Otros temas

Autores

Archivo de entradas

Temas

Fechas

Calendario

7411 Artículos. - 112733 Comentarios.

SOS por la Iglesia católica de hoy

El autor de este grito tiene 78 años. Hace tres años escribió una carta personal al papa, abriéndole su corazón sangrante. Ante la falta de respueta, la ha hecho pública y circula ahora por todo el mundo. Ha hecho bien, porque su análisis es muy certero y debe ser compartido. Nosotros la publicamos ahora -aunque Oriol Domingo hace dos meses que dio noticia de ella en La Vanguardia– , una vez que hemos podido disponer de la traducción íntegra del texto. No para ahondar la herida sino para urgir remedio.

CARTA PERSONAL de Henri BOULAD SJ AL PAPA BENEDICTO XVI .

Santo Padre:

Me atrevo a dirigirme directamente a Usted, pues mi corazón sangra al ver el abismo en el que se está precipitando nuestra Iglesia. Sabrá disculpar mi franqueza filial, inspirada a la vez por “la libertad de los hijos de Dios” a la que nos invita San Pablo, y por mi amor apasionado por la Iglesia.

Le agradeceré también sepa disculpar el tono alarmista de esta carta, pues creo que “son menos cinco” y que la situación no puede esperar más.

 

Permítame en primer lugar presentarme. Jesuita egipciolibanés de rito melquita, pronto cumpliré 76 años. Desde hace tres años soy rector del colegio de los jesuitas en El Cairo, tras haber desempeñado los siguientes cargos: superior de los jesuitas en Alejandría, superior regional de los jesuitas de Egipto, profesor de teología en El Cairo, director de Caritas-Egipto y vicepresidente de Caritas Internationalis para Oriente Medio y África del Norte. Conozco muy bien a la jerarquía católica de Egipto por haber participado durante muchos años en sus reuniones como Presidente de los superiores religiosos de institutos en Egipto. Tengo relaciones muy cercanas con cada uno de ellos, algunos de los cuales son antiguos alumnos míos. Por otra parte, conozco personalmente al Papa Chenouda III, al que veía con frecuencia. En cuanto a la jerarquía católica de Europa, tuve ocasión de encontrarme personalmente muchas veces con alguno de sus miembros, como el cardenal Koening, el cardenal Schönborn, el cardenal Martini, el cardenal Daneels, el Arzobispo Kothgasser, los obispos diocesanos Kapellari y Küng, los demás obispos austríacos y otros obispos de otros países europeos. Estos encuentros se producen con ocasión de mis viajes anuales para dar conferencias por Europa: Austria, Alemania, Suiza, Hungría, Francia Bélgica… En estos recorridos me dirijo a auditorios muy diversos y a los media (periódicos, radios, televisiones…). Lo mismo hago en Egipto y en Oriente Próximo.

He visitado unos cincuenta países en los cuatro continentes y he publicado unos treinta libros en unas quince lenguas, sobre todo en francés, árabe, húngaro y alemán. De los trece libros en esta lengua, quizá haya leído Usted “Gottessöhne, Gottestöchter” [Hijos, hijas de Dios], que le hizo llegar su amigo el P. Erich Fink de Baviera.

No digo esto para presumir, sino para decirle sencillamente que mis intenciones se fundan en un conocimiento real de la Iglesia universal y de su situación actual, en 2007.

 

Vuelvo al motivo de esta carta, intentaré ser lo más breve, claro y objetivo posible. En primer lugar, unas cuantas constataciones (la lista no es exhaustiva):

  • 1. La práctica religiosa está en constante declive. Un número cada vez más reducido de personas de la tercera edad, que desaparecerán enseguida, son las que frecuentan las iglesias de Europa y de Canadá. No quedará más remedio que cerrar dichas iglesias o transformarlas en museos, en mezquitas, en clubs o en bibliotecas municipales, como ya se hace. Lo que me sorprende es que muchas de ellas están siendo completamente renovadas y modernizadas mediante grandes gastos con idea de atraer a los fieles. Pero no es esto lo que frenará el éxodo.
  • 2. Seminarios y noviciados se vacían al mismo ritmo, y las vocaciones caen en picado. El futuro es más bien sombrío y uno se pregunta quién tomará el relevo. Cada vez más parroquias europeas están a cargo de sacerdotes de Asia o de África.
  • 3. Muchos sacerdotes abandonan el sacerdocio y los pocos que lo ejercen aún –cuya edad media sobrepasa a menudo la de la jubilación– tienen que encargarse de muchas parroquias, de modo expeditivo y administrativo. Muchos de ellos, tanto en Europa como en el Tercer Mundo, viven en concubinato a la vista de sus fieles, que normalmente los aceptan, y de su obispo, que no puede aceptarlo, pero teniendo en cuenta la escasez de sacerdotes.
  • 4. El lenguaje de la Iglesia es obsoleto, anacrónico, aburrido, repetitivo, moralizante, totalmente inadaptado a nuestra época. No se trata en absoluto de acomodarse ni de hacer demagogia, pues el mensaje del Evangelio debe presentarse en toda su crudeza y exigencia. Se necesitaría más bien proceder a esa “nueva evangelización” a la que nos invitaba Juan Pablo II. Pero ésta, a diferencia de lo que muchos piensan, no consiste en absoluto en repetir la antigua, que ya no dice nada, sino en innovar, inventar un nuevo lenguaje que exprese la fe de modo apropiado y que tenga significado para el hombre de hoy.
  • 5. Esto no podrá hacerse más que mediante una renovación en profundidad de la teología y de la catequética, que deberían repensarse y reformularse totalmente. Un sacerdote y religioso alemán que encontré recientemente me decía que la palabra “mística” no estaba mencionada ni una sola vez en “El nuevo Catecismo”. No lo podía creer. Hemos de constatar que nuestra fe es muy cerebral, abstracta, dogmática y se dirige muy poco al corazón y al cuerpo.
  • 6. En consecuencia, un gran número de cristianos se vuelven hacia las religiones de Asia, las sectas, la new-age, las iglesias evangélicas, el ocultismo, etcétera. No es de extrañar. Van a buscar en otra parte el alimento que no encuentran en casa, tienen la impresión de que les damos piedras como si fuera pan. La fe cristiana que en otro tiempo otorgaba sentido a la vida de la gente, resulta para ellos hoy un enigma, restos de un pasado acabado.
  • 7. En el plano moral y ético, los dictámenes del Magisterio, repetidos a la saciedad, sobre el matrimonio, la contracepción, el aborto, la eutanasia, la homosexualidad, el matrimonio de los sacerdotes, los divorciados vueltos a casar, etcétera, no afectan ya a nadie y sólo producen dejadez e indiferencia. Todos estos problemas morales y pastorales merecen algo más que declaraciones categóricas. Necesitan un tratamiento pastoral, sociológico, psicológico, humano… en una línea más evangélica.
  • 8. La Iglesia católica, que ha sido la gran educadora de Europa durante siglos, parece olvidar que esta Europa ha llegado a la madurez. Nuestra Europa adulta no quiere ser tratada como menor de edad. El estilo paternalista de una Iglesia “Mater et Magistra” está definitivamente desfasado y ya no sirve hoy. Los cristianos han aprendido a pensar por sí mismos y no están dispuestos a tragarse cualquier cosa.
  •  9. Las naciones más católicas de antes –Francia, “primogénita de la Iglesia” o el Canadá francés ultracatólico– han dado un giro de 180º y han caído en el ateísmo, el anticlericalismo, el agnosticismo, la indiferencia. En el caso de otras naciones europeas, el proceso está en marcha. Se puede constatar que cuanto más dominado y protegido por la Iglesia ha estado un pueblo en el pasado, más fuerte es la reacción contra ella.
  • 10. El diálogo con las demás iglesias y religiones está en preocupante retroceso hoy. Los grandes progresos realizados desde hace medio siglo están en entredicho en este momento.

 

Frente a esta constatación casi demoledora, la reacción de la iglesia es doble:

– Tiende a minimizar la gravedad de la situación y a consolarse constatando cierto repunte en su facción más tradicional y en los países del tercer mundo.

– Apela a la confianza en el Señor, que la ha sostenido durante veinte siglos y será muy capaz de ayudarla a superar esta nueva crisis, como lo ha hecho con las precedentes. ¿Acaso no tiene promesas de vida eterna?

 

A esto respondo:

– No es apoyándose en el pasado ni recogiendo sus migajas como se resolverán los problemas de hoy y de mañana.

– La aparente vitalidad de las Iglesias del tercer mundo es equívoca. Según parece, estas nuevas Iglesias atravesarán pronto o tarde por las mismas crisis que ha conocido la vieja cristiandad europea.

– La Modernidad es irreversible y por haberlo olvidado es por lo que la Iglesia se encuentra hoy en semejante crisis. El Vaticano II intentó recuperar cuatro siglos de retraso, pero se tiene la impresión que la Iglesia está cerrando lentamente las puertas que se abrieron entonces, y tentada de volverse hacia Trento y Vaticano I, más que hacia Vaticano III. Recordemos la declaración de Juan Pablo II tantas veces repetida: “No hay alternativa al Vaticano II”.

– ¿Hasta cuándo seguiremos jugando a la política del avestruz y a esconder la cabeza en la arena? ¿Hasta cuándo evitaremos mirar las cosas de frente? ¿Hasta cuándo seguiremos dando la espalda, crispándonos contra toda crítica, en lugar de ver ahí una oportunidad de renovación? ¿Hasta cuándo continuaremos posponiendo ad calendas graecas una reforma que se impone y que se ha abandonado demasiado tiempo?

– Sólo mirando decididamente hacia delante y no hacia atrás la Iglesia cumplirá su misión de ser ”luz del mundo, sal de la tierra, levadura en la pasta”. Sin embargo, o que constatamos desgraciadamente hoy es que la Iglesia está en la cola de nuestra época, después de haber sido la locomotora durante siglos.

– Repito lo que decía al principio de esta carta: “¡SON MENOS CINCO!” –¡fünf vor zwölf!– La Historia no espera, sobre todo en nuestra época, en que el ritmo se embala y se acelera?

– Toda operación comercial que constata un déficit o disfunción se reconsidera inmediatamente, se reúne a expertos, intenta recuperarse, se movilizan todas sus energías para superar la crisis.

– ¿Por qué la Iglesia no hace otro tanto? ¿Por qué no moviliza a todas sus fuerzas vivas para un aggiornamento radical? ¿Por qué?

– ¿Por pereza, dejadez, orgullo, falta de imaginación, de creatividad, quietismo culpable, en la esperanza de que el Señor se las arreglará y que la Iglesia ha conocido otras crisis en el pasado?

