I
Leo a Alberto Revuelta (“Notas de Bitácora 08/03/20“): “5/ En Marsella cada mes de julio el arzobispo celebra la misa de las rogativas para conjurar la epidemia. (…)”
A estas horas (21,47 H. del día 09 – 03 – 2020) ha comparecido ya el Ministro de Sanidad. Algunas comunidades han tomado medidas singulares, “medidas de contención reforzadas” contra el coronavirus y la Comunidad de Madrid ha acordado suspender las clases durante 15 días en todos los niveles educativos, inclusive las guarderías infantiles,
Los sentimientos que nos embargan y las recomendaciones sanitarias que se nos hacen, en tiempos tan “modernos” (cuando nos considerábamos libres de toda pandemia y “peste”, vírica o no), no resultan, curiosamente, muy distintos de los que se recomendaban a nuestros padres y abuelos en 1918: están relacionados con la higiene personal y pública.
En Octubre de 1918 en España se vivía con la angustia de una gran epidemia: la de la gripe llamada “española”; aunque no era española sino internacional. Como trasfondo: los últimos coletazos de la Primera Guerra Mundial, que se dio por conclusa el 11 de Noviembre de ese año, fecha en la que Alemania solicitó el armisticio. Quizá es ahora el momento de solidarizarnos con las penurias y avatares de aquella generación.
Vayamos a Padrón (A Coruña), un pueblecito cuyas tierras, bañadas por el rio Sar, afluente del Ulla, fueron acunadas en la sonoridad de los versos de Rosalía de Castro que, si nacida en Compostela, fue en Padrón donde dejó volar su alma y exhaló su último suspiro, con una frase de leyenda: “abrid la ventana que quiero ver el mar“.
A Padrón también llegó la “gripe del 18” y los padroneses pudieron leer en la prensa de Pontevedra o de A Coruña, las recomendaciones, de gobernadores y alcaldes varios, para contener la epidemia gripal.
Yo alcanzo a leer ahora la noticia de una niña de 14 años que en Padrón encontró la gripe y la muerte en Octubre de ese año; leo la noticia en un periódico de la época, (1), festoneada de las recomendaciones del Gobernador de la provincia de Pontevedra y del bando del alcalde de dicha ciudad.
Como testimonio de aquellas angustias, aquellos dolores y aquellos afanes por contener la epidemia, dejo aquí las recomendaciones del Gobernador, el bando del alcalde, los trabajos de los médicos y de los funcionarios municipales y vecinos.
II
- Las recomendaciones del Gobernador:
El citado periódico daba también noticia de algunas de las medidas preventivas establecidas por el Gobernador civil de la provincia de Pontevedra, para hacer frente a la expansión de la “grippe” (sic):
– “Denegar en absoluto toda petición de traslado de cadáveres de personas fallecidas de la enfermedad reinante o de cualquiera otra análoga, aunque hubieran sido embalsamados y procedan, o no, del extranjero.”.
– El Gobernador “Ordenó a las alcaldías que prohíban en absoluto la celebración de exequias de cuerpo presente y que además de las precauciones domiciliarias prevenidas, los fallecidos de enfermedad epidémica u otra infecciosa o trasmisible sean conducidos a los cementerios por el itinerario más corto y nunca por las principales vías de las poblaciones, y, que al mismo tiempo, en tales casos, se prohíbe el cortejo fúnebre civil tan expuesto a la difusión.”
- El bando del Alcalde
En la misma página, reproducia el dicho periódico el Bando del alcalde de Pontevedra, dictado el día anterior, que decía:
<< Don Javier Vieira Durán, alcalde de Pontevedra. // Hago saber: que en interés de la salud pública y e acuerdo con el señor director del Laboratorio municipal, he resuelto, cumpliendo lo que dispone el R.D. de diciembre de 1908, lo siguiente:
1.º Queda terminantemente prohibido el empleo de papel usado para envolver sustancias alimenticias.
2.º El agua que se utilice para el lavado de recipientes y toda clase de vasijas destinadas a contener productos alimenticios (y por tanto las copas y vasos) deben reunir condiciones de potabilidad y pureza, no pudiendo por consiguiente servir una cantidad de agua más que para lavar o enjuagar un objeto.
