UNO. – Hubo elecciones en Galicia el pasado domingo. Las aldeas que desde Santadran, con embarcadero de la lancha que va y viene a Vigo, asciende por las laderas de la sierra de San Lorenzo en cuyo borde noroeste se ve Marin a un tiro de piedra, tienen una iglesia parroquial del XVIII, construida sobre una anterior con un adro de castaños que las resguarda de vientos y tempestades y del salitre de la mar que la roza por el este. En las siete aldeas que forman la feligresía hay un par de ermitas más, una de ellas que resguarda a san Antoniño vestido con estameña franciscana y cordón blanco con nudos amarrando los lomos para evitar tentaciones carnales, muy alejadas de su seráfica castidad.
La fiesta y la romería y la misa de la función principal es en junio, como debe ser. El santiño, escaso de talla y algo escuálido por los siglos de no alimentarse con lacón y grelos de la señora Encarnación, sale en andas altas porque lleva dos mocetones sentados a derecha e izquierda para recoger los billetes en papel que los devotos les acercan a las manos para que los prenda en las sayas del bueno de san Antonio. Más cartos donados, más cartos prendidos, más promesas que pueden cumplirse. El santo lleva por debajo del sayal un mecanismo que hace de su brazo derecho un instrumento de bendecir de arriba abajo y de dereita a esquerda. Un cordel engrasado en la bisagra del hombro de la imagen garantiza las bendiciones a medida que los billetes aconsejan tal actuación. Uno de los años en que estuve destinado allí, en una preciosísima rectoral del siglo XVII con campanil sobre la capilla lateral, que se tocaba entonces a las doce para el ángelus y al anochecer para las ánimas (y de paso saludar a la santa compaña, que solía pasar cerca camino del cementerio parroquial) un incidente inesperado fastidió la procesión y casi la fiesta. Mientras los venerables fieles y fíelas entregaban a los mocetones de la hermandad los billetes para que los prendieran del sayo frailuno y el santo bendecía, el brazo de éste dejó de moverse y no hubo manera de lograr que se moviera como se esperaba de él. Ni metiéndose debajo de las andas, ni jalando entre los dos acompañantes hubo forma de hacer reconsiderar al santo su empecinamiento. Detrás mía, que iba con la capa blanca y el bonete, como debe ser, caminaban mujeres y hombres en penitencia. Dos de ellas, descalzas, Gumersinda y Ramona, me dijeron bajito durante la parada: “Don Albertiño, esto non ten seito ningún. ¡Está recio o cordeio!”. Y efectivamente el cordel se había encastrado en la biela del hombro y no pudimos seguir el rito. Misa y luego la fiesta profana, por llamarla de alguna manera. Lo que ha ocurrido a VOX, al PSOE, a Sumar, a Podemos y, menos pero también, al BNG es no haber valorado que O cordeio estaba recio. Ganó el PP. Galiza e moita Galiza. Ocurre que Gumersinda y Ramona no son analistas políticas para campañas electorales.
DOS. – Celestino Alfonso, es el primer español que figura inscrito entre los enterrados y recordados en el Panteón de Paris, En el silencio del enorme espacio interior y en su subsuelo, entre los inmortales de la Francia más noble, figurará este militante de la resistencia contra el nazismo alemán que asolaba Europa. Militante comunista de los veintitrés que formaban el Grupo Mounchain integrado en la resistencia, fusilado hace ochenta años, participó en el atentado y muerte del coronel Julios Rotterdam, odiado jefe en Francia del STO, Servicio de Trabajo Obligatorio, creada por los ocupantes alemanes durante el régimen del mariscal Petain, y que detenía y obligaba a los jóvenes franceses a realizar trabajos forzados en la Alemania nazi que se llevó a cabo el 28 de septiembre de 1943. El grupo al que perteneció Celestino Alfonso estaba integrado en la organización FTP-MOI (algo equivalente a franco tiradores partisanos – mano de obra inmigrada, su sobre nombre de guerra fue el de Pierrot, número 10.608 de identificación). Había nacido en Ituero de Abaza en Salamanca, carpintero de profesión y capitán de las Brigadas Internacionales. Macronúcleo en el acto solemne del entierro en el Panteón leyó el mensaje escrito a su esposa por este español: “Sólo soy un soldado que muere por Francia… sé porque muero y estoy muy orgulloso”. El totalitarismo nazi, inhumano y asesino, fue vencido, entre otras muchas causas, por el valor moral y la valentía personal, de muchos militantes y resistentes europeos que se negaron a doblegarse ante los desalmados conquistadores de la vieja Europa. En su honor este dos. Un aviso para navegantes recalcitrantes de extrema derecha de España: la jefa de la RN, la señora Le Pen hizo saber que participaría en la ceremonia de entrada al Panteón del resistente comunista apátrida Missak Manouchian y de sus camaradas, a pesar de las reservas de Emmanuel Macron y la indignación del comité de apoyo a esta panteonización. Saquen las piernas de la arena y cesen los garrotazos que pintó don Francisco De Goya y Lucientes.
