Religión Digital publica hoy una extensa entrevista con nuestro colaborador Francisco Asensi, escritor, firmantes del Proyecto ATRIO que, tras cinco años sin publicar nada, acaba de sacar Sangre, una novela tan apreciada por su calidad literaría (y divertida) como por su simbolismo y la penetración crítica en la realidad eclesiástica. Vídeo de la entrevista.
Francisco Asensi: ¿Cómo se puede predicar la pobreza desde la inmensidad de riqueza y poder del Vaticano?
“La Iglesia como institución encarna todos los defectos que criticó Jesús en la religión de su pueblo”
- Juan Pablo II y Benedicto XVI, que no son tontos, han visto que por la línea del Vaticano II se acababa la Iglesia institución
(José Manuel Vidal)- Francisco Asensi es un novelista consagrado especializado en novelas, muchas de ellas de temática religiosa. Hoy nos presenta Sangre (ADGN), que aborda temas de suma actualidad: desde las intrigas del Vaticano hasta misterios más cercanos a nosotros como el Opus Dei o la sangre de San Pantaleón del convento de la Encarnación de Madrid.
¿Sobre qué trata la novela “Sangre”?
Yo creo que el subtítulo que le han dado a la versión alemana la define muy bien: “El sagrado experimento del Opus Dei”.
¿Cuál es la tesis central de la obra?
Precisamente, es el experimento que hacen los del Opus Dei sobre Jesucristo. No me puedo explicitar mucho para no descubrir la novela.
¿Pero usted considera que el Opus Dei es un experimento eclesial o religioso?
Ellos quieren hacer un experimento sobre la doctrina de Jesús. Y, en el caso del libro, sobre la misma persona de Jesús. Un experimento que hasta el momento no se había hecho, que causa una expectación enorme por lo que podría significar.
La novela es policial y de intriga, pero, ¿hay sangre?
Exactamente. Hay sangre en muchos sentidos. Porque hay muertos, y por el experimento que van a hacer. Y desde luego que la razón de verter estas cuestiones religiosas en una novela es porque creo que es un modo mucho más fácil de leer, de distraerse y pasarlo bien; y al mismo tiempo para detenerse y reflexionar sobre las cuestiones que se plantean. Tanto el creyente como el no creyente.
¿Son temas que interesan?
Yo creo que sí. Nos tiene que interesar porque, queramos o no, la Iglesia es un peso específico en Occidente.
Muchos tenemos una educación cristiana que hemos mamado de nuestras familias.
Claro. Ésa es nuestra cultura. Y lo interesante, a mi modo de ver, es reflexionar sobre hasta qué punto esa cultura que hemos vivido es cristiana, o es una ideologización que nos ha dado la Iglesia. También es importante plantearse si esta Iglesia es la de Jesús, o no tiene nada que ver con él.
¿Y usted qué piensa? ¿La Iglesia actual es la Iglesia de los Evangelios de Jesús?
Rotundamente no. No tiene nada que ver.
¿Por qué?
Pues, porque si cogemos los Evangelios y vamos cotejando lo que predica Jesús con lo que predica la Iglesia, no se parecen en absoluto. ¿Cómo desde la inmensidad de riqueza y de poder del Vaticano se puede predicar la pobreza? ¿Cómo podemos hablar desde allí de la Iglesia de los pobres? ¿Cómo, desde el punto de vista de esa autoridad tan omnímoda que detentan el Papa y los obispos, podemos hablar del Pueblo de Dios? Es todo contradictorio. Y la prueba está en que, en el momento en que la Iglesia quiso, con Juan XXIII, plantearse una reflexión sobre sí misma, duró muy poco. Porque, de haber seguido reflexionando en esa línea del Concilio, el tinglado se hubiese venido a tierra.
¿O sea que usted cree que el aggiornamento del Vaticano II se ha venido abajo, se ha traicionado, o se ha quedad a medias?
Totalmente. Juan Pablo II y Benedicto XVI, que no son tontos, han visto que por esa línea se acababa con la Iglesia institución (no con el Evangelio ni con el mensaje cristiano). De tal manera que yo creo que los teólogos de hoy, lo que están haciendo de una manera suave (otros más agresiva) es desmontar todo ese tinglado. Es decir, los teólogos de todos los tiempos montaron esta Iglesia, y ahora intentan desmontarla. De ahí el interés de los últimos papas de la Santa Sede de descabezar toda la Teología de la Liberación, que está más cerca del Evangelio que de la ideología eclesial.
¿Pero toda esta corriente (la Iglesia de base, las parroquias, la gente que se entrega a los demás…) es tan Iglesia como el Vaticano? ¿Pueden compatibilizarse esas dos caras de la institución?
