Ven Espíritu Creador e infunde en nosotros la fuerza y el aliento de Jesús. Sin tu impulso y tu gracia, no acertaremos a creer en él; no nos atreveremos a seguir sus pasos; la Iglesia no se renovará; nuestra esperanza se apagará. ¡Ven y contágianos el aliento vital de Jesús!
Ven Espíritu Santo y recuérdanos las palabras buenas que decía Jesús. Sin tu luz y tu testimonio sobre él, iremos olvidando el rostro bueno de Dios; el Evangelio se convertirá en letra muerta; la Iglesia no podrá anunciar ninguna noticia buena. ¡Ven y enséñanos a escuchar sólo a Jesús!
Ven Espíritu de la Verdad y haznos caminar en la verdad de Jesús. Sin tu luz y tu guía, nunca nos liberaremos de nuestros errores y mentiras; nada nuevo y verdadero nacerá entre nosotros; seremos como ciegos que pretenden guiar a otros ciegos. ¡Ven y conviértenos en discípulos y testigos de Jesús!
Ven Espíritu del Padre y enséñanos a gritar a Dios “Abba” como lo hacía Jesús. Sin tu calor y tu alegría, viviremos como huérfanos que han perdido a su Padre; invocaremos a Dios con los labios, pero no con el corazón; nuestras plegarias serán palabras vacías. ¡Ven y enséñanos a orar con las palabras y el corazón de Jesús!
Ven Espíritu Bueno y conviértenos al proyecto del “reino de Dios” inaugurado por Jesús. Sin tu fuerza renovadora, nadie convertirá nuestro corazón cansado; no tendremos audacia para construir un mundo más humano, según los deseos de Dios; en tu Iglesia los últimos nunca serán los primeros; y nosotros seguiremos adormecidos en nuestra religión burguesa. ¡Ven y haznos colaboradores del proyecto de Jesús!
Ven Espíritu de Amor y enséñanos a amarnos unos a otros con el amor con que Jesús amaba. Sin tu presencia viva entre nosotros, la comunión de la Iglesia se resquebrajará; la jerarquía y el pueblo se irán distanciando siempre más; crecerán las divisiones, se apagará el diálogo y aumentará la intolerancia. ¡Ven y aviva en nuestro corazón y nuestras manos el amor fraterno que nos hace parecernos a Jesús!
Ven Espíritu Liberador y recuérdanos que para ser libres nos liberó Cristo y no para dejarnos oprimir de nuevo por la esclavitud. Sin tu fuerza y tu verdad, nuestro seguimiento gozoso a Jesús se convertirá en moral de esclavos; no conoceremos el amor que da vida, sino nuestros egoísmos que la matan; se apagará en nosotros la libertad que hace crecer a los hijos e hijas de Dios y seremos, una y otra vez, víctimas de miedos, cobardías y fanatismos. ¡Ven Espíritu Santo y contágianos la libertad de Jesús!
Pentecostés (C) Juan 14, 15-16.23b-26
JOSÉ ANTONIO PAGOLA, vgentza@euskalnet.net
SAN SEBASTIÁN (GUIPUZCOA).
[Tomado de ecleSALia.net, que difundió este texto el día 19 de mayo y lo dejó publicado en su web en 7 idiomas: castellano, portugués, italiano, francés,inglés, auskera y catalán]
Me encantó esta oracion. La he enviado a mis amigos.
Fernando, es que lo negativo nos oscurece la maravilla de la creacion…frente a la tragedia cosmologica hay un equilibrio en todo lo que existe, hay muchas mas bellas y complejas creaciones en el cosmos que la mera destruccion de una estrella…si, existe lo feo pero tambien hay cosas hermosas…hay una mezcla del bien con el mal…dolor con bienestar, alegria con tristeza….nos es dificil aceptar nuestra impotencia ante lo que no podemos cambiar…nos cuesta darnos cuenta de nuestra limitacion humana..y nos es dificil comprender en esta vida la desigualdad en la distribucion de los bienes pero esa es la verdadera estructura de la creacion….como que lo que el otro posee, yo no lo tengo…y de lo que yo tengo, carece mi vecino, y asi yo puedo darle a mi projimo algo mio y tambien humildemente recibir de el de lo que yo carezco…NO ES posible pues abarcar todo el misterio de algo que nos trasciende…y sin embargo, nosotros existimos y nos tenemos que mover a diario en esta marea humana…POR lo tanto es mas saludable -ya que no tenemos el control completo de la vida y de lo creado- que nos aprovechemos de todo lo que se nos ofrece como positivo…como creativo…como constructivo…como coherente….que ya es mucho…y aceptemos la inspiracion de ese Espiritu que nos guiara, desde fuera y desde dentro, a nuestro “puerto” final…que ya vemos QUE no puede estar aqui, sino en otra fase de nuestra existencia..en el objeto principal de nuestra felicidad..que no reside en los bienes de esta vida…sino en los de la otra…POR LO TANTO, ya que nosotros no podemos solos, debemos pedir al Espiritu Santo que nos infunda, no solo “amor en los corazones”, sino fuerza y aliento para CREER que podemos llegar -con su ayuda- al verdadero y ultimo destino de nuestras vidas, que es el mismo Dios…un saludo cordial de Santiago Hernandez
Claro que prefiero esta invocación a otras, a la mayoría de las ‘otras’ que suelen rezarse en las liturgias, empezando por la clásica secuencia cuyo contenido y lenguaje pertenece a un mundo ya inexistente.
