Optar por fomentar el espectáculo de las procesiones de Semana Santa y mantener los rígidos cánones del Código de D.C., es explosivo. En este ejemplarizador conflicto surgido en el Cañamelar (Valencia) todo me es entrañablemente conocido: la parroquia, el cura Polo, las cofradía, el arzobispo… Pero creo que debe discutirse en ATRIO. ¿Se atrevió Juan Pablo II a esgrimir el CIC para negar la comunión a Pinochet? ¿Se atrevería “Don Carlos” Osoro a negar la comunión a conocidas autoridades de Valencia por motivos semejantes? A.D.
Un párroco niega la comunión a una cofrade por ´vivir en pecado´ con otra
El cura del Rosario advirtió al presidente de la cofradía de que ella y otras tres personas homosexuales o separadas se abstuvieran de ir a comulgar. Dio el sacramento al resto de feligreses en la capilla después de la misa, para evitar el escándalo
IGNACIO CABANES VALENCIA. Levante EMV, 7-4-2011
“Humillada y dolida”. Así dice sentirse Pilar Gómez desde que el pasado sábado el párroco de la Iglesia de Nuestra Señora del Rosario -su parroquia de toda la vida- se negara a darle la comunión durante el acto de bendición del Jesucristo Prendido, cofradía de la Semana Santa Marinera a la que pertenece la mujer desde su fundación. “Me han negado lo más grande para mí, el sagrado sacramento”, lamenta Pilar, creyente y católica practicante.
El motivo de este desplante no es otro, supuestamente, que la inclinación sexual de esta mujer, separada y madre de dos hijos, quien actualmente convive con otra mujer. “Es una vergüenza que después de 52 años se me niegue ahora la comunión por estar viviendo con otra mujer bajo el mismo techo”, criticaba Pilar.
El cura en cuestión, José Polo, párroco de Nuestra Señora del Rosario, se ampara en el Código de Derecho Canónico, cuyo artículo 915 establece lo siguiente: “No deben ser admitidos a la sagrada comunión los excomulgados y los que están en entredicho después de la imposición o declaración de la pena, y los que obstinadamente persistan en un manifiesto pecado grave”.
“Órdenes de arriba”
La decisión del párroco no fue algo repentino y también afectaba a otras dos personas, también homosexuales, y a un separado. Así, según ha podido saber este periódico, el jueves de la semana pasada José Polo citó al presidente de la Cofradía del Prendimiento de Jesús del Canyamelar y le encargó que les comunicara a estas cuatro personas, miembros de la cofradía, que se abstuvieran de ir a comulgar el sábado siguiente durante el acto de bendición, ya que se negaría a darles el sacramento de la eucaristía.
“Dijo que habían dado órdenes de arriba, del Arzobispado, para que no se le diera la comunión a estas personas según marca la ley canónica”, explicó Hugo, presidente de la cofradía. Respecto al porqué ahora y no antes, si así lo marca el derecho canónico, el joven presidente añadió que la argumentación que le dio el párroco era que “con la imagen en el altar” no lo creía oportuno y que “su pecado era muy evidente”.
Cuando esto llegó a oídos de Pilar, la mujer solicitó una audiencia con el párroco de su iglesia. “Se reafirmó en que me iba a negar la comunión porque, según él, ha habido una denuncia pública”, explica Pilar. “No es porque seamos lesbianas sino porque vivimos bajo el mismo techo, diciendo que si dejamos de vivir juntas nos podemos curar”, según las explicaciones que el cura le dio a la mujer.
Reunión para convencerlos
El sábado, horas antes de que se celebrara el acto religioso de la cofradía en la Iglesia de Nuestra Señora del Rosario, la presidenta de la Semana Santa Marinera “telefoneó para convencernos de que no fuéramos a comulgar”, según reconoce Pilar. En torno a las seis de la tarde se reunieron con Begoña Sorolla, en un bar, las cuatro personas que, según el cura, no podían recibir el sacramento.
“Nos dijo que había hablado con un secretario del Arzobispado de Valencia y que querían que les confirmáramos que no íbamos a hacer amago de comulgar”, asegura Pilar. “Lo hicieron de forma estratégica, una hora antes, para evitar el escándalo”, añadió.
