Otros temas

Autores

Archivo de entradas

Temas

Fechas

Calendario

7411 Artículos. - 112730 Comentarios.

Cuándo un coordinador laico puede celebrar la Cena del Señor

El día 18/06/19, pensando en el Sínodo Panamazónico de octubre, escribimos sobre el deseo del Papa Francisco de ordenar en el sacerdocio a casados, especialmente indígenas, para los lugares distantes de la Amazonia. Será un sacerdote de estilo indígena, seguramente, distinto del tradicional.

En los sitios sin asistencia de sacerdotes, hay coordinadores de comunidades eclesiales de base que ya están presidiendo las celebraciones de la Cena del Señor. No están ordenados pero nadie dirá que Cristo no está ahí presente en la Palabra, en la comunidad y en su celebración. La cuestión no es solo intraeclesial católica, también es ecuménica. Las Iglesias que salieron de la Reforma celebran en sus comunidades la Cena del Señor con pastores no ordenados. ¿Cuál es el valor de estas celebraciones? ¿Estará realmente Cristo presente ahí bajo las especies del pan y del vino?

Trataremos de responder en ambos casos positivamente, fundados en una vasta documentación histórico-teológica que no puede ser aducida aquí, pero que se encuentra en el libro Eclesiogénesis: la reinvención de la Iglesia, Editora Record 2008, p165-188.

La afirmación básica, definida por el Concilio Vaticano II, es: «La celebración del Sacrificio Eucarístico es el centro y la cumbre de toda la vida de la comunidad cristiana» (Christus Dominus, n. 30). Los fieles desean la eucaristía. ¿Se les puede negar por el hecho de no tener un ministro ordenado en su medio? Los coordinadores de las comunidades hacen todo lo que un ordenado hace, ¿por qué no pueden consagrar? Lo normal sería que fueran ordenados, pero no lo son porque no son célibes.

La investigación rigurosa sobre el tema concluyó que ha habido dos fases: en el primer milenio del cristianismo la ley básica era «quien preside la comunidad, preside también la eucaristía: podía ser un obispo, un presbítero, un profeta, un doctor, un confesor y un simple coordinador ». Era impensable que una comunidad se quedase sin eucaristía por la falta de un obispo o de un sacerdote. Entraba entonces el coordinador de la comunidad, como ocurre en nuestras comunidades. El nexo era el coordinador de la comunidad y la celebración de la eucaristía.

En el segundo milenio hubo un cambio. Las disputas entre el Imperium y el Sacerdotium desplazaron el tema de la comunidad en favor del tema del poder sagrado. Los Papas reivindicaron el poder sagrado por encima del poder imperial. Este poder sagrado viene mediante el sacramento del Orden. El nexo es ahora quién tiene el poder sagrado y quién no lo tiene. Sólo quien es ordenado tiene el poder de consagrar. El laico queda excluido aun siendo coordinador. Ahora lo que hay es el orden laical y el sacerdotal.

Con referencia a las celebraciones eucarísticas de las Iglesias cristianas no romano-católicas se parte del hecho de que en ellas se celebra la Cena del Señor por los ministros aceptados por las respectivas comunidades. La validez de esta celebración no viene del sacramento del Orden, vía imposición de las manos hecha por el obispo sobre el fiel laico, que pasa entonces a ser sacerdote con poder de consagrar. Para los evangélicos, el poder de celebrar se deriva de la fe y de la fidelidad a la doctrina apostólica acerca de la presencia del Señor en la celebración de la sagrada Cena. Lo mismo podríamos decir de las celebraciones en las comunidades eclesiales de base: la fe apostólica en la real presencia de Cristo en el pan y en el vino bendecidos por el coordinador o por un grupo de coordinadores, conferiría el poder de consagrar. Cristo estaría presente ahí.

Otro polo de comprensión se funda en el valor del bautismo tomado en su integralidad. Es doctrina común que el bautismo es la puerta de entrada de todos los sacramentos y contendría seminalmente a todos los demás. Por el bautismo todos los fieles participan del único sacerdocio realmente válido que es el de Cristo. El sacramento del Orden no es el sacramento del obispo o del sacerdote. Es el sacramento de la Iglesia como comunidad de los fieles. Si alguien es ordenado en el sacramento del Orden es para el servicio de la comunidad, para su coordinación y animación espiritual. No existe un frente a frente: por un lado el fiel, sacerdote común, sin poder sacramental ninguno y por otro el sacerdote ordenado con todos los poderes. Lo que existe es una comunidad, toda ella sacerdotal y profética, que especifica las funciones sin que una disminuya a las otras, una de consagrar y coordinar, otra de interpretar los textos sagrados, de responsabilizarse de los cánticos, de visitar a los enfermos, etc.

Además es doctrina común que, después del sacerdocio de Cristo, no puede haber ningún otro sacerdocio a título propio. Por eso es Cristo quien consagra. El sacerdote no consagra. Él tiene el poder de representar, de hacer visible en la comunidad a Cristo invisible. Él no sustituye a Cristo.

En una comunidad bien organizada hay un sacerdote o un pastor con esta función. Pero cuando falte y sin culpa de la comunidad, el coordinador puede asumir esta función de representación de Cristo. Esta situación hoy en día es bastante frecuente, de ahí la importancia de reconocer la validez de las celebraciones de los pastores y de los coordinadores laicos.

*Leonardo Boff es teólogo, filósofo y escritor. Ha escrito: Iglesia: carisma y poder, Vozes 1982, Sal Terrae 1982 y 2002.

