En Atrio repetimos por activa y por pasiva las críticas al culto eucarístico y a la Misa. Críticas que se hacen especialmente duras o quizá se convierten en un silencio total frente al culto eucarístico que se nos sirve desde costumbres como la Adoración Nocturna, el culto al Sagrario, o tal como nos viene de la tradición castellana de los autos sacramentales, y de la fiesta del Corpus que se celebrará el próximo domingo (mañana jueves en sitios que conservan la tradición antigua por se fiesta local). Todas esas formas de culto se nos presentan como un viejo fósil sin demasiado sentido, en las que el aspecto cultual y ritual anula totalmente el sentido de banquete y de fraternidad que Jesús quiso darle. Algo así como una peregrinación de El Rocío en la que el objeto de adoración no es ya una imagen, sino un trozo de pan ácimo engastado en una gran obra de orfebrería en oro y piedras preciosas.
Invito a los atrieros a recuperar y, si les parece bien, a reinterpretar y releer en clave siglo XXI, uno de los himnos eucarísticos que creo que hemos heredado de Tomás de Aquino o de algún poeta medieval, y que habrían permitido a nuestros poetas del siglo XVI encontrar el verdadero sentido de la Eucaristía y hoy serían útiles para los pensadores y creadores de una nueva liturgia del banquete eucarístico.
El himno al que me refiero empieza con estas palabras: O sacrum convivivium (“Oh sagrado banquete”). No debería haberse perdido ese sentido de banquete tan esencial en la intención de Jesús que queda expresado en esta expresión. Tal como hoy se hace, incluso después del Vaticano II, la Misa es primordialmente un acto cultual en el que prevalece el sentido sacrificial sobre el de banquete, en el que el alimento queda reducido a la más mínima expresión de un trozo de pan ácimo, y la fraternidad a un tímido apretón de manos con el vecino. Pero de esto, de la necesidad de darle a la Misa un carácter de comida y encuentro entre hermanos, ya se ha hablado en Atrio por activa y por pasiva
De todos modos, y a la luz del conjunto del mensaje evangélico, por ejemplo de las parábolas del Buen Pastor y de la Oveja perdida, es preciso subrayar el carácter universal de este banquete. Y este aspecto de universalidad creo que no lo señalamos con la debida fuerza e insistencia. La predicación al uso reclama de los fieles que asisten a la misa activar y reactivar el sentimiento de fraternidad y de comunidad con los que asisten a misa con nosotros, con todos los que viven en comunión con nosotros dentro de la iglesia católica…Esta es una visión muy raquíticamente evangélica, restrictiva, expresión de un egoísmo colectivo. La Eucaristía proclama solemnemente, gracias al Mandato del Amor que es uno con ella, la fraternidad universal, la llamada a reunir a toda la humanidad en un banquete fraternal. No puede entenderse una misa ni un acto eucarístico sin esa dimensión cosmopolita, sin esa toma de conciencia, sin ese dolor y nostalgia por la oveja perdida, por el rebaño desperdigado..
Para más INRI, desde que la Fiesta del Corpus Christi se ha convertido en el Día de Cáritas, se ha reducido el significado fraternal y universal de la misma a una contribución a las actividades “limosneras” de la Iglesia Católica, que es una de las formas de desvirtuar el mandato del amor fraterno. Porque justamente cuando la justicia pierde puntos en la convivencia humana aumentan las oportunidades de dar limosna; porque muchos que se dicen creyentes prefieren dar unos céntimos al pordiosero que pagar religiosamente sus impuestos y luchar por un mundo justo.
In quo Christus sumitur/ Recolitur Memoria/ Passionis Eius. (“Sagrado banquete en que uno se alimenta de Cristo mismo, se rememora su Pasión”). Volvemos a la lectura que se hace hoy y se ha hecho durante mucho tiempo según la cual la Misa es esencialmente la repetición del Sacrificio de la Cruz por el que fuimos redimidos de nuestros pecados. Pero quizá podría hacerse otra lectura de este verso medieval más de acuerdo con nuestra teología de hoy, quizá más de acuerdo con el que redactó este himno.
