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A propósito de la inmigración

  • ¿Un delito de solidaridad?

        ¿Acogerías o, ayudarías de alguna manera a un inmigrante clandestino sin papeles que llegase a tu puerta? Hace unos años, en Francia incurrirías en un delito tipificado curiosamente como «delito de solidaridad» que podía ser castigado hasta con cinco años de cárcel y 50 mil euros de multa[1].

        En estos años últimos las leyes se han suavizado y las mentalidades han evolucionado. Porque la prensa y la televisión sensibilizan a sus públicos difundiendo noticias sobrecogedoras. Y somos muchos los que protestamos ante tales situaciones de horror. ¿Pero hasta el punto de que estemos dispuestos a acoger nosotros en nuestra casa a estos infortunados?

  • Una pregunta no tan teórica

        Un bebé humano recién nacido es el ser más indefenso que se puede imaginar. ¿Por qué los bebés no habrían de ser todos iguales en derechos independientemente del país en el que nacen? Un negrito africano que llega a las costas occidentales es tan ser humano como un pequeño suizo, alemán, o español. Y al nacer en tierra europea debería tener los mismos derechos fundamentales. Sin embargo, no lo reconocen así los países en los que está en vigor el derecho de sangre.

  • La llegada del Aquarius

        Un acontecimiento que ha tenido un considerable eco informativo ha sido la llegada del Aquarius a las costas españolas. Italia había rechazado el permiso para desembarcar. Y la opinión pública se conmocionó particularmente. (¡A pesar de que ya antes se habían ahogado en las costas mediterráneas miles de personas!).

        Tras el gesto humanitario de la acogida del Aquarius, era de prever –y así ha sucedido efectivamente–, que varios miles de personas abordaran en pateras las costas andaluzas durante estas últimas semanas. Desafortunadamente, Andalucía no está dotada de infraestructuras, ni siquiera de presupuesto, para acoger a tantos inmigrantes de manera digna. La TV nos lo muestra cada día.

  • Una aporía irresoluble

        Confrontados con tales situaciones, aparecen de nuevo las emociones y las pasiones de los hombres: la maravillosa generosidad de algunos, junto a la criminal rapacidad de los comerciantes de carne humana en Nigeria y en Libia. Así como también entran en funcionamiento los mecanismos de autodefensa de algunos países que conducen a la xenofobia .Y hasta los que falsean los buenos sentimientos mezclándolos con el mercantilismo político.

  • Ni inhumanos, ni simplistas

        Pero menos aún mercaderes de carne humana o traficantes con los buenos sentimientos de la gente.

        El problema es de difícil solución en la teoría y en la práctica.

        ¿Qué actitud adoptar y qué disposiciones tomar?

       ¿Habrá que aceptar que el mundo es imperfecto, que le quedan graves defectos, que Dios en siete días no tuvo tiempo para hacer este mundo más y mejor? ¿O que no quiso dejarlo perfectamente acabado?

  •  Estamos en una sala de espera

        Una última consideración, con prolongaciones metafísicas. Los mortales estamos en un salón de aeropuerto a la espera de que nos llamen para nuestro vuelo último. ¿Nos vamos a pelear por tener un mejor asiento que el vecino, o por ir a la sala VIP?

  • Pero entre tanto también es cierto que hay que vivir mejor en el tiempo de espera. Tenemos que buscar soluciones que han de ser necesariamente transitorias.

        Se han hecho algunas propuestas ya parcialmente implementadas por algunos países.

  1. Clasificar los solicitantes y tratar los emigrantes caso por caso. (Víctimas de guerras, perseguidos, los que buscan la supervivencia para sí y para sus familias, los que busca la mayor prosperidad económica, etc.) No se puede abrir las puertas de par en par sin discriminar las urgencias.
  2. Subsanar al problema en los países de origen. Se habla mucho de ello. ¿Pero cómo hacerlo? La ayuda directa a esos países ha sido desviada o mal utilizada en provecho de dirigentes sin escrúpulos. Hay quien piensa que se deberían «recolonizar» de nuevo los países en desarrollo, pero con un espíritu nuevo, estableciendo protectorados sui generis, respetuosos de las soberanías locales, con el fin único de mejorar su economía y su gobernanza. ¿Es esta una utopía realizable?