Traducción de Mª José Gavito Milano

31 comentarios

  • Santiago

    No hay duda que existen muchas clases de presencia. No sólo existe presencia física, sino presencia espiritual, presencia virtual, virtual, mística y hasta cibernetica

    Jesús se ha hecho presente, pues, entre nosotros de muchas maneras…especialmente se hace presente en los pobres y vulnerables pues en ellos vemos Su carisma.

    Pero al asumir nuestra humanidad directamente quiso El “quedarse” ya para siempre en “otra” presencia, que es una y especial…que es la sacramental. De otra manera, si Jesús hubiera sido solamente y exclusivamente “humano” NO tendría ni relevancia, ni trascendencia: un filántropo más, un rabino itinerante, un profeta iluminado y nada más. Su memoria se habría ya esfumado y diluído en los siglos.

    Es esta y única PRESENCIA sacramenta en la Eucaristíal la que da fuerza y alimento a la Iglesia y la nutre con su gracia en orden a la vida verdadera y eterna. Invisible pero cierta. Y ésta presencia no depende del espacio y tiempo, no es local, sino esencial y sustancial. De esta manera Su inmanente presencia es universal y real. Es el don de los dones. Es un don dinámico pues sin Cristo “nada podemos hacer” y El nos da la gracia para la acción

    Saludos cordiales

    Santiago Hernández

     

    • carmen

      O no.
      Me refiero a eso que dice que su memoria habría desaparecido
      Pues no sé por qué.
      Pues anda que no hay cosas escritas de gente rarísima y que conocemos desde hace miles de años.
      Pues no sabemos.
      Pues la mayoría pensaban que era una persona normal y salió corriendo cuando fueron a por él. Si lo que está diciendo es que si Jesús no es dios, Jesús no se vale, pues será para usted. Personalmente preferiría que no lo fuese, no tendría gracia entonces. Los dioses, al Olimpo.

      Que me parece muy bien que usted se lo crea. Pero déjeme que yo crea que no hace ninguna falta que sea dios. Pues menuda se ha liado con eso de que es dios. La de barbaridades que se han hecho en su nombre.
      Que no, que no, que no hace falta.

      Esa fuerza que usted dice se la da dios, el mismo que se la dio a Jesús, el misssssssssssmo. Vaya usted a saber qué es, pero si da fuerza, la da a todo el mundo. O a nadie.

      Y fíjese que creo que pensamos igual. Solamente que usted cree que Jesús es dios y yo no. Y qué más da?
      Ahí está la historia de este señor. Si te gusta, te gusta y si no, pues no. Realmente no creo que tenga la menor importancia que sea dios o no.
      Porque no todo aquel que dice, señor, señor se salva, sino aquel que hace la voluntad de mi padre. y luego dice, mi padre quiere que os améis los unos a los otros como yo os he amado. Resumiendo un poco.
      Luego si yo no digo señor, señor, pero intento portarme bien o medio bien con los que me rodean ¿ qué más da? ¿no estoy haciendo lo que dice jesús que quiere su padre que haga? no dice que el que entra en el cielo no es el que dice señor, señor sino el que cumple la voluntad de su padre?
      Pues entonces allí nos veremos. Pero no porque usted diga señor, señor y yo no lo diga, sino porque hacemos lo que dice jesús que dice su padre que hay que hacer.Padre nuestro, nuessssstro, nuessstro, que estás en el cielo.

      No sé si me explico

      No tiene que contestar. Realmente no creo que nadie pueda entender lo que he escrito. Sorry. Pero ya no lo borro.
      De verdad que no sé cómo me aguanta.

      • Santiago

        Claro que le entiendo bien..Sin embargo el mundo necesita del Hijo de Dios pues que NO es un dios panteísta, ni el Dios inalcanzable y distante del judaísmo, sino el Dios Padre que es amor en Jesucristo. Le necesitamos porque El es el amor encarnado y el mundo necesita saber que existe el Amor trascendente que puede salvarnos del naufragio total de la vida. El es el único que nos ama de verdad. Nadie ha dicho lo que ha dicho el Hijo, ningún hombre nos ha dicho que El es el único camino, la verdad y la vida de manera real.
        Si, podemos llegar a El inconscientemente pero no me porto bien cuando le rechazo a priori sabiendo que en El se encuentra la verdad. Existe ignorancia culpable e inculpable. Dios no nos creó robots sino inteligentes y con voluntad.

        Un saludo cordial
        Santiago Hernández

      • Carmen

        El amor es un sentimiento humano que nosotros proyectamos en un ser superior. Necesitamos cariño, comprensión , que nos quieran. Y entonces pensamos que hay un ser superior que nos quiere infinitamente. Ese es el pensamiento de Jesús. Su proyección en dios. El dios que le transmitieron como que no le gustaba. Y dijo a voz en grito: no, ese no es mi dios. Dios es como un padre, nos quiere y quiere que nos queramos los unos a los otros porque todos somos sus hijos, luego somos hermanos.
        Así entiendo a Jesús. Y me gusta.
        En cuanto a que exista ese dios o no, ni idea. Pero me gusta Jesús , por su idea acerca del trato que tenemos que tener entre nosotros y por su enorme coherencia personal
        Pero su dios es suyo.
        Un saludo.