No es posible, no es cristiano referirse en esta cita a la Pasión histórica de Jesús bajo Poncio Pilato. Jesús es a todo lo largo y ancho de la historia de la humanidad el conjunto de personas que sufren, son torturadas, mueren. Con El morimos todos y pasamos por ese fracaso aparente de la muerte. Toda la humanidad forma con El un solo Cuerpo Místico, del que hablaba Pío XII. Y es esa Pasión universal, esa injusticia y opresión y explotación universal la que recordamos, lamentamos, y queremos vencer y superar. La Eucarístía es el culto y la veneración y la actitud de servicio hacia ese Jesús que sufre Pasión y Muerte todos los días, en mil lugares del mundo. Es el culto a las personas que condenan la injusticia, luchan contra ella hasta dar su vida en el empeño.
A lo largo y ancho de la historia, Jesús, que toma la figura de Suu Kii, la heroína de Birmania, de Nelson Mandela, de Martín Luther King, de Gandhi, de todos los que luchan por un mundo mejor, continúa su obra redentora, la misma que le llevó a la cruz. Y la Misa es un recuerdo y un homenaje a ese Jesús que sigue redimiendo al mundo hasta el fin de los siglos. No, yo creo que no es necesario borrar de la Misa el esntido sacrificial y redentor, se trata de interpretarlo más de acuerdo con el mensaje del evangelio.
Mens impletur gratia. (“La mente se llena de gracia”). Séanos permitido reinterpretar el concepto de gratia que tantas veces se ha interpretado como un “estado” por otro más dinámico y militante. Los niños son estimulados y cogen fuerza con las espinacas de Popeye, los atletas con estimulantes, anabolizantes y otros productos químicos en la frontera entre la ortodoxia y la heterodoxia alimentaria. La Eucaristía es ese reconfortante que centuplica nuestras energías y nuestros ánimos para la lucha por el Reino de Dios, tanto por el alimento que tomamos juntos, como por la presencia sentida de Jesús entre nosotros, como por el impulso que nos da la unidad con nuestros hermanos.
Et futurae gloriae/ Nobis pignus datur. (“Y se nos da una garantía de la gloria futura”).
Y van los predicadores que se limitan a repetir el disco rayado de varios siglos y nos espetan la promesa del cielo más allá de la muerte, la solución al fracaso de esta vida antes de la muerte con la otra vida más allá de la muerte, en un nivel y con un tratamiento puramente individual, al margen de todos los demás.
Pero una visión siglo XXI de ese garantía de la futura gloria tiene mucho que ver con la esperanza de que “otro mundo es posible” también en esta vida, de que la humanidad entera comos un colectivo que caminamos hacia la liberación de la injusticia y la explotación del hombre por el hombre. La Eucaristía es promesa y fianza y seguridad de una esperanza firme y segura, contra toda esperanza, en un futuro positivo..
¿Por qué desde el Renacimiento hasta aquí no ha sido capaz el pensamiento cristiano de reivindicar esa dimensión humana, ese perfil humano de la Misa? ¿Por qué la Iglesia de hoy parece incapaz de reencontrarse con ese sentido de la Misa que nos han definido así ya desde la Edad Media?
NOTA DE ATRIO: Sobre la historia de la instauración de la fiesta del Corpus en la Edad Media, con fuerte participación laical y sentido social, véase esta artículo:
- A propósito del Corpus Christi. Eucaristía y solidaridad con los pobres. Daniel IZUZQUIZA, SJ. Revista Sal Terrae, junio 2007, 523-530. En el texto que reproduce ATRIO faltan las notas. Pero es muy interesante cómo el autor explica el nacimiento de la fiesta por las calles, dentro del movimiento místico-social de las beguinas de Lieja, siendo después reconducida la fiesta como siempre por la tendencia ritualista de Roma.