Yo creo que no. Una cosa es la Iglesia oficial, de los obispos, y otra cosa es la Iglesia carismática de las comunidades de base. Una Iglesia es la que sigue al Evangelio y que no tiene más orientación que el Evangelio, y otra es la que ha creado el poder como lo definía Tertuliano.
¿O sea que el gran pecado de la Iglesia jerárquica es el poder?
Totalmente. Y el poder está reñido de manera consustancial con el Evangelio. El Evangelio es la condena del poder, del poder religioso sobre todo.
¿Eso es lo que se está escenificando en estos momentos, a su juicio, con todo el escándalo de las filtraciones?
A mí lo que me llama la atención de las filtraciones es que nadie habla del Evangelio. Se han olvidado de Jesús. ¿Qué pensaba él, qué diría si hoy se encarnase, si estuviese aquí?
¿Usted qué cree?
Seguramente diría lo mismo que dijo hablando del templo de su tiempo: “Es una cueva de ladrones”. O raza de víboras. Suena muy fuerte, pero a mí me parece que nuestra manera de leer el Evangelio está ya tan condicionada por esa cultura cristiana que hemos dicho, que nos resulta impensable que Jesús pudiera decir de sus jerarcas, del Vaticano concretamente, que es una escuela de ladrones. Hoy es impensable que Jesús pudiese decir: “De esta Iglesia no quedará piedra sobre piedra”, pero lo dijo sobre la religión judía, cuando él era judío.
¿Se ha traicionado entonces radicalmente el espíritu de Jesús?
Como institución sí. Los santos padres de la Iglesia siempre han dicho que la Iglesia es santa y prostituta. Juan Pablo II decía que no, que son los hombres los que son pecadores. Yo lo diría de otra manera: la Iglesia es una institución per sé perversa, que tiene buenos hombres. No al revés (ella santa y los hombres pecadores). No. La institución como tal es mala, como es malo el poder (porque hay que distinguir entre poder y autoridad).
La Iglesia como institución encarna todos los defectos que criticó Jesús en la religión de su pueblo.
Y sin embargo, ese poder encarnado en el Papa sigue teniendo autoridad moral e influencia planetaria.
Sí. Sin embargo, esto también contrasta con lo que Jesús pensó que era su mensaje y los que le seguían. Él dijo: “Vosotros sois la luz del mundo, pero sois a penas una cerilla encendida, sois la levadura, sois un poquito de sal….”. Y la sal, la levadura y la luz ahora son un poder enorme. Jesús no creo que tuviese intención en absoluto de crear una Iglesia, sino un movimiento. Un movimiento de buena personas. Él no intentó crear una religión más.
Pero hay quien dice que para salvar la libertad de ese movimiento se necesitan estructuras humanas. No somos ángeles, necesitamos mediaciones. En ese sentido, ¿no se necesita un Estado para que el Vaticano sea libre de todos los poderes?
Ésa posiblemente sea la trampa en la que cae el mismo Vaticano. Me ha llamado la atención, entre esos documentos que han aparecido, un informe que presenta a Tedeschi (el ex banquero del Papa) como el poder económico del Vaticano. Y presenta este poder como una de las columnas que sostiene a la Iglesia. ¡Yo creía que eran la fe y el Evangelio! Pero resulta que lo que está sosteniendo a la Iglesia es la economía.
Y la misma Iglesia hace una reflexión de futuro, porque sabe que Occidente, que es quien la sustentaba, va hacia una economía más débil, y los cristianos encima son ahora menos creyentes.
¿Creen que tienen un flanco desguarnecido?
Exactamente. Sin embargo, los países que no son cristianos tienen la economía más saneada y no creen en nada. En el fondo, yo creo que la Iglesia no ha tenido nunca fe en sí misma, en su mensaje. Cuando Juan XXIII convocó el Concilio le criticaron porque “estaba echando tierra a su propio tejado”. Pero, si yo creo en el mensaje del Evangelio, tengo que seguirlo caiga quien caiga.
Pero, si ese intento de cambio fue posible en aquella época, ¿no podríamos esperar algo parecido con otro Papa, en otra situación?
Cada vez lo veo más difícil. Juan Pablo II se dedicó a desmontarlo, y no digamos Benedicto XVI. Del Concilio Vaticano II no queda absolutamente nada. Las iglesia de base, la teología de la liberación… todo eso es positivo, pero está al margen de la jerarquía. Hay una confusión que me parece que Rouco Varela explota bien, y es identificar a Cáritas con la jerarquía. ¿Cáritas es Rouco Varela, o es el pueblo que continúa creyendo en el Evangelio de Jesús? Ése no es el Jesús que predica Rouco Varela, si es que predica alguno. Por eso decía antes que lo que la Iglesia predica es una ideología. Todos citan las cartas de Benedicto XVI, pero, ¿quién lee los evangelios? Ya no se predica el Evangelio, sino lo que dice Benedicto XVI.
