- Esperábamos un comentario como este de Esther (Público, ayer) para iniciar los comentarios sobre la Diada y la Via Catalana del pasado miércoles.
- En el 11 de Septiembre recordamos también el golpe de Estado de Pinochet y la muerte del Presidente Allende hace 40 años.
- También lo de las Torres Gemelas en 2001, que tanto ha marcado el principio de este siglo.
- Se trata de recordar, pero, sobre todo, de hacer historia, como propone Esther y con ella tantos jóvenes.
Catalunya, una independencia para los de abajo
Miles de persones salieron ayer a la calle en toda Catalunya, se calcula que un millón y medio, en una cadena humana que unió el país de norte a sur, en un recorrido de 400 km, por carreteras, plazas, puentes, calles…, para gritar alto y fuerte: “Independència!”. La Assamblea Nacional Catalana (ANC), los organizadores del acto, llevaban meses preparando una acción, que ha desbordado el marco político institucional. La gente, como se ha visto en declaraciones, fotografías, redes sociales…, ha sentido que escribía parte de nuestra historia colectiva.
Algunos dirán que si el peso del Gobierno catalán en la organización del evento, de si tal o cual partido. Los vínculos de CiU y ERC con la ANC son reales y, a menudo, más estrechos de lo que debieran. Pero esto no quita que la gran mayoría de quienes ayer participaron en La Via Catalana cap a la Independència lo hicieron porqué quieren decidir sobre el futuro de Catalunya, porqué la voz del pueblo catalán ha sido callada a golpe de sentencia del Tribunal Constitucional, y muchos son conscientes de que sin movilización social nada se va a conseguir.
Pero no sólo el grito de “Independència” se ha dejado oír a lo largo de la cadena, miles de personas han rodeado edificios emblemáticos como el Hospital Josep Trueta en Girona, la escuela Progrés y el instituto La Llauna en Badalona o La Caixa en Barcelona para exigir no sólo una “Catalunya lliure” sino una Catalunya libre, también, de ladrones, recortes, represión y deudas ilegítimas. Independencia sí! Pero independencia de todas las políticas que nos oprimen y nos empobrecen. La independencia no es una fórmula mágica que todo lo soluciona, como muchos intentan vender. Puede ser una cáscara vacía si no implica romper con las imposiciones del capital financiero y el pago de la deuda.
No se trata de cambiar el Sr. Mariano Rajoy por el Sr. Artur Mas ni el BBVA por La Caixa ni el caso Gürtel por el caso de las ITV ni el Sr. Amancio Ortega por el Sr. Antoni Brufau ni la policía nacional por los mossos de esquadra. No nos engañemos. No se recorta menos ni se desahucia menos ni se roba menos ni se precariza menos ni se reprime menos en catalán. La independencia tiene que ser una oportunidad para decidir sobre todo y para echar, definitivamente, a quienes nos han robado por encima de nuestras posibilidades. Una oportunidad para arrancar un verdadero proceso constituyente desde abajo, para discutir qué modelo de país y sociedad queremos. Un proceso que pueda ser utilizado, además, como palanca fuera de Catalunya para hundir al Régimen surgido de la Transición, dando lugar a otros procesos constituyentes en el resto del Estado.
El presidente Mas nos dice hoy que consulta sí, ayer que consulta no y que elecciones plebiscitarias sí, anteayer que consulta sí o sí y mañana… quién sabe qué dirá. Llevar la independencia y el derecho a decidir hasta sus últimas consecuencias implica desobedecer a Leyes y a Constituciones injustas. Las mismas que combaten quienes ocupan pisos vacíos, bancos, escuelas, hospitales, supermercados y, también, quienes se niegan a pagar los peajes. La legalidad institucional se enfrenta a la legitimidad de la calle y a los derechos, inalienables, de los pueblos. Legalidad que los defensores de la “Ley y el orden” en Catalunya no están dispuestos a romper.
