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Notas de bitácora del 31/05/2020

1/ Las pompas eran los espectáculos del circo romano como carreras de caballos y cuadrigas, procesiones con los dioses paganos, escenas sexuales de toda índole, luchas de hombres contra fieras, de gladiadores entre sí y hasta de la muerte de cristianos condenados por ateísmo al no adorar al emperador divinizado. Renunciar a las pompas y vanidades, como se preguntaba a los que iban a ser bautizados, era renunciar a eso. Cuando aquí en Atrio y en casi todos los foros no anclados en la furibundez eclesiástica, laica o clerical, se habla y escribe sobre la necesaria mudanza de la Iglesia hacia las cercanías del evangelio del Galileo no nos preguntamos si los cristianos de esa posible mudanza estaríamos dispuestos a renunciar a las pompas y vanidades que en los actuales circos han sustituido a aquellas y a no adorar a los dioses que nos cercan a todas horas. Byung-Chul Hau, profesor en la Universidad de las Artes de Berlín, que ha publicado “La desaparición de los rituales”, ha respondido a la pregunta sobre la religión que supone el capitalismo y el consumo, que de ninguna manera es así, en su opinión, pues en los centros comerciales, en los espectáculos musicales masivos, en los estadios y en el capitalismo en general domina una atención particular: todo gira en torno al ego y que la vida intensa que actúa como reclamo del capitalismo no es sino consumo intenso. Y este caballero que se declara no creyente afirma que las religiones, los templos en concreto, sirven para prestar atención a cosas que no se pueden alcanzar con el ego.

2/ Maldad que circulaba antes de la celebración de uno de los debates de candidatos en la campaña en Quebec: “Ganar un debate contra un genio es difícil. Ganarlo contra un idiota es imposible”. Las más recientes confirmaciones de la veracidad que contiene la maldad que cuento son los debates celebrados en el hemiciclo de la Carrera de San Jerónimo a partir de la aprobación primera de la declaración del estado de alarmas. Cosa distinta es la atribución de la genialidad o la idiotez a una u otra persona de las que intervienen en el debate. La impresión que muchos ciudadanos tenemos y que no nos recatamos de comentar tanto por redes sociales, como en conversaciones privadas, es el desasosiego que producen quienes nos representan en el Congreso. Salvo contadas excepciones, sus señorías conservan la estólida manera carpetobetónica con la que el cura de Vinuesa, un pueblo de Soria, le rompió la cabeza con un martillo a un militar francés durante la guerra de la Independencia, haciendo gala de una practica evangélica similar a la que demuestran aquí quienes deambulan por el salón de plenos. ¿Dónde habrá sido educada esta tropa? A lo mejor hay que llamar a SERCO para que se haga cargo por un tiempo de mantener encerrados a los díscolos representantes patrios. SERCO es una empresa que cotiza en la bolsa de la City londinense. Empresa privada, por supuesto, que gestiona en el Reino Unido seis cárceles de adultos a través de un contrato con el Servicio Nacional de Gestión de Delincuencia y el Servicio de Prisiones de Su Graciosa Majestad. También gestiona, por si hay diputados muy jovencitos, un correccional para jóvenes infractores dependiente del Comité de Justicia Juvenil de Inglaterra y Gales. Y puestos a recordar, uno especial, escocés, para el padre del inspector Rebus, protagonista de novelas policíacas pro confinamiento, que tenía una idea: crear en la Administración Publica una OFICINA PARA EL FOMENTO DE LA MEDIOCRIDAD.

