Este artículo es polémico, pero nosotros hemos respetado la libertad de nuestro colaborador. Sólo invitamos a que el diálogo que seguramente suscitará sea sereno, libre pero educado.
En una conferencia reproducida en internet, Juan José Tamayo afirmaba que hay algunos estereotipos muy divulgados en Occidente (más en Europa), que son los pilares que fomentan y sostienen las actitudes de islamofobia. Son, entre otros:
- Que el Islam es una religión fundamentalista
- El Islam es una religión belicista
- El Islam defiende la guerra santa
- El Islam es una religión patriarcal
- El Islam es contrario a los derechos humanos
- El Islam es una religión atrasada
- El Islam está en lucha con Occidente
A continuación señalaba que ninguno de estos estereotipos tiene su base en el islam, sino que hay que encontrarlos en construcciones posteriores al Corán y la vida del profeta Muhammad.
Vaya por delante que es grande mi desconocimiento del Islam pero no me parece descabellado decir que
Es una religión fundamentalista. En las webs de propaganda islámica que se pueden leer en internet se sigue diciendo que el Corán se lo dictó el arcángel Gabriel al profeta. Por tanto es obligado atenerse literalmente a ese texto divino y en eso consiste el fundamentalismo.
Es una religión también belicista porque su texto sagrado contiene exhortaciones animando directamente a la guerra contra los infieles.
Defiende –también- la guerra santa. La palabra yihad se traduce como esfuerzo pero este esfuerzo se extiende a ámbitos diversos, que incluyen el espiritual pero también el de la expansión y la conquista.
La Declaración de Derechos Humanos en el Islam, consensuada en El Cairo en 1990, tiene muchas lagunas, sobre todo en lo que se refiere a la igualdad de género.
Como cualquier religión monoteísta, el islam tiene una tendencia patriarcal: “Los hombres son los protectores y proveedores de las mujeres, porque Alá ha hecho que uno de ellos supere al otro, y porque gastan de sus bienes”.
Una religión avanzada es la que se ha sometido a confrontación con la ciencia moderna. No ha sido así en el caso del islam.
Hay todo un movimiento de musulmanes que está en lucha con Occidente.
Así pues, no me parece que se trate de estereotipos sino de realidades.
Hay una afirmación que suele escucharse de personas interesadas en este tema y que asegura que estos hechos existen pero no reflejan lo que es el verdadero islam. Pero ¿cuál es el contenido real de esa afirmación? En mi opinión, a menos que vayamos a una especia de platonismo, pensando en un mundo de esencias ideales, habría que decir que el islam que existe es el verdadero. Cuando en ocasiones he oído decir que la Inquisición no era cristiana, siempre he pensado que algo habrá en el cristianismo que llevó a la Inquisición. Como algo habría en el marxismo que terminó desembocando “socialismo realmente existente”.
A comienzos del siglo XX se publicaron en el campo de la teología cristiana una serie de estudios sobre “la esencia del cristianismo”. La conclusión general fue que esa esencia estaba personalizada en la figura de Jesús y su seguimiento. Nada parecido puede decirse en el caso del islam, que consiste, ya desde su nombre, en la sumisión a la voluntad de Allah, una voluntad explicitada en el Corán.
En 1977, en un libro -sin duda discutido- llamado Hagarism, Michael Cook y Patricia Crone afirmaron que “básicamente, el Corán carece de una estructura central. Frecuentemente es oscuro e inconsecuente tanto en lengua como en contenido; es superficial en su concatenación de materiales dispersos y muy dado a la repetición de pasajes enteros en versiones que presentan variantes”. Y ciertamente el libro sagrado entremezcla exhortaciones religiosas, preceptos morales y normas sociales. Para un observador neutral, no todas pueden tener el mismo valor e incluso algunas serían prescindibles, pero no parecen creerlo así los comentaristas musulmanes. Parece, pues, difícil delimitar cuál es el verdadero islam.
A menos que se contemple únicamente su faceta espiritual, tal como ocurre en el sufismo y, abstrayendo de las otras manifestaciones, se vea el islam sólo como la sumisión a Dios y la búsqueda de la unión con El.
