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Preguntas continuas

  – ¿No se inició el proceso de humanización cuando unos homínidos empezaron a hacerse preguntas? ¿No debía haber, para ello, un cierto lenguaje, aunque fuera rudimentario?

– ¿No hay en la niñez una etapa en la que los niños no dejan de  hacer preguntas? ¿Y no sufren un desencanto al descubrir que sus cuidadores no tienen respuestas para muchas de ellas?

– ¿No entramos en la senilidad cuando dejamos de hacer preguntas?

– ¿Qué ignorante dijo que el preguntar es cosa de hombres? ¿No ocurre que la mayoría de las féminas nos superan en el afán de preguntar?

– ¿No hay preguntas constantes que se hace la humanidad en todos los tiempos? ¿No son éstas: de dónde venimos, a dónde vamos, por qué ocurren las cosas y para qué, quiénes y con quiénes somos?

– ¿Es científica o filosófica la pregunta sobre lo que es la realidad? ¿Pero puede la filosofía intentar responderla sin conocer los avances científicos? ¿Mas la misma ciencia no descubre que dentro de la realidad hay más enigmas que lo que ha puesto en claro?

– ¿No hay dos afirmaciones contrarias en la historia de las religiones? ¿Si Dios creó al hombre a su imagen y semejanza o el hombre crea a sus dioses a la suya? ¿Cuál es verdadera o lo son ambas?

– ¿No hay dos grupos de personas que se niegan a hacer preguntas? ¿No son los fanáticos unos de ellos, pues su miedo les impide desprenderse de sus certezas?

– ¿Los otros no son los que aceptan sin rechistar las opiniones de sus manadas o las de sus “influencers” de turno?

– ¿Quiénes sostienen que los que preguntan son ignorantes? ¿No es más bien que tienen ansias de aprender?

– ¿No es cierto que quien pregunta desconoce algo y quiere saberlo?

– ¿Habría tantas preguntas si no tuviéramos dudas sobre muchas cosas que nos enseñaron como inamovibles?

– ¿No es mucho más fácil preguntar que responder? ¿Por qué preguntamos sobre temas, aunque sabemos que no hay seres humanos capaces de responderlas? ¿No dejaríamos de ser personas, si no lo hiciéramos?

11 comentarios

  • oscar varela

    Hola!
     
    FILOSOFÍA es LA BÚSQUEDA DEL “SER
     
    1- Una preguntita
    Si después de 26 siglos se lo sigue buscando:
    ¿no será que:
    a) no hay el tal “SER”; o que
    b) no está donde lo buscamos?
     
    2- Otra preguntita
    (póngase “DIOS” donde se dice “SER”)

    • Rodrigo Olvera

      ¿Quién ha dicho que Filosofía es la búsqueda del Ser? ¿En qué contexto de calendario y geografía lo dijo?

      ¿Quién ha negado que Filosofía es la búsqueda del Ser? ¿En qué contexto de calendario y geografía lo ha negado?

      ¿Quién ha dicho un concepto distinto de lo que sea Filosofía? ¿En qué contexto de calendario y geografía y calendario lo dijo?

      Más importante, ¿por qué una persona/cada persona decide aceptar uno de los dichos sobre qué sea Filosofía, descartando los otros? ¿Cuál es su contexto y cómo influye en su decisión?

      Por ejemplo, las nociones de qué es Filosofía en algunas escuelas de pensamiento durante el siglo V antes de la era común en el territorio que hoy es China no están interesadas en absoluto en discutir “el Ser”. Pero con frecuencia en las escuelas de filosofía académica occidentales del siglo XX y XXI se les niega el estatus de Filosofía, justamente por no interesarse en discutir “el Ser”.

      Saludos

      • oscar varela

        Así es!
        El “SER” tiene:
        – Calendario (siglo V a.n.e), y
        – Geografía (Colonias griegas)
        ………………………….

        Faltaría lo de la OTRA PREGUNTITA
        ¿será algo similar?

  • mª pilar

    Para mí, preguntar y…preguntarse a si mism@s…es crucial.

    A la ciencia la contemplo admirada de su gran labor  investigadora sin pausa; y procuro ir aprendiendo poquito a poco de ella.