3.º Así mismo se prohibí sentarse sobre las sellas o baldes quese utilizan para conducir agua de las fuentes.
4.º Los contraventores de estas disposiciones serán corregidos con el máximum de multa, sin perjuicio de las responsabilidades que haya lugar. // Pontevedra 1.º de octubre de 1918. >>
- Los trabajos de los médicos:
Los médicos se esforzaban en vacunar y desinfectar; dice la noticia: “En Mourente vacunó anteayer el médico Sr. Piñeiro 75 personas y ayer 53 en Marcón”. // “En la cárcel vacunó el Sr. López de Castro a los reclusos.” // “(…) El médico higienista acompañado del personal afecto al servicio de higiene, desinfectó ayer diferentes viviendas”.
- Los funcionarios municipales y vecinos:
“Los agentes municipales requirieron a los dueños de cuadras y casas, en cuyos patios se ocultan cerdos y gallinas, llevando órdenes enérgicas y terminantes de la Alcaldía, incluso para no dejar circular coches y automóviles en cuyo rótulo no consta la fecha del día justificativa de la desinfección.”
“Los vecinos que tengan noticia de los focos infecciosos y de todo aquello que atenta a la salud pública , deben, por patriotismo, comunicarlo a las autoridades que pondrán inmediato remedio y castigarán severamente a los infractores de las disposiciones sanitarias.”
Dejo al lector los comentarios, pero me pregunto: ¿Cuánto va de ayer a hoy? .
NOTA (1) “El Diario de Pontevedra” del 2 de Octubre de 1918. pág. 2. La noticia decía así: << En Padrón // En este pueblo se declaró la enfermedad reinante habiendo muchos atacados. // falleció la señorita Catalina Artime Astray, hija del comerciante de Santiago D. Eloy Artime, la cual había ido a Padrón con objeto de ir al entierro de un pariente suyo, y en dicho pueblo contrajo la grippe que la condujo al sepulcro.(…) >>
Me parece significativo dar cuenta de algunos datos que publicaba “El Correo de Galicia”, del 22 de febrero de 1919, en primera página, referidas a toda España.
Allí se dice que según el último cuaderno demográfico publicado por el Instituto Geográfico, el número de personas fallecidas en España a causa de la gripe en 1918, a falta de algunos datos relativos a diciembre, era de 140.451.
De las que 948 correspondían a Madrid, 1.557 a Barcelona, 13.496 a las demás capitales y 124 450 al resto de España.
Las cifras de mortalidad por meses señalan que se producen oscilaciones significativas, así: en mayo de 1918 se produjeron 741 fallecimientos, en junio 2.923, descendió en Julio y Agosto, en septiembre 7.837, en octubre 79.484 y en Noviembre 40.478.
El promedio de mortalidad por gripe fue ese año del 7,24 por 1000.
Y sigue diciendo el citado El Correo de Galicia que, en comparación, quedó oscurecida << la tuberculosis pulmonar, que tantos estragos causa, y que solo presenta 36. 312 víctimas y su mortalidad del 2,99 por 1000 en las capitales y del 1,25 por 1000 en el resto de España.>>
Gracias, Eloy, por compartirnos estos datos.
Han pasado casi tres meses.
Somos los mismos?
Creo que muchos no lo somos. Es increíble el miedo que tienen la casi totalidad de las personas que conozco de mi edad, a salir a la calle. Ven a sus hijos, a sus nietos un ratito y punto.
Ha sido fuerte. Se me rompe el alma con todo esto de las residencias de ancianos. Lo encuentro tan, tan injusto. Personas que levantaron el país después de una guerra. Porque fueron esas generaciones las que lo levantaron, dejarlas desasistidas no tiene nombre. No logro entenderlo. Es lo más duro de todo. Por supuesto que lamento todo el sufrimiento, todas las muertes, de jóvenes, de adultos, de médicos de enfermeras y enfermeros, de auxiliares de los hospitales, que sabemos el papelón que desempeñan, de los celadores y celadoras…de todos.
Pero lo de las residencias de ancianos es como para perder la fe en la humanidad.
La próxima ola no será tan fuerte, porque soy de las personas que piensan que nos va a coger preparados. Creo.
Ha sido tremendo.
