Los aimaras andinos tienen como diosa y protectora a la tierra, a la que dan ese nombre maternal. Uno se pone a pensar que quizá esa Pacha Mama ha enfermado de coronovirus a consecuencia de los abusos de los seres humanos.
Tal vez los madrileños han notado estos días que el cielo y la atmósfera de Madrid se han vuelto más claros y limpios y han recuperado sus colores naturales, su azul luminoso, sus nubes rojas del atardecer, sus perfiles netos de rascacielos y calles y edificios, cuando Madrid, con eso del confinamiento, ha disminuído su CO2 y su contaminación al recortar la circulación rodada y el consumo de petróleo. Tal vez el coronavirus ese tiene algo que ver con la contaminación ambiental.
Tal vez si dejasen de circular tantos millones de aviones por el firmamento y tantos cruceros de placer que navegan por el Mediterráneo y tantos barcos de carga que arrojan sus desechos y basuras al mar y tantos plásticos que dicen que están armando nuevos continentes plastificados en el mar y tantos trocitos de plástico y átomos de mercurio que se introducen en los organismos de los peces y luego en los humanos y otros que nos los comemos…
Tal vez la Pacha Mama nos está reprochando que estamos abusando de los acuíferos y aumentando las superficies desérticas, que estamos talando bosques del Amazonas y de África, tal vez el coronavirus es el resultado de ese maltrato que damos a nuestra casa común, a nuestra Pacha Mama.
En otros tiempos problemas como este de hoy, pandemias y otros accidentes trágicos de la naturaleza, se atacaban mediante letanías de oraciones en los templos y procesiones al campo y rogativas a las vírgenes de las ermitas.
Allá los creyentes con sus remedios de otros tiempos, que podrían calificarse de fórmulas griegas, de aquellos griegos que introducción en sus tragedias como personajes a sus Deus ex Machina.
Hoy, creyentes o no, deberían afrontar el coronavirus atacando los abusos del género humano sobre la Pacha Mama. Ella es como nuestra casa, y una casa hay que cuidarla, mantenerla limpia, retirarle las basuras, reutilizar sus residuos, no se le pueden exigir prestaciones que superar su capacidad, ni colocarle vertederos con toneladas sin límite que pueden reventar y causar muertes inocentes, invadir autopistas y sembrar los espacios con productos contaminantes, crear nuevos continentes a base de plásticos arrojados al mar, utilizar un continente entero como África para cargarle encima todas sus basuras.
Allá los que fían sus remedios a las plegarias y letanías, Hoy, creyentes o no, nos toca rectificar, respetar a nuestra Pacha Mama, mantenerla limpia, no pedirle más agua de la que pueden proporcionar sus acuíferos subterráneos. Porque si no cuidamos nuestra casa, se nos vendrá encima y no habrá más humanidad, ni más nuevas generaciones, Porque la Providencia divina, no tiene otras manos y brazos que loes nuestros, los de los seres humanos, los de los gobiernos y los ciudadanos de a pie.
No sé, yo creo que no se puede meter en el mismo saco los eventos que afectan a la Pacha Mama como resultado de su propia evolución: volcanes, tormenta naturales no provocadas por el ser humano. Pero sí creeo que el coronovirus puedee ser el resultado de la canallesca actuación del ser humano a travésde la explotacion de los fenómenos naturales con fines de enriquecimiento de unos pocos, del calentamiento global, de la desaparición de los hielos polares, de las hambrunas, de las guerras. Hoy mismo somos testigos de que Trump, y con él eel Bolsonaro, la Alvarez de Toledo, el Rajoy y el Abascal, se ponen del lado del coronavirus para hacer callar a todos los que salen al balcón a las ocho de la tarde para aplaudir a los que luchan contra la pandemia, para acusa a los chinos de todo lo que está pasando, Todo esaa campaña me suena a aquel cantar de “Soy el novio de la muerte”. Están encantados, diría yo, de que muera cuanta más gente mejor, porque pretenden eliminar a los desheredados de la fortuna.
Paara mí es evidente que el neoliberalismo y la primacía del beneficio a toda costa provoca el coronavirus. Eliminemos la contaminación, y v eremos cómo el coronavirujs retrocede. Digo yo…
Amigo Varela, gracias, no es para tanto mi devoción por Pacha Mama. Estos días la Televisión estatal le han dedicado un reportaje a las mujeres aimaras de Bolivia que ahora quieren subir también el Himalaya, y los madrileños de a pie han propagado la visión de un Madrid sin neblina como rresultado de la alarma que ha frenado en seco la circuloacion rodada y los humos de las chimeneas de las empresas que han sido paradas. Y lo mismo en BArcelona, y en Bilbao, y en todo ele país. A ver cuándo aprendemos…
Superaremos esta pandemia, pero no se ven indicios de que vayamos a corregir la explotación de la Pachamama, ni que vayamos a superar la pandemia del hambre y de la indigencia infrahumana. Sí se están dando muestras heroicas de asistencia a enfermos y necesitados, pero sin cambios de estructuras estos heroísmos se irán diluyendo. Espero sin embargo que con el paso de los siglos la especie humana siga evolucionando hacia una complejidad más perfeccionada (¿el punto omega), como lo ha hecho hasta ahora.
Si habían pestes como siempre las ha habido, pero no una peste a nivel del planeta. Esta es la peor crisis que experimenta la humanidad. Jamás ha existido esto. Esta es peor que todas las guerras juntas que ha existido en la tierra. Porque elimina al ser humano sin hacer un solo disparo.