– Cristo, en el Evangelio, nos pone en guardia: “Los hijos de las tinieblas gestionan mucho mejor sus asuntos que los hijos de la luz…”

 

ENTONCES, QUÉ HACER?… La Iglesia tiene hoy una necesidad imperiosa y urgente de una TRIPLE REFORMA:

1. Una reforma teológica y catequética para repensar la fe y reformularla de modo coherente para nuestros contemporáneos.

Una fe que ya no significa nada, que no da sentido a la existencia, no es más que un adorno, una superestructura inútil que cae de sí misma. Es el caso actual.

2. Una reforma pastoral para repensar de cabo a rabo las estructuras heredadas del pasado.

3. Una reforma espiritual para revitalizar la mística y repensar los sacramentos con vistas a darles una dimensión existencial, a articularlos con la vida.

Tendría mucho que decir sobre esto. La Iglesia de hoy es demasiado formal, demasiado formalista. Se tiene la impresión de que la institución asfixia el carisma y que lo que finalmente cuenta es una estabilidad puramente exterior, una honestidad superficial, cierta fachada. ¿No corremos el riesgo de que un día Jesús nos trate de “sepulcros blanqueados”?

 

Para terminar, sugiero la convocatoria de un sínodo general a nivel de la iglesia universal, en el que participaran todos los cristianos –católicos y otros– para examinar con toda franqueza y claridad los puntos señalados más arriba y los que se propusieran. Tal sínodo, que duraría tres años, se terminaría con una asamblea general –evitemos el término “concilio”– que sintetizara los resultados de esta investigación y sacara de ahí las conclusiones.

 

Termino, Santo Padre, pidiéndole perdón por mi franqueza y audacia y solicito vuestra paternal bendición. Permítame también decirle que vivo estos días en su compañía, gracias a su extraordinario libro “Jesús de Nazareth”, que es objeto de mi lectura espiritual y de meditación cotidiana.

 

Suyo afectísimo en el Señor,

P. Henri Boulad, s.j.

henriboulad@yahoo.com

 Graz, 18 de julio de 2007

[Traducción de Maite Lesmes]

93 comentarios

  • pepe sala

    Joder!!… es que no hay forma de hacerse entender??

    Lo que cada cual ESCRIBE aquí es la responsabilidad de quien lo escribe, no de quien debería haber interpretado lo que quería decir el participante. Y mientras no se demuestre lo contrario, aquí se ha ESCRITO que los hijos no deben ser amigos de los padres; porque eso es muy ” progresista”:

    Y yo repito, para los buenos entendedores, que éso es una salvajada como una catedral… o más grande aún.

    Y repito que mis hijos sí son amigos míos y que me siento muy orgulloso por poder decirlo. Y aconsejo a quienes no sean capaces de ser amigos de sus hijos, que no vayan a las manifas por la familia que suelen montar los meapilas. Es una verdadera aberración social que unos hijos no tengan la confianza suficiente en sus padres para poder llamarles amigos, además de padres.

    Y si no gustan mis argumentos…. preguntarles a vuestros propios hijos, coño, a ver qué es lo que piensan al respecto.

    Claro que si se les pregunta  a los propios hijos puede que alguno quede en evidencia y no se atreva a confesarlo.

    Pues éso… en otra galaxia me siento mucho más a gusto que entre las familias ” ejemplares” de las manifas de Madrissss

  • Carmen (Almendralejo)

    Leer la Palabra, loso Evangelios en Clave de Mujer, es descubrir un deseo subyacente, que no solo nace de mis inquietudes, sino que está emergiendo gracias a otras muchas mujeres, y por qué no, hombres que han demostrado igual sensibilidad, y que fueron depositando las suyas, dejando abandonando esperanzadamente ese fuego que sintieron para que no quedase en meras cenizas, sino que el rescoldo fuera lo suficiente para abrigarnos en cada encuentro con la Palabra y como no, en ese  avanzar, con sus requiebros, con las piedras y los desencuentro.
     
    En cada una de las circunstancias de este siglo XXI, la Mujer segur sufriendo, el ostracismo y la violencia de una parte de la especie humana. No se puede argumentar que es por la voluntad de ellos mismo, y dado que esto no cuela desde que supimos erguirnos y razonar, este ha ido validando sus argumentos con infinitas razones todas afines a sus intereses de género bajo el dominio de la fuerza y el sexo.
     
    Si aún esto no pesaba lo bastante sobre la mujer, tuvo que ir argumentando razones que no se basaban en la rea o terrenal sino en la celestial.

    De ahí que las religiones han sabido transponer todas sus sin razones, sus oscurantismo y miedos a la argamasa de unos arquetipos, han creado un Caballo de Troya “dios” revistiéndole y entretejiéndole con argumentos filosóficos, adhiriéndole adornos calificativos  propios de su género, todos y cada uno,  en menosprecio del nuestro.

    Con alevosía no han querido pasar de la Edad Media, porque sus interese están en ganar la batalla desde dentro de la misma religación del ser humano con D*s.
    Quienes no tuvieron a bien poner sus pisadas en el Centro del Paraíso, hablar con la Madre naturaleza y descodificar el lenguaje de plantas, seres irracionales, se prestan a ser la voz y la moral de D*s para universo.
     
    Ellos no se prestan a aquello superficial, o sin importancia… los hombres de las jerarquías de las religiones siguen estando en las antípodas de todo cuanto da capacitada.  en favor y superación para a la vez ser capaz de hacer los análisis oportunos en cada momentos de la historia, y de la historia de amor de D*s con la Humanidad, sin exclusión por castas, razas, prestigios, cultura y aún menos por género, sexo o sexualidad.
     
    Sí, los varones eclesiales, de mi iglesia, y de otras religiones, siguen en ese estatus o jerarquía primaria de “primates”  o no son ser capaces de dar el salto cuantitativo y calificativo, se debe a su endogámico pensar, pues se sienten y quieren ser  como aquellos machos varones del grupo, e ir superviviendo en aquellos que ellos mismo van dejando como idóneos.
    Sin dejar de ser ese grupo, prototipo de personas sectarias o resto diferente a toda la grupalidad, “el varón” como voz de dios, el elegido, la ficticia forma y palabra que en cripta toda la bondad y la humanidad con la que D*s Creo el Cosmos.
     
    Es en ese deseo apagado desde fuera de sus Yo, lo que ha posibilitado, esa Gracia Emergente e Innata en cada una de las Mujeres, que sin tener datos o estudios teológicos conocíamos los indicios, las señas, la Señal de que D*s es Amor y se Revela a pesar de sentirse maniatad*s dentro de una artificial “Caballo de Troya…”

  • Héctor Rodríquez Fariña

    No te enfades Miguel, vuelve a leer mi comentrio y verás que no dice lo que tu has entendido.  No es un ataque a la libertad de expresión.
    Claro que tienes que defender tu opinión, eso faltaba. Tú y todos. Sólo te queria recalcar que cuando expresamos nuestras opiniones las estamos filtrando a través de lo que piensa el grupo que representamos.  Sólo te pedía que vieras que nadie va a atacar esos planteamientos que tienen una solidez muy fuerte pero que sólo valen para los que estén dentro de ese grupo.  Creemos a pies juntillas que son la realidad absoluta, la única verdad. Los grupos humanos necesitan de esas seguridades para subsistir.
    Al dar nuestra opinión personal nos afianzamos en lo que creemos y está muy bien pero sólo si aceptamos que los demás también tienen sus grupos y su verdad.  ¿Puede la Iglesia contener las verdades de todos? ¿Por qué no?
    Un abrazo, Héctor
     

  • Equipo Atrio

    Teófilo Liberto:
    No es que no hayamos querido publicar un comentario tuyo. Es que nos llegó con otra dirección de correo bastante extraña. El sistema lo dejó en espera. Poco antes, desde esa dirección “extraña” había enviado un comentario “otra” persona. Entonces le envié un correo para que  confirmara. No llegó contestación. Todo sonaba a raro. Ya nos lo explicarás, pero no nos eches las culpas por adelantado… Si eres tú, puedes seguir entrando directamente y enviando lo que quieras

  • ana rodrigo

    Miguel González, tienes toda la razón, me equivoqué en la tilde. Ya dije esta mañana que ando un poco estresada y las prisas nunca son buenas, aparte de mi ignorancia en una palabra que yo desconocía. Ya ves, hijo, todos nos equivocamos.
     
    Lo que no me gusta tanto son los ejemplos que has puesto, como “feminismo liberador” o “matrimonio homosexual”, esto sí que no tiene nada que ver con la figura literaria en cuestión porque la dos expresiones son correctas y los dos términos se complementan.
     
    Si la palabra progresismo es un cajón de sastre (desconozco lo que hay en los cajones de los sastre) pero supongo que con lo que allí pueda haber se pueden hacer nuevas cosas, que es como yo entiendo progresismo, como hacer cosas nuevas que hagan avanzar la historia mejorándola. No te discuto si tú quieres utilizar esta palabra como etiqueta para…, cada cual hace lo que quiere con las palabras.
     
    Voy a ver si me sosiego un poco y evito determinados  errores. Me voy con Lagaut a meditar un poco.

  • Josefina G.C.

    No solo querido, sino también “admirado” Oscar Varela, desde la “distancia admirativa”, desde este Atrio de nuestros amores y desamores, de dialogantes y silencios*s;  desde ciertos des-niveles asumidos,   no se admira a divas y galanes por divas ni galanes, como a tí y a casi tod*s l*s contertulios atrier*s, sino por lo que desde la “distancia-admirativa” aportais a otros niveles -(de no (chismo y chusmo-sos) )-, a donde las escaleras y apoyos no terminaron de llegar.  A menudo sí se llega tarde,  (cada cual y sus circunstancias), aunque siempre se puede encontrar -con ayuda- una buena dicha aunque sea a distancia, la de personas afines y con las que te identificas, de no ser a distancia no os habría encontrado.

    Con demasiada frecuencia es dificil comprenderse-entenderse conociéndose, cuanto mas no conociéndonos…cierto Oscar?, (aunque  las mujeres de Atrio tengan un sexto sentido y comprendan mejor que la mayoria de los hombres, ¿será por aquello de nuestras diferencias yin-yan?,(sin ánimo de polémica).
    ¡me ayuda que sigais ahí y agradezco poder seguir leyendoos¡¡¡  
    ojalá por mucho tiempo y avanzando aunque sea con lentitud.
    Abrazo cordial, admirado Oscar
    Josefina

  • teófilo liberto

    Compruebo que no han querido publicar un último comentario que he escrito para este artículo: una última respuesta a Ana Rodrigo.

    No termino de entender por qué. En fin.

  • Miguel González

    Por motivos ajenos a mi voluntad hago las últimas  reflexiones en este tema.