NO SOLAMENTE Dios nos dio el don unico de la existencia, sino que quiso crearnos en libertad…creando esa libertad que tanto apreciamos tuvo sus riesgos..pero parece que, para EL , fue mejor que existieramos que no existieramos, que fueramos libres, en vez de ser meros robots, esclavos de la voluntad de otros..Esta es la esESTRUCTURA de nuestro mundo que a veces nos es dificil de aceptar…sin embargo, nosotros NO somos Dios…sino que fuimos creados, empezamos a existir en el tiempo, por eso somos seres contingentes y limitados..PERO tenemos, al menos, que agradecer el haber podido venir a este mundo y tener la capacidad de poder decidirnos a amar
POR ESO pienso que solo entienden el don eucaristico los que pueden, de verdad, amar..puesto que el regalo, es la misma presencia del Amor, que, como comentabamos ya, es triple: presencial real, presencia mistica y presencia comunitaria…Es dificil, pero no imposible, entender este don…pero Dios escogio nuestra misma humanidad, al asumirla EL mismo, para dar la muestra mejor de este amor: que es dar la vida, sacrificio voluntariamente aceptado, y, por ende tambien permitido en libertad, por sus hijos y por sus amigos que somos todos nosotros los humanos…Y en la mayoria de los casos somos nosotros mismos, el Pueblo de Dios, a traves de los siglos, los que construimos las inmensas catedrales y las adornamos con acabado arte, como para corresponder a este infinito amor del Padre, palpable desde el momento en que nos dimos cuenta de que existiamos y que debiamos amarlo a EL y a todo lo que EL ama..Simplemente, en eso consiste el don y la gracia….un saludo cordial de Santiago Hernandez
Si un banquete no quita el hambre y la sed, no cumple para nada aquello que da pie a ese banquete, hoy las eucaristía no es que no quite hambre y sed, sino que más bien los fomenta porque sales de mala “hosti” por cuanto de viejo y arcaico es toda esa parafernalia.
Sin decir que quienes están celebrando un sacrificio de D*s en la vida y cuerpo de Jesús no hacen más que blasfemar, porque D*s es dador de vida, en todo cuanto encierra esta palabra: fiesta, alegría, pan, agua, perfumes, traje, y anillo como símbolo de alianza con D*s.
Celebrar la muerte y resurrección de Jesús como algo que D*s ha preferido o no ha evitado, porque todo lo puede, y de ahí quedarnos con la copla de que esos sacrificios son los preferidos para hacernos hij*s, es algo ruin y malévolo, es aplicar el mal para obtener un beneficio propio, cosa que es lo que se hace muy a menudo y lo cargamos en los hombros de D*s.
Nada puede haber, que a la persona enferma, hambrienta, o que esté pasando por algún trance, le reconforte y de vida más que la calma de su enfermedad o dolor sin que tenga que pasar a ser el chivo expiatorio para que D*s crezca a costa de…
El movimiento de las Beginas, llamadas mujeres sabias, fue un trabajar para quitar el dolor, cuidar sus almas en saber expandir sus conocimientos a la ciudadanía… Esto sí que se puede dar como pan de vida, recoger como la exaltación de de un banquete que no se cierra a nada, y reconmemora a aquel convite que Jesús hizo…
Pero claro de aquellos trozos de pan en la calle, nos quedamos con los ricos y untuosos centros de oro y plata donde la “iglesia” se muestra como la más poderosa, aquel queu brilla más que el sol ¡el oro! de los baales.
También es fácil saber como acabarón estas mujeres, en total silencio y en total descrédito y en las HOGUERAS DE LA ICAR, las brujas como Margarita de Poréte que por no desdecirse murió como lo hizo Jesús al seguir diciendo que él era hijo de D*s, y que como tantas hoy seriamos quemadas si tuviesen aquel poder que hoy no tienen, porque Yo, Soy Hija legítima de D*s como lo son todas mis hermanas, las que me precedieron, Eva, Mª Magdalena, Hidelgarda, Margarita de Poréte, Sor Ines de la Cruz, las Grandes Teólogas y Místicas actuales.
Todas y cada unas de las que nos sentimos así, ayer y hoy, sin que necesitemos el permiso de NADIE.
Pero también sería ya necesario que recibiésemos, todo los bienes que se nos confiscó por parte de la ICAR, a lo largo de la historia, NUESTRA HISTORIA, ya sea material o espiritual, aunque, esto es pedir “peras al olmo”
Pero desde luego, no dejaré, de pedir que devuelvan “NUESTRA HISTORIA ROBADA” Y NUESTROS PATRIMONIOS, como hicieron con el de las BEGINAS, pues eran mujeres muy ricas y con un gran patrimonio, este fue el motivo por el cual fueron JUZGADAS POR BRUJAS… EL PARNET, MALDITO DINERO, que fue muy bueno para hacer un dios de oro y plata y pasearlo por los sepulcros blanqueados de las grandes ciudades, ¡TOLEDO! y las grandes calles de los Señores ladrones.
