¿A dónde va esa comisión presidencial de la Conferencia Episcopal Venezolana? Cuando a vista de todo el mundo la estrategia de proclamar presidente al Guaidó esta fracasando (ver, por ejemplo lo que ayer publicaba Misión Verdad), se descuelgan con expreso llamado a los militares para que sean ellos quienes tomen la decisión de acabar con el régimen de Maduro, que está recobrando más credibilidad por parte del pueblo y más ayudas exteriores para defenderse de la agresión internacional. Me ha horrorizado leer con tantas alusiones a “hablar en nombre de Dios, sin otro interés que servir… al estilo del Señor Jesús”, tanta proclama meramente política, tanta afirmación sin prueba y tanta alusión al sufrimiento del pueblo por falta de electricidad y agua, sin analizar mínimamente las causas de ello. Bueno, ved y juzgad vosotros el documento entero que sacamos de Reporte Confidencial. AD.
“tengo sed” (Jn 19,28)
Mensaje al Pueblo de Dios y a las personas de buen voluntad en Venezuela
1.- Ante la gravedad de la situación que vivimos en Venezuela, los Obispos, interpretando como pastores los clamores y anhelos de nuestras comunidades, hemos escrito varios mensajes con referencia a la realidad propia de las Iglesias locales. Desde el anuncio del Evangelio, se ha iluminado lo que está viviendo, sufriendo y esperando la gente. En dichos mensajes se ha hecho mención de situaciones particulares que van desde lo acontecido en las fronteras con Colombia y Brasil hasta las consecuencias del así llamado “apagón eléctrico nacional”. Se ha reiterado la necesidad de estar pendientes del pueblo y se han elevado a las autoridades nacionales y regionales los clamores por justicia, paz y libertad de nuestro pueblo. Asimismo se ha pedido decir siempre la verdad. El pueblo está cansado de tantos engaños. El Episcopado hace suyo el contenido y la intencionalidad de dichos mensajes. Más aún, tanto lo dicho por los hermanos Obispos como los mensajes de la Conferencia expresan el sentir del Santo Padre Francisco.
2.- Actuamos en el nombre de Dios sin otro interés que el de servir; no como lo hacen los reyes y gobernantes del mundo, sino al estilo del Señor Jesús, quien ofreció su vida por la salvación de toda la humanidad (cf. Mc 10,42-45). Nuestra preocupación se dirige a todos y cada uno de los hombres y mujeres de Venezuela, en especial a quienes se sienten abandonados y sufren las calamidades de la crisis actual. Reafirmamos la dignidad y centralidad de la persona humana, recordando lo que nos enseña la Palabra de Dios sobre el acto creador de la persona humana: “Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza” (Gen. 1,26). A la vez, recordamos que con la Encarnación, el Dios humanado elevó todavía más esa dignidad al hacer posible que los seres humanos pudieran convertirse en hijos de Dios Padre (Cf. Jn 1,12).
3.- La Doctrina Social de la Iglesia nos habla continuamente de la dignidad de la Persona Humana. Para la Iglesia, fiel a la enseñanza recibida de Dios, no hay acepción de personas; ya que cada persona es sujeto de su desarrollo y no puede ser menospreciada por ninguna ideología. Por eso, “la persona no puede estar finalizada a proyectos de carácter económico, social o político, impuestos por autoridad alguna, ni siquiera en nombre del presunto progreso de la comunidad civil en su conjunto o de otras personas, en el presente o en el futuro” (Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia,133).
4.- Por su dignidad y centralidad, toda persona tiene unos derechos inalienables. El primero y fundamental es el de la vida, de donde surgen todos los demás. “La fuente última de los derechos humanos no se encuentra en la mera voluntad de los seres humanos, en la realidad del Estado o en los poderes públicos, sino en el hombre mismo y en Dios su Creador. Estos derechos son «universales e inviolables y no pueden renunciarse por ningún concepto»” (Ibide,153). La defensa, proclamación y desarrollo de los derechos humanos garantizan el bien común de toda la sociedad, sin excepción alguna para nadie.
II Delitos de lesa humanidad
5.- Los derechos humanos son irrespetados de diversos modos y, en ocasiones, se llega a cometer delitos de lesa humanidad. Lamentablemente esto se ha venido haciendo en nuestra patria bajo la mirada complaciente de las autoridades que deben velar por el recto cumplimiento y defensa de los derechos humanos. Venezuela, por medio de una Ley aprobatoria ha adoptado el ESTATUTO DE ROMA como Ley de la República (según consta en la Gaceta Oficial Nº 5507 Extraordinario del 13 de diciembre del 2000). En dicho Estatuto se establecen los diversos delitos tipificados como “crímenes de lesa humanidad”.