¿Habremos así llegado al verdadero islam?
SIN YO QUERER ponerme de parte de los defensores, ni de los detractores del Islam, estoy de acuerdo, básicamente, en que existen marcadas diferencias de la religión islámica con el cristianismo, pese a que también existen creencias que nosotros compartimos…Ya se ha señalado que la primera diferencia fundamental es que el Islam tiene su inicio en el relato de una revelación particular a su fundador, Mahoma, desarrollada al escribir el mismo el Corán…pero el cristianismo se centra en la revelación de la Persona misma de Cristo, que vino a existir en el tiempo…que habló a sus discípulos, explicándoles detalladamente su plan soteriológico y que ellos fueron los cualificados testigos del cuerpo de la Iglesia y que a través de Ella, como Pueblo de Dios, han predicado estos testigos Su doctrina de forma oral y escrita.
Sin embargo, el Concilio Vaticano II, afirma que “la Iglesia mira con aprecio a los musulmanes, que adoran al único Dios, viviente y subsistente, misericordioso y todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra, que habló a los seres humanos, a cuyos ocultos designios procuran someterse con toda el alma, como se sometió a Dios Abraham, a quien la fe islámica mira con complacencia. Venera a Jesús como profeta…honran a María, su Madre virginal, y a veces también la invocan devotamente. Esperan, además, el día del juicio, cuando Dios remunerará a todos los seres humanos resucitados. Por tanto, aprecian la vida moral y honran a Dios, sobre todo, con la oración, las limosnas y el ayuno” (CONC. Vatic. II, DECLAR. SOBRE LAS RELIG. NO CRISTIANAS, “La Religión del Islam” BAC, La Edit. Católica, Apart. 466, Madrid, Num. 3, pag. 729)
No existe duda de que la gran mayoría de nuestros hermanos musulmanes, los que son devotos y creyentes, están en contra de la radicalización y el énfasis de muchos en querer darle una interpretación demasiado estricta y literalista del Corán, y que no aprueban la barbarie terrorista en su mas profundo horror de la que se hace eco, cada día, la prensa mundial…El hecho de que el libro fundamental del Islam no posea, como bien dice Carlos Barberá, una “estructura central” claramente delineada, con muchas lagunas sin aclarar, ha dado lugar, y sigue dando, a estas interpretaciones extremas que sobresaltan hasta los mas progresistas…De hecho, no todos los países de religión musulmana aplican la misma ley, ni todos están de acuerdo como penalizar las transgresiones de ella…Hay grandes diferencias, tanto en la interpretación como de su aplicación práctica de la misma doctrina y creencia..Por eso, hay que matizar mucho y con cuidado, para saber de donde viene la corrupción, donde residen las fuentes de la tergiversación extrema, hasta donde llegan los intereses políticos y materialistas mezquinos…y siguiendo lo que escribe el autor, se contemple, por otro lado, básicamente la “faceta espiritual” de la religión islámica en su búsqueda de “unión con El” con Alá, en toda su pureza….Al lado de todo el extremismo musulmán, no TODO está radicalizado…existe el ejemplo, también, de devoción, caridad, hermandad y amor de Dios, en estos hermanos nuestros que sufren también, en su propia tierra y en su propia carne, mas directamente, y con la imposición que de imposturas dictatoriales,….. el gran mal que supone una contienda bélico-político-religiosa carente de todo sentido… en pleno siglo XXI
Un saludo cordial de Santiago Hernández
Lo que comenta Barberá es de agradecer. Es también de agradecer que se atrevan a traerlo en estas páginas, en este tiempo de las metralletas… A mí, se me hace que en este escrito se dicen verdades como templos . Los comentarios, se me hacen también muy acertados, cada uno subrayando aspectos del problema.Pero éso de que, desde el Islám, se afirme que el Corám es “dictado”..y, se acepte, en principio, (aunque en la práctica haya habido y hay luchas y tensiones), que la Biblia, está sometido a hermeneútica y lectura científica, hay mucha diferencia Todo lo que es humano debe estar sometido a análisis.Ah, pero, que no se pueda tocar el Corám¡¡¡??Eso es tabú y actitud sacral.Eso no es humano ni divino.