Tras esta conversación tres de ellos decidieron abstenerse de comulgar temiendo que “se les señalara con el dedo”. “Pero a mí no me convencen”, reconoce Pilar. De camino a la parroquia la mujer sigue dándole vueltas a la cabeza. “Dudo de lo que quiero hacer y al llegar a la puerta le pregunto a una mujer divorciada si ella iba a comulgar”, relata Pilar. “¿Y por qué no?”, le contestó ésta. Fue entonces cuando Pilar dejó a un lado su miedo y decidió que iba a recibir el cuerpo de Cristo como una creyente más.
La Iglesia de Nuestra Señora del Rosario, situada en la calle Rosario de Valencia, estaba llena hasta arriba para celebrar la misa y el acto de bendición de la imagen de la Cofradía del Prendimiento de Jesús. Según personas que asistieron a la celebración, había más de 400 asistentes, algunos de ellos en la calle por falta de espacio en el interior. Entre los presentes se encontraban cargos políticos y personas de distinta condición social.
Muchos de ellos se quedaron perplejos cuando después de la consagración el párroco que celebraba la eucaristía les informó que las personas que quisieran comulgar pasaran al finalizar la misa por la capilla. No obstante, nadie sabía realmente que la supuesta intención del cura era evitar un escándalo en plena ceremonia.
Una vez finalizada la misa, y con varias personas esperando para tomar la comunión, el párroco tardó hasta 20 minutos en salir a la capilla, según asegura Pilar. “No salía porque sabía que yo quería comulgar”, consideró. Finalmente, y después de dejarla la última, José Polo se negó a darle la comunión a Pilar, quien rompió a llorar. Su madre, que la acompañaba en ese momento, se negó a recibir el sacramento por el desplante a su hija.
Este periódico contactó ayer con José Polo pero éste se negó a dar argumentaciones sobre lo ocurrido y se limitó a decir: “De ese tema no quiero hablar”. Tras ello colgó el teléfono sin dar explicación alguna.
“Me han negado lo más grande para mí”
Pilar Gómez todavía está indignada por la humillación que vivió el pasado sábado simplemente por ser lesbiana. “Me atracaron hace dos años y no me robaron tanto como ahora”, confiesa esta mujer de 52 años. “Esto va en contra de los valores que he recibido desde niña”, se lamentaba. De hecho, fue precisamente en esta misma iglesia donde ahora le niegan la comunión donde la mujer recibió el sacramento del bautismo, tomó su primera comunión y bautizó a sus hijos. “Desde hace años se sabe que hay gente que vive en pecado y hacen la vista gorda”, criticaba, “o todos moros o todos cristianos”. “Me incitan a que vaya a comulgar a otra iglesia”, reconoció. “Me han negado lo más grande para mí”. I. C. valencia
Una idea de como la Iglesia se hizo del poder y la economía que hoy aún tiene, pese a saberse que fue a costa de el sudor de las personas que trabajan y se les robaban para darles “sus honorarios2 a los clerigo y monjes.
Hoy se sigue haciendo, la crisis, ha vuelto a rebajar nuestros sueldos y Derechos adquiridos con huelgas y hasta con días de privación de libertad cuando no de la propia vida.
Esta Icar sigue obteniendo sus beneficios pese a que nos han recortado los salarios, ellos, sin embargo están fuera de esta Crisis…
Si excomulgarán a Gallardo con sus “ERES” bajo cuerda, ni al Presidente Vara, que es más papista que el papa, un derechón camuflado de isquierdista, tan igual que el Bono y company
http://j.orellana.free.fr/textos/iglesia.htm
En este otro enlace, se pone tan demanifiesto que tampoco fueron excomulgados aquellos que comulgarón con el regimen Nazi, aunque tan solo fuese para salvar sus dependecia del Vaticano.
Y que esto no se lo creen ni ellos, puesto que muchos Nazis salieron para America via Vaticano…
http://cubadebate.superforo.net/t2236-por-que-callaron-las-iglesias
Aquí hoy en España, los Botines, y las koplovich, las duquesas y cuantos han robado y han hecho de sus vida un juego con todas las barajas no serán nunca excomulgadas, ni porque tenga 80 o 90 años, como tampoco fueron las reinas y reyes de esta España bananera.