6.- Entre esos “crímenes de lesa humanidad” pueden considerarse numerosas situaciones sobre las que hemos alertado en varios documentos del Episcopado. Mencionamos algunas de ellas: el asesinato y represión de los indígenas pemones y otras etnias del sur del país, a quienes además se les irrespeta sistemáticamente sus culturas; la deportación forzosa de colombianos y venezolanos, sin los procedimientos de ley cuando en 2016 se cerró la frontera con argumentos poco creíbles; la encarcelación u otra privación grave de la libertad física en violación de normas fundamentales; la tortura que se realiza en contra de detenidos por motivos políticos; la imposición intencional de condiciones de vida como la privación del acceso a alimentos y medicinas; la desaparición forzada de personas, es decir, la aprehensión, detención o secuestro por parte del Estado, con su autorización, apoyo o aquiescencia, seguido de la negativa a informar sobre la situación y lugar de reclusión.
7.- El artículo 25 de la Constitución Nacional afirma: “Todo acto dictado en ejercicio del Poder Público que viole o menoscabe los derechos garantizados por esta Constitución y la ley es nulo, y los funcionarios públicos y funcionarias públicas que lo ordenen o ejecuten incurren en responsabilidad penal, civil y administrativa, según los casos, sin que les sirvan de excusa órdenes superiores”. Todos los revestidos de autoridad que hayan incurrido o favorecido los delitos antes mencionados y otros del mismo talante son responsables ante la ley humana, pero, sobre todo, ante Dios, quien les premiará o condenará de acuerdo a lo que “hayan hecho a uno de mis hermanos pequeños” (Mt 25,40).
8.- Les recordamos de nuevo a la Fuerza Armada Nacional lo que enseña la Constitución acerca de su papel a favor del pueblo: “En el cumplimiento de sus funciones, está al servicio exclusivo de la Nación y en ningún caso al de persona o parcialidad política alguna” (artículo 328). En sus actuaciones, a la vez, ha de defender los derechos humanos de todos los ciudadanos sin excepción; no hacerlo es un pecado gravísimo y una falta contra la ley. “Los y las integrantes de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana deben conocer, respetar, cumplir y hacer cumplir las disposiciones legales nacionales e internacionales relacionadas con los Derechos Humanos en tiempo de paz y en estado de excepción, actuando en el marco de los mismos (Artículo 167 de la Ley Orgánica de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana)”. En virtud de ello, volvemos a invitar a todos los miembros de las Fuerza Armada a sentirse parte de un pueblo al que hay que defender y servir, actuando de acuerdo a su propia conciencia.
9.- Expresamos nuestra profunda preocupación por las situaciones que se han creado debido a los recurrentes “apagones” a nivel nacional que, entre otras cosas, agudiza aún más la crisis de suministro y conservación de los alimentos y medicinas. A esto se suma, además, el agravamiento del problema de la falta de agua potable en muchos lugares del país que, en su conjunto, amenaza con degenerar en una situación sanitaria de carácter catastrófico. Las múltiples protestas de los ciudadanos manifiestan el descontento generalizado ante la falta de respuestas de los organismos del Estado. Nos hacemos eco del clamor de la gente que pide un cambio político ante el empeoramiento de la situación. La ingobernabilidad existente tiene su raíz en la ilegitimidad del régimen. Es necesario reconocer la legitimidad jurídica y moral de la Asamblea Nacional para emprender caminos de entendimiento y solución. Resulta grave, ilegal e irresponsable el llamado a los “colectivos” a reprimir a la gente cuando reclama legítimamente sus derechos fundamentales.
III La necesaria conversión
10.- En este tiempo de Cuaresma que estamos viviendo, Cristo nos invita a la Conversión, que consiste en la amplitud de mente y corazón para hacer el bien a todos los seres humanos. En el caso de quienes están alejados, o se han enfriado, o se han dejado seducir por el “pecado del mundo” con sus secuelas de corrupción y delitos de lesa humanidad, la llamada de Dios es al cambio radical de vida. El evangelista Lucas nos presenta la parábola del Padre bueno que recibe a su hijo quien se había ido lejos y malgastado su herencia. Pero, luego de recapacitar toma la decisión de regresar y pedir perdón: “Sí, me levantaré e iré donde mi Padre” (Lc 15,18). Fue recibido por el Padre Misericordioso quien le devolvió su dignidad de hijo. La Iglesia, Madre y Maestra, dirige a todos los que han hecho del mal y del pecado una opción de vida, una invitación a la conversión para vivir en la libertad de los hijos de Dios.
