No se, querido director, si abuso de tu hospitalidad comunicadora, pero es que hay noticias que o te las tomas con humor o son para echarse al monte con arcabuz. Un abrazo. Alberto.
Todo casado que se precie y tenga suerte tiene un suegro protector. En el caso del huido en busca de asilo político a Flandes, lejos de la monarquía hispana, el suegro es, además, acólito de la Biserica Ortodoxa Rõmanā, la iglesia ortodoxa autocéfala de Rumania, do habíase casado el tal perseguido, y por tal rito en cuya ceremonia los acólitos, fueren suegros o no, visten la stikarion, que trae causa de aquella túnica talaria manicata de la que ya hablaba el Concilio de Narbona, allá por el siglo VI.
El 27 de octubre del año de gracia que nos transcurre, festividad litúrgica de san Gaudioso de Abisinia, monje y obispo perseguido por Gensarico rey arriano de los vándalos y ,por ello, obligado a exiliarse en Nápoles donde fundó un monasterio en la Campania, entregando su alma a Dios en 468, proclamóse la República Independiente de Cataluña entre varas de poder municipal – el mejor alcalde el rey que dijera Pedro Crespo antes de dar garrote vil al capitán que deshonró a su hija y a él – y diputados con papeletas de voto ocultas, cual cupones de los ciegos que escondían las vecinas de mi madre en el pueblo, si tocaban, para que nadie supiera que los dos patitos – el 22 – habían caído ese día.
El 28 del mismo mes y año cuando nuestra santa madre la Iglesia (católica, of course), celebraba la inclusión en su santoral de san Ferrucio de Maguncia, que abandonó entre los siglos II y III el servicio militar romano para no verse obligado a participar en ritos idolátricos, muriendo mártir por ello, el Senado español, decidía aplicar a la Generalitat catalana las previsiones del artículo 155 de la Constitución de 1978. Ferrucio era de la Galia Bélgica, por lo cual es de todo punto lógico que el expresidente de tal órgano se haya ido hoy a Bruselas, se supone que buscando amparo en el santo mártir que tampoco quiso prestar asentimiento a la legislación aplicable en las legiones romanas, pues aun siendo ejército republicano y teniendo senado, expelía un tufo dictatorial opresor de las libertades de conciencia.
En Bruselas podrá disfrutar además de alguna de las 400 variedades de cervezas que allí conviven, antes de ser deglutidas por los ciudadanos que se reparten el privilegio de consumir una media por cabeza de 100 litros al año de tan dorado brebaje. Y en el colmo de éxtasis placentero antes de que el político encargado de inmigración y amigo de nazis confesos le proponga para ser asilado político, deberá disfrutar de una trapister negra elaborada por los monjes cistercienses de la estricta observancia a ser posible de la abadía de Westwleteren, donde hay que pedir cita previa, como en el Servei de Salut de la Generalitat, para que le vendan a cada cristiano, aun siendo ortodoxo y catalán, una caja del producto, una y solo una por vehículo que llegue al atrio abacial.
Entre tanto prestemos atención: resuena de Montserrat al Ampurdán, del Valle de Aran a Tortosa, en toda Cataluña el verso del Cantar de los Cantares: “Huye, amado mío, huye como la gacela, como el tierno cervatillo que brinca por la montaña de los aromas”. La noche del domingo al lunes es propicia para escapar y huir de los moscos d’escuadra ahora mandados por Zoido, que no Trapero. Es por la noche cuando se deciden los destinos, pues como dice el Talmud todo acontecimiento es hijo de la noche.
Alberto Revuelta
Se agradece el sentido del humor que le echáis dadas las circunstancias tan graves que estamos viviendo.
Las noticias últimas son desconcertantes, como diría Berlanga “todos a la cárcel”!!!! ¿Y qué?, ¿acaso esto soluciona el problema de fondo? ¿Cuáles serán las consecuencias que conllevarán estas decisiones judiciales?
Preocupante situación, más aún si cabe, la que se nos avecina.
La conferencia celebrada por Puigdemont hace unos minutos desde Bruselas confirma mi intuición expresada más abajo.
Podríamos hacer muchas consideraciones y sin duda lo harán los medios.
Pero la principal es que hemos asistido al primer acto inaugural de campaña camino de las elecciones.
Me maravilla k
la manera del proceso catalán de construir cada vez nuevos escenarios que cifran sus desafíos.
Y, por último que la coalición procura desentenderse de la CÚP.
Leo en Internet:
<< La manicata (literalmente en latín, con mangas) es la túnica que se impone en el ámbito militar romano tras las reformas del emperador Diocleciano. Es, por lo tanto, la túnica mas extendida en el Dominado, el periodo del Imperio en el que el Augusto o Basileus es titulado Dominus et Deus de todos los dominios romanos.
El uso de la manicata, o túnica copta, como también fue conocida en el imperio de Oriente, se prolonga durante la Edad Media en la historia de Bizancio.
La manicata podía ser muy sencilla, elaborada con lana, lino o algodón basto, o bien, ser de ricos tejidos y estar profusamente decorada en aquellos soldados que se lo quisieran permitir. En los mandos del ejército, la manicata estaba ricamente bordada.
El signo distintitivo de la manicata son los orbiculi (en singular urbiculum), o medallones decorativos bordados que se lucen en la parte baja y en los hombros. Los orbiculi podían ser cuadrados, circulares u ovalados, iban rodeados de una orla o reborde y se decoraban generalmente con motivos geométricos. Podían ser de varios colores. Los clavi (clavus en singular) eran adornos verticales sobre el pecho. >>
Con lo que la cuestión queda clara.
Oye, hermano profeso regular Revuelta, sabrás que en la fecha de la huída del hermano Puigdemont al país de la mil cervezas, el obispo San Narcís ( San Narcís es a Girona lo que San Fermín a Pamplona, ¿lo sabías?) derrotó a Felipe III de Austria mandando una plaga de moscas al ejército que cercaba Girona, obligando a sus tropas centralistas a abandonar el sitio de la ciudad, y en esa misma fecha, este año, los Gerundenses derrotaron al todopoderoso Real Madrid con otra plaga de no sé qué, y San Narcís al igual que el ángel de Belen avisó a José para que huyera a Egipto, avisó a Puigdemont para que huyese con cinco de sus leales consejeros del Gobern en un blablacar vía Milán con destino en la corte de Europa y villa flamenca de Bruxelles.
Te contaría también la magna peregrinación de españoles de aquel día en Barcelona, de españoles de pro, un millón sobrado o 300.000, no coinciden los calculadores, presidida por los que firmaron la sagrada e intocable Constitución del 78, todos con(tra) Rajoy, pero lo dejo para otro día…
Me niego a creer que la “República Catalana” tenga un final de dictaduras al uso, cuando su ínclito baluarte toma la de Villadiegos.
La ciudadanía de Catalunya no se lo merece, y mucho menos quienes abrazan de corazón la causa independentista, y se sienten íntimamente afrentados.
¿Le asustó a Puigdemont la acusación de “traidor” proviniente de sus propias filas? ¿O le dió una pista?
De martirios, nada de nada.
Y, de paso, pone en un brete a los jueces cuando al resto de los encausados se les haya de aplicar o no lo del riesgo de fuga. Cualquiera se da cuenta de que, en pleno ambiente pre-electoral, no sería útil meterlos en el chiquero, pero no se yo cómo puede el juez evitarlo si el fiscal sigue erre que erre.