¿No leen los obispos el Evangelio cada domingo, y hacen su homilía sobre él?
Sí, pero eso es manipulación del Evangelio.
Ettore Gotti Tedeschi, del que hablaba antes, es muy cercano al Opus Dei.
Bueno, siempre ha habido mucho secretismo. No se sabe quién pertenece a qué.
¿Su novela es un alegato contra el Opus Dei?
No. Yo no voy contra nadie. Sólo quiero reivindicar el Evangelio de Jesús, que está siendo maltratado por los mismos que tenían que ser sus defensores: la Iglesia oficial.
¿Y por qué ha escogido para su novela a un sector de la Iglesia, que es esta organización?
Porque creo que es bastante representativa de la manipulación del Evangelio.
¿Y de la búsqueda del poder por el poder?
Sí, a cualquier precio. Lo que posiblemente me motivó a escribir este libro fue el testimonio de María del Carmen Tapia, una ex numeraria del Opus Dei que escribió algún libro sobre su experiencia. Ella estuvo muy metida en los primeros años de la Obra, y aseguró que hoy en día los esfuerzos e intereses del Opus Dei no son el apostolado, ni mucho menos el apostolado con los pobres, ni los problemas serios de la humanidad en general: “Su objetivo es manejar todos los instrumentos a su alcance del poder político, religioso y económico”, dice textualmente. Eso es el Opus.
A este respecto, quiero hacer constancia de que mi novela, que habla del Opus (de los que están dentro y de los que están fuera) está muy inspirada en sus propios testimonios. Hay una página web que es opuslibros.com donde hablan los “ex” del Opus.
¿Calificaría al Opus Dei como una secta?
No lo califico yo, sino Alberto Moncada (un sociólogo que también perteneció a la Obra). Si yo hablo de secta es porque otros, con mayor autoridad que yo, ya lo han dicho.
Su libro está excelentemente documentado. ¿Tiene usted mucha información actual sobre la Obra? ¿Sigue teniendo tanto poder político y religioso como se dice?
Bueno, yo no sabría calibrar eso exactamente, pero seguro que lo tiene. Sobre todo, dentro de la Iglesia. El Vaticano en estos momentos se apoya en las fuerzas del Opus, los Legionarios de Cristo, Comunión y Liberación y “los kikos” de Argüello.
A mí me parece que los kikos tienen más futuro del que los vaticanistas les dan, porque son una masa. Tiene los seminarios llenos. Ellos serán los misioneros que irán por ahí a ver si levantan el cristianismo. O, más que el cristianismo, la Iglesia. La Iglesia jerárquica.
¿O sea que ese cristianismo de los movimientos es el que, a su juicio, tiene futuro?
Bueno, de momento es el que llena todas las plazas.
¿Y el cristianismo de las comunidades de base, en cambio, está de capa caída?
Pero es que nunca podrá llegar a tener el poder. Jesucristo ya lo dijo: “Vosotros sois una pequeña semilla. Sois los que fermentaréis, pero nunca por número”. El verdadero cristianismo no tiene por qué etiquetarse. También los demonios creen.
La verdadera religión, como dice Santiago en su carta, es visitar a las viudas y acordarse de los huérfanos. ¿Cómo puedes decir que crees en Dios, a quien nunca has visto, si al hermano que tienes ahí no le haces caso? La lección no es escalar poder, buscar las universidades y los ministerios como hace el Opus, codearse con la CIA como Juan Pablo II, dominarlo todo. No. Jesucristo condenó precisamente todo eso.
Pero, ¿no podrían también las élites entrar por ese camino de salvación y fraternidad?
Efectivamente, siempre que no renunciasen al Evangelio o lo perjudicasen.
¿Las élites se dejan evangelizar? ¿Podrían convertirse?
Lo que cambia es la propia convicción del que es cristiano. ¿Quién va a Roma para ser santo? ¡Desde casa podía serlo! Van a Roma a escalar.
Pero todos los obispos dicen que se hacen obispos para servir al Pueblo de Dios.
Ahí está la equivocación. En el Jueves Santo Jesús se arrodilló y se hizo esclavo de todos. Los obispos no sirven al Pueblo de Dios: se han puesto delante y encima. Y a Jesucristo lo han hecho Dios para echarlo bien lejos y que no moleste.
¿No hay esperanza de que la Iglesia pueda cambiar y ser más evangélica?
Yo no creo en eso. Cuando hablan de un Vaticano III estamos hablando de la institución, y la institución es perversa en sí. Es Jesucristo condenando al templo. No hay salvación para la religión como dominación. La religión (que no la religiosidad) es un poder, y todo poder es malo. Porque se utiliza a Dios. Un ejemplo es la infalibilidad: no pienses por tu cuenta, que yo te diré lo que me dice Dios. Eso es crear una antropología deficiente, una cabeza que sólo sirva para peinarse el pelo (si lo tengo). Te dicen que para pensar ya están ellos. Mientras que los evangelios de la Iglesia primitiva decían que Dios es eterno silencio. Si Dios no ha hablado nunca, ¿cómo hablas tú en nombre de Dios? Cada quien tiene que escuchar a Dios en su conciencia, sin interpretación de otro.