Y precisamente aparece en este preciso momento en que la tierra necesita al menos un par de meses para respirar. Cuando digo tierra, me refiero a toda la naturaleza incluyendo a los animales. Yo insiste con mi teoría, de que “alguien” tiene que cuidar lo que ha creado.
Saludos
¿Y a donde vamos después de la muerte que lo tenemos a la vuelta de la esquina? La realidad es que no estamos jóvenes. Y cualquiera de nosotros se puede ir o mañana. No lo sabemos.
Pero, morir es ir a donde van las cucarachas? ¿Qué viene después que dejemos este mundo? ¿Nada? ¿Absolutamente nada? Si no existiera nada, ¿entonces para qué he venido a existir? Si no hay nada, mejor no hubiera existido.
Saludos
¡¡¡Gracias Honorio!!!
Hermoso canto a la Madre tierra y cuanto en ella habita.
¡Hermoso tu cantar-o decir!
Mi abrazo entrañable.
Todas las agresiones y abusos que dice Honorio con los que flagelamos al planeta y más, son ciertos, y va siendo hora de que paremos, aunque sea un virus el que nos pare. Esto es una cosa.
Después están las catástrofes naturales, algunas de ellas consecuencia de cómo la acción humana está desequilibrando el funcionamiento de los elementos naturales. Por otro lado lo que produce la Tierra por sí misma, como volcanes o terremotos.
Y por otro último, tenemos el sufrimiento que las injusticias y desigualdades de la humanidad producimos a nuestros semejantes como es la pobreza, o el hambre o la muerte.
Pero con las innumerables pestes que ha habido en la historia, o el mismo coranovirus. del que no se sabe nada, yo no pienso que sea resultado del maltrato a la Pacha Mama, porque en otras épocas de la historia, como ya dije aquí hace días, no había estas acciones contra el Planeta Tierra, y existían pestes terribles.
Así que, pienso, que, por una parte, debemos cuidar el Planeta y la vida y a nuestros semejantes, y por otro, tendremos que encontrar remedio para contener y eliminar el coronavirus. Yo no me atrevo a relacionar una cosa con otra, aunque piense que puedo estar equivocada si demuestran lo contrario.
¿Aleluya!
¡Nos ha nacido un Leonardo Boff vascongado!
¡Vamos todavía!
Totalmente de acuerdo con el comentario pero con una variación desde mi punto de vista cristiano. Es cierto que el Creador al crear al hombre lo dejó en el Paraíso para que lo “cuidase” y lo “guardase”. El hombre hizo omiso a esto y continuo viviendo, destruyendo, matando y lapidando todo lo que encontraba a su paso. Me pregunto, ante este desastre, ¿quién “defiende” al planeta? Evidentemente que la naturaleza no puede “defenderse” a si misma porque no tiene inteligencia y es bruta. Entonces ¿Quién? El hombre, imposible porque ya vemos sus efectos.
Alguien tiene que “defenderla” para el bien del mismo hombre, y para el bien del planeta. Como soy cristiano y creo en Dios, asumo que Su Creador es el interesado en defenderla, porque EL lo ha creado. Pero alguien se quejara ante el Creador y le replicará: ¿Acaso no somos tu criatura la más perfecta que ha salido de tus propias manos? Dios le responde: “Si, y son a imagen y semejanza de mi”.
Pero hay una gran diferencia, dice el Creador: ustedes si tienen inteligencia la naturaleza y los animales, que yo he creado, no.
Aquí en Lima sucede lo mismo que en Madrid: Cielo totalmente azul. Yo recuerdo que el año pasado en este mes, el cielo era muy oscuro, opaco. Hoy se nota un cambio totalmente radical, todo despejado con unas nubes que parecen algodón. La misma prensa se ha dado cuenta de eso. Ahora las aguas de las playas se han convertido cristalinas y las aves han vuelto, cosa que no se veía esto en muchos años.
Lamentablemente como peruano, el gobierno no pone mano dura con aquellos que contaminan las playas. Las playas se han convertido en un gran comedor para aquellos que van a bañarse. Todo el mundo lleva comida y arroja los desperdicios en la arena. Dios ha creado las playas solo para un beneficio: para que se bañen.
Saludos
Después de la PACHA MAMA
vino el DIOS CREADOR
y la ¡”en-barró”!
Y del barro salió Luis Alberto y Oscar Varela. Pero no importa de dónde hayamos salido, ya sea del excremento, del barro, del agua, o de un virus.
Yo no pude haber salido de excremento, porque tengo dignidad. Soy una persona y como persona tengo dignidad humana. Si aquel se quiere considerar que ha salido de otra materia, es su problema.
Como decía más arriba, lo importante es que todos: salgan del excremento o del barro, debemos cuidar esta ÚNICA casa. Digo ÚNICA porque ¿alguien ha encontrado otra?
Saludos
El segundo relato, el que comienza en Gén 2,4b fue escrito en el siglo X antes de nuestra era.
A la pregunta: ¿De dónde procedemos? la escuela de escritores que compuso esta narración no tiene dudas respecto al origen divino de la especie humana.
Y para describir el cómo apareció sobre la Tierra acude a la historia del nacimiento del pueblo israelita.
Este, siendo un grupo tribal de esclavos, inició su vida en libertad y se convirtió en pueblo saliendo de la esclavitud del BARRO egipcio.