      • Carmen

        Sabes lo que he aprendido? Pues por lo visto, los romanos, bueno, ya sabes que se apropiaron del Olimpo griego porque les gustó. Vale, pues resulta que claro, menudo imperio tenían y de los egipcios por lo visto le gustó la idea de que el faraón era un dios, prácticamente. Entonces hicieron una especie de fusión, como Movistar. En el Olimpo los dioses, en la tierra el emperador, pero el emperador se trataba con los dioses, porque claro, de algo tendría que valer ser emperador. Entonces velaba por las buenas relaciones con los dioses para que no se enfadasen , porque menudo carácter.y ahí tenemos los templos, los sacrificios y todo el jaleo para tenerlos tranquilos.
        Y claro, empiezan a colarse las religiones monoteístas, eso no les gustó, pero no veían una amenaza importante. Porque por lo visto eran listos, pero de verdad y respetaban las costumbres y las lenguas y las religiones de los pueblos conquistados. Una vez machacados antes, claro. Los supervivientes de las conquistas podían hablar como quisieran y tener sus dioses y tal.
        Y llega jesús. Y arremete contra cirios y troyanos. Y dice , pues lo que dice. Y tiene un tirón que el jefe de los romanos, el pilatos este , se preocupó. Me la voy a cargar con los dioses, pensó, van a dejar de protegerme. A este me lo cargo. Y como la vida humana para el imperio romano solamente tenía valor si eras ciudadano romano, pues sin problemas, a la cruz con él.
        Porque por lo visto, los romanos eran como muy creyentes en que los dioses protegen o te funden.
        Lo encuentro superinteresante.
        Parece la historia de siempre , pero no es exactamente igual. Cuestión de matices

      • Carmen

        Porque yo creía que habían sido los mismos judíos. Pero no está tan claro, por lo visto. Los judíos estarían indignados, pero según entiendo, eso daba igual. Porque a los romanos solamente les interesaba sus impuestos. Bastante le importaba a ellos al dios que adorasen. Los romanos tenían su jaleo con sus templos y sus dioses y los judíos con su templo. Porque por lo visto ese era el modus operando del imperio. Pero llega Jesús y dice que sacrificios en el templo, ni hablar,dios no quería sacrificios. Y claro, no le gustó Jesús un pelo porque los dioses se podían enfadar y si su emperador no es el intermediario, como que perdía puntos ante el pueblo romano, que eran los ciudadanos romanos. Esa historia también es superinteresante, como adquirías la ciudadanía romana.
        El caso es que , por si sí o por si no, pues Jesús fuera . Pobrecico. Quién se enfrenta a un poder poderosos de verdad…por eso lo dejaron solico. Se llama miedo.
        En fin.

    • Carmen

      Perdona, pero sigo diciendo lo que pienso. A veces creo que eres el único que me escucha, aunque no compartas casi nada.

      Pero la idea de Jesús caló , sobre todo desde que corrió la voz de que había resucitado. Porque era un enfoque maravilloso para los perdedores, y fíjate si había pueblos perdedores en el imperio romano. Pablo de Tarso, judío que sabía cómo funcionaba el imperio, las redes de comunicación que tenía, pensó que esta idea podría ser el acabose. porque no hay que olvidar que era judío, pueblo oprimido y obsesionado con su dios, que veía que la liberación vendría de la mano de Dios, mediante un Mesías.y convirtió a Jesús en Mesías. Hijo de Dios vivo. Jugada maestra porque cuando él entró en juego, ya había grupos de cristianos que preferian morir antes que seguir aceptando sin rechistar el imperio. Cuestión de dios , o cuestión de que prendió esa llama de libertad que decia Jesús? No lo sé. La relación en el pueblo judío con su dios es muy compleja porque sus rebeliones y sus jaleos se apoyaban siempre en su dios, un dios guerrero que me río yo de Marte.

      Y Pablo se convirtió en un iluminado. Cartas, viajes, recomendaciones de cómo se tenían que comportar, que si dios quiere esto, quiere aquello… Y todo esto avalado por la leyenda de Jesús, personaje que había muerto por enfrentarse en prácticamente solitario al templo judío y al romano. Y encima resucitado de entre los muertos.
      Una religión maravillosa para los oprimidos. Y se propagó. Porque en un imperio a la fuerza hay mucha gente oprimida.
      Y crecieron y crecieron y Constantino se dio cuenta de que tenía que cambiar de dios. Sus dioses ya no se valían porque no les temían. Y pactó con los representantes del dios nuevo.
      Otra jugada maestra que remató justiniano.
      Y a partir de ese momento dejó de ser una religión de perdedores para convertirse en la de los vencedores del occidente conocido. La del imperio romano.

      Pero es que prefiero la estética de los perdedores. En realidad lo que hace avanzar a la humanidad es el no aceptar el poder .

      En fin.
      Perdona. En realidad estoy hablando conmigo misma.
      Nos veremos en el cielo todos, pensemos como pensemos. O no nos veremos ninguno. La respuesta, después de la muerte. Es la única gracia que pueda tener. Habrá vida eterna o no? Vaya usted a saber.
      Y esta vez te he utilizado yo a ti para decir lo que pienso. Sorry.

