Invitación a un debate sobre resultados del CIS
Ayer, 5 de febrero, se hizo público el Avance de resultados del Barómetro del CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas) correspondiente al mes de enero de este año.
El CIS goza del máximo prestigio, siendo un organismo dependiente del Ministerio de la Presidencia del Estado Español y punto de referencia para todos los análisis políticos que se suelen hacer ante la opinión pública española.
¿Del bipartidismo al tripartidismo? Resultados tras "pasar por la cocina". Las estimaciones directas ponen a Podemos el primero
Los resultados en la estimación de votos, no por inesperados, resultan muy clarificadores en el presente año electoral. Los indicadores le dan a la formación de Pablo Iglesias, Podemos, partido de nuevo cuño que sólo ha podido presentarse hasta ahora a las europeas de mayo de 2014, una estimación de votos del 23,9 por ciento, superando al PSOE de Pedro Sánchez que se sitúa en tercer lugar con el 22,2. En primer lugar está el Partido Popular con un 27,3
Estos resultados auguran que la revolución de este cambio de paradigma puede llegar empezando por una nueva configuración del Parlamento Nacional que rompa el bipartidismo. Nuestro sistema electoral ha favorecido siempre la formación de dos grandes partidos que gobernando en solitario uno, o de forma imperfecta apoyado por alguna fuerza nacionalista, el otro ocupa el lugar institucional de liderazgo de la Oposición. Esto demuestra dos cosas, si se llega a producir el escenario previsto. Que nuestra Constitución no es tan rígida y tiene cintura para acomodarse a situaciones que con la costumbre, la fuerza de los hechos… nos parecían imposibles o no previstas, y que si el pacto no se consigue en la calle, y desde la calle en las sedes de los partidos políticos a través de un consenso ciudadano, será instancia obligatoria en la configuración de las Cortes que salgan de las urnas.
Tales resultados del CIS no hacen justicia ni al Partido Popular ni al PSOE. El partido liderado por el actual presidente Mariano Rajoy, además del desgaste producido por el ejercicio de gobierno se enfrenta a tres situaciones muy negativas que explicarían un mayor castigo que el indicado en las encuestas. Citemos, por ejemplo, que la corrupción con sus escándalos judiciales tiene carcomida a la actual cúpula y a la anterior capitaneada por José María Aznar, cuando ya no pueden ocultar por más tiempo que se han conducido en el fraude democrático de una financiación irregular durante más de dos legislaturas (nacionales, autonómicas y municipales)
Añádase que el programa electoral con el que concurrieron a las elecciones generales de noviembre de 2011 sólo sirvió para concurrir a las urnas y en enero del 2012 iniciaron la acción de gobierno con un nuevo programa neoliberal, que aunque estaba en sus genes, no había sido negociado con la ciudadanía. Iniciaron una política de cambio de modelo económico, desmantelamiento del Estado del Bienestar y recortes de derechos y prestaciones sociales imposible de justificar, a no ser por la seguridad que les proporciona la mayoría absoluta, la concertación de intereses en la Administraciones del Estado y con los poderes fácticos, medios de comunicación incluidos.
La tercera, ya se adivina; la que obedece a ese sentido de gobernanza que parece más que un derecho, un privilegio de clase, propio de las actitudes más conservadoras. Le permite al Sr. Presidente ser lector habitual de la prensa deportiva y hablar a los ciudadanos, ¡y a los medios!, desde una pantalla de plasma.
Lo que le sucede en cambio al PSOE, no sólo se explica por una conjunción de situaciones negativas derivadas de la debilidad al perder las elecciones y quedarse fuera del gobierno y arrollados por la mayoría absoluta del PP en el Parlamento. El desgaste y envejecimiento (en personas e ideas) de la formación socialista y consecuencia de una larga gobernanza, no podía ser subsanado por un mecánico recambio generacional, como al parecer intuían sus bases en primarias votando a una cara nueva y apenas conocida para secretario general, Pedro Sánchez.
Las corrientes profundas del cambio social, anunciadoras de un nuevo paradigma histórico exigían algo más que un cambio de imagen. El pensamiento esquemático resultaba ya inservible, pues lo que en 2008 se intuía tenía que ser necesariamente que la tercera vía no era más que un parche ideológico para rendirse a los pies del neoliberalismo y no bastaba con haberse enganchado, a la bandera de las libertades individuales ( que en nada afectaba al capitalismo, sino que le fortalecían)
Ahora la Socialdemocracía está en peligro en España, pero también en la Unión Europea, pero no por falta del vigor necesario para renacer de sus profundas raíces, en la validez actual de sus principios, y se tenga rendir ante otras fuerzas emergentes de nuevo cuño más pegadas al terreno sociológico, sino porque el Estado del Bienestar ya no sirve de pretexto cuando el mundo estaba dividido en dos sistemas antagónicos y había que hacer concesiones al mundo del trabajo.
