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El proyecto de Jesús, madurando en el tiempo, 15

EL CIEGO, LA PUERTA Y EL MODELO DE PASTOR, 5/6

Las luces de la sala se han apagado. El escenario está a la vista. El Galileo da unos pasos y se detiene. Se diría que le da vueltas a algún pensamiento. Se le ve concentrado. Mueve la cabeza con lentitud desplazando su mirada hacia el lugar que ocupan los observadores de la escena. Parece fijarse en cada uno de los asistentes. El foco principal le ilumina. Los dirigentes siguen ahí, en su sitio, en la penumbra.

5. Quinto de los seis Actos: Declaración del Galileo

La respuesta del Galileo los ha dejado desconcertados, sin reacción. No protestan. Permanecen callados. Aprietan los labios. Aguantan conteniendo sus gestos de desaprobación. Con ira mantenida, esperan acontecimientos. Le tienen unas ganas locas al de Nazaret. Él hará una significativa declaración: 

      – 10,1“Sí, os lo aseguro: Quien no entra por la puerta en el recinto de las ovejas, sino trepando por otro lado, ese es un ladrón y un bandido. 2 Quien entra por la puerta es pastor de las ovejas; 3 a ese le abre el portero y las ovejas oyen su voz. A las ovejas propias las llama por su nombre y las va sacando; 4 cuando ha echado fuera a todas las suyas, camina delante de ellas, y las ovejas lo siguen porque conocen su voz. 5 A un extraño, en cambio, no lo seguirán, huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños.
6 Esta semejanza les puso Jesús, pero ellos no entendieron a qué se refería.
7 Entonces añadió Jesús:
     – Pues sí, os aseguro que yo soy la puerta de las ovejas. 8 Todos los que han venido antes de mí son ladrones y bandidos, pero las ovejas no les han hecho caso.9 Yo soy la puerta, el que entre por mí quedará a salvo, podrá entrar y salir y encontrará pastos. 10 El ladrón no viene más que pasa robar, sacrificar y destruir. 11 Yo he venido para que tengan vida y les rebose” (Jn 10, 1- 10).

 1 Fijando su autoridad

      La fórmula introductoria: “Sí, os lo aseguro”, traducida normalmente siguiendo su literalidad por: “en verdad, en verdad os digo”, avisa de la autoridad de quien habla y anuncia la contundencia de su comunicado. Repetida en veinticinco ocasiones, el autor del texto se sirve siempre de ella, unida a lo expresado con anterioridad, para intensificarlo o añadirle un matiz importante. Así, actuando como nexo de unión, no se despega de la acusación dirigida antes a los dirigentes y pone sobre aviso respecto al alcance de las palabras que pronunciará a continuación.

       2 Un ejemplo. Su elemento principal: LA PUERTA

      De entrada, pondrá un ejemplo. Trata de una realidad cotidiana de sobras conocida en aquella cultura. Pero está lejos de ser un ejemplo inocente. Su forma de presentarlo desvela actitudes y señala intenciones. Subraya los movimientos de las personas que a diario actúan en ese entorno del caso expuesto. La descripción de las maniobras de tales sujetos elevará la preocupación de los dirigentes. Los espectadores se concentran en la escucha de lo que va a transmitir.

      El elemento principal a través del cual se van significando los personajes, su actividad, sus ocultas intenciones y la repercusión de sus comportamientos será: “la puerta”:

      “Quien no entra por la puerta en el recinto de las ovejas, sino trepando por otro lado, ese es un ladrón y un bandido” (v. 1).

      En los lugares de pasto alejados de los pueblos, los pastores, por lo general dueños de cortos rebaños, solían establecer espacios cercados de pequeños muros construidos con piedras para recoger el ganado durante la noche. Esos recintos contaban con un solo y pequeño paso por donde entraban y salían los animales y sus dueños: “La puerta”.

      Los dirigentes se devanan los sesos: ¿Y a qué viene esto? ¿No lo dirá por nosotros? Ellos, como pastores, están a cargo del recinto-institución y utilizan siempre la puerta.

       3 Uso y cuidado de la puerta

      Esos lugares acotados se extendían en espacioso perímetro para dar cabida a varios rebaños. La puerta, una simple abertura en el murete, servía de acceso a cada uno de los pastores que, al rayar el día, entraban en el cercado para sacar a sus ovejas a pastar y al caer la tarde las recogían allí de nuevo. Uno de ellos quedaba de guardia cuidando que no entraran alimañas o ladrones en el recinto.

      Pero el ejemplo no hablará de los dueños o pastores encargados de las ovejas. Se centra en aquellos que no hacen uso de la puerta de entrada al redil, sino que penetran en él de manera furtiva: “Quien no entra por la puerta…, sino trepando por otro lado”. La forma de calificar a los intrusos señala que no alude a perros salvajes, lobos u otro tipo de alimañas. Apunta a personas con intención de apropiarse de las ovejas o sacrificarlas para sacar partido de su carne y su lana.