    Mi fe, está llena de experiencias nacidas de mil preguntas ante “causas” que no es posible ninguna investigación; ante ello…guardo un silencio expectante…y admiro y amo cuanto me rodea. En el tramo de mis vivencias, mis preguntas son más bien dirigidas a mi misma, y como voy ha seguir el camino libremente tomado; es un constante aprendizaje, rodeada de personas sabias, que responden, no solo con palabras sino con su vivir.

    Es mi manera de mirar y ver.

     

     

    • oscar varela

      Cuando, aparte de la “escuela”,
      espontánea y vitalmente NOS PREGUNTAMOS,
      pareciéramos detener el mundo y decimos:
      “¡YO ME PREGUNTO!”

      ¿Qué es eso de que “YO me pregunto a MÍ”?

      ¡Acá hay gato encerrado!!!

      • mª pilar

        Cuando me pregunto a mí:

        Es respecto a cuestiones en las que dudo, o no sé que camino tomar; entonces las preguntas salen hacia fuera y escucho lo que otras personas me dicen.

        No siempre nuestro caminar es…¿bueno?… y en la posibles equivocaciones.

        ¡Se aprende!

        Intento que no haya en mi vida “gato encerrado” por eso me parecen importantes las preguntas:

        A otras personas y a mi misma, sin ningún gato encerrado, pero si quizá…oculto… tras las caricaturas con que se puede presentar.

        No se, si he respondido a tus dudas, si no es así, vuelve a preguntarme, con gusto responderé con toda la claridad de que sea capaz…que no es mucha… sabes que no te llego ni a la suela de tu zapato.

        Abrazo.

  • ELOY

    Heino Falcke, en su libro “La luz en la Oscuridad”, que cité en el último articulo de Alberto Revuelta, hace referencia a los límites de nuestro conocimiento, y cómo los límites son el acicate para hacerse preguntas y para cuestionar nuestros propios planteamientos.

    En la página 285, dice:

    << Sin embargo así como el escepticismo desempeña un rol importante en el progreso de la ciencia, la duda es también un elemento importante de mi fe. El campo experimental de la fe es la vida, y por tanto mi vida y mi fe tienen que exponerse también a la crítica. ¡Tal vez dudan tantos hoy en día de las iglesias  porque las iglesias dudaron demasiado poco de sí mismas en el pasado! Y es que  la naturaleza del universo y la naturaleza de Dios se vuelven cada vez más complejas de lo que puede comprender nuestro entendimiento limitado. La ciencia sin la autocrítica es curandería; la religión sin la duda es blasfemia; la política sin la incertidumbre es un fraude. No podemos saberlo todo . //

    Nuestra limitación natural  y nuestra ignorancia constituyen también nuestra magia pues nuestros límites nos convierten en buscadores. (…) ¡ Qué pocos atractivos tendría una ciencia en la que no hubiera nada más por descubrir! ¿Qué sería una vida sin preguntas, una vida en la que estuviera todo ya calculado de antemano? ¿Qué sería de un Dios en el que no necesitas creer porque piensas que ya lo sabes todo sobre él? También tiene su lado bueno no poder saberlo ni demostrarlo todo. Esta es también una forma de libertad, tal vez incluso su fundamento.  // (…)

    De ahí que los límites del saber sean a la vez una bendición y un desafío. (…)

    ===========

  • Gonzalo Haya

    ¡Bienaventurados los que se hacen preguntas, porque ellos se acercarán al Misterio!

    • ana rodrigo

      Querido Gonzalo, opino que el hacerse preguntas nos sitúa más lejos el misterio por inalcanzable, y por otro lado, el hacernos preguntas sobre tantos misterios como nos han inculcado en nuestra cultura y religión cristiana, desmitifica el misterio y aparece la razón haciendo absurdos tantos misterios como nos han enseñado para afirmar lo inexplicable desde la fe ciega, es decir desarrolla nuestra capacidad racional. Un abrazo

      • Rodrigo Olvera

        Preguntarse/cuestionarse la función social del “Misterio”, ¿no?
        Abrazos

  • oscar varela

    Habitado de fulgores

    exhibo un corazón deshojado en la pregunta.

     

    Mi corazón no debe callar hoy o mañana.

    No puede ser la sombra que se deshace y pasa …

    No puede ser, no puede ser.

     

     

    Mi corazón vuelto a la sombra

    desobedece los caminos.