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¿Por qué perdura la Iglesia-poder?

Voy a abordar un tema incómodo, pero ineludible: ¿cómo puede la institución-Iglesia, tal como la he descrito en un artículo previo, con características autoritarias, absolutistas y excluyentes perpetuarse en la historia? La ideología dominante responde: «sólo porque es divina». En realidad, este ejercicio de poder no tiene nada de divino. Era exactamente lo que Jesús no quería. Él quería la hierodulia (servicio sagrado) y no la hierarquia (poder sagrado). Pero ésta última se impuso a través de los tiempos.cerezo jap

      Las instituciones autoritarias suelen tener una misma lógica de autorreproducción. Con la Iglesia-institución no es diferente.

En primer lugar, ella se considera la única verdadera y quita el título de «iglesia» a todas las demás. Luego establece unos criterios rigurosos de pertenencia: un pensamiento único, una única dogmática, un único catecismo, un único derecho canónico, una única forma de liturgia. No se tolera la crítica ni la creatividad, consideradas negativas o denunciadas como creadoras de una Iglesia paralela o de otro magisterio.

      En segundo lugar, se usa la violencia simbólica del control, de la represión y del castigo, frecuentemente a costa de los derechos humanos. Fácilmente el cuestionado es marginado, se le niega el derecho a predicar, a escribir y a actuar en la comunidad. Durante su mandato como presidente de la Congregación para la Doctrina de la Fe, el entonces cardenal Joseph Ratzinger castigó a más de cien teólogos. Con esta misma lógica de no perjudicar el buen nombre de la Iglesia, los pecados y crímenes de los sacerdotes pedófilos u otros delitos, como los financieros, se mantienen ocultos, sin el menor sentido de justicia hacia las víctimas inocentes.

      En tercer lugar, se practica el culto a la personalidad y casi se idolatran las autoridades eclesiásticas, principalmente el Papa a quien se considera «dulce Cristo en la Tierra». Pienso para mi interior: ¿qué dulce Cristo sería el Papa Sergio (904), asesino de sus dos predecesores, o el Papa Juan XII (955), elegido a la edad de 20 años, adúltero y muerto por el marido traicionado, o peor, el Papa Benedicto IX (1033), elegido con 15 años de edad, uno de los más criminales e indignos de la historia del papado, llegando a vender la dignidad papal por 1000 liras de plata?

      En cuarto lugar, se canonizan figuras cuyas virtudes se encuadran en el sistema, como la obediencia ciega, la continua exaltación de las autoridades y el «sentir con la Iglesia (jerarquía)», muy al estilo fascista según el cual «el jefe (Duce, o Führer) siempre tiene razón».

      En quinto lugar, hay personas y cristianos de naturaleza autoritaria que aprecian por encima de todo el orden, la ley y el principio de autoridad en detrimento de la lógica compleja de la vida que tiene sorpresas y exige tolerancia y adaptaciones. Ellos secundan este tipo de Iglesia así como los regímenes políticos autoritarios y dictatoriales. Es más, hay una estrecha afinidad entre los regímenes dictatoriales y la Iglesia-poder, tal como se ha podido ver con los dictadores Franco, Salazar, Mussolini, Pinochet y otros. Los sacerdotes conservadores fácilmente son nombrados obispos y los obispos fidelísimos a Roma son promovidos, fomentando el servilismo. Este bloque histórico-social-religioso ha cristalizado, garantizando la continuidad de este tipo de Iglesia.

      En sexto lugar, la Iglesia-poder conoce el valor de los ritos y símbolos, pues refuerzan la identidad conservadora, pero cuida menos sus contenidos, con tal que se mantengan inalterables y sean estrictamente observados.

      En razón de esta rigidez dogmática y canónica, la Iglesia-institución no es vivida como hogar espiritual. Muchos emigran. Dicen sí al cristianismo y no a la Iglesia-poder con la cual no se identifican. Se dan cuenta de las distorsiones hechas a la herencia de Jesús que predicó la libertad y exaltó el amor incondicional.

      No obstante estas patologías, tenemos figuras como el Papa Juan XXIII, dom Helder Câmara, don Pedro Casaldáliga, don Luiz Flávio Cappio y otros, que no reproducen el estilo autoritario, ni se presentan como autoridades eclesiásticas sino como pastores en medio del Pueblo de Dios. Pero, a pesar de estas contradicciones, hay un mérito que es importante reconocer: este tipo autoritario de Iglesia nunca ha dejado de trasmitir los evangelios, aunque sea negándolos en la práctica, permitiéndonos así el acceso al mensaje revolucionario del Nazareno. Ella predica la liberación, pero generalmente son otros los que liberan.

[Traducción MJG]

49 comentarios

  • M. Luisa

    Aunque para mí ya es muy tarde, pues suelo madrugar, hoy esperando  que retransmitan una programación sobre Raimon Panikker en la TV catalana, al asomarme por aquí me ha alegrado cantidad ver aparecer a D. Luis Cobiella que desde aquí le mando un saludo afectuoso ( no me equivocaba). Otro para ti, Ana. Y como no también para Héctor agradeciéndole sus buenos deseos.
     
    M. Luisa

  • ana rodrigo

    Vamos a ver….! Yo fui la que dije no entender el porqué de la “timidez” de  Luis Cobiella, pero, ojo!, lo puse entrecomillado, por tanto no me refería tanto a la timidez cuanto a su humildad. Dije entonces que sus escritos me sabían a poco. Claro!, cómo no iba a ser así, después de informarme en Google, a sugerencia de Héctor, he comprobado que Luis Cobiella Cuevas es una gran persona, una gran personalidad y un gran personaje.
     
    Ahora sí le pido a este entrañable hombre que nos haga disfrutar de su saber y de su sabiduría., al mismo tiempo que le envío un abrazo sincero.

  • Luis Cobiella Cuevas

    Luis Cobiella tiene 85 años y es viejo amigo de Héctor.
    Es normalmente tímido y normalmente sabio (sabe a hombre normal). Admira el saber de la gente de Atrio: es un saber que no alcanza ni envidia y sí valora y agradece.
            Con lo dicho pretendo haber satisfecho el interés de quienes han escrito mi nombre en Atrio a propósito del “Dios del diccionario”. El interés que supongo me produce el gozo de estar entre ustedes, sea como fuere, inter esse, estar entre. Desde ese gozo puedo decir que los quiero.

  • salvador acracio

    Como acertadamente plantea Leonardo Boff en su artículo, mucha gente en efecto se plantea “¿por qué perdura la Iglesia-poder?”

    ¿Por qué? Comienzo respondiendo con una perogrullada u obviedad: yo al menos no lo sé; vamos, que no creo conocer con certeza el porqué. Pero he aquí que Leonardo Boff nos ofrece su reflexión. Y henos aquí con que por esa reflexión del teólogo brasileño yo vuelvo a recordar algo que en algunas foros de Internet, incluido Atrio, no he dudado en señalar, a saber, me parece estar seguro de que para muchas personas, sobre todo de fuera de la Iglesia o siquiera críticas con la institución eclesial, ese poder que Boff denomina en su artículo como hierarquia (poder sagrado) frente a hierodulia (servicio sagrado), se manifiesta en las formas de tratamiento protocolarias tan típicas sobre todo de la Iglesia católica y de la Ortodoxia: ilustrísimo, ilustrísima, eminencia, eminencia reverendísima, su gracia, su toda gracia, su beatitud, santo padre, santidad… Creo que llevaba toda la razón el obispo D. Pedro Casaldàliga en esa carta famosa del año 1984 en que pedía al entonces papa Juan Pablo II, entre otras reformas en la Iglesia, la simplificación de toda esa “ornamentación” honorífica. Antes de esa carta, apenas inmediatamente después de la clausura del Concilio Vaticano II,  un grupo de obispos, entre los cuales estaba Dom Hélder Cámara, se comprometía a vivir una serie de valores, signos y medidas de reforma en la Iglesia: los obispos no debían ser titulares de cuentas bancarias, debían vivir con la sencillez del Pueblo, debían huir de tratamientos de honor y títulos de grandeza…  Sin duda, ese clima del postconcilio sería el germen de esos dos grandes acontecimientos eclesiales, especialmente para la Iglesia en Latinoamérica, que fueron Puebla y Medellín.