3/ A propósito de uno de los incidentes entre chuscos, melodramáticos, deplorables y originarios de los hermanos Álvarez Quintero, protagonizados por la señora Álvarez de Toledo y el señor Iglesias Turión, no me puedo resistir, ni quiero, a contar un sucedido personal. La marquesa única, gracias a las Musas del Helión, que se deja ver por el Congreso mencionó el FRAP. El Frente Revolucionario Antifascista y Patriótico que pretendía implantar una república popular en España. Actuó con mínima resonancia entre 1971 y 1975, que yo recuerde ahora. Uno de sus fundadores, dirigentes y encarcelado largo tiempo fue Sánchez Casas, dramaturgo y director teatral de aficionados, gaditano, que recaló en mi parroquia, la de Nuestra Señora de Lourdes de Puntales, a la sombra del fuerte de San Lorenzo del Puntal, defensor de la ciudad contra los franceses que estaban en la Isla del León en San Fernando. En la parroquia funcionaba un centro juvenil con mucha gente y energía impulsado por Jesús Maeztu y Gregorio de Tejada, coadjutor en ella y actual defensor del pueblo andaluz, profesor de Derecho del Trabajo en la Universidad hispalense, meinato y grandísima persona. Alrededor del centro se formaron grupos de toda clase, se cultivaron aficiones educativas, literarias y artísticas, se enamoraron muchas parejas, algunas de las cuales continúan perfectamente juntas pese a la ley del divorcio y al coronavirus.

En esas lides actuaron también grupos políticos, unos mínimos, otros menos mínimos pero siempre muy limitados, entre los cuales se contaban dos o tres militantes del FRAP, entre ellos un tipo espléndido con la cabeza muy bien amueblada un gran corazón, feligrés por cuestión de la circunscripción eclesiástica, no creyente ni practicante, pero que hablaba conmigo más que con sus congéneres de todo lo humano y lo divino por la sencilla razón de que lo escuchaba oportune et importune. Al final lo detuvieron y lo mandaron a Madrid bajo la jurisdicción del TOP, el malhadado Tribunal de Orden Público que tantos lamentos ha producido sobre la tierra patria. Bien. Los padres del chaval vinieron a decirme que si me atrevería a ir de testigo al juicio ante aquel tribunal pues las personas a quienes se habían dirigido no aceptaban el compromiso. El TOP actuaba en el edificio de las Salesas, en el Tribunal Supremo. Les dije que sí y sus abogados me propusieron al tribunal y me citaron como testigo de la defensa.

Era el verano de 1974, en julio y en Madrid hacía un calor castellano del yermo, sin una gota de aire, y la cita ante el tribunal era a las cuatro y media. Me presenté en la entrada vestido con sotana, dulleta, manteo sobre los dos hombros y canoa, con borlones, en la mano, cubiertas ambas con guantes de cabritilla negros. El civil que estaba de puertas se quedó sin habla, se llevó la mano al tricornio y me dejó paso. Subí la escalera imperial y esperé a ser llamado por los ujieres. Llamaron y entré en la sala impresionante con los techos pintados, cortinajes, mesa y sillones de trono de los magistrados y un calor del demonio dentro. Me quedé plantado en la parte baja del estrado a la espera de lo que decidiera el presidente. “Un sillón para el padre, en el estrado”. Presté juramento, sin guantes, de decir verdad y tras la venia me senté. Me interrogó el fiscal y luego los abogados. Con la venia para retirarme, salí.

Hace dos años, un profesor de la Universidad de Cádiz que está intentando reconstruir la historia local de aquellos años, tuvo ocasión de entrevistarse con los familiares del entonces preso. Le contaron esta historia y le pidieron que me transmitiera su agradecimiento por haber dicho la verdad. Consiguieron los abogados que la sentencia rebajara sustancialmente la pena que solicitaba el fiscal.