Pero hay que seguir viviendo. Y celebrar cada día de sol y de poder estar un ratito con las personas a las que quieres. Con mascarilla. Con gel de manos y a dos metros. Pero no podemos encerrarnos en casa hasta que haya una vacuna. Aprovechemos ratitos este verano, porque llegará octubre y a lo mejor tenemos que aumentar las precauciones.
Un abrazo a todos. A todas.
Somos más fuertes de lo que pensamos.
Pues esto de que me impongan normas no lo llevo bien, pero esto es así. Está súper claro. No me atrevo a explicarles qué es un virus porque lo mismo lo saben todo.
El caso es que está claro el tema. Este mediobicho porque no siquiera es un bichoentero nos ha salido supercontagioso. No hay otra.
Creo que nosotros, los mayores vamos a llevar mucho mejor el confinamiento que los jóvenes. Tenemos otra cultura, otras experiencias y mucha vida interior. Pero claro, va a ser largo. Y uffffffff.
He oído a un psicólogo decir algo que me ha gustado. Ha dicho que no hay que pensar en lo que no podemos hacer, sino en lo que podemos hacer con tanto tiempo a nuestra disposición.
Pues eso.
Y aburrirse un poco tampoco es malo. Te da paz.
Y además, como somos población de riesgo, si nos ponemos malicos seguro que nos atienden muy bien.
Y ya saben, sentir miedo no es de cobardes, lo digo sobre todo por los varones que a veces están convencidos de que si sienten miedo son unos cobardicas. No es cierto. Lo que es de cobardes no es sentirlo, es no luchar contra él.
Perdón, pero me apetecía decir esto y no sabía dónde meterlo.
Buenas noches.
Bien dicho, y que no sabiendo a donde acudir, hayas recalado aquí, me parece de agradecer.
Hoy se ha dicho en una emisora de televisión que desde la gripe de 1918, no se recordaba una situación parecida.
De aquella gripe hemos recordado unas medidas higiénicas y de control de frontera con Portugal, a nivel de Gobernadores y Alcaldes.
Ahora la lucha contra el virus alcanza a ser verdadera “razón de Estado”, y todos esperamos que sea pronto eficaz.
La esperanza es una palabra hermosa que conviene desmenuzar. Se refiere a lo que actualmente no tenemos pero es posible que lleguemos a tener, aunque no es seguro que tengamos.
Estos días de cuarentena, me ha sentado muy bien escuchar la música de un disco, de la banda de municipal de Celanova (Orense). Recomiendo escuchar música y que no sea muy estridente.
Por cierto, leo en Wikipedia que durante la Alta Edad Media, la villa de Celanova fue cabecera de un condado, propiedad del conde Gutierre, padre de San Rosendo.
Considero muy interesante y animo a todos a ver esta estupenda reflexión de Carles Francino en la SER. a partir de la realidad y consecuencias del coronavirus.
Desde la emigración a los recortes habidos en sanidad son temas que se tratan muy lucidamente en relación con el dichoso virus y sus consecunecias.
ENLACE:
https://www.youtube.com/watch?v=rE7BQLMLHlw
Extraordinaria reflexión de Carles Francino. Gracias, Eloy
Gracias ti Ana, me alegar verte tan activa como siempre en ATRIO
Ciertamente extraordinaria reflexión de C. Francino.
Es para pensar…cómo estamos actuando ante este problema.
Gracias Eloy por este art. tan claro y contundente…parece que no nos deja muy bien como personas…. “individualmente”.
Mucho para revisar, nuestras reacciones y acciones.
¡Gracias!
Hola mª pilar, gracias a ti.
Hoy he escuchado a un médico diciendo en la televisión que actualmente hay en Madrid 2.000 camas menos que hace unos años.
Se han reducido por decisiones políticas “doctrinarias”, es decir basadas en concepciones ideológicas liberales, o bien “interesadas” (por intereses crematísticos o políticos) medios sanitarios públicos, que actualmente ayudarían mucho a solventar la situación.
Por otra parte el ponernos a nosotros en situación de examinar con parámetros de objetividad nuestro comportamiento y nuestros sentimientos frente a la emigración. Y en todo caso un llamamiento a la responsabilidad personal.
Gracias Carmen, Rodrigo Olvera, mª pilar, Ana Rodrigo, Benjamín Vázquez y Asun Poudereux por vuestros comentarios.