Pero eso sería tanto como acabar con la actual estructura eclesiástica.
Eso es. Con la estructura nunca se podrá terminar, pero yo creo que cuando Jesucristo criticó tanto la religión de su pueblo, lo que vino a decir fue eso: que el Reino está dentro de cada uno, y es ahí donde hay que buscar. En cambio, lo que dice la estructura es “haced lo que ellos dicen, pero no lo que ellos hacen”. Al igual que tenemos las Bienaventuranzas, tenemos las maldiciones de Jesús hacia los sumos sacerdotes. Eso pasó entonces, pero sigue pasando hoy y pasará mañana. Si todo poder es malo, el poder religioso es todavía peor, porque te mete el miedo y la coacción en tu propia conciencia. Te controla desde dentro.
¿Eso es lo que está dando lugar a la situación que usted llama la “apostasía silenciosa” de los muchos católicos que se van hacia la indiferencia?
Claro. Pero que se vayan de la Iglesia no quiere decir que dejen de ser cristianos. Posiblemente porque se creen cristianos tienen que renunciar a esa pertenencia a una Iglesia que no cree en Dios y que lo que quiere es dominar el mundo, y quitarnos la alegría y la libertad que Jesús nos dio. Una Iglesia que a través de los tiempos nos ha metido en la cabeza la angustia y el pecado.
¿En esa dinámica se inscriben las condenas eclesiales tan rotundas de la homosexualidad, como el caso de Monseñor Reig?
Claro. El Evangelio es un mensaje de comprensión y de amor. “Ama y haz lo que quieras”. No hay mayor ley que ésa. ¿Cómo, desde esa perspectiva el señor Reig puede condenar a las personas? Moisés dijo que a la adúltera hay que apedrearla pero, ¿qué hizo Jesús? ¡Jesús desautorizó a Moisés! Lo mismo con el sábado: “El hombre no está hecho para el sábado, sino el sábado para el hombre”. Esto, que parece una frase vulgar, sin mayor trascendencia, se estaba cargando todo lo que es la Biblia. Porque al séptimo día Dios descansó. Eso es un dogma enorme del judaísmo. Y Jesús se lo carga. Por eso lo mataron, claro. Posiblemente no se cargó sólo la religión de su pueblo, sino toda religión, todo poder. Porque cuando él habla de su movimiento pone la parábola del samaritano. Y lo curioso es que pase un levita, que es representación de una clase eclesiástica, y sin embargo sea un samaritano, un ateo, quien se acerca al prójimo. Ése es el mensaje que predica Jesús.
¿La gente española confía hoy en día en la Iglesia? ¿Tiene buena imagen, o ha perdido su autoridad moral?
Sí, la ha perdido. La gente no confía ya en la Iglesia. La auctoritas es incompatible con el poder. La autoridad moral es ponerme a ti mismo como ejemplo haciendo lo que predicas. ¿Cómo dice el señor Rouco Varela que si la Iglesia tiene que pagar el IBI a lo mejor Cáritas se resiente? Desde un punto de vista cristiano, eso no se pude ni plantear. La Iglesia tendría que haber sido la que, ante estas circunstancias, hubiera vendido sus casas para dar de comer a los pobres.
Ya en el Concilio de Nicea se vio la intención de separar el mensaje del Evangelio (Jesús hombre) del Jesús Dios. Se hizo Dios al hombre para ponerlo bien lejos y hablar en su nombre. El Jesús samaritano no interesa.
Pero ese Jesús samaritano sigue llamando la atención. ¿No puede seguir conectando con las aspiraciones y las esperanzas de la gente de hoy?
Gracias a Dios, tenemos la Teología de la Liberación, que es la Iglesia de los pobres. Díaz Alegría, que en paz descanse, dijo “Jesucristo sólo está en los pobres, y en ninguna parte más”. Criticó que estamos en una Iglesia de ritos y ceremonias. Que las monjas se callen, obedezcan, y se dediquen a los pobres y a la oración. Se ha perdido el mensaje del samaritano. La jerarquía nos atemoriza. Y en cambio, Jesús vino a curar a los enfermos, a dar de comer a los hambrientos, y a predicar la alegría y el gozo.
Esas luchas intestinas por el poder que vemos ahora en el Vaticano estaban ya en los Evangelios. Cuando la madre de los Zebedeos le pregunta a Jesús si sus hijos se pueden sentar uno a su derecha y otro a su izquierda, es que no ha entendido nada.