4/ Somos ciudadanos en quienes reside la soberanía nacional. Elegimos cada cierto tiempo a quienes nos representan a tal efecto en el Parlamento. Los responsables, pues, de haber elegido a los que hemos elegido somos quienes los elegimos. A sabiendas. Maquiavelo, refiriéndose a los príncipes ­—pero vale para los residenciados soberanos de un pueblo moderno y democrático— decía, más o menos, que la primera impresión que nos formamos de un príncipe y de su inteligencia es cuando observamos los hombres que tiene a su alrededor. Está en el capítulo 22 de El príncipe. Esperaba que los consejeros y ejecutores fueran los mejores, porque “Cuando son de otra manera, hay siempre motivo para formar un mal juicio de él, puesto que su primer error ha sido precisamente elegirlos”. Como ahora elegimos nosotros, el mal juicio es de los electores españoles que hemos elegido a los espectaculares miembros de las dos cámaras que forman las Cortes Generales del Reino. O somos necios por no informarnos a tiempo y elegir fiándonos de los aparatos de los partidos y llevamos así cuarenta y tantos años, o, a sabiendas elegimos al paisanaje que se dedica a insultarse y a insultarnos en el Parlamento, mientras mueren miles de ciudadanos a causa, entre otras, de no haber previsto y ejecutado una sanidad robusta. Roger Penrose, científico de amplios intereses, afirmaba que la diferencia entre lo que se puede probar mecánicamente y lo que los humanos pueden ver como cierto muestra que la inteligencia humana no es mecánica en su naturaleza. Creo que el día que, Deo volente y el moderador por delegación, aparezcan publicadas estas notas se celebraba la festividad de la coronación de Nuestra Señora por Reina de Cielos y Tierra. Es claro que mecánicamente no puede conocerse esa aseveración y que con las hipótesis astrofísicas, matemáticas y tecnológicas avanzadas sería delenda la sola proclamación de tal aserto. Bien. Sepamos que en Cromática, se proclamará la coronación de Lady Gaga como la reina del electropop. El nuevo universo.

19 comentarios

  • Isidoro García

    “¡Babilonios somos!. ¡Dejémonos ya de una vez por imposibles los unos a los otros, como buenos hermanos!”. (Sanchez-Ferlosio)

    Si ya es difícil entenderse a sí mismo, mucho mas difícil es entender a los demás.
    La primera causa es por la limitación de la capacidad mental congénita de la naturaleza humana, que no es muy alta, (mucho menos de lo que quisiéramos). La segunda causa, es porque siempre nos ataca la maldición babilónica: hablamos en lenguas distintas.
    La maldición de Babel, no es la de los lenguajes, (que también, pero no debería darse entre personas del mismo idioma, y pronto se resolverá con los traductores instantáneos). Es la pluralidad de las cosmovisiones y/o los estados de evolución de nuestras conciencias, que nos hacen entender todo en función de nuestras gafas perceptoras. Las películas Rashomon o Las cuatro verdades, nos explicaban hace décadas, cómo un mismo suceso era percibido de muy distinta forma por diversas personas.
    Todos pensamos y actuamos en función de unas premisas metafísicas ocultas que subyacen en las principales convicciones que guían nuestra respectiva cosmovisión. No podemos pensar ni actuar sin unos axiomas básicos que asumimos inconscientemente, y que somos incapaces de verificar y hasta definir plenamente. Y cada uno tiene los suyos, sobre todo si piensa por su cuenta, y no es un seguidor férreo de una ideología determinada.
      Y como tercera causa de estas “discrepancias”, están las situaciones psicológicas personales de cada uno, con nuestras inseguridades y deficiencias personales, nuestras necesidades de afecto y apoyo, nuestros complejos, etc., que hacen que muchas veces, (mas de las que quisiéramos), no reacciones adecuadamente a la crítica ajena.  
        Total, que si no nos pilla un toro, nos pilla otro, o varios al tiempo. Esto sirve como explicación de una expresión corta y no bien explicada que yo tuve hace unos días en este sentido, y de la que no quedé contento, y que pudo ser ofensiva o irritante. Lo lamento.
    Lo que pasa, en mi disculpa, es que como decía al principio, si es muy difícil entenderse a sí mismo, es muy cansado intentar entender a los demás. En este foro, como en todos similares, hay dos tipos de escritores, los que escriben de lo que ya saben, (han encontrado), y los que escriben de lo que están aprendiendo, (estamos buscando).
     En los primeros se denota seguridad, y la seguridad da cierto aplomo y tranquilidad. Yo desgraciadamente soy de los segundos, de los que estoy buscando, y no por vicio, sino por insatisfacción interior de lo que a otros satisface. Y el estar buscando aquí y allá, es muy creativo e interesante, pero también es muy frustrante y estresante. Y te hace decir y hacer muchas tonterías a veces. Con la edad que ya tengo, debería acabar de madurar de una vez. Pero no sé yo.