       4 Los salteadores

      La puerta se presenta, pues, como indicador único y válido de la intencionalidad de quien accede al recinto que acoge al rebaño. La puerta es el referente esencial. Usar la puerta señala la voluntad de servir a las ovejas. Penetrar obviándola, avisa de propósitos violentos y criminales: “ese es un ladrón y un bandido”.

      El término griego traducido por “bandido” (ληστής; transliterado: ‘lestés’) se emplea en los cuatro evangelios para designar a personas extremadamente peligrosas que, con su violencia, siembran destrucción y muerte. Así aparece en la parábola del samaritano (Lc 10,30.36). Hay que temer a los bandidos. Se les atrapa con colectivos armados hasta los dientes. De ese modo se califica el prendimiento del Galileo, “como a un bandido” (Mc 14,48; Mt 26,55; Lc 22,52). De bandido se tacha a Barrabás (Jn 18,40) y a los crucificados con él (Mc 15,27; Mt 27, 38.44). El Templo es una cueva de bandidos (Mc 11,17; Mt 21,13; Lc 19,46); Tienen a Dios de pantalla para encubrir la maldad y el crimen.

       5 El Pastor usa la puerta

      Entrar por la puerta garantiza la actitud de servicio del sujeto que utiliza esa única entrada. No puede ser otro, sino el cuidador de las ovejas:

      “Quien entra por la puerta es pastor de las ovejas” (v. 2).

      El lugar de entrada al aprisco y el modo de hacerlo advierte a todas luces de peligro (“ladrón” y “bandido”) o seguridad (“pastor”) para los animales allí resguardados.

      El pastor tiene el acceso asegurado. El vigilante, destacado aquí como encargado de la puerta, el portero (θυρωρός = ‘el que vigila la puerta’, de Θύρα = ‘puerta’) facilita la entrada del pastor retirando la pequeña empalizada con que cierra la entrada o apartándose él mismo (era una costumbre dormir echado cubriendo la puerta):

      “a ese le abre el portero” (v. 3a).

       6 Ovejas y rebaño del Pastor

      Nada más entrar al recinto, los pastores emitían los pitidos y sonidos acostumbrados para organizar la salida de su rebaño. Sus ovejas, familiarizadas con el tonillo de sus voces, chifles, silbidos, gritos…, salían a campo abierto siguiendo sus órdenes. El pastor conocía a la perfección a sus ovejas y las distinguía de las pertenecientes a otros rebaños. Incluso daba nombres a cada una y ellas respondían a su llamada:

      “y las ovejas oyen su voz. A las ovejas propias las llama por su nombre y las va sacando” (v. 3b).

      El pastor las cuenta tocándolas con su cayado al salir de una en una por la puerta. Una vez la totalidad de los animales fuera del recinto, el pastor las dirige. Camina delante del rebaño hacia los lugares escogidos por él para que pasten. Las ovejas le siguen atendiendo al registro y soniquete de su voz, confiadas en ser conducidas a lugares seguros y adecuados:

      “cuando ha echado fuera a todas las suyas, camina delante de ellas, y las ovejas lo siguen porque conocen su voz” (v. 4).

      La voz es el distintivo inequívoco del pastor reconocido por las ovejas. Otra voz diferente provocaría en ellas la sospecha de un peligro desconocido y abandonarían el seguimiento de ese individuo de voz extraña:

      “A un extraño, en cambio, no lo seguirán, huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños” (v. 5).

      El Galileo ha expuesto este ejemplo ajustado en todos sus detalles a hechos reales de su tiempo y su entorno. Los datos manejados en él se caracterizan por su carácter figurativo. Sus pormenores son intencionados. Han sido escogidos a conciencia y mostrados en forma sugerente. Los dirigentes están familiarizados con estas imágenes. El AT utilizó la figura del pastor como representación de los dirigentes; la de las ovejas como imagen de los integrantes del pueblo. La evocación del capítulo 34 de Ezequiel resultaba fácil para todos ellos:

      “Mis ovejas fueron pasto
de las fieras del campo, por falta de pastor;
pues los pastores no las cuidaban,
los pastores se apacentaban a sí mismos;
por eso, pastores, escuchad la palabra del Señor:
esto dice el Señor:
Me voy a enfrentar con los pastores;
les reclamaré mis ovejas,
los quitaré de pastores de mis ovejas,
para que dejen de apacentarse a sí mismos los pastores” (Ez 34, 8-10).

       7 ¿Cómo entender la alegoría?