Algunos titulares
- Debemos reflexionar sobre hasta qué punto nuestra cultura es cristiana, o es una ideologización que nos ha dado la Iglesia
- Debemos plantearnos si esta Iglesia es la de Jesús, o no tiene nada que ver con él
- Si cogemos los Evangelios y vamos cotejando lo que predica Jesús con lo que predica la Iglesia, no se parecen en absoluto
- ¿Cómo desde la inmensidad de riqueza y de poder del Vaticano se puede predicar la pobreza?
- ¿Cómo, desde el punto de vista de esa autoridad tan omnímoda que detentan el Papa y los obispos, podemos hablar del Pueblo de Dios?
- Juan Pablo II y Benedicto XVI, que no son tontos, han visto que por la línea del Vaticano II se acababa la Iglesia institución
- El poder está reñido de manera consustancial con el Evangelio
- La Iglesia es una institución per sé perversa
- La Iglesia como institución encarna todos los defectos que criticó Jesús en la religión de su pueblo
- Jesús no tuvo intención en absoluto de crear una Iglesia, sino un movimiento de buenas personas
- En el fondo, yo creo que la Iglesia no ha tenido nunca fe en sí misma, en su mensaje
- Rouco Varela explota muy bien la confusión que identifica a Cáritas con la jerarquía
- Ya no se predica el Evangelio, sino lo que dice Benedicto XVI
- El Evangelio de Jesús está siendo maltratado por los mismos que tenían que ser sus defensores: la Iglesia oficial
- El verdadero cristianismo no tiene por qué etiquetarse
- ¿Cómo puedes decir que crees en Dios, a quien nunca has visto, si al hermano que tienes ahí no le haces caso?
- Los obispos no sirven al Pueblo de Dios: se han puesto delante y encima
- A Jesucristo lo han hecho Dios para echarlo bien lejos y que no moleste
- No hay salvación para la religión como dominación
- Si Dios no ha hablado nunca, ¿cómo hablas tú en nombre de Dios?
- Al igual que tenemos las Bienaventuranzas, tenemos las maldiciones de Jesús hacia los sumos sacerdotes
- Si todo poder es malo, el poder religioso es todavía peor, porque te mete el miedo y la coacción en tu propia conciencia
- ¿Cómo dice el señor Rouco Varela que si la Iglesia tiene que pagar el IBI a lo mejor Cáritas se resiente? Desde un punto de vista cristiano, eso no se pude ni plantear
- Se hizo Dios al hombre para ponerlo bien lejos y hablar en su nombre
- Gracias a Dios, tenemos la Teología de la Liberación
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Para ver y oír a Paco Asensi: Vídeo de la entrevista.
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Pido disculpas por mis errores y debe decir: “amarás a tu Dios con todas tus fuerzas” y “y lo que sigue es una consecuencia del amor a Dios”” gracias vale
Gracias Gundin por tu interesante comentario al mío…No cabe duda de la validez de lo que cuestionas…Sin embargo, el propósito esencial de la venida de Cristo fue el mostrar con claridad el camino hacia el Padre..un camino que trasciende esta vida….y salta hasta la eterna..En último termino el mensaje salvífico de Cristo es la esperanza que constituye para nosotros la vida despues de la tumba..puesto que esta vida es bien breve y pasa con rapidez…Por eso a la pregunta del joven rico que quería entrar en “la vida” Cristo le responde escuetamente que guarde los mandamientos y los enumera…Se refiere a los mandamientos de la Ley y es el orden lo mas importante…y no la cantidad pues el primero de todos es “amarás de tu Dios con todas tus fuerzas” y lo que sigue es una consecuencia que el amor al prójimo…pues Dios tuvo que amarnos primero a nosotros para que nosotros podamos despues amar a los demás…y Cristo mismo afirma que “no penséis que vine a DESTRUIR la ley o los Profetas: no vine a DESTRUIR sino a DAR CUMPLIMIENTO”..”porque el que quebrantare uno de estos mandamientos mas pequeños será considerado el mas pequeño en el REINO DE LOS CIELOS”(Mateo 5, 17-20)
Por lo tanto SI que es importante esta vida con sus problemas sociales y politicos porque esta ordenada a la otra vida que es de naturaleza escatológic0-espiritual..que trasciende la de aquí ya que el verdadero reino de Cristo se realiza plenamente en la otra vida, en la eterna ..Por eso le dice Jesus a la pregunta de Pilato: “¿Que has hecho? Y dice: “Mi reino no es de este mundo. Si de este mundo fuera mi reino, mis ministros lucharían para que yo no fuera entregado a los judíos (para matarme)..PERO mi reino no es de aquí” (Juan 18 36) (Los paréntesis y las mayúsculas son míos)..Y asi Cristo le sale el paso a la filosofía existencial materialista que se queda solo en la existencia terrestre y prescinde por completo de la escatología cristiana verdadera.