    Ana Rodrigo: ha buscado usted oximorón y efectivamente no está registrada en el DRAE; otra cosa sería que usted hubiera buscado oxímoron que es la palabra que yo utilicé: figura retórica que utiliza dos palabras de significado opuesto. Como por ejemplo, dulce derrota, triste victoria, matrimonio homosexual, feminismo liberador y muchas otras más, algunas de las cuales se utilizan en este mismo foro. Y en cuanto a la definición de progresista, le satisface a usted lo de ideas avanzadas. No me negará que como poco es un cajón de sastre que admite la disparidad de criterios. Una idea avanzada puede ser cualquier cosa. Pero aún suponiendo que por idea avanzada entendamos (siguiendo a Erich Fromm) toda aquella idea que por positiva ayude a mejorar al ser humano, ¿cree que habrá alguien en el vasto mundo que esté en contra de eso? No dispongo de espacio para dejarle claro de dónde viene la etiqueta progresista.

    Cuando hablé de Padre y Madre lo hice de arquetipos plantados en la entraña humana, por lo tanto nada tiene que ver con imaginar a Dios a nuestra imagen. Parece que no basta con leer todo el arsenal de Atrio para entender algunas cosas.

    El amigo Pepe Sala continúa con su variopinta manera de tratar a quienes no son de su cuerda. Y si algo no entiende, ataca por si acaso. Yo me hago responsable de mis afirmaciones no de lo que otros quieran adjudicarme.  Padre, madre, hijo, etc.  Ejercer la función que uno tiene es lo que procede, otra cosa es mear fuera del tiesto. Claro que yo no me refiero al clima de cariño, comprensión, escucha, ayuda, perdón, acogida, etc., que debe reinar en toda relación padre-hijo sino a arquetipos y a funciones a cumplir que se compadecen muy mal con esa moda de factura “progresista” que pretende que hay que ser lo que no se es haciendo dejación de las funciones que uno debe cumplir en la vida. A buen entendedor.

    Para Héctor Rodríguez defender la propia opinión es un esfuerzo inútil. Eso debe ser otra versión ya conocida de la libertad de expresión. Curioso razonamiento. Además una posición si no es tuya (o sea si no la tienes registrada a tu nombre) no puedes defenderla. Ignoro cuánto hay en mis opiniones de coincidencia con todo ese montón de personas que usted dice, lo que está claro es que la suya es la opinión de un grupo infinitamente menos numeroso. Esa es la realidad. Pero mi experiencia me dice que cuando defiendo alguna opinión personalísima sobre algún asunto (y aquí lo he hecho pero ha pasado desapercibida para usted) lo que obtengo es un desdeñoso ¿quién se ha creído este que es para mantener una opinión personal sobre asunto tan enjundioso? Ya ve usted: si vas “ande” vas y si viene, que te vuelves.

    Sí, Jesús puso en marcha una iglesia que es el conjunto de creyentes, y a la cabeza dejó a unos a quienes les dio la potestad de atar y desatar y a otros no. Es lo que hay. Se puede dulcificar, amañar, tergiversar, pero es lo que hay. Pero es que si no lo hubiera hecho también sería legítimo que sus seguidores, tras los primeros momentos de desasosiego, se organizaran como lo hicieron.  Y luego el mundo gira y gira y el grupo se encuentra con amenazas, peligros, oportunidades, etc., como todo grupo humano y ante ellas responde “como Dios les da a entender”.  Desde luego que no me imagino a Jesús ante la pecadora preguntándole: ¿nadie te ha condenado? Pues yo tampoco, vete y sigue a tu bola. Le dijo (a ella y en otras ocasiones similares): vete y no peques más. Jesús no tenía ninguna ligereza de cascos. Tampoco en ningún modo aparece que les haya dicho: cásense hombres con hombres y mujeres con mujeres. Es que las fantasías animadas de los otrora revolucionarios y hoy reconvertidos en progresistas,  no tiene límites.

  • oscar varela

    Hola INA!

    ¡Muy bueno! ¡¡¡Ja ja ja!!! (risas en el Atrio).

    Precisamente en los Atrios fue donde se re-presentaban las Obras teatrales;

    Una de las razones era porque no había T.V. (sólo un ¡ja! para mi chiste);

    Pero también gracias debidas a los des-niveles generados por las Escaleras, que facilitaban:
    * la mobilidad de los Actores
    * la cómoda visión de los Espectadores (chismo- y chusmo-sos) del Pueblo.
    * la fácil audición; y, sobre todo
    * la “distancia admirativa” con que se ha de ad-mirar a las divas y galanes.
    ········
    Lo tuyo es una excelente “escenificación”, que lo diría todo:
    especialmente porque deja un “final abierto” a la interpretación.
    ········
    Algunos pensarán en algún método de Censura para este señor.

    Yo, mal-pensado, le agregaría la posibilidad del “marketing”.

    Se sabe que la “competencia” no disminuye las ventas, sino que:
    * las sostiene, y en casi todos los casos, también
    * las incrementa.

    ¿No es esa la de los “Súper”?
    ··········
    ¿Por qué será que al ser humano le encanta andar donde hay “re-friega”?
    Y si se la asperga con un poquito de sangre … ¡todo un éxito de mercado editorial!
    ··········
    ¡Vamos todavía! – Oscar.

  • INA

    Comentario de Su Santidad después de leer la carta:
    “Hmmmm… Este Henri está rozando la herejia… ¡Tomaré nota!

  • Javier Renobales Scheifler

    Son hombres, los que se han arrogado la función de decir a los demás qué es lo que los curas tantas veces han llamado a su conveniencia ‘el espíritu de Jesús’. Hombres que se han metido en la casta sacerdotal y han logrado hacer carrerón eclesiástico para hacerse poderosos en la inhumana estructura dictatorial de la ICAR (hacer la voluntad de Dios, lo llaman, la famosa ‘voluntad de Dios’ que dicen se la sopla Dios a ellos).
     
    Creo que con los llamados espíritus se hace mucha demagogia, a conveniencia en cada situación o momento. Bush dirá que Dios le dijo que hiciera la guerra de Irak, y Micheleti tendrá a su papable Cardenal golpista Madariaga para engañar a los crédulos con su funesta magia disfrazada de ‘la voluntad de Dios’, reconociendo al ilegítimo presidente Micheleti, hoy Lobo, (cuando en realidad el peso del reconocimiento lo pone el poderoso Obama-USA)
     
    Que cada uno reconozca como legítimos cargos a quien crea que son legítimos, sea al Papa católico de turno o al Caudillo de España por la Gracia de Dios. El funcionamiento de la ICAR, por la que el hilo clama SOS, se basa en estos reconocimientos de legitimidades (a mi modo de ver ilegítimas, grave falacia que se perpetúa …).
     
    – Por un lado el llamado Espíritu Santo soplando ‘nadie se sabe dónde –pero algunos siempre se arrogan afirmar dónde y cómo’, envolviéndolo todo en un halo misterioso, cuando de meras acciones humanas se trata-;  y fecundando a la llamada Virgen, según anónimos evangelistas ascendidos intersadamente a Santos …
    – por otro lado el Espíritu de Jesús guiando a los que pretenden que se dejan llevar por él;
    – por otro lado el espíritu de la llamada Santa Virgen intercediendo imaginariamente con sus imaginarios ‘poderes’;
    – por otro lado los espíritus de los llamados Santos haciendo milagritos cada uno por su lado, tirando en el cielo de la sotana o magna capa de los otros espíritus para conseguir cada uno sus particulares milagros concretos a conceder a sus engañados devotos …
     
    Por favor, la ICAR desde su fundación no es más que un instrumento humano, que bien utilizado puede ser útil a la causa de Jesús, pero que es cosa de personas humanas exclusivamente, un negocio multinacional muy rico y poderoso que gobiernan exclusivamente personas humanas muy interesadas, que hace eficazmente, pretendiéndose disfrazar de Santidad por todas partes, marketing con los  espíritus para asegurarse cuanta más clientela y poder.
     
    El único objetivo de las personas cristianas, como lo fue el de Jesús, son (deberían ser para los cristianos) exclusivamente las personas humanas empezando por las más necesitadas y débiles, oprimidas y  pobres: no la ICAR, ascendida convenientemente a Santa también, ni ninguna Iglesia.

    Vicente Ferrer, que ‘saboreó’ la casta sacerdotal y necesitó casarse con mujer, nos ha dado un ejemplo muy claro, sin atrincherarse en tantos espíritus y Santidades revoloteando a conveniencia. Y sin atrincherarse en la ICAR, que se pretende tan imprescindible para la salvación (continuando así su marketing falaz).
     
    Si Dios o todos esos espíritus gobernaran la ICAR, como aseguran interesadamente los Papas que se aseguran infalibles a sí mismos y a su ICAR -y se arrogan ser representantes de Dios en la Tierra (¡joder, qué arrogancia, tan descomunal como falsa!)-, no habría cometido la Jerarquía dirigente los atropellos y estropicios  inhumanos que ha cometido y sigue cometiendo (los ejemplos son demasiado constantes y abrumadores, desde apoyos desvergonzados a guerras y dictaduras criminales, hasta apartar del Magisterio y gobierno de la que llaman Santa Madre ICAR a media humanidad por el mero hecho de ser mujeres, y prohibir los anticonceptivos que hubieran evitado tantos abortos, y colocarse siempre en el bando de los poderosos …etc. etc.). No es más que mi modesta opinión.
     
    Tercero y por lo tanto último comentario mío en este hilo. Saludos cordiales.

  • Asun

    También, Mª Pilar, la sirio-fenicia, doblemente marginada, supo remover la parte femenina que Jesús tenía bastante bien integrada y unificada en su persona, aún siendo varón.
     
    Tampoco ahora  la mujer, a diferencia del varón,  es considerada  en toda su dignidad como persona, se la excluye por ósmosis, “principios”  y tradición: No se intenta siquiera entrar en si es igualmente digna que el varón independientemente de las funciones que cada uno pueda hacer según sus capacidades.
     
    Persiste la línea divisoria en el patrón mental de los dominantes. Es una gran dificultad en mirar a lo que es la persona con todo su potencial sólo por serlo,  instalándose por el contrario en el  juzgar o valorar por lo que sea, representa, según la escala particular,  preconcebida de lo que se toma como valor primordial: ser hombre antes que persona o ser humano.
     
    Pero creo que aún es más importante lo que afirma Lali. Bien, Lali, bien, estoy contigo que no se trata de una reforma de fachada ni de redistribución. El SOS auténtico es desescombro, la vuelta a los re- y en-encubiertos cimientos, a la Roca para dar voz a los olvidados y atender a los más necesitados según el proyecto genuino del Nazareno.
     