      En el contexto de la confrontación con los líderes religiosos, estos, atentos como estaban a estas palabras del Galileo, tenían fácil sentirse aludidos. Sin embargo, ellos permanecen seguros. Son los responsables del recinto, dirigen al rebaño y solo usan la puerta para entrar y salir. No pueden ser ellos los sugeridos por el ejemplo. ¿A quiénes, entonces, se refiere el Galileo? y ¿adónde quiere llegar?

      Además, el ejemplo habla de rebaños y el motivo de su enfrentamiento ha sido un ser individual, el ciego de nacimiento. ¿Cómo se explica ese paso del singular al plural?

      El que fue siempre ciego es figura representativa de un pueblo machacado por sus dirigentes y sin posibilidades de otear una situación favorable a vivir con dignidad. Los dirigentes han ensombrecido la existencia de la gente; le han negado el futuro, han robado sus sueños. La esclavitud y la servidumbre agotan sus escasas energías. Están condenados nada más nacer a vivir en la tiniebla. Nunca han conocido la luz; jamás, la libertad.

      Lo cierto es que el ejemplo hace una llamada a personas y situaciones concretas. Los dirigentes, siempre disimulados y al acecho desde la negrura, no han sabido captar las denuncias y los anuncios expuestos por nuestro protagonista en su exposición:

      “Este semejanza les puso Jesús, pero ellos no entendieron a qué se refería” (v. 6).

      La aclaración del Galileo les sacará de su ignorancia. Él retomará de nuevo el ejemplo reinterpretándolo ahora en forma de alegoría. De ese modo, cada elemento recobra un significado y el conjunto de todos ellos descubre su visión respecto a la dura realidad social padecida por el pueblo. Su desastrosa situación delata y acusa a los dirigentes como ladrones y criminales.

       8 La PUERTA de las ovejas SOY YO

      Su explicación disipa dudas. Puntualizará con contundencia. La clave la encontramos en el elemento principal del ejemplo: “la puerta”:

      “Entonces añadió Jesús:
          – Pues sí, os aseguro que yo soy la puerta de las ovejas” (v. 7).

      Comienza con la misma fórmula con que introdujo el ejemplo: “Sí, os aseguro”. Lo que va a comunicar posee una envergadura especial. Los dirigentes no esperan la comparación. El Galileo se identifica con el paso seguro: “YO SOY LA PUERTA”.

      Se presenta como ¡el único acceso viable! para que el pueblo pueda resguardarse de los peligros procedente del orden injusto y salir a una libertad necesaria para la vida.

      El recinto donde se aloja el pueblo es la institución judía, su legislación, sus normas, sus tributos, su religión, el Templo y, en especial, la ideología con la que constriñen la mente y la vida de sus integrantes. El Galileo afirmará ser “la puerta” con sentido absoluto. Pero ¡ojo! Ni vincula esa puerta a la institución judía ¡ni asociará esa idea a un nuevo recinto! No hay una sustitución de un redil por otro redil. El Galileo ¡no declarará ser puerta de ningún recinto!, sino:

      “L A    P U E R T A    D E    L A S    O V E J A S”.

      Las puertas se denominan por el sitio donde están situadas (‘…del muro’, ‘…de la valla’) o por el espacio al que dan acceso (‘…de la ciudad’, ‘…de la cocina’; en este caso: ‘…del recinto-institución’). Pero aquí, curiosamente, su nombre se asocia a quienes pasan por ella: “LA PUERTA DE LAS OVEJAS”. Esa puerta no alude a estructura ideológica ni a institución alguna. Su referencia es solo a entrada y salida tanto para los servidores del pueblo como para el pueblo mismo. La puerta significa:

  • libertad y seguridad para la gente,
  • familiaridad de quien la usa y
  • actividad positiva que lleva a cabo.

       9 Los dirigentes son salteadores, no usan la PUERTA

      Los dirigentes, responsables del orden injusto, nunca han utilizado esa puerta que ofrece seguridad y libertad. Han usado los métodos propios de quienes, inmisericordes, acuden al pueblo para someterlo a esclavitud; han empleado los procedimientos criminales de quienes se apropian de la vida de la gente para su propio engorde. Haciendo uso de una autoridad también robada, han sacrificado a la gente hasta hurtarles sus más hondas esperanzas:

      “Todos los que han venido antes de mí son ladrones y bandidos” (v. 8a).

      Los dirigentes ladrones y bandidos no van abiertamente al pueblo. Llegan a él provocando la desconfianza y el desasosiego de la gente. Pero la gente no les seguirá porque no reconocen ni se sienten familiarizados con su voz. Harán daño al pueblo, pero no conseguirán que el pueblo les dé su confianza como dirigentes. Una vez visto el ideal humano que el Galileo puso ante sus ojos, el ciego de nacimiento no lo dudó ni un instante, se olvidó de las normas y de la sagrada ley del sábado, y se desembarazó de todas las conexiones que le vinculaban a la perversa ideología que dejaba ciega a la gente. Su ruptura con la institución le abrió un horizonte jamás imaginado. Y cuando los líderes intentaron su vuelta al redil, ¡el hombre, una vez libre, aguantó a pie firme y les dijo que nones!:

      “…pero las ovejas no les han hecho caso” (v.8b).