Aquí tenemos al borbón y sus hij*s que hacen lo que les viene en gana y siguen comulgando.
Pero bueno, creo que tenemos lo que nos merecemos figuras de cartón y corazón de piedra, que solo buscan tener las tripas repletas de nuestras vicerás.
Sigamos con la S.Santa y que vuelvan a pasear al cruficicado, como si hubiese sido algo pasado y no presente.
Eso sí ellos detrás con cara de sueños mientras personas atolondradas por esta fe siguen partiendose las costillas para darles el gusto de ser nuevamente protagonista de algo, parecido al circo romano.
Las idolatricuras, y idolatripapas=a la idolatridios.
No tiene desperdicio este enlace, podremos ver la “careta” de ese supuesto hombre consagrado ¿…? que se siente la mano derecha de ese dios homófobo y machista.
Pero que nada hace por parar la corrupción de los pepitas en Valencia, y aún menos excomulgar a “la Rita” señora presidenta de la comunidad de ese pais Valenciá.
Claro está que no es lo mismo ser lesbiana, siendo una pelagata que ser Rita la Cantaora de las Corte de Valencia…
Hay que joderse con moral de esta corte religiosa.
Vean este enlace, que ahí sale hasta el “curita” con sus trajes pagados (supuestamente) con el caso gurtel, y como no rodeado de quien iba a ser, de otros Curitas.
http://www.cristianosgays.com/tag/valencia/
¿Y se estarán volviendo a acercar con ofrendas a los altares “los de Arriba” y el José Polo” de abajo” sin ni siquiera vislumbrar aquello de Jesús:- “Si camino del altar te acuerdas de que tu herman* tiene algo contra ti ….”?
Porque , si de enjuiciar de gravemente pecadores por actos o situaciones de pecado del que no tienen, ni pueden tener pruebas se trata, lo que tiene esta hermana, y tantos herman*s con ella, es algo que, si se identifica con el pecado público de difamación calumniosa, es grave.
¿Desde cuando la convivencia, y menos por amor, puede, sin más evidencias, considerarse pecado o estado de pecado y ,además, público y escandaloso?
Aplicando la misma medida ¿ Cómo calificar cualquier otra convivencia, incluidas las que viven los Papas, Obispos, Clero y Religios*s?
Y nada digamos, si aplicamos aquella condición que para sentirse y ser reconocidos como discípul*s de Jesús, de que “os amáis unos a otros”?
Ah ¿qué no se puede con fundir amor y sexo?
¿Y con qué pruebas se cuenta cuando se formula juicio y sentencia particular y pública de pecado por razón de abuso o desorden sexual?
¿Para llegar ahí no se tendría antes, que emplazar a juicio inquisitorial por otros abusos más graves, públicos, permanentes y más difíciles de quedar libres de su pecaminosa condición, con una más fácil constatación?: Abusos de poder, idolatrías,prácticas blasfemias,violencias, robos, mentiras, calumnias, etc.?
No se acerquen al altar ni los de arriba, ni el de abajo, sin antes arreglar con Pilar y la multitud de herman*s este escándalo grave del que han sido actores.
Humillar, difamando y excluyendo de comunión a Pilar , o a cualesquiera otr*s de esa forma, es asunto grave del que necesitan conseguir arreglo, recabando comprensión y perdón, antes de dar un paso más hacia los altares con ofrendas.
O, no vuelvan a usar más la Palabra de Jesús, para publicarla con ánimo de no ser coherentes con ella
Pues realmente la historia resulta anacrónica.
Pero también absurda, con los tiempos que corren y ese párroco rechazando a los pocos fieles que van quedando.
Y cruel, no se puede humillar así a nadie, ni negarle lo que considera sagrado.
Pero sobre todo es de una hipocresía y un cinismo que claman al cielo. Si tal como reza el referido artículo de DC tampoco deben ser admitidos a la sagrada comunión los que obstinadamente persistan en un manifiesto pecado grave, que expliquen esos clerizontes por qué no se aplicó el mismo rasero a asesinos como Pinochet o Franco, o a pederastas como Maciel y a tantos otros que no sólo no se les excomulgó sino que se les encubrió, con lo que se promovió que siguieran cometiendo impunemente sus crímenes, ¡y con su bendición, nada de excomunión!