  • Rodrigo Olvera

    Una pequeña aclaración

     

    La acusación de ateísmo contra las comunidades cristianas primitivas no era por no adorar al emperador divinizado. Una característica del pueblo romano fue el siempre respetar las religiones y divinidades de los pueblos que conquistaban. Con quienes no pudieron hacerlo fue con el pueblo judío, por su celo monoteísta.

     

    La acusación de ateísmo era porque las comunidades cristianas primitivas no tenían ni templos, ni sacerdotes/sacerdotisas ni liturgias de culto público. Lo que se fue perdiendo en el cristianismo, conforme se fue asimilando a la cultura grecorromana.

     

    Ojalá la gente cristiana (de las distintas denominaciones) fuera tan fiel al origen del movimiento y a lo que se dice del fundador, que se les siguiera confundiendo como gente atea, (“fundamentalista” “infantil” y “estúpida”). Sé que a mí mucha gente me considera de esa manera.

     

    Recuerdo que era 2006 o 2007. Un empresario abusivo planeaba despedir injustificadamente a 47 trabajadores petroleros de plataformas marítimas que intentaban organizar un sindicato. Alguien nos filtró la lista. Sería un golpe terrible para el esfuerzo organizativo. Me lancé desde Ciudad de México a Ciudad del Carmen en carretera, toda la noche (928 kilómetros), para estar ahí al momento de que los barcos llegaran con los trabajadores, y tratar de evitarlo.

    El último trayecto fue de Villahermosa a Ciudad del Carmen (177 kilómetros); lo hice en un vehículo, junto con tres compañeros petroleros. Uno de ellos, de la denominación de cristianos que se llaman a sí mismo “cristianos” (neo-evangelistas). Comenzamos a platicar de lo difícil de la lucha social, lo ingrato que es, la injusticia. Sabiendo que para él el discurso religioso era importante, compartí mis propias convicciones respecto de Jesús, del Evangelio, del seguimiento. Fue una plática de una hora y media.  “Siempre creí que eras ateo, Rodrigo; nunca te había escuchado hablar de Dios o de Jesús”. Mi única respuesta fue “si mis acciones no hablan con claridad de lo que creo, ¿de qué servirían mis palabras? no quiero hablar de Dios o Jesús, ojalá mis actos ayuden a que algunas personas le sientan cercano”.

     

    (Al final, logramos detener el despido masivo, pero no pudimos conseguir que despidieran a los 4 principales dirigentes. Años después ganamos el juicio de indemnización por esos cuatro despidos. Hasta el día de hoy, Mauricio me dice “intento ya no predicar sino actuar”.

     

    Abrazos y esperanzas de este ateo infantil 😉

    • Rodrigo Olvera

      Fe de erratas: en el último párrafo lo correcto es “no pudimos evitar que despidieran a los 4 dirigentes”

    • Asun Poudereux

      Muchas gracias, Rodrigo, por tu franqueza. Está muy claro lo que nos comentas. Hechos que hablan y menos palabras.
      Me alegro mucho por ti. Muy íntegro desde la más tierna infancia.
      Un fuerte abrazo.

    • m* pilar

      Gracias amigo, es muy hermoso tu caminar, gracias por compartirlo.

      No es sencillo el Proyecto…haciéndolo… ¡Vida!
      Pero es la manera de que la ¡Vida! fluya allá donde se la explota, anula, desprecia; anulando ha quienes tienen el derecho de poseerla y vivirla.

      Gracias por Ser como eres.
      Mi abrazo entrañable desde el corazón.

    • Alberto Revuelta

      Por alusiones: digo, y quería decir cuando conteste a Carmen que, como de lo que no se sabe es mejor callar, las afirmaciones tajantes de ateismo sin reservas y como única explicación del universo y de la vida, me parecen posiciones infantiles e intelectualmente tan poco fundadas como las contrarias. Eso pienso y desde luego no ha estado en mi animo ofender a nadie al decir lo que pienso. Ocurre, de paso, que me fastidia íntimamente que las afirmaciones que contradicen otras hoy sin precio ni valor haya que aceptarlas pues de lo contrarío te encierran en El baúl de los recuerdos. El fascismo es como el SARS-CoV-2. Todavía no se sabe cómo contagia.