      • Carmen

        Y acabo.
        La vida , es que no puedo no sonreír cuando lo pienso. La vida es superirónica. Tiene una guasa que no te la pierdas. Hemos vuelto al punto de partida. Los que de alguna manera se oponen a las directrices de la iglesia, se han convertido en enemigos para el cristianismo, cuando en realidad lo que dicen es que hay que volver a lo que era. Lo que es en realidad. Ya no se les echa a los leones, ni se les quema ni nada. Eso ya no se lleva porque gracias a personas como mi Jesús imaginario hemos entendido que somos todos iguales. La intensidad del mensaje de Jesús fue brutal.
        Ahora sencillamente no se les escuchar y se trata por todos los medios posibles de silenciarlos, todo ello en nombre de Jesús, hijo de Dios vivo.
        Es alucinante.
        Y ahí va mi herejía de hoy. Si Jesús es hijo de Dios, yo soy hija también. Siempre ha habido unos hermanos como más listos y mejores que otros. Así son las familias. Pero todos son hijos de los mismos padres.
        Eso quería decir mi Jesús imaginario: padre nuestro que estás en el cielo. Ayúdanos.
        Amén.

      • Román Díaz Ayala

        Hola Carmen,
        he seguido con interé, aunque a ratos, según podía, esta saga de comentarios (pensamientos en alta voz, lo consideras tú) del día 9 al 11, aderezado con un punto pelín sicótico.
        Pero el final es genial. Precisamente fue Jesús quien nos dijo ( yo lo creo a pies juntillas, porque no tengo resabios en torno a los textos) que siendo hermanos, todos somos hijos de su Padre.Tal era su misión “humana”, la de hermanarnos con él, para que tuviésemos todos un sólo y único padre, Dios. A eso lo llamamos salvación.

      • Carmen

        Qué risa. Te prometo que me han llamado de todo menos psicótica. Eso es nuevo.
        No sé si tengo resabios o no. No sé exactamente qué significa esa palabra. Sencillamente pienso.
        Y si . La salvación o la solución vendrá por ahí. También estoy convencida
        Creo, creo, me parece que mi Jesús imaginario fue pionero en este tema.
        Un abrazo

      • Román Díaz Ayala

        Se dice que el amor ( de enamoramiento) idealiza a la persona amada.Mi Feli es tan imaginaria como real. ¿Cuánto crees tu que tu Jesús tenga de imaginario? – Con la medida del amor: todo.

      • Carmen

        Ay, Román. Cuánta razón tienes. Nunca le perdonaré a Cervantes que hiciera recuperar la razón a don Quijote al final. Supongo que sería para que Avellaneda no volviese a hacer de las suyas. Por eso prefiero mil veces el final del musical El hombre de la Mancha.
        Sancho y Aldonza le dicen, no mi señor, vamos a seguir persiguiendo sueños imposibles. Y empiezan a cantar to dreeeeeamm , an imposobooool dreaaaaamm.
        Y don Quijote se une a ellos. Y entonces muere.
        Un final fantástico.
        Porque vaya usted a saber qué es la realidad y qué no es. Llega un momento en que ya no sé.
        Buenas noches.
        O buenos días, según cuando lo leas

  • Carlos alejos

    creo que vale la pena saber lo que dijo San Agustín en relación a la jerarquía, dijo San Agustín: “para ustedes soy obispo, con ustedes soy cristiano . Lo primero es mi tarea, lo segundo es una gracia. Lo primero es un peligro, lo segundo es el de la salvación.

  • Carlos alejos

    Estimados amigos. Ya es tiempo de pasar de lo doctrinal y cultual a la encarnación como fue la vida de Jesús de nazareth. Lo sacramental es presencia y Dios esta presente cuando la comunidad reunida consagra la vida que ya es santa. Coordinador que celebre, mujer que consagre, curas casados son ya signos y presencia de Dios. La comunidad lo garantiza.

  • Carmen

    Hola

    Pues allá va otra herejía. Supergigante.

    Somos un grupo de doce compañeras y sin embargo amigas. Llevamos juntas más de cuarenta años. Edades parecidas, aunque mi querida amiga, la mayor, tiene diez años por encima de la media. Hemos hecho de todo juntas y nos ha pasado a lo largo de nuestra vida, a todas nosotras, de todo. Si juntásemos en la misma persona todo lo que nos ha  sucedido,   saldría  una especie de resumen de todo lo que puede ocurrir a lo largo de la vida.

    Bueno, una de nosotras murió en febrero, un día antes de cumplir 62 años.

    Les prometo que estaba allí. Su lo que sea, allí estaba. No hizo falta decir ningunas palabras mágicas por alguien que otro alguien le hubiese concedido poderes especiales para hacerlo. Sencillamente, estaba. Y apenas la nombramos porque el dolor todavía es muy fuerte. Pero estaba. Os lo prometo. Estaba.

    Así entiendo la eucaristía. Porque cuando dos o más se reúnen en nombre de Jesús, él está.

    Opiniones.

    Buen día a todos.

    • Carmen

      Que digo que anoche nos fuimos a cenar. Si no, no tiene sentido nada . Pero ya me conocen, mi cabeza es como es. Sorry

  • Santiago

    Coincido con Román en que MEMORIAL en el relato eucarístico no es simplemente “un recuerdo” sino que se refiere a la institución del sacramento por Cristo. Pero las palabras “Haced esto en Mi memoria” con la que Jesús quiso perpetuar el sacrificio de la Cruz, unido a la Acción de Gracias (Eucaristía) fueron dirigidas solamente a los Doce y a los que ellos designaron como ministros del sacramento…

    No existe duda que en la Biblia hubo sacerdocio: en la descendencia de Aaron de la tribu de Leví, además de David de la tribu de Judá…Pero Jesús es el sacerdote de la Nueva Alianza que “aún con su Hijo aprendió de las cosas que padeció por la obediencia…y vino a ser para todos los que le obedecen causa de salud eterna, proclamado por Dios sumo sacerdote según el orden de Melquisedec” (Heb 58-10)…Es sacerdote Jesús pues es el que ofrece y el que además “se ofrece a si mismo” para “la remisión de los pecados”..En este caso Cristo es el oferente y la ofrenda al mismo tiempo…

