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Consejos para el encierro y la cuarentena: Frei Betto y L.Boff

Diez consejos para enfrentar el encierro

Frei Betto*

Estuve en prisión bajo la dictadura militar. Durante mis cuatro años en prisión, me encerraron en celdas solitarias en el DOPS de Porto Alegre y en la capital paulista, y también en el estado de São Paulo, en el cuartel general de la PM, en el Batallón ROTA, en la Penitenciaría del Estado en Carandiru y en la Penitenciaría Presidente Venceslau.

Comparto, por lo tanto, 10 consejos para apoyar mejor este período de reclusión forzado por la pandemia:

  1. Mantén el cuerpo y la cabeza juntos. Tener el cuerpo confinado en casa y la mente enfocada hacia afuera puede causar depresión.
  2. Crea una rutina. No te quedes en pijama todo el día, como si estuvieras enfermo. Establece una agenda de actividades: ejercicio físico, especialmente aeróbico (para estimular el sistema respiratorio), lectura, limpieza de armarios, limpieza de habitaciones, cocina, búsqueda en Internet, etc.
  3. No pases todo el día delante de la televisión o del ordenador. Diversifica tus ocupaciones. No hagas como el pasajero que se queda en la estación todo el día sin la más mínima idea del horario del tren.
  4. Usa el teléfono para hablar con familiares y amigos, especialmente los ancianos, los vulnerables y los que viven solos. Entretenerlos les hará bien y a ti también.
  5. Dedícate al trabajo manual: repara equipos, arma rompecabezas, cose, cocina, etc.
  6. Juegos mentales. Si estás en compañía de otras personas, establece una hora del día para jugar al ajedrez, a las damas, a las cartas, etc.
  7. Escribe el diario de la cuarentena. Aunque no tengas intención de que otros lo lean, hazlo para ti mismo. Poner ideas y sentimientos en el papel o en la computadora es profundamente terapéutico.
  8. Si hay niños u otros adultos en casa, comparte las tareas domésticas con ellos. Organiza un programa de actividades, momentos de convivencia y momentos en que cada uno vaya a su aire.
  9. Medita. Incluso si no eres religioso aprende a meditar, ya que esto vacía tu mente, retiene tu imaginación, evita la ansiedad y alivia la tensión. Dedica a la meditación al menos 30 minutos al día.
  10. No te convenzas de que la pandemia terminará pronto o que durará tantos meses. Actúa como si el período de reclusión fuera a durar mucho tiempo. En prisión, nada peor que un abogado que asegura al cliente que recuperará su libertad en dos o tres meses. Esto desencadena una expectativa agotadora. Así que prepárate para un largo viaje dentro de tu propia casa.

*Frei Betto es escritor, autor de Cartas desde la prisión (Companhia das Letras), entre otros libros.

***

Algunos puntos espirituales para la cuarentena

Leonardo Boff*

Dado que la cuarentena es un retiro forzado, haz como los religiosos y religiosas que deben hacer un retiro todos los años. Algunas sugerencias para la vida espiritual:

  1. Toma tiempo para ti y haz revisión de vida.
  2. ¿Cómo ha sido mi vida hasta ahora?
  3. ¿De qué lado estoy? ¿Del de aquellos que están bien en la vida, o del lado de los que tienen alguna necesidad, de los que necesitan una palabra de consuelo, de quien es pobre y sufre?
  4. ¿Cuál es mi opción fundamental? ¿Ser feliz por todos los medios? ¿Acumular bienes materiales? ¿Conseguir estatus social? ¿O ser bueno, comprensivo, dispuesto a ayudar y apoyar a quienes están en peor situación?
  5. ¿Puedo tolerar los límites de los demás, a los aburridos, controlarme para no responder a las tonterías que escucho? ¿Puedo dejarlo pasar?
  6. ¿Puedo perdonar de verdad, pasar página y no ser rehén de resentimientos y malos juicios?
  7. ¿Puedo encontrar las palabras correctas cuando tengo que decir algunas verdades y llamar la atención sobre los errores o equivocaciones de otros que están relacionados conmigo? ¿O van directamente, agresivamente, humillando a la persona?
  8. ¿Cuando me levanto por la mañana, digo una oración con el pensamiento, no necesita ser con palabras, pidiéndole a Dios que me proteja a mí, a mi familia y a aquellos con quienes vivo y trabajo? ¿Y por la noche, antes de ir a dormir, elevo mi mente a Dios, incluso sin palabras, para agradecer el día, por todo lo que ha sucedido y por estar vivo?
  9. ¿Qué lugar ocupa Dios en tu vida? ¿Quieres intentar unos minutos de meditación pura, donde solo Dios y tú estéis presentes, olvidando un poco el mundo? Simplemente levanta la mente y ponte en silencio ante Él. He escrito un pequeño libro: Meditación de la luz: el camino de la simplicidad, un método que une Oriente y Occidente, dejando que un rayo de luz de lo Alto penetre en todo tu cuerpo y en tus puntos de energía (chakras) y transfigure tu vida. Son suficientes unos minutos.
  10. ¿Tienes el coraje de fomentar una actitud de entrega total a Dios, sabiendo que siempre estás en la palma de su mano? Todo lo que sucede proviene de su amor. La muerte es como un nacimiento y nadie ha visto su propio nacimiento. En la muerte, sin darnos cuenta, caeremos en los brazos de Dios Padre y Madre de infinita bondad y misericordia. No olvides nunca las palabras reconfortantes de la Primera Epístola de San Juan (3,20): “Si tu corazón te acusa, debes saber que Dios es más grande que tu corazón”. Entonces, parte en paz bajo el manto de la infinita misericordia divina.

*Leonardo Boff ha escrito Meditación de la luz: el camino de la simplicidad, Vozes 2010 y Experimentar a Dios: la transparencia de todas las cosas, Sal Terrae 2011.

Traducción de Mª José Gavito Milano

5 comentarios

  • Victoria alvarez

    Me parecen recomendaciones muy constructivas para beneficio o formacion integral de la persona. Vale la pena hacerlo. Gracias.

  • Manuel de Jesús Corral Corral

    Gracias por compartir estas ideas y sentimientos desde la experiencia personal. Es bueno ver las cosas desde arriba  y desde abajo, desde adentro y hacia adentro para construir una vida plena.

  • Asun Poudereux

    Gracias a ambos autores.
    Esto de dar consejos para sí mismo, uno mismo, una misma, puede hacer que nos miremos sin cesar el ombligo y no ser capaces de enfocarnos más allá en la vida.

    Mirar hacia fuera y verse en los demás,  no es fácil, pero facilita ir en consonancia con la vida abierta a toda persona.  Ver en las diferencias su riqueza, en el respirar lo común y elemental a toda vida. En el cruce de miradas la sonrisa, el dolor, la nostalgia y la dicha que llaman a compartirse.  La gratitud no se esconde, emerge sola, pues la interdependencia no puede desconectarse al alzar la mirada consciente que pone su centro en cualquier lugar y ser.  

  • ana rodrigo

    En otro hilo acabo de manifestar mi pesimismo sobre la especie humana, y lo mismo que digo eso, también reconozco que los seres humanos somos capaces de lo peor y de lo mejor.

    Con la gente que conecto  y lo que veo en los medios de comunicación, veo la creatividad y la capacidad de adaptación que sacamos a nivel individual y colectivo, en este momento en que todo el mundo nos vemos amenazados y nosotr@s mismo@s somos una amenaza como posibles portadores del virus.

    Cierto es que no nos falta ni alimentación ni medicamentos, por eso pienso en los países en los que la población, además del virus, no tienen ni una cosa ni la otra. Mi solidaridad y com-pasión con ellos.

    Quiero manifestar mi agradecimiento al sector alimentario que nos hace posible el sustento, así como a otros servicios imprescindibles  e invisibles que mantienen un cierto nivel de bienestar social.

  • Nolo

    Gracias, fray Betto, gracias Leonardo