11.- Esto implica todo un proceso de reconciliación, que es parte del ministerio evangelizador de la misma Iglesia. Estamos llamados a cambiar, a reconciliarnos y a arriesgarnos a poner en práctica la ley del amor fraterno. En Venezuela, nos hacemos eco de esta Palabra de salvación y queremos asumir, no la actitud del hijo mayor de la parábola, sino la del Padre que recibe, purifica, perdona y re-crea la comunión entre todos. No hay tiempo que perder: es hora para el cambio exigido por la inmensa mayoría de los venezolanos, para el encuentro, para la apertura de mentes y corazones.
12.- Al final de la Cuaresma sólo podremos celebrar la Pascua del Resucitado, auténtico liberador de la humanidad, si todos los creyentes y personas de buena voluntad unimos nuestros esfuerzos para hacer brillar el resplandor de la dignidad humana e invitamos a salir de su oscuridad a quienes están atentando contra los hermanos con delitos de lesa humanidad. Para ello, es necesario tender puentes y derribar muros de división, en la edificación de una patria que sea casa para todos. Es nuestro desafío, ¿lo asumiremos?
13.- María, Madre Dolorosa, acompaña el Via Crucis que vive nuestro pueblo en la esperanza de la liberación pascual realizada por su Hijo Jesucristo. Que la bendición del Dios Uno y Trino nos llene de fortaleza y entusiasmo evangelizador para seguir construyendo en nuestra nación el Reino de justicia, paz, libertad y amor.
Caracas, 2 de abril del año 2019.
La Presidencia de la CONFERENCIA EPISCOPAL VENEZOLANA
✠ José Luis Azuaje Ayala
Arzobispo de Maracaibo
Presidente de la CEV
✠ Mario Moronta Rodríguez
Obispo de San Cristóbal
1° Vicepresidente de la CEV
✠Raúl Biord Castillo
Obispo de La Guaira
2° Vicepresidente de la CEV
✠ José Trinidad Fernández Angulo
Obispo Auxiliar de Caracas
Secretario General de la CEV
Quizás sea interesante mirar a la constitución del episcopado venezolano. Es notable que al comprobar la información del sitio en la WWW de la Conferencis aparezcan datos diferentes en cuanto a las fechas de ordenación episcopal y en cuanto a las edades.
No obstante, utilizando los datos de la Conferencia de Venezuela, 45% de los obispos o arzobisdpos fueron desigfnados durante el pontificado de Juan Pablo II (conocido por su corrupción y conservadurismo); 23% fue designado por Benedicto que participó de la designación de los que eligió Juan Pablo II porque fue un miembro prominente de la Congregación para los Obispos durante dicho pontificador. Francisco ha nombrado 14 o el 32%, de los cuales cuatro son solo auxiliares (Benedicto eligió a dos de los auxiliares y Juan Pablo II a uno).
La media de edad de los obispos venezolanos es de 67 años, por lo que normalmente la edad media no disminuirá antes de los próximos cuatro años.
8 de los 9 arzobispos fueron elegidos por Juan Pablo II. Dos tienen 74 años y pudieran cambiar en un año, uno tiene 73 y otro 71, pero cuatro son menores de la edad media. Eso pudiera significar que durante el pontificado de Francisco no variaría sustancialmente el poder de los obispos más influyentes (los arzobispos) que seguirán siendo aquellos que designó Juan Pablo II porque la antigüedad tiene peso.
El informe de Bachelet crea condiciones para una intervención en Venezuela
por Rodrigo Benedith
http://piensachile.com/2019/04/el-informe-de-bachelet-crea-condiciones-para-una-intervencion-en-venezuela/
Hola!
En casi todos los Pueblos y Pueblitos
(esparcidos cada 100 Km.)
en toda la Provincia de Buenos Aires-Argentina,
se pueden ver las “Canchas de pelota-paleta” (vascas)
ostentando su necesario firme y duro FRONTÓN.
También es característica de casi todos los a-grupados
puebleros y ciudadanos en las tertulias de Bares y Cafés,
tener integrado el tipo de personaje pintoresco
que se lo apodaba VIENTO EN CONTRA:
https://www.youtube.com/watch?v=gXhYxJ5Hl7k
¿Por qué me acuerdo de aquella Carta que desde la España de Franco se escribía a los hermanos obispos del mundo en los años del TERRORISTA GOLPE DE ESTADO , y posterior GUERRA CIVIL , devenida SANTA CRUZADA despues?.