        Quizás haya que poner a disposición internacional algo como los Peace Corps de Kennedy, que llegó a enrolar más de 200 mil americanos. ¿Unas nuevas ONG?

        El problema es de tal envergadura que concierne a la humanidad entera. De una conciencia planetaria debiera venir la solución. Es difícil estas crisis repetitivas con parches en la teoría y en la práctica.

        Lo cierto es que para salir de esta aporía (etimológicamente, situación «sin salida») se necesitan ideas nuevas, valientes, y voluntades generosas al nivel global de nuestro planeta.

       

[1][1] Jaques Derrida escribía en Le Monde en 1995: “Que devient un pays, que devient une culture, que devient une langue quand on peut y parler de «délit d’hospitalité», quand l´hospitalité peut devenir aux yeux de la loi et de ses représentants, un crime.»

31 comentarios

  • Alberto Revuelta

    Quinientos y pico hombres jóvenes, musculados, esbeltos, combatientes sin miedo a concertinas, ni a vallas ni a agentes de fronteras entraron ayer por la brava en Ceuta. El número de nacimientos en España ha caído por dejado de las defunciones de modo que desciende la población del país. En los paises originarios de estos jóvene seguidores de don Francisco Pizarro, crecen los nacimientos. Los vasos comunicantes. Son más. Los españoles menos.
     

  • Alberto Revuelta

    Noticia de hoy: La Comisión Europea (CE) ha propuesto este martes dar a los Estados miembros 6.000 euros por cada persona migrante que requiera de protección internacional que sea reubicado desde los futuros “centros controlados” que se crearán en la Unión Europea.El Ejecutivo comunitario ha precisado en qué consistirán los “centros controlados” de inmigrantes y las llamada “plataformas regionales de desembarco”, grandes centros de detención en terceros países africanos previsiblemente, ideas avaladas el pasado junio en una cumbre europea por los líderes de los Veintiocho.

  • Honorio Cadarso

    Amigo Lara: Un colectivo de mujeres vizcaínas a fuerza de plantarse en la entrada del puerto de Bilbao para estorbar el embarco de armamento para Arabia Saudí ha conseguido que los barcos se vayan a cargar a Santander. Un colectivo vizcaíno se concentra todos los meses ante los ayuntamientos para solidarizarse con los refugiados, y ha sembrado balcones y pecheras de hombres y mujeres de pañuelos amarillos con una sombras de refugiados que huyen.

    Gestos así deberían multiplicarse, y por supuesto que tienen su influencia. Pero por desgracia los y las que tienen gestos así somos minoría. Y los que votan a partidos y gobiernos que aguantan tanta canallada son muchedumbre.

    O sea que todos somos responsables en mayor o menor medida.

    • M.Luisa

      De acuerdo Honorio! Los políticos no gestionan “inteligentemente” si no se “sienten” movidos por las “corazonadas” masivas de los ciudadanos movilizándose y si estos no se movilizan es porque, engañosamente, obtienen de los políticos lo que para ell@s les parece suficiente.

      • M.Luisa

        … les parece satisfactorio, quería decir o suficientemente satisfactorio

      • M.Luisa

        …y si esto es así, si todo el mundo tiene lo que quiere cómo se va a pensar en infraestructuras destinadas a la inmigración. Existen comunidades que ante la cuota de refugiados que exigió Alemania dispusieron amplios espacios para la acogida y que aún están a la espera a que España se decida.
        Discúlpenme hoy estas entradas a trompicones.