    Empero, sé perfectamente que mi propuesta de hacer más evangélica la Iglesia católica, también simplificando toda la parafernalia de los tratamientos de honor debidos a los prelados, desconcierta y molesta incluso a muchos católicos de mentalidad conservadora y de derechas, que a decir verdad no suelen conocer ni siquiera que han existido obispos proféticos en la Iglesia católica de la talla de Hélder Cámara, Leónidas Proaño, Enrique Angelelli… . Se molestarían desde el incial desconcierto porque les habría de parecer sin duda que esa reforma sería nada más y nada menos que una traición al sueño de Jesús de Nazaret, que no en balde “dio las llaves a Pedro y dio exhortaciones precisas al resto de los apóstoles…”

    Me temo que por mucho que se intente razonar con esos católicos desde la convición de que el ejercicio de poder que Jesús proponía era, como bien señala Leonardo Boff, la hierodulia (como ya he adelantado, servicio sagrado, no poder sagrado) y no la hierarquia, es casi imposible llegar a un entendimiento.  Porque la estrategia o táctica del pensamiento conservador es muy precisa, me parece a mí: consiste en un permanente esfuerzo de deslegitimación de todo lo que huela o suene a crítico, heterodoxo, progresista, izquierdista, libertario. Sea en el ámbito de la cultura que sea: cine, música, teología, literatura, arte, filosofía… Da igual, pues en todo caso lo que habría de primar o prevalecer es la seguridad de las tenidas por certezas y verdades absolutas, frente a cualesquiera veleidades y enmiendas a la totalidad provenientes del pensamiento libre.

    Aunque ello sea, ese alcanzar tal orden de seguridades y certezas absolutas íntegramente inamovibles, a base de no pensar, o de no arriesgar en el vuelo del pensamiento. Aunque ello sea a base de calificar de “piojosos drogatas y malos músicos” a los miembros de grupos de rock de la talla de Pink Floyd o Led Zepelin, entre otro muchos, al tiempo que se cierran filas en torno a propuestas musicales claramente ñoñas y reaccionarias. Y así un largo etcétera. 

  • Héctor Rodríguez Fariña

    Hola Luis

    Llevo varios días dándole vueltas como decirte un montón de cosas en pocas líneas y no acierto.

    Ha sido una gran alegría volverte a ver por Atrio: esta profunda hermandad nuestra de más de cuarenta años que incluye a Concha, Agustín, Nieves Mª y tantos más, no se resuelve con cuatro líneas. ¿Te digo algo? Mira a Atrio como otra gran hermandad y no te preguntes qué haces entre tantos que tanto son. Tú me conoces a mi y no me idealices que no soy tanto, y aquí estoy escabulléndome entre gente de tanta altura.
     
    Los que han leído tu comentario han pensado que o eres tímido o eres sabio. Yo que te conozco les digo que de tímido no tienes nada. Que lean si no las 100 poesías de tu Antología (Centro de la Cultura popular Canaria) o tu último libro Jesús
     
    ¿Ves? Ya estoy haciendo lo que no quería. El que quiera descubrirte que vaya a Google y allí verán algo de lo que eres. Yo siempre he dicho, como adivinó Mª Luisa, que eres un sabio. Tu pregunta sobre el Dios gramática se adelanta a Sana Anselmo (1078) que dijo algo así como esto:
     

    Dios es, por definición, el mayor ser que puede imaginarse.
    La existencia, el ser, es una perfección que debe acompañar a Dios
    Ergo Dios debe existir, pues si no existiera, no sería perfecto.

     
    La trampa ontológica – paso injustificado del pensamiento al ser – en la que cayó el pobre santo no fue o no quiso ser advertida por el poder de la iglesia que necesitaba afianzarse en la supremacía de Dios sobre el hombre. La base misma de la fe consiste en términos consagrados, definidos por el sucesor de San Pedro, el Papa.
     
    El hombre marcado por el pecado original, debe someterse a una autoridad superior y obedecer el conjunto de preceptos que la Iglesia Católica defiende. Cuando parecía que esta lógica podría ser revisada y se consiguiera que la iglesia se adaptara al mundo moderno en el Vaticano II, viene al bandazo actual hacia la derecha: es el mundo el que debe adaptarse a la Iglesia.
     
    Resulta por lo tanto totalmente lógico que Benedicto XVI haya lanzado un llamado a la reformar de la ONU al igual que la arquitectura económica y financiera internacional con vistas a convertir en una realidad concreta el concepto de familia de naciones. Todo ello porque Dios desde la Iglesia protege a su manera la paz mundial para mantener su supremacía sobre el hombre.
     
    Ése es el Dios que se define en el diccionario del que habla Luis Cobiella y que no es más que un nombre.
     
    Un abrazo y quédate con nosotros Luis, nos haces falta para enseñarnos a ser concisos y saber dar en el clavo como tú.
     
    Aprovecho para mandarle un abrazo a Mª Luisa. Tanto Charo como yo nos alegramos que sigas bien. Héctor

  • M. Luisa

    Pero dónde tendría yo los ojos que no he visto la maravillosa poesía de Carmen nuestra poetisa de cabecera. Me ha encantado,  es el refuerzo espiritual que me faltaba.
    Un abrazo  querida amiga por tu compañia

  • M. Luisa

    ¡Luis, tocayo! gracias amigo, también a josefina y a Mª Pilar  que ya las he visto esta mañan pero andaba enfrascada componiendo un borrador … ya estoy  bastante  mejor, gracias a los tres, abrazos.

  • Carmen (Almendralejo)

    Para curar el alma, una buena conversación…
    Para curar los ojos, mirarse en los ojos de otra persona
    Para curar los piés calzarse en las saldalias de quien nos acompaña
    Para curar los brazos abrazar fuerte
    Para curar la espalda, rescostarse en la amistad
    Para curar el pulso dejarlo latir
    Para curar las manos reposarlas en las manos aún más cansadas
    Para quitar el hambre, compartir nuestras migajas
    Para curar el corazón, vaciarlo y llenarlo hasta que se haga regueros de agua…
    Para curar la melancolia, hacernos presente en la distancia.
    Un abrazo M. Luisa

  • Luis González Morán

    Arriba, María Luisa, arriba!
    En Atrio hay mucha gente que te aúpa y te acompaña (nos acompañamos).

  • mªpilar garcía

    Nos dices Luis: “Si apenas soy ¿por qué aparezco entre esta familia en las que tantos tanto son?”
     

    Porque esta familia, desea crecer, acoger, compartir, todo aquello que nos da ¡Vida!
     