Por el contrario, ¿dónde está el pecado de ser homosexual y mantener relaciones sexuales libres? Sólo en la mente de los hipócritas.
Yo siento mucho el malestar de los excomulgados. Quizá esto les ayude a comprender que nadie tiene la capacidad de excomulgar por mucho derecho que se atribuyan, y a reconsiderar dónde está lo sagrado en el cristianismo, y qué manos pueden bendecir realmente.
Lc 18, 10-12…Un abrazo Gabriel
He leído con detenimiento el post y la verdad es que me ha sonado más a novela costumbrista y de intriga que a historia de comunidad cristiana del siglo XXI.
No se pierdan el detalle de toda la intriga: Reuniones previas para presionar a creyentes, código de derecho canónico que considera al amor entre dos personas como un pecado grave, denuncias públicas de no se sabe exactamente quién, decisiones y presiones desde arriba del arzobispado, creyentes a los que se les puede señalar con el dedo por ir a comulgar, comunión posterior semiclandestina en una capilla. A ver quién da más en una historia para mí realmente increíble.
Dios mío, y pensar que nuestro Señor Jesucristo murió y resucitó para que después los católicos acabáramos montando historias de este tipo!
Hace años tropecé con una persona a la que un sacerdote le había negado la comunión.
Era un asunto de herencias: el clérigo se había hecho con las tierras de una/as ancianas, y los sobrinos -que se quedaron sin nada- le debieron poner verde, según parece.
El sacerdote negó en la Iglesia la comunión a la persona que conocí. La humillación que había sufrido le atormentaba aún unos 15 años después.
Cualquiera de nosotros dispone de armas para soportar sucesos de este estilo; pero para personas sencillas, su integración social pasa por esa aceptación. Sin ella dejan de ser persona. Porque su ser social se conforma en estar integrado en ese grupo religioso. Bien se expresa Pilar al decir que “me han negado lo más grande”. Y todo ello sin necesidad de ligar el hecho con Dios.
En el caso del Cañamelar el fondo del tema se refiere a asuntos sexuales. ¡Ese es el tema!. Porque el fondo del problema de esta Iglesia termina siendo ése, el mal resuelto problema sexual del clero (no quiero afirmarlo del párroco en cuestión), que ha de salir por alguna parte. Es la ley de pureza (contra la que luchaba Jesús), la que excluye al que (supuestamente) no lo es.
En esa Iglesia, no vale la ley del amor. Los que promueven guerras, deciden Guantanamos y realizan pactos ocultos son situados en primera fila en los funerales del Estado Vaticano, en una representación televisada del poder diplomático/fáctico del que alardean en Roma.
Resuenen las palabras: “No sea así entre vosotros…”
—————————
Por casualidad, el que me comentó lo del restaurante reside en la demarcación de esa parroquia.
Preguntas si se atrevería al obispo a medir con la misma vara a de-ter-mi-nada/s autoridad/es de la ciudad.
Pues mira, hasta el pueblo llano sabe que en algún restaurante se le pide que no vuelva por el escándalo que arma.
Así es que se notan las diferencias: unos son pueblo; los otros autoridades políticas con acceso a subvenciones, cesiones de terrenos y demás ¿corruptelas?
Ya lo decía el Arcipreste… “yo vi alla en Roma… que todos al dinero facianle omilidat…
Hoy sucede lo mismo.
¡Esta gente no tiene arreglo! Como dice Pepe Blanco, hay personas que se empeñan en estar donde no deben. Y como dice Carmen, si pusiésemos la lista de quienes no pueden comulgar, no tendríamos puertas suficientes en los templos.
¿Acaso el Papa, que se va a gastar 50 millones de euros en un viaje a Madrid, es más digno que esta buena mujer?. ¡El mundo al revés!
Me duele en lo más intimo que sigan personas sintiéndose ultrajadas, humilladas, y sobre todo que hayan hecho ese “JUICIO” PUBLICO para vapulearlas.
Siento vergüenza por esas personas que fueron tan inctristianas y se fueron con la ostia en el estómago, y sin nada más.