Y es por eso, tambien, que le dice Cristo a Marta la hermana de su amigo Lázaro: “Yo soy la resurreccion y la vida; quien cree en MI aunque MUERA, vivirá” (Juan 11, 24)..Si el mensaje de Cristo fuera puramente existencial EL no hubiera pasado de ser uno de los profetas olvidados de Israel…pero la controversia de Jesus ha consistido en su MENSAJE por el que nos llama a participar en la verdadera vida que es la del Padre, del Hijo y del Espíritu a la que todos estamos llamados, ya que nuestro trabajo de amor, junto con nuestros hermanos en esta vida, consistirá en alcanzar este supremo y ultimo gol, meta ultima de nuestra felicidad..a la que desde nuestro nacimiento hemos sido dirigidos y a la que de una u otra manera llegaremos algun dia….un saludo cordial de Santiago Hernández
Se puede ser ateo, se puede estar indignado, se puede ser fontanero, se puede creer que los que no nos hemos salido ya públicamente de la Iglesia (aunque hayamos renunciado a ciertos estatus en ella) estamos haciendo el juego a la institución… pero no es necesario escribir una retahíla de palabras soeces que no añaden sino que quitan valor a las propias ideas. Y de cualquier foro que quiera un diálogo libre pero educado deberían desaparecer.
No borro el comentario anterior de Pepe Sala pero declaro no gratas a Atrio expresiones como estas: “el jodido Espiritu Santo”, “el jodido evangelio”, “ putos cardenales, obispos y demás morralla social”, “puta catedral”, “cerdo cardenal”…
Y por otra parte es injusto hacer generalizaciones. Como las de quienes quieren atribuir a todos los socialistas o comunistas las purgas o los gulags de Stalin. Aquí, en este país, desde hace muchos años, ha habido parroquias y catedrales que han acogido a huelguistas, que les han tenido incluso varios días encerrados en ellas, no sólo no llamando a la policía sino resistiendo la presión de la misma. Yo lo he vivido y doy fe de ello. Y me siento herido por generalizaciones injustas.
Lo cual no me impide que sea hipercrítico, que esté indignado y muy profundamente herido por esas actitudes de algunas jerarquías (muchas por desgracia hoy) de mi iglesia, la iglesia o movimiento de creyentes en lo profundo del hombre y de la mujer con Jesús de Galilea, y, por trasmisión histórica biográfica, como apellidos de familia no elegidos, la iglesia católica (ICR) en la que hay de todo (como muy bien decía Honorio Cadarso en otro hilo) pero en la que cabe la autocrítica y la radical disidencia.
Autocrítica y disidencia auténticas, no oportunistas y tampoco ingenuas, frutos de una madurada reflexión a lo largo de una vida y de una opción estratégica por lo que más puede servir a la liberación humana colectiva.
Eso es lo que siento y digo. Pero acepto opiniones y propuestas operativas en contra, claro está, sin que sea necesario emplear insultos y descalificaciones para ello.
Desviandome algo del hilo -en el que no tengo mucho interés-, pero por aclarar mis confusiones despues de leer el comentario de Santiago.
Dice este que “…. si queremos entrar en la vida -sea lo que eso fuere- guarda los mandamientos….”. Y digo yo que de los diez mandamientos siete son normas sociales, deberes sociales con el prójimo de ahora y aquí; y sólo tres son deberes para con Dios, pero no deberes de ultratumba, sino de ahora y aquí. Todos esos deberes podrían -o no- tener consecuencias de ultratumba, pero no esperaban a ella. Nada escatológico, pues.
Lo cual veo contradictorio con el resto del comentario de Santiago, que resume en decir que “….no fue un mensaje político ni social….”, pues aunque entiendo que no fue partidario -y aún esto hay que hilarlo más fino- si que fue socio-político.
Cuando Santiago dice que “Cristo no fue un mero reformador social, sinó que “vino a buscar el sentido a la Ley…” supongo que se refiere a la id. Mosaica y esta es -me corrijan si estoy confundido- sobre todo un prolijo y detallado conjunto de normas de convivencia social e higiene personal para hacer la vida aquí y ahora mejor y soportable a los israelitas, que traian unos hábitos de ¡vaya por Dios!.
Id. id., ¿cómo que “Su transcendencia -del mensaje de Jesús, según creo- consiste pues en Su mensaje escatológico…”?. Es que yo no veo la escatología que pueda haber en el nuevo mandamiento, ni en el sermón de la montaña, ni en la frase “dadles de comer ahora”, etc.
Y así sucesivamente….
hoy el Opus no es lo que fue.
ya no se producen esas persecuciones a quienes se abren. ya no les persigue acusándolos de delitos sexuales, de lesbianas.
hay como un cuidar las formas.
nos encontramos, me parece, ante una organización “correcta” de este sistema. poco más, me parece.
una organización conservadora, que se maneja muy bien dentro del neoliberalismo, o dentro de cualquier estructura de derecha o centro derecha, discretamente.