    Buenas noches a todos.
     

  • Lali

    Me gustaría añadir algo que obvié ayer por no alargarme más:
     
    El término iglesia está referido siempre en el NT a la asamblea de seguidores de Jesús, desde el pequeño grupo que se reúne en una casa (Col 4, 15), al colectivo que vivía en una ciudad (1Cor 1,2), a un grupo de comunidades (1Cor 16,1), o a la totalidad de seguidores (Col 1,18). Nunca, como es lógico, la palabra iglesia se usa para identificar a una estructura jerárquica. Llamar iglesia a dicha estructura resulta tan impropio como denominar comunidad de propietarios al presidente, secretario, tesorero y vocales de tal colectivo.
     
    Con todo, la cuestión no queda en lo nominal. La usurpación del nombre de iglesia persigue apropiarse de la realidad y, de paso, perpetuarse en el gobierno de esa realidad como estructura de poder.
     
    Ahora bien, esa maniobra tiene un punto débil: Carece de fundamento sólido, porque olvida cimentarse sobre la roca inamovible: el reconocimiento y la adhesión al hombre de Galilea y su proyecto. Se necesitó, por tanto, construir un andamiaje doctrinal al que se atribuyó carácter divino para asegurar la fidelidad absoluta de unas masas que creyeron a pies juntillas en tal ideario. La fe pasó, entonces, de adhesión a un proyecto (praxis) a convertirse en aceptación incondicional de un ideario. El disimulo de la trampa necesitó el establecimiento de un control férreo sobre el texto evangélico. Se fijó una indiscutible interpretación oficial y, durante siglos, se evitó el acceso directo al mismo evangelio.
     
    Pero la praxis determina la solidez del cimiento sobre el que se ha construido:
    “Todo aquel que escucha estas palabras mías y las pone por obra se parece al hombre sensato que edificó su casa sobre roca” (Mt 7, 24). Por cierto el término utilizado aquí, “roca”,  es el que designa la roca inamovible, no la piedra de lanzar, como Jesús llamó a Pedro. Naturalmente, al construir en falso, dice Mateo más abajo: “…y la casa se hundió. ¡Y qué hundimiento tan grande!”
     
    No vale pedir socorro y solicitar hacer reformas en la estructura. Se trata de devolver la “viña a su dueño” y construir como toca… desde abajo, sobre la roca inamovible. Sólo los olvidados, los insignificantes, los muchos que viven en la indignidad, carecen de todo y mueren de hambre tienen derecho a pedir socorro. 
     
    Aprovecho para expresar mi alegría por la intervención de Pepe. Te echaba de menos.
     
    Un abrazo
    Lali      

  • Héctor Rodríguez Fariña

    Miguel González, no te esfuerces tanto por defender tu posición. Esa posición no es tuya, por si no lo sabías, no es original, no te la has inventado tú. Es la opinión de un montón de personas dentro de la Iglesia que piensan como tú.
     
    Cuando tu pretendes estar defendiendo esa opinión sólo remachas una y otra vez lo que dicen todos los que están en tu sector humano. Es como si te plantaras delante de la Catedral de Burgos y empezaras a demostrar con sutiles argumentos que se trata de un edificio muy antiguo construido todo de piedra. Déjalo hombre que todos lo sabemos.
    Las posturas de los grupos están labradas en piedra y nadie va a intentar sacarte de esa postura que no es tuya.
     
    Igualmente dentro de tu misma Iglesia, de esta misma iglesia de todos, somos muchos los que compartimos otra forma de pensar distinta con Henri Bouland, con muchos Obispos y hasta cardenales de la Jerarquía, Teólogos, profesores de Universidades Eclesiásticas. Mucho de éstos comienzan a expresar públicamente su visión de la Iglesia, la mayoría se callan para no dejar ver que ya no están con la visión tradicional.
     
    Mi opinión es que todas las formas de pensar caben dentro de la Iglesia Universal. Es bueno que expongamos nuestras posiciones sean expuestas con amor fraterno para conocernos mejor, respetarnos y querernos más que es la única ley que nos dejó Jesús:
    Amaos. Es divertido enfrentarse unos a otros, lo llevamos dentro, la lucha para dominar al otro. A mi me encanta leer tus comentarios, pero comparto el talante de Luis González Morán, que sabe compartir sin condenara nadie, que escucha y dialoga. Este es Luis: “A mí, personalmente, sin embargo, no me parece la jerarquía lo más importante de la iglesia, sino el Espíritu de Jesús”. Vamos a dejarnos empapar por el espíritu de Jesús y todo los demás se nos dará por añadidura.
     
    Un abrazo universal de Héctor

  • mªpilar garcía

    Mi buen Javier, Pepe y demás compañeros/as con miradas abiertas.

    Me sigo preguntando, ¿como leen el Evangelio estos jerarcas y sus “fidelísimos seguidores”.

    ¿Jesús no se saltó las normas? hay pasajes sin fin, donde sin ningún pudor Jesús está, no solo a favor de las mujeres, las atiende, se acerca a ellas, se deja ¡¡tocar!! ¡oh! pavor “está contaminado” no sabe quien es esa mujer…

    Ellos sí lo sabían, y las utilizaban… vamos como hoy.

    De hecho en eso, los hombres han cambiado poco, también algunos de iglesia; las utilizan como meros objetos, y luego las denigran,  castigan,  difaman… después de usarlas.

    Pasajes hermosos como pocos: la samaritana, la pobre adúltera, (mientras ellos tienen la desfachatez de estar dispuestos a apedrearla) María la que tanto pecó, y más amó, de manera que su amor, la purificó, sin necesidad de contárselo a nadie…

    Todas las mujeres, algunas de ellas muy influyentes que le seguían fielmente: Mª Magdalena, a la que envió a decir a los hermanos. ¡¡vamos, salir afuera, id a Galilea hay que trabajar!!

    ¡¡Precioso!! fue una mujer la que les despertó del aquel letargo que el miedo, les había paralizado…

    ¿Como que Jesús no estaba al lado de las mujeres, y que no contó con ellas?

    De verdad, eso de acomodar la lectura del Evangelio, para tranquilizar las conciencias cargadas de oscuridades…

    Mientras la mujer siga siendo, “materia y ocasión de pecado”…

    ¡Que vergüenza! ¿de donde salen los malos deseos? ¿de la mujer? ¿o de los ojos sucios de quienes las desean y miran, solo para su disfrute, para saciar los deseos incontrolados de sus recalentados cerebros?

    Ahí está el verdadero pecado de la humanidad; somos incapaces de madurar, crecer, intentar ser, esos seres humanos capaces de hacer maravillas; pero todavía estamos en este sentido, parados en la prehistoria.
    mª pilar

  • Javier Renobales Scheifler

    ¿Demagogia? Lo es el uso de ideologías radicales, o de falsas promesas, o la manipulación deliberada para ganarse el favor del pueblo –que en los tres casos resulta engañado-. Por ejemplo me parece demagogia con mayúsculas, mágica y gratuita:
     

    la práctica católica oficial, que sospecho respaldarías, Miguel González, por la que uno asegura al personal crédulo que es Dios quien le ha elegido Papa a él, cuando lo cierto es que son los Cardenales nombrados a dedo por el Papa para elegir al siguiente Papa, quienes lo eligen entre ellos (120 católicos cuidadosamente seleccionados endogámicamente y a dedo usurpan la función del Pueblo de Dios, de más de mil millones de hijos de Dios.

    ¿Alguien sabe cuánto nos cuestan estos Papas, sus Jerarquías y sus demagogias? Creo que  demasiado, sobre todo viendo lo rica que se ha hecho la ICAR. Miguel, si quieres dices claramente si afirmas o crees esto que asegura el Papa: que Dios ha elegido Papa al Papa.
     

    Y me parece demagogia asegurar al personal crédulo que es Dios gobierna la ICAR, cuando la gobierna precisamente el Papa que lo asegura y según su criterio. A eso creo que lo llaman fe católica. A mí me parece demagogia, dicho sea con los debidos respetos que se merezcan quienes eso hacen.

     

    Y me parece demagogia asegurar algo así como que la fe en la Santidad de la ICAR es inseparable de la fe en Dios. Lo cual es falso a mi modesto entender, pues yo tengo fe en Dios y estoy plenamente convencido de que la ICAR no es Santa por ningún lado que se le mire.

    ¿Planteas Miguel si Jesús era machista? Yo te digo lo que pienso al respecto: Creo que no, claro que no, creo que consideraba a la mujer igual al hombre. Pero vivió en una sociedad fuertemente machista, lo cual le condicionó, como hombre que era, y además hombre pobre y marginal. Probablemente Jesús entendió (yo tengo muy pocos conocimientos de cómo era la situación de Jesús a este respecto) que hacer con las mujeres diferente de cómo hizo, le hubiera complicado en aquella sociedad más aún la siembra de su mensaje de salvación por el amor, la cual le llevó a ser asesinado.
     
    Pero ¡por Dios! hoy vivimos en una sociedad totalmente diferente de la judía de hace 2.000 años; es evidente que hoy la mujer se ha emancipado muchísimo a base de luchar y luchar, y ha demostrado una y mil veces que es tan capaz y tan necesaria o más que el hombre prácticamente en todos los terrenos. Vivimos en una sociedad que pugna por ser menos machista y más igualitaria cada vez, a pesar del pésimo ejemplo de la jerarquía de la ICAR, que va como de costumbre a la zaga de la sociedad civil en derechos humanos, en libertad de conciencia, en democracia, en suma en cosas imprescindibles para ser buen cristiano: cuando  esa Jerarquía debería ser su luz  del mundo, y no lo es. De ahí el título del hilo que comentamos, creo.
     
    De nuevo el machismo de la jerarquía de la ICAR es una rémora importante contra la liberación de las personas, todo lo contrario que fue la causa de Jesús: el Reino del amor, el Reino de la Liberación.
     
    Tratar de justificar, como entiendo haces, Miguel, que hoy también está bien apartar y seguir apartando a la mujer, por el mero hecho de serlo, de la Jerarquía y del Magisterio católicos, y robarle el sacramento del orden (al que tiene el mismo derecho que los hombres), me parece obsoleto, anclado en el pasado. E injusto e inhumano. Saludos cordiales.

  • ana rodrigo

    Miguel González, los hombres que acompañaron a Jesús eran judíos y semitas y de raza blanca, ¿Por qué ahora no son solamente judíos y semitas y de raza blanca los dirigentes de la Iglesia?
     
    Si Jesús ya nació perfecto, como afirma doctrina oficial, ¿por qué dice el NT que Jesús crecía en sabiduría? Es obvio que Jesús fue un hombre de su época aunque  vivió bastante al margen de las costumbres de la época, especialmente con las mujeres, en su discipulado había hombres y mujeres.
     