Eso de que un icono del Islám sea la espada que blandió Mahoma y de que en el Cristianismo,uno de sus iconos, sea el lavatorio de Jesús, hay mucha diferencia. Eso de que el Corám coja lo peor del A. Testamento..quedándose ahí..y éso de que, el cristianismo, aunque acoja el A. Testamento, se acepte situándolo en un proceso evolutivo o (de que se pueda situarlo, aunque a algunos no les haga gracia), ya hay diferencia. Eso de que el Corám sea un libro intocable, como si fuera oro y moro, y, por el otro lado, aceptar los libros de la Biblia, pero sujetos como todo lo humano, a una hermeneútica ilustrada, hay mucha diferencia..Y así podríamos continuar…Todo es digno de respeto, pero todo lo humano es revisable y debe estar sometido a una revisión y análisis.
Hola!
Tal vez se pudiera ver en la”VISITA DE NICODEMO A JESÚS” en el Cap. 3 de Juan:
1.- la “PRESENCIA IMPLOTADORA” de Jesús dentro del judaísmo
2.- la “INCAPACIDAD DE CAMBIO” de Paradigma en el alma de Nicodemo.
Tal vez ¿no?
¡Voy todavía! – Óscar.
Hola Gonzalo!
Buen espíritu el tuyo para conciliar; semejante al de Juanjo Tamayo, con quien Carlos polemiza.
Pienso, sin embargo, que -como en el emblemático caso de Galileo Galilei-, las vidas de los hombres y mujeres existen en circunstancias estructuradas. Una de ellas son las religiones.
Y si no queremos escabullirnos “gatopardamente” por solapadas “espiritualidades” hay que decir que el modo de ser “religioso” consiste en un Algo FUNDAMENTAL del que se deriva todo lo Diverso.
Intentar que las Diversas religiones se retrotraigan a sus Algos fundantes (uno vocablo: dios) es “atrasar el reloj”; para luego de un tiempo llegar a la misma hora en la que estamos.
Con un agravante ¡que ya es tarde! y aquellas saludables religiones de un tiempo nos resultan esclavizantes suoersticiones y sectarismos “fundamentalistas”.
Estimo que en eso andamos metidos en n/tiempo; y gente como los atrieros buscan de “im-plotar” (resquebrajar los cascarones estructurales) pujando por la vida que nos debemos.
¿Te parece?
¡Vamos todavía! – Óscar.
El Islam, como el cristianismo, es fundamentalista y patriarcal. Sus textos pueden ser utilizados tanto para la paz como para la guerra. Y si nos atenemos solamente a su esencia, llegamos a la espiritualidad, a la ética elemental, a lo más profundamente humano, común a toda persona de buena voluntad. Las religiones realmente existentes son una mezcla de su espíritu original con las adherencias de los egoísmos que se le han ido incorporando con el tiempo. Todas tienen algo específico que facilita y socializa ese espíritu inicial, pero todas tienen que depurarse de esas adherencias y que adaptarse al desarrollo evolutivo de la humanidad.
Hola!
Ok! y más aun!
Pienso que la crítica se ha de extender a todo lo que entendemos por RELIGIÓN.
Y no es por un des-precio de ellas, sino por su anacronismo.
El reloj de las Religiones: ATRASA!
…………………….
(el tanguito imprescindible)
EL QUE ATRASÓ EL RELOJ
http://www.mp3tunes.tk/download?v=2lgT682s9rA
No he tenido paciencia para escuchar la charla de J M Tamayo.
Primeramente, no sé si este artículo contiene más ironía de lo que parece. Desde luego hace reflexionar. Porque:
¿Hay alguna religión del libro que en su desarrollo y expansión esté libre de ser fundamentalista, belicista, defensora de “guerras santas”, patriarcal en su estructura e infraestructura, contraria de hecho a los derechos humanos, LEJOS DE LA REALIDAD DEL DÍA A DÍA y en lucha constante con lo que no corresponde a su cosmovisión?