Porque nada más puede haber en una Comunidad que solo es dejar hablar al papagayo de turno, que se presta a hacer lo que “desde arriba” le dicen… ¿De verdad hace todo lo que le dicen “Los de arriba”
¿Es honesto, fiel a cuanto prometió en esa impostosa celebración para decir que sigue a Jesús?
¿Cómo se puede ser tan inhumano, tan impío y desalmado? Para poner ante toda esa “comunidad” la honorabilidad de nadie y aún menos de unas personas que han estado y siguen estando puestas en entredicho en más de una ocasión por el solo hecho de amar, e intentar ser felices sin hacer daño, y dar escándalos como ellos tantas veces hacen en los asuntos de Menores, del blanqueo de dinero y hasta de codearse con gente que ha masacrados a su pueblo.
Cómo se puede ser tan cobarde, que no tanga los “cojones” de entablar un diálogo entre esas personas, y no mandar al “presidente” ¡Claro! no iba ser presidenta por muchos que ellas sean quienes hagan todo el trabajo.
Y que pronto cumplimos las órdenes del cura de turnos, ¡Señor Presidente de la cofradía! Y que lugar tan bueno, “un bar” la Parroquia no tiene espacio para debatir los problemas que surjan, solo están para pasar el Cepillo limosnero, robar a costa de la imberbe fe de la gente que sigue siendo engañada con ese dios del juicio que todo lo ve.
¡Es verdad! señoras lesbianas, y señores homosexuales, no es lo mismo ser que hacer… Y de esos “ellos” lo saben muy bien, porque es lo que hacen en un 99% joder con quien sea y como sean.
Querida Pilar no te han negado lo más grande, porque lo más grande eres tú, es tu pareja y es la FAMILIA que formáis… y por supuesto me gustaría que te sintieras LIBRE, libre ante tanta ignominia y degradación por el solo hecho de sentir lo que tan solo personas buenas sienten y que no es otra cosa que AMAR.
Una cosa más… Haz como hizo Lutero y cuelga de la puerta de la Iglesia los nombres de tod*s aquell*s que no pueden comulgar.
Los párroco, los obispo, y el papa… y si sabes de alguien más ya saben como tú bien dices o todos cristianos o todos ateos… Pero eso sí, no vuelvas a pisar más esos templos del diablo, porque D*s es imposible que pueda estar, y si supier que está, me borro del todo de esta u otra Fe o Creencia.
El domingo pasado, la lectura de la misa contaba cómo los fariseos expulsaron de la comunidad judía al ciego que había recobrado la vista en sábado por la acción de Jesús de Nazaret.
Creo que estamos ante un caso parecido. El ciego, tras esta expulsión, tuvo fe en Jesús, esa fe que nos ha explicado Salvador Santos. Que es la que salva.
A mí no me preocuparía en absoluto la supuesta pena canónica que les han impuesto a estos señores/as, a los cuales me gustaría expresar mi más absoluto respeto y afecto.
Me gustaría decirles a esas cuatro personas que puede llegar a ser bastante desagradable e incómodo empeñarse en seguir estando en donde a uno no lo quieren, en donde a uno no lo quieren tal cual es. En fin, que es bastante inelegante. Y, personalmente, no me vale que me digan que bueno, que si que me quieren pero no del todo, ni que bueno, que hay muchas personas que sí me quieren aunque oficialmente no se me quiera, ni que lo importante es lo que decía Jesús, ni que etc., etc., etc. Ya vale de tanto marear la perdiz y de tanta tontería. Más vale estar solo que mal acompañado.
El obispo del pasodoble necesita más a esas cuatro personas que esas cuatro personas al obispo del pasodoble. Espero que más pronto que tarde esas cuatro personas y otros muchos miles de ellas, se atrevan a pensar un poco para vencer la inercia que todavía las sigue uniendo a una estructura socio-religiosa propia de una época histórica anterior a la ilustración.
Sigue vigente que el hombre es para el sábado. La acogida y el abrazo en la diversidad no tiene coherencia en una “fe” que condena sin posibilidad de amar gratuitamente, sin condiciones. Decían el otro día en el Foro de Valencia que necesitamos más y más profetas para un auténtico seguimiento de Jesús en espíritu y verdad, no sacerdotes, ni representantes de institución.