    La renovación del sacrificio de la Cruz es la participación de este sacrificio eterno y único…en la persona de Cristo misma…Sin embargo, los Apóstoles ordenaban presbíteros “en cada Iglesia por la imposición de las manos (kheirotonésantes), orando y ayunando, y los encomendaron al Señor en quien habían creído” (Hechos 14,19-23)..Por eso Pablo habla de su propio “hierourgein” que es su ministerio sacerdotal y “prospohoron”  que es la ofrenda del sacrificio eucarístico…Ya Clemente Romano, tercer Papa, habla de obispos, sacerdotes y diáconos y la Didascalia Apostolorum presenta su sentido teológico…

    Ignacio de Antioquía describe así la Eucaristía “El obispo preside en nombre de Dios mientras que los presbíteros son como el consejo de los Apóstoles, y los diáconos, que son los mas queridos de mi, se encargan del servicio de Jesucristo” (Magnesians 6.1)..Como la Iglesia crecía Ignacio afirma que a principios del siglo II el obispo podía delegar la celebración Eucarística a sus sacerdotes (Smyrnaens 8.1)..pero nunca a uno que no tuviera la ordenación de parte del obispo…

    Por eso para realizar el mandato de Cristo de “Haced esto en Mi memoria” el clero era necesario y las 3 órdenes fueron establecidas en la primera generación de la Iglesia del Nuevo Testamento. En las generaciones que siguieron el papel de cada una se delineó más claramente y de manera diferente. Pero las primeras congregaciones nunca perdieron la fe en la dignidad sacerdotal de los miembros de Jesucristo (Rev. 1:5-6) participando en su sacerdocio eterno o de la Eucaristía como ofrenda de la Iglesia entera, que es el Pueblo sacerdotal de Dios (Jungmann 1959: 16f)…Toda la tradición apostólica confirma que el ministro ordinario de la Eucaristía es el obispo y el sacerdote como delegado del obispo…

    Un saludo cordial

    Santiago Hernández

    • Asun Poudereux

      Otro modo de verlo…No consiste en un recuerdo en donde la memoria toma primacía, llenándose de palabras al modo propio religioso del que eran herederos.

      No. Jesús rompe con lo anterior, pone los pies en el suelo al nivel de todos. Lo humano en lo mejor de toda su persona, un cuerpo íntegro, todo Jesús sin barreras. Y lo comparte en Presencia, Silencio, Unidad, Apertura, Abrazo, Amor que atraviesa y se halla en todo el espacio en el que dos o más se vacían de engaños egocéntricos y comparten lo que les es regalado. Y sin reparos lo llevan a su vida diaria. Siendo la experiencia más Real que los pensamientos, los recuerdos y deseos. Es lo que somos todos sin poner nombres.

      Y no es ninguna moda. Es lo quedó vedado para ser sacralizado en la ignorancia. Los hechos humanos que no engañan se transparentan, nada queda oculto para quien quiere ver por sí mismo, en Consciencia- Conciencia, sin un mirar acomodado a través de otros, lo que viene a ser lo mismo, de la muy respetada sagrada Tradición, que contradictoriamente se cierra a lo más sagrado en el ser humano, todo ser humano por el hecho de serlo.

      Un abrazo atriero de encuentro en la diversidad que enriquece. La

  • Pere Barceló

    Simplemente alegrarme al cumplir mis 90 años, que por fin-aunque casi no pueda gozar durante mucho tiempo- que Amazonia, la de allà cercana al rio- y la de acà cercana al mar. veamos ordenar CURAS CASADOS, aunque ya hace tiempo que yo sin presidir consagro concelebrando desde mi banco segler. POR FIN, LOS VIRI PROBATI compartiremos MESA con los REPROBATI, aunque duela tanto al Vaticano. Gracias, Papa Francisco desde Mallorca

    • ana rodrigo

      Felicidades, Pere, que disfrutes de tus 90 años. Qué alegría verte de nuevo por aquí. Poco a poco, muy poco a poco, vamos viendo pequeños pasos hacia adelante.

    • George R Porta

      Benvolgut Sr Barceló: no coneixem mútuament. No parlo català bé, però puc llegir-lo i entendre’l bastant bé i amb el gaudi. Li desitjo un feliç aniversari d’aquesta vegada i que es pot celebrar moltes vegades més !

  • Román Díaz Ayala

    Leonardo Boff se centra en la Eucaristía, y para ello hace  una mención histórica hasta el año 1000 y al mismo tiempo  la cuestión ecuménica.Añado que conoce muy bien la situación de ese país-continente llamado Brasil, y no tan sólo su Amazonía.

    Hasta el siglo XI, el cristianismo era una religión unitaria, salvo algunos pequeños grupos, como los nestorianos. El Islam del siglo VII nació con identidad religiosa propia diferenciada. Luego el protestantismo volvió a dividir la cristiandad en el siglo XVI.

