Un breve comentario de actualidad, que nos ha enviado nuestro amigo Juan José Bosch Sintes y que escribió esta tarde Eduardo Mangada, Arquitecto, Socio del CDU, Club de Debates Urbanos. Nos parece que sintetiza lo que muchos pensamos respecto al nuevo gobierno querido por el pueblo griego para que defienda su dignidad.
12 febrero 2015
Jean-Claude Juncker, Presidente de la Comisión Europea, tras hora y media de conversación telefónica con Alexis Tsipras, primer ministro griego, se atreve a lanzar ante el plenario del grupo popular del Parlamento Europeo la grosera y despectiva afirmación: “No sabe de lo que habla. Es como un estudiante de Medicina de primer año que ya quiere operar a corazón abierto” (EP 12/02/2015).
Grosería, prepotencia e insensibilidad política al insultar a un jefe de gobierno elegido democráticamente y apoyado posteriormente por el Parlamento y una mayoría cualificada del pueblo griego. Insultante actitud del señor Juncker que siendo primer ministro de Luxemburgo toleró y protegió a los bancos de su país, transformados en agujeros negros, encubridores de cientos de defraudadores fiscales de todo el mundo.
Grecia ha dicho no a la destructiva austeridad impuesta por la Unión Europea y se ha alzado indignada y airada frente al chantaje, a la humillación que los poderosos imponían a sus ciudadanos. El nuevo gobierno tiene el derecho y la obligación de devolver la dignidad a los griegos y garantizar el derecho de los ciudadanos a una sanidad, a una educación, a unas pensiones, que impidan ser arrojados a la exclusión, a la marginación. Y plantea esta batalla en términos de reivindicación pacífica, abriendo vías de concertación que permitan el inicio de un nuevo camino más justo para este país. Reivindicación pacífica y concertación que no acallan la legitimidad y la firmeza de sus reclamaciones.
Como relata Stiglitz (EP 08/02/2015), hay precedentes históricos en los que la negociación de la deuda de un país en ruinas ha sido posible y positiva para todos. Seguramente eran tiempos más sensibles, con políticos más inteligentes y solidarios que el señor Juncker. En el mismo artículo Stiglitz termina con esta reflexión: “Rara vez las elecciones democráticas dan un mensaje tan claro como el que se dio en Grecia. Si Europa le dice no a la demanda de los votantes griegos en cuanto a un cambio de rumbo, está diciendo que la democracia no es de importancia, al menos cuando se trata de asuntos económicos”.
Como españoles, como ciudadanos de un país mediterráneo, un país del sur de la UE, debemos sentirnos solidarios con Grecia y apoyar a su gobierno. Hoy solo nace de mi pluma un grito: ¡Yo también soy griego! Invito a cantarlo en un inmenso coro.
La “cultura televisiva y twitera” convierte en eslóganes las reflexiones:yo soy griego,je suis Charlie…Es cierto que antes también decíamos “yo también soy palestin@” en manifestaciones y en pegatinas,pero actualmente el “discurso emocional” lo invade todo y la necesidad de convertir los eslóganes en “virales”:tic-tac,pim-pam,catacloc/chimpún(este último es el de IU como continuemos con el “culebrón de Tania” que la pobre chica ha pasado por un “infierno”….Una guerra debían pasar estos jóvenes!).Pero la política no está sólo hecha de la materia de las “emociones”.Dice Margallo y miente que hemos dejado 26000 millones de euros a Grecia.Ya le ha dicho Alberto Garzón que les hemos dejado 6000 millones de euros y hemos avalado con nuestros bolsillos 20000 millones dejados por los bancos.Dice Margallo que con eso se podría pagar el desempleo y ya dicen muchos que con lo que nos han robado y con el “despilfarro faraónico” de algunos de nuestros políticos hubiéramos levantado 20 Grecias.En cuanto al payaso de Juncker que se puede decir de un hombre que amparó esos convenios por los que empresas europeas están tributando en Luxemburgo y “robándonos” el dinero que nos deben.Oyendo a Tsipras y sólo oír ese vozarrón diciendo correo electrónico en griego-a propósito de que él no acepta más órdenes por correo electrónico- uno se da cuenta que el griego es el idioma de la revolución….
¡Qué más quisiera yo que ser griego de los afortunados! Ahora estos muchachos se han metido en un berenjenal y vamos a ver cómo salen. Desde luego tendrán que pagar lo que me adeudan, que me lo adeudan, porque nuestros muchachos del gobierno, presionados por los muchachos de Bruselas, no obligaron a prestarles. Y me lo tienen que pagar. ¿Ya? Hombre, vamos a dejarlos respirar un poco porque lo tienen muy duro, no sólo con Europa sino con los que los precedieron lustros y lustros en el desgobierno de la nación. Parece como si aquello hubiera sido el pais de Jauja. Por lo que, de entrada deberíamos ayudarles y decirles de paso que la prepotencia tiene poco que ver con la cautela. Es que la necesitan como el comer porque, es verdad, no se puede en segundo de medicina operar de estómago a un paciente. Se verá que pretendo ser comprensivo, solidario, pero que conste que yo no soy griego. Quede claro: ayuda, toda; cautela tambien por su parte, pero que no, que no soy griego, aunque, dadas como están las cosas aquí, a lo mejor termino siendo Hutu o Tutsi. Salud.
No es de extrañar lo lógico de esa declaración de Jean-Claude Juncker, supuesta la actitud personal mantenida en su país y refrendada por la derecha europea al aceptarle como presidente de la Europa de los mercaderes y algo más,pues aplicando aquella medida de que por los frutos se conoce el árbol, demasiado claro queda a que clase de árboles pertenece este tipo de personas, porque, a pesar de todo, lo son.
Como él ha usado un ejemplo descalificador para el Jefe del Estado Griego, no por el sujeto, ni por las intenciones que puede tener un médico aprendiz, sino por el fondo inhumano que pretende él, y que ha pretendido y pretende defender, sin adecuada referencia al problema humano del pueblo griego, voy a concretar con otro ejemplo lo que él y su EU representan
Se les ha ocurrido apoyarse en las siglas en ingles, de los países sureños de Europa para referirse a ello como PIGS, en nuestro buen romance, CERDOS; de los que, de su sacrificio carnicero, se valora TODO menos su vida.
¿Cómo no va a decir un carnicero que no sabe de lo que habla quien sobre la utilidad cárnica antepusiera la vida del cerdo? ¿Podría seguir siendo considerado buen carnicero o intendente de quienes lo que valoran es engordar a costa de los seres sacrificados? ¡Pues eso!
Y casi peor que lo del de Luxemburgo, es lo de aquellos que, presumiendo de jefaturas, sin haber tomado buena conciencia de que a sus pueblos los llaman y consideran PIGS de los que hay que aprovecharlo todo después de bien recortados, lo han apoyado, lo apoyan y se tragan sin rechistar esa basura de descalificación.
Esto es lo trágico del poder y del tener de quienes, cual carniceros matarifes, consideran a los humanos como reses de matadero para rentabilidad total expoliable.
¿Su lógica y práxis, dista mucho de tener que ser considerada criminal?
La respuesta nos la dan tantas y tantas víctimas desde esta inhumana Humanidad.