       10 El PROYECTO es la PUERTA por la que salió el ciego

      El hombre, antes perteneciente a la institución, nació ciego y permaneció ciego toda su vida. Sin más posibilidades que la sumisión a la ideología impuesta por los dirigentes, solo le quedaba resignarse a las sombras y encadenarse a la mendicidad. La libertad le facilitó plantarle cara a los dirigentes y probar su engaño. Estos rechazaron la evidencia de la libertad y lo expulsaron. Su adhesión posterior al Proyecto del Galileo significó para él la liberación definitiva del imperio de los bandidos y la aceptación de una Vida, nunca soñada por él, regida por el amor y la lealtad:

      “YO SOY LA PUERTA, el que entre por mí quedará a salvo, podrá entrar y salir y encontrará pastos” (v. 9).

      El verbo griego σῴζω (‘salvar’, ‘librar de un peligro’), usado en futuro: σωθήσεται= “quedará a salvo” aporta la clave para entender la importancia vital de esa puerta. Su significado indica el feliz y total rescate de una situación agónica. Alude a una realidad presente. En este caso, ‘quedar a salvo’ habla del escape de una existencia sometida, política, social, económica, religiosa e ideológicamente; y alude a la consecución de una Vida marcada por la libertad en un entorno social donde brilla la justicia y el amor leal. “Quedará a salvo” se entiende como abandono de la esclavitud (muerte) y recuperación de la Vida propuesta como ideal de ser humano: “…y un dios era el Proyecto”.

      El intento obcecado y dislocado por asociar ‘salvación’ y ‘más allá’ tal vez interese a los dirigentes, ladrones y bandidos. Los refuerza en su pretensión de seguir atormentando la vida de la gente con resignación y espera indefinida. El orden injusto agradecerá ese criterio de trasladar la libertad a ‘otra vida’ para ellos continuar consolidándose en esta. Tal pretensión se sitúa a años luz de la idea del Galileo. Él, “La Puerta” está para la Libertad y la Vida: “Podrá entrar y salir y encontrará pastos”.

      Por aquí y ahora andan el robo, la explotación y el aniquilamiento de las personas. Los bandidos campan a sus anchas. E     l Proyecto humano se presenta también aquí y ahora como alternativa al orden injusto, del que rescata dejando definitivamente a salvo a quienes optan por adherirse a esa propuesta.

      Frente a ruina personal y social, Vida a borbotones. Ese es el quehacer que se planteó el Galileo:

      “El ladrón no viene más que para robar, sacrificar y destruir. Yo he venido para que tengan vida y les rebose” (v. 10).

       11 Fin del Acto quinto

      Con estas últimas palabras y el Galileo manteniendo la mirada sobre el patio de butacas, el telón baja despacio. Nadie se mueve. El silencio inunda la sala. Multitud de pensamientos bullen en la cabeza de los espectadores.

      El libreto anuncia el último acto.

 

8 comentarios

  • Isidoro

    “Me gustaría cambiar el mundo, pero no sé qué hacer. Así que lo dejaré en tus manos”.
    (Ten years after)