    La población mundial  actual supera los 7.500 millones y tanto el cristianismo como el islam experimentan crecimientos progresivos. Los católicos casi los 1300 millones, el protestantismo supera los 800 millones y  los ortodoxos los 260 millones. El crecimiento no se debe contemplar tan sólo en los vegetativo por el aumento de la población, sino en términos porcentuales. Los musulmanes, con sus 2.000 millones crecen a un ritmo del 25 por ciento (Africa  y Asia)

    El Vaticano lleva un registro de “todos sus bautizados”, país por país. Lo que no está dispuesto a ceder (doctrinalmente) tiene que hacerlo en concesiones en lo pastoral, porque no está perdiendo terreno por la increencia y el abandono de las prácticas religiosas (tal como se manifiesta en la vieja Europa con un 22% de católicos) sino por la competencia  religiosa.

  • ana rodrigo

     
    Hay que ver de qué y de cuántas maneras la Institución-Iglesia ha ido enredando las cosas hasta desfigurarlas tal como fueron en su origen, y cómo ha sacralizado el poder hasta límites jocosos. Un amigo mío, haciendo turismo por Toledo, entró con su familia a visitar una iglesia en la que se estaban celebrando la Eucaristía, y mientras miraban el edificio, llegó la consagración y escuchan decir al cura: “Y ahora Cristo va a bajar aquí porque lo ordeno yo”. Y éste lo dijo, pero todos los demás lo piensan y lo creen, que Jesús está a sus órdenes.
    Ya reconoció el Concilio V. II que la Iglesia en ocasiones (creo que algo más que ocasionalmente) ocultaba el auténtico rostro de Jesús. Pero no se ha desarrollado de qué manera lo hace, y ahí se quedó, muerta, una expresión muy bonita.

     
    Por otra parte pienso que el gran error de la Iglesia ha sido centrar todo el culto en el sacrificio y muerte de Jesús, convirtiendo la Eucaristía en la celebración de un sacrificio, cuando él, en realidad, debió decir (porque la fórmula de la consagración aparece creo que cuatro veces en el NT), “haced esto en memoria mía”, es decir, recordarlo a él, no reinterpretar un sacrificio cruento con cuerpo y sangre reales (la transustanciación), cuando en la cena última Jesús aún no había muerto.
     
    El convertir la muerte de Jesús en el centro de la religión cristiana, ha hecho que su vida pase a segundo término, cuando yo creo que su vida fue el gran acontecimiento de Jesús, y llevarla hasta el final, fue una consecuencia. Así las semanas santas pasan a ser lo central de los ritos cristianos, cuando tenemos diariamente tantos crucificados en nuestro entorno (como ya habéis dicho algunos) que, posiblemente sufran más que el propio Jesús: los refugiados de Libia, los náufragos del Mediterráneo, quienes se han dejado la vida en el desierto después de grandes sufrimientos, los migrantes que quieren entrar en EEUU…, por dar cuatro gruesas pinceladas del sufrimiento humano, fruto de no haber seguido el ejemplo de la vida de Jesús en cuanto a justicia, igualdad, solidaridad, compasión, etc. etc. Es su vida nuestro referente para evitar más crucificados.
     
    Ya dije el otro día que en CCP, somos la comunidad las que celebramos, no el sacrificio, sino la memoria de la vida y muerte de Jesús, sin curas, ni nadie que dé órdenes al mismísimo Dios.
     
    Nota: no olvidemos que las primeras comunidades, al reunirse en casas particulares, muchas veces eran las mujeres las que coordinaban la celebración. Cuando el sacerdocio ya era sinónimo de poder, se lo quedaron los hombres.
    Exactamente igual que los no cristianos, solamente hay que ver la foto de los componentes del G20 y, por otro lado, la foto de las mujeres de los hombres que ostentan el poder en el mundo. ¿En qué nos diferenciamos? En que el poder de los clérigos, además de ser poder, es sagrado¡¡¡!!!

     

    • Román Díaz Ayala

      Hola, Ana:
      La Eucaristía es por excelencia el culto central de la comunidad cristiana.Es común en todas las ramas del cristianismo. Lo que nos une también nos separa, porque cada grupo o confesión hace su propia valoración y explicación de la misma.El protestantismo tiene estos dos sacramentos: bautismo y eucaristía.La doctrina católico-romana siete, aunque el del a Confirmación parece como introducido con calzador para cumplimentar el valor simbólico del número siete.¡Cosas de la Escolástica!
      La doctrina más tradicional de la Iglesia Católica ( la Institución, como dices tú) enseña en el catecismo que la Misa es un Sacrificio y un Memorial. Los aires del Concilio minimizaron esa connotación sacrifical acentuando lo del Memorial, pero la doctrina quedó intacta. Es el eje del estamento sacerdotal (sacerdocio levítico, único autorizado para el sacrificio ritual de la anterior Economía de la Salvación) pero que ofrece serias dificultades en cuando a la doctrina del “sacerdocio común de todo los fieles” (Iglesia, pueblo sacerdotal)
      Creo que estarás conmigo que Memorial es algo diferente al “mero recuerdo” de la muerte de nuestro Señor Jesús, que explicas en tu comentario.Autores protestantes así lo explican, rechazando el sentido de Memorial.
      En lo que sí parece que nos ponemos todos de acuerdo es en la presencia real de Jesús, por el acto comunitario . “Reunidos en su nombre”. Recordamos su muerte por reconocerle resucitado. Y la Eucaristía se hace un acto de recepción de gracia en virtud del Espíritu del Resucitado.
      Existe, pues, una notable diferencia en lo que venimos en llamar “Celebracion de la Palabra” y la Eucaristía propiamente dicha , o “partición del pan”, o “acción de Gracia”. Aunque ambas cosas generalmente van unidas en el culto católico como parte de su liturgia. Los protestantes hacen constantes celebraciones de la Palabras sin Acción de gracia”, reservando la Eucaristía para los días especiales, que suelen coincidir con el domingo.En todos estos actos la presencia del Señor está garantizada, incluso cuando se reúnen para estudios bíblicos o la enseñanza (predicación) o simples reuniones de oración.
      Leonardo Boff conoce todas estas cosas y las aceptas como apropiadas para el culto católico. Le basta comunidad y coordinador. Para mí que es un eufemismo para no llamarle anciano (prebístero), catequista o evangelista.
      La pregunta mía: ¿Excepcional o norma general para todo el catolicismo?