Señor Santiago, a mi lo que me extraña es que esa Conferencia Episcopal Venezolana no haya definido ESA REALIDAD también ahora, santa cruzada. ¿Lo sabe usted quizá?. Y ya que está comparando a Venezuela con Cuba, me extraña que a estas alturas no se haya enterado que un señor como el Premio Nobel de la Paz NELSON MANDELA dijo al visitar la perla de las Antillas, que fue la primer visita que hizo después de ser nombrado Presidente de la República de Sudáfrica (después de 27 años de cárcel) y dijo: Cuba es el único país que fue a África, a dar, NO A ROBAR. ¡¡¡Realidad!!!¿O se inventó Mandela esa cárcel y los 27años que el régimen del Apartheid, cuyos sostenedores eran ¡¡¡¡Estados Unidos e Israel !!! ?. Desmon Tutú, ¿lo conoce usted?. Algo sabe de eso, pero claro nos católico. Por tanto no puede dar fe de su realidad sudafricana y su actividad pastoral.
Ni tampoco de esa realidad de cientos de cubanos que defendieron la independencia de ANGOLA, yacen en sus cementerios, después de haber derrotado en la Batalla de Cuito Canevale al Ejército de Sudáfrica-Estados Unidos de América, y la de Namibia.
Tampoco quienes derrotaron el Ébola, esa enfermedad de Sierra Leona en África…..Allí los médicos cubanos con 300 sanitarios lucharon por aquel pueblo, nada rico en petróleo, y cuyo equipamiento que había que quemar TODOS LOS DIAS, los pagaba Venezuela.¡¡¡Oh, que realidad!!! ……
En fin, que hay realidades y realidades. Digamos, como dicen los políticos de Imperio USA, que ellos han sido enviados por Dios como Imperio del Bien. Los que no estamos entre tanto pueblo elegido por Dios nos conformamos con no tener ni petróleo, ni oro, ni plata, ni coltan, aunque sí tuvimos la suerte de disfrutar de un Caudillo por la gracia de Dios. Bajo palio, claro.
Gracias Antonio, por poner cordura ante tanta insensatez.
En la fotografía… están los obispos con un cara de dolor, ante el sufrimiento de los que de verdad están sufriendo:
¡¡¡Los de siempre, los que no tienen ningún valor a los ojos de los poderosos… como de casi todos los obispos de esta iglesia vendida el poder y al dinero!!!
¡Que lejos están del Mensaje de Jesús!
mª pilar
Es que la iglesia, a estas alturas de civilización, debería de entender que como institución no sé puede meter en el funcionamiento de un país. Me parece indignante. Porque, para ser cristiano hay que pertenecer a un determinado partido político o simpatizar con un determinado partido o votar a unos partidos concretos?
Por favor, ese tiempo pasó, pasó. Tienen que entender que ese juego ya no se vale.
O una persona que haya votado a Trump no puede ser cristiana? Otra que sea partidaria de Guaidó tampoco? O quizás no pueden ser cristianos los comunistas? A Fidel Castro lo mandamos al cielo o al infierno? Y a Robert Kennedy? Menuda crisis de los misiles. Donde mandamos al ruso de entonces, aquel del zapato,no recuerdo ahora su nombre?
No tienen que meterse en esas cosas. El reino que decía Jesús no va de eso. Qué vaaaaaa. Y claro, ya pensamos todos. Y se creen que lo que digan es lo que dice el mismo dios, porque tienen línea directa con él. Eso ya es insostenible.
La iglesia no tiene que intervenir.
Así pienso.
Y verás la que van a liar con el debate ya abierto con esta pareja que ha decidido poner encima de la mesa el problema de la eutanasia. Pobrecicos. Los dos. Una pareja valiente donde los haya. De alguna manera ya descansan los dos. Ella, sin duda, y él, también,de otra manera, pero también.
Pues veréis a la iglesia, va a liar una impresionante.
Uf
Estimado Antonio T., el que un pueblo sea sojuzgado bajo una cruel dictadura no quiere decir que sus ciudadanos no sean capaces de ser dignos de luchar por el bien…El pueblo cubano conserva las mismas virtudes (y tambien los mismos defectos) a pesar del continuo “lavado de cerebro” de 60 años por tratar de implantar la ideología marxista a un pueblo que es lo opuesto a todo sistema autocrático…Las virtudes de los cubanos no han sido “creadas” por el régimen, sino por las generaciones que precedieron que fueron netamente martianas (José Martí) y democráticas, y por la virtudes cristianas que todos vivimos desde nuestro nacimiento. Solo el que no ha vivido en Cuba e ignora lo que fue como pueblo y nación, puede creer que el régimen nefasto totalitario nos pudo hacer mejores personas….