TRES. – Según el ministro español de Asuntos Exteriores, encantado de conocerse a si mismo todos los amaneceres del año, estamos viviendo la mejor época de las relaciones con Marruecos. Quiero resumir algunas informaciones que, como es habitual, la prensa española vela pues ha decidido que lo religioso no existe en la realidad. Como en las facultades de ciencias humanas no se estudia latín, no conocen a Terencio que ya les avisó: Nil tam difficile est, quin quaerendo investigarí posit. (No hay nada tan difícil que investigando no se pueda descubrir). Las autoridades marroquíes realizan una diplomacia religiosa activa, de cara al continente africano. Regularizaron entre 2013 y 2018, la situación ilegal de más de cincuenta mil migrantes. La idea de tal revisión había sido propuesta por el Consejo Nacional de Derechos Humanos, un organismo oficial cuyo presidente Driss El-Yazami (2011-2018), antiguo exiliado político en Francia que regresó a Marruecos, estaba muy preocupado por el espectáculo de estos lugares de culto a la sombra. “Recuerdo que, en Francia, en la década de 1970, los musulmanes tenían que esconderse para rezar, dijo el Sr. El-Yazami, en 2014. No quiero que los cristianos vivan esto en Marruecos”. Las dos oleadas de regularizaciones de la década de 2010 permitieron apaciguar las relaciones entre iglesias espontáneas no controladas y no estatutarias legalmente y autoridades marroquíes, hasta entonces marcadas por una fuerte desconfianza. Hoy crece un cristianismo en Marruecos dinámico empujado por expectativas espirituales de comunidades sufrientes por la situación migrante, a las que los nuevos carismáticos ofrecen esperanza, a menudo conectadas a las “Iglesias del Despertar” de África Central, en particular las de la República Democrática del Congo (RDC), con ramificaciones transnacionales. Muy dinámicas y muy frágiles. Aumentando desde 2000 por las continuas llegadas de migrantes procedentes del África subsahariana, está haciendo presente el cristianismo en el Magreb. Los viejos países de origen cristiano que forman la UE Europa bloquean fronteras y pagan a las naciones de la orilla sur del Mediterráneo. En ellas comunidades migrantes están creciendo a medida que se obstaculiza su éxodo hacia el norte. Marruecos y Argelia se convierten, por mor de los tratados pagados por millones de euros para que controlen a esos migrantes, en lugares de asentamiento, grupos, comunidades o iglesias cristianas ya que estos migrantes retenidos proceden de países de implantación católica o protestante. En Marruecos, la política oficial de apertura hacia el sur del continente, marcada por la acogida de miles de estudiantes africanos becados a partir de la década de 1980, ha permitido el lento crecimiento de tales grupos. El fenómeno es, en cualquier caso, espectacular. “Marruecos ha experimentado una revitalización inesperada por las migraciones africanas de un cristianismo que se extinguió lentamente desde la independencia [de 1956]”, puede leerse en, “Dios abrirá el mar. Cristianismos africanos en Marruecos” (Kulte Editions, Rabat 2022, de Sophie Bava y Bernard Coyault) Iglesias y lugares de culto llenos de fieles entonando cantos hacen olvidar la soledad que caracterizó la escena cristiana local hasta finales de la década de 1980. La Iglesia Católica ha experimentado ese resurgimiento al “africanizarse”. Hoy cuenta treinta mil católicos en el país, de los cuales cuatro o cinco mil son practicantes