      • ana rodrigo

        Hola, querido Román, estoy de acuerdo contigo que no es lo mismo recuerdo que memorial, puesto que mi interpretación le da la palabra memorial, no sólo el recuerdo, sino la implicación en lo recordado, es decir en su ejemplo de vida y compromiso. Es cuestión de terminología que ùede o no ser compartida

        El tema del sacerdocio ya es otra cosa. Jesús ni fue sacerdote ni tenía buenas relaciones con los sacerdotes, hasta el punto de que fueron éstos los que le condenaron a muerte. Como dije, las primeras comunidades cristianas ni tuvieron sacerdotes ni creo que los necesitaran. La comunidad comparte, mientras que el rito presidido por una persona con poder sagrado, anula la comunidad, pues ya estaríamos hablando de alguien superior a la comunidad. De ahí la configuración de los templos que ha dado como resultado los presbiterios, los púlpitos las artísticas cátedras para el obispo, además de los ropajes romanos o imperiales como la mitra,los monólogos que echan los curas a un grupo de gente callada, pasiva, que van a cumplir con el rito y a escuchar lo que al cura se le ocurre aquel día, porque hay homilías que, ¡mamma mía.!

        Es decir, que el montaje sacerdotal al estilo de cualquier religión de todos los tiempos que implicaba, además del poder sagrado, la ofrenda de sacrificios a los dioses, creo que ha traicionado completamente lo que Jesús soñó para el movimiento comunitario de fraternidad-sororidad que él inició
        Un abrazo, Román. A ver si algún día nos vemos por Madrid. Yo, como siempre, iré al Congreso de Teología.

      • Roman Díaz Ayala

        Gracias, Ana, por los saludos. A ver si coincidimos en Madrid como tú indicas. Espero romper el aislamiento al que las circunstancias me tiene sometido.
        Los Evangelios insisten en la ascendencia davídica de Jesús, lo cual no quita que fuese asiduo a la sinagoga como cualquier buen judío de su tiempo y visitante del Templo durante sus visitas a Jerusalén. La historiografía católico-religiosa parece olvidar que para ser sacerdote había que haber nacido levita (Tribu de Leví en sus genealogías)y estos sacerdotes reclutados así, sólo servían al Templo de Jerusalén, y por turnos rigurosos previamente designados. El sacerdocio era ajeno a la sinagoga, porque sólo en el Templo se ofrecían sacrificios. Podemos afirmar con todo rigor histórico que el sacerdocio desapareció con la destrucción de Jerusalén y el Templo en el año 70 de nuestra era, lo mismo que los sacrificios rituales, cumpliéndose así lo dicho por Jesús y registrado en los Evangelios.

  • Carmen

    Es que es un debate tan , tan deprimente…uf. Deprimente por lo absurdo y trasnochado que me parece.

    Y a mí también me da repelús el Jesús ajusticiado que describe George y la pasión de Gibson me pareció totalmente Gore.

    Pues que nos cuenten todas las cosas horribles que unos seres humanos pueden hacer con otros. Y a quien le guste, que lo lea.

    Personalmente detesto con todas mis fuerzas la estética Gore. Para mí es suficiente saber que ese Jesús de Nazaret que llaman unos  y el Galileo otro, murió por ser coherente consigo mismo. Punto.

    Y cuanto más sufriera, más lo siento por él, por todos, por lo bestias que podemos llegar a ser, pero no por ello alcanza un valor mayor ante mis ojos.

    Y lo del Pantocrátor , eso es otra aberración de la iglesia.

    De verdad. Es que , uf.

    • Mª Pilar García Martímez de Aguirre

      ¡Estoy contigo y tu manera de ver este “asunto”!