Cuba siempre se pudo llamar, como mis amigos españoles “aplatanados” decían, que ella era “el país de la bondad” porque siempre lo fue, mucho mas antes de la dictadura castrista..Por eso no me extraña el comentario de Mandela …No hay duda que en cualquier régimen, sea de derecha o de izquierda, hay cosas positivas….Tanto el repugnante Apartheid como toda clase de injusticia humana y social han de ser combatidas y erradicadas de la humanidad, si es posible. Yo estoy a favor de la justicia…
Sin embargo, los métodos para conseguir esa justicia no pueden ser “peores que la enfermedad” como el odio y la lucha de clases, la represión, la opresión, la eliminación de la propiedad, la persecución a toda oposición y a “toda forma de pensar”, la tortura, la mentira, la calumnia en fin, el derrumbe de las libertades civiles y la libertad de expresión para llegar al fin de la revolución. Esto es lo que existe en Cuba desde 1959 hasta el día de hoy. La destrucción de toda libertad de expresión con el consiguiente deterioro de todo derecho a todo…y con el derrumbe físico de uno de los países mas prósperos del continente americano, todo gracias a querer imponer una ideología extranjera, con la particularidad de que solo “por la fuerza” puede mantenerse en el poder.
En todo lo demás puedo coincidir contigo, excepto con lo de arriba.
Un saludo afectuoso
Santiago Hernández
Con mucho respeto a las opiniones de todos los que escriben aquí, quiero decir que los Obispos Venezolanos solamente están describiendo los hechos reales puesto que es evidente que el pueblo de Venezuela rechaza en su mayoría la posición autocrática del Gobierno de Maduro que lesiona continuamente los derechos humanos persiguiendo y torturando a los que se oponen a la “forma de pensar del régimen” y que se quiere perpetuar en el poder en la práctica de una ideología totalitaria…No hay que ser un analista político para darse cuenta de la tragedia de un pueblo que lo han ha ido destruyendo poco a poco, especialmente en los últimos años…..simplemente por no querer reconocer la realidad: que no se puede imponer por la fuerza ningún régimen, sea de derecha o de izquierda…No son sólo los obispos los que hablan, sino los hechos…los que están gritando…
Esta Carta Pastoral de los obispos venezolanos me recuerda la que yo leí personalmente en Cuba el 8 de Agosto de 1960, la famosa Circular Conjunta de los Obispos Cubanos, encabezada por el Cardenal cubano Manuel Arteaga y el primado de Cuba Monseñor Enrique Pérez Serantes, Arzobispo de Santiago de Cuba donde se detallaba brevemente como los “hechos” desmantelaban y desviaban la verdadera revolución cubana de la Sierra Maestra, lograda a base del nacionalismo innato del pueblo cubano, hacia la órbita de la entonces URSS y se decía expresamente que la táctica del gobierno consistía en “ir destruyendo poco a poco, en cada paso, todas las obras sociales, caritativas, educacionales y apostólicas de la Iglesia y desorganizándola por dentro, al enviar a la cárcel con las mas variados pretextos, a los obispos y sacerdotes mas celosos y activos” y “que solo por el engaño y la coacción podría ser conducido (el pueblo cubano) a un régimen comunista”. Y es que así sucedió en la realidad, la obra de la Iglesia cubana fue destruída ferozmente, y por la fuerza y el engaño fue llevado el pueblo cubano a soportar este régimen totalitario que lleva en el poder mas de 60 años….Y la historia se repite pues es lo que se intenta lograr en Venezuela. Es por eso que los Obispos Venezolanos coinciden en la denuncia ante la represión y apoyan a la mayoría del valiente pueblo venezolano
¡Pobres pueblos, cubano y venezolano! ¡Cuánta mentira oculta ante tanta promesa falsa!…Es necesario que despertemos del sueño “y nos apertrechémonos con las armas de la luz” que no está en el odio, ni en la lucha de clases, ni en el totalitarismo de Estado…sino en el amor y respeto a la dignidad humana en todo su sentido…Siento si mis palabras y lo que escribo del corazón de mi experiencia disturban a alguno de mis hermanos…Sin embargo, creo que nunca he podido callar lo que yo se por experiencia…
Un saludo cordial
Santiago Hernández
Si le sirve de algo, creo entender lo que siente. Pero ya sabe, las historias se repiten. Unos las ven de una manera y otros de la contraria. Así somos.
Un abrazo.
Muchas gracias.
Saludos cordiales
Santiago Hernández
Atentos a las noticias que no salen en este país. Trump ha dado la alarma ante la posibilidad de que sus centrales de producción electrica en USA, SUFRAN LOS MISMOS APAGONES QUE EN VENEZUELA. Ello y en primer lugar que son ellos. los que estan produciendo los atentados terroristas contra Venezuela. A la vez que 100 especialistas rusos están implementando la información que acusa directamente a Estados Unidos de tales atentados terroristas en Venezuela. Esos medios electromagnésicos también los tienen Russia y China.
Como sé que rezar no sirve para nada cuando hay un loco suelto y con tanto poder, se puede temer cualquier cosa. Y como un Imperio se está desmoronando, no va a dar facilidades. Antes como una bestia herida puede desencadenar la tragedia.