    Te esperamos con gozo y a Julián; es hermoso crecer compartiendo vivencias que no dan lecciones, sino se dan a si mismos.

    Un abrazo envolvente y cálido.

    mª pilar

  • mªpilar garcía

    Mª Luisa: quiero enviarte en silencio, mi cariño, fuerza, ánimo.
    Te esperamos pronto ya restablecida entre nosotros/as.
    Un abrazo entrañable lleno de cariño.
    mª pilar

  • Josefina G.C.

    Mª Luisa, te deseo un pronta y total mejoría.

    Gracias Oscar por recordarnos la sabiduría de Atahualpa:

    “A qué le llaman distancia,
    eso me habrán de explicar,
    sólo están lejos las cosas
    que no sabemos mirar.”

    Os miro y re-miro a tod*s casi a diario y os siento muy cercanos,
    y siempre agradecida, aprendiendo a mirar, voy todavía¡
    saludos muy cordiales
    Josefina 

  • M. Luisa

    Don Luis es sabio, no tímido! Creo que lo comprendo muy bien. Por eso su aportación para mí fue una bendición, como también la fue la de Javier Thomson. En ambas intuyo, casi con toda certeza, las tesis que tanto defiendo.

  • MAR Medina

    Completamente de acuerdo con tus palabras, Luis Cobiella Cuevas, tanto que me sorprende ese sentimiento de diferencia y de soledad que manifiestas (¿Hay también algo de humildad en esa casi críptica frase Si apenas soy con que comienzas tu comentario ?), pues salvo que queramos ponernos absolutamente de acuerdo en cada palabra que empleamos, y aunque por aquí se habla mucho de teología, los cierto es que otros muchos tenemos también dificultades para referirnos a algo que ignoramos.
    Así yo prefiero hablar de divinidad, un concepto más etéreo e indefinido que el término Dios, tan cargado de contenidos teológicos o filosóficos que no comparto puesto que como tú, lo que sea Dios ni lo puedo concebir ni lo puedo imaginar (algo así dijo un antiguo filósofo de la antigüedad cuyo nombre lamento no recordar), Carmen utiliza con frecuencia asteriscos para al menos no otorgarle género a Di*s y así unos cuantos más en Atrio.

    Pero no te sientas solo por favor, no hay motivo ni aun cuando no se comparten ideas, al fin y al cabo la diferencia enriquece, nos enseña y hace crecer, ¿no? Por ejemplo, ese apenas soy con el que empiezas no puedo compartirlo, aun sin conocerte, salvo si queda claro, como sin duda es cierto, que ese apenas soy nos incluye a todos y cada uno de los seres humanos: apenas soy yo también, en tránsito y aprendiendo.

    Aprovecho para darte las gracias por tu comentario, Luis, como a M. Luisa, Carmen, Ana, Javier Renobales y Thomson, Gabriel, Julián, Héctor, Oscar, Antonio, Mª Pilar, gracias a todos, y a ATRIO.

    Saludos cordiales

  • M. Luisa

    Qué bien! cómo me ha transportado a mis años de juventud  esta canción de Atahualpa Yupanqui, amigo Oscar.  Pues siendo yo por aquel entonces representante de una conocida  firma francesa de cosméticos,  tenía que viajar constantemente por razones de trabajo, así que las canciones de Atahualpa iban siempre  conmigo  en la maleta junto a un modesto y pequeño tocadiscos que…Pero bueno! que el pasado no me distraiga de lo que con respecto al tema presente venía  a decir….todavía!
     
    Gracias, Oscar.
     
    Lo que iba a decir con respecto al tema que nos ocupa tiene que ver con la riqueza de aportaciones que se han ido sucediendo  y quiero pensar con ellas que, como yo,   aquí hay alguien más que sitúa, previo al ser  la realidad, sobre todo en el tema de Dios.
     
    Entonces sí que en este orden cobra sentido hablar de Dios porque si se ha comprendido los puntos claves, aquellos en los que más abajo he afrontado el problema diciendo que de ella, de la realidad sólo tenemos intelección sentiente o aprehesiva, estamos desautorizando a la inteligencia como facultad. Con la cual cosa asistimos no ya a una logificación de la realidad sino a una verdadera reificación de la inteligencia.
     
    Saludos cordiales a todos/as

  • oscar varela

    Hola!

    [pensando en la convalecencia de M.Luisa]

    He aquí cómo en una conversación tan entrañable, sencilla y como “de cocina”
    aparecen las consagradas Categorías  kantianas del Espacio y del Tiempo.

    Quiero decir:
    * de la DISTANCIA       (espacio)
    * de la FRECUENCIA   (tiempo)

    Ilustro el (espacio humano) = DISTANCIA:

    A qué le llaman distancia
    Atahualpa Yupanqui

    A qué le llaman distancia,
    eso me habrán de explicar,
    sólo están lejos las cosas
    que no sabemos mirar.

    Los caminos son caminos
    en la tierra y nada más,
    las leguas desaparecen
    si el alma empieza a aletear.

    Hondo sentir, rumbo fijo,
    corazón y claridad.
    Si el mundo está dentro de uno
    afuera, por qué mirar.

    Qué cosas tiene la vida,
    misteriosas por demás,
    uno está donde uno quiere,
    muchas veces sin pensar.

    Si los caminos son leguas
    en la tierra y nada más
    a qué le llaman distancia,
    eso me habrán de explicar.
    ··············
    ¡Vamos todavía! – Oscar.

  • M. Luisa

    Ahora el balón de oxígeno me viene por parte de nuestra querida Ana que aunque ya  me había percatado  de esta distancia dialéctica, pienso que lo importante es  eso,  que sintamos   la cercanía…
    Voy a ver que tengo por la cocina…
    Un abrazo

  • ana rodrigo

    Querido Luis Cobiella, no sé el porqué de tu “timidez” cada vez que entras en atrio. Las pocas intervenciones que haces me dejan sabor a poco, y creo que si entrases con más frecuencia muchos y muchas te lo agradeceríamos.
     
    Creo que has dado en la clave en el tema de Dios. Coincido contigo en que yo he dejado de hablar de algo o de alguien del que no sé nada. En cambio, como tú bien dices, de Jesús sabemos lo suficiente como para tenerlo ahí siempre como un referente vital humano y humanizador.

  • ana rodrigo

    Querida Mª Luisa, por si te sientes sola, te quiero decir que en atrio no deberías hacerlo, por lo menos por mi parte, que siempre te leo, aunque no interactúe explícitamente contigo. Aunque a veces no “te sigo” porque tus conceptos nu estén a mi alcance, te encuentro una persona entrañable y con esta misma actitud te leo.
     
    Espero que tu salud vuelva cuanto antes a la normalidad y que tú te encuentres bien de cuerpo y de alma.
     
    Un abrazo cariñoso.