  • Blas Lara

    Aclaración: El corazón y la cabeza.
    Tras el gesto humanitario de la acogida del Aquarius, ha venido  el efecto de llamada. Andalucía no está dotada de infraestructuras, ni en presupuesto, para acoger a decenas de miles de inmigrantes de manera digna.No se pueden abrir las puertas de par en par sin distinguir las urgencias ni pensar en la futura inserción de las personas. No basta con poner el corazón. Hay que poner también  la inteligencia para clasificar a los solicitantes y tratar a los emigrantes caso por caso. No se puede tratar de la misma manera, ni con la misma urgencia,  a las víctimas de guerras, a los perseguidos, a los que buscan la supervivencia para sí y para sus familias, y por otro lado  a los que  los que buscan la promoción económica personal  en un país donde además no sobreabundan los puestos de trabajo.  Es de nuestro deber  y a ello nos incita el corazón aliviar en el peligro al « prójimo » próximo. Aunque solamente sea con « parches » a corto plazo. Pero pongamos en funcionamiento la inteligencia para el LARGO PLAZO, sabiendo que será necesaria una voluntad coordinada de los países para implementar planes sostenibles . Al  nivel planetario. Trabajo para pensadores. 

    • Alberto Revuelta

      El rey de Marruecos ha hecho un regalo a su hijo y príncipe hereder de 15 años. una aeronave cuyo  valor ronda los 57 millones de euros y es capaz de alcanzar los 1.100 kilómetros por hora y de volar 13.000 kilómetros sin escalas, con ocho pasajeros a bordo y cuatro personas en la tripulación. Se trata de un Gulfstream G650 con el escudo de armas y una decoración especial.
      Me cuestiono las decisiones y prácticas políticas de los gobiernos de España y de Andalucia respecto a los marroquíes menores de edad que arriban en pateras a nuestras costas. Una cita de Einstein de su discurso en la conmemoración del centenario del nacimiento de Leo Baeck en 1953, puede iluminar el avión del principe alauita de quince años con los nenes marroquíes en Andalucia y las políticas españolas que les afectan.Decía Einstein : “La primacía de los tontos está garantizada para siempre. Su falta de coherencia alivia, sin embargo, el terror de su despotismo”.

       

    • Totalmente de acuerdo.
      Mi cabeza no da para pensar.
      Como más o menos dice Salvador Santos, si es que entendí bien, solamente puedo tender mi mano a quien está cerca de mí y me la acepta. Porque no siempre se acepta la ayuda.

      De todas maneras, si el problema está en que la gente huye de sus países de origen, habrá que preguntarse el porqué. Quizás la solución ande por esa línea. Pero claro. La de interés que hay en juego son de todo tipo y manejados por los mismos de siempre.
      Cuando pienso en alguna cuestión, me gusta preguntarme el porqué. Así funciona mi cabeza desde que recuerdo. Y en este tema, o sea, imposible. Me pierdo de entrada. Tendría que ponerme a estudiar historia de verdad. Y francamente. Estoy mayor.
      Tampoco resolvería nada entendiendo el porqué. Y si mi cabeza diese con una solución. Quién me haría caso?

      Y eso es lo que hay.

      Es un tema que hará saltar Europa por los aires como no se solucione. De ahí mi angustia.
      Un saludo cordial.

  • oscar varela

    Hola!
    Leo en ATRIO:
    UN PASO, UN MUNDO – Fascículo 06
     – EL SISTEMA ESTÁ QUE BRAMA (Mc. 3,20-35):
     
    – “La constitución de los doce no se redujo y un asunto privado.
    – Las masas pudieron observarlo con asombro.
    – No se trató de un hecho de índole menor.
    – Para los presentes tuvo carácter subversivo.
    – Significó la ruptura oficial con la institución.
    – Con su acción consolidaba su alternativa.
    – Por su propia naturaleza pública,
                – su acción tuvo un eco inesperado en múltiples direcciones,
                – generó serios conflictos y
                – desembocó en acontecimientos de imprevisibles consecuencias”
    …………………….
    ¡Nada que ver con lo que se está ventilando acá, de un
    Jesús ¡todo corazoncito!
    ¡Nada que ver!