“está todo bien”.
la pregunta es : ¿qué tiene que ver esta organización con el mensaje de Jesús?
el mensaje,¿ no es para la liberación/salvación de los pobres? ¿ ¿el anuncio a los pobres no es el signo del advenimiento del reino? ¿el advenimiento del reino no es la presencia del mismo Jesús entre nosotros?
quizá, el opus, como grupo inteligente, esté lejos de los escándolos de otrora, de los exabruptos de josemaría, como las admoniciones a tapia, por ejemplo. quizá haya cambiado radicalmente de look.
la pregunta también es : ¿dónde tioenen su corazón? ¿usan el cristianismo para su “negocio”?
lo que , acaso, no puedan ocultar bien es cómo se fue gestando la beatificación del padrecito. parece, según Ynfante que la obra se hizo cargo o tyuvo que hacerse cargo de las finanzas del vaticano después del escándoo ambrosiano/marcinkus. a cambio, según una lectura “material”, digamos, fue la beatificación. líneas generales.
-también abre un debate sobre el sentido de las beatificaciones. ¿no son acaso , los santos ejemplos a seguir? ya sabemops que gracias a Dios, todos somos o devendremos santos, otra cosa es beatificar a semejante pedrecfito por lo que hizo en esta tierra: ¿no era su obra una empresa de clara acumulación de riqueza y sobre todo de poder? ¿no se idolatraba su perrsona? ¿no se sacrificaba cualquier cosa en pos del objetivo? ¿qué se hacía con la “disidencia”? ¿¿anunció jesemría una esperanza para los pobres, para la nueva humanidad, fue un signo de los tiempos? ¿le predicó a franco? ¿qué le predicó? ¿cómo había que predicarle? ¿qué papel socio-histórico jugÓ en la españa franquista? ¿denunció por ejemplo, las torturas? ¿no són éstas preguntas que deben formularse a un posible “santito”?-
hace unos años, también, hubo un debate en el deaparecido diario egin sobre el opus.
el desencadenanate, creo recordar, fue la sencilla aseveración de Jesús Lezaun: “el Opus no es cristiuano”.
Cada cual puede estar en el colectivo que mejor le convenga, Honorio, y cada cual debería ser respetado por ello.
Pero lo que se debería tener más claro es la clase de colectivo que se elige pertenecer. Mal está pertenecer a un colectivo terrorista, asesino si no se tiene conocimiento expreso de que tal colectivo lo es. No se puede admitir que, después de tener perfecto conocimiento de las actividades del tal colectivo, se siga la filosofía del avestruz para evitar CONVERTIRSE.
En otro hilo te he leido que tanto el comunismo como el fascismo tienen las mismas raices. Efectivamente, las raices de ambos son CATOLICAS-APOSTOLICAS-ROMANAS.
Y del mismo modo que el Vaticano practicó la insidia y el engaño cuando el poder lo ostentaban los jesuitas, en la actualidad son los del Opus quienes tienen la sartén por el mango y han empeorado ( si es posible empeorar las formas de actuar del Vaticano) la situación respecto a la sociedad mundial.
Posiblemente no llegaríamos a un acuerdo de mínimos si entrásemos en un debate histórico sobre lo que afirmo. Por lo tanto, con la intención de que, al menos, no sigas en el desconocimiento del colectivo en que te sientes tan a gusto ( y para mi es tan difícil de entender) te proprociono un poco más de información que requiere tomarse muy en cuenta para saber ” con quien te juegas los cuartos”.
http://www.centrorey.org/catolicismo/cat_14.html#lci
( recuerda lo de la verdad de Agamenón o de su porquero)
De nada…
No existe tal experimento..Cristo es un revolucionario del espíritu y por ende de las almas..Vino a buscarnos y rastrearnos y alcanzarnos….para que revelándosenos,le encontráramos y no tuviéramos ya “mas sed” pues el nos daría un agua que “salta” hasta la vida eterna..c
Su trascendencia consiste pues en Su mensaje escatólogico, en lo humano si y con el atract ivo de su Persona, pero sobre todo,espiritual y que traspasaba la frontera de la tumba…pues no fue un mensaje político, ni social…Cristo no fue un mero reformador social sino que vino a buscar el sentido a la Ley promulgada por Dios desde hacía siglos para todos los seres humanos…y no vino a destruir la Ley sino a completarla, buscándole su verdadero sentido que está profundamente anclado e impreso en el corazón y que el fue descubriendo poco a poco…Un sentido de misericordia y amor, muy lejos de la moral farisaica de su tiempo….