  • M. Luisa

    Qué  balón de oxígeno estoy recibiendo, Carmen! ahora además, con sus buenos deseos,  se añade Javier Thomson que no sé si lo que está diciendo es que la filosofía es muy importante para que no nos den gato por liebre. Yo sí que lo creo!
    Gracias, amigo

  • Carmen (Almendralejo)

    M. Luisa, creo que pocas personas de las que estamos en Atrio no hemos sientido eso mismo de dejar o estar un tiempo en silencio.
    Creo que es algunas veces hasta necesario para un* mism*… Otra cosa es dejar de ver, asomarte y sentir que aquello ya forma parte de la persona, sin tener rostros yo misma le ponía. ¿sabes? a Pepe Salas y Javier cuando les vi por primera vez, me resultarón muy conocidos.
    Creo que en este mundo global donde discurrir interesa que se haga poco, y molesta aún más, tener un acceso abierto y plural como este (aunque alguien diga que no) la verdad es que es un templo (en el buen sentido de la palabra) más que atrio, aunque si tenga la frescura de ese Atrio.
    Me alegra que vayas pronto a trabajar, es buena señal, y gracias por tus palabras sobre lo que digo… sé que tengo muchas carencias, y que necesito leer aún más, pero bueno con todas mis equivocaciones ¡que son muchas! puedo decir que en un casi 90% son mías, y como digo ¡si voy al infierno! voy por mis acto y mis creencias y no por las de otras personas.
    Un abrazo
    Carmen

  • Javier Thomson

    Perdón quería decir M. Luisa, un saludo.

  • Javier Thomson

    En el epicentro de una sociedad democrática se acusó de impiedad religiosa a Anaxágoras, Sócrates y Aristóteles porque sus doctrinas se oponían a las creencias de la mitología oficial. Pericles salvó a Anaxágoras del cadalso, Sócrates apuró la mortífera cicuta, y Aristóteles se exiló para impedir a los atenienses un nuevo crimen contra la filosofía. Por una confusión entre política y religión, los gobernantes desestimaron apologías y argumentos. Y en carne propia, fueron los filósofos quienes padecieron las primeras emboscadas de este galimatías hoy bien conocido: la ambición política en sotana, y el coqueteo político de la religión.
    Yo Mar, aunque no te conozco, deseo que te repongas lo antes posible.

  • M. Luisa

    Gracias querida Carmen por tu ofrecimiento, lo tendré en cuenta, pero es que ya os siento cerca. Un día pensé en dejarlo pero no puedo… por lo demás pronto empezaré a trabajar y eso me hará bien.
    Besitos, amiga mía.

  • Carmen (Almendralejo)

    M.Luisa me uno al comentario de MAR Medina, si quieres mi E-mail, se lo pides a Antonio y podemos hablar en privado…
    Te deseo que te repongas, cielo
    Un abrazo y la fuerza de nuestr* D*s Madre y Padre, la Ruah te de fuerzas y ganas de estar aquí con nosotr*s.
    Besitos en sonoridad
    Carmen

  • M. Luisa

    Corrijo “referirme a lo que no sé lo que es” en que estarí yo pensando….

  • M. Luisa

    Lo expuesto por D. Luis, a su modo, viene a apoyar esa preponderancia de la realidad sobre el ser a la que me refiero. Si no,  fijémonos en lo que para él previamente es un problema: “referirme a lo que no sé lo que se” en este planteamiento radica el meollo de la cuestión pero a la vez constituye la prueba evidente de que aunque no se reconozca, se está diciendo que la realidad es anterior al ser.
     
    Y ¿Por qué es problema?, pues porque no la percibimos, sólo tenemos de ella intelección sentiente, es decir, aprehensión (sentimiento) de realidad. Es entonces cuando, si no se interpone nada,  irrumpe el silencio. Pero si esto no sucede,   siempre   será el ámbito del ser  el dominante.  Y en el ser la inteligencia se adelanta siempre sin descanso a definir toda cosa dotándola de ser. Es lo que desde una perspectiva filosófica a venido en llamarse logificación de la realidad o lo que es lo mismo entificación de la inteligencia.

  • M. Luisa

    Totalmente de acuerdo con usted don Luis, toca el problema desde la raíz.
     
    El problema de Dios que usted dice no es sino el que a mi modo de ver plantea el hecho de estar hablando de Él  y no considerar la “realidad” como anterior al “ser”. Sí,  ya sé lo que pueden pensar algunos ¡Esto no es realismo ingenuo!
     
    A los insatisfechos ante la respuesta  cuando preguntan por Rahn, toman, sin dudarlo, la alternativa porque la hay de quienes “positivamente” lo afirman.
     
    En realidad Dios no es problema, pero se vuelve problema en el ser de la existencia.
     
    Saludos cordiales

  • Luis Cobiella Cuevas

     
    Si apenas soy ¿por qué aparezco entre esta familia en las que tantos tanto son? Hago la pregunta sólo porque me encuentro distinto y quiero que mi presencia aquí se interprete de cualquier modo menos entendiendo que pretendo ser entre los tantos que tanto son.
             El problema “Dios” es, indudablemente, el problema que ustedes tratan. Para mí hay un problema previo: referirme a lo que no sé lo que es. A quien se pregunte si Rahn existe, preguntará a su vez antes de intentar contestar : ¿a qué te refieres, qué es Rahn? Como quiera que hay dificultades para responder a esto, yo diría imposibilidad de referirse a Rahn, lo único que cabe es no referirse a Rahn. No incluir a Dios en el diccionario.
             Es decir que para mí Dios es un problema gramatical.
             Aprovecho para abrazar a nuestro Héctor, querido amigo de mi familia, con quien no dejo de sintonizar antes y después de una circunstancia menor, y siempre, siempre, en la felicidad eterna de Jesús de Nazaret, ése que no tiene ni antes ni después, y que, para nuestro bien, sí aparece en  el diccionario.

  • M. Luisa

    Pasaba por aquí antes de irme a dormir y he visto tu comentario, Mar, gracias también a tí, es muy cierto lo que dices y en cuanto a mi salud no, no es nada grave, pasará  pronto. Ahora me voy a descansar pero seguiré pensando… Un abrazo

  • MAR Medina

    Pues sí, Maria Luisa, por eso mismo que responde Carmen es que muchas personas obvian ese don poderoso que todos tenemos, me ha quitado las palabras de la boca: infantilismo y miedo, que bien se ocupa la iglesia-poder de inculcar en las tiernas mentes infantiles. Una pescadilla que se muerde la cola y de la que puede resultar difícil salir si no se es capaz de buscar con sinceridad y honestidad. Una forma de empezar es dirigir la atención al propio corazón, a ese lugar del alma no contaminado con nada, arraigado en la verdadera naturaleza de todas las cosas.

    Saludos a ambas, y que te recuperes pronto, Maria Luisa, espero que sea un trastorno transitorio. Un abrazo

  • M. Luisa

    Gracias Carmen por estar ahí, llevo muchos días sola y los días son largos con mi resentida salud. Es por eso reconfortante que alguien  querido desde lejos  te nombre, también le agradezco que ayer lo hiciera el amigo Hector y hoy mismo Julián.
    También yo leo tus comentarios pero son tan buenos que no cabe añadir  nada más.
    Un abrazo, amiga

  • Carmen (Almendralejo)

    Pues sí Maria Luisa, Porque necesitamos intermediarios, cuando dos son pareja y tres multitud…
    Esto es un diáogo de sord*s…

    Lo que ocurre es la infantilidad que llevamos en la piel y los genes y el miedo que se siente a dar esos primeros pasos a solas.

    Aún hay mucho de religión y magía dentro de nosotr*s y sobre todo, importa mucho el que dirán.

    No debe importarnos que estos sigan dando vueltas al molino, como tampoco el que digan que estamos fuera o  dentro, ¿De?

  • M. Luisa

    Es sobradamente sabido que el poder de la iglesia perdura porque perdura su negocio, y el negocio aguanta porque todavía son muchos aunque, por suerte,  cada vez menos los que se supeditan a ese poder.
     