        Salimos del mundo viejo, y entramos en un mundo nuevo. Conviene estudiar las características de cada uno, para tener muy claro, qué es cada cosa.
            En el mundo viejo, se intenta enseñar y captar en los colegios, nuevos integrantes en los niños y adolescentes, con mentes tiernas e influenciables, y también entre ancianos temerosos ante la muerte, para lo que, (aunque ahora con la boca pequeña, para disimular), se les sigue deslizando la doctrina de la culpa y el castigo, de un Dios que nos ama, pero que no olvida.
       Y también, con la boca pequeña, (los tiempos ya no son los que eran), no se ve con buenos ojos la iniciativa personal, la ampliación de la conciencia, la autorrealización y en suma la maduración psicológica. Se los acusa de fruto del orgullo, de la soberbia, o como se dice cultamente de hibris, o ‘desmesura’.
       Etimológicamente hibris haría referencia al intento de transgresión de los límites impuestos por los dioses a los hombres mortales y terrenales.
        Pero el lingüísta y creador de programas, Larry Wall la considera una virtud imprescindible en la creatividad. Y la define así: Hibris: “Orgullo excesivo. También la cualidad que te hace escribir, (y mantener), programas de los cuales otras personas no puedan decir cosas malas. Por lo tanto, es la tercera virtud de un programador. Ver además la pereza y la impaciencia”.
       En el viejo mundo se fomenta la sumisión al mando, con la excusa de la sumisión a Dios. Dice Enrique Martínez Lozano: “Si todo poder otorga un estatus de superioridad, que se traduce en dominio sobre los otros, cuando al poder se le atribuye un origen divino, resulta incuestionable: no queda otra posibilidad que la sumisión. Y eso es lo que ha ocurrido, con demasiada frecuencia, en el campo religioso”.
          En el mundo nuevo, se busca que sus integrantes lleguen a la autorrealización personal, a un cierto nivel de sabiduría, y a un reequilibramiento de su mente, lo mayor posible.
            Esto hace que por una parte la creatividad personal y del conjunto se potencie. La presencia de cada miembro cataliza a los demás y es catalizado por ellos, produciendo una sinergia espectacular.
       Pero también en este mundo nuevo, la convivencia tiene una mayor complejidad.
       Por contra en el mundo antiguo, cunde el miedo a toda discrepancia y al pluralismo, pues sin la correspondiente sabiduría de gestión y discernimiento, genera caos, e incertidumbre.
       Por ello, consciente o inconscientemente se favorece el seguidismo acrítico a la “dirección”, y la humildad y la obediencia ovejuna. Es un modelo de pastores que piensan y ovejas que siguen las órdenes.
           Pero ni siquiera los pastores piensan mucho, pues a su vez son más bien perros pastores, ovejas de otro pastor, y así hasta el Top, que se idolatra en un infantiloide culto a la personalidad.
       El modelo nuevo, debe ser participativo, en unos círculos o comunidades homogéneas pequeñas, (no más de 10 personas), debidamente interconectadas en red, con otras muchas otras similares. La pluralidad de pensamiento, lejos de ser un problema es una garantía de riqueza mental y de sabiduría personal y colectiva.
       El mundo antiguo, en su impotencia creativa, genera y atrae un mundo de neuróticos, personas descontentas con casi todo lo que les rodea, victimistas hasta el histerismo, pero sin ideas prácticas y concretas de resolución.
         Eso genera un pensamiento moralista, de buenos, (nosotros), y malos (los que piensan distinto), preñado de impotencia, proclamas, discursos e imprecaciones a los “malos”. Moralina de pastilla de Avecrem, como el café recolado veinte veces, y clericalismo barato, aunque sea a veces maquillado de laicismo progre.
         Según Jung, sufrir de falta de sentido en la vida conduce a muchas personas a la neurosis o contribuye persistentemente a que esta aparezca. El mundo nuevo, evita caer en esa moralina y en esa neurosis impotente, a través del descubrimiento de un sentido de la vida claro, al tiempo científico y espiritual. “Más allá de las ideas sobre el bien y el mal, existe un campo. Allí te esperaré”. (Rumi).

        ¿En que mundo queremos vivir?.

    • Veronica pojmaevich

      Me desafía intelectualmente tu complejidad Isidoro, cómo combinas las cosas, me encanta! Citar a un programador!!!! Estos textos q rebasan estructuras así mezclando cosas tan inteligentemente es como pensar fuera de la caja…por ello yo sugiero agregar en atrio imágenes, paisajes, arte; porq como bien sabes la creatividad tiene q ver c incorporar de otros contextos. Quedarse en la propia caja aunq profundices es una cuestión narcisica, solo acepto lo q va c mi yoidad; abrirse a lo diferente, al no yo, todo lo q demás, como si fuera a y no a en matemáticas amén de ampliar la mente amplia el corazon; me gusta como funciona la mente de los ingenieros, ha de ser por el desarrollo de la capacidad abstracta lo mismo q los informáticos; se vuelven más interesantes cuando integran desde distintas áreas!

  • Isidoro

    “Me gustaría cambiar el mundo, pero no sé qué hacer. Así que lo dejaré
    en tus manos”.
    (Ten years after)

        Salimos del mundo viejo, y
    entramos en un mundo nuevo, anunciado por Jesús hace dos mil años. Conviene estudiar las características de cada uno,
    para tener muy claro, qué es cada cosa.
     
            En el mundo viejo, se intenta enseñar y
    captar en los colegios, nuevos integrantes en los niños y adolescentes, con
    mentes tiernas e influenciables, y también entre ancianos temerosos ante la
    muerte, para lo que, (aunque ahora con la boca pequeña, para disimular), se les
    sigue deslizando la doctrina de la culpa y el castigo, de un Dios que nos ama,
    pero que no olvida.
     
       Y también, aunque con la boca
    pequeña, (los tiempos ya no son los que eran), no se ve con buenos ojos la
    iniciativa personal, la ampliación de la conciencia, la autorrealización y en
    suma la maduración psicológica. Se los acusa de fruto del orgullo, de la soberbia,
    o como se dice cultamente de hibris, o ‘desmesura’.
     
