas maneras a mí lo que me convierto fue el contacto con los pobres y los marginados…Ahora socializado como burgués como el primero….
No fueran buenos maestros…quise decir
Gracias, Carlos, por tu con fianza y sinceridad. Mucho de eso podríamos decir algunos, aunque quizás veamos la botella medio llena. Muchos de los que escuchaban a Jesús habían venido por las curaciones que practicaba, y sus mismos discípulos discutían por ocupar los primeros puestos en el reino. Jesús los conocía bien, los amaba, y confiaba en ellos para difundir su proyecto. También apreciaba a los paganos, y a veces mucho más que a sus discípulo. Por mi parte me quedo con lo que en una ocasión expresó Jesús “No estás lejos del reino”. Un abrazo
Jesús, según narra Salvador Santos, miró a su alrededor y afirmó que éstos son mi madre y mis hermanos. Tampoco hay que venirse abajo. Basta estar cerca y que te eche una mirada porque le sigues. No engordes más, pero no te preocupes, alguien editará, antes o después, tus diecisiete libros.