    Pero lo que conviene ahora a esas  alturas según mi opinión,  no es incidir en ello repetidamente  sino averiguar por qué si el ser humano posee la suficiente capacidad para  experimentar en su propia realidad individual que,   siendo él siempre “el mismo” nunca  es “lo mismo” si esto es un hecho posible, es decir real, por qué  entonces  obvia ese don poderoso? ¿Por qué  reniega de ello si la realidad como poder es el verdadero horizonte del ser humano? Esta, para mí, es la cuestión.

  • Javier Renobales Scheifler

    La Iglesia-poder perdura porque perdura su negocio, en España al menos, por cosas como ésta:
     
    “En unos tiempos en que la lucha contra el déficit público y el recorte del gasto público se ha convertido en el objetivo principal de la política económica, resulta inexplicable que el Estado siga “alimentando”, año tras año, a unas instituciones (las diócesis) que gastan diez veces más de lo que recaudan y que no realizan ningún servicio de interés general ni, por tanto, público.
    Y ello, en un Estado que se define en su Constitución, como aconfesional.”
     
    http://www.redescristianas.net/2010/08/22/%c2%bfcuanto-nos-cuesta-la-iglesiam-enrique-ruiz-del-rosal/
     
    No olvidemos que el actual Concordato de la ICAR con el Estado Español viene de la dictadura fascista, para conseguir la cual hicieron la guerra civil calificada de ‘Cruzada por Dios’ por la jerarquía católica, que así compraba a los vencedores de la guerra los privilegios que aún la caracterizan, para lo cual apoyaron la guerra los jerarcas bendiciéndola como a Franco, a pesar de todos los asesinatos cometidos por éste después de terminada la guerra.

    Héctor, el porcentaje de acuerdo que señalas en tu último comentario con “% x % de acuerdo contigo” es el 0% x 100%, el 50 % x 0%, o el 100% x 0% ? (je, je)

    un abrazo amigo; sentí no haber estado en Logroño cuando estuviste con Mar, Juan Luis y Reyes. Lenguas de por allí me han hablado muy bien de tí.

  • M. Luisa

    Yo  en cambio, amigo Julián, pienso que el significado diferencial de estos dos conceptos de poder,  no está ni mucho menos pensado para que lo entienda la iglesia católica, sino para aquellos que de algún modo les ha de aportar luz en su experiencia de vida.
     
    Se trata de la necesidad que comporta la determinación a la que antes me he referido de “lo bueno” que constituye lo sagrado.  Es decir, o bien dejamos que lo siga determinando el poder institucional o trás la experiencia dejar que sea el poder de las cosas, en su realidad, que lo determinen.
     
    Viene a ser lo mismo que  expresé en otro hilo cuando me referí que para muchos,  de lo “sagrado del todo” que afirman defienden el contenido que como tal, tradicionalmente, su forma sagrada la determina, la establece racionalmente (razón como poder)  una autoridad. Y hay otros, dije, que de lo sagrado que afirman defienden sensiblemente, experiencialmente, la forma que le dan las cosas cuando  van a la búsqueda de lo verdaderamente real de ellas.
    Habría de  entrar ahora en la comprensión  esta  posibilidad.

  • Julián Leirbag

    M. Luisa. Gracias por tus comentarios. Lo que yo no entiendo no es la explicación de Boff ni de lo qué signifique servicio sagrado, por ejemplo para la Iglesia católica, de la cual no me siento parte sino que soy ella también. Si quien sabe, conoce que Dios le da su ser entonces creo que todo lo que del mismo provenga,es decir, de nuestro ser,  menos el mal, el bien que fuere moral o no, es acción sagrada. Los servicios que hacemos mientras son a partir del ser, suyo o mío, de quien fuere, no tiene menos de sacralidad que una misa y la hostia consagrada puesto que Dios es tanto en nosotros como en un grano de trigo, etc. No creo que delante de Dios tengamos más dignidad que otra criatura creada por El, pues todo viene de la misma fuente: de Su Ser. Jerarquizar a los seres es propio del pensamiento judaico del Génesis, donde dice “ha creado a imagen y semejanza suya”, es decir, una antropormofización de Dios que no es fácil escaparse, pues, como ya decía en otro lugar, sin imagen, sin imaginaciones, sentimientos, pensamientos, creencias, etc. de verdad se es en Dios que carece de todas estas cosas humanas a no ser que sigamos creyendo que algo de nosotros “tiene” Dios. En realidad yo creo que Dios no tiene nada ya que es Ser Absoluto. La tenencia es propia de los seres finitos, y la “serencia”, es decir, el Ser mismo, (analogismo mío): no hay mucho que perder si se deja de pensar a Dios con el verbo tener (que tiene voluntad, por ejemplo, etc.) y se lo contempla como Ser Absoluto que no le falta nada como para que “tenga” algo que después se manifestará, pues es Manifestación Absoluto de SER lo que ES ÚNICAMENTE Él. Pero estas palabras sobran, o mejor dicho, no explican casi nada, además no hay nada que explicar sobre Dios cuando se vive a Dios desde no solo una experiencia religiosa sino también todas las que otros dicen ser irreligiosas, o que nada tienen que ver con la religión en el sentido de culto específico y determinado, como suele ser el caso de la religión católica u otra. Tampoco me van a tildar que soy un deísta, pues equidistante es mi parecer a ello.

    Héctor. Gracias por poner mi parecer como respuesta tuya para otro, pero ¡cuidado! no me conviertas en una especie de “magisterio”, ja ja. que sobre Dios nunca tendré alguno por más que al vuelo escriba o deje plasmado un pedacito de mi vida cuando manifiesto algunas de mis ideas y vivencias diarias, que también suelen estar cargadas de concepciones que no sé de qué abismo y superficie emergen. 

  • M. Luisa

    Estaba preparando a grandes rasgos un borrador sobre la cuestión, que según mi parecer, merece lo  del paso importante que la teología habría de dar para llegar a establecer que ningún poder de ninguna iglesia viene de Dios.  Pero he decidido mejor dejarlo y referirme a lo del “sevicio sagrado” ya que Julián al detenerse en es expresión dice no entender bien su significado.
     
    Sin embargo, sí que me gustaría,  del tema que dejo pendiente dejar al menos en el aire  esa reflexiva  pregunta ¿ Pero es que acaso no han habido teólogos que de acuerdo con la nueva ciencia no lo hayan querido dar ese paso importante  cerrándoselo desde la propia teología establecida precisamente para no abrir el despertar de las conciencias? Bien, lo dejo aquí
     
    Verás Julián, si introduje en mi comentario anterior esa expresión  fue para jalonar lo que en él decía y mostrar de algún modo su coherencia con la idea subyacente de Boff ya que él mismo la utiliza para diferenciar los dos sentidos del concepto de poder. Es decir por un lado la hierodulia ( servicio sagrado) que es lo que quería Jesús y por otro la hierarquia (poder sagrado)
     
    Esta consideración contrapone no a lo sagrado y a lo profano como parece que lo entiendes tú sino que a lo que se  contrapone son a esas dos maneras   mencionadas de considera el poder.
     