Si los que tienen todo el poder y el dinero no lo impiden no creo que les sea muy grata esa posibilidad porque ni ellos pueden llevarse al otro mundo todos los bienes que poseen. ¡¡¡En eso confío!!!. Amén.
Hola!
¿Han notado los ATRIEROS
que mi tocayo OSCAR FORTIN
no está “comentando”,
cuando él era el primero en poner el grito en el cielo
cuando aparecían estos “primores” episcopales?
Pa’mí que si no “comenta”
es porque está “comiendo”
p.e. una rica “PAELLA a la VALENCIANA”
rociada, tal vez, ¿con qué vinito es preferible?
Oscar, creo que Tu tocayo Oscar Fortín tenía previsto venir a España por estas fechas. No sé nada más.
Hemos comido la paella con un tinto manchego pero, sobre todo, con una extraordinaria y entrañable fraternidad.
El trio atriero: Oscar Fortin, Gonzalo Haya y Antonio. En casa de JL Servera de Valencia
http://www.atrio.org/wp-content/uploads/paella.jpg
Qué bien que hayáis disfrutado de tan grata compañía.
Buena paella!
Besos a todos
Hola!
Si es como dice el Título:
“Los obispos de Venezuela promueven ya descaradamente el golpe militar”
Pregunto:
-¿no son pasibles de juicio legal
* por “sedición”, o
* por “incitación a la violencia”?
Hola!
La percepción de Carmen recuerda (creo) lo que se escribió en:
UN PASO, UN MUNDO – Salvador Santos
Fascículo 26 – PROMETIENDO SEGUIR (Mc. 10)
……………………………………………………………………………..
Todo el relato de Marcos está sembrado de hechos y conversaciones conteniendo el aleccionamiento del Galileo al grupo de seguidores. En ellos define las líneas maestras que deben caracterizar la vida de la nueva sociedad. Vamos a leer una de las escenas que querían comentar. De ella extraeremos algunas ideas.
“Mientras salía de camino se le acercó uno corriendo y, arrodillándose ante él, le preguntó:
– Maestro insigne, ¿qué tengo que hacer para heredar vida definitiva?
Jesús le contestó:
– ¿Por qué me llamas insigne? Insigne como Dios, ninguno. Ya sabes los mandamientos; no mates, no cometas adulterio, no robes, no des falso testimonio, no defraudes, sustenta a tu padre y a tu madre.
Él le declaró:
– Maestro, todo eso lo he cumplido desde joven.
Jesús se le quedó mirando y le mostró su amor diciéndole:
– Una cosa te falta: ve a vender todo lo que tienes y dáselo a los pobres, que tendrás en Dios tu riqueza; y anda, ven y sígueme.
A estas palabras, el otro frunció el ceño y se marchó entristecido, pues tenía muchas posesiones” (Marcos 10, 17-22)
Presten atención a la entrada del personaje. Irrumpe a toda prisa (“corriendo”), rinde al Galileo máximos honores (“arrodillándose ante él“) y le adjudica un título fuera de lo corriente (“maestro insigne”). Aparece dando la impresión de que se trata de un asunto de vida o muerte. La pregunta del hombre lo corrobora. A él no le preocupa lo de aquí. Tiene las espaldas bien cubiertas. Quiere asegurarse el más allá cuanto antes. Sabe que con dinero no puede conseguirlo y la maraña de leyes judías le crea confusión. Considera que el Galileo le proporcionará la fórmula más sencilla.
El hombre no se equivoca. Nuestro protagonista acude al formato más elemental, a la esencia de la religión: los mandamientos. Pero hay dos detalles curiosos en su manera de plantearlos. No menciona todos los mandamientos. No dice nada de los que tienen que ver con Dios: los cuatro primeros. Únicamente menciona los seis que atañen a la relación con los demás. Es decir, en principio, según él, la vida del más allá depende en exclusiva de la vida ordinaria, la del más acá. Para conseguirla no hace falta ser religioso, Pero, ¡amigo!, ¡eso sí!, la justicia social ha debido observarse con rigurosidad en todos los órdenes.
Si aplicamos el zoom a nuestro texto para verlo más de cerca observamos algo extraordinariamente curioso en su respuesta. Citó escrupulosamente los seis últimos mandamientos del decálogo… ¡menos uno! El décimo no lo nombra. Vamos a leerlo. Dice así:
“No codiciarás los bienes de tu prójimo; no codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su esclavo, ni su esclava, ni su buey, ni su asno, ni nada que sea de él” (Ex 20, 17).