    Lo que ocurrió para más INRI y perjuicio de la Iglesia es los evangelios los escribieron hombres, estos sí de su época, machistas, androcéntricos y patriarcales como los que más y dieron la versión que, según su mentalidad, era la de su época, convirtiendo a las mujeres en personas de 2ª.
     
    Y no quiero desviar el tema porque, si te interesa saber, Miguel, lo que se ha escrito en atrio sobre este tema, puedes buscar los enlaces de años anteriores y enterarte un poco, porque está pez en este tema como en tantos otros.
     
    Definición de progresista según el Diccionario de la RAE: Dicho de una persona, de una colectividad, etc.: Con ideas avanzadas, y con la actitud que esto entraña.

    Definición de oximorón en la misma fuente: La palabra oximorón no está registrada en el Diccionario. Las que se muestran a continuación tienen una escritura cercana.

    Lo de padre y madre, “es la pera”  ¿Acaso tu imaginas a Dios como un hombre anuestra imagen y semejanza? ¡Anda ya,! que nadie ha visto a Dios.

    PD. Me he sentido ruborizada al leer lo que  Javier y Josefina han escrito sobre algunas mujeres de atrio. El tema no está en estas tres o cuatro mujeres, sino el la dignidad de toda mujer que, en igualdad de condiciones que el varón, quede excluida de determinas funciones.

  • pepe sala

    Siendo impresentable el argumento que comentas,  Javier Renovales ( el referido a las mujeres y que estoy perfectamente de acuerdo en tus réplica) hay algo mucho más grave en el comentario del subsodicho:

    “”¿Otro oxímoron, figura interesante en la literatura pero letal en la vida cotidiana? No existe el padre-madre. Como no existe el padre-amigo-del-hijo. “”

    Por Tutatis !!”… o yo soy extraterrestre. o mis hijos son gilipollas porser amigos de sus padres o éstos tipos de la ICAR van a seguir jodiendo la convivencia familiar ( y la otra también) ” IN SÉCULA SECULORUM”.

    Encima tienen la desvergüenza de hacer manifestaciones presentándose como ejemplos de familias cristianas. Pues como sean todas así mis nierucos-as no se bautizan ni aunque les emborrachen con incienso y ” mirra”…

    Desesperante. Me voy que ya me carga el asunto de los meaplias ” ejemplares”

  • Miguel González

    Saludos a Javier Renobales Scheifler.

    Ha hecho usted una mala interpretación de mis palabras adaptándola a los fines de su faramalla. Yo hablaba de las motivaciones de Jesús: “las costumbres de la época y el sentido práctico así lo aconsejaban”. Es decir, Jesús no adjudicó a las mujeres su grupo mayores prerrogativas (y mira que esta es la versión buena) porque seguramente si lo hace y establece como “piedra” a una mujer posiblemente las risas se estarían escuchando hoy. Es lo que había entonces. No prejuzgues mis pensamientos sobre el particular. No prejuzguéis y no seréis prejuzgados. Me sonrío ante el ver, juzgar y actuar. Quien juzga se equivoca.

    Y de ahí se resbala usted por el lugar común del machismo y otros tópicos: sota, caballo y rey. ¿Dice Javier que Jesús era machista? No lo parece que lo fuera pero no es bueno empezar un proyecto con todo un mundo en contra. Según su manera de interpretar mis palabras se diría que presupone que Jesús también fue machista. No; pero el ambiente de su época no interpretaba las cosas como se juzgan hoy.  Entre otras cosas porque el sentimiento hacia la mujer ha cambiado radicalmente desde la época de Jesús. Repito que criticar el pasado con las categorías de hoy está chupado pero no tiene mérito alguno. Tal vez un día torturar a un animal para disfrute de la concurrencia sea considerado una salvajada, pero hoy muchos defienden tales prácticas (yo no). Quiero decir exclusivamente con el ejemplo que las cosas cobran sentido con el transcurrir del tiempo y la moviola no sirve de nada. Salvo para quienes pretenden pescar en río seco.

    Hacer demagogia es gratis. La demagogia es algo que los políticos perpetran día sí y día también. Del ámbito político se ha mimetizado a otras esferas. ¿Alguien sabe cuánto le cuesta a los contribuyentes cada “jornada de estudio” o asamblea  de militantes de un partido político, hasta el más revolucionario y rompedor? Pues eso. Que parece que ahí lo ven bien algunos y no se paran a pensar cuántas personas podrían comer con el montante de tal actividad. Toda estructura necesita recursos para todo. Es de sentido común y no es bueno hacer demagogia con eso. Jesús fue pobre y el pueblo está en paro. Menos puestas en escena de los políticos y más preocuparse del empleo.

    Por ejemplo.
     

  • Javier Renobales Scheifler

    Miguel González,
     
    Es inhumano e injusto lo que dices; dices, refiriéndote a excluir a las mujeres, que “las costumbres de la época y el sentido práctico así lo aconsejaban”.

    Que las costumbres de la época de Jesús fueran machistas nunca hizo ni hará bueno ni humano el machismo. Es la sociedad civil una vez más la que tiene que dar lecciones de humanidad, civismo, democracia y respeto a las mujeres (es decir, de cristianismo básico) a esa jerarquía de la ICAR tan desviada, que sólo se moderniza en lo que le conviene, pero discrimina inaceptablemente a las mujeres (con el apoyo rotundo de Miguel González, casualmente macho).
     
    Esa jerarquía para lo que quiere no sigue ni de lejos el ejemplo de Jesús, que era pobre y no tenía donde reposar la cabeza: Los dirigentes de la ICAR, los que se han apoderado de la ICAR, son materialmente ricos, no les falta de nada, mientras que Jesús era pobre, defendió a los pobres y oprimidos y por eso lo mataron, por causa los pobres.
     
    Por el contrario los jerarcas dirigentes viven en palacios (menudos jardines le enseñaba en su paseo codo con codo el Papa al terrorista matón Bush –el primer terrorista, me decía uno de mis tíos jesuitas- refiriéndose a Bush, no al Papa) y tienen la vida material bien asegurada de por vida; el Papa se mueve en lujosos automóviles, y se gasta montones de millones de euros en cada uno de sus viajes que llaman ‘de apostolado’. Es un Jefe de un Estado independiente (gracias a un fascista dictador como Musolini, qué casualidad) Para lo que les conviene bien que se han modernizado, los dirigentes dictadores católicos. Pero en machismo no, están peor que hace 2.000 años.

    Y no vuelven al arameo, idioma de Jesús, sino al latín, legua del Imperio, hoy muerta como los objetivos vaticanos.
     
    Jesús vestía como los demás, como el laico pobre y marginal que era. Papas y demás jerarcas van uniformados con interminables botonaduras, alzacuellos, fajines, sombreros y crucifijos de diseño que los destaquen de los laicos y de la gente sencilla y pobre. Y entre los edificios más destacados por doquier, en muchos sitios los más, están los católicos, loS de la ICAR. Columnas (puro materialismo del que denuncia Munilla) como las del Vaticano no hay por ahí, aunque Jesús no tenía ni casa propia -como tantos millones hoy-, era un marginal.
     
    Pero las mujeres siguen excluidas por ser mujeres, por la Jerarquía católica y por Miguel González, porque la época en la que vivió Jesús era machista, pisoteaba a los débiles, y por tanto a las mujeres de aquella época. Es la sexualidad desviada de los dirigentes católicos, . Es indigno e inhumano, pero es así, es lo que hay, Miguel.
     
    Ya ves, amigo Luis González Morán, de dónde vienen las agresiones de los dirigentes católicos a las mujeres. Mucha Virgen María Inmaculadísima sin pecado y demás inventos y monsergas, pero las mujeres a la cocina, a fregar barrer y limpiar, que la religión y la teología y el gobierno de la ICAR son cosa de hombres, de Dios según el catecismo machista de los Papas; como el fútbol.
     
    Que vergüenza. Y qué desvergüenza. Supongo que no me repetirás lo de los prejuicios, porque tu ‘es lo que hay’ no es más que eso.

    Sí, sí, SOS por la ICAR de hoy y vieja de hace tantos siglos: la llevan de cabeza, mejor dicho, de culo. 

    Saludos cordiales.

  • Vicente


    REFORMA TEOLÓGICA, ESPIRITUAL Y PASTORAL. Ya conviene.

  • mªpilar garcía

    Quizá, así le va a la iglesia poder… por no contar con las mujeres…
     
    Bueno, ¡¡si se cuenta!!
     
    Para fregar, limpiar, “consolar…” trabajar por amor como mulas, coser, lavar sus ropajes, manteles etc. etc.
     
    Hay grandes mujeres, no solo teólogas, ¡¡mujeres!! que han comprendido a lo largo de la historia, la maravilla que Jesús nos dejó.
     
    Y gracias a ellas, en miles de lugares, sigue en pie esta iglesia, porque han aportado, no solo su capacidad intelectual, que es ¡¡grande!!
     
    Especialmente, han aportado ¡¡su humano corazón!! Algo que en estos varones, falla de manera estripitosa.
     
    Y así nos va…
    mª pilar

  • Miguel González

    Reiteran algunos eso de la “discriminación” de las mujeres en la Iglesia “simplemente por ser mujeres”. No, simplemente porque en el círculo más íntimo de Jesús no había mujeres. Jesús, eligió para dirigir su proyecto a hombres. Seguramente porque las costumbres de la época y el sentido práctico así lo aconsejaban a pesar de que entre los seguidores de Jesús sí había mujeres, no así entre quienes recibieron encargos importantes. No sabemos el por qué pero sabemos que fue así. Es lo que hay. La Iglesia sigue fiel a esa tradición no por tratarse de mujeres sino por tratarse de la práctica de Jesús. El rábano no se debe coger por las hojas.
     
    A Lali le digo que todo grupo humano funciona como ya sabemos y la mejor respuesta a tu pregunta sobre la intervención de Dios es que no ha evitado otras debacles, alguna y reciente y muy sangrante. Luego todo grupo humano debe contar con el material del que estamos hechos. Un barro no del todo bien cocido como se dolía el poeta. ¿Alguien conoce algún grupo, alguna hermandad, democrática, informal, etc., que haya durado algo más de un par de veranos? No me refiero a grupos que van sustituyendo a sus miembros y el grupo sigue pero con otros participantes. La respuesta a esa pregunta nos ahorraría muchas disputas sobre el sexo de los ángeles.
     