    “Todo lo bueno es en cierto modo sagrado” dices, pero  es que también lo es para mí. Así mismo lo expresé en otro hilo días atrás. Sin embargo convendrás conmigo que “lo bueno”  hay que determinarlo y en esa determinación  es cuando se nos presenta la sacralidad de Todo. Si te fijas en mi comentario de ayer dije algo que va bien, ahora, traerlo aquí:  (…) que en la persona del cristiano está ya ese poder que le habrá de empujar a vivir como tal, comprobando por él mismo que el poder está en las cosas reales que lo mueven al hacerse (realizarse) con ellas. Por lo tanto son las mismas cosas profanas  que, en tanto reales  son poderosas y determinan la sacralidad de Todo.
     
    Eso no indica de algún modo  el servicio para el cual vino Jesús?
     
    Un saludo cordial
     
     

  • Gabriel Sánchez

    Vosotros conserváis la unción que recibisteis de él y no tenéis necesidad de que nadie os enseñe; pues su unción, que es verdadera e infalible, os instruye acerca de todo; lo que os enseñe conservadlo.
    Ahora pues, hijitos, permaneced con él, y así, cuando aparezca, tendremos confianza y no nos avergonzaremos de él cuando venga. 
     Si os consta que él es Justo, sabréis que quien practica la justicia es hijo suyo. 1Jn, 2, 27-28.- Gabriel

  • Héctor Rodríguez Fariña

    Hola Javier: ¿ves como acerté? Le dejé a
    Julián Leirbag
    21-Agosto-2010 – 15:47 pm
    que respondiera él a tus preguntas y lo ha hecho maravillosamente.  Lee su comentario despacio,  porque no se puede decir mejor, y verás como te queda más claro.
    Ya sabes que a mi no me parece mal ni me ofende  nada de lo que tú dices. Estoy % x % de acuerdo contigo.  Y gracias a vosotros – no vale lo de gracias a Dios – me voy liberando de los prejuicios con los que tuve que cargar gran parte de mi vida.
    Si has leído ‘Religión sin Magia’ de JL Herrero, ya sabes que el y yo pensamos en todo exactamente lo mismo, y él también lo sabe.  El segundo abrazo de hoy
    Héctor.
     

  • Javier Renobales Scheifler

    Se me ha comido el ratón esta última frase, Héctor: también creo que perdura la Iglesia-poder porque muchos, demasiados, les reconocéis legitimidad a los cargos directivos de la ICAR (Obispos, Cardenales, Papas…) que son nombrados a dedo excluyendo la participación del pueblo de Dios en la elección de esos cargos.

  • Javier Renobales Scheifler

    Venga Héctor,
     
    Con toda la apabullante formación que tenéis los curas, y la que además tienes como enseñante con dilatada experiencia en ambos campos (de cura y de enseñante laico) ¿ahora resulta que eludes responder a la cuestión y dejas la respuesta para otros?
     
    Chico, me dejas perplejo, extrañado. Tengo entendido que Einstein nunca creyó en la existencia de un Dios personal, ni Creador de nada. En todo caso, creo que la sola idea de que ese ‘Dios’ que dices de Einstein le hubiera dado poderes al Papa, a la jerarquía católica y sus curas, le habría dado risa a Einstein.
     
    Tampoco se trata de escapar pasándose al terreno de las pruebas: sencillamente yo proponía afirmar si Dios le ha dado o no poderes a la ICAR, o sea, a sus Papas y los jerarcas que salen del dedo Papal (ya sabemos que a los súbditos no les cabe haber recibido poder alguno de Dios, eso es inimaginable).
     
    Creo que en el Catecismo católico la palabra ‘Dios’ se repite unas 2.500 veces aprox. puede que alguna menos. Y resulta que no sabemos lo que es Dios.
     
     Dices Héctor “A Dios no le conocemos ya que si le conociéramos cabría en nuestras cabezas y ya no sería Dios”
     
    Podemos responder pues, si no te parece mal, a la pregunta del título del hilo, que la Iglesia-poder perdura porque, por la pura caradura, manipula a Dios, no sólo haciendo como si le conociera perfectamente, sino además atribuyéndose falsamente sus jerarcas dirigentes poderes que supuestamente les vienen de Dios, aunque la verdad es que no les vienen, sino que se los arrogan ellos mismos:
    –      que si las puertas del infierno no prevalecerán contra ella,
    –      que si os doy poder para perdonar los pecados, y dar indulgencias plenarias cuando mejor os parezca
    –      que si te doy las llaves del reino de los cielos,
    –      que si Dios elige al Papa,
    –      que si Dios hace los milagros que los Santos le piden para que el Papa los declare Santos,
    –      que si Dios hace que se aparezca la Virgen
    –      que si Dios fecundó a la Virgen para que naciera Jesús Dios,
    –      que si Dios se encarnó en JesúsDiosHijo,
    –      que si Dios hace infalible al Papa y a sus concilios ecuménicos y a los Obispos que el Papa nombra a dedo,
    –      que si Dios, por el abracadabra del cura, convierte el pan y el vino en cuerpo y sangre de Dios
    –      que si Dios quiere que los curas sean obligatoriamente célibes
    –      que si Dios quiere que las mujeres no puedan ser curas
    –      que si Dios no quiere que los homosexuales tengan relaciones sexuales, ni tampoco entre ellos, ni menos aún se puedan casar por la ICAR en Santo matrimonio
    –      Que si Dios les quita el pecado original a los que los católicos bautizan
    –      Que si Dios fundó la ICAR  …etc., etc.

     

     

     

  • Julián Leirbag

    Héctor, Javier, Antonio, Mar, M.Luisa:

    1. A veces vengo a pensar, porque en definitiva mi vida también es ir dejando ideas y docrtinas sobre Dios atrás, porque sirven ellas mientras no estás unido a Dios y no lo amas. Sin ideas, doctrinas, creencias, etc. es el mejor modo de comprender que nada de todo lo que creemos y pensamos sobre Dios es Él, por más vuelta que se quiera dar al asunto.

    2. Y si me pongo a pensar en “la Palabra de Dios”, cabe ahora resaltar que si sé que Dios es eterno en él no hay espacio para decir palabra alguna y además debería no solamente decir eternamente palabra, por ser eterno, y luego dejar de decirlas, puesto que sería una contradicción en Dios.

    3. Eso de escuchar a Dios también resulta otros infinitos problemas, como por ejemplo el de creer falsamente que Dios hace una pausa, entre sus Palabras, un estilo de silencio divino, para disponerse a escucharnos. Nunca Dios se dispone a escucharnos, pues esto sería estar en potencia y no en acto, para usar las categorías un poco tomistas que en esta ocasión me son útiles.

    4. Tampoco creo que Dios haya dicho todo lo que tenía que decirnos a tarvés de no sé quien, pues de cierta manera al traernos a la existencia, aceptando que es Él quien nos da el ser, “deja”, por así decir, “parte” de su propia esencia en lo que crea, es decir, si hay Palabra de Dios, en principio, somos todos los creados por El. Pero como Palabra de Dios que somos no es por una especie de extensión de Dios, un “pedazo” de Dios, sino lo mismo que es El, puesto que no creo que Dios crea un ser tal que no tenga nada de su propia esencia y ser.

    5. Si hay algo que Dios tiene que decirnos también es lo que nosotros nos decimos unos a los otros desde la profundidad de nuestro ser y vivir cotidiano. Somos el ser y la esencia de Dios en forma exteriorizada de ser el mismo Dios, y esto a algunos inoportunados les caerá mal diciéndome que soy un patenteísta y término este que en nada de lo que vivo corresponde. Dios como lo vivo tampoco tiene poder alguno, siguiendo algunas sutilezas de la metafísica clásica, y por ello no se los concede a nadie, claro está que el poder nunca es propio de quien yo lo vivo como Acto ABSOLUTO Y AMOR PURO ABSOLUTO.