dominicales. Eran unos pocos cientos hace veinte años. 36 presbíteros, 12 de ellos africanos. Lo más llamativo ha sido la constante llegada de las “Iglesias en casas” grupos neopentecostales y carismáticos, informales, y que son las de mayor arraigo entre los migrantes. Unas treinta en Rabat, el doble en Casablanca, sin contar las redes en Agadir, Fez, Meknes, Marrakech, Tánger y Oujda, con veinte, treinta o cincuenta fieles: los efectivos varían según los intentos de cruzar el Mediterráneo, los naufragios en el mar, los regresos sus países de origen. Ante esta abundancia de grupos las iglesias “oficiales” protestante y católica se unieron para abordar una fuga incontrolable, y sobre todo por los riesgos de procesos identitarios y fundamentalistas. Actuaron en conjunto estableciendo un marco mínimo en 2012, y crearon en Rabat, el Instituto Al-Mowafaqa (“el acuerdo”), un centro de formación teológica cristiana. La iniciativa, respaldada por las autoridades, es única en un país musulmán. Imparte una licenciatura en teología en relación con el Instituto Católico de París y la Facultad de Teología Protestante de la Universidad de Estrasburgo. Así, se forma en el territorio marroquí una parte del personal religioso destinado a enmarcar una demanda en auge. Las dos oleadas de regularizaciones de la década de 2010 permitieron apaciguar las relaciones entre “Iglesias de casa” y autoridades marroquíes, hasta entonces marcadas por una fuerte desconfianza. Decisiones políticas, religiosas y legales que concretaron un cierto compromiso cristiano en Marruecos muy sutil. El reino alauita logró la condición de Estado “abierto” y respetuoso de la “libertad de culto”. En cuanto a las Iglesias oficiales, han ganado tranquilidad, después de haber presentado las garantías necesarias para hacer frente a cualquier juicio de proselitismo. No obstante, sitúa un tanto marginadas a las iglesias domésticas carismáticas y no organizadas, aunque integradas en las formaciones de preparación y grados en el Instituto Al-Mowafaqa, pero aún sin estatus legal.
CODA. – El séptimo no robarás. Koldo García, individuo de máxima confianza del exministro de Transportes y ex secretario de organización del PSOE José Luis Ábalos, se llevaba el 3% de los contratos de mascarillas investigados en la operación Delorme. Como Convergencia en los años de Pujol y Más denunciado por Pascual Maragal. Como el PP del senador tesorero de Rajoy que lo mantiene en la cárcel hoy. Como el PP de Valencia con Zaplana. Como Juan Guerra que hizo decir a Felipe González “dos por uno” pero quedándose. Como Juan Carlos de Borbón con sus expolios a los ciudadanos que acrecientan el Erario. Como Urdangarin, su yerno y alumno. Como la Consejeria de Trabajo que provocó los EREs e hizo desaparecer al PSOE del poder abencerraje que tuvo en Andalucía. Canta Antonio Molina en la Moncloa: “Cocinero, cocinero, enciende bien la candela y prepara con esmero un arroz con habichuelas………que el futuro es muy oscuro, que el futuro es muy oscuro ¡ay! trabajando en el carbón”. Me dejaba a Rodrigo de Rato y Figaredo designado por el famoso Aznar para salvar la economía patria! Qué memoria la de un servidor al no contar con la Gurtel en El Escorial. Nuccio Ordine, en su librito póstumo George Steiner, el huésped incómodo, citándo al amigo muerto dice: “En el capitalismo tardío el dinero grita a voz en cuello. El beneficio define el tiempo y el espacio”.
Comentarios recientes