       Etimológicamente hibris haría
    referencia al intento de transgresión de los límites impuestos por los dioses a
    los hombres mortales y terrenales.
     
       Pero el lingüísta y creador
    de programas, Larry Wall la considera una virtud imprescindible en la creatividad.
    Y la define así: Hibris: “Orgullo excesivo. También la cualidad que te hace
    escribir, (y mantener), programas de los cuales otras personas no puedan decir
    cosas malas. Por lo tanto, es la tercera virtud de un programador. Ver además
    la pereza y la impaciencia”.
     
       En el viejo mundo se fomenta
    la sumisión al mando, con la excusa de la sumisión a Dios. Dice Enrique
    Martínez Lozano: “Si todo poder otorga un estatus de superioridad, que se traduce
    en dominio sobre los otros, cuando al poder se le atribuye un origen divino,
    resulta incuestionable: no queda otra posibilidad que la sumisión. Y eso es lo
    que ha ocurrido, con demasiada frecuencia, en el campo religioso”.

     
          En el mundo nuevo, por contra, se busca
    que sus integrantes lleguen a la autorrealización personal, a un cierto nivel
    de sabiduría, y a un reequilibramiento de su mente, lo mayor posible.
     
           Esto hace que por una
    parte la creatividad personal y del conjunto se potencie. La presencia de cada
    miembro cataliza a los demás y es catalizado por ellos, produciendo una
    sinergia espectacular.
     
       Pero también en este mundo
    nuevo, la convivencia tiene una mayor complejidad.
     
       Por contra en el mundo
    antiguo, cunde el miedo a toda discrepancia y al pluralismo, pues sin la
    correspondiente sabiduría de gestión y discernimiento, genera caos, e
    incertidumbre.
     
       Por ello, consciente o
    inconscientemente se favorece el seguidismo acrítico a la “dirección”, y la
    humildad y la obediencia ovejuna. Es un modelo de pastores que piensan y ovejas
    que siguen las órdenes.
     
           Pero ni siquiera los
    pastores piensan mucho, pues a su vez son más bien perros pastores, ovejas de
    otro pastor, y así hasta el Top, que se idolatra en un infantiloide culto a la
    personalidad.
     
       El modelo nuevo, debe ser
    participativo, en unos círculos o comunidades homogéneas pequeñas, (no más de
    10 personas), debidamente interconectadas en red, con otras muchas otras
    similares. La pluralidad de pensamiento, lejos de ser un problema es una
    garantía de riqueza mental y de sabiduría personal y colectiva.
     
       El mundo antiguo, en su
    impotencia creativa, genera y atrae un mundo de neuróticos, personas
    descontentas con casi todo lo que les rodea, victimistas hasta el histerismo,
    pero sin ideas prácticas y concretas de resolución.
     
         Eso genera un pensamiento
    moralista, de buenos, (nosotros), y malos (los que piensan distinto), preñado
    de impotencia, proclamas, discursos e imprecaciones a los “malos”. Moralina de
    pastilla de Avecrem, como el café recolado veinte veces, y clericalismo barato,
    aunque sea a veces maquillado de laicismo progre.
     
         Según Jung, sufrir de falta de sentido en la
    vida conduce a muchas personas a la neurosis o contribuye persistentemente a
    que esta aparezca. El mundo nuevo, evita caer en esa moralina y en esa neurosis
    impotente, a través del descubrimiento de un sentido de la vida claro, al
    tiempo científico y espiritual. “Más allá de las ideas sobre el bien y el
    mal, existe un campo. Allí te esperaré”.
    (Rumi).

        ¿En que mundo queremos
    vivir?.

  • oscar varela

    PUERTA y PASTOR a partir del Obispo Hipólito (siglo III)
    Consideraciones históricas sobre el espíritu de la iglesia contra el de Jesús.
    (un “destilado” de lo de Eduardo Hoornaet)
    http://eduardohoornaert.blogspot.com/2020/12/o-espirito-de-jesus-de-nazare-1.html
    ………………………………………………
     
    1- Consideraciones de Moingt (páginas 210-211):
    – “el camino del Espíritu Santo, a lo largo de la historia del cristianismo, no fue fácil.
    – La misión que le encomendó Jesús, de ser el Defensor y el Instructor de los pequeños, tuvo que refugiarse en los desiertos o en los monasterios, pues, durante largos siglos, las ciudades fueron ocupadas por obispos aliados a la administración del Imperio Romano.
    – En los monasterios había una forma de contemplar a Dios, estudiar sus palabras, fortalecer la voluntad de escapar del dominio del mundo.
    – Las comunidades esparcidas por el universo cristiano cumplieron la misma misión, una acción lenta y secreta del Espíritu”.
     