Tenemos la necesidad de un nuevo consenso ciudadano, pero tenemos que huir de los esquemas heredados. Caso contrarios tragaremos con esos otros esquemas que nos están imponiendo.
En Madrid hemos decidido un grupo de ciudadanos fundar un nuevo partido:el PGH.Partido de la Gente Honrada o Hijos de la Gran Puta,según se lea de derecha a izquierda o a la inversa.Estas diversas lecturas se deben ,como dice mi sobrino y militante activo,a que pretendemos abarcar todo el espectro electoral y parte del extranjero…
Una democracia es algo bonificable. Una dictadura es algo “soberanizante” Y aquí ha sucedido un juego de trileros, que han jugado, maquinado, trabajado, gobernado hacia la soberanización más que hacia la bonificación. ¿Quién puede decir hoy que “todos somos iguales ante la ley? ¿No clama al cielo, es un decir, los sueldazos de cine que se embolsillan los que viven de “la democracia”? Mientras que las clases trabajadoras -no me refiero ahora a las retahilas de CCOO y UGT- por muy universitarias que sean se quedan con la boca abierta, después de tantísimo trabajar en estudios y oposiciones? Hemos vivido estafados, sí, estafados. ¿Y se asombran del populismo, que porta en su misma esencia la cleptomanía que ha dominado en esta España cañí desde el pleistoceno? Y no por prolongarlo se difumina el problema, no, sino que lo resalta más sobre todo desde el famoso 1978, año de la “redención” y del “consenso” ¿Dondo están los acuales padres de la patria? Forrados y tan panchos. Por eso, ante los momentos que se avecinan hay que gritar: ¡sálvese quien pueda!
La corrupción, la gravedad de sus altos niveles, y su extensión generalizada tiene dos vertientes.
En una de ella es lo que yo llamaría los límites de la tolerancia, que obedece a un mal social endémico y casi consuetudinario. En cualquier siglo, y épocas pasadas de denunciaba la corrupción en las clases dominantes y las administraciones, como algo arraigado en “los que mandan”. Entramos en democracia arrastrando los vicios de la Dictadura. La falta de sensibilidad social hizo que se perpetuaran las corruptelas propias de los tiempos del extraperlo, y los valores sociales fundamentados en el nacional-catolicismo, hacían distinción entro los individual y una total falta de consideración hacia la comunidad. Eran los tiempos de tener bien barrida nuestra casa echando la basura en la vía pública, que “no era de nadie”. Y lo público era del primero que llegase aprovechándose de ello.
Pero treinta años homologándonos con las democracias europeas y los cambios sociales de fin de siglo, tuvo una efecto beneficioso en la creación de una fuerte sociedad civil, capaz de cultivar unos nuevos valores, que muchas veces ni siquiera se correspondían ya con el Código Penal. Estamosya en la otra vertiente que está demandando una mejor limpieza moral y una nueva ética social que pasa a) por un recambio en la clase gobernante ( no sólo los cargos políticos o de libre elección) y b) un nuevo orden o modelo social, donde los corruptos reciban los castigos correspondientes, pero que también sirva de catharsis para una limpieza general de costumbres en todas las administraciones, y los otros ambitos de la sociedad.
Esto todo, no se resuelve con el “quítate tú, pa´ponerme yo” ( Aunque en parte pase por ahí)
“Citemos, por ejemplo, que la corrupción con sus escándalos judiciales tiene carcomida a la actual cúpula y a la anterior capitaneada por José María Aznar, cuando ya no pueden ocultar por más tiempo que se han conducido en el fraude democrático de una financiación irregular durante más de dos legislaturas (nacionales, autonómicas y municipales)” dices tú. Y yo añado que le situación ha sido generalizada en las mismas coordenadas también en el PSOE, en IU y no hablemos de Cataluña en detalle. ¿Y qué me dices de mi Andalucía? Aquí todo ha sido y es monstruoso.Es tal el estado de enfado que hasta hubiese sido inmoral negar la palabra al populismo en las TV privadas, que bien lo han ayudado porque no tenían más remedio que hacerlo. ¿Hacia dónde vamos? Pues hacia donde nos han conducido con todo el cinismo del mundo, con toda la bajeza de muchísimas mentiras y con la complicidad de una legislación tramposa. ¿Es que vamos al matadero? A donde vayamos, los que han gobernado, nos han conducido prepotentemente y con una grandísima miopía. Somos víctimas de una monumental cleptocracia.