Los Apostoles preservaron esta doctrina y nos la transmitieron en la iglesia, a la asamblea del Pueblo de Dios…Poco importa que yo sea Papa, Obispo, Diácono o simple fiel…Todos estamos bajo la Ley del amor de Cristo que es exactamente la del Padre…pues si queremos entrar en la Vida…”guarda los mandamientos”…y si deseamos mas,podemos seguir mas cerca a Jesus…cumpliendo sus consejos..pues Jesus es “manso y humilde de corazón”…Poco importa que yo viva en un palacio o en una chabola, poco importa que posea o no posea bienes, que sea una persona importante o totalmente desconocido en el mundo..LO importante es el “uso” que yo le doy a mi vida…Puedo ser un filántropo millonario que use mi dinero para remediar el hambre que me rodea o puedo ser un pobre que haga imposible la vida de los que me rodean…Lo importante es que yo “agarre” el camino que Cristo me trazó y el camino mejor fue el que ha preservado la iglesia(“el sensus fidelium” ) ha traves de los siglos hasta el siglo XXI..La decisión no es colectiva, sino personal…El mensaje de Cristo esta ahí en espera de nosotros pues es una decision completamente nuestra y completamente libre….un saludo cordial de Santiago Hernández
Honorio:
No siempre “convertirse” significa ¡romper! con todo y todas las personas que siguen adelante según su “conocimiento” de la iglesia y su actuar.
Para mí supone, asumir el cambio, y caminar de manera coherente con el.
Por supuesto, no comparto comportamientos de ciertas comunidades regidas por personas que de tal forma deterioran el Mensaje de Jesús, que participar (aunque respete a las personas que les sigan) me parecería una hipocresía, y un mal ejemplo a seguir.
mª pilar
En realidad, este hilo no trata propiamente del Opus Dei, sino de la Iglesia Católica como institución que Jesús no pretendió crear y que ha traicionado el mensaje de Jesús, e incluso lo está combatiendo en estos momentos y quizá a lo largo de su historia.
Acabo de leer también el comentario 4 al evangelio de Marcos, que tal vez, si no lo he entendido mal, abunda en planteamientos muy similares. Aquello, por ejemplo de que “no se puede echar el vino nuevo en odres viejos” ni “remendar un vestido viejo con un paño nuevo”.
De acuerdo, podríamos todos quizá coincidir en posicionamientos como los que se nos sugieren en ambos hilos. O tal vez podríamos aventurar que Juan XXIII hizo bien en plantear con su pequeña semilla del Vaticano II el principio de una autocrítica de la iglesia que la sacase del atasco en que vivía en aquel momento y en el que vive hoy. ¿O tal vez debió colgar los hábitos y situarse fuera y en contra de la iglesia católica?
No me interesa en absoluto liberarme yo solo de ataduras y esclavitudes injustificadas. Me siento miembro de un colectivo en el que figuran todos los seres humanos, y camino con todos mis hermanos por el desierto hacia la Tierra prometida. Considero que debo pensar por encima de todo en que el pueblo entero, y yo como parte de él, lleguemos a esa Tierra que llaman libertad, la Libertad de los hijos de Dios.
Aislarse, desmarcarse de la comunidad, hacer la guerra por su cuenta, tiene sus ventajas y sus riesgos. Jesús no rompió del todo con su pueblo y con las instituciones que lo conformaban. ¿O sí?
Llámenme como quieran, pero tan unido como me siento con Luther King, con Gandhi, con Suu Kyi, con todos los que han luchado por un mundo más justo, el que Jesús denominaba Reino de los cielos o Reino de Dios, me siento también unido con las gentes que siguen yendo a la iglesia todos los domingos y con todos los hombres y mujeres de buena voluntad a los que tal vez les falta valor para ser críticos y condenar todo abuso de poder por parte de los que gobiernan a la Iglesia católica. Y trato de avanzar con todos ellos en bloque hacia esa Tierra prometida de la que les hablo…
el libro de maría del carmen tapia se llama tras el umbral. impresionante. recuerdo, sobre todo las admoniciones…lega a tratársela de puta.
en you tube se puede ver la clave de balbín, allá por el 78 ó 79…está moncada, Ynfante y miguel fixás, uno de los primeros, hay que oirlo… en un momento dice algo así como …”allí no había ni pobres ni nada…” también comentar -creo dice tapia- los casos de suicidios en la obra. ella misma estuvo a punto.
me gustó mucho el libro de su sobrino, albás…lo cuenta desde dentro.
también el de maría angustias moreno, la primera ·disidente” en la sección española…aquellas persecuciones de a dos curas…la amenaza del delito sexual…que si lesbiana…una joyita. como decía el otro día, vaya antitestimonio, madre mía!
Ah y si quieren reirse un poco, el librito de patxi larráinzar (pega pero escucha…de editorial txalaparta.
fuerte abrazo y seguimos. osvá.