A Honorio Cadarso:
He disfrutado mucho con este escrito tuyo y con la que has desencadenado en la riqueza y variedad de los comentarios. Como expresé en reciente ocasión mi dolorido estado respecto a otro tema, te expreso ahora mi agradecimiento por éste.
Nada que añadir a los comentarios tan ricos, como digo, que has suscitado. Sólo la indicación de que ya hay en bastantes iglesitas sacerdotes que desde la sencillez, saben decirte que “la Eucaristía no es para que seamos buenos, sino para amarnos”, que “venimos a juramentarnos en la sangre de Cristo a que seremos los unos parte de los otros”, que “aunque seamos pocos estamos realizando el encuentro entre la humanidad doliente y Dios mismo”, que “Jesús no insttuyó la eucaristía para que le demos culto, sino para que nos amemos; aunque como le sabemos “presente” también le damos culto”….
Pero uno tiene la impresión de que lo que algunos de estos sacerdotes saben decir, serviría más para los que no van al templo (por lo tanto no les escucharán) que para los que están fieles en él (y ni caso). Uno los admira por su paciencia y desolada entrega, más que a los brillantes teólogos. Por eso mismo uno considera la importancia de foros como ATRIO, a pesar de que siempre se produce, aún sin quererlo, la empatía de unos y el alejamiento de otros…
Buen día a todos.
Pedro Chasco
Honorio, estoy de acuerdo con Izuzquiza de que debemos recobrar las 3 vertientes del misterio eucaristico: la realista, la mistica y la eclesial…El que estos tres aspectos no se deban separar esta claro desde el principio…como yo decia ya, el Apostol Juan y sus discipulos enfatizaron en su evangelio la presencia de Cristo personal y comunitaria..algo que estaba ya presente cuando Cristo prometio y quiso darse EL mismo como memorial de su Pasion y Muerte a todo el Pueblo de Dios..La presencia real de Cristo en la Eucaristia, el encuentro personal con EL y el contexto social como regalo comunitario, no cabe duda, que estaban ya implicitos cuando Cristo quiso “inventar” esta forma especial de su presencia, como un regalo para todos nosotros…cosa que se ha perpetuado hasta el siglo XXI…y que constituye la parte central del misterio de Cristo en la iglesia….muchas gracias Honorio por la reflexion…es de mucha actualidad y debemos profundizar en ella….saludos de Santiago Hernandez
Estimado Honorio
Alguien, no recuerdo quien en este momento (quizá Evdokimov?), preguntaba ¿por qué será que no hubo grandes disputas eucarísticas hasta después del Cisma, y éstas sólo han ocurrido en Occidente?
Es interesante plantearse las hipótesis de respuesta.
Saludos
“La Iglesia católica no abarca la totalidad del pensamiento cristiano”, dice Rodrigo Olvera. El artículo de Izuzquiza que nos citan al final del hilo presenta el debate en torno a la Eucaristía que se vivió en la Edad Media entre cátaros, v aldenses, o con el movimiento de las veguinas.
A veces la v erdad, la respuesta teológica más correcta, viene de ese terreno fronterizo de la Iglesia en el que se mueven herejes, heterodoxos, quizá también nosotros mismos en Atrio.
No hemos inventado gran cosa, seguimos la senda que nos marcaron los desechados por la iglesia oficial, con la diferencia de que al igual que ellos intentamos ser fieles a la mentalidad de nuestro siglo.
¿O no’
Vale, Oscar Varela, tú lo dices con palabras más enérgicas. Gracias.
El texto de Sal Terrae que añade Atrio al final, a mi juicio, no tiene desperdicio. Resulta que ya en la Edad Media se debatía en la iglesia el contenido de la Eucaristía como sacramento de unidad y solidaridad o como acto de culto desligado del mandato de la caridad.
Y resulta que la concepción como sacramento de unidad y solidaridad terminó por quedar relegada (valdenses, cátaros, movimiento de las beguinas…) a esaa imprecisa frontera entre la ortodoxia y la heterodoxia en la que nos movemos los de Atrio. Y Rodrigo Olvera, a mi juicio muy sbiamente, comenta que “la iglesia católica no abarca la totalidad del pensamiento cristiano”.