    2- ¿Cómo entender la frase:
    – las ciudades fueron ocupadas por obispos aliados con la administración del Imperio Romano
    Moingt (página 229) llama la atención sobre lo que sucede en Roma a principios del siglo III y cómo, gradualmente, un nuevo espíritu se apodera de la tradición cristiana.
     
    3- Tertuliano relata lo que observa en las comunidades:
    – hay una fuerza poderosa que ‘expulsa la profecía, ahuyenta el espíritu’
    (profetiam expullit, paracletum fugavit).
     
    3- Hacia 215-218, el obispo HIPÓLITO edita un documento (‘Traditio Apostolica’).
    – En la introducción deja claro que quedó impresionado por la figura de Aarón, hermano de Moisés, quien se declaró el primer ‘Sumo Sacerdote’ de Israel y reorganizó la liturgia para ser practicada por Pueblo hebreo durante el largo viaje por el desierto.
    – Recuerda que el Sumo Sacerdote Aarón mandó construir una “Tienda de Ihwh”,
    – un Tabernáculo portátil para acompañar a los hebreos durante cuarenta años.
    – Los Rituales son extremadamente detalladas y se anotan cuidadosamente en los libros bíblicos:
     
    4- Esto es lo que se debe hacer en el cristianismo.
    – Hipólito mismo se presenta como el primer sacerdote cristiano,
    – el primero de generaciones y más generaciones de sacerdotes.
    – Ordena colocar un altar en el centro de las iglesias, solo accesible para
    – el obispo, su diácono, sus ancianos y miembros de su consejo, debidamente ordenados.
    – La tradicional cena fraterna se convierte en una ‘MISA
    – en la que los fieles dicen ‘AMÉN‘.
     
    5- Las ordenanzas de Hipólito están en flagrante oposición a lo que se lee en el Nuevo Testamento
    – que proclama que los tiempos del sacerdocio ‘Aarónico’ y Levítico han pasado.
    – no se tolera ninguna otra mediación entre Dios y su pueblo.
    – Estas ideas, muy avanzadas, no penetraron fácilmente en el movimiento emergente de Jesús.
    – Lo de Hipólito puede entenderse como la venganza del atrevimiento de Jesús y su movimiento.
     
    6- Hipólito trabaja con emociones, gestos y liturgias que, a su vez,
    – dan como resultado una nueva disciplina eclesiástica y nuevos dogmas.
    – Surge la clase sacerdotal, mientras que el ‘pueblo de Dios’ se reduce al silencio.
    – Hipólito es el primer sacerdote de la historia del cristianismo,
    – de generaciones de sacerdotes que se han sucedido durante más de 17 siglos.
    – Figura intrigante y controvertida, usurpó el poder hegemónico en la iglesia de su tiempo,
     
    6- El decreto de Hipólito sustituye la tradición apostólica
    – por lo que se puede llamar la ‘tradición de conveniencia’.
    * De ahora en adelante,
    – no conviene tener mujeres en el liderazgo de las comunidades cristianas.
    – No quieren organizar reuniones comunitarias.
    – Prefieren una liturgia más ‘ordenada‘, con programas preparados de antemano.
    – Las improvisaciones, a menudo inconvenientes, se descartan.
    – Nadie interfiere con la lectura.
    – Aparecen fórmulas en los ritos del bautismo, eucaristía, bendiciones y oraciones.
    – Aparece el obispo con un libro en la mano, el Ritual.
    – Se destaca una nueva disposición de los ministerios: episcopado, presbiterio y diaconado.
    – Los otros ministerios de la tradición anterior, como los de
    – ‘confesores’, ‘viudas’, lectores, vírgenes, subdiáconos y terapeutas se ‘arreglan‘.
     
    7- No siempre es fácil encajar los ministerios existentes en el nuevo esquema jerárquico.
    – Los ‘confesores‘, (los perseguidos), que gozan de un inmenso prestigio con las comunidades.
    – Los sanadores-terapeutas son carismáticos por excelencia
    (desaparece del organigrama jerárquico y se refugia en el cristianismo anónimo del pueblo).
     
    8- La ‘Traditio Apostolica’ es el establecimiento de una escala de superioridad-inferioridad
    – entre los distintos ministerios.
    – La imposición de manos, que indicaba el carisma,
    – comienza a conferir el ‘poder‘ para ejercer ciertas funciones litúrgicas y administrativas.
    – El ‘poder‘ de ofrecer la Eucaristía, perdonar los pecados, enseñar y distribuir otros oficios eclesiásticos.
    – Aparece la idea de mando y gobierno, del poder de la institución.
    – N o hay más espacio para los exorcistas tradicionales,
    – quedan relegados al plan de los encargados de un exorcismo ceremonial.
    – Los servicios eclesiásticos representan un recuerdo casi desaparecido.