    • M.Luisa

      Por favor, Oscar, un poco de atención a lo que se dice, duele a estas alturas que no se distinga entre lo emocional y la intelección sentiente, lo digo por si mi participación entrara en lo que aquí, ahora, según tú, se está ventilando.

    • Pues no veo yo en Jesús un revolucionario al uso. Quizás su revolución esté en ‘todo corazoncito’ No sé.
      Vaya usted a saber.

      Porque como soy una ingenua no creo que exista otra solución que utilizar bastante más el corazón de lo que se utiliza. Porque no creo otro tipo de revolución valga para algo. Habría que convertirse en uno de ellos para entrar en la guerra de poderes.
      Y, francamente, no me interesa.
      Ellos en ese tipo de guerra siempre ganarán.

      Ellos son los de siempre.
      Los que siempre ganan. Pero quiero creer que algún día dejarán de ganar, al menos por goleada.
      Y si soy tontica, mejor.
      Le deseo con todo mi corazón que pase un buen día.

  • Blas Lara

    Estimado Honorio:  la responsabilidad de este estado de cosas no es de los “terrícolas” como tú dices. No, no es nuestra. Nuestras emociones están en ascuas. Lo que sí me parece que es de nuestro deber, es concebir nuevos ordenamientos. A los terrícolas nos falta cabeza y nos sobra corazón. Nuestro sistema límbico funciona con sus emociones y sus llamaradas de miedo y de indignación, pero no nos atrevemos a pensar planetariamente como Marx, o el Club de Roma,..!.

    Pensar, concebir nuevos mundos, podemos.

  • Blas Lara

    No me parece estar conforme María Luisa con tu interpretación de las Bienaventuranzas. Contrariamente a Mahoma que dictó un orden social en su religión, Jesús de Nazaret se dirige al corazón del individuo, no preconiza ni promueve una estructura social. Jesús sabía de la existencia del imperio romano, pero probablemente no de sus límites occidentales. Ni quizás del fragmentado imperio medo-persa vecino. Era un hijo de carpintero con escasos conocimientos geopolíticos.

    Nada es de extrañar que ni hablara ni pensase en nuevos ordenamientos ni estructuras de las sociedades.

    Espero haber respondido a tu pregunta, María Luisa

    • Mª Pilar

      Ahí radica el problema serio… Haber convertido a un hombre excepcional en… ·dios”.

      Y un “dios” hecho a nuestra imagen y semejanza, para así poderlo manipular mirando nuestro beneficio.
      mª pilar

    • M.Luisa

      Gracias Blas por atenderme. Te diría que, en efecto, Jesús no preconiza ni promueve ninguna estructura social, por suerte! si se me permite la expresión, porque las estructuras sociales requieren actualizarse constantemente, por eso es por lo que pienso se dirigió directamente al corazón del individuo, en él puso los medios, modos, para dar vida a su Proyecto algo así como contrario a cualquier tipo de estandarización. El tema es muy interesante, os iré leyendo pero con escasa intervención pues mañana tengo una comida de amigos y he de comprar y preparas las cosas. Gracias de nuevo!

  • Honorio Cadarso

    Amigo Blas, amigos: Ya lo cantó Víctor Manuel: “Aquí cabemos  todos, o no cabe ni dios!” Este es un  problema que nos afecta a todos y nos obliga a todos: el deeterioro del medio ambiente, la desforestación, el agotamiento dee los recursos hídricos, las guerras…La responsabilidad no es olo de los políticos, sino de todos los terrícolas. Africa es el vertedero de la humanidad, del Primer Mundo mejor dicho, de Europa…Los bosques que son borrados del mapa son desforestados por Ikea, por China, y nadie se preocupa de replantar (dicen que China hace algo…).