La verdad, la comprensión del evangelio, no es una línea recta que no se desvía ni a la derecha ni a la izquierda. A veces, la línea recta se queda vacía de contenido, y son los herejes los que llevan la luz adelante…
No somos nuevos ni recién llegados en la búsqueda del evangelio, otros nos precedieron muchos siglos antes
NO IMPORTA de donde vienen las injusticias sociales…El que defrauda el pan del que lo necesita, no se sostendra delante de la presencia de Dios…No vale que crea que recibiendo la Eucaristia esta en comunion con la iglesia…cuando falta a la esencia misma de ella, que es el amor….Por otro lado, la invitacion a estar
cerca de Cristo es UNIVERSAL…no se excluye a nadie…”Venid a Mi todos”…todos los cansados, los abusados, los deprimidos, los excluidos, los que sufren persecucion, los marginados, los inconstantes, los confundidos, los que odian, los amargados, los vengativos..etc. etc….Asi pues la esperanza que se nos ofrece supera todas las contrariedades de esta vida, sin importar lo que los otros hagan…es una esperanza cristiana que trasciende todo…ya que a la larga todo lo de esta vida, al fin y al cabo, se acaba, es efimero, desaparece, cambia y no nos llena por completo..En Cristo tendremos una esperanza que no se acaba…que salta hasta la eternidad…El mismo lo dijo…un saludo de Santiago Hernandez
Es importante no olvidar algunos pequeños detalles, el primero es que Jesús estaba sentado alrededor de un monton de cabezas duras, la mayoria triunfalistas, más de uno traidores y en el mismo momento en que le ofrecia el pan a Judas, este salio para entregarlo, es decir el Jesús, su vida, su presencia, (porque respeta la libertad humana), no impone fraternidad…pero si invita a vivirla…el pensar que su presencia se da sólo entre totalmente puros, justos y santos…es un fundamentalismo, que se desentiende de nuestra humanidad…y yo creo que además de un muchacho que se la veía venir, tambièn era Dios…con respeto por quien opina diferente, pero con mucha convicción por mi creencia…Un abrazo Gabriel
Si, de verdad, el cuerpo de cristo palpitara en esa forma, las celebraciones estuviesen llenas del espíritu o la ruah de D*s, y en suma, eaquel cuerpo ultrajado, apaleado y asesinado de Jesús, se obtuviese aunque fuese en una minúscula parte, hoy no estariamos hablando de nada, sino trabajando en lo que Jesús hizo y por lo que fue asesinado.
Lo demás son todo gaitas, para que el Gaitero mayor siga teniendo soplagaitas que engañan a la ciudadanía.
De ahí que seamo tod*s personas ¿Cómo dijo ese “señor” con vidas destrozadas?
Pues yo le pregunto, ¿”Señor” quienes participan y obtienen mayor beneficios de las vidas destrozadas, a costa de qué se destrozan vidas…?
La mierda la tiene tan cerca que no se huele los pantalones “Señor” sin destruir, ¡SEÑOR GRAN DESTRUCTOR DE VIDAS TERRENALES Y ETERNAS!
Hay que tener poca materia grasa para seguir ydecir ciertas cosas.
Y mientras tanto se paserán, bien pulidos los grande artilujios de plata y oro, para pasear un trozo de pan, o barquillo mientras nos siguen Robando el sueño con decretazos que nos roban el PAN QUE DA VIDA, de nuestr*s HIJ*S.
Hola!
Dos afirmaciones de honorio:
* “En Atrio repetimos por activa y por pasiva las críticas al culto eucarístico y a la Misa”
* “el aspecto cultual y ritual anula totalmente el sentido de banquete y de fraternidad que Jesús quiso darle”
———
OK a la 1a. afirmación
OK a parte de la 2a.
No estoy convencido de eso de “BANQUETE” (symposio);
y lo de “FRATERNIDAD” no estoy muy seguro.
Estimo que ambas cosas son un ¿legítimo? agregado cultural.
…………..