Pero así y todo, esta solicitud de “Ven Espíritu…” sólo puede tener sentido como expresión simbólica, pues si al Espíritu hay que pedirle que venga, ¿qué clase de buen Espíritu es?
Pero además, el sólo decirle ‘ven’ (literalmente) es un enorme signo de desconfianza en Dios.
A mi entender, el Pentecostés no es una ocasión de regotiva sino de renovación del compromiso por vivir los tres signos fundamentales del relato de los Hechos: ser aliento para los desalentados (viento), ser calor para quienes viven en cualquier clase de intemperie (fuego) y favorecer el encuentro y el diálogo entre todas las personas de buena voluntad (no importa en que idioma hablen, igual nos entendemos).
Es interesante tu planteo Fernando, pero Dios, no es el que causa la muerte, pero si el que hace que la Vida tenga siempre la última palabra, un dato de la Fe…Es que la Vida en Dios no tiene fin.- Gabriel
Al hilo del último comentario sobre dios y su mal compartimiento…
Dice dios a Adan, por haber pecado serás toda la vida un hombre errante…
Después le dice a Eva, y tú pariras con dolor y con el flujo de tu sangre…
Eva el dice a dios, señor, y por qué a mi pones dos castigos ¡parir con dolor y con el flujo de mi sangre!
bueno, bueno mujer, no te alteres, te aliviaré el segudno castigo, el flujo de tu sangre será a plazos mensuales…
Estabamos reunidos y uno de nosotros dijo: Yo descubro a Dios, a su Espiritu, en las personas que me quereis y me respetais.
¡¡ Ay !!, amigo Oscar. No puedo estar de acuerdo con tus análisis ” filo-lógicos” ” filo-sóficos”.
La ” miga” que nos propones puede ser corteza demasiado dura, en vez de miga. Sólo tenemos que poner tus análisis frente a la REALIDAD que vivimos. ( cada cual su propia realidad, obviamente.)
Y llegamos a la conclusión de que si ésto fuera asumible:
“”¿Qué pasa cuando falta una creencia firme y común sobre quién debe mandar?””
la NEGLI-gencia les corresponde a los religiosos, no a los otros. Llegaríamos a tener que admitir que todos los hechos lamentables que se han llevado a cabo ” porque Dios lo quiere” serían responsabilidad de Dios, no de quienes sólo han OBEDICIDO a la auoridad mayor: Dios.
Y me parece poco probable que a semejante autoridad se le pueda sentar en el banquillo de los acusados. Por lo cual, quienes sólo son reos de la ” obediencia debida”, quedan sistemáticamente perdonados de todas y cada una de las salvajadas producidas por la obediencia de los reli-giosos-as.
Y claro, éso no acaba ahí. Aún se canta por España aquella famosa canción que permitía ( permite) todo tipo de desmanes, acogidos a la obediencia al jefe: ( culpable, el jefe, los demás sólo obedecen.)
” Por Dios, por la Pátria y el Rey”…
Pues ya me dirás la forma de hacer responsables de sus actos a semejantes autoridades. Y ya me dirás la RESPON-sabilidad cívica que demuestran quienes, amparados en su reli-gión obediente, llevan a cabo hechos como los que se les conocen a ciertos reli-giosos-as de ayer, de hoy y, mucho me temo que de mañana.
Conclusión: Que cada cual sea responsable de sus actos y nadie se pueda amparar en su condición de creyente-obediente echando la culpa a quien no hay posibilidad de juzgar. Ergo, los ateos-as somos mucho menos negli-gentes que los religiosos.
Quizás me he liado un poco, ésto de la filo-logía se me da muy mal.
saludos cordiales, pues.
El Espíritu hace nuevas todas las cosas, cada día…para ello sólo necesitamos abrir el corazòn y mirar altededor, pronto descubrimeros que tras la apariencia de la muerte venciendo, la vida es la que realidad vence…y ella siempre tiene la última palabra. Las dinámicas Trinitarias, son creadores de Vida…dejemos que el Amor del Padre y del Hijo nos posean.- Gabriel
Parece ser que la VIVENCIA PERSONAL Y COLECTIVA de la que nos ofrecen testimonio quienes la vivieron y compartieron en aquella sacudida del Espíritu nos deja claro el modo como quiso el Espíritu que le percibieran ACTUANDO;
El ambiente era de REUNION; de TOTALIDAD de afectados; de efectos experimentales de INTERRELACION UNITARIA ESENCIAL PERSONAL en el expresarse y entenderse.
– Al llegar el día de Pentecostés estaban TODOS REUNIDOS en el mismo lugar.