En su lugar, usa otro que no está en el decálogo – siguió hablando Teófila-. Lo entresaca de otras leyes sociales. Nuestro hombre no tuvo reparo en introducir ese cambio en un texto tan sagrado. Con su movimiento sacrílego tenía la intención de acomodarse al personaje que tenía delante y matizar, en su caso, el sentido de los mínimos a cumplir para obtener el objetivo que él pretendía. Nuestra traducción escribe: “no defraudes“. Pero será interesante leer el precepto completo en el Antiguo Testamento:
“No explotarás al jornalero, pobre y necesitado, sea hermano tuyo o emigrante que vive en tu tierra, en tu ciudad; cada jornada le darás su jornal, antes que el sol se ponga, porque pasa necesidad y está pendiente del salario. Si no, apelará al Señor, y tú serás culpable” (Dt 24, 14).
El verbo hebreo al que la Biblia griega y el texto de Marcos traducen significa explotar, defraudar, estafar en el sentido de robar lo debido al jornalero, al emigrante.
Han podido apreciar muy bien que el Galileo le daba pistas al rico para que analizara la procedencia de su riqueza. Pero se ve que él, como ocurre con los que tienen el dinero, se muestra incapaz de comprender que su acumulación está relacionada con la carestía de otros muchos. Así pues, no se quedó muy conforme con que esa interpretación del Galileo y se refugió en la suya…, algo más… permisiva: “todo eso lo he cumplido desde joven“.
El Galileo no se enfrentó al rico. Sí, al sistema que produce la riqueza. Por eso echa mano de la praxis para hacérselo ver mejor y le propone apostar directamente por la justicia: “una cosa te falta: ve a vender todo lo que tienes y dáselo a los pobres“. Le apunta la posición desde donde se accede a la sociedad alternativa: “anda, ven y sígueme“.
El proyecto del hombre de Nazaret no admite la injusticia. El otro no consintió; se marchó con su riqueza y su tristeza. Ahora fijaos en este detalle. Una cosa es lo que pretende el rico, una vida definitiva para después de su muerte, y otra muy distinta lo que le plantea nuestro protagonista: una vida definitiva… ahora. Esa es la razón por la que lo invita a adherirse al grupo. Ante su negativa, el Galileo dice a los discípulos: ¡Con qué dificultad van a entrar en el reino de Dios los que tienen el dinero! (10, 23).
El proyecto del Reino comienza aquí. La sociedad alternativa lo hace visible. Con él arranca la vida definitiva. El grupo de seguidores sí participaba de ese criterio centrado en el presente. A ellos les interesaba lo real, la historia…
Seguían viendo las cosas a su manera. Tan es así, que cuando comprobaron que el Galileo exigía al rico entregar todo lo suyo a sus auténticos dueños (“los pobres“) antes de incorporarse a su proyecto, recelaron de ese esquema económico planteado por él. Su manera de pensar no contemplaba como obstáculo convivir con la injusticia. Prescindir tan alegremente de abundantes ingresos como los del rico cerraba el camino a sus propósitos.
Marcos comenta:
“Los discípulos quedaron desconcertados ante esas palabras suyas” (10, 24).
Pero el Galileo no cedió; les largó una indirecta. Hablará de la casi imposibilidad de participar en la nueva sociedad si se pone la confianza en el dinero:
“Hijos, ¡qué difícil es entrar en el Reino de Dios para los que confían en la riqueza!”
La frase incluye a los discípulos. Ellos vivían aún amarrados a su ambición. Con esa mentalidad resultaba muy difícil aceptar la sociedad alternativa basada en la solidaridad total.
Los discípulos se encuentran en otra onda. Para ellos ningún planteamiento es viable sin inyecciones económicas. El modelo del Galileo no les entra. Por eso dudan de su porvenir:
“Entonces, ¿Quién puede .subsistir?” (10, 26).
El grupo razona desde las categorías del sistema. Persisten en el pensamiento individualista. Ellos confían en la ambición que divide…
“Les aseguro: No hay ninguno que deje casa, hermanos o hermanas, madre o padre, hijos o tierras, por causa mía y por causa de la buena noticia, que no reciba cien veces más: ahora, en este tiempo, casas, hermanos y hermanas, madres, hijos y tierras – entre persecuciones – y, en la edad futura, vida definitiva. Pero todos, aunque sean primeros, han de ser últimos, y esos últimos serán primeros” (10, 29-31).
Como ven, el Galileo no se quedó corto al refrendar que la nueva sociedad no se caracteriza por la escasez, sino por la abundancia procedente de la hermandad. Se trata de la auténtica sociedad del bienestar. Lo afirma con realismo; fíjense que no esconde que resulta ineludible la enemistad del sistema. Y, por encima de todo, asegura que esa vida iniciada aquí es definitiva. Supera a la misma muerte.
