Benjamín Forcano nos recuerda que en este año se conmemoran los 40 años de dos hechos diferentes pero relacionados. La ordenación episcopal de Pedro Casaldáliga y la aparición del libro “Teología de la Liberación” de Gustavo Gutiérrez. Sobre el primero nos aporta el testimonio de un testigo presencial. Sobre el segundo reflexiona él mismo sobre el desarrollo y actualidad de la teología de la liberación.
1. 40 años de la Consagración episcopal de Pedro Casaldáliga.
3 Octubre 1971 – 23 Octubre de 2011
En estos tiempos en que los nuevos sacerdotes vuelven al uso de sotanas, casullas con filos de oro y la Iglesia se cierra vale la pena leer el siguiente artículo de Antonio Canuto sobre Pedro Casaldáliga. Un abrazo lleno de esperanza para todos. –Luis Enrique Alves Pinto-
LAS ESTRELLAS,EL ARAGUAIA Y NOSOTROS MISMOS SOMOS TESTIGOS
Por Antonio Canuto
Prácticamente en los mismos días en que D. Leonardo deja el pastoreo de esta iglesia, y que D. Eugenio Rixen la asume como administrador apostólico, se cumplen cuarenta años de la ordenación de Pedro Casaldáliga como obispo.
Fue el día 23 de octubre de 1971. Un momento de la mayor importancia para la prelatura que así acogía a su primer obispo. Momento que no se puede olvidar. Fue un acontecimiento que marcó profundamente a la iglesia y sobre todo a los que tuvimos el privilegio de participar.
Tres años después de la llegada de Pedro, en el segundo semestre de 1968, acompañado del hermano Manuel Luzón, para iniciar un nuevo campo de misión, la iglesia de la prelatura se consolidaba con la ordenación de su primer obispo. Pedro fue ordenado por Dom Fernando Gomes dos Santos, arzobispo de Goiania, Dom Tomás Balduino, obispo de la diócesis de Goiás y Dom Juvenal Roriz, obispo de Rubiataba, GO.
Tres elementos, más que significativos, le imprimieron a aquella ceremonia un carácter totalmente innovador y profético que tuvieron fuerte repercusión no sólo en la iglesia de Brasil, sino también en muchas iglesias del mundo y en la sociedad.
- El primero: La ordenación se realizó en la más rica y mayor catedral del mundo. La bóveda de esta catedral estaba adornada por la multitud incalculable de las estrellas del cielo. Las paredes estaban formadas, de un lado, por el agua libre del Araguaia; del otro por las arenas de la colina de Sao Félix. Al fondo, la pobre y pequeña iglesita de la comunidad. Al pie de la colina, como para recordar lo provisorio y frágil de la vida, el cementerio donde tantas personas, muertas o “matadas”, descansaban, al lado del secular cementerio Karajá.
- El segundo: Pedro rehusó cualquier señal externa que lo diferenciase en la iglesia. Puedo equivocarme, pero creo que es el único obispo de este Brasil, y tal vez del mundo, que se planteó no usar nunca ninguna insignia episcopal. Las insignias episcopales que se les entregan al obispo en su ordenación hoy son el anillo, el báculo, la mitra y la cruz pectoral. Señales externas del lugar que ocupa el obispo en una iglesia estructurada en forma jerárquica. Señales de su autoridad y poder. El obispo todavía ostenta un escudo que representa su lema de vida y servicio. Sus vestimentas también se diferencian de las de los simples sacerdotes (Tiempos atrás los obispos todavía usaban en las celebraciones guantes, calzados especiales y vestidos diversos. Todo ello para mostrar su importancia en la iglesia). Pues bien, en aquella noche del 23 de octubre de 1971, la bóveda celeste, las aguas del Araguaia y todos los que estábamos allí fuimos testigos de que algo nuevo acontecía. Un obispo rehusaba las marcas de poder para insertarse totalmente en la vida del pueblo. Estas palabras profético-poéticas hicieron eco: Tu mitra será un sombrero de paja sertanejo; el sol y la luna; la lluvia y el tiempo sereno; las miradas de los pobres con los que caminas y la mirada gloriosa de Cristo, el Señor. Tu báculo será la verdad del Evangelio y la confianza de tu pueblo en ti. Tu anillo será la fidelidad a la Nueva Alianza del Dios Libertador y la fidelidad al pueblo de esta tierra. No tendrás otro escudo que la libertad de los hijos de Dios; ni usarás otros guantes que el servicio del amor.