      A veces lo convertimos en vidrioso.
      mª pilar

    • George R Porta

      En efecto, es triste que la pena de muerte antes y ahora haga sufrir al ajusticiado. En este país en el que resido hay muchos que se oponen a ella y me alegro de encontrarme entre esas personas.
      Me duele que solo porque repugne o atemorice o insulte se rehuse mirar con compasión lo que debió ver María cuando recibió el cuerpo destrozado de su hijo.
      No quiero rechazar a nadie solo porque me desagrade. No quiero cerrar los ojos a las llagas de mis pacientes y no me regodeo en ellas, pero sí quiero sentir la mayor empatía por ellos al tenerlos frente a mí y ser testigo de su valentía al mostrar al desnudo sus heridas a veces llenas del pus del rencor y del deseo de venganza o retribución. Deseo también no perder la capacidad de ayudarles a sanar esas llagas y eso fuera imposible sin mirarlas y sin mirarlas lo más compasivamente de que soy capaz.
      El lenguaje me escandaliza cuando se propone lo mismo que hicieron los viandantes que abandonaron al herido y me alegra que el samaritano haya sido capaz de mirar a las heridas y comprender que eran graves y sentirse movido a hacer algo urgente para que no muriera el destrozado infeliz que encontré abandonado en el camino.
      Si la muerte del Galileo ocurrió como lo proponen las narraciones evangélicas, no murió como mueren los reyes, en su cama y rodeadas de cuidados. Murió destrozado y a menudo se prefiere voltear la cara para no mirarlo. Por eso se está volviendo una costumbre sustituir la estatua del crucificado sufriente que describe el texto de Isaías, por el fantasioso muerto emergente, ascendente, que no tiene más trazas de lo «gory» que sus heridas abiertas, pero limpias de sangre y pulcras. De paso anoto que «gore» solo denota sangre derramada violentamente y por lo que se sabe, si hay que dar crédito a los evangelios, la sangre del Galileo fue derramada con desproporcionada violencia.
      Hoy día hay muchos lugares del mundo en los que mucha gente es objeto de violencia y mucha sangre es derramada violenta e injustamente. Me alegro de denunciar eso y de felicitar a la mujer que trató de evitar muertos llevando los inmigrantes a Puerto seguro, y de que haya personas que por solidaridad, compasión y sentido de la justicia recuerden la injusticia fundamental que constituye la pena de muerte, precisamente porque el Galileo la sufrió desproporcionadamente. Esa es la primera razón para que alguien que se diga cristiano se oponga a la pena capital, que el Galileo la sufrió y la sufrió por denunciar la injusticia y la hipocresía.
      Por mi parte, a menudo lo advierto en las primeras líneas de mis entradas en Atrio, sé que quizás parezca tonto, palabrero, teórico y que es mejor que las personas que sean más cristianas o tengan más claro que yo cómo ser o escribir como cristianas, pues eso, que no lean lo que escribo. Mi nombre siempre identifica mis entradas y eso debiera ser suficiente para que no sean leídas.
      Hay que ver la dureza con la que a menudo esas mismas personas juzgan y hasta se valen de onomatopeyas de desprecio para expresar su rechazo de lo que es posteado en Atrio, sobre todo el «¡Ufffff!».
      También aclaro que no haya una estética «gore». Según el DRAE «gore» nombra un género cinematográfico, pero no una corriente estética. La persona enferma de sadomasoquismo, siente que sea placentero contemplar o recordar o describir la violencia que tanto hace sufrir, causa tantas muertes, y degrada la humanidad de quien la sufre y la comete. Aunque haya descrito las heridas del Galileo con el mayor realismo que pude, no acepto que se me asocie con lo sadomasoquista y me siento ofendido porque implícitamente se hiciera porque eso solo quiere decir que no se me conoce. Y, desde luego, no me arrepiento de denunciar la violencia que sufrió el Galileo y por ello toda forma de violencia incluida la verbal, y al hacerlo describirla. En cambio, si hay una estética que excluye todo lo que no produzca placer, que es hedonista y anticristiana porque excluye la compasión y la solidaridad no importa cuán engañadas estén las personas que solo prefieren ponderar lo placentero de la vida, una conducta neurótica porque niega una realidad materialmente perceptible. Ayn Rand es la filósofa contemporánea a la que le cabe la desafortunada gloria de proponer que el amor compasivo sea no solo inútil, sino desagradable e idiota y de preferir el cinismo egoísta. Yo rechazo su filosofía tan de boga en este país en el que resido con todo el vigor de que soy capaz. No juzgo o condeno a quien la prefiera, pero tampoco le envidio ni deseo imitarle.

  • Mª Pilar García Martímez de Aguirre

    Hay otra manera más sencilla… pude vivirla… y es extraordinaria.

    La persona responsable de la comunidad, ante la ausencia del sacerdote… por meses..:

    Celebran ¡La liturgia de la Palabra!

    Reviven la última cena, comentan las lecturas, comparten lo que les ha ocurrido en el lugar, cantan, se dan el abrazo de la paz… y al final… con aquellas “viandas sencillas” que cada cual llevaba, se repartía y compartían, rememorando el momento cumbre.

    ¿Por que razón no iba a estar presente el espíritu del Galileo?

    No como “otra persona” sino como fuerza, deseo de seguimiento, dedicación a La Buena Noticia que dejó en nuestras manos.

    Y soy testigo, de que no se hecha en falta la presencia del sacerdote; más, cuando va, para apoyar y revisar los proyectos, se convierte en un espectador y un activo “escuchante” de todo lo que allá sucedía; para saber que podían necesitar, porque era la Misión, el centro de donde provenían todos los medios, humanos y financieros.

    Humanos, porque allí eran formadas, las personas que lo pedían; después, eran enviadas y acompañadas durante toda su trayectoria y la de las comunidades donde eran responsables.

    Por esas causas y muchas más, como explica Salvador Santos en su libro:

    “Un paso, un mundo” 

    Es impresionante la ¡Vida! que renace en esas comunidades; y son acompañadas por mujeres u hombres, según sean las personas voluntarias para la labor a la que son llamadas, aceptar o no… es solo personal.

    No se pierde nada en estas celebraciones, se lo puedo asegurar, doy fe de ello.

    mª pilar

     

  • Alberto Revuelta

    Pues a los curas nuevecitos, con uniformes limpios y cuellecitos visibles, estudiados con manualitos de herder para presbíteros técnicos de grado medio y enviados a las parroquias para la burocracia imperial episcopal, les da el telele satanico si ven prosperar estas penosas ideas y propuestas. Saben bien que el imperium es lo que vale. El riesgo de la fe,menos. Y el cuerpo muerto de Jesús descrito por George Porta les da repelus pues solo conocen al Pantocrator.