    6. Dios es Acto y nosotros manifestación empírica de sus modos en los cuales el mismo Dios actúa, pues un Acto sin actuación es absurdo a no ser que lo concibamos al estilo aristotélico, Inmóvil. Pero tampoco todo esto es exactamente Dios, sino atisbos humanos.

    7. Creer que la iglesia tiene algún poder concedido por el propio Dios es falso, desde la filosofía del ser, puesto que supondría que nada antes de ella tenía tal poder y de un cierto tiempo, cuando la Iglesia aparece es por la razón misma del poder de Dios, es decir, se piensa nuevamente en Dios como concediendo, el pasar de la potencia al acto, es decir, propio de los seres contingentes y no de la eternidad que corresponde únicamente a Dios. Dios no tiene ningún poder ni siquiera de ser Dios. El hecho de que “Dios otorga algo a alguien” corresponde a la idea contradictoria de haber pensado a Dios como un pasar de la potencia al acto.

    8. Dios, según  creo, es donación absoluta de ser, es decir, nunca está dando algo a alguien, es dar absoluto, y si daría algún poder a alguien esto significaría que está dando algo contrario a Él, pues, como ya dije, en Dios hay solamente acto y no poder alguno. La filosofía puede servir en varias ocasiones, especialmente cuando la Iglesia no toma en consideración a la razón humana por miedo de que ella desvele las contradicciones internas de muchas de sus creencias teológicas poco fundamentadas de forma seria y aguda. Pero nada de agudo quepa entender lo que dije hasta entonces sino apenas tomen como algunas formas de mi vivir y ser, nada más que eso.

    9. Eso de “servicio sagrado” no entiendo mucho puesto que todo lo bueno es de cierto modo sagrado una vez que lo hacemos desde el ser que siempre somos venidos del Ser de Dios, pero no por ello llamaría “servicio sagrado en contraposición a otro llamado “profano”. Somos Dios más que toda creencia y pensamiento pudiera llegar a abarcar, puesto que al darnos el ser Dios no nos da otra cosa sino lo que es El. Y esto no se trata de religión en el sentido de doctrinas, dogmas, ritos y cultos sino de experiencia única y original.

  • M. Luisa

    ¿Porqué perdura la iglesia-poder? Por qué perdura este tipo de iglesia a pesar de la perversidad que encierran las causas que la mantienen y de cuya patología nos habla Boff.
     
    Si hemos de ser fieles a la pregunta planteada ésta nos ha de llevar no a hacer de esta realidad una constatación permanente, puesto que ya por muchos es algo sobradamente conocido, y lo de marear la perdiz no conduce a ninguna parte,   sino  que,  a lo que nos obliga la pregunta es  a ir en busca de aquellas razones por las que concedemos  vía libre a esa contrariedad.
     
    Preguntémonos, pues, por qué  los cristianos le arrogamos a la iglesia aquel poder que creemos nos reconforta cuando es precisamente la persona del cristiano lo que le ha de empujar a vivir como tal, comprobando por él mismo que el poder está en las cosas reales que lo mueven al hacerse con ellas.
     
    El (ella) sabe por tanto que no se trata de un poder de fuerza a tono con lo natural sino un poder de  posibilidad de vida. De posibilidad de vida como la que ofrece el evangelio. De ahí la necesaria (urgente) distinción en el concepto de poder, entendido éste como    “servicio sagrado”  es decir, como posibilidad  de vida y el poder  como fuerza concedido (inconscientemente?) a la jerarquía.

  • Héctor Rodríguez Fariña

    Javier: “Sería un paso muy importante que la teología llegara a establecer que ningún poder de ninguna Iglesia viene de Dios”. No me voy a pasar de listo, ni voy a responder a eso tan importante que planteas.  Lo dejo a los que puedan hacerlo con más exactitud. Te lo cuento tal  como yo lo veo. Admitamos ya de una vez que el Dios implantado por las religiones es una realidad imposible. No hace falta mucha teología, a menos que con el vocablo  “dios” signifiquemos otras cosas.

    El Dios que le causó todos los problemas actuales a la Iglesia es el Dios al que llegamos por la razón, al que llegó Einstein definitivamente y muchos otros científicos.  La  física quántica  actual se siente ‘at home’ con ese Dios: Infinito, eterno, inmanente, independiente, no domesticable, no alcanzable por ninguna magia, ni por ninguna religión.

    ¡Adiós a las religiones fundamentalistas y a todos los poderes que basan sus nefastas actuaciones en un dios cortado a su medida!
    A Dios no le conocemos ya que si le conociéramos cabría en nuestras cabezas y ya no sería Dios. Al Dios de la razón no le podemos atribuir nuestras majaderías ni opinar nada sobre sus actuaciones. Tampoco está ahí para resolver nuestros problemas. La prueba es que si la humanidad existe es porque Dios nunca no has hecho caso. Mantiene cada átomo, y partículas quánticas, y ondas y energía y vida  en su sitio por que es la garantía absoluta de la existencia de todo.

    Silencio,  respeto, felicidad para los que volviendo sobre su misma realidad personal y su vida diaria desde ahí puedan encontrase con ese Dios como nos dijo tan preciosamente Mª Luisa en el anterior escrito de Boff: “ A estas alturas,  lo que procede, a mi modo de ver, no consiste en estacionarnos en una constatación del hecho de esta vuelta atrás en busca de la originalidad de la fe…Pienso que ha llegado la hora de llevar a cabo nuestra propia introspección.( Mª Luisa 19-Agosto-2010 – 11:20 am ).

    Entiendo que esa introspección no sea otra cosa que lo de Luis Troyano hace unos meses:  no necesitamos que nos hablen de Dios . Sólo necesitamos que algún hermano nos indique el camino para experimentar a Dios en nuestro mismo interior. Willigis Jäger es uno de esos hermanos para los buscadores espirituales del siglo veintiuno. Inspirado en la mística cristiana , el Zen oriental. Al mismo tiempo va mucho más allá de los conceptos tradicionales de las religiones.  Su visión de la espiritualidad reúne en sí la sabiduría oriental y occidental, atendiendo a los conocimientos mas recientes de las ciencias.

    Lo siento Javier me escapé del tema: Si a Dios no le conocemos y no sabemos si se dedica o no a revelarle cosas a nadie, con qué cara puede una religión fundamentalista arrogarse la prerrogativa de que Dios le ha dicho algo directamente y en exclusiva. No puede haber pruebas: si la hubiera Dios  dejaría de ser Dios.

    Esto lo dice la razón y esa sí que viene de Dio:  es creación, es evolución.  Tampoco la razón es definitiva.  Se trata de aproximaciones,  pero si alguien me dijera si creo en los milagros, para mi el mayor milagro fue que en los siglos XVII  y XVIII, superando el poder absoluto de la Iglesia, la Ilustración le plantara cara y le dijera: “ese dios vuestro ha muerto”. La ilustración es parte también de la evolución.