- El tercer elemento que marcó esta ordenación dejó un reguero de luz y de esperanza. Despertó, por un lado, a adhesión inmediata de los cristianos en toda la iglesia y en los más diversos sectores de la sociedad; por otro, provocó reacción airada y violenta en los agentes de la dictadura militar y de los que se enriquecían con los incentivos públicos a costa del sacrificio, del dolor y de la esclavitud de muchos.
Fue su carta pastoral divulgada en aquella ocasión y que se intitulaba: UNA IGLESIA DE LA AMAZONIA EN CONFLICTO CON EL LATIFUNDIO Y LA MARGINACIÓN SOCIAL. Un documento que marcó época y se convirtió en un divisor de corrientes en el seno de la iglesia del Brasil. La carta pastoral no mira para dentro de la iglesia. Es un mirar de la iglesia sobre la realidad desnuda y cruda del pueblo al que esta iglesia vino a servir.
En ella se relatan las situaciones vividas por los “posseiros” que eran expulsados de las tierras ocupadas y trabajadas desde hacía decenas de años; la realidad de los indios, cuyos territorios eran invadidos en beneficio del capital; y la explotación de los peones, trabajadores traídos de diversas comarcas del país y sometidos a las más degradantes condiciones, en situación similar a la de los esclavos.
Una palabra clara y profética que denunciaba las injusticias que se cometían contra el pueblo y que tuvo eco en Brasil y en todo el mundo. Pedro decía en la introducción: “Si la primera función del obispo es ser profeta, y “el profeta es la voz de los que no tienen voz” (Card. Marty), yo no podría honestamente quedarme con la boca callada al recibir la plenitud del servicio sacerdotal”.
La ordenación no fue sólo una celebración. Se concretizó, en todos los rincones de la prelatura, en formas simples y pobres de vida, en un compartir la vida con los sertanejos e indígenas; en una toma de decisiones de forma colectiva y hermanada, donde seglares, religiosos y sacerdotes tenían voz, mirando siempre al pueblo y a su historia.
Han pasado cuarenta años. Y no podemos olvidar aquellos acontecimientos que fueron los fundamentos de nuestra diócesis.
2. 40 años de la Teología de la Liberación
Por Benjamín Forcano
Hace 40 años comenzaba una nueva manera de hacer teología, que ha influido notablemente en la Sociedad y en la Iglesia. Con su libro, el peruano Gustavo Gutiérrez acuñó esta nueva manera de hacer teología: Teología de la Liberación. A los 40 años, unos la dan como acabada y otros la felicitan por la tarea desarrollada y los desafíos que plantea de cara al futuro.
Pero la Teología de la Liberación no comenzaba en los años 70. En 1492 se produce el llamado descubrimiento de América Latina y en 1511, un fraile dominico, Montesinos, en nombre de su comunidad y ante las autoridades de la Isla Española (hoy República Dominicana), dijo en referencia a los indígenas y al trato que estaban recibiendo: “¿Estos acaso no son hombres?”. Primera pregunta de una historia de la liberación, como muy bien ha explicado el profesor Reyes Mate, en conferencia sobre este tema.
La historia de la Teología de la Liberación puede decirse que comenzó el 11 de diciembre de 1511, hoy hace 500 años.