Hay tres elementos clave, a mi entender, si queremos avanzar hacia una independencia escrita por y para los de abajo. Primero, la independencia, el derecho a decidir, una consulta para el 2014, sólo será posible con la movilización social para mantener la presión sobre el gobierno catalán y español. La manifestación de ayer fue, precisamente, un paso en esta dirección. Miles de personas se hicieron oír, desbordando, parcialmente, la dinámica partidista e institucional. Segundo, una país inclusivo, de todos, sólo será posible si tenemos en cuenta a los silenciados, a los oprimidos, a los invisibles, a los nadies. No se trata de construir la Catalunya de los ganadores sino la de los perdedores, la de quienes sólo sufren recortes y reducción de derechos. La Catalunya de los inmigrantes, de los jóvenes, de los parados, de los sin techo, de las mujeres. La Catalunya de los que hablan catalán, pero también castellano, árabe, urdu… El gran reto es sumar a toda esta pluralidad, diferencia, en la Catalunya del mañana, esa República Catalana del 99%, tan soberana como amiga de los pueblos vecinos. Y tercero, que nadie se haga ilusiones, nunca seremos libres en manos de quien vende nuestro país al mejor postor, ya sean magnates del juego, bancos o mercados extranjeros. La independencia y la libertad sólo serán posibles sin yugos políticos ni económicos. De nosotros depende.
Mientras tomaba una relaxing cup of café con leche in Montera street,he llegado a la conclusión de que la Espe,además de joder a Rajoy,quiere en realidad “cagalanizar” España,es decir,montar un chiringuito de la Gürtel o del Palau-Millet en cada esquina del Estado…
Que va a decir la Aguirre que està contratada por una empresa catalana de cazatalentos!.No obstante,habiendo sufrido a la Aguirre y siguiendo sufriendo a sus secuaces,nada bueno debe entender ella por catalanizar….
También recogen la noticia:
El País: http://ccaa.elpais.com/ccaa/2013/09/19/catalunya/1379581250_346025.html
El Mundo: http://www.elmundo.es/elmundo/2013/09/19/madrid/1379604266.html?a=fac409a98757e182b46275c7ac38e51d&t=1379617090&numero=
También ABC y La Razón recogen la noticia
Hola Javier Peláez,
¿Recuerdas lo que comentaba el otro día sobre catalanizar España? Pues resulta que Esperanza Aguirre piensa lo mismo. No me lo puedo creer, ni el hecho de coincidir en algo importante con Esperanza Aguirre ni el hecho de que en el PP, por fin, haya alguien a quien se le ocurre una buena idea.
Así da la noticia Público:
“La expresidenta de la Comunidad de Madrid ha reconocido que el resto de España “necesita ser catalanizada” y conocer y amar más a Catalunya y lo catalán. También ha pedido a los catalanes proponerse liderar España desde el campo científico, empresarial y cultural.”
(http://www.publico.es/469336/aguirre-espana-necesita-ser-catalanizada
)
La solución a todo esto es el federalismo.Hay gente que cree que no estamos a tiempo y que preguntan dónde estàn los federalistas.Hay que recordar que el PP y CiU son profundos conocedores de las instituciones de la Confederación Helvética,por lo menos de las instituciones financieras…
También voy a dejar de leer prensa digital catalana para no ponerme de mala leche.Leo en Lavanguardia un artículo sobre el mucho inglés que saben los políticos catalanes frente a los seis presidentes españoles,con un tono de superioridad completamente absurdo.Convendría señalar que el presidente de a Comunidad de Madrid sabía muy bien inglés.Al fin y al cabo tiene el contrato del àtico en inglés firmado en un fondo de Delaware.Lavanguardia està lleno de artículos encaminados a sembrar discordia…¿Qué fue de la antigüa Lavanguardia?.En fin,que es tan absurda la campaña nacionalista catalana que voy a dejar de leerla no me vuelva del PP…
He decidido no volver a escribir del tema catalán que nos hace perder muchísimo tiempo a las izquierdas.Me voy a Miami,como la Chacón…de España.