    Nuestro voto, nuestra implicación en campañas a favor de los refugiados, contra el comercio mundial de armas…deben reavivarse y centuplicar su grito. Las primeras víctimas de este desastre caen en el Mediterráneo, tarde o pronto caeremos todos si seguimos así…

  • Gonzalo Haya

    El verdadero problema está en las raíces. La humanidad está dividida en dos grandes espacios: uno muy estrecho con muchas personas hacinadas, y otro muy amplio con pocas personas cómodamente instaladas. Lo natural e inevitable es que las las personas hacinadas quieran pasar al espacio amplio y cómodo. Si no lo hacen es porque no lo conocen o porque hay un muro insuperable entre unos y otros. La solución justa sería compartir mejor el espacio vital, pero a esto se resisten los que tienen el poder, el capital, la publicidad, y hasta el mando político y militar. Los demás sólo podemos abrir pequeños ventanucos en el espacio asfixiante o tratar de socavar (digamos mejor transformar) ese poder económico y político. Lo malo es que tampoco estamos muy dispuestos “a morir en el empeño”. “El silencio de los buenos”.

    • Pues sí.
      El silencio de los buenos.

      • oscar varela

        Leo:-“El silencio de los buenos”:
        Pobrísimas percepciones de nosotros mismos.
        ¿Acaso no estamos en ATRIO porque no nos aguantamos
        -“silenciarnos” nosotros a nosotros mismos?
        ¿A qué “auto-des-estimarnos?
        ¡Vamos todavía!
        ¿Cuánto “Vamos”?
        Lo que cada cual pueda!

  • M.Luisa

    Ya me perdonaréis pero aquí veo que se cae en otro tipo de dualismo. No, tal vez las bienaventuranzas no basten para establecer un nuevo orden mundial pero una vez con ellas se ha sanado el corazón,  qué se hace luego con él? Se le aparta? O sirve para caer en la cuenta? El darse cuenta de… típico en filosofía, creo que  a Oscar esto le debe sonar!

  • M.Luisa

    No, por favor, D.Blas,  no confundamos emotividad con sentimiento. Cuando algún  dignatario político se decida algún día a actuar, a ponerse las pilas   sobre  este grave problema, necesariamente, también se hallará movido por un sentimiento (aunque bastante tardío, todo hay que decirlo).

    El aspecto que yo quería destacar no era el de un bello sentimiento que podamos tener,  sino el despertar de una experiencia real. Por eso ateniéndome a lo dicho en el artículo de si el mundo es perfecto o no, he destacado las dos caras de la excelencia de aquel acto de humanidad que nos es común a todos.

    Lo decisivo no es que se tengan sentimientos que por el hecho de tenerlos bien podrían sólo derivar en mera emotividad, lo decisivo es abrirnos a ellos y ponerlos en manos de la inteligencia pero no la que defiende  los propios intereses sino  aquella inteligencia humana que transforma el mundo.

    Un saludo cordial

  • Blas Lara

    NB. La frase última: “Las Bienaventuranzas limpian el corazón pero bastan para establecer un nuevo orden mundial”. Corrijo Las Bienaventuranzas limpian el corazón pero NO bastan para establecer un nuevo reordenamiento demográfico  mundial”  Eliminé además el “nuevo orden” por sus resonancias neofascistas que no corresponden a mi manera de ver las cosas.

    • Mª Pilar

      Totalmente de acuerdo… Ese es el gran problema ¡lo sé! y me siento incapaz de hacer algún movimiento capaz de mover a los grades estamentos y sus planes de verdad perversos.
      Sé, que son necesarias y urgentes, actitudes que cambien el proyecto de poder de este dolorido planeta.

      Gracias de nuevo, por tu llamada de atención.

      mª pilar

    • oscar varela

      1- correctísima la corrección!
      2- ¿Qué papel está “jugando” el relojito suizo
      -ejemplo de Paraíso Fiscal-
      en la “explosión cronometrada”
      causada en el Tiers Monde?
      Gracias!