Sin duda, no faltaron cristianos que, desde siempre y desde la experiencia de su fe, veían a la teología subordinada a unos dictados colonizadores opresivos. Pero, su experiencia no acababa de formularse en nuevas categorías teológicas y hacerse pública en la sociedad. A partir de los años 60, se van generando en el mundo grandes expectativas de cambio, pero los cristianos parecían carecer de creatividad y no incidir en este cambio con alternativas propias de transformación.
Es por entonces cuando Gustavo Gutiérrez lanza un planteamiento teológico nuevo desde el contexto latinoamericano: ¿Cómo presentar a Dios en un mundo bipolar de ricos y pobres, donde por lógica su relación es de injusticia y exclusión y cómo, ahí, la fe es capaz de provocar cambios radicales? Esos cambios apuntan a que los pobres, los excluidos , los discriminados dejen de serlo, lo cual no es posible sin dar la vuelta al sistema.
Si los cristianos tenemos como base y medida el Evangelio , encontramos en él una declaración, que suena a Manifiesto, en la parábola del buen samaritano. En ella se tronzan todos lo esquemas de vanas teologías y se marca el estilo a seguir. Pregunta Jesús: – “¿Qué te parece, cuál de los tres personajes , que vieron medio muerto al hombre asaltado por los bandidos, se hicieron próximo suyo?”.
- – Pues el que tuvo compasión con él.
- – Perfecto, anda y haz tú lo mismo ( Lc 10, 30-37).
Sentir compasión y actuar en consecuencia es previo para el que quiera hacer
TdL. Antes que una reflexión fría y abstracta, la TdL es una vivencia , una práctica de amor , dentro de la cual brota natural una manera nueva de hacer teología.
Obviamente la teología de la liberación no acaba en sí misma, no se detiene en dar explicaciones de lo que pasa, sino que avanza hasta realizar prácticas de cambio y liberación. Explicar la realidad contradictoria existente y dejarla como está no es teología liberadora. La realidad, injustamente interpretada y configurada, necesita ser cambiada para ser conformada con el proyecto de Dios, que Jesús llamada Reino de Dios, y que se construye a base de igualdad, justicia, fraternidad y libertad. Vivir la liberación en cambios y prácticas liberadoras es un imperativo para el cristiano si quiere ser fiel al plan del Dios liberador.
Para el cambio de la realidad, los cristianos tienen que contar con un análisis de esa realidad tejida en torno al binomio riqueza / pobreza, Norte / Sur, y que demostrará que esa situación no es fruto de la casualidad ni de la voluntad de los dioses, sino del egoísmo y codicia de los hombres, del dominio que los más fuertes establecen sobre los más débiles y necesitados.
Este análisis es necesario para descubrir las causas reales de la opresión y a sus sujetos responsables y evitar el idealismo. El marxismo, no como filosofía o visión global de la realidad, sino como ciencia, puede ayudar mucho al conocimiento de esas causas y las funestas consecuencias derivadas. Vale en cuanto su análisis se muestre verídico en señalar la génesis y efectos del capitalismo. Nunca los teólogos de la liberación asumieron el marxismo como visión filosófica de la realidad ni lo utilizaron acríticamente.
Precisamente porque la TdL apunta al cambio de lo que es opresión e injusticia, ha sido calumniosamente atacada. Esta teología reclama para la Iglesia entera, el lugar propio que le asigna su fe desde el seguimiento de Jesús: ser pobre, vivir con los pobres y comprometerse por su liberación.
Esta recolocación de la Iglesia es peligrosa para los opresores y para una Iglesia-Poder, acostumbrada a vivir en alianza con los poderosos. Nada se da en esta teología que no traduzca con fidelidad el mensaje radical de Jesús y su Evangelio. Pero, los “cuestionados” por la TdL y su dominio y “medios gigantescos” se encargaron de airear que la TdL era heterodoxa por su marxistización, su apartamiento del magisterio eclesiástico, su fomento de la guerrilla, su concepto meramente temporal de la salvación, por reducción del Jesús histórico a un líder terreno….