Prefiero la interpretación siguiente (nada peregrina ni de mero antojo, creo)
Cuando un tipo de las agallas como este Jesús
que la viene masticando desde muchachito laburante de pueblito laburante
“se la ve venir”
es humano reunir-se con algunas Cumpas
para contarles lo que le pasa y le va a pasar …
… porque ha decidido:
* “poner TODA la CARNE en el asador”
* “poner las Bolas sobre la Mesa”
* “no apartarse de la güeya aunque vengan degollando”
* “jugase a todo o nada”
* “darle con alma y vida”
* “PONER EL CUERPO”
————-
Acá hay todo un problema en torno a la HEROICIDAD,
que se refiere al:
* QUÉ TENEMOS QUE HACER
y
* CÓMO y CUANDO TENEMOS QUE HACER, ESO QUE HAY QUE HACER.
Jesús no era un pendejo cuando HIZO LO QUE “ÉL” TENÍA QUE HACER.
¡Vamos todavía! que hay ese “algo” que cada uno sabe que tenemos que hacer
¿no te parece? – Oscar.
Honorio, gracias por tu artículo…siempre me ha impresionado como se celebra (o se celebraba) la fiesta de Corpus Christi en España porque se palpaba en las calles algo verdaderamente solemne….Sin embargo, mas que reinterpretar lo que es el CENTRO de la vida cristiana, que siempre se desarrolló en torno a la Eucaristia..y como yo quiero ir siempre a las fuentes y a los orígenes porque es lo mas seguro, no hay que salirse de lo que creian los primeros cristianos sobre este “pan de vida”..y asi Lucas, el medico interesado en recoger con fidelidad los pormenores de la predicacion y el mensaje de Cristo con toda minuciosidad y precision (lo dice el mismo en el prologo de su evangelio) nos narra como nuestros primeros hermanos en la fe procedian en el principio y refiriendose a los que creian en Cristo dice: “Y PERSEVERABAN asiduamente en la DOCTRINA DE LOS APOSTOLES y en la comunion, EN LA FRACCION DEL PAN y en las oraciones..y se obraban muchos prodigios y señales por medio de los APOSTOLES en Jerusalen”( Hechos 2-42-43)…”Ellos, pues, acogiendo su palabra (la predicacion de Pedro), fueron bautizados; y fueron agregadas en aquel dia como unas 3 mil almas” (Hechos 2-41) (los paréntesis y las mayúsculas son míos)
Por otro lado, Juan y sus discipulos captan en su momento certeramente esta otra dimension eucaristica y sabiendo que la fe de la iglesia era ya EUCARISTICA, como la tradicion apostolica narrativa de Marcos, Mateo, Lucas y Pablo habian recogido, ENTONCES, explica el verdadero significado de esta identificacion con Cristo al “comer” su cuerpo que es la praxis del amor: “EL DIA antes de la fiesta de la Pascua..como hubiese amado a los suyos que estaban en el mundo, LOS AMÓ HASTA EL EXTREMO….y tomando un lienzo, ciñose con el..y COMENZO a lavar los pies a sus discípulos y enjugarlos con el lienzo con que estaba ceñido…SI PUES os lavé los pies, tambien vosotros debeis unos a otros lavaros los pies” (Juan 13-1 y sig.) (los parentesis y mayúsculas son míos) “ESTE es el mandamiento mío: que os améis unos a otros, así como os amé” (Juan 15-12)…ASI PUES, no podemos separar las 2 cosas ya que no podemos separar al amor…ya que SON una misma cosa…Y ES POR ESO QUE nos acercamos mas a esta llama inscandescente en la Eucaristia,…. para llevar este mismo fuego de Cristo a nuestros hermanos,,cumpliendo asi exactamente el mensaje nuevo que nos vino a traer Jesus, como dices tu, Honorio, fuente de esperanza futura, capaz de salvar al mundo de su total naufragio y aniquilamiento…un abrazo de Santiago Hernandez
Me voy a permitir, tomar las palabras de alguien que por estos lados, respetamos y valoramos muchisimo…que refleja mi modo de vivir la Eucaristia…
”
«El pan que partimos, no es la comunión del cuerpo de Cristo? Uno es el pan y por eso formamos todos un sólo cuerpo, porque participamos todos del mismo pan» (1 Cor 10, 16- 17).