    • carmen

      El enlace es genial. El portugués se entiende bastante bien. Pasa como con el valenciano y el catalán, que si le echas tiempo y ganas, acabas entendiendo. Son idiomas muy parecidos, escritos claro. De oído es mucho más difícil.

      Y es que nosotros, los que nos hemos considerado católicos de a pie, no sabemos nada de lo que ha escrito este señor, o lo que ha podido escribir Moingt, pero sabemos intuitivamente que las piezas no encajan. Porque todas las personas tenemos capacidad para razonar. Y si escuchas los evangelios aunque sea solamente durante la misa, sabes que no coincide la idea fundamental que quieren transmitir con el montaje de la iglesia. Porque no somos tontos, ni estamos ciegos.

      Es una pena que no se haya confiado en nosotros. El momento fue el del concilio Vaticano. Cuando el Papa Juan murió y se hizo con el poder PabloVI. Y empezó el cerrojazo. Despacito, pero empezó. Ahí fue el momento. Porque fíjate lo que vino luego. Quizás con Pablo VI se hubiese podido hacer algo más. Empezar a cambiar el pensamiento respecto de la iglesia.
      Pero no sé hizo.
      Habrá que esperar otra oportunidad. No sé. Fue una pena. Los años sesenta fueron años de cambio. Ahora también es época de cambios. Pero mucho me temo que el tema de la iglesia no interesa. Este momento tiene sus características, al igual que las tuvo hace cincuenta años los años sesenta.
      Gracias.
      Me ha gustado.

      • carmen

        Es posible que me equivoque, pero creo que el concilio, en aquel último concilio, se trataba de analizar la institución de la iglesia en profundidad. Sé que había dos sectores fuertes, al igual que ahora los hay, pero los vientos favorecían al sector que querían una renovación en profundidad. Pero murió el Papa que lo convocó. Mala suerte. Nunca se sabrá hasta dónde se podría haber llegado.
        Ahora hay otro Papa, dicen que quiere un cambio en la iglesia. Será cierto, no lo sé. Pero sí se que su cambio deseado es imposible que sea en profundidad. Es imposible. Es la representación del Poder-Poder en la iglesia. La unión del Papa Blanco con el Papa negro. Jamás ha habido tanto poder acumulado en el Papado en los últimos años. Diría que en el siglo XX. No me atrevo a retroceder más. No sé casi nada de estas cosas.
        Sencillamente, pienso.
        Y no tengo nada que perder. Por eso puedo hablar con total libertad. Bueno, y eso unido a que nadie me hace ni puñetero caso, me siento totalmente libre para hablar.

        Pero tengan claro un detalle. No soy la única persona del pueblo llano de la iglesia que piensa así. Por eso en España las iglesias se vacían.
        Pero bueno.
        A lo mejor, es lo mejor.
        No sé.

        Yo me quedo con la interpretación de Salvador Santos. Es que engancha totalmente.

  • mª pilar

    Copio:

    “LA PUERTA DE LAS OVEJAS”.

    Nos ofrece:

    libertad y seguridad para la gente,
    familiaridad de quien la usa y
    actividad positiva que lleva a cabo.

    Dice Jesús:

    Yo he venido para que tengan vida y les rebose” 

    Cuando en silencio interior, se busca aquello que nos desajusta, con sincera esperanza de cambiarlo:

    La Palabra, su Vida, su manera de proceder…Esa Palabra se ilumina y nos llena de Vida…es una decisión personal, como lo hizo el ciego.

    Gracias una vez más Salvador; por allanarnos el camino, poniendo la fuerza allá donde de verdad se encuentra.

    Todo lo demás, depende de cada cual en su manera de caminar, mirar y ver.

    Un abrazo entrañable.

     

  • carmen

    Ay Salvador.

    Es que parece que está escrito para que personas con mi manera de pensar lo leamos.

    Por favor. Qué guaaaayyyyyy.

    Porque es muy poco frecuente entender esto de los evangelios  así.

    Gracias.

    Una de las cosas por las que me gusta es porque hasta ahora no has entrado a si es o no Dios.

    Por favor. No entres ahí. Que cada uno piense lo que quiera, lo que pueda. Eso da igual. El problema no debería de ser ese, aunque sobre la base de que es el mismo Dios hecho hombre se haya construido la iglesia. El problema sería si seguimos su idea de cómo deberíamos de comportarnos. Y es que claro, a mí me gusta. Lo encuentro valiente, Luchador, cabezon, de esos que no atrancan y que no se amilana ante el Poder. Es que me encanta.

    Claro, así que acabó como acabó. Pobrecico.

    Gracias.