Posteriormente , no pocos venían asociando la suerte del la TdL al socialismo real. La caída de éste les hizo creer que caía paralelamente la TdL. Doble engaño: porque el socialismo no se identificaba con el socialismo de Estado y la TdL no era subordinada suya, sino que tenía origen y base propia en el Evangelio. Como muy bien ha dicho el obispo Pedro Casaldáliga: “La TdL no tiene como padrino a Marx sino al Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo”.
La caída del socialismo real no canonizaba la maldad intrínseca del capitalismo, sino que incitaba más bien a profundizar en las causas de sus opresión, hoy globalizada. Como siempre, las estructuras económicas cuentan en la marcha de la sociedad, y sin ellas no se puede entender el funcionamiento del sistema neoliberal. Pero, no son determinantes ni ahogan la influencia de otros factores dela sociedad, el primero de todos el protagonismo de los ciudadanos. La conciencia actual puede revertir la visión eurocéntrica dominadora que, desde hace más de 400 años, gobierna al planeta Tierra. El hombre no es, frente a la tierra, dueño y depredador, ni puede seguir explotándola ilimitada e insolidariamente.
Hoy, la TdL actúa en los frentes más necesitados de liberación: mujer / varón, religiones enfrentadas, indígenas acosados, pueblos secularmente sometidos, ….
El nuevo paradigma de la TdL va más allá de todas las subordinaciones del mundo moderno, plasmadas en la sociedad y sistema capitalistas. La sociedad actual con el protagonismo de los ciudadanos –tal como aparece en el movimiento M 15 de los indignados- está marcando un nuevo giro frente a la relación de dominio, por siglos establecida.
Es un hecho que la TdL no parece proveer, como en años anteriores, de pensadores eminentes. Seguramente porque su savia viva y transformadora ha circulado por abajo, más horizontalmente, permeando e impulsando directamente el pensamiento y la acción de “ los sin voz “.
Bien-aventurado el pobre en estíritu, porque de él es el reino. El pobre y solo el pobre tiene disponibilidad interior para ser libre y abrazar esta menera nueva de pensar la teología. Desde el pobre, desde Nazareth Desde la Sinagoga de Nazareth (lc.4…) Desde la chabola.Desde el desempleo humillante. Desde la falta de libertad… Y tantos puntos de partida, Benjamín.
Don Pedro, mi Querido Monseñor Pater, desde Aquel Pueblito chiquito de Nuestro Querido México, Pais de Grandes pregoneros de esa Universal Teologia. Como Monsres. Sergio Mendez Arceo, Pedro el Oaxaqueño, Mons. Samuel Ruiz García, y otros que por alcanzar poderes, se torcieron. Monsres. Berlie, Carrera Rivera, Javier Lozano Barragan, quien fue participe del Congreso de Teologia en Chiapas y luego por Logica De Conveniencia cambio al tradicionalismo. y muchos otros. Pater Casaldiaga, Tienes merecido el Reino Prometido.
William Rangel
Espléndido recordatorio del IMPORTANTE y NECESARIO ESLABÓN PERDIDO, o casi, en la cadena de RELACIÓN MISIONAL =APOSTOLICA, cuyo origen está en EL GESTO con que JESUS confía a sus DISCIPUL*S la MISMA MISIÓN que el PADRE le había confiado a Él.
El modo como Pedro se propuso iniciar la aceptación de esa Misión, junto con la de otros que, por aquellos tiempos, también hacían sus pinitos de gran aproximación a la “encarnación” con las gentes sencillas que les eran confiadas en el llamado tercer mudo y también en el llamado primero y segundo, levantó expectativas esperanzadoras sobre lo que había supuesto para la Iglesia el C. Vaticano II.
Pedro C. intentó desde el inicio de su misión apostólica sobreamarrar en su vida el hecho y el modo con los que Jesús empezó la suya, con su ENCARNACION en la POBREZA HUMANA y la búsqueda y lucha por la Justicia del Reino de Dios entre sus hij*s. actitud que ha conservado hasta el momento, siguiendo de muy cerca las huellas del Maestro y compartiendo sus consecuencias.