    Hay tanto que comentar, pero brevedad obliga. Hay aspectos importantes que aparecen fugaces como lluvia de estrellas en un escrito. Daría para mucho hablar del padre y de la madre o de la paternidad y la maternidad. La ocurrencia de llamar a Dios “padre y madre” no es sino una concesión a la galería, a los signos de los tiempos. El Padre y la Madre están resueltos en la Iglesia desde antaño. ¿Qué significa en la práctica un ser que es padre y es madre a la vez? ¿Otro oxímoron, figura interesante en la literatura pero letal en la vida cotidiana? No existe el padre-madre. Como no existe el padre-amigo-del-hijo. Hay paradigmas que vienen de más atrás que el mismo cristianismo. A veces pretendiendo estar al día nos llevamos por delante algo más que palabras. Se trata de arquetipos profundamente arraigados en la entraña del ser humano. Y ya se sabe que dar coces contra el aguijón no sirve de nada. Y no evita el dolor.
     
    Si algunos conocieran las aguas turbulentas de las que procede la palabra “progresista” tal vez no la utilizarían como abracadabra de todas las virtudes y seña de identidad de todas las esencias.
    Saludos.

  • Josefina G.C.

    Me sumo a tu agradecimiento Javier a los comentarios de Mª Pilar Garcia y Zugarramurdi, Lali, Asun y Ana Rodrigo. Qué distinto sería ese llamado Magisterio católico que engañosamente llaman ‘de la ICAR’, si mujeres como vosotras hubieran tenido la más mínima oportunidad de intervenir en él.”
    Que distintos serían y habrían sido los duros caminos de tantas mujeres en la historia y actualmente, con mujeres como vosotras. Muy otra habría sido la Historia de la Humanidad con una Iglesia verdadera y autenticamente  MADRE.
    Saludos cordiales.
        

  • En este mundo nuestro, todo, es jerarquico u holoarquico, las jerarquías son naturales y legitimas. Pero estas jerarquias pueden degenerar y debenir en patologicas. Por ejemplo, las jerarquias de dominio como las dictaduras, que imponen terrorificamente su dominio. la ICAR fue en el pasado, una jerarquia patologica que se imponia con terror (inquisición e infierno) y donde hubo siempre queda…
    Sigue siendo la Iglesia, una jerarquia patologica de dominio condenable. pero hay que saber distinguir, no todas las jerarquías son patologicas.

  • Javier Renobales Scheifler

    La ICAR (sus dirigentes, el Papa y sus mandados jerarcas) identifican su ICAR consigo mismos.

    Así  por ejemplo, cuando hablan del famoso Magisterio de la ICAR: en realidad se refieren a suyo propio, los confunden, se refieren al Magisterio que nos dictan ellos solitos –dictadores, con el cuento ese de que se lo sopla Dios- para toda la ICAR y dirigiéndose muchas veces a los que llaman ‘personas de buena voluntad’, aunque no sean católicas.
     
    Por supuesto es un Magisterio machista 100% dada su bestial e irracional exclusión 100% de las mujeres por el solo hecho de ser mujeres. (Oh, ¡qué agresivo visceral!, dice en el hilo de Ottaviani mi amigo sacerdote Luis González Morán, el cual se muestra tan cordial, pero sólo ve la agresividad de la paja ajena, no la de la viga gigante de su Jerarquía machista a la que siempre defiende, pues alguien se ha inventado y les ha impuesto que hay que estar en comunión con semejantes dictadores.

    Pero Luis: cuándo vas a admitir que la agresividad la empiezan los jerarcas, que por ejemplo excluyen a las mujeres por el sólo hecho de serlo; bueno, de hecho lo hacen también quienes obedecen sumisamente a esa dictatorial Jerarquía, y aceptan sumisamente 100% su infumable llamado Magisterio, que nos quieren hacer pasar por Magisterio de la Iglesia de Jesús, cuando sólo es Magisterio de la Jerarquía machista dictatorial católica. Si amamos la verdad, creo que deberíamos llamarlo Magisterio de la Jerarquía machista católica, no Magisterio de la Iglesia de Jesús. Así , tan mal, está estructurada  por hombres (ojo, no por Jesús), la ICAR.
     
    Por ejemplo el Catecismo que los jerarcas, y los que les obedecen, llaman ‘Catecismo de la ICAR’ es el catecismo dictado 100% por los dictadores Wojtyla y Ratzinger, aunque lo disfracen diciendo que han recogido las sugerencias de sus mandados nombrados dictatorialmente a dedo, Obispos que ejercen su jerarquía aquí y allá. Desde luego no han permitido la menor intervención del Pueblo de Dios, sino ni siquiera de los católicos de a pie. Esa intervención no existe para nada, está excluida en la organización de la dictatorial estructura que han impuesto a la ICAR. Me parece anticristiano.
     
    En mi manera de entender a Dios, Dios no puede amparar y no ampara semejante abuso de esos hombres. Disfrazar ese abuso de ‘las puertas del infierno no prevalecerán contra ella’ me parece un craso error (no sólo porque Dios no interviene, sino porque nunca podría hacerlo amparando semejantes abusos): esa dictadura son buena parte de las puertas del infierno, y esa dictadura ha contaminado hasta la médula la estructura, que es puramente humana, de la ICAR, como la de cualquier Iglesia.
     
    Es puro franquismo, pura dictadura,  (nunca condenados por la jerarquía católica –que los hizo-), algo totalmente anticristiano, puras leyes fundamentales del Reino de Franco, hoy del Juan Carlos que nos puso Franco como Jefe de Estado.
     
    Agradezco especialmente los comentarios de Mª Pilar Zugarramurdi y García, Lali, Asun y Ana Rodrigo. Qué distinto sería ese llamado Magisterio católico que engañosamente llaman ‘de la ICAR’, si mujeres como vosotras hubieran tenido la más mínima oportunidad de intervenir en él. Pero desgraciadamente no la tendréis, no os dejarán.
     
    Nuestra sociedad española tan católica sigue siendo tan machista: una cosa parece que va con la otra. Por ejemplo el deporte en España, todo fútbol, todo machos, pan y circo. Una persona pobre, si es mujer, está doblemente oprimida.
     
    O sea que el Reino por el que luchó y murió Jesús es más vuestro, hoy por hoy, que de los hombres, y sobre todo muchísimo más que de la famosa Jerarquía católica, tan dictatorial, la cual no olvidemos que nunca se dejará arrebatar en la ICAR los injustos privilegios que se ha arrogado desde hace tantos siglos, incluso haciendo Santos a los anónimos evangelistas, y adueñándose 100% de la ICAR.
     
    Son esa jerarquía, con sus Papas a la cabeza, el principal cáncer letal de la ICAR; no es más que mi modesta opinión. Hoy por hoy me parece incurable ese cáncer.
     
    Lo siento, sé que las palabras duras molestan, pero las cosas o se dicen claras o se disfrazan; –‘sepulcros blanqueados, raza de víboras …’ decía Jesús- (normalmente me habré quedado corto, entre otros errores). Saludos cordiales.

  • Marìa Pilar Zugarramurdi

    SOS por la Iglesia:
    Considero que el P. Henri Bouland ha sido muy valiente al interpelar de ese modo al Papa.
    Sin embargo, pienso que hay, en su escrito,  muy importantes omisiones:
    LA EXCLUSIÒN DE LAS MUJERES: que la Iglesia siga todavìa pegada a las ideas de Aristòteles, quien pensaba que la mujer era un hombre incompleto, dèbil mental… un ser infrahumano.
    La Iglesia tambièn, ha sido una de las instituciones màs dictadoras del mundo, porque nos ha secuestrado la conciencia y nos ha hecho creer que necesitamos de ella para darnos su gracia, su salvaciòn…Desde Sto. Tomàs sabìamos que la màxima regla de moralidad es la propia conciencia, pero se sigue oponiendo a la libre decisiòn de las mujeres en el caso del aborto. Quiere seguir colonizando y adoctrinando nuestra conciencia.
    Para mi, mucho màs importante que la modernizaciòn del lenguaje y de sus ritos, son los derechos humanos que aùn no los ha firmado.
    El vino nuevo no se puede echar en odres viejos…Nuestra Iglesia catòlica no representa la herencia de Jesùs, aunque haya excelentes personas en ella.
    Con agradecimiento a Atrio y  su equipo
    Un abrazo

  • ana rodrigo

    Nota: he dicho los tres últimos comentaristas sin saber que Asun se había colado mientras yo escribía. No quiero dejarme a nadie.

  • ana rodrigo

    Gracias, Lali, gracias, maravillosa exégesis.

    Gracis Fico, muchas gracias, me encanta leerte, se nota que sabes más que teología, sabes vida…

    Gracias Teófilo Liberto, por tu honestidad, estoy segura de que esta honestidad te llevará lejos. En algunas cosas te veo “verde”, pero sincero y buscador.

    Gracias al resto de los comentaristas aunque sólo haya citado a los tres últimos.

    El hilo ha levantado el vuelo y ha conseguido un nivel muy enriquecedor, ejemplo de lo que deseamos y hemos expresado de lo que debe ser atrio.

  • Asun

    Lali, Mª Pilar, gracias por vuestra contundencia. Vuestra Confianza y  Fe en la persona de Jesús de Nazaret.
     
    No hay más ciego que el que no quiere ver. Para qué la sal, la levadura, el candil y la diminuta semilla, si ya tenemos una jerarquía que brilla,  piensa por nosotros,  sabe más que nadie de servicio y de compartir repartiendo  bienes. Pues entonces calladitas, que además somos inútiles mujeres. Para interpretar a Jesús,  ya están ellos, los hombres. No olvidéis que lo vienen haciendo muy requetebién así desde el siglo IV, lo menos.
     
    Así que os invito a que rectifiquéis y os pongáis gafas nuevas, porque parece ser que donde Jesús dice digo, ellos, y la Tradición que los sustenta, dicen Diego.  Pero además tenemos que estar agradecidas por ello. Toda Europa agradecida y deudora de la Madre Iglesia, que no ha podido parar los  cruentos  enfrentamientos, las injusticias ni las violentas  guerras fraticidas en su seno patriarcal.
     
    Al menos ser compasivas, poneos en la piel del otro, porque el otro no va a cambiar. Está muy bien enseñado.
     
    Siento la ironía, pero ya está bien de ser tan desmemoriados y tan delimitados. 
     
    Os despido con las palabras de Mariana Gómez sobre Monseñor Samuel Ruiz:…“Con profundo respeto y por congruencia evangélica compartió su autoridad con el pueblo y con ello, reivindicó la autoridad de los olvidados y las invisibles de la historia, que reconocieron su derecho a hablar y actuar con la autoridad que brota del saberse hijos e hijas de Dios.”…
     
    Buenas noches a todos.