– … y vieron aparecer unas lenguas como de fuego que se REPARTÍAN posándose encima de CADA UNO.
– Se llenaron TODOS de Espíritu Santo.
-Residían … en Jerusalén judíos devotos de TODAS las naciones de la Tierra.
– y CADA UNO les oye hablar de LAS MARAVILLAS DE DIOS (¿Sería el que TODOS somos igualmente PERSONAS?): aquello de: “- Háganos al SER HUMANO a NUESTRA IMAGEN Y SEMEJANZA; TODOS formando UNA HERMANDAD DE HIJOS del ÚNICO PADRE CELESTIAL.
Si Jesús le había confiado a su Espíritu el devenir temporal de su MISION ¿No debería este acontecimiento sacudir nuestras opiniones y prácticas cristianas y hacer de esta VIVENCIA testimonial el núcleo de nuestra COMUNIDAD DE SEGUIDORES DE JESÚS?
¿No bastaría esto para plantearnos con toda libertad y responsabilidad nuestra condición eclesial y desde ella distinguir lo que puede ser tolerancia divina del Espíritu y lo que es su verdadera ACCION DIVINA?
¿Puede ser acción SUYA tanta clasificación en la GENERAL MISIÓN, y tanta confusión y dificultad para proclamar y que TODOS los habitantes de la Tierra entiendan QUE SE TRATA DE LAS MARAVILLAS DE DIOS; de esa HERMANDAD UNIVERSAL que llamamos HUMANIDAD?
¿Qué otro HABLAR y ENTENDER universal puede haber desde tanta DIVERSIDAD y PLURALIDAD en los SERES HUMANOS?
¿Es el ESPIRITU quien ha clasificado en la IGLESIA a los seguidores de Jesús y QUIEN la asiste para que su habla y testimonio no pueda ser entendida por TODA LA HUMANIDAD, o es la acción del poder personificado y estructurado, en ella y por ella, lo que frustra la VIVENCIA DEL PENTECOSTÉS?
Hola!
Se trata de una Invocación auspiciante.
Esta estructura de comportamiento es frecuente en la Vida humana:
in-vocamos a un padre, maestro o amigo
como más “duchos” en algún asunto,
que nosotros no lo somos tanto,
para que nos anime
a que “hagamos lo que tenemos que hacer”
Por ejemplo acá:
*infundir fuerza *recordar *hacer caminar * clamar *lanzarnos a un buen proyecto *ensayar querernos *atrever a liberarnos.
···············
Al auspiciar, reconocemos que no estamos solos, sino que en torno nuestro, no se sabe dónde, hay realidades absolutas que pueden más, y con las cuales es preciso contar.
En vez de ir, sin más, a la acción sometemos nuestra ocurrencia al juicio de algún auspiciante; contamos con algo que está más allá de nosotros.
Esta conducta, que nos lleva a no vivir ligeramente, sino a comportarnos con cuidado, es el sentido esencial de toda religión.
Cuando el hombre cree en algo, cuando algo le es incuestionable realidad, se hace religioso de ello.
Religioso quiere decir que no nos comportamos a la ligera, sino cuidadosamente.
Lo contrario de religión (re-ligente) es negligencia (ne-gligente).
··············
La cosa tiene mucha miga:
El Auspicio llegó a significar mando. Estar bajo el auspicio de alguien equivale a estar a sus órdenes.
La palabra augurio -del que viene nuestro agüero, “bueno” o “malo”-, había significado aumento, crecimiento, empresa (de ella proceden auctoritas y Augustus).
Los conceptos de creencia y de Estado se compenetran. En la política hay épocas de religión y épocas de negligencia, de cuidado y descuido, de escrupulosidad y frivolidad.
¿Qué pasa cuando falta una creencia firme y común sobre quién debe mandar?
La sociedad reclama mecánicamente la función imperativa, y si no se sabe quién debe mandar, se renuncia a una auténtica institución y se recurre a un expediente en el que las personas no contamos más que para los “im-puestos”.
···········
Parece que conviene Invocar y Auspiciar. ¡Vamos todavía! – Oscar.
Para Hoy solo recordar que recordar la vuelta a Galilea… es decir el comienzo de Todo…
Y como dice Pepe estar en las Calles. ¡A las barricadas…!
¡Feliz Pentecostés!
¿ Por qué achacar a OTRO la responsabilidad de uno mismo?
En algún lugar he leído que
” vosotros sóis el templo del Espíritu Santo”
Y no vale excaquearse y “meterle los marrones” a quien no le corresponden. No busquen culpables de su falta de libertad, EJÉRZAN SU PROPIA LIBERTAD y todos tendremos más confianza en lo que se escriba. Mientras se sigan echando ” balones fuera” y se permitan silenciamientos propios ( y no deseados) permítame decirle, señor Pagola ( y otros) que no me fío nada de lo que escriben. Prefiero fijarme en lo que HACEN.
Es demasiado fácil echarle la culpa al Espíritu Santo que no ” sopla como es debido”. Menos ” soplos” y más EJEMPLO DE LIBARTAD.