A la altura de este aniversario de su trayectoria vital ha ofrecido y ofrece una visible y especial referencia actualizada del PASTOR BUENO que pone su vida en defensa de las gentes más sencillas y pequeñas, sin enredarse en complicidades propias e interesadas de los asalariados.
Y en ello radica el que muchos, por allí donde ha amarrado sus catalanes pies con sus brasileñas sandalias de por vida y por todo el mundo, hemos oído su voz, en ella hemos percibido VERDAD y AMOR y siguiéndole nos ha ayudado a seguir y confiar en JESÚS, EL BUEN PASTOR.
¡Cuanto agradecimiento hemos experimentado por sus prácticas enseñanzas y su arriesgado testimonio y hemos constatado en las gentes que han ido sabiendo de él!
Cito esté párrafo de la carta, en este día tan cercano aún, al modo como se celebra por creyentes la visita a los cementerios, para insistir en la verdad en la que la Iglesia cree porque así nos lo confió Jesús de que la muerte solo es cambio de forma de existencia y vida permanente en plenitud.
Al pie de la colina, como para recordar lo provisorio y frágil de la vida, el cementerio donde (LOS RESTOS CORCORALES DE) tantas personas, muertas o “matadas”, descansaban, al lado del secular cementerio Karajá.( PORQUE LAS PERSONAS GOZAN EN LA PLENITUD INFINITA DEL PADRE sin condicionamientos de TIEMPO o LUGAR)
Respecto al artículo de Benjamín, en mi opinión lo de TdL, aunque el nombre concretó un modo de aplicar concreto la teología o el razonamiento práctico de la fe, en Iberoamérica, toda teología que verdadera y concretamente ha intentado basarse en LA VERDAD LIBERADORA DEL TESTIMONIO Y MENSAJE DE JESÚS, orientando y potenciando la vida real de las gentes hacia una VERDADERA y PRÁCTICA HERMANDAD HUMANA UNIVERSAL, ha sido y es TEOLOGÍA DE LIBERACIÓN (“LA VERDAD OS HARÁ LIBRES”)
Por ello todos los intentos de ponerle cortapisas, trabas, condenas y calumnias, no hacen más que acreditarla como sistema de FIDELIDAD y COHERENCIA CON el JESÚS HISTÓRICO, HUMANO y DIVINO, que así fue tratado en su tiempo.
Y esto: “-Seguramente porque su savia viva y transformadora ha circulado por abajo, más horizontalmente, permeando e impulsando directamente el pensamiento y la acción de “ los sin voz.Es un hecho que la TdL no parece proveer, como en años anteriores, de pensadores eminentes.”
En mi opinión, no es más que el cumplimiento de aquello de Jesús y consecuencia práctica de los efectos liberadores de la verdad, de que: “Las gentes sencillas reciben del Padre, porque así le place, la revelación que esconde a los sabios y entendidos.”
LOS TEOLOGOS DE LA LIBERACIÓN DE TODO EL MUNDO Y PODEMOS DECIR QUE BENJAMIN LO ES…COINCIDEN EN MUCHISIMOS ASPECTO, A TAL PUNTO QUE SU PRAXIS QUE ALIMENTA EL DISCURSO QUE EN LA TEOLOGIA DE LA LIBERACIÓN ES FUENTE DE COMPROMISO DE VIDA PARA EL TEOLOGO Y PARA LAS COMUNIDADES…SON SIMILARES…PORQUE ES LA REFLEXIÓN DE LA IGLESIA DE LAS COMUNIDADES, UN PUEBLO QUE A TRAVES DE SUS TEOLOGOS, SISTEMATIZA SU SER PROFECTICO QUE NACE EN LA LUCHA DIA A DIA…JUSTAMENTE EN AMPLIA COINCIDENCIA ENTRE BENJAMIN Y PABLO BONAVIA, TEOLOGO DE LA LIBERACION URUGUAYO, SE CONFIRMA LO QUE DECIMOS…
Podemos poner un horizonte largo. En el mes de diciembre próximo se cumplen 500 años del famoso sermón de Antonio Montesinos. El 21 de diciembre de 1511, cuarto domingo de adviento, en la entonces Isla La Española (hoy República Dominicana), por primera vez se encara a los conquistadores desde la perspectiva de los indígenas que están siendo expoliados y humillados, a quienes les están robando todo, la riqueza, la cultura, la identidad…¿Cuáles son esos espacios donde esta teología está haciendo hoy, reflexión?