  • teófilo liberto

    Para Fico Sánchez  Peral:

    Algo así es, sí. Sin embargo, no es tan angustioso como parece, al menos en mi caso, pues lo parezca o no, yo amo la vida, intensamente: ahora mismo en que escribo este comentario escucho en mi portátil música (clásicos del rock and roll, ahí es nada); hace un rato aún estudiaba, en mi cuarto, rodeado de mudos libros que parecen como querer mirarme y, sobre la mesa de estudio, una pareja de periquitos tengo que desde luego no hablan pero que, a base de escuchar voces, sonidos, emisoras de radio, etcétera, como que balbucean algo, como que quieren balbucear algo…

    Es parte de mi remedio para cuando estoy tenso por dudas metafísicas varias; remedio que también pasa por el deporte, la meditación, el cine, la amistad, la creación literaria, el senderismo, los animales domésticos, la filosofía, la teología, el teatro (como que iré este sábado próximo, Dios mediante y aunque a la ortodoxia eclesial le parezca mal, a ver una pieza teatral del irreverente y anarquizante Darío Fo)). Y que pasa por una constatación mía, supongo que no intransferible pero sí muy personal, muy fruto de la experiencia: en la ICAR hay gente maravillosa, sin duda, pero es una de las instituciones en que más cretinos e hipócritas me parece haber conocido, por metro cuadrado; de modo que no vale la pena comerse la bola en exceso por esos tipos sino por el Reino de Jesús de Nazaret.

    Saludos.

  • teófilo liberto

    Ana Rodrigo:

    No pensaba añadir ningún comentario mío más al hilo del artículo que nos convoca, pero me decido a añadir uno, que pretendo sea, ahora sí, el último. He de confesar que con las personas me gusta polemizar menos que con las ideas; si he polemizado con las personas, en este caso con una persona, mujer, que además no conozco personalmente, y he polemizado en exceso, de malas maneras, etcétera, lo siento.

    Ahora bien, si paso a analizar ideas, las tuyas, por ejemplo, compruebo que en parte las comparto y en parte no, y tan amigos (lo mismo me sucede con las del jesuita P. Boulad). Las comparto en lo que tienen de llamada a la conversión, a la vivencia de un cristianismo social, comprometido, samaritano, crítico con los poderes establecidos… Con todo, tengo mis reservas por lo que se refiere a tus deseos de reforma en claves feministas, en claves simpáticas hacia las reivindicaciones de los colectivos homosexuales, por ejemplo, que no sé si haces tuyas o no, pero que he comprobado que en Atrio cuentan con entusiastas defensores, que no se encuentran precisamente entre los episcopados del orbe católico, por más que nunca he rehuido leer los libros de Carlo Maria Martini, en uno de los cuales (Coloquios nocturnos en Jerusalén, concretamente en este) no condena a los homosexuales, como mínimo no los condena.

    En definitiva, que yo trato de ver, juzgar y actuar en consecuencia; y lo que creo ver en la Iglesia no va precisamente en la línea progresista que muchos desean para la ICAR.

    Simplemente esto. Desde luego, con una certeza absoluta yo no puedo saber si Jesús de Nazaret quiso fundar la Iglesia, sólo que si tuviera que poner en una balanza pros y contras o reparos a esa tesis fundacional, seguirían pesando mucho más los pros a favor de que en efecto sí fue voluntad de Jesús de Nazaret, el Cristo, el Mesías, fundar la Iglesiaque por cierto es, constitutivamente, semper reformanda.

    Parafraseando a san Pablo, que hablaba de la resurrección no recuerdo en qué carta (de lo inútil de nuestra fe crística si no hubiera Cristo Jesús resucitado), diría por mi parte que si no hubiese sido voluntad de Jesús la constitución de una comunidad de seguidores capaces de extender su mensaje de salvación al mundo entero (única razón de ser de la Iglesia, por cierto), me parecería hasta absurdo dedicar mi tiempo a estos menesteres, a estas controversias. 

    Asimismo,  en contra de algo que tú has dicho en uno de tus últimos comentarios, yo no deseo creer en una parte del Concilio Vaticano II desechando otras partes, como no deseo creer en una parte del Magisterio, o en una parte de la Tradición, o de los mismísimos Evangelios; yo deseo creer en todo lo que haya que creer, para la plenitud de la vida cristiana. Es decir, que aunque me pese por mi mediocridad, cobardía, dudas o egoísmo o por lo que sea, mi propósito es creer en plenitud, cum Petrus et sub Petrus, no al margen del sentir de la Iglesia universal. Por lo que, me parece a mí que puedo tratar de acoger la propuesta del ilustre jesuita Henri Boulad, y tratar de insertarla en la gran tradición eclesial, a la luz de la Revelación y bajo la tutela del Papa y de los obispos en comunión con él.

    Es así de simple como soy: entre “hacer caso” a -pongamos- Hans Küng y hacerle caso a Benedicto XVI trataría de hacerle caso a mi conciencia -recordemos en esto al insigne John H. Newman-, sólo que mi conciencia me exhorta a buscar ser confirmado en la fe por el sucesor de Pedro, más que por la genialidad de Hans Küng, que no discuto y de la que me gustaría seguir aprendiendo, en la medida de mis posibilidades, acaso también porque tengo una insaciable curiosidad intelectual.  Y ello es así, estimo, porque no entiendo otra manera de ser católico: Francisco de Asís y Guillermo Rovirosa, dos colosos como discípulos de Jesucristo, amaban con pasión a la Iglesia, santa y prostituta según san Agustín; y la amaban hasta derramar lágrimas por ella y tolerar ser incomprendidos y perseguidos por hijos de la Iglesia.

    Por último, espero que las propuestas de reforma eclesial y de evangelización auspiciadas por el jesuita egipciolibanés Henri Boulad vayan en esa línea.

    Saludos.

  • Lali

    Hola Luis. Agradezco tu esfuerzo. Intentaré ser breve, aunque haya que entrar en ciertas finuras exegéticas.

    1º Sobre el texto de Mt 16, 17-19, observa que Jesús empieza llamándo a Pedro por su nombre: Simón. Pedro nunca fue nombre propio en ningún sitio hasta después de que Jesús le apodara con el término griego que significa “piedra”. Matizo: piedra que se puede lanzar. El segundo término griego que Jesús emplea es distinto al primero y significa “roca”, roca inamovible. Está referido a la declaración de Simón: “Tu eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo”. Ese es el fundamento de la asamblea de los que siguen a Jesús de Nazaret, no Simón. En la traducción de Mateos-Schökel se lee: “Tú eres Piedra, y sobre esa roca voy a edificar mi comunidad…”.

    2º Respecto a Hech 20, 28, si lees en el original, más arriba, en el v. 17 verás que Pablo se está refiriendo a los ancianos (presbíteros) de la comunidad de Ëfeso y les dice que El Espíritu Santo les ha puesto como guardianes (episcopos) para que velen como pastores. Episcopos no es un cargo, sino un servicio de los ancianos de la comunidad (presbíteros) Se trata de una función, no de un cargo jerárquico. Es cierto que la figura del pastor servía en el contexto del AT para designar a los dirigentes del pueblo. A esos dirigentes se refirió Jesús llamándoles ladrones y bandidos. Y marcó el esquema a seguir: “Yo soy el modelo de pastor”. No hay jerarquía, sino un “pastor modelo que se entrega él mismo por las ovejas”. Se habla de servicio hasta la muerte (He visto que Mª Pilar lo ha dicho mejor que yo), no de jerarquía.

    3º En cuanto al texto de finales del siglo I, de 1 Timoteo, el sentido del término episcopos no se corresponde con lo que significó posteriormente. Tiene sentido genérico de supervisor. Las cualidades que refiere a continuación son rasgos comunes que identifican a una persona respetable. Tú has citado sólo algunas de esas cualidades, pero conviene citar algunas más: “tiene que ser intachable, fiel a su única mujer, juicioso, equilibrado, bien educado, hospitalario, hábil para enseñar, no dado al vino, ni amigo de reyertas, sino comprensivo, pacífico y desinteresado…”.

    Lamentablemente, cualquier estructura jerárquica lo tiene crudo para justificar su razón de ser en el NT. En las citas que me has dado, observarás que el término iglesia siempre está referido a la asamblea de seguidores, los que conforman la sociedad alternativa que se opone al sistema de poder.

    Siento haberme alargado. No he podido abreviar más.

    Un abrazo Luis.
    Lali     

  • Fico Sánchez Peral

    Amigo Teófilo:
     
    Agradezco -y mucho- tu esfuerzo, tanto por entender los planteamientos ajenos, como por tratar de facilitar la comprensión de los tuyos. No obstante, te seré muy franco; me he leído cuatro veces seguidas tu comentario y otra más por partes, para contestarlo, y no encuentro más razones para acercar posturas… que el agradecimiento a tu generoso esfuerzo.
     
    Repaso tu comentario y en su primer párrafo aceptas que yo pudiera tener algo de razón (cosa que agradezco) y luego dices: “…cuando Benedicto XVI… desea confirmar en la fe… poniendo de ejemplo… a Francisco de Asís… debe sentirse interpelado…”  ¿Bueno y qué? Pues que se confirme a sí mismo con ese ejemplo, que es él quien vive rodeado de lujo y no los pobres.
     
    En el segundo párrafo te muestras de acuerdo con el diagnóstico de Boulad y puede que hasta con las soluciones que apunta. Y de ahí pasas a comentar lo de los libros de Carlo María Martini (¿quizá como concesión al acercamiento?) “…y no me han escandalizado… porque defiende la necesidad de revisar la moral sexual, la exclusión de los divorciados… la posibilidad de ordenar…” Bueno, ¿y por qué habría de escandalizarte?
     
    En el tercero dices: “…me gustaría que los posibles remedios… viniesen más de propuestas como… la de… Boulad… que de la FSSPX o la FSSP… que no toleran… la comunión en las manos… Pero es que resulta… que las autoridades de la Iglesia… prefieren… esa manera… más piadosa…”. ¿Y eso es todo? ¿Se trata de lo que la autoridad prefiera? ¡Pues menos mal!
     
    Y finalmente en el cuarto párrafo vuelves a hacer lo mismo: “…una cosa es lo que se desea… prefiere…  y otra lo que el Magisterio enseña…”, después viene lo de la Ultima Cena y finalmente “…Pero ya ves, es lo que los obispos y el Papa, al parecer prefieren”.
     
    Como ves en todos los párrafos primero haces una “concesión” y luego vienes con “la rebaja”. Las concesiones te honran, pero son más valiosas por tu honesto esfuerzo de comprensión que por lo evidente de su contenido. Y las rebajas me parecen tan inconsistentes que sólo se me ocurre decir: ¡pero aún estamos ahí! En el fondo te veo desgarrado (y por eso agradezco tanto tu honesto esfuerzo) entre lo que de verdad piensas: las “concesiones”, y aquello a lo que te debes más por obediencia que por convicción: las “rebajas”.
     