  • Blas Lara

    Queridos amigos Ma. Pilar, Carmen, María Luisa y el gran Oscar: La solidaridad ejercida al nivel individual es bella, magnífica  y nos reconcilia con la humanidad donde hay tantas personas de buen corazón.

    El Gran Problema es a escala mundial, a saber, la redistribución de la población humana y la gestión de los recursos. Ya el club de Roma lo puso claramente en evidencia en los años 60. NO TIENE SOLUCION a corto plazo. Y los dirigentes del planeta no demuestran tener la talla intelectual ni la talla ética suficientes para resolverlo. Las actitudes de nuestras amigas María Pilar, Carmen y María Luisa son bellas, pero como dice (qué honor!) mi “cumpa” Oscar no bastan los buenos sentimientos dispersos.

    Las Bienaventuranzas limpian el corazón pero bastan para establecer un nuevo orden mundial.

     

  • Mª Pilar

    Lo aprendí desde niña, y lo vi constantemente en mi casa; y a lo largo de mi vida, en la medida de mis posibilidades… ahí estoy.

    Me parece tan dura esta situación, que no se muy bien como se puede mejorar este sin sentido.

    Pero lo que jamás puede faltar es:

    ¡La solidaridad!

    Cuantas cosas se podrían hacer, si toda persona apoyara un poquito… y muchos poquitos, pueden hacer maravillas.

    ¡Gracias Blas!

    mª pilar

  • Es un tema que me supera. Me siento fatal. Cambio de canal. Me da angustia. No sé dónde puede estar la solución.

    No creo que les gusta tirarse al mar porque prefieren morir antes que seguir viviendo en su país. Es pura desesperación, pura impotencia.

    Es realmente un fracaso estrepitoso de la humanidad.

    Me da angustia. Soy una cobarde.

  • M.Luisa

    Vivíamos en tiempo de Franco, yo debería tener unos nueve o diez años, un día, desde el comedor, mis padres y mis tres hermanos oímos  el timbre de la puerta y un instante después el golpe al cerrarla, enseguida entró Emilia al comedor, recuerdo que se llamaba así la joven mujer que entonces ayudaba a mi madre en la casa, y le pregunté quién había llamado: era un mendigo me dijo. Me levanté enseguida de la mesa para ver si todavía se encontraba en las escaleras. Y así fue. Le di de comer y le preparé un bocadillo. Un tiempo más tarde al llegar del colegio Emilia me dio un ramillete de flores y me dijo que las había traído para mí aquel hombre a quien un día ayudé  pues había encontrado trabajo y quería agradecérmelo.

    Soy poco amiga de contar historias personales pero en esta ocasión mi experiencia  aunque no se ajuste muy bien a la pregunta inicial del artículo  puede  servirme  como premisa para el enfoque que le quiero dar a la cuestión.

    ¿Quién no ha vivido esta experiencia? Este gesto primario? Este impulso vital? Me atrevería a decir que la gran mayoría  de personas. Esto por un lado, pero por el otro…ver luego el rostro agradecido de quien lo está pasando mal… estoy pensando ahora en la cara de aquella mujer que sobrevivió  rescatada por el Open Arms hace pocos días.  Diríase  a posteriori  de estas experiencias que  son dos momentos de una sola acción, una acción que  nos dice  que si el mundo es imperfecto ese acto único de realidad formal lo está perfeccionando.

    Sin embargo, ahora, la cosa es distinta y ha crecido a pasos tan agigantados  que la buena gente, que la hay, ya no espera que llamen a la puerta  ni  esperan tampoco qué deciden los políticos de pacotilla, se afrontan a las leyes y salen al mar  a socorrerlos.
    A todo ello nos podemos preguntar

    ¿Qué ha podido pasar  entre medio para que  aquel  impulso tremendamente humano haya sido derogado, esfumado, borrado  de nuestro alcance más vital?

  • oscar varela

    Hola!

    “Destilo” la buena y dispersa reflexión del Cumpa Blas:

    ¡Esto es un kilombo!