En primer lugar hoy hay una conciencia mucho mayor del factor ecológico como un factor transversal, no solamente temático, en todo lo que es la convivencia de la humanidad con el planeta. Una primera novedad es que hoy somos mucho más conscientes de los condicionamientos naturales de la vida humana y, por lo tanto, superamos esa visión muy moderna de un ser humano que puede explotar indefinidamente e ilimitadamente con un único ánimo de lucro y de rentabilidad, los recursos naturales. Hoy somos mucho más concientes que todo lo que la humanidad le hace a la naturaleza de algún modo después repercute sobre la raza humana. Eso es nuevo y eso cambia todo. A modo de ejemplo, hace poco Leonardo Boff en un artículo escribía que hasta hace poco tiempo nosotros pensábamos que la forma capitalista de explotar la naturaleza iba a terminar por la militancia de los grupos sociales y obreros. Hoy nos damos cuenta que probablemente termine simplemente porque el propio planeta es incapaz de seguir siendo agredido por esa manera de explotar. Como toda la dinámica capitalista tiene una gran lógica interna que en buena parte depende de la explotación ilimitada de los recursos. En la medida en que eso se descubre limitado va a empezar a revertirse hacia cambios sociales y económicos grandes. Esa conciencia es nueva…El nuevo paradigma que yo llamaría posmoderno es el que supera todas las subordinaciones típicas de la modernidad, que de alguna manera secundan esa relación de la humanidad sobre la naturaleza, y sobre eso se fue generando todo lo que tiene la sociedad capitalista. Ahora hay economías alternativas, saberes en reciprocidad, protagonismo de la sociedad civil. Los últimos fenómenos de protesta e intentos de cambio en torno a los indignados y otros grupos están reflejando la importancia que tienen y los recursos que tiene la sociedad civil para promover cambios. El sujeto del cambio ya no es solamente un partido político, o no es una opresión económica, sino que hay también un protagonismo creciente de quienes son simplemente ciudadanos de a pie.
Entonces diría: mayor protagonismo de la sociedad civil, mayor valoración de la reciprocidad entre los saberes académicos y saberes populares, mayor conciencia de la equivalencia entre varón y mujer: necesidad de que eso sea reconocido a todo nivel. Una relación también de reciprocidad entre lo que es la sociedad de humana y el planeta. Todo eso para mí, forma parte de un nuevo paradigma que intenta superar relaciones de subordinación por relaciones de interrelación y reciprocidad. Eso es lo nuevo para mí. (Fragmentos de una entrevista publicada en el boletín de Obsur, hecha a Pablo Bonavia por Magdalena Martínez el 7 de octubre de 2011)
CON TODO CARIÑO LOS SALUDA DESDE MONTEVIDEO Gabriel
“……….impulsando directamente el pensamiento y la acción de “ los sin voz “.
Bendita sea, y creo que lo es, la Teología de la Liberación.
Y no llegará a ser santo en los altares,y como decia el párroco de nuestro pueblo,ni falta que hace,solo Dios sabe la santidad de cada uno,Casaldaliga,Romero,Ellacuria etc,autenticos santos.
Mil felicitaciones a nuestro querido Don Pedro. La fuerza de Dios esté siempre contigo para que no ceses de ser profeta!