  • Carmen

    Señor Revuelta.

    Què es para usted el ateísmo?

    Para mí es no encontrar ningún concepto de Dios que encaje a una persona.  A mí no me encaja ninguno. Soy atea? Diría que no. Pero a lo mejor si.

    Buenas noches.

    • Alberto Revuelta

      Buen día, Carmen. Distingo: 1/ ateismo como negación absoluta y fundamentalista del Eterno me parece una muestra de soberbia intelectual estupida e infantil; 2/ ateo en el sentido que utilizamos a diario, es alguien igual o mejor, o mucho mejor que servidor, pero sin por qué.

      • Carmen

        Entendido.
        Usted parece buena persona. Por lo que cuenta se le nota con inquietud por las personas que sufren.
        Otras personas también son buenas personas, porque sí. No por nada, sino porque creo, opino, pienso que el ser humano tiende al bien, porque el mal no da paz interior. Dará otras cosas, pero no paz interior. Si no vibras con situaciones de injusticia , de alguna manera estás un poco muerto.
        La pregunta sería, tendemos al bien por un porqué o simplemente tendemos al bien?
        No lo sé.
        Buen día.
        Cuídese. Yo sigo cuidándome, pero ya también estoy con mis nietos. Qué tendrán los nietos? Tampoco lo sé. A lo mejor que son niños y un veinticinco por ciento de nosotros. Si pudiera traapasarles todo lo que he aprendido a lo largo de mi vida, lo haría. Pero de momento luchamos con las letras, los números, los colores y demás.

      • oscar varela

        RELIGIOSO es “el que cree en EL SEMBRADOR”.
        ATEO es “el que cree en LA SEMILLA”.

        ¿Se entiende?

      • Alberto Revuelta

        Sí, Carmen. Sí, Oscar. Lo del porqué no es por valor ético. Solo por curiosidad del por qué hay algo y no nada. Y más curiosidad por saber si lo que creía y transmitió Jesús se cumplirá en uno mismo. Creo que se cumplirá.

      • Alberto Revuelta

        Se me ha ido la especie, al contestar a Oscar que la semilla es del sembrador y la siembra el sembrador. Porque hay otras semillas de las que sale cizaña y las siembra un enemigo. Así que para los que sabemos, y masticamos, que no hay semilla como aquella sembrada por tal sembrador es francamente difícil ser ateo en el sentido que he entendido tu advertencia amical. Vamos, para mí es imposible.

      • oscar varela

        Hola Alberto!
        Si te acoplas al doble jueguito
        no hay cómo dialogar para comprender.
        ¡Siempre le encuentran una “escapatoria”!

        Acá te escapaste a “otra” parábola
        (la del trigo y cizaña)
        ¿porque no tratas de entender lo que te señalo:
        la parábola de el poder NATURAL

      • oscar varela

        (se escapó sin terminar); decía yo:
        la parábola de el poder NATURAL
        de LA SEMILLA.

        Cuando quieras dialogar conmigo
        te rogaría que estemos viendo el mismo canal!
        o me hagas saber que lo cambias para poder sintonizarte!

        Acá convendría que prestaras atención a
        ¿por qué has relacionado “ateo” con “cizaña”?

        En la Asamblea telemática de ATRIO,
        Rodrigo Olvera nos alertó de su gran preocupación:
        EL FASCISMO!
        ¿hay alguna relación con algunas raíces de ciertos “desvíos”?

        Te saludo!

      • Alberto Revuelta

        A las 16:35 dijiste escrito “ATEO es “el que cree en LA SEMILLA”. y ahora es el poder natural de la semilla. Pero es la misma semilla. Así que no me he escapado, semillas tienen todas las plantas. El que has relacionado ateo y semilla has sido tu. Y querer decir a otros lo que no decimos puede ser tan desvió como el fascismo que preocupa a Rodrigo. Abrazo

      • Rodrigo Olvera

        Leo varias veces y no encuentro que Alberto relacione ateísmo con cizaña.