    Como no descubras pronto la verdadera libertad te vas a pasar la vida discutiendo de religión y te aseguro que la fe es otra cosa. En todo caso y muy por encima de todo, gracias por tu generoso esfuerzo y corrección.
     
    Un abrazo. Fico.

  • ana rodrigo

    Querido Luis GM, tres cositas:
     

    1-   ¿Cómo se va ha prescindir de la exégesis? Tengo entendido que sin exégesis desembocamos en el fundamentalismo.

     

    2-   Al lado de estos textos que citas podríamos citar otros que dicen lo contrario: El que quiera se el primero, sea el último; no dejéis que os llamen maestros,… y creo que hay más que, como no tengo la formación bíblica que tú, en este momento no puedo citar.

     

    3-   Pero, como dice, creo Mª Pilar, es más importante lo que nos dicen de la vida de Jesús que lo que dicen que dijo, mucho más difícil de demostrar. Y la praxis de Jesús una comunidad de iguales, hombres y mujeres, y ningún clérigo. Ni por supuesto Ciudades de Vaticano, palacios arzobispales, reverencias, anillos de oro, ni pieles de armiño, vestimentas raras y diferentes a las de la gente de su época, etc. etc.

    ¿Qué grupos sociales no religiosos viven y visten de la manera tan rara como le clericato católico?

    Alguien ha hablado sobre la necesaria e imprescindible organización de la ICAR tal como es ahora. Si esto es así, es que todavía no se ha asomado ni una mijilla por la ventana al mundo actual. ¡Con la cantidad de tipos de organización, siempre democráticas, que hay en tantísimos colectivo, sociales.
    Mama mía, es como si dijésemos que demos utilizar triclinios en las iglesias porque en la época de Jesús se utilizaban

     

  • El anterior comentario mio, es para Gabriel Sanchez. Quizá no puse el nombre.

  • Lali

    A ver, Miguel, dices que “una  iglesia o grupo de Jesús, o de seguidores de Jesús o comunidades o póngase la etiqueta que se quiera sin una estructura y responsabilidad y organización habría durado lo que un caramelo a la puerta de un colegio”. ¿Significa eso que, sin jerarquía, ni siquiera Dios habría evitado la debacle?   
     
    Conviene buscar y leer todos los textos del Nuevo Testamento donde aparece el término iglesia, porque así se aclaran muchas cosas.
     
    Saludos
    Lali

  • mªpilar garcía

    Como se puede decir: iglesia jerárquica fundada por Jesús, donde su principal mensaje era siempre:
     
    ¡¡Servir, servir, servir!!
     
    ¿Donde podemos encontrar, semejanza con lo que hace siglos impera en “las” iglesias; de poder, categorías, vestimentas absurdas…?
     
    El lenguaje: ¿como podemos asegurar, al cien por cien, que así, tal cual está escrito, fue dicho por Jesús?
     
    Si contemplamos su vivir, su hacer… parece a veces, que es ya una “deformación” de lo que el hizo; y como vivió.
     
    La Palabra, hay que leerla, sin dejar de mirar su vida, y a donde le llevo esa manera de vivir, hablar, comportarse.
     
    No se puede caer en la cantidad de despropósitos, a los que se ha llegado, y salir de ellos diciendo: “lo dijo Jesús”.
    Muchos de los evangelios, fueron escritos por discípulos de los discípulos primeros…
    Hay que leer, contemplar, ¡escuchar! con sentido común, lo que ella ¡La Palabra Encarnada en Jesús nos susurra!
     
    ¡Jamás! nos dirá, algo contrario a su vivir, hacer, ¡Morir!
    mª pilar

  • Antonio Vicedo

    .-  CITA: “(-8 y -9)  
    De la lectura de la carta, cuya intención comparto desde hace tiempo, por lo que  para la actuación del testimonio y mensaje de Jesús,  suponen los comportamientos del sucesor de Pedro en importancia y repercusión para la Humanidad, me ha sorprendido el contenido de estos dos apartados: –8 y -9.
    En el -8,  se aporta eso de <gran educadora de Europa durante siglos> a la que se presenta a continuación como <olvidadiza del estirón hacia la madurez de la misma Europa>
     No sé lo que el autor de la carta, con tanta carga de buena voluntad y responsabilidad, entiende por esa Europa que ha ido sucediéndose durante  20 siglos, pero, si en su concepción de Europa entran las clases sociales más empobrecidas, marginadas y expoliadas de cultura, bienes materiales, de desarrollo de conciencia personal,  de verdadera y real libertad para comportarse y ser tratadas como  sujetos, me parece que el diagnóstico social y la consideración eclesial, no hay por donde cogerlas, a no ser que se valoren las reacciones por oposición,  suscitadas por sucesivos y repetitivos comportamientos de complicidad con los Poderes del Mundo o por abusos de poder, cuando ha logrado el papado y el episcopado ejercerlo, incluso absolutamente.
    Si la misión Mesiánica, como estos domingos se ha proclamado en los templos,  tiene por finalidad propia  que los pobres reciban la Buena Noticia de Salvación, sólo hay que repasar la  arqueología e historia secular para contemplar signos de poder sagrado y  de ninguneo de las gentes que conformaban el pueblo,  cristianizado al socaire de la voluntad interesada de los  poderosos (Emperadores, monarcas y feudales,  fueran laicos, episcopales, abaciales o clericales)
    ¿Dónde quedó el fermento de fraternidad universal testimoniado y proclamado por Jesús? Porque, ni siquiera aquellos intentos voluntariosos de valorarla aglutinando minorías cenobitas, monacales, mendicantes, compañías, congregaciones y obras,  resistieron las primeras tentaciones de reducirlos a grupos excluyentes, olvidadizos de aquella intención de Jesús,  expresada en oración al Padre (No los saques del mundo, sólo presérvalos del mal)
    En el -9.    El proceso concienciador de la sociedad (puede que aquí si encontremos, a pesar de las intenciones de dominio del poder, elementos orientadores de promoción personal), es lo que forzó el giro de 180º  que la consolidación y extensión de una cultura laica va completando y solidarizando, supliendo desvíos de lo que tenía que haber sido la fermentación evangélica a nivel de Humanidad.
    Considerado lo precedente, creo que la carta adolece de fallos de diagnóstico real. Y eso agregado a la esclerosis propia de toda estructura humana, va a resultar muy poco efectivo para el cambio necesario que demanda la coherencia evangélica al funcionamiento del poder eclesial.
    Ahí nos quedará, para afianzar nuestra esperanza y espolear nuestros comportamientos sociales y de fe, aquello de Jesús: COMO el Padre me envió, Yo os envío a vosotros: Vivid fraternalmente el AMOR filial.

  • Luis González Morán

    Lali, un saludo cordial:
    Dices en tu última intervención: “Agradecería que alguien mencionara algún texto del Nuevo Testamento donde el término iglesia, que en lengua griega servía para denominar a cualquier asamblea civil, vaya asociado o identifique a una estructura jerárquica”.
    Contesto con ánimo de dar una respuesta a tu legítima inquietud. Voy a citarte hoy solamente tres textos (de los muchísimos que hay) que responden a tu cuestión “iglesia/jerarquía”, con independencia del criterio hermenéutico que a cada uno luego le plazca aplicar:
    1º.- “Tomando entonces la palabra Jesús, le (a Pedro) respondió: Bienaventurado eres Simón, hijo de Jonás, porque no te lo ha revelado esto la carne ni la sangre, sino mi Padre que está en los cielos. Y yo a mi vez te digo que tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella. A ti te daré las llaves del Reino de los Cielos; y lo que ates en la tierra quedará atado en los cielos, y lo que desates en la tierra, quedará desatado en el cielo”. (Mt 16,18-19). Obviamente, no voy a entrar ahora en finuras exegéticas, pero ahí tienes un texto donde se vincula a la Iglesia con la estructura jerárquica: piedra, fundamento, primado, etc.
    2º.- Otro texto: “Tened cuidado de vosotros y de toda la grey, en medio de la cual os ha puesto el Espíritu Santo como vigilantes* para pastorear la Iglesia de Dios, que Él se adquirió con su propia sangre”  (Hech 20,28). *Vigilantes: en griego “episcopos”, término que designaba a los que dirigían la comunidad cristiana. En el lenguaje bíblico el pastor denota una calidad, un “munus” que implica siempre jerarquía. De tal manera, que esta función viene asignada en el propio texto del libro de los Hechos al Espíritu Santo, como última instancia legitimadora, en la estimativa de la Iglesia primitiva.
    3º.- “Es cierta esta afirmación: si alguno aspira al cargo de epíscopo, desea una noble función”. (1 Tim 3,1). Y a continuación consigna las buenas cualidades que deben adornar al “epíscopo”. Para concluir: “pues si alguno no es capaz de gobernar su propia casa, ¿cómo podrá cuidar de la Iglesia de Dios?”. (1 Tim 3,5).
    No cabe la menor duda de que ya en los textos del Nuevo Testamento la estructura de la Iglesia se describe como jerárquica. A mí, personalmente, sin embargo, no me parece la jerarquía lo más importante de la iglesia, sino el Espíritu de Jesús.
    Lali, ahí tienes estos tres texto “donde el término iglesia… va asociado o identifica una estructura jerárquica”.
    Querida Ana Rodrigo: dudo que podamos, de momento, cerrar este capítulo, o por lo menos cerrarlo…. así, habrá que volver sobre él.

               Un abrazo cordial para todos.

  • Ups…bueno, a fuerza de ser honesto con la realidad, tampoco es que podamos decir con absoluta certeza que Jesús sólo escogió varones para la categoría de apostol. Esa es la versión hegemónica. Pero existe una versión de que al menos una mujer fue elegida com apóstola.  🙂

    El punto, de todos modos, es que resulta irracional atribuir a la forma de organizarse en el siglo I ser el fundamento de la organización en el siglo V, en el Siglo X, en el XVI y en el XXI.  Por lo que es absurda toda esa pretensión de los tradicionalistas de que la Iglesia siempre ha sido como es actualmente, y que así la fundó Jesús

  • Ojo con las extrapolaciones.

    Cierto que Jesús fue más allá de los estándares de su sociedad, pero lo cierto es que escogió exclusivamente varones para la categoría de apóstoles. No?

    Es un poco más adelante que, radicalizando lo que ya había en gérmen en la praxis de Jesús (tener mujeres discípulas) y en combinación con un contexto romano en que la mujeres tenían un poco de mayor actividad pública que en las culturas semitas, algunas comunidades proclaman la igualdad entre hombres y mujeres.

    Un abrazo