Mira María Luisa porque miràis sólo 13tv,ABC,La Razón…¿Es eso España?.No.Por cierto que La Razón la dirige un catalàn.Ya lo he dicho en otro sitio,no se puede afirmar que el que no está por el derecho a decidir no es demócrata.Falso.Ni en Suiza que los cantones son soberanos se pueden separar sin el voto de todos los cantones-cito la fuente en la entrada sobre las olimpiadas-.Salvo la Constitución de la URSS que nunca lo aplicó salvo por descomposición ningún país hay reconocido la secesión de parte de su territorio.Excepción de Quebec que no se basa en el derecho a la autodeterminación y que exigió una mayoría “relevante”.Ya he dicho que esto no tiene solución con la derecha y he de decir que creo que hoy en Cataluña no hay libertad de opinión y que la gran mayoría de los argumentos de la Vía son endebles.De hecho,ya se ha dicho que si se ofrecen tres preguntas,una de ellas con un posible concierto económico,el independentismo baja un 33 por ciento.Hay que recordar que fue Pujol el que en 1978 rechazó el concierto.Finalmente,señalar que encauzar a la gente hacia objetivos poco realistas puede generar una frustración y violencia.Leed lo que escribe un tal Grau en público.es….En fin,no creo que esta Vía refleje tampoco una preocupación por ideales de izquierdas tal como se entienden universalmente: la igualdad entre los semejantes….Desde luego,yo no participaría en una cadena que participan las autoridades que me recortan y recortan-gobierno de Madrid,de España,de la Generalitat-.
Digo mal, éramos un millón seiscientos mil ciudadanos, pienso que el lapsus me ha venido porque aquel día 11 de septiembre quise ver con qué titular por la noche abría la cadena13 TV y quedé petrificada al oír al presentador decir que la asistencia había sido de 400.000. Con estos falsificadores ¿cómo no se va a difundir opiniones equivocadas creando con todo ello todo tipo de conflictos?
Naturalmente que el problema es España El éxito de la cadena en Catalunya no está solamente en la buena organización de la misma ni en la participación del millón cuatrocientos mil ciudadanos/as que acudimos de punta a punta bordeando la costa mediterránea, sino que el éxito está en manos ahora de la voluntad política del gobierno de Madrid.
Cataluña, si ha tomado esta decisión es porque lleva demasiados años intentando querer influenciar mirando por el bien de España en todo aquello que socialmente al haber representado para Catalunya un beneficio y un enriquecimiento había que extrapolarlo y compartirlo en una visión más generalizada, sin embargo todos los esfuerzos fueron inútiles hasta el punto de que no sólo mostraron los gobernantes indiferencia sino que justo hicieron pie en ello para, poco a poco y subrepticiamente desde el gobierno de Madrid ir restando entidad a Cataluña y esto es lo que no se puede consentir pues ahora precisamente con el problema añadido de la crisis lo que necesita un pueblo para hacerle a todo ello frente es tener su plena entidad propia.
A Esther se le nota emocionada, y con motivo. La cadena fue un éxito de participación y, como importante novedad, de organización. Felicitaciones.
Pero no debe olvidar que la sola visión de Cataluña es insuficientemente panorámica. Tambien hay que ver el entorno. Sobre todo el entorno español.
El Estado español se enfrenta hoy en forma aguda a tres viejos conocidos: dos viejos problemas críticos y una vieja desgracia.
Los problemas son la cuestión social, o económico-social, variada con respecto a formas pasadas pero presente sin acabar de solucionar, y las cuestiones nacionales, en forma aguda actualmente la catalana.
La vieja desgracia son los gobiernos españoles. El actual entre los que más. Por acción o inacción dejan todo, todo, peor de lo que lo encontraron.
Y la combinación de las tres cosas es capaz de al final congelar cualquier emoción.
Se está cometiendo un serio error: considerar que el problema es Cataluña. No, el problema es (está en) España.
No acabo de entender bien este disfrazar la independecia de socialdemocracia que propone la autora del artículo. Si la justicia solamente se persigue para los catalanes, ¿se persigue la justicia?
Que nada ni nadie nos maree con cambios de falsedades sobre la JUSTA y HUMANA LIBERTAD, que solo se puede vivir en la IGUALDAD FUNDAMENTAL de nuestra PERSONALIDAD HUMANA.
Sin la VERDAD de cada YO, nunca podrá ser real la VERDAD de ningún NOSOTR*S, ni CATALAN, ni ESPAÑOL, ni EUROPEO, ni HUMANO UNIVERSAL.
ALGUIEN, de máxima categoría humana y divina escondida, nos alertó:- “A nadie consideréis, ni llaméis padre sobre la Tierra.”
Nos recordó nuestra primaria, real y fundamental condición y responsabilidad de HERMAN*S.