La revaloración de la íntima relación que existe entre la eucaristía y la Iglesia es uno de los grandes dones de la herencia del Concilio Vaticano II[3]. El adagio célebre de Henry de Lubac -«La Iglesia hace la Eucaristía y la Eucaristía hace la Iglesia»[4] es retomado por el contenido y en el mismo título de la encíclica de Juan Pablo II «Ecclesia de Eucaristía». El cardenal Carlos María Martini afirmaba: «La Eucaristía es la forma de la vida de la Iglesia»[5]. Tal declaración subraya el carácter sacramental de la Iglesia y significa su aspecto de comunión con el Señor y su dimensión de fermento de relación fraterno-sororal. La eucaristía recuerda siempre a la Iglesia su naturaleza de comunidad concreta, asamblea reunida, como expresa su mismo nombre: Ekklesia, asamblea convocada por Dios acá y ahora, como sacramento de comunión universal de todo pueblo de Dios. Aunque en los últimos siglos la Iglesia Católica conozca la «misa privada», con el Vaticano II la conciencia eclesial pasó a comprender que toda eucaristía es de hecho comunitario. La construcción de la comunidad supone de cada participante una buena dosis de don de sí mismo y ofrenda a los otros, por tanto de una dimensión eucarística que los cristianos aprenden y reciben del maestro Jesucristo.
En la plegaria eucarística segunda, la más común y conocida de las actuales anáforas de la liturgia latina, el presidente de la celebración ora así: «Tú nos consideraste dignos de estar en tu presencia y servirte». Es una alusión a la asamblea constituida como pueblo sacerdotal»[6]. Si pensamos en las primeras Iglesias, podemos decir que casi todas eran «comunidades de base», en el sentido de grupos mayoritariamente pobres y de relación más horizontal. Tenemos poca información sobre cómo la eucaristía marcaba estas Iglesias de los primeros siglos, pero, por los documentos antiguos, sabemos que la eucaristía estaba íntimamente unida al martirio. Los cristianos, celebraban la eucaristía en el túmulo de los mártires, desde el siglo II. En algunos casos, como el de los llamados «mártires de Abilene, en el norte de África, hubo cristianos que dieron su vida por no renunciar la celebración de la cena del Señor. Desde aquella época, muchas cosas han cambiado en las Iglesias, pero, en América Latina, las comunidades eclesiales de base (CEBs) han nacido en los años 60, inmediatamente después del Concilio Vaticano II, como expresión del programa propuesto por el Papa Juan XXIII: «Vuelvan a las fuentes de la fe y, al mismo tiempo, insértense en la realidad actual del mundo. Es importante observar cómo tal camino conllevaa profunda relación entre CEBs y Eucaristía. Es la historia y los desafíos de esta relación la que les invito ahora a recordar y a profundizar, brevemente. ” (fragmento de La Cena de la Vida- Eucaristia de las comunidades eclesiales de Base en América Latina del Padre Marcelo Barros) http://www.servicioskoinonia.org/relat/364.htm
RECOMENDAMOS LEER EL TRABAJO COMPLETO, EN KOINONIA.- Gabriel
Creo que no ha quedado claro un punto:
Si todo el que se mueve… no sale en la foto…
Para seguir trabajando, por un mundo mejor, se hace desde grupos y personas, que no hacen ruido y sí entregan su vida en ese esfuerzo.
mª pilar
Honorio amigo:
No toda la iglesia camina así; hay interpretaciones mucho más ajustadas a este siglo y fieles a la vida y palabra de Jesús.
Lo que sucede es, que caminan casi en silencio, en la diáspora, donde desde siempre, ha salido lo mejor, en el estilo de vivir de Jesús.
La cumbre y sus admiradores…
¡Es otra cuestión!
Con dolor, creo que jamás cambiará: precisamente, por el silencio que se guarda ante el temor de ser expulsados/as, condenados/as, apartados/as… y cuantas formas podamos imaginar, dejando así de trabajar por un mundo distinto, más justo, más humano, más auténtico; especialmente para los sufrientes y siempre apartados de toda posibilidad de cambio…
Ciertamente, cada día, percibo más dificultad para hacer cambios que lleguen a todos los rincones de la tierra, desde las cabezas pensantes… ¿en qué…?