    Y,  siguiendo para terminar con los argumentos del poder apuntados por Boff , me asusta pensar que un poder que la iglesia nunca podrá soltar será ese control absoluto sobre la espiritualidad de todos los humanos (fuera de esa espiritualidad nadie se puede salvar). Cuantos místicos no fueron arrinconados y hasta encerrados en mazmorras para que no hablaran (Miguel de Molinos).  MAR Medina  lo dijo esta mañana, de madrugada,  mucho mejor. 21-Agosto-2010 – 1:44 am : “…gobierna sobre muchas personas que se comportan como menores de edad, sometiendo su libertad y su conciencia al permitir que otros les dicten qué deben creer.”.
    Una abrazo muy fuerte y que nos una a todos “quánticamente” de verdad  Héctor

  • Javier Renobales Scheifler

    Habría que admitir que en ninguna organización (o sea en ninguna Iglesia) hay ningún poder que venga de Dios. Tampoco en la ICAR. Ahí está la madre del cordero.
     
    Por el contrario los Papas (que se arrogan injustamente todos los poderes en la organización, precisamente pretendiendo que su poder viene de Dios, para lo cual les es imprescindible hacer Dios a Jesús) pretenden que la ICAR está gobernada por Dios. No sé si llamarlo repugnante, irracional o cómo, pero lo que percibo claramente es que es muy dañino que unos señores (además todos machos para más inri) pretendan que ejercen poderes conferidos por Dios.
     
    Es una mentalidad arcaica y dañina, que el ultraconservadurismo inherente a la institución católica nunca va a permitir modificar, nunca van a admitir que todos los poderes que ejerce la ICAR son meramente humanos, y no divinos.
     
    Por otro lado, que haya elementos individuales en la ICAR como los que cita Boff, que luchan por conseguir la liberación no significan que la propia Iglesia Católica luche por la liberación, sino más bien todo lo contrario: no son más que las excepciones que confirman la regla: la ICAR, dirigida por quienes la dirigen desde el Vaticano con mano de hierro, lucha por someter a sus súbditos, no por liberarlos.
     
    Sería un paso muy importante que la teología llegara a establecer que ningún poder de ninguna Iglesia viene de Dios.
     
    Estoy de acuerdo, como tantas veces, con Mar Medina; pero no soñemos: si se derrumbara el sistema dominante (el capitalismo hoy) inventaría otra Iglesia aún peor, pues necesita de la ICAR para mantenerse, seguir creciendo y seguir concentrando el poder cada vez en menos manos en el mundo.
     
    La ICAR no se va a derrumbar, sino todo lo contrario. Y no porque algún pretendido poder divino o pretendido soplo del espíritu Santo haga ‘que las puertas del infierno no prevalecerán contra ella’ –idea fundamentalista y falsa, a mi modesto modo de ver- sino porque siempre estará aliada con los poderes más conservadores y derechosos del mundo rico en el que se ha instalado. Su naturaleza le llevó a aliarse con los emperadores romanos, y esa es su verdadera cara en la Historia.

  • Antonio Vicedo

    Bien, Leonardo, por tu claridad y valentía. Me ha gustado lo del servicio que nos hace el Poder Sagrado conservando la frescura del testimonio y mensaje de Jesús tal y como lo vivieron aquellos, en cuyo tiempo, no era ventaja de poder el seguir a Jesús, sino próximo y certero riesgo de experimentar en la práctica lo de: No es el siervo más que el amo, ni el discípulo más que su Maestro. A veces como si olvidáramos que la no complicidad con el Poder, era sentencia de pagar con la sangre propia el precio que aquel (Político, Social y Religioso), se había cobrado de Jesús.
    Esto que Leonardo afirma sobre la custodia del Patrimonio testimonial y magistral de Jesús en la Iglesia tan contaminada de Poder Sagrado, me sirvió para decirle hace ya tiempo a mi obispo que, si en su mano estaba arrancase páginas del N T. o borrara frases  en las que yo intentaba apoyar la defensa de mis opciones. Pero que de poco le iba a servir, pues él y yo sabíamos que ESO NO SE TOCA.
    A la exposición razonada que hace Leonardo sobre el poder de perpetuarse el poder, yo añadiría una pequeña, pero profunda reflexión: ¿De verdad creemos que el Poder, de suyo, es poderoso? ¿O la eficacia del poderoso está fuera de él y se concreta en la complicidad ( libre o forzada)  de quienes nos prestamos a ella con nuestros aparentes o reales miedos, o intereses?
    Aquello de oír la voz del Pastor Bueno o del asalariado, y optar por seguirles o no hacerlo , parece fue dicho para algo. Y bien parece que en ocasiones de la Historia y muy claramente, al presente, el Espíritu ha suscitado valentías arriesgadas para no ser borregos u ovejas de Nadie, más que del PASTOR que defiende y da vida.
    La tarea profética era denunciar al ídolo y hacer que dejara sitio para Aquel de quien es propio el trono.
    El Poder es idolátrico y lo menos que se puede hacer con él,  es no reconocerle su pretendida sacralidad, ni prestarse a  su complicidad.
    Parece ser que por estos vericuetos está deambulando mucha gente con más o menos conciencia y compromiso, pero coincidiendo en no oír sus voces, ni seguirles cuando notan que no es la misión confiada lo que en su quehacer eclesial descubren. Si estos signos de los tiempos con claridad, persistencia y extensión se van percibiendo, tal vez ha llegado la hora de hacer lo que María con los servidores de la Boda: Insistir en que lo que hay que hacer para que se solucione lo de la falta de vino en la fiesta es: ¡Haced lo que Él os diga! Aunque se trate de poner agua en tinajas, en vez de buscar y potenciar  meras sacralidades. En nuestra mano el Poder, no tiene otra salida, (si no se la permitimos con complicidad), que la de quedarse sin poder, pues, sin peana, queda al humano  nivel

  • MAR Medina

    Pues creo que sí, por todas esas causas que enumera Leonardo Boff perdura la Iglesia-poder, aunque creo que también juega un papel importante el hecho de tener algunos aspectos propios de las sectas, como son la sumisión al líder, técnicas de persuasión como el miedo (a la condenación eterna, por ejemplo), atenazar a sus súbditos con la convicción de ser imprescindibles y, en fin, cuantas técnicas han dominado para coartar la libertad y el crecimiento personal de los creyentes. Esto último es, a mi entender, lo que permite que todavía hoy tenga tanto poder, porque en general gobierna sobre muchas personas que se comportan como menores de edad, sometiendo su libertad y su conciencia al permitir que otros les dicten qué deben creer.

    Hay también en su seno ejemplos de espíritus libres y honestos, pero no diría que son esos ejemplos quienes caracterizan a la Iglesia-poder de la que hablamos.

    Tengo más claro cada vez que a esa “Iglesia” hay que abandonarla y que se derrumbe cuanto antes mejor.

    Saludos cordiales

  • mªpilar garcía

    ¡¡Claro como el agua!!

    ¡¡Triste, porque esto parece que nunca acabará!!

    Toda clase de poder se realimenta mutuamente; ¿como acabar con ello, si son ¡¡el poder!!?

    Ellos mismos, empujan a ¡¡¡Vivir!!! de otra manera los Evangelios que  dicen proclamar como verdad… y…
    ¡¡¡que no viven!!!

    A todas las personas que sí son tocadas por la Esencia de el Mensaje que Jesús, no solo proclamo, sino que vivió en plenitud, dando ¡Vida! allá por donde caminaba, hasta hoy.

    Nunca faltarán ejemplos ¡¡¡Vivos!!! de esta manera de…
    ¡Vivir como Jesús lo hizo!

    Al menos, intentarlo cada día, como lo hacen los sencillos y limpios de corazón.

    mª pilar