        Habla que hay semillas de un sembrador y semillas de cizaña de otro sembrador (el enemigo). Es decir, que no da lo mismo unas semillas que otras. No hay solo UNA semilla.
        Viene después un punto y seguido.
        Habla entonces de que hay gente como él mismo, que considera que la semilla del sembrador (se entiende, el dios cristiano) es mejor que cualquier otra semilla (lo que no significa que toda otra semilla sea cizaña).
        Concluye que entonces no puede ser ateo, en el sentido de creer en la semilla sin creer en el sembrador.

        Se puede estar o no de acuerdo con su argumento. Pero lo primero es representar tal argumento de manera adecuada. Hay quienes solo pueden afirmar su propia convicción satanizando las convicciones ajenas. No es el caso, me parece, de este argumento de Alberto. Dice que está convencido que la convicción religiosa es mejor, pero no satanizar el ateísmo.

        Abrazos y esperanzas.

  • ana rodrigo

    Querido Alberto, no te puedes imaginar el buen rato que paso leyéndote cada semana, por lo que narras y cómo lo dices. Cuando te leo, tengo la impresión de que asisto a un acto del “gran teatro” del mundo actual, y visualizo el escenario, los personajes, sus reacciones, sus luces y sus sombras, con tal realismo, que podría llevarse a escena de forma directa, sin nada que añadir. Y eso es lo que me pasa con tus escritos, que no puedo añadir nada a una escena que está ahí, delante de mis ojos y que me veo como un personaje secundario del mismo escenario, porque es mi historia, nuestra historia, y sobre todo, tu historia cuando le das esas pinceladas personales tan elocuentes y detalladas (me parto con lo de los guantes (atuendo que yo no recuerdo) en el mes de julio, en Madrid)

    Voy a resaltar una cita que tú pones, que me ha gustado especialmente y es la siguiente de Byung-Chul Hau,  “Y este caballero que se declara no creyente afirma que las religiones, los templos en concreto, sirven para prestar atención a cosas que no se pueden alcanzar con el ego.)”. Hoy, en la Cadena Ser, recordaban un tuit de alguien que había enviado semanas atrás que decía “yo ya he revisado mi religión, a ver si ustedes revisan su ateísmo”. Porque creo que si la religión la limpiásemos de dogmas, creencias, leyes, mandamientos, derecho Canónico, jerarquías, clericalismo, patriarcado, etc. etc., nos quedaríamos a solas con nosotr@s mis@s y nos llevaríamos muchas sorpresas. Al ateísmo le pasa lo mismo, se ha apartado del aparato institucional de las diversas religiones, sin antes haber revisado ese tipo de religión, la que sea. Pienso que las instituciones religiosas son el primer obstáculo para dejar el ateísmo.

     

  • m* pilar

    Hoy, ante esta bitácora:

    Me siento profundamente emocionada y agradecida; es toda una muestra de buen hacer, de, saber estar, en una palabra:

    ¡De Ser!

    Gracias amigo por esta hermosa enseñanza de la verdad, derrochada en favor de “afines o no” quizá en las ideas, pero confirmadas en su hacer y ser.

    Ha sido como bálsamo que suaviza toda angustia, desasosiego, por lo que estamos viviendo; con verdad, sin acritud, que es la única manera de ser veraces ante los avatares que nos toca vivir.

    ¡Gracias! Ha sido para mí, hermosa su actitud, su hacer y decir; y una gran paz, me ha inundado el espíritu, gracias de todo corazón.

  • Rodrigo Olvera

    Gracias, querido Alberto.

     

    Gracias por haber aceptado rendir testimonio aquel día, y por decir la verdad en él.

    Gracias por compartirlo ahora.

    No te imaginas el bien que has hecho a este abogaducho mexicano, al haber rendido testimonio aquel día y compartirlo ahora.

     

    Te mando un gran abrazo, lleno de agradecimiento.