Lo cierto es:
¡¡¡Que hay mucha Vida, como Jesús la intuyó y nos dejó como herencia, en todas las partes del mundo!!!
Y eso ¡Sí! es una Buena Noticia.
mª pilar
Hola!
Para mí la cosa está clarita:
“El CUERPO y la SANGRE de JESÚS”
lo traduzco a lo que hoy todos entienden
cuando se dice:
“PONER EL CUERPO”
Y no me parece andar tan lejos de lo que hizo el Galileo en su famosa “CENA”.
Me baso en los 3 anuncios previos de su “cantada” trayectoria final para un tipo como él:
* Traición / Entrega
* Prisión,
* Juicio “armado”
* y siguientes …
No hay que ser Mandrake para darse cuenta de que fue (y es) así.
¡Vamos todavía! – Oscar.
El divorcio entre liturgia y justicia (en Honorio) o entre liturgia y asistencia mutua en las necesidades concretas de la vida (a contraste de la descripción que hace Staniloae) no es una crítica menor, Jaume.
Saludos
Habiendo tantas cosas por reconducir y mejorar dentro y fuera de la Iglesia, no estoy de acuerdo en criticar la celebración del día del Corpus. Este día sencillamente celebramos lo que Jesús nos dejo ¡su propia presencia entre nosotros! (que no es poco) Así que dejemos las criticas, que en este caso entiendo son menores y celebremos este evento con jubilo y alegria
Prometo detenerme para no abusar, compartiendo este enlace
http://www.pro-ortodoxia.com.ar/index.php?option=com_content&task=view&id=109&Itemid=31
saludos
Perdón, el comentario era un matiz a esta pregunta de Honorio
¿Por qué desde el Renacimiento hasta aquí no ha sido capaz el pensamiento cristiano de reivindicar esa dimensión humana, ese perfil humano de la Misa?
Arriesgándome a ser fastidioso una vez más, vale la pena insistir en que la Iglesia Católica no abarca la totalidad del pensamientp cristiano.
Sólo con la intención de ampliar el espectro, porque quizá el siglo XXI como el siglo XI no es homogéneo. Esta es la descripción de la liturgia que hace Dumitru Staniloae, uno de los grandes teólogos ortodoxos de finales del siglo XX.
Notarán, sin duda, que va a contracorriente de la visión mayoritaria aquí en Atrio de que Dios no actúa ni interviene en las vidas concretas de las personas concretas. Quizá (es sólo una hipótesis) la falta de experiencia de la acción salvadora de Dios en la liturgia occidental explique la conceptualización posterior (la teología es una acto segundo) de que Dios no interviene. [Ojo, soy consciente de toda la manipulación que se hace de las “intervenciones” de Dios en grupos tanto carismáticos como neoconservadores. De ninguna manera las justifico ni minimizo]
Los creyentes no vienen a la Iglesia para escuchar un discurso teórico – ya se trate de una definición infalible o de varias interpretaciones aportadas por los teólogos- sino para recibir, en la oración, la fuerza salvadora de Dios. La comunión propia de la Iglesia no debe ser objeto de una contemplación estética o una especulación abstracta, sino que debe ser una ayuda mutua entre creyentes, fundada en la oración, por sus necesidades concretas, que son tan numerosas y variadas. Es una experiencia común de la presencia y la ayuda de Dios que se sienten gracias al calor particular de la oración que se realiza en el amor mutuo. Los creyentes rezan en común y los unos por los otros, haciendo así más fácil la experiencia de su unidad en Cristo y de la fuerza de Cristo […]
El culto de la Iglesia no es, pues, una alabanza que se dirige a un Dios encerrado en su trascendencia, que sólo se deja contemplar por el intelecto y olvida las necesidades de los hombres. Es la alabanza de las grandes obras de Dios, que da a los creyentes confianza en que Dios también tiene capacidad para actuar ahora, en este momento; en que Dios va a venir también ahora en su ayuda [….] El culto se preocupa intensamente por las necesidades concretas de los hombres. La salvación no se separa de la ayuda que Dios concede a los hombres en las distintas circunstancias de su vida, en las que realizan el bien y hacen crecer dentro de ellos las aspiraciones positivas […]