Lo que quiso decir con lo de los primeros y los últimos, sencillamente, que para tener el privilegio de pertenecer a la nueva sociedad hay que dejar en la puerta el poder, el prestigio, el dinero; es decir, hay que optar por la igualdad. La igualdad es uno de los rasgos característicos de la sociedad alternativa. No hay dominio ni poder en ella; dense cuenta que excluye el término padre. De otro modo no sería alternativa. Esta idea tardó en ser asumida por el grupo.
La pretensión de conquistar tal nivel de igualdad en nuestra sociedad es ilusoria. El sistema propone la igualdad como meta, como posibilidad frustrada incesantemente, porque nunca se alcanza. Así planteada, defrauda. La igualdad de la que habla el Galileo comienza por los últimos. El objetivo es que recobren la ilusión, sacarles de la miseria, revitalizarlos, que sean primeros. El servicio de la sociedad alternativa a los insignificantes, igualándose con ellos para que recuperen su dignidad humana, hace fértil la vida.
Siguiendo un poco más adelante en nuestro texto, a raíz de la tormenta suscitada en el grupo por los “hijos del trueno“, Santiago y Juan, que habían solicitado para ellos los lugares preferentes en la estructura social del Reino (Mc 10, 35-37), Marcos presenta al Galileo declarando de manera inequívoca cuál es el principio que debe orientar las relaciones entre los integrantes de la nueva sociedad:
“Jesús los convocó y les dijo:
– Sabéis que los que figuran como jefes de las naciones las dominan y que sus grandes les imponen su autoridad.
No ha de ser así entre vosotros; al contrario, entre vosotros, el que quiera hacerse grande ha de ser servidor vuestro, y el que quiera ser primero, ha de ser siervo de todos; porque tampoco el Hombre ha venido para que le sirvan, sino para servir y para dar su vida en rescate por todos” (Mc 10, 42-45).
Observen cómo Marcos introduce la acción del Galileo utilizando el mismo verbo (“convocar“) que en la constitución de la nueva sociedad. No quiere que los lectores pierdan esa referencia.
El proyecto del Galileo exige un cambio total de manera de pensar. Según el evangelio de Juan el Galileo contempla esa idea. Él habla de un cambio existencial: “Si uno no nace de nuevo, no puede alcanzar a ver el reino de Dios” (Jn 3, 3).
·····················
Muchas gracias, Oscar. Traer las fuentes tal como vienen de Salvador es una gran labor tuya a valorar.
Y que merecen conocerse por entero y animo a ello.
Otra impresión es la que me llega, cuando haces esas mini intercalados larguísimos párrafos, que sinceramenteme echan para atrás. Te crees que somos superdotados…quizá atrieros domesticados… No sé.
Me refiero a los últimos compartidos el 3 de abril de este año 2019.
Cuídate mucho. Un abrazo.
Lo compartes en la Parábola de los Dinerales de Salvador Santos.
Gracias. Es la primera vez que leo algo que parece que dice algo parecido a lo que pienso.
Gracias. Gracias.
Acabado de oír, hace quince minutos, una conversación oída entre un grupo , todo señores, unos setenta años. Jubilados. Vivo en una zona guay de Murcia. Hablaban obviedades sobre los Romanov. Dice uno de ellos, dice: si hubiesen , en plural, por lo visto durante trescientos años todos fueron iguales, si hubiesen pensado un poco, si hubiesen pensado en cómo estaba el pueblo, en su descontento, la historia de Europa sería otra. Respuesta. Pues hubiesen sido de otro planeta, el que tiene Poder no lo cede por las buenas. Sonrisa general, asentimiento general.
Y he desconectado. Y he vuelto a la conversación que me corresponde. Saben ustedes los colores de esta temporada? Yo sí.
Pues eso es lo que hay.
Uuuuuffffffff.
A ver si me entienden cuando digo que detesto el Poder.
He llegado a casa y he puesto un ratito las noticias. Me gusta ARV, más periodismo.
Si no fuera una persona de ideas fijas, votaba a Podemos. Por aquello de acción- reacción. Pero no puedo. Me traicionaría a mí misma, a día de hoy. Mañana, no sé.
Si, vergoña!
Maldito Poder.
Y lo que tenía mi Jesús imaginario contra ‘ los ricos’ no era por la riqueza en sí misma, si es honestamente alcanzada. Es contra el Poder que conlleva.
Sorry. Mi Jesús es así. No es un líder contra la pobreza, sino contra la injusticia que trae consigo un abuso de poder , respaldo por la riqueza. No es lo mismo. Es cuestión de matiz.
En fin.
¡Vergogna!
Pero:
A CASI CIEN DÍAS DE GUAIDÓ ESTÁ FALLANDO LA ESTRATEGIA DE EEUU
http://misionverdad.com/entrevistas%20/a-casi-100-dias-de-guaido-esta-fallando-la-estrategia-estadounidense