Podría hacer copia de la tendencia patriarcal que es pilar primario y esencial de estancamiento en desigualdad e insolidaridad de toda religión del libro, así como su confrontación constante con la ciencia.
Tampoco la Biblia se escapa a la crítica de la inspiración divina en la que pretende basarse.
La maldad humana, la ignorancia y la miseria humanas, amigo Carlos F Barberá, dan respuesta a tanta esquizofrenia enrevesada y violenta en el seno de las religiones e ideologías. Cuando unos y otros somos copia de lo peor y mejor que llevamos dentro y somos.
Por tanto, nada hay fuera de nadie que no forme parte y esté ya en cada uno de los que se proclaman jueces y se aprestan a juzgar, sin albergar ninguna duda: ¡Y el que está libre de culpa …que tire la primera piedra!
Me alegra la apuesta que hace Luis Troyano: “¿Qué solución tiene esto?. Amor por las dos partes enfrentadas. El mas evolucionado debe empezar primero….”
Lo que traduzco en reconocer, primero, las propias sombras para poder mirar al otro como a uno/a mismo/a y , a pesar de todos los obstáculos, amarle. ¿Acaso no es esto lo que hace funcionar y crecer armoniosamente a las relaciones humanas de todo tipo?
Lo que ninguno entiende allá en occidente es que el único principio hermenéutico del Corán (la única regla de exégesis) es la nasj. Por la cual cuando dos suras se contradicen, vale la última en ser revelada. Por eso, los que citan pasajes que hablan del islam pacífico, son muy ignorantes, porque pertenecen a los primeros años de Muhamad, y fueron anuladas por las las últimas en ser reveladas! Y si no, vengan a medio oriente a ver como vivimos los cristianos… y después hablamos.
El Cristianismo, con 2000 años en el cuerpo, ha pasado por todas esas etapas que vemos en el Islam y que nos chocan. Y solamente la separación entre el Estado y la Iglesia, ha permitido una cierta evolución hacia valores humanos y reinterpretaciones de la Biblia, debido a la presión del medio, ya que las religiones en general son muy conservadoras. Aún y así todos los teólogos que tratan de reinterpretar el Evangelio según las necesidades actuales, lo pasan mal.
Incluso Francisco, que es amoroso, trata de ser respetuoso, sus Obispos no lo son tanto, y hay aspectos en que él no profundiza, y habrá que dejarlos para un futuro papa. Como ser el capítulo de las mujeres y la diversidad sexual, que el trata de ser respetuoso, pero no le mete el diente en una aceptación incondicional de lo que implica en cuanto a institucionalidad.
Carlos F. Barberá:
Suscribo lo que dices en el artículo. Y te felicito por tu valentía. En los tiempos que corren.
La reacción primera seria. Rechazo del Islam. Pero si hilamos más fino, y ganamos altura. Veremos humanos, la mayoría barbaros. Pero en Oriente y en Occidente. Con la horizontalidad tenemos algo así como “moros y cristianos”.
Tenemos presente el terrorismo que nos afecta a nuestra civilización, residualmente cristiana. Pero solo por poner un ejemplo: Los “moros tienen presente el bombardeo de Bagdad, y mucho mas que les hemos hecho, y les hacemos. Y… ¿quién protesta?. Por los atropellos al mundo islámico. Ellos…. Palestina la tienen clavada como una espina en el corazón. A nosotros los “cristianos”, nos duele menos…..
Con todo, en Islam, está llamado a desvaírse aceleradamente, en este mundo de hoy. Está llamado a seguir los pasos del decadente cristianismo. Las religiones serán superadas por la dinámica evolutiva global. Lo que ocurre, es que mientras tanto siguen haciendo estragos en las mentes de determinada gente.
¿Qué solución tiene esto?. Amor por las dos partes enfrentadas. El mas evolucionado debe empezar primero….