Es emotivo el recuerdo que hace Benjamín Vázquez de un familiar fallecido con motivo de la gripe de 1918. Alguna otra persona me ha indicado lo mismo: la muerte de un familiar con motivo de la gripe de ese año,
Es posible que otros muchos lectores de Atrio puedan tener recuerdo por tradición familiar de esa tristemente famosa gripe.
Sin que pueda decirse que las cifras sean totalmente fiables, me parece significativo dar cuenta de algunas que publicaba “El Correo de Galicia”, del 22 de febrero de 1919, en primera página, referidas a toda España.
Allí se dice que según el último cuaderno demográfico publicado por el Instituto Geográfico, el número de personas fallecidas en España a causa de la gripe en 1918, a falta de algunos datos relativos a diciembre, era de 140.451. De las que
948 correspondían a Madrid,
1.557 a Barcelona,
13.496 a las demás capitales y
124 450 al resto de España.
Las cifras de mortalidad por meses señalan que se producen oscilaciones significativas, así:
en mayo de 1918 se produjeron 741 fallecimientos,
en junio 2.923,
descendió en Julio y Agosto,
en septiembre 7.837 y
en octubre 79.484
en Noviembre 40.478.
El promedio de mortalidad por gripe fue ese año del 7,24 por 1000.
Y sigue diciendo el citado El Correo de Galicia que, en comparación, quedó oscurecida << la tuberculosis pulmonar, que tantos estragos causa, y que solo presenta 36. 312 victimas y su mortalidad del 2,99 por 1000 en las capitales y del 1,25 por 1000 en el resto de España.>>
Gracias, Eloy, por hacernos recordar quellos tiempos que dejó mella en las familias, ya directa e indirectamente. Cuánto dolor y sufrimiento causó a su paso.
Hoy mismo, es una lección para todos pensar en los demás antes de exponerles a riesgos indeseados, si así deseamos que hicieran con nosotros.
El enlace de Rodrigo, nos hace reflexionar bastante.
Abrazos y esperanzas que confían en medio de los obstáculos no-deseados.
Un artículo muy bien documentado, amigo Eloy. Precisamente a.consecuencia de la mal llamada gripe española falleció en Lugo mi abuelo paterno, el maestro nacional José Vázquez Senra. Recuerdo como comentaban mis padres aquella terrible pandemia. Decían que se podia ver desde las ventanas de casa (al estar prohibida la asistencia a entierros) como se sacaban de un mismo domicilio dos cadáveres de una misma familia. Por supuesto la epidemia del coronavirus de hoy poco tiene que ver con aquella fatídica y letal gripe.
Muchas gracias a Eloy por tu estupendo artículo y a Rodrigo por el enlace que refleja la situación de mi querida segunda patria, Granada el 1918.
El Roto, en su magistral viñeta, el otro día dibujaba una araña colgada de un hilo y decía “colgados de un hilo”. Así estamos, ayer con las bacterias (antes de los antibióticos) y ayer y hoy con los incontrolables virus, indefensos ante estas pestes que arrasan. La historia se repite.
Ay, lo valiosa que es la salud y la vida!!
Comparto el vínculo a un artículo sobre la gripe del 18 en Granada, que puede dar más perspectiva a nuestros días; porque toca temas más allá de los bandos con recomendaciones higiénicas, como:
a) el impacto diferenciado de clase, incluyendo la especulación comercial mediante el acaparamiento de productos, con lo que la mortalidad de la enfermedad fue una enfermedad de pobres;
b) la vinculación entre la guerra y la expansión virulenta;
c) la Libertad de prensa y publicidad de información gubernamental
d) la necesidad de un sistema de sanidad pública, incluyendo suficiencia presupuestal
https://www.elindependientedegranada.es/ciudadania/gripe-que-mato-miles-pobres-pueblos-no-llego-gran-via
Abrazos y esperanzas
Gracias Rodrigo, siempre en marcha, eres genial amigo.
Me ha encantado.
Pues de ayer a hoy fijate. Seguimos siendo seres frágiles, tan frágiles como siempre, aunque nos creamos dueños del planeta. A lo mejor nos viene hasta bien el pensarlo un poquito. Tiempo vamos a tener, porque como nos encierren en casa, veras.
Un abrazo.